
Vista desde el alto de La Portellada
Entre Pallaruelo de Monegros y Castejón de Monegros aparece un excepcional sabinar bajo la plataforma tabular que mantiene unidas la sierra de Alcubierre y Sigena. El Sabinar de Pallaruelo forma parte de ellas y consta con el reconocimiento de la Red Natura 2000, a través del LIC ES2410076 «Sierra de Alcubierre y Sigena» y la ZEPA ES0000295 «Sierra de Alcubierre», que incluye la Sierra de Alcubierre, Pallaruelo de Monegros y Sigena.
El sabinar de Pallaruelo va ascendiendo de los 340 metros de altitud, por el piedemonte, lo que conocemos como La Portellada, hasta coronar los 506 metros de altura, La Collada, ya Castejón de Monegros. El sabinar discurre por la cara norte, por la parte más llana entre campos de cereal mientras que, tal como va avanzando hacia arriba, se va desarrollando por una ladera incidida por una densa red de barrancos y cárcavas. Al oeste nos queda el desconocido pero a la vez precioso barranco de la Peña, mientras que hacía el este acabaríamos encontrando el singular paraje de Jubierre, ya en el término municipal de Castejón de Monegros.
Majestuosas sabinas monegrinas de portes variados, cónicas o piramidales o estrechas, columnares, esféricas, globosas e irregulares aparecen aisladas salpicando el paisaje, creando un mosaico excepcional con los campos de secano, o formando bosquetes. Algunas aparecen podadas, antiguamente servían sus ramas para alimentar el ganado, creando una forma característica y tradicional, otras aparecen con su forma principal, desarrollada desde abajo con frondosas ramas que le permiten una mayor supervivencia y adaptación al medio árido y seco de Los Monegros. Así es, las sabinas forman la comunidad vegetal sabinar continental, en plena aridez, a merced de altas temperaturas y sequías, además de fuertes y secantes vientos como el cierzo y el bochorno. Por el contrario, los inviernos son fríos, con nieblas persistentes, heladas e inversiones térmicas.
Raíces profundas, duramente ancladas en la aridez incluso en suelos de yesos. Un paisaje señero y extraordinario, pero además las sabinas aparecen en amplios enclaves de Los Monegros, principalmente a los pies de la sierra de Alcubierre, por la misma sierra y por la zona de Farlete y Monegrillo.
El sabinar de Pallaruelo adquiere su propia identidad, la sierra de Pallaruelo es un paraje extraordinario donde aventurarse y descubrir esplendidas sabinas. La principal sabina albar (Juniperus thurifera) pero también encontramos del mismo género la sabina negral (Juniperus Phoenicea) o el enebro (Juniperus oxycedrus). En estos sabinares abunda el romero, la ontina, el sisallo y otras plantas esteparias o mediterráneas. Pero sobre todo son unos valiosos ecosistemas, de biodiversidad y belleza paisajística que podemos contemplar desde el gran mirador que responde al alto de La Portellada. Además de contemplar el sabinar de Pallaruelo de Monegros, en un día despejado se abarca gran parte de la provincia de Huesca, desde Los Monegros oscenses, la Hoya de Huesca, la sierra de Guara y los Pirineos al fondo, como guardianes de nuestro único y majestuoso Alto Aragón.