Archivo de la etiqueta: Sesa

Los primeros viajeros a las Indias de Los Monegros


Por José Elbaile Ollés.

En el año de 1492, Cristóbal Colón descubrió lo que entonces se llamó las Indias. A partir de entonces son muchos los españoles que fueron o intentaron ir: militares y funcionarios al servicio del Rey para controlar las nuevas tierras, religiosos con el fin de evangelizar o aventureros en busca del oro y riquezas de las que hablaban quienes volvían.

Pero el monopolio sobre el comercio con los nuevos territorios y las gentes que podían embarcarse eran potestad del Rey, que ejerció su control desde la casa de Contratación de Sevilla. Ciudad desde donde partían las galeras hacia América.

En un primer momento sólo los ciudadanos del Reino de Castilla podían trasladarse a las nuevas tierras descubiertas. Pero en las cortes celebradas en Monzón y Binefar el año de 1585, se establece que los aragoneses puedan pasar “a las indias y gocen de lo que los castellanos, ya que fueron descubiertas en tiempo del serenísimo Rey Don Fernando el Católico de gloriosa memoria y participaron gente de este reino”.

Aun así, eran pocos los que conseguían una autorización real para poder desplazarse y siempre era como criado o acompañante de alguien que iba como funcionario, militar o religioso.

En el Archivo general de Indias, se conservan los expedientes de los primeros monegrinos que marcharon a hacer las Américas:

Juan de Marroviza y Estrella, de 19 años nacido en Sariñena era hijo de Jaime de Marroviza y de Gerónima Estrella y nieto por línea paterna de Pedro Marroviza y de Martina Montesino. Todos de Sariñena.

El cuatro de diciembre de 1588, Jaime de Marroviza, presenta en la Diputación del Reino en Zaragoza para que se resuelva en el Consejo de Aragón, la petición de licencia al rey para que su hijo Juan de Marroviza y Estrella pueda viajar a las indias. A la provincia del Perú, donde trabajaba como funcionario Pedro Estrella, un primo hermano de su madre que acababa de llegar de esas tierras.

Para conseguirla debería demostrar mediante testigos que no es de los prohibidos a pasar a aquellas tierras por ser como es él y sus padres cristianos viejos, hidalgos, notarios y como descendientes de tales, limpios de toda raza, moros ni judíos, y sin faltas ni penitencias por parte del Santo Oficio de la Inquisición.

También que era mozo soltero, no casado ni sujeto a religión o matrimonio.

En la solicitud se debía hacer una pequeña descripción física para su control. Así dijo ser: de mediana estatura y moreno de rostro con un poco de barba negra y con una pequeña herida debajo del ojo derecho.

En mayo de 1591 Pedro estrella recibió en Madrid un nuevo nombramiento que le obligaba a volver a aquellas provincias. Entonces pidió que le dejasen llevar a su sobrino.

Al final Juan Marroviza consiguió la autorización Real y marcharía en 1592 en calidad de sobrino de Pedro Estrella.

No sabemos la vida que llevaron en Perú donde todavía existe el apellido Estrella.

Francisco Ignacio Aysa Gasion, que nació el 30 de Julio de 1669 en Sesa, de una familia infanzona de Marcén. Se embarcó a los catorce años para las Américas como criado de su tío fray Manuel Mimbela, que había sido nombrado obispo de Guadalajara y Oaxaca en Méjico. Embarco el 6 de agosto de 1712 en el galeón Santo Soto de Román. Entre los acompañantes de su tío también se encontraba su primo Pedro Mimbela de diecinueve años, nacido en Morillo de Gallego.

Francisco, como sobrino del obispo, supo aprovechar su estatus prominente dentro de la sociedad de Nueva España. Se avecindó en Guadalajara. Amasó una gran fortuna, compró una mina de plata en Bolaños y poseyó grandes extensiones de tierras de labranza y varias haciendas

Fue nombrado Marques del Castillo de Aysa el 18 de septiembre de 1727 y obtuvo el grado de coronel de la infantería española.

Desde 1734 a 1743, se convierte en gobernador de Nueva Galicia y presidente de la Real Audiencia. Durante su mandato se hicieron varias expediciones a California para establecer mayor control administrativo.

Fue un buen administrador desarrolló la economía de la zona e hizo mejoras sociales como la traída y distribución del agua en Guadalajara. Falleció el 8 de diciembre de 1778.

Antón Sanz Anoro que obtuvo el pase para embarcar en la casa de Contratación el 21 de marzo de 1623.

La solicitud la presenta en la Real Audiencia de Zaragoza, su padre, Antón Sanz, mayor de días, de la villa de Castejón de Monegros. Donde a pesar de ser Infanzón y familiar del Santo Oficio de la Inquisición tiene que demostrar su nobleza y limpieza de sangre.

Antón era hijo de Antón Sanz de Escarrillla en el valle de Tena y de María de Anoro de Castejón de Monegros donde vivían.

Su hermano Gerónimo Sanz Anoro estaba casado con Gracia Cascarosa, tenían un hijo, Jaime Sanz Cascarosa. Todos nacidos en Castejón de Monegros y los dos notarios.

Antón Sanz Anoro se acaba de quedar viudo hacía dos años. Había estado casado con Gracia Berdun de Castejón de Monegros. Tenía entonces 36 años.

Fue entonces cuando Andrés Sanz hermano de Antón padre, que vivía en las Indias con su familia lo reclamó para que se hiciera cargo de una hacienda. Andrés que se embarcó con veinte años, llevaba en Trujillo cuarenta desempeñando diferentes cargos de importancia al servicio del Rey.

Sin ninguna carga familiar y cumpliendo todos los requisitos, a Antón, se le permite viajar a la provincia de Venezuela el año 1623 con sus criados Francisco Rodríguez Almonte y Juan Muñoz. La autorización para embarcar es firmada en Madrid el 5 de diciembre de 1622. Y se justifica “Para la cobranza de una hacienda”.

En su descripción dice: que es de mediana estatura y disposición barbinegro que comienza a mezclar con alguna cana tiene más grueso el ojo derecho que el izquierdo con una curvación que le impide algo la vista en este ojo.

Elbaile Ollés, José.
Publicado en la revista Tierra de Lalueza.

María Ángeles Satué, Bibliotecaria de Grañen


María Ángeles Satué Vidal nació en Huesca en 1977, aunque pasó su infancia y juventud en Sesa, pueblo a 12 kilómetros de Grañén, donde trabaja como bibliotecaria. Con María Ángeles, continuamos conociendo y reconociendo a las bibliotecarias de Los Monegros, llegando a esos espacios mágicos de libros y mucho más gracias a ellas.

Recuerdos de la niñez, escuela, juegos, tradiciones, la vida en el pueblo, marchar y quedarse, lo que ha cambiado, la vida de antes, trabajos, el papel de la mujer…

Recuerdo que la escuela de mi pueblo era mixta e íbamos todos juntos los de los distintos cursos. Pasábamos mucho tiempo en la calle, en cuanto salíamos del colegio cogíamos la merienda y jugábamos toda la tarde al escondite, a pillar y con las amigas a hacer casetas, con las muñecas, a tenderas… Cuando se hacía de noche te retirabas a casa y hacías los deberes, veías la tele o leías libros. Desde pequeña me gusto mucho leer, no me costaba sumergirme en la lectura y vivir las aventuras de los personajes de los libros. La vida en el pueblo era muy relajada y como convivía también con mis abuelos recuerdo que nos enseñaban muchas cosas, hacíamos juegos caseros y nos contaban numerosas historias. En Sesa cursé hasta 5º de E.G.B. y 6º curso ya lo hice en el colegio de Grañén. Fue un gran cambio porque era un colegio más grande y allí hice nuevas amistades. El bachillerato y el C.O.U. lo hice en Huesca en el instituto C.E.I. Pirámide en el que me quedaba interna de lunes a viernes.

¿Bibliotecaria? ¿Cómo has llegado a ser bibliotecaria rural? ¿Qué significa ser bibliotecaria en un pueblo? Dificultades, alegrías…

Una vez acabado el instituto no tenía muy claro lo que quería estudiar y al final opté por “Biblioteconomía y documentación” en la Universidad de Zaragoza. En ese momento era una carrera muy nueva y hacía mucha gracia el nombre “¿Bibliote… qué?”, me decían.

Desde el 2001 estoy trabajando en la Biblioteca de Grañén y me gusta mucho ser bibliotecaria rural, es muy gratificante. Es un trabajo variado ya que una misma persona realiza todas las tareas: selección de libros, registro, catalogación, atención al usuario, actividades de animación a la lectura etc. La principal ventaja de trabajar en un pueblo es la cercanía con la gente, acabas conociendo los gustos lectores de cada uno y se genera mucha confianza. En cuanto a las dificultades, en ocasiones se acumulan las tareas y no tienes tiempo para poder realizar todo lo que te gustaría.

¿Bibliotecaria rural, mucho más?

Las bibliotecas en los municipios se han convertido en importantes centros culturales y lugares de encuentro en los que puedes realizar variadas actividades: hacer trabajos escolares, consultar libros de diferentes materias, llevarte prestadas las últimas novelas publicadas, préstamos digitales, participar en el club de lectura, talleres de animación etc…

¿Qué es un libro?

Un libro es el vehículo de las palabras y por lo tanto de las historias y del conocimiento. Aunque reconozco las ventajas del libro electrónico, soy una enamorada del libro en papel.

Un género literario, un libro imprescindible, escritor/a, una poesía, una palabra bonita, una gran frase, una película y una canción.

El género literario en el que me encuentro más cómoda es la novela y también me encantan los libros-álbum, algunos me parecen auténticas joyas. Me cuesta decidirme por algún/a escritor/a  ya que me gusta alternarlos, por ejemplo Miguel Delibes, Isabel Allende, Irène Némirovsky… Un libro que disfruté mucho ha sido “El infinito en un junco” de Irene Vallejo. Si tengo que elegir una poesía me quedo con “Libre te quiero” de Agustín García Calvo.” Una frase: “Siempre imaginé que el Paraíso sería algún tipo de biblioteca” de Jorge Luis Borges.

Una reflexión sobre el papel de las bibliotecas en nuestros pueblos y, sobre todo, frente a la despoblación.

Me parece importante que se apueste por las bibliotecas porque ofrecen variados servicios a toda la población y son motores de dinamización de la vida de los pueblos. En el caso de Grañén, se está llevando a cabo una reforma de la biblioteca para mejorar su accesibilidad y ampliar las distintas salas. Se trata de un proyecto ilusionante y espero que con él se contribuya en satisfacer las necesidades de los/as usuarios/as.

¿Qué sientes al oír Los Monegros?

Cuando escucho Los Monegros, pienso en la singularidad de su paisaje y en la fortaleza de su gente.

Una esperanza, una ilusión o un deseo.

Espero que pasen pronto estos tiempos convulsos y volvamos a  reunirnos en nuestras bibliotecas con ilusión y alegría.

Pueblo: Sesa


Sesa pertenece a la comarca de la Hoya de Huesca, aunque para los jóvenes su centro de referencia es el IES Montes Negros Grañen. A orillas del Guatizalema, destaca la ermita de la Jarea  y la iglesia de Juan Bautista. La localidad ha sufrido un gran descenso desde los 834 habitantes en 1900 hasta los 167 habitantes en el 2018, una pérdida del 79,97% de su población. Sesa presenta una densidad de 5,43 hab./km² con un índice de viabilidad demográfica de menos tres.

Sesa (9).jpg

A través de jóvenes de la localidad conocemos su visión e inquietudes sobre la vida rural. Una perspectiva joven para reflexionar sobre el presente y futuro de nuestras localidades, una serie de entrevistas enmarcadas en la serie “Pueblo” de la iniciativa cultural “Os Monegros”. Gracias al IES Montes Negros de Grañen y muy especialmente a Lurdes Gracia por ayudar a hacer posible este proyecto.

Isaac Sacristan Peréz de Tudela

Isaac sacristán (2).jpg

  • IES Montes Negros Grañen
  • Curso: 4º de la E.S.O.
  • Localidad: Sesa.
  • Película: El niño de pijamas de rayas.
  • Música: Alejandro Sanz.
  • Deporte: Fútbol americano.
  • Equipo: F.C. Barcelona.
  • Aficiones: Jugar a vídeo juegos.

Actualmente a Isaac le gusta más la ciudad «Hay más gente y más movimiento», pues en Sesa no tiene mucho que hacer: “Antes venía más gente pero ahora se han despreocupado del pueblo y ya no vienen”. Así, que a Isaac no le gustaría quedarse a vivir en Sesa “Hay que desplazarse siempre a todos lados”. Cada dos por tres suele ir a Grañen para estar con los amigos y sobre todo cuando hay alguna fiesta.

Le gusta el deporte y juega a fútbol americano en Villanueva de Gallego, donde va a entrenar cada semana. Del pueblo le gusta la libertad, salir seguro por la calle y por las noches “Los padres no están tan pendientes, te tienen más a mano” aunque está todo demasiado desierto “Solamente estamos cuatro jóvenes”.  La piscina es lo mejor, las fiestas son muy pobres y no hay mucha actividad. La iglesia de Sesa es lo más representativo del pueblo.

En principio quiere estudiar nutrición y deporte, aún no tiene muy claro dónde “Dependerá donde llegué la nota”. Hace falta gente en los pueblos, a Isaac le gustaría que se arreglasen las casas: “Tendría que haber más actividades que hagan más atractiva la vida en los pueblos. Hay pueblos muy vacíos, tendría que haber alguna tienda que no te obligase a desplazarte por cualquier cosa. Antes se vivía del campo y había mucha más gente.»

Inma Satué Carrera

Inma Sesa.jpg

  • IES Montes Negros Grañen
  • Curso: 3º de la E.S.O.
  • Localidad: Sesa.
  • Música: c/dc.
  • Deporte: Fútbol.
  • Equipo: Real Madrid.
  • Aficiones: Descansar.

A Inma le gusta el pueblo y también le gusta la ciudad, pero las fiestas de los pueblos son mejores: “En Sesa no hay muchas cosas, no hay tienda y el bar se abre a ratos, a veces sólo en fin de semana”. Inma quiere estudiar en Huesca, estudiar mecánica  o quedarse en el pueblo con la explotación familiar, en la granja de su padre.

La fiesta es lo que más le gusta, cuando hay gente, el buen ambiente y el buen rollo que hay entre todos: “La gente va viniendo cuando puede, cuando vienen con sus padres, a pasar el verano, navidad o semana santa”.

En el pueblo hay muy poca gente y no se puede hacer muchas cosas por el pueblo, están pocos y siempre los mismos “A veces cansa, pues mucha gente marcha a estudiar y a trabajar a Huesca».

La ermita es un lugar especial de Sesa, se encuentra en la parte alta del pueblo, es un lugar muy tranquilo “Hay una cueva a unos tres kilómetros del pueblo, es un buen paseo para ir andando, corriendo, en bici o en moto». Echa en falta la panadería, la han cerrado recientemente, una tienda… hace años había hasta un estanco, una peluquería y el bar lo abrían todos los días. “Iría bien algún local como peña, no hay nadie en los pueblos no hay casi gente. Los pueblos viejos están vacíos: Sesa, Tramaced, Piraces… en cambio, los de colonización, aún gozan de cierta buena salud».

Inma ve muy difícil una solución: «Quizá se podrían hacer pisos, arreglar casas y alquilarlas para que venga gente a vivir, pero claro, hace falta más trabajo y sin trabajo los pueblos se mueren».

Continuará…