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Miguela Borruel Pardina


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Miguela Borruel Pardina

Por Cruz Ullod Borruel.

Mi madre, Miguela o Miguelita, nació un 29 de septiembre de 1937, en plena Guerra Civil, en la casa del Pozo situada en la actual Ronda de San Francisco de Sariñena. Hija de María Pardina Pueyo, la “pallaruelera” y Plácido Borruel Capitán, la mayor de tres hermanos. Plácido trabajó toda su vida como jornalero en casa de Portera y en su juventud fue marmolista con los Morera. Mi abuela María servía en Casa Castanera. Plácido y María se casaron por lo civil y después de la guerra tuvieron que hacerlo por la iglesia. Aunque el cura no los dejaba casar si no le llevaban las tres “arras” de rigor. Mi abuela no tenía dinero para eso y tuvo que sustituir las arras (unas especie de tartas) por bizcochos.

A los pocos días de nacer mi madre ya se la llevaron  a Pallaruelo, pues mi abuela era de allí. Son muchos los recuerdos que guarda de este pueblo, sobre todo de su abuelo Miguel. Al criarse sin su padre (mi abuelo Plácido estuvo durante 2 años en la cárcel de Huesca, una vez acabada la guerra), su abuelo Miguel era como un padre para ella. Lo seguía a todas partes y el día que se la llevaba con él al monte era una fiesta para ella. A su abuelo Miguel, “Miguelón” porque era muy alto, lo recuerda siempre con su bota de vino colgada en el cabecero de la cama y preparándole pan con vino antes de que saliera el alba.

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De Pallaruelo recuerda los juegos bajo el Torrejón y las fiestas. Al gaitero Vicente Capitán (familia de mi abuelo Plácido), al tío Juaner…las juergas que montaban con su música y su porrón en los patios empedrados de las casas. Y los vestidos que estrenaba para la fiesta “sobre todo uno rosa con volantes”. Y el miedo que le inspiraba el diablo del dance que la encorría hasta el granero de casa, el pan bendito que entregaba y sigue entregando  siempre la misma familia por una promesa…

De la guerra recuerda cuando tenían que ir a refugiarse a las masadas  y le tapaban la boca para que no se oyesen sus llantos y no los delatase.

Recuerda como al principio, una vez que su padre salió de la cárcel, ella no lo quería, no lo había visto nunca. Decía que no era su padre sino “el marido de mi mama”. Recuerda también la noche que la bajó a la cuadra porque lloraba y no quería dormir con él.

Su segundo hermano, Antonio, nació en Pallaruelo y fue recogido por Josefina la del “Augau”.

José, el tercero, ya nació en Sariñena, en pleno invierno. Su nacimiento coincidió con la muerte del marido de su tía Isabel la Patica y como había nevado tanto tuvieron que abrir un camino con palas  desde su casa (Ronda San Francisco) hasta la iglesia para poder enterrarlo.

Miguelita no quería vivir en Sariñena y aunque sus padres y hermanos ya estaban instalados aquí ella se quedaba siempre que podía con sus abuelos de Pallaruelo, también fue allí a la escuela.

Años después ya se quedó definitivamente en Sariñena, aunque iba a Pallaruelo siempre que podía. De su casa de Sariñena recuerda que no había luz pero sí tenían pozo, incluso un pequeño brazal donde iban las vecinas a lavar la ropa. Muy distinto era el tema del agua en Pallaruelo, donde iban a la balsa con un colador para recoger el agua estancada llena de cucos  y donde se reutilizaba una y otra vez la misma agua porque no se podía desperdiciar ni una gota. En Sariñena era diferente, aquí había fuentes en muchas calles y plazas.

Fue a la escuela en Sariñena hasta los 14 años, cuando empezó a cuidar a Encarnita, la hija de su maestra ( y mía) Doña Emilia. Empezó a trabajar para ella mucho antes, fregaba el patio, le llevaba la leche todos las noches  de Casa La Diega. Me daba “un real” cada día por llevarle la leche. Por entonces ya empezaba a acompañarla el que sería mi padre, Jesús Ullod López, el Roso. Para Doña Emilia trabajó unos años incluso se la llevaba con ella a Huesca durante el verano para que siguiera cuidando de su hija, con la que mantenemos una estrecha amistad todavía.

En ocasiones tenía que pedir permiso a la maestra para salir antes de la escuela porque tenía que llevarle la comida a su padre hasta los chamarcales o los estañuelos Me habla de sus amigos: José Gómez, Codeta, Alicia la Sastra, la Pierretas, Culocuezo,…

En diciembre de 1958 se casó con mi padre con el que llevaban  juntos desde adolescentes, fueron de viaje de novios a Zaragoza, a la famosa “Posada de las Almas”. Al año siguiente nacería mi hermana M ª Jesús y en 1963 nació Rosa Mari, que desgraciadamente murió a los cuatro meses. Y en 1964 nací  yo, en pleno “baby boom”. Aprendió a coser con Pilarín Mateo, la “Titina” y nos hacía toda la ropa tanto a mi hermana como a mí. Yo me he criado entre patrones, hilos, retales,.. Mi padre trabajó mucho tiempo “pesando esparto” en diferentes localidades a las que se desplazaba en bicicleta.

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Jesús y Miguela por el camino del fútbol.

De sus años jóvenes recuerdan el montón de bares y tabernas que había en Sariñena, prácticamente una en cada calle: el Riau (donde la peluquería de Flora), la Parra (en la calle Enado),  Puchades (donde se instaló la primera televisión), el Bodegón “donde íbamos a merendar cabezas”, el café de Paquito en la calle de Ancho, casa Ojitos, el Romea “de más categoría” y El Peti donde “se vieron por primera vez las olivas rellenas” y había que hacer cola para entrar durante las fiestas. Y del cine, en el Romea, en el Casino y en el Victoria, a los que siempre se tenían que llevar de “carabina” a la abuela Incolaza, que era la primera que se apuntaba.

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Isidro Clavería, el “Chupón”, Antonio Campos, Jesús Ullod y José Borruel en el bar La Parra, detrás el camarero ¿?

Para poder aumentar el escaso salario que ganaba mi padre en “las viguetas” durante muchos años mis padres se hicieron cargo del bar del campo de fútbol “el ambigú”. Gracias a ello mi hermana y yo pudimos salir a estudiar fuera. Un esfuerzo que nunca les agradeceremos lo suficiente.

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Cruz Ullod Borruel

 

RECUERDOS DE ANTONIO CLEMENTE HUERVA


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De mente ágil y buena memoria, muy animoso y optimista. Así vi a Antonio aquella tarde de finales del pasado verano en que nos reunimos para charlar. Sus recuerdos  eran muy intensos y sus vivencias eran tan reales  que parecía como si hubiesen ocurrido anteayer.

Recuerda con gran satisfacción cómo le curó Adoración, la curandera de Biscarrués. Harto de sufrir grandes dolores en la rodilla por un derrame sinovial, harto de supositorios para el dolor y harto de diagnósticos  erróneos como el de aquel médico que le dictaminó artrosis a sus 42 años, tomó un camino alternativo y se fue al pueblo de la sanadora para ver si le hacía un “milagro” en su maltrecha rodilla.

-Alguien me recomendó ir a verla y, en principio, me lo tomé a guasa, pero en vista de que los dolores se hacían inaguantables, una mañana me decidí y allí me presenté. Entre incrédulo y desesperado accedí a una pequeña sala que hacía de consulta y le conté  mis cuitas. Me escuchó con atención y me dio unas “esfriegas”en la dolida rodilla y luego unos consejos que debía seguir durante varios días. Le di la voluntad y me fui para casa.

   La posible solución  me pareció bastante extraña, pero la seguí al pie de la letra.

  Se anima y me cuenta las indicaciones que le propuso la curandera:

  -Por las noches tenía que tomar una infusión de anís en grano y a la hora de acostarme colocar una hoja de acelga en la rodilla enferma y sujetarla con vendas. Todas las mañanas, al levantarme,  comprobaba como aquellas acelgas que me ponía cada noche adquirían un feo color negro. Esa transformación del vegetal seguramente era síntoma de algo, cosa que  nunca llegué a comprender.

   A los tres días los dolores habían desaparecido y caminaba como si tal cosa. Tan contento me quedé que al cabo de unos años tuve otro problema distinto en la otra rodilla y la volví a visitar y me la volvió a curar.

 La curandera se llama Adoración y hoy en día con 91 años, y después de una grave enfermedad y operación subsiguiente, aún lo sigue haciendo. Sus clientes son de cualquier pueblo de “A Galliguera” (comarca natural que engloba a los pueblos cercanos al río Gállego) tanto de Zaragoza como de Huesca, aunque cuando adquirió  fama los enfermos le llegaban de muy distintos sitios.

   Nació en Biel, su padre y un hermano también tenían la misma facultad.

  Cambiamos totalmente de tema y me habla del equipo de fútbol local:

   -El primer equipo de fútbol federado en Sariñena  se formó después de la guerra, en el año 1944 y se llamó Club  Educación y Descanso de Sariñena. Se jugaba en el campo denominado San José (enfrente de donde hoy están las deshidratadoras). Se competía contra equipos de Altorricón, Peralta de Alcofea, Monzón, Barbastro, Torrente, Binéfar, Zaidín…etc.

  La primera alineación que recuerdo estaba formada por Manoler (portero), Pedro Peña. Alfonso Millera (Mechero) y David Cazcarra (defensas).  Nogués y Sanclemente de la Estación (medios). Y como delanteros  jugaban Mariano Laín, Genaro Llorens, Espada, Almerge y Mariano Torres. Fernando Rodrigo también solía jugar de mediocentro hasta que la falta de un portero en un partido clave le situó de cancerbero, siendo una gran revelación con sus paradas. Como entrenador ejercía Juan Sanz (Juanito). Este equipo llegó a jugar con los citados jugadores 3 o 4 temporadas.

   En 1946 el equipo contaba con los siguientes jugadores: Fernando Rodrigo (portero), Fernando Rodríguez, Alcarazo (fichaje de Barbastro) y Bernabé Corvinos; Chesa (Lérida), Carmelo (el de Angelito); Mariano Torres, Mariano Laín, Genaro Llorens, Almerge y Espada.

   En 1947 se consigue el primer gran hito del club, fue la consecución de la Copa Primavera en Fraga con Rodrigo, Rodriguez Alcarazo y Bernabé; Laín, Arenas y Chesa; Torres. Llorens, Almerge y Villcampa. Entrenador Juan Sanz.

   A partir de esta célebre victoria el equipo empieza a renquear hasta su desaparición en 1949.

   Los campos de fútbol que ha habido en Sariñena han sido: el citado San José, El Carmen primitivo cerca de la actual Cooperativa, los Jinjoleros donde sólo entrenaban y el actual El Carmen donde está ubicado ahora.

Y para terminar me declama magníficamente y sin errores un romance muy religioso que aprendió de pequeño.

 ROMANCE DE TODOS LOS SANTOS

Sant-Atocha está en Madrid

La del Sagrario en Toledo

El Pilar en Zaragoza

En Huesca está San Lorenzo

Santa Orosia está en Jaca

Y la del Pueyo en Barbastro

En Pertusa la Victoria

Y en Peralta el Sacramento

La Jarea está en Sesa

Santo Domingo en Huerto

Santa Cruz en Capdesaso

Y en Sariñena Loreto

Santa Ana en Castejón de Monegros

Madre de la que fue Verbo

Esposa de San Joaquín

Y abuela del mejor nieto.

                                                                   Manuel Antonio Corvinos Portella

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El C.D. Sariñena


El C.D. Sariñena

* Foto del equipo de los 1000 partidos en 3ª aragonesa.

Esta añada es de noragüena p´al “C.D. Sariñena”, ya que cumple 25 años de contino en a tercera división aragonesa. Y lo está celebrando de una sobregüena manera, pues  está realizando una mui, pero que mui güena temporada.

Remeramos la historia d´un histórico club, narrau por macp en la revista “Quio” en el 2001. Manuel Antonio ize que el primero de los campos d´antes de futbol  fue en el terreno de los “jinjoleros”, en 1922, ande aura s´alcuentra la cooperativa de “Los Monegros”. Dimpués, el segundo campo estuvo carretera Zaragoza, ande está l´observatorio de la Laguna, y más tarde, el tercer campo s´ubicó al costau del primero. Es en 1950 cuando se construye  l´actual campo de futbol “El Carmen”, nombre dau por estar en los terrenos del Cerrau del Capistrano y pertenecientes al antiguo convento de “El Carmen”. El Sariñena prencipió en 1922, con un uniforme azul-grana y su andadura duró ocho años.

El club de futbol “Ku Klux Klan” se formó en 1928, con disidentes del “Sariñena F.C.” e iban uniformaus con camiseta a rayas amarillas y negras. Ambos equipos acabaron uniéndose, pero la guerra les hizo desaparecer. En 1944, dimpués de la guerra, se formó un nuevo equipo “Educación y Descanso de Sariñena”, vestían completamente de Blanco y jugaban en el tercer campo.  En estas, en 1946, aparece el “C.F. Sariñena” que en 1947 gana la copa de campeones provinciales. En 1956 es fundau el actual “C.D. Sariñena” y a partir de 1987 comenzó a jugar en la tercera división aragonesa. Otros equipos del lugar y que en hay que recordar, son el “Huracán” y “C. F. Nivelcampo”.

En el 2005 el Sariñena jugó contra el “Racing de Santander B” la promoción de ascenso a Segunda División B. Un gran hito en la historia de nuestro club. En octubre de 2011 cumplió 1000 partidos consecutivos en tercera división.

Hay dos himnos dedicaus al C.D. Sariñena, uno es de autor desconocido y l´otro fue realizau por el gran músico Sariñenense José Guioni ¡Viene el Sariñena! y el ¡Himno del Sariñena!.

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C. F. Sariñena en el Gallo Rojo

Aportamos nuestro propio Himno al “C.D. Sariñena”:

Izen por to la redolada monegrina

¡Qué el Sariñena es equipo ganador!

¡Qué el Sariñena es campeón!

En la división de Aragón

Blanquiazul es nuestro color soñador.

Con rasmia y sin reblar

¡Quios imos de aupar!

De la base a la elite

¡Aficionaus imos de empentar!

Al orgullo de nuestro lugar.

El escudo de Sariñena

Ballesta d´equipo batallador

¡Armas! ¡Armas! Equipo luchador

Siempre a ganar ¡Aupa Sariñena!

¡Qué el Sariñena es equipo ganador!

¡Qué el Sariñena es equipo vencedor!

¡Viva el C.D. Sariñena! Y a continar la leyenda…

Publicau en “ Os Monegros el 5 de septiembre del 2012.