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La guerra en Robres


El subsector de Robres formó parte del frente de Aragón, en el sector de la sierra de Alcubierre, circunscripción norte-centro. Fue un lugar cercano al frente de Alcubierre, a las posiciones de las Tres Huegas, Pui Ladrón y luego rebautizado como San Simón, y La Pajera, El Negus, La Imposible o La Pasionaria; posiciones integradas en la actual denominada Ruta Orwell y del frente de Los Monegros. Milicias frente a legionarios, falangistas de la Segunda Bandera Móvil de Aragón, el Regimiento de Carros Ligeros de Combate nº 2 y soldados regulares.

La guerra marcó profundamente los pueblos y sus gentes, generando dolor que aún va costando superar, heridas profundas en nuestra sociedad de las que cuesta hablar pero que forman parte de nuestra historia, de aquella amarga memoria que no hay que olvidar para que jamás vuelva a suceder. Por ello, con todo el respeto, en su recuerdo y memoria. 

Ramón Hernando (1944), hijo de Antonio Hernando Villacampa, ha investigado la historia de Robres. Fruto de todo su trabajo es una valiosa información que constituye gran parte del presente trabajo: Su historia no deja de ser complicada y años de estudio, consulta de documentos y testimonios han ido estableciendo un relato complejo que va arrojando luz a diversos episodios oscuros y dudosos, en un ejercicio de memoria, dignidad, reparación y verdad. De hecho, este relato quiere ser lo más imparcial posible, todos los hechos, actuaciones, nombres y apellidos, apodos  de personas salen de los documentos establecidos por la Causa General de Salamanca, documentos recogidos por responsables de la Falange, la Guardia Civil, ayuntamientos falangistas nombrados por el ejército de Cabanellas, la Comisaria de Huesca y entrevistas con responsables de la cárcel de Zuera y la DPH de Huesca. Además del Circulo Republicano de Huesca, archivos de Madrid, archivos personales de Antonio Hernando Villacampa y de la memoria de mi abuela Antonia Villacampa Susin y las familias de Robres, mil gracias a ellos, mil gracias a mis amigos y amigas.

Robres, Los Monegros.

Robres se ubica en plena comarca de Los Monegros, en la parte septentrional de la sierra de Alcubierre. Un contexto de clima árido y seco que ha condicionado la vida de sus habitantes, donde el agua se aprovechaba en balsas y balsetes, incluso para su consumo. Además, la escasez de lluvias y aguas ha limitado la vida y su principal actividad de la agricultura, tradicionalmente de secano, habiendo años de cosechas escasas o nulas. Los  pastos, aunque abundantes, se agostan en verano. Así, las actividades de agricultura de secano y de ganado lanar aportaban, a duras penas, escasamente recursos para la subsistencia. No obstante, la importancia de la ganadería lanar en Robres fue importante, ya que llegó a contar con tres mataderos.

La vida de los pueblos se regía por un dominante sistema caciquil que tanto marcó en la España rural. El pueblo llano pronto abandonaba la escuela, había mucho analfabetismo, así que el único futuro que tenían era los hombres al campo y las mujeres a servir a las casas ricas.

Así, en 1930 Robres contaba con 1.245 habitantes, población que descendió hasta los 972 después de la guerra. Sufrió duramente la guerra y la posterior represión, dejando una huella profunda.

Periodo de anteguerra, la influencia del canal

La construcción del canal de Monegros, dentro del plan de Riegos del Alto Aragón, para regar las tierras monegrinas, fue una magna obra que requirió de abundante mano de obra. Una obra que generó amplias perspectivas de futuro y trabajo en su construcción y en la transformación agraria de parte de Los Monegros. Sobre los principios de la década de 1930, comenzaron a llegar, desde muchas partes de España, obreros para la construcción el tramo de Robres. Aquellos trabajadores obra, trajeron nuevas corrientes político sindicales que crearon conflictos, especialmente significativos cuando los trabajos en el canal comenzaron a aflojar y desembocaron en una seria confrontación laboral y social. La mayoría de los trabajadores del canal estaban afiliados a la CNT (Confederación Nacional de Trabajadores). Entre aquellos trabajadores estaba el robresino Antonio Hernando Villacampa (1912-1992) que comenzó a trabajar en el Canal de Los Monegros en 1933 “Con carnet de la CNT, como casi todos, y allí conocí a los hermanos Ascaso”.

Para las gentes de Robres fue toda una oportunidad. Únicamente conocían trabajar de sol a sol, todos los días y escasos jornales. Eternas jornadas de siega que se abastecía de jornaleros locales y que se cogía poco. Además pagaban lo que querían tras 15 horas de faena.

Algunos trabajaban de pastores, hacían la trashumancia, subían a la montaña en busca de pastos. Los Villacampas descendían del señorío de Sabiñanigo a través de la trashumancia. De Teruel venían esquiladores y algunos descienden de aquellos esquiladores del siglo XIX, como la familia Brosed.

La gente del pueblo acabó marchando a trabajar a las obras del canal. Descubrieron jornadas de trabajo de 8 o 9 horas, 48 horas por semana, los domingos fiesta y buen sueldo. Incluso gente de las casas ricas fueron a trabajar al canal, pues, por decir de alguna manera, muchas de las casa ricas en Los Monegros eran casas pobres comparadas con otras de su clase social.  

Ya con 12 o 13 años los cogían como pinches en el canal. Antonio Hernando comenzó a trabajar con 14 años, pues en casa tenían poca tierra y no podían vivir de ella. Su madre, viuda, trabajaba en uno de los mataderos.

En Robres, expone Ramón, a partir de las obras del Canal de Monegros, se formó un fantástico laboratorio de ideas de progreso, de bien estar, de tener una sociedad más justa. La población subió en torno a las 1600-1800 habitantes. “Las ideas anarquistas se implantaron poco a poco, tanto en la pequeña clase rural, como en la clase trabajadora del canal. Anarco/sindicalistas de Huesca, Barbastro, Jaca… de esas localidades que, a través de maestros, ateneos libertarios, sindicalistas de Barcelona, Lérida… venían a difundir sus ideas. Ramón Acín vino varias veces a Robres, discutía también con la JSU (Juventud Socialista Unificada). En Robres se formó un sindicato agrario de la CNT anarco sindicalista y otro para los obreros que querían afiliarse”.

Las obras del canal significaron una revolución social, en su sistema. Obreros de Barcelona, Madrid y otros lugares se albergaban en las casas de los robresinos. Una sociedad aún sin luz, sin agua… se veía mucho la desigualdad. Igual pasó con la mujer, lavarse, cuidarse o incluso no quedarse preñada, descubrían que podían vivir y entender la vida mucho mejor de la que conocían. 

Cortesía Ramón Hernando.

A aquellos obreros de ideología anarquista se les conocía como los “Rompe-márgenes”. La explicación a dicho calificativo la escuchó Ramón Hernando en boca del tío Blas de Robres. El tío Blas trabajó en el canal, compartiendo faenas con muchos obreros de la CNT/FAI, asumiendo muchas de sus ideas, entre ellas las relativas a la tierra “Había que aplicar lo que decían los anarquistas y con los más duros pronuncio la frase: nada de márgenes, a romperlas; la tierra, toda la tierra para nosotros. Y de ahí salió lo de rompe-márgenes.” 

A la vez los campesinos y jornaleros de Robres se daban cuenta que tenían derechos, se podían organizar en sindicatos, defender sus derechos, hacer huelgas… Entraron en juego los sindicatos, tanto la CNT como UGT.

En Robres se formó un sindicato agrario de la CNT, anarco sindicalista, y otro para los obreros que querían afiliarse en la UGT. El Partido Comunista se componía por sus Secretario General Marino Gracia, Secretario de Organización Esteban Rivas y Paco Villacampa (Hijo de Julián Villacampa) y Tomas Villacampa (Archivo PC y Archivo Salamanca). La Juventud socialista Unificada por Antonio Hernando Villacampa, Secretario General, con José Lasheras – asesinado en Mauthasen/Gusen y los de casa Ballarin, están en las fotos de las fiestas de San Blas de 1936, simpatizantes como Paco Moreu, el Apache (hermano del Lechero) etc… (Archivo PC, Salamanca y Ramón Hernando). Como miembros del PC Gregorio Anzano Serrano y  Ángel Colominas Edo (Secretario General del PC  de la Provincia de Huesca), sobrevivió al campo de exterminio de Mauthasen, Miguel Granged Berdún y Valdivia Pardo Juan.

Además, trabajar en el canal les permitía aprender y mejorar profesional, aprender un oficio de los distintos gremios que trabajaban en el canal.

La tensión fue considerable, incluso ocho trabajadores fueron detenidos y acusados por tenencia de explosivos. El juicio resultó muy concurrido, debido a la gran expectación que generó, viéndose ante el jurado la causa contra los ocho jóvenes detenidos en Robres por “Retención de dinamita y confección de explosivos”. La sala apareció completamente abarrotada de público, predominando los obreros “No se registró el menor incidente. En las obras en construcción hubo paro en tanto duró el juicio. Tras los informes muy brillantes del fiscal don José María Carreras y defensor don Adriano Méndez, se retiró a deliberar el jurado, dictando veredicto de inculpabilidad. Los procesados fueron absueltos y libertados” (Diario de Huesca 21 de septiembre de 1933).

Hallazgo de un cartucho. En Robres, fue hallado por el niño Jesús Alcubierre Sieso, de 11 años, en un huerto, un cartucho de dinamita y un metro de mecha. La Guardia civil realizó con este motivo registros en otros huertos y en algún domicilio, resultando infructuosos.
Huesca 27 de septiembre de 1934.

La falta de trabajo en Robres fue un serio problema, de hecho en toda la comarca de Los Monegros, las malas cosechas y la ralentización de las obras del canal acuciaron una profunda crisis y malestar en la población, sobre todo en los trabajadores que así lo manifestaron en abril de 1936. Los obreros del canal formularon distintas peticiones, en parte forzoso, al Ayuntamiento de Robres, para que fuesen elevadas al excelentísimo señor gobernador civil de la provincia, como solución a la crisis del trabajo:

1ª. Establecimiento de turnos en las obras del tercer tramo del Canal y Acueducto con lo que aumentaría notoriamente el ingreso de trabajo y el adelanto de las mismas.

2ª. Limpieza de total tramo segundo del Canal, a cargo de Compañía Fierro, en la que a la par que sería posible la colocación de bastante número de obreros, por regular tiempo podría ser llenado de agua dicho Canal, en beneficio directo da la obra y del trabajo.

3ª. Reparación inmediata de la carretera de Huesca a Robres, kilómetros 25 al 35, en cuya obra y por otro regular tiempo, se colocarían otro regular número de obreros, y se regularizaría el transito pésimo que en la actualidad tiene.

4ª. Estando procediéndose a la limpieza del Canal desde Tardienta a Torralba, ver la posible colocación de un número de obreros en este trabajo.

Robres 5 de Abril de 1934.- La Comisión. Huesca 7 de abril de 1934.

Otras corrientes fluyeron en el ambiente obrero de Robres. Ramón Hernando recogió el testimonio de su padre Antonio Hernando Villacampa, notas sobre su vida, aportando su valiosísima memoria de aquellos tiempos: “En este mismo año, de 1933, conocí al histórico José Villacampa y con él entré en las JJCC (Juventudes Comunistas en Robres. En aquella época, los reaccionarios se cebaron con el PCE. Tuve el carnet de la UGT (Unitaria). Preparamos el Partido en Robres sobre todo con Paco Gavín o Gabino, en realidad se llamaba Francisco Brosed Brosed que leía Mundo Obrero y me formaba políticamente. En Robres, bajo la dirección de José Villacampa, en el 35 viendo lo que se avecinaba hacíamos instrucción y formación política a escondidas” (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988).

Fue un fluir de personalidades, intelectuales, sindicalistas… hombres políticos. Ramón Acin estuvo en la localidad, el catedrático y comunista jaques Pena Rocha, Villacampa (Comunista)… venían en un plan revolucionario, a formar políticamente.

También estuvo Juan Valdivia Pardo, médico de Robres y gran impulsor de la  extensión cultural y la higiene en Robres: «La figura del médico Juan Valdivia Pardo Juan fue muy significativa en aquella pequeña revolución. Valdivia fue médico de Robres y gran impulsor de la extensión cultura y el higienismo en Robres. Organizó mítines en el pueblo, fue detenido en 1938 y tras haber prestado servicio, durante ese tiempo como médico en el campo de trabajo de Barbastro (franquista), a los diez meses fue liberado.«

Cortesía Ramón Hernando.

Otro de los muchos robresinos y sus avatares, fue Braulio Serrano Capuz. Braulio fue fundador de la CNT en Caspe. Jesús Cirac, miembro del Instituto de Estudios Caspolinos, se encargó de revisar y maquetar el cuaderno manuscrito autobiográfico que les hizo llegar la hija de Braulio y que han publicado con el título: “Memorias de un hombre cualquiera” (Centro de Estudios Comarcales del Bajo Aragón-Caspe, 2007, Braulio Serrano Capuj, fundador de CNT en Caspe). 

Los inicios de la guerra

Al estallar la guerra, “Tomamos la radio y teléfonos, la gente salió a defender la república”, (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988). Además, según investigaciones de Ramón Hernando, el mismo 16 de Julio de 1936, los falangistas de Robres llamaron a Zaragoza para que viniera un grupo armado y tomar el pueblo. “Unos días antes se habían reunidos en el Corral de Rosa, habían preparado una lista de más de 130 personas para remitirla a la falange pidiendo que se les detuviera, llevárselos a Zaragoza y liquidar unos cuantos de ellos. El camión se presentó por la bajada de Alcubierre, pero la gente de Robres los paró y tuvo que dar media vuelta. Se dice que los Oto esperaban el camión para guiarlos. Algunos de ellos trabajaban para los “ricos” y estaban en la reunión del corral de Rosa… La lista de los 130 cayó en mano de los republicanos, hasta hace poco estaba en una casa de Robres”.

Documentos correspondientes a Causa General del A.H.N. Subdirección General de los Archivos Estatales Ministerio de Cultura .España

La lista de los 114 Republicanos efectuada en el Corral o Paridera de Rosa en la Sierra.

Poco antes del 18 de Julio 1936, un grupo de derechistas y falangistas de Robres realizaron una lista con nombres de republicanos de Robres. Aquella lista fue elaborada por Vicente Alcubierre, Román Luna, Antonio Pano y Francisco Sieso, según testimonios el instigador fue Francisco Sieso Barrio y Ramón Maza; otros se acercaron. Francisco Sieso empleaba a Joaquín Oto Serreta y sus hijos, a Martin Juan Olivan. La lista preparada fue remitida al Gobernador de Huesca que la dio a la Falange de Zaragoza pidiendo que se les detuviera: “Llevarlos hacía Zaragoza y liquidar a unos cuantos”.

Un par de camiones, con falangistas armados de Zaragoza, tenían que llegar a Robres por el camino que viene de Alcubierre (Plan de Burro) y llegar al pueblo por detrás del Pimendón. Los Oto tenían que serviles de guía, según testimonios de Robres.

La lista de las 114 personas de izquierdas cayo en mano de los republicanos, hasta hace poco estaba en una casa de Robres, en  casa Capistros y Florentín Oto, según testimonio de él mismo en varias entrevistas.

Comité

El comité local de Robres fue principalmente de mayoría anarquista, los llamaron “Rompe Margenes”, al principio pocos comunistas estuvieron en ese comité.

Durante los primeros días, Ramón Rivases Cuello de Torralba de Aragón, según acusaciones, fue el primer presidente del comité de Robres. Comunista, antes del golpe de Estado, se pasó a la CNT. Igualmente, la acusación manifestó que practicó guardias armadas, participó en la destrucción de la iglesia y, a pesar de ello, de tener buenas conductas favoreciendo a algunos derechistas encerrados en la cárcel del pueblo; participó en la detención de Luis Berdun. Además, fue vicepresidente de Alianzas Obreras y Campesinas y secretario del Centro de Izquierda Republicana de Robres.

Efectivamente, en esos primeros días de Julio del 36 se detuvieron a los “ricos y derechas del pueblo”, aquellos que habían participado en la famosa reunión de las derechas en el corral de Rosa en plena sierra: Vicente Alcubierre Alaman, Antonio Paño Santafe, Ramón Maza Gonzales, Manuel Abardia, Román Luna, Ventura Serrano, Martin Juan Olivan Lacruz y Luis Berdun. (Actas de Huesca, nombrado de los revolucionarios que detuvieron estas personas).

Estuvieron pocos días en la cárcel y de todos ellos no se mató a nadie ¿Por qué? sabiendo que los anarquistas tenían las órdenes de fusilar a ricos, curas etc… ¿Quién del Comité local los puso en libertad?.  Nadie les molesto en la cárcel de Robres… ¿Por qué? Se sabe por un archivo memoria de 1988 que las derechas y falangistas de Robres habían fichado  desde 1933/34 a las personas de izquierdas de Robres, en particular a las Juventudes Comunistas (JSU) a los miembros del Partido, a los afiliados a la CNT que trabajan en el Canal de Monegros y a los pequeños campesinos.

Pronto se creó el comité local “De la CNT/FAI, dirigido por Laporta miembro de la FAI–AIT asistido por Ramón Rivases Cuello de Torralba de Aragón y Alejandro Becana Gros “El Grande” como vicepresidente y mandado por los anarquistas de Barcelona”. El comité se constituyó con una mayoría de anarquistas y unos pocos comunistas “En ese comité local entra los que llamaban los rompe/márgenes. La bandera anarquista se subió a lo alto de la torre de la iglesia y se crearon billetes de racionamientos” (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988). Laporta o Antonio Porta fue el responsable de la FAI en Robres, quien, de acuerdo a las notas de Antono Hernando, era “Natural de Lérida y vivió en Robres desde los años 33, llevaba con su mujer una pequeña tienda de ultramarinos en casa del Huescano. Se puso de presidente del comité local, asistido por Ramón Rivases Cuello de Torralba de Aragón y con Alejandro Becana Gros (el Grande) como vicepresidente”. Los miembros de aquel primer comité fueron Jesús Becana Gros, Blas Granged Aznarez, Enrique Brosed Pisa, Victoriano Serrano, Domingo Abardia Brosed, Domingo Cuello Lafita con su hermano Ramón, Joaquín Lacruz  Novales, Manuel Brosed  Brosed, Joaquín Brosed Sanz, Carmelo Brosed, Antonio Villacampa Pisa, Francisco Luna, un forastero de la FAI, llamado el Gallego (vivía en casa Casildo), miembros de Casa Miserias, etc… (Notas de Ramón Hernando).

Ramón Hernando detalla cómo el comité puso en marcha el programa de la FAI (Federación Anarquista Internacional), negándose a aplicar la Reforma Agraria de Urribe, Ministro de la República, lo que provocó choques muy violentos con la población de Robres, en particular con los Republicanos y Comunistas. “A Antonio Laporta se le acusó públicamente de ser un ladrón, de aprovechar su pertenencia a la FAI para robar los bienes de los robresinos: los principales acusadores fueron Antonia Villacampa, Francisco Arazo, Anselmo Conte y otras familias como Adelaida y las mujeres de Robres, en particular todos los comunistas de Robres. Esos bienes iban a Tardienta, los cargaban en camiones dirección Barcelona para venderlos en Barcelona para el bien de la CNT” (Notas de Ramón Hernando).

Aquel comité, además estuvo formado por Jesús Becana Gros, Blas Granged Aznarez, Enrique Brosed Pisa, Victoriano Serrano, Domingo Abardia Brosed, Cuello Lafita Domingo con su Hermano Ramon, Joaquin Lacruz Novales, Domingo Abardia Brosed, Manuel Brosed Brosed, Joaquín Brosed Sanz, Carmelo Brosed, Antonio Villacampa Pisa, Francisco Luna, Domingo Abardia Brosed, Blas Granged Aznarez, Jesús Serreta Miro, Antonio Brosed Sanz ( guarda del Canal de Monegros), Julián Brosed Pisa (Presidente de Alianzas Obreras y Campesinas de Robres) y Esteban Rivas Pisa.

Laporta, natural de Salas Altas (Huesca), desde los años 1933-1934 se había establecido en Robres donde, junto a su mujer, regentaban una pequeña tienda de ultramarinos en la céntrica casa del Huescano. Su Esposa Julia Subias Castan natural de Castillazuelo (Huesca) también pertenecía a la CNT/FAI, además ella de las Juventudes Libertarias (Archivo Ramón Hernando). Además, en la localidad monegrina, como en muchas otras, hubo saqueo de la Iglesia, se quemaron muchos objetos cogidos en el interior y la bandera anarquista apareció en la torre de la Iglesia… muchas familias fueron molestadas en sus casas o en las calles (Archivos de Salamanca).

Esteban Rivas era secretario de organización del Partido Comunista de Robres (Archivo  Causa General Salamanca).

En los primeros días de agosto se detuvieron a los “ricos y falangistas del pueblo, estuvieron quince días, algunas familias untaron al presidente y a algunos miembros del comité”.

La llegada de la Columna Carlos Marx

A finales de julio la columna Carlos Marx llegó a la localidad monegrina de Robres; columna organizada por el Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) y la Unión General de Trabajadores (UGT). La columna partió de Barcelona para el frente de Aragón el 25 de julio de 1936, ocupando Sangarren y Almuniente, el 28 de julio, y estableciéndose en Poleñino, Torralba y Robres. En Robres instalaron el cuartel general de la 123, en casa Ribas. La 123 respondía a una de las tres brigadas mixtas 122,123 y 124 de la 27 División de la Columna “Carlos Marx”, que acabó integrándose en el XI Cuerpo del Ejército Popular republicano. El cuartel general de la columna “Carlos Marx” se instaló en Tardienta.

“Es el día 26 de julio cuando de Barcelona sale la columna Del Barrio (PSUC) que lleva a éste como delegado y al comandante de infantería Sacanell como técnico militar, habiéndoles sido encomendada por el Comité Central de Milicias Antifascistas, ocupar la región comprendida entre la ciudad de Tardienta y la Sierra de Alcubierre, debiendo fijar su puesto de mando en Grañén y rebasar con su acción Huesca por el sur y ocupar Zuera. Esta columna tenía una característica especial, pues contaba con un grupo de alemanes exiliados antifascistas que habían acudido a la Olimpiada Popular, esa olimpiada que nunca se celebró, ya que debía de inaugurar sus juegos en Barcelona el día 19 de julio.” 27 División, Ejército del Este La Trinchera Por Bizén D’o Río Martínez. Diario del Alto Aragón del 15 de octubre del 2006.

http://www.griegc.com/2020/04/01/las-lineas-de-fortificacion-republicanas-en-la-provincia-de-huesca/

Por Robres también pasaron las milicias republicanas del POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista), dirección a Alcubierre, según el relato de Manuel Grossi (Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial). Grossi, al mando de la columna del POUM, junto a Jordi Arquer, narra en sus cartas cómo parte de la columna salió de Robres el 3 de agosto de 1936 hacía Alcubierre. Llegaron a Alcubierre desde Sariñena tras pasar por Grañen y Robres. En Grañen estuvieron el 1 de agosto y el 2 debieron de pasar por Robres.

Cortesía Ramón Hernando.

Con la llegada de las milicias del POUM sucedió un trágico suceso. Varias personas que iban en busca del cura de Robres fueron interceptadas por la milicia del POUM. Manuel Benito Moliner, en su artículo “Robres, dos relatos para una historia” recogió el testimonio de  Luis Maynard: “Lo conocí a través de nuestro común amigo Pedro González. Es un militar a la vieja usanza: cordial, caballero y sin que los años afecten a su firmeza espiritual y corporal. Luis era carlista y por tanto estuvo desde el primer momento con los sublevados en Zaragoza, iba –y va- todos los días a misa y lo tenía muy claro: los rojos en cuanto pudieran quemarían las iglesias y destruirían la religión. Vivía con su familia junto al Centro Requeté y desde allí el 19 de julio de 1936 organizaban patrullas que vigilaban los templos zaragozanos para evitar al “camarada llamarada”. Lo que mejor recuerda de esos momentos es a la gente que enseguida se solidarizó con ellos sacándoles pastas y vino para hacerles las guardias más llevaderas. Luego vinieron las patrullas por los alrededores para ir a rescatar a los curas. Un veintitantos de julio cayó enfermo, con fiebre y un malestar que le postró en la cama. Sus amigos, sus camaradas del alma, lo fueron a buscar, tenían la difícil misión de salvar a un cura en Los Monegros, en un pueblo que se llamaba Robres a punto de caer en manos de los rojos. No los pudo acompañar, los despidió en la cama rogándoles que para la próxima contaran con él. Nunca los volvió a ver. Le contaron –siguiendo el tópico de la época- que los habrían cogido antes de llegar y después de hacerles toda clase de vejaciones a ellos y a sus despojos, los habrían tirado por allí. Durante años buscó informes. Le dijeron que si los habían llevado a Sariñena, pero preguntó en su Ayuntamiento y nada sabían. Era como si la Guerra se los hubiera tragado, no había manera de dar con sus restos y enterrarlos en la forma que ellos y sus familias hubieran querido.”

El blog de Miguel Antonio recuerda las vivencias de su padre en el artículo Guerra civil en Robres: “Papá tenía ocho años cuando estalló la guerra; en Robres el personaje más importante era «el Negus», comandante de las tropas leales a la República… «estaba en boca de los mayores su nombre se pronunciaba con admiración», en la Sierra se le dio el nombre de Negus al parapeto que estaba enfrente al de San Simón, que era el fascista, y digo fascista porque a las tropas franquistas le apoyaban Hitler y Mussolini, o sea Alemania y Francia , países que en 1936 tenían régimen fascista” (Miguel Antonio 123). Por rancia se debería de entender Italia pues hace mención a Mussolini.

Episodios de guerra

Los inicios en Robres fueron convulsos, incluso hasta después de la consolidación del frente los asesinatos y desmanes continuaron con la llegada de las milicias. El 7 de agosto de 1936 fue saqueada la iglesia parroquial “Y destruidas sus imágenes que fueron quemadas también en la plaza del pueblo” (Causa General de Robres). Muchos fueron asesinados, detenidos en Robres y llevados a Tardienta para ser fusilados. Todas las victimas aparecen en la causa General de Robres pero la información viene ampliada por Jesús Inglada Atarés en su artículo “Los robresinos víctimas de la guerra y de los campos nazis” publicada en el periódico de Robres “El Pimendón” y por Ramón Hernando.

  • Benigno Nieto, maestro nacional apresado en Robres y fusilado el 10 de agosto de 1936. El estallido de la guerra le sorprendió fuera de la localidad, de vacaciones escolares. Este maestro, que era de derechas, se había ido de Robres y se alistó en las fuerzas franquistas que tomaron Almudevar. En un enfrentamiento, cerca de Tardienta, fue hecho preso (preso de guerra) siendo fusilado el 10 de agosto 1936.
  • Valentín Gavín Pisa, fusilado cuando era conducido a Tardienta el 24 de agosto de 1936. Casado y con dos hijas, labrador de 54 años y natural de Robres. Fue detenido en el pueblo de Lalueza, el 21 de agosto de 1936. Su hija Mercedes Gavín Alpin, declaró que su padre fue llevado a Robres el día 24 y aquella noche lo mataron en Tardienta. Sospecha que participaron en el crimen Jesús Serreta Miro, Alejandro Becana Gros, Joaquín Brosed, Antonio Laporta, Francisco Brosed y Manuel Brosed. Testigos de la inscripción: Román Luna Otal y Gregorio Olivan  (Documento nº 26). Los autos nº 57 y 58 de Juan Merino Sánchez, guardia civil, dicen que “Siendo como corría peligro en Robres, se marchó a refugiarse a Lalueza, donde por orden del Comité fueron a detenerlo Ramón Rivases Cuello, Ángel Colomina y Sebastián Borbón”. Se lo llevaron en un coche hacia Robres y, según rumores, antes de llegar a Tardienta lo asesinaron.
  • Simeón Villacampa Pisa, fusilado el 7 de septiembre de 1936 en la plaza España de Robres. Casado y padre de cuatro hijos. Industrial carnicero de 43 años.
  • Martín Juan Olivan Lacruz, fusilado en Tardienta el 10 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos, labrador de 63 años y natural de Robres. Uno de sus hijos, Martín Juan Olivan Luid murió en la guerra. Su viuda Trinidad Luid Alcantara, declaró que su marido, de 63 años y labrador, afiliado a derechas, fue detenido por unos milicianos forasteros en su domicilio, en la cama, enfermo el día 10 de septiembre 1936. Estuvo tres o cuatro días en la cárcel del pueblo y después lo llevaron a Tardienta. Las personas sospechosas que participaron fueron los componentes del Comité de Robres. Testigos de la inscripción: dos firmas (Documento nº11).
  • Bautista Fajó Maza, fusilado el 11 de septiembre de 1936. Casado en terceras nupcias, dejando un hijo del primer matrimonio, tres del segundo y uno del tercero. Alcalde e industrial cafetero de 50 años. Su viuda Resti Talayero Villanueva declaró que su marido, de 50 años, fue detenido en su domicilio por Esteban Ribas y Andrés Brosed el día 7 de Septiembre de 1936. Siendo conducido a la cárcel del pueblo, salió al encuentro Pascual Gracia que lo quería matar. Los otros acompañantes no lo dejaron. Fue trasladado a Tardienta donde lo mataron. Las personas sospechosas que participaron fueron Antonio Laporta, Joaquín Brosed Sanz, Alejandro Becana Gros, Francisco Brosed Brosed, Manuel Brosed Brosed, Jesús Serreta y Vicente Maza y Pascual Gracia. El matrimonio tenía 5 hijos: Ricardo, Desiderio, Miguel, Araceli y Luis. Testigos de la inscripción Gregorio Oliva y Francisco Conte más la firma del juez Román Luna. (Documento nº 23).                   
  • Francisco Sieso Barrio fusilado en Tardienta el 11 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos. Concejal del Ayuntamiento y labrador de 38 años, natural de Robres. Su viuda Teodora Moreu Abardia, declaró que su marido de 38 años, labrador, fue detenido por Andres Brosed Sanz en el pajar de su propiedad el 8 de septiembre 1936, siendo conducido en un local del pueblo y más tarde a Tardienta donde fue asesinado. Las personas sospechosas que participaron en los hechos fueron Alejandro Becana Gros y Jesús Serreta Miro, además le consta que estos dos sujetos se presentaron en Tardienta a las autoridades rojas pidiendo y obligando que le asesinara. Tenían 5 hijos: Francisco, Alvaro, Amparo, Ángeles y Carmen. Los testigos de la inscripción fueron Gregorio Olivan y Francisco Conte.  Documento nº 17.
  • Andrés Mateo Langa fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Natural de La Muela, sacerdote de 36 años.
  • Timoteo Fajó Casaús, fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Casado y con dos hijos. Sacristán de 48 años.Su viuda María Cuello Brosed declaró que su marido de 48 años, sacristán, fue detenido en su domicilio por Andres Brosed con 4 milicianos desconocidos el 7 de Septiembre 1936. Fue conducido  a la cárcel del pueblo, llevándolo a Tardienta en unión de otros el día 10, siendo más tarde asesinado. Las personas sospechosas que participaron Antonio Laporta, Joaquín Brosed Sanz, Jesús Serreta Miro, Francisco Brosed Brosed, Manuel Brosed Brosed, Alejandro Becana Gros y Vicente Maza Abardia que intervinieron como denunciantes e influyeron realizando todo lo posible para que lo mataran, al igual que a otros del pueblo también muertos. Los testigos de la inscripción fueron Gregorio Oliva y Francisco Conte. (Documentos nº 13 y 19).
  • Joaquín Barrio Lacambra, fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos, herrero de 58 años. Su hijo Julio Barrio Novales declaró que su padre, de 60 años y carretero fue detenido por 4 milicianos desconocidos en su domicilio la noche del 7 de Septiembre 1936, llevado a Tardienta el día 10 por Jesús Serreta y Alejandro Becana. Las personas sospechosas de participar: Joaquín Brosed, Antonio Laporta, Miguel Granged, Francisco Brosed, Manuel Brosed, Alejandro Becana, Fidel Bolea Falces, Nicasio Becana Cebollero, Sebastiana Berdun Bolea y Manuel Ballarin Becana. Testigos de la inscripción: Gregorio Oliva y Francisco Conte. (Documento nº 28).
  • Domingo Berdum Pallás, fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos. Guarnicionero de 46 años y natural de Alcubierre. Su hijo Luis Berdun Franco declaró que “Su padre, de 46 años, guarnicionero fue detenido por Joaquín Brosed Sanz en su domicilio, siendo conducido el día 7 de septiembre 1936 a la cárcel de Tardienta donde allí fue asesinado. Las personas sospechosas que participaron fueron Joaquín Brosed Sanz, Alejandro Becana Gros, Jesús Serreta Miro y Antonio Laporta. El matrimonio tenía 5 hijos: Luis, Gloria, Araceli, Enrique y Eliseo. Testigos de la inscripción: Gregorio Oliva, Francisco Conte y Roman Luna como juez. Documento nº 24.
  • Mariano Barrio Otal, Se ignora su fecha y lugar aunque su inscripción en el Registro Civil de Robres se inscribió el 12 de septiembre de 1936. Casado y con seis hijos. Herrero de 42 años.Su viuda Sebastiana Serrano Capuj declaró que “Su marido de 41 años, herrero, fue detenido en su propio domicilio el 8 de septiembre 1936 por Andrés Brosed Sanz  con 5 milicianos desconocidos. Conducido a un local del pueblo y más tarde a Tardienta donde lo mataron. Las personas sospechosas que participaron fueron Joaquín Brosed Sanz,  Antonio Laporta, Manuel Brosed Brosed, Nicasio Becana Cebollero, Alejandro Becana Gros, Jesús Serreta Miro y Vicente Maza Abardia. El matrimonio tenía 6 hijos: Carmen,  Gerónimo, Eliada, Cruz, Pilar y Manuel. Testigos de la inscripción Gregorio Oliva y Francisco Conte.  (Documento Nº 18).
  • Joaquín Oto Serreta, fusilado en Tardienta el 20 de octubre de 1936. Casado y con dos hijos, comerciante e industrial de 60 años y natural de Robres. Aafiliado a Acción Ciudadana, fue detenido en su domicilio el 28 de Julio 1936 por Antonio Laporta, Joaquín Oto Guiseris y Miguel Granged Berdùn; según declaración de su viuda Magdalena Portoles Vinas. Fue conducido al pueblo de Alcubierre hasta que, el 15 de septiembre, fue trasladado a Tardienta donde quedo detenido hasta el día 20 cuando fue asesinado. Las personas sospechosas que participación en el crimen: Fermín Otal y su esposa, Joaquín Brosed Sanz, Alejandro Becana Gros, Jesús Serreta  Frontinan y Manuel Brosed Brosed; todos del comité. Testigos de la inscripción: Mariano Abardia Ortas y Francisco Conte López (Documento nº 21).
  • Ángel Oto Portolés, fusilado en Tardienta el 20 de octubre de 1936 junto a su padre Joaquín Oto Serreta. Soltero y natural de Zaragoza. Perito de marina de 33 años de edad. Fue detenido en el domicilio familiar con su padre el 28 de Julio 1936, por las mismas personas nombradas, según declaración de su madre Magdalena Portoles Vinas. Lo llevaron también a Alcubierre y después fue asesinado en el mismo día con su padre. Las personas sospechosas que participación fueron las mismas que con su padre más José Villacampa El Albañil. Los testigos de la inscripción fueron los mismos que para el padre (Documento nº 9 y 22).                 
  • Jesús Oto Portolés, fue detenido en Robres y fusilado en Sariñena el 27 de julio de 1936. Era soltero y natural de Robres, aunque domiciliado en Zaragoza. Hijo de Joaquín Oto Serreta y hermano de Ángel Oto Portolés. Su madre Magdalena Portoles Vinas declaró que su hijo, de 28 años y perito de comercio, fue detenido el mismo día que su padre y su hermano, que se lo llevaron primero a Sariñena y después a Tardienta donde cree que presentaba heridas por armas de fuego y fue enterrado en ese pueblo. Personas sospechosas que participaron: Fermín Otal y Crisógono Capistros, con sus mujeres Antonia Berdun y Emilia Otal, todos los del “Ayuntamiento”, Lorenza Miro y Matías Serreta que comentaban sus muertes. Todos ellos se encuentran en libertad en el pueblo de Robres. (Documento nº 9)
  • Modesto Catón Sampériz, asesinado en Poleñino el 25 de marzo de 1938. Viudo y con dos hijos, labrador de 72 años y natural de Robres. Fue encontrado muerto por un tiro de bala en la cabeza el 25 de febrero de 1938, en el término de Poleñino. Su hija Filomena Catón Fustero afirmó que su padre, de 72 años, no fue detenido, pues se hallaba en el campo. No puede sospechar de personas por desconocer por completo lo ocurrido.  Lo encontraron en la sarda de Grañen (camino de Curbe/Poleñino). Dicen varios testimonios que se le habían escapados unas caballerías y, a pesar del bombardeo franquista, salió a buscarlas. En esa sarda habían llegado los moros de las tropas de Cabanellas, se puede suponer… El  expediente de Salamanca dice que lo encontraron muerto el día 25, las últimas personas civiles salieron de Robres el día 23 de Marzo 1938  al amanecer (Testimonio de Luisa Miro, quien salió de Robres para Cataluña con Rafaela Arazo). Las tropas republicanas se retiraron entre el 20 y el 22 de Marzo, fueron hacia Balaguer (Lérida), así, las tropas franquistas ya estaban en Robres el día 24. Los testimonio recogidos dicen que, al volver hacia Robres, lo cogieron los moros o las fuerzas franquistas, las caballerías  no aparecieron. Su hija dijo que lo mataron en Poleñino (Documento nº 27).

A los detenidos en Robres, entre el 7 y 9 de setiembre 1936, los llevaron a Tardienta en camiones miembros del comité acompañados de milicianos. Se sabe que era Antonio Laporta quien daba las órdenes de fusilar. Las viudas de estos robresinos citaron a los miembros del Comité de haber matado a sus maridos, más otros vecinos como Matías Serreta Frontinan, Vicente Maza Abardia, Emilio Otal o mujeres como Antonia Berdun, Lorenza Miro, Dorotea Matías… En estos documentos aparecen otros acusados por estas mujeres, pero todas nombran primero a Antonio Laporta salvo una, Antonia Monesma Lassiera, viuda de Simeón Villacampa, quien nombra como criminal a David Abardia Ortiz (Archivo Ramón Hernando y Folletos declaración del testigo, Salamanca  nº 20).Escrito de Magdalena Portoles Vinas, viuda de Joaquín Oto: Liberado el pueblo denuncio a Fermin Otal, Antonia Berdun  Emilia Otal  Crisógono Capistros, Matías Serreta y Fermín Otal de ser los responsables de los asesinatos de su marido y de sus dos hijos. Magdalena acusa al alcalde, al juez municipal y al jefe de la Falange local de proteger a esas personas por ser familia y primos hermanos y que los dejen en libertad en el pueblo. Expone sobre dos páginas, carta dirigida al Sr Fiscal Instructor de la Causa General de Huesca – Zaragoza. Carta firmada y escrita en Robres a 27 de Octubre 1941. (Autos de Salamanca números 14 y 15).

Placa a los caídos, Centro de Interpretación de la Guerra Civil en Aragón (Robres).

El caso del párroco Andrés Mateo Langa

En los primeros días que funcionó el Comité local, quisieron fusilar a Andrés Mateo Langa, el párroco de la localidad. Lo llevaron a las Afueras del pueblo. Antonio Hernando Villacampa, como responsable de la JSU de Robres, se opuso a ese acto. Después, el cura fue  secretario/escribiente de dicho comité hasta finales de Agosto 1936  (testimonio José María Aznarez). Fueron los milicianos de Sariñena que se lo llevaron bajo las ordenes de Antonio Laporta. Su hermana Cecilia certificó que su hermano fue detenido tres veces consecutivas siempre en libertad en el pueblo, la última vez el 8 de Septiembre 1936, cuando lo condujeron para ser asesinado. Cecilia declaró que los que practicaron la detención eran patrulleros de pueblos vecinos y no habitantes del pueblo. Las personas sospechosas fueron María “La Santera” y su esposo Andrés Brosed (Documento nº 32 y 33 Fiscal Causa General de Barcelona Gerona y Baleares).

El testimonio de Vicente Alcubierre Alamán, del 26 de Agosto 1942, dice que su amigo Andrés Mateo Langa, de 33 años de edad, cura párroco de Robres,  fue detenido por Joaquín Brosed, Antonio Laporta y Alejandro Becana el día 7 de septiembre 1936, conducido en un camión a Tardienta donde lo asesinaron. Personas sospechosas: Francisco Villacampa y todo el comité Revolucionario. Testigos para la inscripción: Vicente Alcubierre, el juez Julio Barrio y el secretario Luis Berdun (Documento nº 30).

Fantasmas de Durruti. Archivo Ramón Hernando

En la Nueva España del 9 de julio 1938 se da cuenta de una relación de los muchos religiosos asesinados en la diócesis de Huesca, entre los que aparecen varios sacerdotes que ejercían en la comarca de Los Monegros: “Se poseen datos plenamente comprobados y oficiales de los sacerdotes asesinados en esta Diócesis por las hordas marxistas durante su invasión y dominio”. En la diócesis de Huesca aparecen contabilizados 32, de ellos 8 responden a pueblos monegrinos: “don Andrés Mateo Langa, de Robres, don Alejandro Aguilló, Capellán en Tardienta; don Lorenzo José Buera Altemir, de Poleñino; don José Campo Vivas, de Grañén; don Eduardo Colay Bierge, Coadjutor de Sariñena; don Roberto Lavilla Buil, residente en Castejón de Monegros don Rafael Pano, de Valfarta; don Paulino Pejón Miguel, de Torres de Barbués…”

Víctor Pardo Lancina (Agnes Hodgson, A una milla de Huesca) apunta a que fueron 18 los religiosos asesinados en Los Monegros, a la anterior lista añade algunos como Eusebio Antolín Moliner, párroco beneficiado de La Almolda que acudió a refugiarse a Bujaraloz y murió fusilado el 30 de julio de 1936; Vicente Monserrat Millán, de 33 años y párroco de Villanueva de Sigena que fue fusilado aunque se barajan diferentes escenarios, también de Villanueva de Sigena el sacerdote encargado del monasterio Antonio Montull Carilla asesinado, el 1 de agosto de 1936, sobre el puente nuevo sobre el río Alcanadre donde recibió nueve balazos.

El caso de los maestros

La escuela en Robres, gracias a la valentía de una maestra permaneció abierta durante la guerra. Desalojaron el Granero de Primicias, donde daban clase las niñas y habilitaron el granero de casa Ribas. Las clases se dieron con “cierta regularidad” gracias a la maestra Victoria Artero y la ayuda de las exalumnas Ángeles More, Luz Ribas y Teresa Maza. El maestro nacional Benigno Nieto fue apresado en Robres y fusilado el 10 de agosto de 1936, por sus ideas derechistas, aunque Pedro Oliván “La Escuela de Robres en el siglo XX” (El Pimendón. Periódico de Robres) cita que fue fusilado en septiembre del mismo año en Tardienta. Ramón Hernando apunta que al estallar la guerra eran vacaciones escolares “Este maestro, que era de derechas, se había ido de Robres. Se alistó en las fuerzas franquistas que tomaron Almudévar. En un enfrentamiento cerca de Tardienta, fue hecho preso y fusilado el 10 de agosto 1936”. También fue fusilado el maestro Valeriano Estaún, en Huesca en 1936 mientras se encontraba en la capital altoaragonesa; detenido y fusilado por su pertenencia al sindicato UGT. Los casos del cura como del maestro desmienten claramente la versión oficial que mantuvo el régimen, señala Ramón Hernando.

La noche que mataron a Simeón Villacampa

“Laporta manda a fusilar unas cuantas personas, amenaza a los comunistas de Robres ya que se oponen a la colectivización de las tierras, me amenazó de muerte por oponerme al fusilamiento del cura, convocó a mi madre y miembros de mi familia para matarles (la noche que mataron a Simeón Villacampa)” (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988).

En plena plaza España de Robres, la noche del 7 de septiembre de 1936, apareció sin vida el cuerpo de Simeón Villacampa Pisa, natural de Robres. Contaba con 43 años de edad, casado y padre de cuatro hijos. Carnicero de profesión, llevaba negocios de carnes y era el proveedor de la zona para todos los milicianos republicanos. Eran tiempos de guerra.

Pronto las voces corrieron por el lugar, un miliciano había matado de un tiro a Simeón Villacampa Pisa desde la torre de la Iglesia. ¿Lo fusilaron los milicianos? nunca hubo salva de fusiles ni varios tiros de pistola, ¿Quién lo mato?, ¿Gente de Robres? ¿O miembros del Comité con Laporta? ¿O milicianos de Tardienta?. Hay algo extraño en su muerte, envidias, ajuste de cuentas…

Su prima Antonia Villacampa y otras personas de su entorno le avisaron de no salir esa noche, aquella que lo mataron en la esquina del Huescano, plaza del Plegadero. Sabiendo, en periodo de guerra, si uno no se presenta a una convocatoria los propios milicianos van a buscar a la gente casa por casa y si fusilan se oye la salva de los fusiles. No fue así, dos tiros.

Desde esa misma esquina ni siquiera se ve la torre de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Tiempos de guerra, convulsos, de rencillas o recelos entre personas, por llevarse bien con algunos y mal con otros, incluso se rumeaba que Simeón tenía carnet de falangista.

Aquella noche del 7 de septiembre de 1936, el comité local había convocado a varias personas que se oponían a la colectivización, todas ellas vinculadas al Partido Comunista de la localidad. Entre ellas Antonia Villacampa Susin, Fernando Arazo Cuello, Anselmo Conte y al mismo Siméon Villacampa Pisa. “Laporta manda a fusilar unas cuantas personas, amenaza a los comunistas de Robres, ya que se oponen a la colectivización de las tierras, me amenazó de muerte por oponerme al fusilamiento del cura, convocó a mi madre y miembros de mi familia para matarles (La noche que mataron a Simeón Villacampa. Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988).

En verdad, todo se remonta a que Laporta había sido acusado públicamente de ser un ladrón, de aprovechar su pertenencia a la FAI para robar los bienes de los robresinos. Los principales acusadores fueron Antonia Villacampa, Francisco Arazo y su esposa Adelaida Cuello Cuello, Anselmo Conte y otras familias, en particular todos los comunistas de Robres. A Antonia Villacampa Susín, Laporta quería condenar a muerte. A otras mujeres les amenazó con detenerlas, a Manuela Fajo Casaus  esposa de Anselmo Conte y prima hermana de Antonia; Juliana Gavín Villacampa  “La Comadre” hija de Engracia Villacampa (También comadre), prima hermana de Antonia y esposa de Domingo Moreu y Rosa Lassiera.

Al parecer, los bienes robados eran enviados a Tardienta donde los cargaban en camiones dirección Barcelona para venderlos para el bien de la CNT (Archivo de  Madrid). Curiosamente, el hermano de Simeón, Antonio Villacampa Pisa, pertenecía a la CNT y formaba parte del Comité Local, del que incluso llegó a ser Juez Municipal. Al parecer no dijo nada, cuestión que parece extraña, incluso una fuente oral dice que Antonio tiene que ver en ese asesinato.

Los expedientes del caso de Simeón Villacampa Pisa

El asesinato de Simeón Villacampa Pisa guarda varios interrogantes que resolver, principalmente el de su autor o autores. Una verdad que en los distintos expedientes parece quererse asomar pero no llega a aflorar del todo. Antonia Monesma Lasierra, viuda de Simeón Villacampa, curiosamente acusó a David Abardia Ortiz, también carnicero de Robres (Documento del Archivo de Salamanca. Causa General  nº 20). De la misma manera se manifiestan otros dos documentos de la Comisaria de Huesca que recogen como David Abardia Ortiz y Manuel Brosed Brosed manifestaron que “Han matado a Simeón Villacampa” (Documentos Archivo Comisaria de Huesca nº 631 y 677). Ellos dos lo reconocen y firman delante del comisario Claudio Villacampa (Alberuela de Tubo). Otro informe oral dice que Simeón tenía problemas personales con David Abardia. Quizá, ambos expedientes nº 631 y 677, de los Archivos Comisaria de la Huesca, fueron forzados por la policía o Falange.

David Abardia Ortiz fue condenado por el Tribunal por “Exaltación Marxista” a seis años de cárcel (Expediente de Responsabilidades Políticas de Huesca). No obstante, el tribunal no menciona a ningún momento el asesinato de Simeón Villacampa –¿Por qué?-. Todo a pesar de tener las acusaciones de su viuda y las declaraciones hechas por David Abardia y Manuel Brosed Brosed (Documentos de Salamanca y Comisaria de Huesca nº 631 y 677). Manuel Brosed Brosed fue fusilado en 1942.

Sin embargo, los autos nº 47 y 48 del guardia civil Juan Merino Sánchez, Comandante del puesto de Alcubierre, describe claramente que fue el presidente del comité local Antonio Laporta con otros del comité quienes se liaron a tiros con Simeón Villacampa: “El día 8 de Septiembre 1936, Simeón fue llamado al local que servía de oficina al Comité por el Presidente Antonio Laporta  sobre las 22 horas, haciéndole saber que para él no había carne, etc que se podía marchar cuando quisiera, al salir a la calle, empezaron a tiros con él, hasta que cayó muerto. Un tal Rodríguez, natural de Villanueva i Geltru,  fue el que le dio el  tiro de gracia”. Curiosamente este auto de acusación no apareció en el Tribunal de Huesca.  Este documento no aparece en las condenas de David Abardia y de Manuel Brosed Brosed.

La verdad, dicen que es la primera víctima de las guerras, una de las muchas. El asesinato de Simeón Villacampa Pisa continúa siendo un misterio, con sus dudas y sospechas, viejas heridas  de las que hablar es la mejor manera de cerrarlas, para superar uno de los más tristes episodios de la reciente historia de España.

Hechos desencadenados

Aquel 7 de septiembre de 1936 se produjeron diversas detenciones en Robres, generando una gran tensión en la localidad en contra del comité y de Laporta. El guardia civil Juan Merino Sánchez (Causa General  autos Nº 35 a 60), confirmó las detenciones del 7 y 8 de septiembre de 1936, las de Mariano Barrio Otal, Domingo Berdún Pallas, Ángel Oto Portolés, Timoteo Fajo Casaus, Bautista Fajo Casaus, Francisco Sieso Barrio, Ángel Mateo L, Joaquín Oto Serreta, Martin Olivan Lacruz y Joaquín Barrio Lacambra. Merino señaló a los sospechosos de las detenciones en esos autos. Todo acabó desencadenando que, entre finales de Setiembre y primeros días de octubre de 1936, de la sierra bajase un grupo importante de milicianos armados que se enfrentaron al comité local al lado de los comunistas de Robres, produciéndose enfrentamiento de forma oral.

Los milicianos pidieron al Comité llevar las cosas con más tranquilidad con la población civil, de no llegar a una guerra interna. ¿Quién llamo a estos milicianos?, ¿Eran de la 27* División o de la Carlo Marx?. Muchos de ellos vivían en las casas republicanas del pueblo, bajaban y subían a las trincheras. Aunque la Carlos Marx estaba en Torralba de Aragón, algunos de ellos vivían en Robres (Testimonio de un Catalán cuyo padre murió en Torralba pero dormía y comía en Robres). ¿Fue Esteban Rivas, como secretario del Partido, quien intervino para que vinieran? ¿y/o quizá familias que se quejaron directamente a los soldados de la sierra?.

Tenemos pocos informes sobre la manera de gobierno del comité revolucionario rocal, entre el mes de Julio 1936 hasta el mes de Febrero 1937, tanto la situación revolucionaria y de insurrección y que función exacta tuvieron los partidos (Partido Comunista  -Socialista- Izquierda Republicana) durante ese periodo, papel político de la CNT/FAI para implantar el comunismo primitivo, colectivización de los bienes mobiliarios y tierras, requisas de cosechas y otros bienes, erradicar la religión, nada de bautizos, casamientos civiles, perseguir curas, sacristanes, ricos, personas de derechas… hacer desaparecer “el Mundo Viejo”. Todo encontró un terreno favorable con los rompe/márgenes de Robres herederos del movimiento canalista.

Caso del Falangista hecho preso en la Sierra de Robres

En octubre de 1936 fue hecho prisionero y después asesinado en el pueblo de Robres “una persona desconocida con el grado de Teniente, de Ejea de los Caballeros y según referencia del parche es o era Teniente de la Guardia Civil y un hermano en Madrid”. Según la Causa General, el prisionero presentaba una pierna rota, desconociendo su edad y cuya afiliación política se le desconocía. Su muerte no fue inscrita en el registro civil y de profesión aparece anotado “Se dice que era herrero”. Manuel Benito Moliner, en su artículo “Robres, dos relatos para una historia”, recogió el testimonio de Domingo Brosed de Robres “Cuenta la historia de un militar que lo apresaron en la Sierra y lo condenaron a muerte: -aquello fue una barbaridad, con meterlo en la cárcel sobraba. Luego además vinieron las represalias y murieron más inocentes. Absurdo-”.

Ramón Hernando lo sitúa el 28 de Noviembre 1936. Entre los montes de San Simón y de La Pasionaria hicieron preso a un falangista. Lo bajaron herido a Robres y al parecer era teniente y marques. Fue entregado al Comité Revolucionario, tenía una pierna rota y lo llevaron al cementerio con un volquete. En el “asesinato” intervino Nicasio Becana y lo presenció Joaquín Lacruz (carta firmada el 28 de Octubre 1940 por Luis Berdun. Documento Nº 8. Jefe Local de Robres de la Falange Española Tradicionalista y de las JONS).

En el auto nº 43 de la cárcel de Torrero dice que Nicasio Becana, con Antonio Laporta,  intervino en el asesinato de un teniente del Ejército Nacional hecho prisionero en la posición de San Simón el 28 de noviembre 1936, llevado al cementerio matándole allí.

En el auto nº674 de Huesca  se acusa a Pascual Serrano Capuj, que prestó numerosos servicios armados al Comité de Enlace de intervenir en la ejecución de un falangista herido hecho prisionero y apoderándose de él, en el cementerio del pueblo y que con otras personas lo mataron a tiros.

En otro documento de Huesca se acusa también a Manuel Brosed Brosed (Archivo Ramón Hernando).

La guerra se va sucediendo

La guerra fue sucediéndose y esta fue quedando recogida en los distintos medios de información. En distintos medios aparecen diferentes informaciones que van dando cuenta del desarrollo del frente en Robres, fuegos cruzados, ligeros tiroteos, deserciones, calma en el frente…    

  • Entre Robres y Alcubierre es rechazado el enemigo en un nuevo intento de ataque (La Vanguardia 15 de octubre de 1936).
  • En octubre de 1936 la Columna Carlos Marx perdió Puig Ladrón, pero contuvo la ofensiva en Robres y Torralba, desbaratando el movimiento envolvente contra Tardienta (Durruti en el laberinto. Miquel Amorós).
  • En el sector de Alcubierre ha renacido la calma después del combate de hace 24 horas. Al amanecer, el coronel Villalba ha recorrido este frente, haciéndose cargo de la situación de nuestras avanzadillas y mostrándose satisfecha de la disciplina y entusiasmo de nuestras fuerzas. Después se ha trasladado al sector de Robres. La situación es buena en este sector. (La Vanguardia 30 de octubre de 1936).
  • Sector de Huesca. Entre Robres y Alcubierre se ha repelido al enemigo en un nuevo intento de ataque. (Diario de Barcelona 15 de octubre de 1936).
  • Bajas y deserciones del enemigo. Barbastro. Nuestras ambulancias han recogido unos 30 cadáveres de elementos facciosos en el sector de Robres, donde las fuerzas leales han desalojado de posiciones lejanas al enemigo y han perseguido lejanamente. Tres soldados de la guarnición de Huesca han pasado a nuestras filas. Dicen que la vida en Huesca es imposible, además de la falta de agua se ha declarado una fuerte epidemia de sarna. Front: òrgan del Partit Obrer d’Unificació Marxista. 11 de noviembre de 1936.
  • Parte de guerra del sector Norte Barbastro, 30. En el cuartel general del sector de Huesca ha sido facilitado a última hora el siguiente parte de guerra: «El enemigo atacó duramente nuestras posiciones entre el sur de Puig Ladrón y observatorio de artillería de Robres, durando el ataque hasta las cuatro de la madrugada, en que fue totalmente rechazado, con numerosas bajas vistas. Durante todo el día se ha observado que sus servicios sanitarios intentaban retirar del campo a sus muertos y heridos. No hay más novedad. (La Vanguardia 31 de octubre de 1936).
  • «En los sectores de Alcubierre, Tierz, Fornillos y Robres, ligeros tiroteos sin consecuencias, y en este último la artillería leal hizo fuego sobre posiciones enemigas, con gran eficacia. Resto del frente, sin novedad.» (La Vanguardia 8 de noviembre de 1936).
  • En el sector de Barbastro (Huesca), hay tranquilidad. Solamente, durante la noche anterior, hubo una lucha, bastante intensa, en la línea de Robres a la Sierra de Alcubierre. El enemigo inició un pequeño ataque que fue rechazado enérgicamente por nuestras fuerzas apenas iniciado, e inmediatamente hemos emprendido el contraataque, manteniendo la iniciativa por nuestra parte y desalojando al enemigo no solo de las posiciones que había intentado tomarnos, sino que se le obligó a retroceder hasta posiciones mucho más internadas en sus líneas. Durante esta operación, el enemigo ha sufrido un gran número de bajas castigándosele duramente  (La Vanguardia 11 de noviembre de 1936).
  • Barbastro.–Nuestras ambulancias han recogido más de 30 cadáveres de facciosos abandonados en el sector de Robres, donde las fuerzas leales desalojaron al enemigo de sus posiciones (La Vanguardia 12 de noviembre de 1936).
  • En el sector de Robres, tiroteos de fusil y ametralladora (La Vanguardia 19 de enero de 1937).
  • «Circunscripción Norte.—En Robres, en la tarde de ayer, hubo cañoneo enemigo sobre nuestras líneas, disparándose además seis granadas de mortero sin consecuencias(La Vanguardia 2 de febrero de 1937).
  • En Robres se han pasado a nuestras filas tres soldados del Tercio Sanjurjo. (La Vanguardia 23 de febrero de 1937).
  • En los subsectores de, Tardienta, Robres y Alcubierre, intenso fuego de fusil, ametralladora y duelo de artillería. En los mencionados subsectores se han pasado a nuestras filas 18 soldados procedentes del campo rebelde. (La Vanguardia 16 de abril de 1937).
  • La lucha en Aragón Comunicados del Consejero da Defensa a S. E. el Presidente de Cataluña Intenso fuego de fusil, mortero y artillería en nuestras posiciones del Este y Nordeste de Huesca. Igualmente tiroteos y duelos de artillería en el subsector de Robres y Tardienta. Por la sierra de Alcubierre se han pasado a nuestras filas un jefe de escuadra y un falangista con armamento. En el resto del frente, sin novedad. (La Vanguardia 17 de abril de 1937).
  • Fuego de fusilería y ametralladora en los subsectores de Alcubierre, Robres y Tardienta. (La Vanguardia 18 de abril de 1937).
  • Fuertes tiroteos de fusil ametralladora en e1 subsector de Robres, así como en Tardienta y Alcubierre. (La Vanguardia 24 de abril de 1937).
  • Fuerte tiroteo de fusil ametralladora al subsector de Robres, Tardienta y Alcubierre.  Diario de Barcelona 24  de abril de 1937.
  • Avisos. Eloy Gibaja: Diagonal, 442, 1.° desea conocer noticias acerca  de su hijo Hipólito Gibaja,  27  División, 123  Brigada Mixta,  2,°  Batallón Ametralladoras: Robres sector Tardienta. Euzkadi en Catalunya 12 de junio de 1937.
  • Van a evacuar Alcubierre y el Estado Mayor se trasladará a Robres. 7 de julio de 1937. Agnes Hodgson, A una milla de Huesca. Víctor Pardo Lancina.
  • La Vanguardia 20 noviembre de 1937 En el sector de Robres los leales vuelan una pieza enemiga. Robres, 19. Nuestras baterías han disparado sobre las posiciones enemigas de El Pedruso. Contestaron los facciosos descubriendo sus emplazamientos sin hacer fuego sobre Suelta Alta. Entonces las artillerías leales afinaron la puntería, localizando una pieza instalada en el Pedroso, cayendo algunos proyectiles en el mismo emplazamiento provocando una explosión, a la vez que se levantaba densa columnas de humo, restableciéndose a partir de entonces la calma en ambos sectores.  También dispararon nuestros soldados sobre el blocao de El Pedroso, ignorándose el resultado, aunque se vio como salían corriendo algunos soldados.

«En el pueblo de Tardienta estuvimos tres días y, en la noche del tercero, nos trasladaron en camiones al pueblo de Robres. En ese pueblo había población civil y eran muy buenas gentes. Por poco dinero, en cualquier casa del pueblo, te daban un buen trozo de pan, tocino frito y vinillo de la tierra.

No fue una marcha muy larga porque, aunque en el pueblo de Robres había población civil, el frente no se encontraba lejos. El pueblo se encontraba muy bien resguardado por la sierra de Alcubierre.

Llegamos a las trincheras y a mi pelotón lo mandaron al parapeto del Negus, que estaba situado en el monte más alto de aquella sierra y que nos costó trabajo escalar. El parapeto era una fortificación circular rodeada de alambradas de espino, y en las trincheras estaban las chabolas para dormir y descansar. Se hizo el relevo, y los hombres que marchaban relevados tenían la barba muy crecida, parecían mis padres; salieron corriendo monte abajo demostrando alegría y gastándose bromas entre ellos.»

Morales Torres, A. (2009): Recuerdos de guerra y represión de un miliciano malagueño, Sevilla: Federación Local de Sindicatos de la CGT de Málaga.

A Manuel Benito Moliner, el robresino Domingo Brosed le contó sus vivencias durante la guerra en Robres: “Recogimos a Domingo Brosed y a su nieta en Robres y desde allí nos encaminamos a lo más belicoso de la Sierra de Alcubierre con sus tres famosas cotas: La Pasionaria, El Negus y La Imposible, unas pegadas a las otras. Con sus ochenta y muchos años se adentró por la espesura del monte, siguiendo una senda que pronto quedó borrada, hasta alcanzar un claro donde había restos de construcciones y algunas pequeñas cuevas. Domingo es un hombre bueno, se le nota al hablar de los que mataron en su pueblo. Mientras se mete en un pequeño hoyo me dice: “aquí tenía yo la maxim, una ametralladora soviética que manejaba con el amigo Guiseris que hoy vive en Lérida”. Con el índice señala el emplazamiento de la casamata del famoso Negus, la cocina, los refugios… Como Orwell estuvo a unos pocos kilómetros de aquí, en el Monte Irazo, encima de donde han hecho las trincheras modernas, no puedo por menos que preguntarle sí era verdad que todo estaba lleno de ratas y deposiciones, se queda extrañado: “Aquí estábamos en el monte, no lo ve. Podías hacer tus necesidades lejos, teniendo cuidado de no ponerte a tiro. No íbamos a ser tan marranos de evacuar donde tantas horas pasábamos, eso ocurrió por el Ebro cuando entre los francotiradores, los aviones y la artillería no te dejaban mover… aquí no, era como cuando íbamos al campo a trabajar”.

Domingo Brosed, en sus historias dio luz al relato que Manuel Benito había escuchado a Luis Maynard “En Robres había uno de Casa Anzano que era el jefe de la Falange en el pueblo, como veía que los obreros y labradores pobres, poco a poco, nos íbamos organizando para mantener la legalidad y nada podían hacer, decidió marchar a Zaragoza por Tardienta. No le dijimos nada, además se llevó a su mujer que estaba embarazada. Nos llegaron noticias de que se acercaban los primeros milicianos desde Cataluña por la Carretera de Monzón y fuimos a Alcubierre a verlos. Estaban llegando y ante la proximidad del pueblo se desplegaron por los campos. En un automóvil, delante, iba uno que parecía tener mando y al poco rato llegó por dirección contraria un coche grande o una camioneta con varios elementos fascistas de Zaragoza, entre ellos el tal Anzano de Robres. Los del POUM los mandaron parar y los falangistas que querían seguir, el propio Anzano les dijo que había pasado por Tardienta y nadie le había dicho nada. Entonces el jefe del POUM con una media sonrisa y haciendo una contraseña convenida, le dijo que sería mejor que bajaran, señalando a toda la columna que se iba asomando a la carretera. No les quedó más remedio que rendirse y en el mismo vehículo se los llevaron por la carretera de Lanaja, donde los fusilaron sin más. Luego vinieron tantos cadáveres y bombas que ya nadie se acordó de ellos, ni siquiera los nacionales que eran tan cumplidos con sus muertos. En Casa de Anzano, en Robres, mataron un cordero y prepararon una buena mesa para recibir a su hijo. Pero nunca más lo vieron, hubo que decírselo…”.

Uno de los amigos de Luis Maynar fue Tomás Aguilar Refusta, que permanece enterrado en la fosa común el cementerio municipal de Sariñena, quizá con sus otros compañeros. Manuel Maynar Aguilar, nieto de Tomas y sobrino de Luis, relata sobre su abuelo “Otra buena persona, cuyo único delito fue tener coche y llevar a unos amigos desde Zaragoza a Robres para recoger al cura del pueblo antes de que la zona cayese en poder de las fuerzas paramilitares que avanzaban desde Cataluña para combatir a los insurrectos en Aragón. Y no se llevó también por delante a mi tío Luis Maynar Ferrer porque una alta fiebre le impidió acompañarle siendo sustituido por otro de los allí enterrados”. La captura de Tomás Aguilar Refusta y sus compañeros debió de ser el día dos o tres de agosto de 1936. No llegaron a Robres ni consiguieron salvar la vida al cura, al anteriormente citado Andrés Mateo Langa fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936.  En la misma fosa común de Tomás Aguilar Refusta, del cementerio de Sariñena, descansa también Jesús Oto Portolés, anteriormente mencionado entro los robresinos detenidos y fusilados.

Robres, pueblo del frente

En marzo de 1937 la Republica ordenó la disolución de los comités revolucionarios, en Robres hubo elecciones municipales saliendo como alcalde Pascual Serrano (el Tuerto de Gerónimo), Crisógono Capistros de secretario y como concejales Joaquín Lacruz (Capuj), Nicasio Becana Cebollero (el Habanero), José Otín Pueyo, Ramon Cuello Lafita, Joaquín Subías, Victoriano Serrano, Ramon Cuello Lafita (delegado de abastos), Francisco Arazo Canudas, Máximo Becana Mur etc. Este nuevo Ayuntamiento funcionó con toda normalidad hasta el 23 de marzo de 1938, eran casi todos comunistas.

En Robres se instaló un centro de intendencia que abasteció a las posiciones cercanas, Manuel Grossi lo recogió en sus Cartas “En Robres además de la Colectividad Agrícola se formó un Comité de Abastos, que comenzó a organizar la vida del pueblo resolviendo las necesidades que se suscitan en todo movimiento”. Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial. Además Grossi escribió “En Robres se ha dado vida a la colectividad Agrícola, mediante asamblea, democráticamente, donde los campesinos han sabido plantear la iniciación de cómo se debían de encauzar y resolver sus problemas”. Lo cierto es que Robres había sido una localidad con la tierra bastante repartida y la colectivización no fue tan idílica según los testimonios locales. Joaquim Pisa Carilla en su obra “Las cenizas del sueño eterno: Lanaja, 1936-1948” señala: “establecieron una colectividad la misma tarde que llegaron los milicianos del POUM, al mando de Manuel Grossi plantearon la colectivización que aprobaron en asamblea los vecinos de Robres -Hacer acto de presencia, pero solo como principio de iniciativa-”. Al final, en Robres se creó una colectividad marcada por el Partido Comunista. Víctor Pardo Lancina apunta que la colectividad de Robres fue creada el 1 de agosto “Al tiempo que se nombraba un comité de abastos” (Agnes Hodgson, A una milla de Huesca), además de considerar que Robres fue una de las muchas localidades que emitieron moneda propia o vales para el intercambio de sus productos.

Se atendieron a los heridos del frente. En la Documentación referenciada en el Fichero General de la Delegación Nacional de Servicios Documentales se hace referencia a la Célula Sanitaria del Partido Socialista Unificado de Robres. En dicha documentación aparecen informes enviados por el Estado Mayor de la División Carlos Marx, de las Milicias Antifascistas de Cataluña relativos a la situación en el Frente, a las células sanitarias del Partit Socialista Unificat de Catalunya en Sariñena, Grañén, Almuniente, Tardienta, Torralba de Aragón, Robres y Lanaja. Entre aquellos papeles acompaña copia del acta de la reunión celebrada por la Célula de Tardienta el 30 de noviembre de 1936  

En Robres se debieron de dar las primeras atenciones médicas después de los primeros auxilios en el frente, en primera línea, para su posterior evacuación a los hospitales de sangre de retaguardia, como los de Grañen, Poleñino o Sariñena. Robres, sanitariamente respondió al sector norte dependiente de Sariñena.

La enfermera Agnes Hodgson recogió dos referencias sobre Robres, la primera el 22 de marzo de 1937 “Han traído un caso de herida en la cabeza, aunque no demasiado grave; estaba durmiendo en una habitación en Robres  cuando estalló una bomba, y resultó con un par de heridas superficiales a cada lado de la cabeza”. La segunda el 17 de julio de 1937 “Se rumorea que el ataque de la sierra de Robres ha finalizado, y que no se trataba de un ataque en serio, sino de una distracción para aliviar el aburrimiento de las tropas” (Diario de Agnes Hodgson, A una milla de Huesca. Víctor Pardo Lancina).

Iglesia de Robres

Se instaló un refugio antiaéreo bajo la iglesia, pero también en el frente se escavaron cuevas para protegerse. Muchos milicianos se parapetaban de la aviación en los barrancos por la subida de san Blas a las posiciones de la sierra. Era el camino de suministro al frente desde la intendencia de Robres. Milicianos se quedaban en casas y pajares y subían al frente por la cuesta de san Blas, hasta la posiciones de La Pajera donde se situaban las trincheras frente las posiciones del bando nacional.

“En verano de 1937 editaban un periódico quincenal desde la sierra, Vencer, dirigido por el periodista Avelino Artís Gener, Tísner, compañero de Arendt (Erich)” (El Hospital Inglés de Grañén. Julián Jesús Castiella Hernández, Pablo J. Castiella Guerrero.

“Tísner” Avelí Artís Gener, periodista, dibujante, pintor y escritor, recoge Víctor Pardo Lancina en su artículo Vademécum de la contienda [Presentación de libro de José Luis Melero Rivas en el Museo Pedagógico de Aragón y en Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza]. “Militante del PSUC, se enroló en la 123 Brigada Mixta de la División «Carlos Marx», que luego sería la 27 División con la creación del Ejército Popular. Combatió en Sariñena, Almuniente, Robres (donde se había establecido el Estado Mayor de la unidad), la ermita de Magallón, la Sierra de Alcubierre…”. Avelí lo contó en su relato autobiográfico sobre la Guerra Civil titulado 556 Brigada Mixta.”Esta «556 Brigada» nunca existió en organigrama alguno del Ejército Popular, pero el autor, tras cambiar los nombres verdaderos de los protagonistas de su novela, también quiso escamotearnos la verdadera identidad de la unidad de combate”, expone Víctor Pardo Lancina. 

El 24 de marzo de 1938 fue incendiado el edificio de horno de cocer pan, desconociendo quienes fueron los autores”. El horno era propiedad de Pascual Pisa Lacruz, “con domicilio en Zaragoza” (Causa General de Robres).

En febrero 1938, poco antes de la caída del frente de Aragón, tuvo lugar la reunión del sindicato agrario de la CNT de Robres, los grandes dueños fueron convocados pero no se presentaron (Archivo Ramón Hernando).

Consejo municipal

En marzo de 1937 la Republica ordenó la disolución de los comités revolucionarios, en Robres hubo elecciones municipales saliendo como Alcalde Pascual Serrano (el Tuerto de Gerónimo), Capistros Crisogono de secretario y como concejales Joaquín Lacruz (Capuj), Nicasio Becana Cebollero (el Habanero), José Otín Puyeo, Ramon Cuello Lafita, Joaquín Subias, Victoriano Serrano, Ramon Cuello Lafita (delegado de abastos), Francisco Arazo Canudas, Maximo Becana Mur etc. Este nuevo Ayuntamiento funcionó con toda normalidad hasta el 23 de marzo de 1938, eran casi todos comunistas.

Finales de la guerra

El día 1 febrero 1938, poco antes de la caída del frente de Aragón, tuvo lugar la reunión del sindicato agrario de la CNT de Robres, calle Argensola, los grandes propietarios fueron convocados, pero no se presentaron (Archivo Ramon Hernando).

Llamada Junta Administrativa presidente Segismundo Brosed Otal, vicepresidente  Jesús Becana Gros, secretario Abel Larras Canudas, vice- secretario Vicente García Cavero, contador Cosme Oto Guarga, tesorero Ramon Brosed Brosed, bibliotecario Cándido Brosed. Asisten Manuel Brosed Brosed, Andrés Brosed, Fidel Brosed, Fidel Bolea , Juan Ruiz,  Gregorio Brosed. Los ricos o derechas que fueron convocados el 15 de febrero 1938, no se presentaron. Por la Junta Calificadora de la reforma agraria Román Otal Luna, Vicente Maza Abardia, Antonio Pano Santafé, Ramon Serrano Anzano, Francisco Luna Oto, Vicente Alcubierre Alaman, Joaquín Barrio Lacambra, Joaquín Oto Serreta, Nicolas Pertusa Pisa, Pedro Giménez, Francisco Sieso Barrio, Manuel Abardia Pano, Antonio Pano Santafé y Manuel Abardia Pano se encontraban en el monte , fueron avisados por el Alguacil , Ramon Serrano Anzano firmo el recibo en su casa pero no vino tampoco, firma el presidente de la Junta Joaquín Subías (Archivo Ramon Hernando).

Nota: Cándido Brosed, soltero, al irse de Robres se alisto en el Ejercito Nacional en Zaragoza, enviado a Pamplona logró a huir y pasar a Francia donde murió.

La caída del frente

El 8 de marzo comenzó la ofensiva del bando nacional rompiendo el frente y propiciando la retirada de tropas republicanas. Las últimas personas que salieron de Robres fue el día 23 al amanecer (Notas de Ramón Hernando. Testimonio de Luisa Miro). El 25 de marzo de 1938 Robres sufrió un intenso bombardeo, ametrallando a la población civil durante su huida de la localidad “mientras trataba de huir hacia los campos del entorno” (Agnes Hodgson, A una milla de Huesca. Víctor Pardo Lancina). Avelí Artís Gener en su libro 556 Brigada Mixta (Avance, 1975) confunde el bombardeo de Alcubierre con el de Robres. José Luis Dumas Brosed, que cuando comenzó la guerra tenía 8 años, relata en El Pimendón, Periódico de Robres, que Robres fue bombardeada en dos o tres ocasiones. “Muchas casas del pueblo fueron escachadas por los bombardeos” y, cree recordar, “que solamente murió un hijo de don Goyo, el practicante y barbero, que estaba en la torre para dar la alarma cuando vieran aviones y tuvo la mala suerte que una bomba dio en el chapitel”.

El blog de Miguel Antonio en la Guerra civil española en Robres también hace mención a aquel episodio: “Papa recordaba bien los bombardeos que sufrió Robres, cuando se producían los ataques aéreos, se hacía sonar la campana del pueblo y los vecinos iban a refugiarse a cuervas, la escuela estaba situada en el edificio que hoy es de la «tercera edad», así es que la cueva más próxima estaba debajo de la iglesia, junto a casa de Andresico… en uno de los bombardeos murió un hermano de Goyo el barbero cuando tocaba la campana para avisar de la llegada de los aviones”.

Robres sufrió varios bombardeos, recogidos por José María Maldonado en “Aragón bajo las bombas, Gobierno de Aragón, colección Amarga Memoria. 2009.” El primero 3 aviones el 22 de noviembre de 1937; el segundo 8 S.81 160×50 Kg el 10 de diciembre del mismo año, como objetivo el pueblo y al día siguiente el tercer bombardeo sobre concentraciones de tropas, a las 11:55 horas y fue ejecutado por 9 S81 108×50 Kg. El cuarto y último bombardeo fue realizado por la legión alemana Cóndor (HE 111) el 25 de marzo de 1938.  En cambio, Víctor Pardo Lancina señala los cuatro bombardeos, según testimonios, el 17 de junio, el 16 de julio y el 10 de diciembre de 1937, “así como en marzo de 1938”. “Robres fue bombardeado ayer; no hubo bajas, pero sí muchas casas destruidas, y las ambulancias se salvaron por poco” 18 de junio de 1937, Agnes Hodgson, A una milla de Huesca.

El día 10 de diciembre de 1937 hubo un bombardeo sobre Robres y murieron tres personas; una niña de 17 años, un joven de 18 años, y Marino Gracia Villuendas,  de 31 años,  natural de Robres, fue el mayor de seis hermanos, de la antigua “Casa del Tejero. De aquel bombardeo  contamos con el testimonio familiar de Mº Rosa Gracía Cano:

Quienes vivieron el bombardeo de Robres, del 10 de diciembre de 1937, decían que iban a destrozar Robres. Eran aviones de tropas aliadas con el ejército franquista, italianas o alemanas.

Mi madre nos explicaba que el bombardeo fue por la mañana, cerca del mediodía, y que mi padre dijo de llevar comida a unos milicianos que estaban por el Serrallo al sol, con hambre y mucho frío: “¿Qué tenemos para darles de comer a estos jóvenes?-sólo tenemos patatas. -Pues hazles una sartenada de patatas.”

Fueron con mi madre a la bodega a por vino y al volver ya estaba la aviación sobre Robres. Mi padre dijo “¡Estos vienen dando, todos al refugio¡”. Hizo entrar en un refugio que había en el Serrallo a las personas de su familia y vecinos que por allí se encontraban. Él se quedó el último y no llegó a entrar; en la puerta del refugio le alcanzó una bomba.

Los otros fallecidos de ese día fueron una chica y un chico de 17 y 18 años.

La chica era de “casa Pesquito”, casa actualmente desaparecida, próxima a la farmacia actual. El chico era hijo de Don Gregorio, el practicante, originario de Almudévar. Se decía que el chico quiso esconderse en el campanario de la iglesia pensando que sería un sitio seguro, y que rodó por las escaleras de la torre.

Marino Gracvia Villuendas. Os Monegros.

La muerte de Modesto Catón Sampériz, en Poleñino el 25 de marzo de 1938, cuando se produjo las tropas republicanas ya habían abandonado la localidad. Al parecer, algunos testigos aseguran que se le habían escapado unas caballerías y, a pesar del bombardeo, salió a buscarlas. “En esa sarda ya habían llegado los Moros de las tropas de Cabanellas, las tropas republicanas se habían retirado desde hace dos días y se lo encontraron en la sarda de Granen, solo los moros se comían las caballerías (Notas de Ramón Hernando).

Así, un día antes del bombardeo, el día 24 ya había tropas del 5º cuerpo del ejército de Cabanellas y fuerzas de marroquíes. Al parecer, el mismo día del bombardeo ya entraron en el pueblo.

 “En el Sur de Huesca el ejército de Aragón, en cuatro días de operaciones, ha rescatado mil kilómetros cuadrados, liberando más de 20 pueblos de una comarca rica, avanzando 10 kilómetros más en un extenso frente. Al caer de la tarde, Robres y Sangarren eran nuestros y seguía el avance” Nueva España, 26 de marzo de 1938. El imparable avance del bando sublevado acabó ocupando Robres, continuando su avance hacia el este. Aquellas fechas, según la prensa de la época, ocuparon Piracés, Tramaced, Fraella, Poleñino, la paridera del Argelino, Mascarada y Robres “En esta parte del frente se han hecho 453 prisioneros, se han cogido 10 ametralladoras y gran número de fusiles, municiones y vestuario” Nueva España, 26 de marzo de 1938. Aunque Ramón Hernando matiza que las tropas de Cabanellas pasaron sin parar en Fraella, Piraces y Tramaced, “Iban hacia Balaguer para coger Cataluña por la Litera, así que esos pueblos se quedaron casi un mes republicanos”.

Diario de campaña de un requeté pamplonés (1936-1939)Manuel Sánchez Forcada. Manuel perteneció al Tercio del Rey, encuadrado en el batallón América, junto con falangistas navarros y soldados regulares:

24 de marzo de 1938. Continua el avance, no pudiendo en todo el día tomar las posiciones rojas; a pesar de las preparaciones artilleras los rojos no ceden, en los varios intentos que hemos hecho ha habido varios heridos, Martín, etc.; llega el anochecido y dan la orden de asalto, no sabemos dónde vamos y por toda contestación nos dicen que hay que ir a donde salen los fogonazos, allá vamos, nos mezclamos con ellos y en un gran revuelo sin saber dónde estamos, hemos tomado el pueblo de Torralba; en la confusión lo mismo se oyen gritos de Viva la República como Viva el Rey y España, se han hecho muchos prisioneros.

25 de marzo de 1938. Después de una noche muy intranquila pasada debajo de un puente, continuamos el avance y, sin enemigo delante, se toman los pueblos de Senés y Robres pasando la noche en éste.

El 27 de marzo, el jefe de policía del 5º cuerpo del ejército de Cabanellas nombró al presidente del consejo local, vicepresidente, concejales y secretario. Presidente del consejo local Vicente Alcubierre Alaman, vicepresidente Alfonso Barrio Novales, concejales Pascual Abardia  Alamán, Joaquín  Sieso Barrio y Victorian Cambra Luna. Como secretario Florencio Domec  Serrano. En el acta del 2 de mayo en la junta aparece el juez municipal Román Luna y jefe de la falange Francisco Luna. (Notas de Ramón Hernando).

A los pocos días, la Nueva España del 1 de abril de 1938 se hacía eco de unos hermanos robresinos que pasaron y sobrevivieron la guerra escondidos, Julio y Alfonso Barrio Novales: “Será la tragedia. Y es. Su padre fue fusilado y ellos.., estos hombres, pasaron la campaña en el interior de una cuba. Así fue. En Robres. Ellos van diciendo toda la historia trágica de su situación, pero allí están sin haber levantado el puño y conservando esta vida que puede resultar preciosa para la España que nace. Estos casos son una fuerte nota de entereza que muestran las mejores virtudes de una raza. El aspecto del pueblo es desolador. La gente que se encuentra en él, que es la inmensa mayoría, levanta el brazo. Y yo he sentido una reacción especial contemplando el gesto de promesa en aquel escenario doloroso de un pueblo en ruina. Surgirá. Lo esperamos de estas gentes que tienen ya impaciencia por comenzar a construir el pueblo y rehacer sus economías absolutamente rota. Estos pueblos de Aragón necesitan miliares de brazos tensos que nunca se doblen; siempre rígidos en la tarea diaria.”

Muchos robresinos acabaron en las cárceles y exiliados, los recoge Jesús Inglada en El Pimendón, periódico de Robres “Dorotea Lóriz Otin, natural de lanaja y domiciliada en Robres, condenada a 30 años de cárcel y que falleció en la Prisión Central de Mujeres de Saturrarán, en el municipio guipuzcoano de Moho, el 1 de mayo de 1942. Algunos de los encarcelados fueron explotados en los trabajos lazados. Y al menos cinco, fueron fusilados: Andrés Brosed Sanz 56 años, fusilado en Zaragoza el 29 de octubre de 1938-, Nicolás Berdún Becana -51 anos, fusilado en Huesca el 11 de marzo de 1939-. Esteban Rivas Pisa -28 años, fusilado en Huesca el 14 de agosto de 1940-, Jesús Serreta Miró -30 años, fusilado en Huesca el 17 de enero de 1942- y Manuel Brosed Brosed -45 años, fusilado en Huesca el 6 de julio de 1943”.

El 2 de mayo de 1939, la comisión provincial de incautación de bienes de Huesca nombra a dos legados en Robres que “Administraran  hasta que se resuelva el expediente de los bienes de aquellos individuos que fueron por hostilidad al glorioso movimiento nacional” (Notas de Ramón Hernando). Jesús Inglada, en El Pimendón, cita a los 42 vecinos de Robres a quienes les fueron incoados expedientes Responsabilidades Políticas “En muchos casos, se tradujeron en multas, destierros, requisas e incautaciones (de casas, tierras, herramientas del campo, ropas, enseres domésticos…).” Incluso a algunos fusilados se les incoaron expedientes después de ser fusilados, señala Inglada, fueron los casos de Andrés Brosed Sanz y Manuel Brosed Brosed “Para esquilmar la poca o mucha herencia que dejaran”.

Acta del 2 de mayo en la junta aparece el juez municipal Román Luna y el jefe de la falange Francisco Luna. La comisión provincial de incautación de bienes de Huesca a nombrado dos delegados que serán como presidente Ramón Maza González y Vicente Rivas Monaj, nombrados el primero por el presidente (Vicente Alcubierre) y el segundo por el jefe de la falange (Francisco Luna).  Administrarán hasta que se resuelva el expediente de los bienes de aquellos individuos que fueron por hostilidad al glorioso movimiento nacional.

Ramón Hernando cuenta como los tasadores o testigos o acusadores, en muchos casos el mismo, ponían las multas a los presos o ex republicanos de Robres sobre el valor de los bienes personales (casa, campos, etc.…) pagar primero y después eran condenados por el Tribunal. El pago de la multa lo recogía el jefe falangista de Robres que lo mandaba a Sariñena para acabar en Falange Huesca. Pero había partes que se perdían, “Un caso muy extraño es el de Francisco Arazo Cuello (BONE) fue condenado por el tribunal de Responsabilidades Políticas a varios años de cárcel, uno de los motivos, a más de ser rojo, es que había robado el dinero del ayuntamiento. Francisco Arazo dijo que no, que nunca había cogido ese dinero. En el archivo de Robres están consignados los primeros plenos del consejo falangista que dirigió el pueblo: en el mes de abril se reúnen y escriben que han recuperado 6600 pesetas del ayuntamiento. De los rojos, ese dinero lo confían a uno de entre ellos. Firman y ya no se sabe nada más.., ¿Qué pasó con ese dinero? ¿Para qué sirvió?”.

Estos archivos están en el Ayuntamiento de Robres, acta del 14 de abril 1938: Bajo la presidencia del Sr alcalde Vicente Alcubierre con la presencia de los concejales Alfonso Barrio y Don Antonio Pano, nombra a este último depositario de esta junta y le entrega 6610 pesetas en billetes de los rojos y levanta la sesión. Firman Vicente Alcubierre, Antonio Pano, Alfonso Barrio y el secretario Florencio Domec”. ¿Dónde están los otros concejales? El consejo falangista se reúne cada quince días, en las actas siguientes ya no se habla más de ese dinero ¿para qué fue empleado?.

Nota particular escrita y firmada por el Juez Torres de Sariñena de atención a su amigo Bierge de Robres: «Con arreglo a la Ley, se tiene que embargar – cuando se trate de bienes inmuebles – por doble de lo que se señala y en el caso presente son treinta mil pesetas. Así es que le ruego haga otra diligencia y valorar por treinta mil pesetas.  Le saluda suyo…«.

Al terminar la Guerra el “ Gobierno de Franco” se enfrentó a un problema económico gravísimo, no había dinero en el Banco de España, sobre todo no disponía de dinero en papel. Las zonas Republicanas habían creado dinero local, cada pueblo o ciudad editaba su propia moneda en billetes y en metálico.

Los franquistas permitieron que se utilizara los billetes editados por la Republica, hasta los años 1940/1941, después fueron retirados y sellados por la censura franquista y falangista.

En el Archivo de Huesca aparecen solo 45 expedientes de Responsabilidades Políticas de las condenas hechas contra los “Rojos” en Robres. Faltan otros documentos de la cárcel de Zuera o Barbastro. En Salamanca más de 100 documentos igual en la comisaria de Huesca. Los jueces franquistas tenían prisa para condenar, no querían mucho averiguar. Los testimonios del cura, guardia civil o familiares no aparecen.

Testimonios del Cura Margimino Abad cura ecónomo de Robres, documento 0255 del 12 de marzo 1942 para el fiscal de Sariñena:

1º La actuación de las hordas rojas en Robres fueron desastrosas, quemando todo de la Iglesia arrastradas y quemadas en la plaza del pueblo.

2º Las víctimas fueron el cura y doce personas más que fueron llevadas a Tardienta y fusiladas entre los días 12 y 14 de agosto 1936 (Nota: se equivoca con las fechas, fue en septiembre).

3º Margimino Abad establece un escrito particular para cada acusado en los expedientes de los tribunales falangistas (Causa General de Huesca).

Del guardia civil Juan Merino Sánchez, comandante del puesto de Alcubierre, Causa General autos n.º 35 a 60: Confirma las detenciones del 7 y 8 de septiembre 1936 de Mariano Barrio Otal, Domingo Berdún Pallas, Ángel Oto Portolés, Timoteo Fajo Casaus, Bautista Fajo Casaus, Francisco Sieso Barrio, Ángel Mateo L., Joaquín Oto Serreta, Martin Olivan Lacruz y Joaquín Barrio Lacambra. Señala los sospechosos de las detenciones en esos autos.

En el Auto n.º 47 y 48 Juan Merino escribe por el caso de Simeón Villacampa Pisa: El día 8 de septiembre 1936 Simeón fue llamado al local que servía de oficina al comité por el presidente Antonio Laporta, sobre las 22 horas, haciéndole saber que para él no había carne, que se podía marchar cuando quisiera. Al salir a la calle, empezaron a tiros con él hasta que cayó muerto. Un tal Rodríguez, natural de Villanueva i Geltru, fue el que le dio el tiro de gracia.

Este documento no aparece en las condenas de David Abardía y de Manuel Brosed Brosed.

Auto n.º 348 Alcaldía Nacional de Robres carta del 10 de noviembre 1941 dirigida al Sr Fiscal Instructor de la Causa General en Zaragoza:

1º Las victimas antes de ser asesinadas por los rojos los encerraban en la cárcel y en un granero de Robres, permitieron en ellos de uno a dos días.

2º Les hacían muchos insultos y amenazas de muerte, dándoles algunos palos sobre todo el que recibió Valentín Gavin de manos de Joaquín Oto Guiseris.

3º Los miembros del comité les acusaban y exigían de los jefes rojos que les asesinaran.

4º Los nombres de los dirigentes son: Antonio Laporta, Alejandro Becana, Francisco Brosed, Joaquín Brosed, Miguel Granged, Fidel Bole y Manuel Ballarin; todos estos se encuentran en el extranjero. Jesús Serreta Miro pendiente de muerte, Manuel Brosed en cárcel de Barbastro, que mató a un teniente Falangista, Vicente Maza en la cárcel de Huesca con David Abardía, Francisco Villacampa y Ramon Brosed que se hallan en esta localidad, Don Juan Valdivia Pardo, Enrique Brosed en cárcel y Antonio Brosed que se encuentra en Zaragoza. Firma el Alcalde J. Barrio.

Muchos sufrieron el exilio, los campos de refugiados en Francia, las Compañías de Trabajadores Extranjeros y se enfrentaron de nuevo contra el fascismo, contra el nazismo en la segunda guerra mundial. Acabaron apátridas y muchos murieron en los campos de exterminio nazi. Los hermanos Antonio y Fortunato Hernando Villacampa y su tío Domingo Becana Lacasa acabaron exiliados a Francia. José Lasheras Nasarre murió el  14 de enero de 1942 en Gusen (Campo anexo de Mauthausen) a los 23 años. Blas Buisán Sampériz también perdió la vida en Gusen, el 12 de agosto de 1944, a los 50 años de edad tras haber sufrido tres años y medio en el campo nazi. Mariano Conte López sobrevivió al campo de Mauthausen, al igual que José Purroy Noguero, natural de Albelda, y Ángel Colomina Edo, natural de Fañanás, ambos casados en Robres. (Jesús Inglada. El Pimendón).

En julio de 1938 se constituyó la primera alcaldía franquista en Robres, con Antonio Paño como alcalde y jefe de la falange Luis Berdun.

Monumento en memoria de todos. Robres.

Se dejó atrás una guerra para adentrarse en una dictadura que duró 37 años. Luego llegó la transición y la democracia, ya más de 80 años desde que se sucedió la guerra. Tiempo más que suficiente como para poder hablar de lo sucedido, tratando de ser rigurosos con la historia, respetuosos con las víctimas y justos con la memoria.

Marino Gracia Villuendas


El 10 de diciembre de 1937, la aviación aérea del bando “nacional” bombardeó la localidad monegrina de Robres. Aquel bombardeo dejó muertes, heridos y ruinas, llevándose, entre otras, la vida de Marino Gracia Villuendas.  Gracias a los recuerdos familiares de su hija  Mª Rosa Gracia Cano y a través de su nieta Lourdes Casamayor Gracia, recuperamos su recuerdo, su memoria, porque, a pesar de lo trágico que fue todo, sigue formando parte de nosotras, permaneciendo en lo más profundo de nuestros corazones.

Marino Gracia Villuendas.

Marino Gracia Villuendas, natural de Robres, fue el mayor de seis hermanos, de la antigua “Casa del Tejero”. Tres hombres, Marino, Pascual y Julián, y tres mujeres, Isidora, Sofía y Benedicta.

Marino trabajó en la construcción del canal de Monegros y tuvo potestad para contratar gente para trabajar en esa gran obra. Ayudó a todo el que podía. Él y sus hermanos eran decididamente “rojos”.

En plena guerra, en abril de 1937, se casó con mi madre, Asunción Cano Calvo, de Alcubierre, y vivieron en la casa familiar del Tejero, que estaba en la parte alta del barrio conocido como “el Serrallo”.

Quienes vivieron el bombardeo de Robres, del 10 de diciembre de 1937, decían que iban a destrozar Robres. Eran aviones de tropas aliadas con el ejército franquista, italianas o alemanas. Yo no sé si sabían que mi padre estaba en el pueblo, ya que había estado un tiempo en el hospital de San Pablo, en Barcelona, herido de guerra.

Mi madre nos explicaba que el bombardeo fue por la mañana, cerca del mediodía, y que mi padre dijo de llevar comida a unos milicianos que estaban por el Serrallo al sol, con hambre y mucho frío: “¿Qué tenemos para darles de comer a estos jóvenes?-sólo tenemos patatas. -Pues hazles una sartenada de patatas.”

Fueron con mi madre a la bodega a por vino y al volver ya estaba la aviación sobre Robres. Mi padre dijo “¡Estos vienen dando, todos al refugio¡”. Hizo entrar en un refugio que había en el Serrallo a las personas de su familia y vecinos que por allí se encontraban. Él se quedó el último y no llegó a entrar; en la puerta del refugio le alcanzó una bomba.

Mi abuela María nos explicaba que mi padre todavía vivió unos minutos y fue consciente de que había sido herido de muerte: “Madre, me han muerto”.

Marino Gracia Villuendas.

Los otros fallecidos de ese día fueron una chica y un chico de 17 y 18 años.

La chica era de “casa Pesquito”, casa actualmente desaparecida, próxima a la farmacia actual. El chico era hijo de Don Gregorio, el practicante, originario de Almudévar. Se decía que el chico quiso esconderse en el campanario de la iglesia pensando que sería un sitio seguro, y que rodó por las escaleras de la torre.

Sabemos que mi padre fue enterrado fuera del cementerio de Robres, al otro lado del muro. Desconocemos si el motivo de tal acto fue por las circunstancias del bombardeo en sí, en plena contienda, o bien por su reconocida condición antifascista.

Años después se agrandó el cementerio y los restos de Marino quedaron dentro; en un lugar indeterminado. Decían mis tías que estarían por debajo de donde se construyó una pequeña capilla. De los otros fallecidos no sabemos nada.

Hubo otros bombardeos en Robres y muchas casas quedaron deshechas.

Todos los años hemos visitado el cementerio de Robres en memoria de mi padre. Recientemente, gracias al monumento que se erigió en recuerdo de todas las víctimas, podemos depositar un ramo de romero y espliego en memoria de todas las víctimas de la guerra y la postguerra en Robres.

Monumento a todas las victimas. Robres.

Mª Rosa Gracia Cano:

Mi nombre es Mª Rosa Gracia Cano y nací el 3 de septiembre de 1938. Soy de Robres aunque fui a nacer en Alcubierre porque mi madre era de allí. Trabajé desde pequeña sirviendo en casas acomodadas de Robres y ya de jovencita trabajé en Gerona y Zaragoza. En 1963 me casé con Antonio Casamayor, de Alcubierre, y ese mismo año emigramos a Barcelona donde sigo viviendo. Soy viuda desde hace 3 años y tengo dos hijos y tres nietos. Estoy contenta y agradecida de que alguien se interese por la situación que vivimos en mi familia, y por la pérdida de mi padre, Marino Gracia Villuendas, durante la guerra civil en Robres.

Mis padres se casaron en abril de 1937 y mi madre, Asunción Cano Calvo, originaria de Alcubierre, me recordaba  que fue un matrimonio que sólo duró 8 meses pero que fueron muy felices.

El día 10 de diciembre de 1937 hubo un bombardeo sobre Robres y murieron tres personas; una niña de 17 años, un joven de 18 años, y mi padre, Marino Gracia Villuendas, de 31 años.

Mi madre quedó inconsciente y desnuda debido a la fuerza de la onda expansiva de una bomba. Cuando recobró la consciencia su esposo ya había fallecido. Dudo que en aquel momento supiese que  estaba embarazada, pero a los 9 meses justos nací yo.

Mª Rosa Gracia Cano.

Como mi madre era de Alcubierre decidió dar a luz en casa de su hermana. Ya era viuda y en Robres no tenía familia directa. Cuando nací me llevaron de nuevo a Robres, a la casa de mi padre (la antigua “Casa del Tejero”) y mi abuela paterna y mis tías me cuidaron con mil y una dificultades. Mi madre volvió a trabajar de sirvienta en una casa acomodada de Alcubierre, donde ya había trabajado de soltera, y su jornal le venía justo para pagar algo de leche condensada que, con apuros alguien podía traer a Robres de estraperlo para alimentarme. Mi madre me visitaba una tarde cada 15 días, cuándo la dejaban salir un rato de su trabajo.

Cuando yo tenía poco más de un año las circunstancias y el hambre acordaron que mi madre se casase de nuevo, con un señor de Pertusa que vivía y trabajaba en Robres; y mi madre volvió a vivir de forma permanente en el pueblo. Este hombre, Lucas Mavilla, falleció hacia 1948 de muerte natural pero mi madre ya no se marchó de Robres. Siguió trabajando de sirvienta en algunas casas de Robres, vendimiando uva, lavando ropas, etc… y en 1951 se casó con Antonio Tolosana, de “Casa Remundo”, un buen hombre, un superviviente, mutilado de guerra pero sin apenas ideas políticas.


Como era típico en el lugar para las segundas nupcias, en este caso terceras nupcias, los jóvenes les hicieron la correspondiente “cencerrada”: presentarse a cualquier hora del día o la noche en casa de los desposados dale que dale al cencerro. Parece ser que en aquel caso el cura en su homilía del domingo reprendió tal actuación por considerarla burlesca e inapropiada.

A Antonio todos lo recordamos con mucho cariño ya que siempre ejerció de abuelo de todos los nietos de mi madre. Siempre fue “el abuelo Antonio”.

Las cosas para los “perdedores” en el pueblo eran muy difíciles y había mucha pobreza, así que mi madre y Antonio decidieron emigrar a Barcelona en 1962. Trabajaron de porteros en una finca regia del “eixample” barcelonés  hasta su jubilación, y pudieron tener unos años de paz y  tranquilidad rodeados de su familia. Murieron en 1998 y 1999 y están enterrados juntos, en Barcelona.

Mi madre tuvo tres hijos, cinco nietos y cinco bisnietos. Todos nos sentimos orgullosos de ser o descender de Robres.

Mª Rosa Gracia Cano

Barcelona, 23 de noviembre del 2020.

Hospital de la cruz Roja de Valfarta


En la localidad monegrina de Valfarta se instaló un hospital durante la guerra civil de España. El Hospital de Valfarta fue uno de los muchos que se establecieron en el frente aragonés, dependiendo del de Bujaraloz, una de las cabezas del sector sur, sede sanitaria compartida con Caspe. La historia del hospital de Valfarta quizá sea la más olvidada del resto de hospitales que se instalaron en Los Monegros, tales como el de Grañen, Sariñena y Bujaraloz. Aunque una de sus particularidades fue en ser uno de los tres hospitales de la Cruz Roja en el frente de Aragón, junto a los de Sástago y La Zaida.

  La Cruz Roja de Valfarta, distante de Bujalaroz siete quilómetros, ha instalado un magnífico hospital, que bajo la dirección del prestigioso doctor Ríus, y secundado por cinco médicos, cuatro practicantes y cincuenta camilleros, atienden a los allí hospitalizados. El citado hospital cuenta con un completo laboratorio, gabinete de Rayos X, dos aparatos portátiles de la misma aplicación y tres auto-ambulancias de los últimos modelos extranjeros   La Vanguardia 24 noviembre 1936  

Para ello se habilitó una antigua casa señorial que contaba de “espaciosas y ventiladas salas capaces para 150 camas”, además de otras dependencias en las que se instalaron dos quirófanos que permitían operar dos heridos simultáneamente; además de contar con gabinete de  rayos X,  farmacia, etc… El hospital estuvo dirigido por el doctor Luis Ríus Badía, cirujano del Hospital Clínico y de la Cruz Roja en  Barcelona. Rius Badia estuvo acompañado por los  doctores Martínez Torres, Pérez  Malla, Navarro, Sellarés “todos ellos de la  Cruz Roja y  de  reconocida solvencia como cirujanos”. También los practicantes Fernández Saavedra y Bertrán, el  personal de la Brigada de camilleros al mando del  oficial 2° Pedro Gebelli (Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/12/36). Luego, la dirección recayó sobre el doctor Jorge Martínez Torres, ascendido a la categoría de Capitán en julio de 1937(Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/7/37).

Posee  uno  de  los   mejores   hospitales   de  sangre  de  todo  el frente  Aragonés,  dotado  de todos los adelantos  modernos  que  en  nada   tiene que   envidiar   a  los mejores hospitales de Barcelona.

Su capacidad actual es de 150 camas, pudiéndose ampliar el número de  ésta hasta  250. Posee seis magníficas salas, tres en el primer piso y  otras tres en el segundo  espléndidamente ventiladas alegres en su interior, luminosas limpias. Las camas esmaltadas,  blancas como la nieve,  impolutas.

El régimen y  la disciplina interior, son  dulces,  llevaderos,  procurándose por todos los  medios  que  al  herido  le resulte  la estancia agradable.  Las  comidas que a  los  heridos  se  les  sirven son  sanas y  nutritivas y  el agua  que   beben es filtrado cuidadosamente con  el   fin  de  evitar complicaciones  gástricas.

Cuenta así mismo  el hospital con un magnífico gabinete  de rayos  X;  otro de terapéutica-física; aparato de radio-Scopia portátil; laboratorio, amplia y bien dotada sala de   operaciones,  sala  de  curas  y  enyesados.

Al  frente de dicho hospital está el conocido y prestigios Dr. Martínez Torres, cirujano eminente  bien  conocido  en  los medios científicos.

Es  el  prototipo del  médico  que vive y para su profesión y para los enfermos. Practica de tal forma su apostolado, que  sus intereses sé ven lesionados por  la obsesión de darlo todo para los enfermos.

Muchas son las pruebas de su altruismo y desinterés lleno de humanidad y, cariño hacia  los heridos y  enfermos.

Este hombre que es célebre; que es el alma de este hospital, se vería imposibilitado de  plasma  su  obra tan humanitario, como admirable, sin la ayuda  eficaz  de  elementos   auxiliares.

Estos  elementos tan valiosos son los médicos doctores. Salieras, cirujano y  ayudante del Director, Al-varez y Cardona, secundados por la labor meritoria de tres expertos   practicantes,   y  seis competentes  enfermeras.

Más allá : portavoz de la División «Francisco Ascaso» 22 de septiembre de 1937

La importancia de los hospitales del frente fue reflejada por los diferentes medios de la época. En diciembre de 1936, Roda (Delegado de sanidad y Cruz Roja en el frente de Bujaraloz), Pedro Estrany (Delegado Presidente) y Arturo Grau Mediano (Primer jefe de la Brigada) visitaron el Hospital de Valfarta, las Ventas y el sector donde actuaba la brigada “Juan Simón”. Fueron recibidos por todo el personal, según narra la crónica de aquella visita (Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/1/37), además pudieron asistir a una intervención quirúrgica practicada por el doctor Luis Ríus Badía “Consiste en la amputación del dedo medio de la mano izquierda de un miliciano”.

En el antiguo cuartel de la Guardia Civil se instaló la sede de la Brigada de camilleros de la Cruz Roja. Durante la visita de Roda, Estrany y Grau, les recibió Gebelli y el brigada Trepat. Además de hacer guardias en los hospitales, también existió un campamento de tiendas de campaña en el cruce de la carretera Zaragoza, Gelsa y Monegrillo. La comitiva visitó aquel campamento “Las Tiendas”, donde prestaba servicio el practicante Martínez, el sargento Andrés Aybar y varios camilleros “En ellas se efectúan en tiempo normal unas treinta curas diarias procedentes del Cuartel General”.

La mala calidad del agua fue un gravísimo problema en el sector sur, especialmente en Bujaraloz, cuyas aguas fueron declaradas infectadas, es de suponer que lo mismo sucedería en Valfarta. Por lo que se estableció un sistema de aguas limpias y depuradas a través de camiones cisterna o cubas. En Bujaraloz se utilizó el antiguo hospital habilitándolo como Hospital de Sangre para los heridos en el frente, además en casa de Gross se instaló el hospital de enfermos y el “hospital de venéreas” (las enfermedades de transmisión sexual fueron un verdadero problema entre los milicianos). El hospital de venéreas en Bujaraloz era una casa grande, con patio descubierto y corredor alrededor, acabada la guerra, la casa pasó a ser usada como escuela.

Visitaron   también   un   lugar   llamado   «Las   Ventas»,  en  donde  presta  un  excelente   servicio   una  brigada  llamada de  «Juan   Simón»,  por   ser   la   que  efectúa  los  enterramientos,  ésta  está  compuesta  por  el  cabo  Ribera  y  cuatro   camilleros.

(Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/1/37)

Debieron tener gran actividad y así queda reflejado en el parte publicado por el Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/2/37, donde aparece la actividad en el frente de Bujaraloz. En el destacamento de personal, de esta brigada al mando del oficial primero Pedro Gebelli, que actúa en dicho frente desde el día 24 del mes de julio del pasado año “Han prestado durante el pasado mes los siguientes servicios: En el lugar denominado «Las Tiendas», situado en el cruce de la carretera de Zaragoza con la de Jelsa y Monegrillo,113 servicios. Servicios con ambulancias desde Valfarta a  Bujaraloz, en total 55  servicios. Servicios de motos, 27. En el hospital de Cruz Roja instalado en Valfarta, se han verificado un total de intervenciones quirúrgicas de 54 durante el pasado mes, por el personal facultativo de esta brigada, adscrito a dicho hospital”.

Incluso existen estadística de los enfermos  asistidos  en  el  Hospital de Valfarta desde el 15 de Enero al 15 de Febrero de 1937, con un total de 142:

Medicina

Aparato respiratorio, 12. Aparato circulatorio, 1. Aparato digestivo, 10. Infecciones   generales, 7. Raquitismo, 1.

Cirugía

Hernias, 3. Apendicitis, 3. Hidrocele, 1. Quisto  abdominal, 2. Hemorroides, 1. Fisura  ano,1. Fimosis, 3. Neuritis, 1. Abscesos, 3. Quemaduras, 1. Heridas  contusas, 3. Cuerpos extraños, 3. Heridas  por arma  de  fuego sin lesión ósea, 1. Heridas por arma  blanca,  1. Osteítis, 3.

Traumatología

Derrames sinoviales, 1. Esguinces ligamentos, 11.Luxaciones, 5. Contusiones, 3.   Artritis traumáticas, 8. Fracturas costillas, 2. Fracturas cerradas extremidad sup.,10. Fracturas abiertas extremidad sup., 3. Fractura extremidad  inferior,  4.  Espina  calcáneo,  2.  Enfermedad  de  Koening,   1.  Enfermedad   de  Pertlies,  2.

Especialidades

Otorrinolaringología,  15.  Dermatología,  3.  Venereología,  8. 

 (Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/1/37)

Día 11.Salió la ambulancia G. E. 4172 m. Cherolet en comisión de servicio a Valfarta con el  siguiente personal: Eliseo Basols Cabo, Ángel Casas Ribas, conductor, Ezequiel  Blesa García, camillero. Servicios prestados por la Ambulancia de la Cruz Roja de Gerona durante el mes  de junio de 1937.

 (Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/7/37)

El que  suscribe   don Alfonso  Castells  Valls,   Teniente   Ayudante, pongo   en   su  conocimiento   que  por  indicación  del  Comisario  de Guerra   en   Sanidad   se  dispuso  la  salida  inmediata de  una  ambulancia  con  dirección al Cruce del Gelsa  (Docker de Sanidad). 

Salió para  este  lugar  la ambulancia  núm.  10,  con  el  personal  que  a continuación  se  expresa:  Sargento: Jesús Pía. Cabo: Andrés Vila. Camilleros: José Pont, Mariano Ayora, Jaime Pomier; prestando los servicio que a  continuación se expresan: 
16 de julio: Evacuación del Hospital de sangre de Bujaraloz de 5 soldados; y 3 al Hospital de Valfarta. 17 de julio: Sin novedad.
18 de julio: Evacuación del Hospital a 1 herido. Ha salido la ambulancia para Molino de Pina para ir a recoger 2 heridos. Trasladado 6 heridos al hospital de Bujaraloz.
19 de julio: Traslado al Hospital de Bujaraloz a 2 soldados.
20 de julio: Traslado al Hospital de Bujaraloz a 2 soldados. 21 de julio: Traslado al Hospital de Bujaraloz a 5 soldados, la ambulancia ha ido al Hospital de Gelsa a buscar un soldado enfermo.
22 de julio: Traslado al Hospital de Bujaraloz a 3 soldados. Lo que me complace en comunicarlo a usted para los efectos consiguientes.

Valfarta, a 23 de julio de 1937. El Teniente Ayudante. — Alfonso Castells. Firmado.

* * *
El que suscribe don Alfonso Castells Valls, Teniente Ayudante, pongo en su conocimiento que por el requerimiento del Delegado de Guerra en Sanidad, se dispuso la salida inmediata de tres ambulancias con dirección a Monegrillo, para efectuar la evacuación de los heridos.  

Para dicho servicio salieron las ambulancias y personal que a continuación se citan:  

Ambulancia núm. 6: Chófer: Luis Miguel. Ayudante: Francisco Bonet. Camilleros: José de Dios, Antonio Gutiérrez.
Ambulancia núm. 45: Chófer: Antonio Medina. Ayudante: Antonio Coscolín. Camilleros: Pedro Antonio Díaz, Emilio Bosque.
Ambulancia núm. 14: Chófer: Alejandro Joly. Ayudante: Enrique Vives. Camillero: Ginés Serrano. Cabo: Urbano García. Motorista Cabo: José Cordellach.

Todo este personal estaba al mando del Teniente Gabriel Roberto Barrón.  

Servicios prestados:

16 de julio: Traslado de 5 heridos al hospital de sangre de Bujaraloz.
17 de julio: Fue trasladado al Hospital de Cruz Roja el camillero Alfonso Marín Batan.
18 de julio: Fueron evacuados 5 heridos al Hospital de Bujaraloz y 2 al Hospital de Peñalba.
19 de julio: En dicho día no se efectuó ningún servicio.
20 de julio: Traslado de 2 heridos al Hospital de Peñalba y 5 heridos al Hospital de Bujaraloz.
21 de julio: Traslado de 1 herido al Hospital de Valfarta y de 3 heridos al Hospital de Bujaraloz.
22 de julio: En dicho día fueron evacuados al Hospital de Bujaraloz 11 heridos. 23 de junio: Traslado de 5 heridos al Hospital de Bujaraloz.
24 de junio: Traslado de 11 enfermos al Hospital de Bujaraloz.  En dicho día por medio de un Oficio que nos remitió el Director del Hospital de Monegrillo fueron retiradas nuestras ambulancias. El documento del Director del Hospital dice así : «Habiendo recibido un oficio que dice: Por haber cesado las operaciones que dieron lugar a la instalación del equipo quirúrgico de Monegrillo, pueden ser retirados todos los efectivos que allí fueron trasladados, así como todo el personal Sanitario.   «Las ambulancias de la Cruz Hoja que estaban allí desplazadas pueden regresar a sus Bases».  
El Director del Hospital de Monegrillo. Firmado: P. Arqué. Monegrillo, 25 de julio de 1937. Al Teniente que manda las ambulancias de la Cruz Roja en Monegrillo.
* * *
También fue entregado al teniente de Cruz Roja este comunicado, el cual escribo textualmente para su conocimiento.   Dice así: El que suscribe Pedro Arqué Cuxart, Director del Hospital de Evacuación de Monegrillo, se complace en hacer constar lo que a continuación se expresa:   Que lodo el personal de la Cruz Roja destacado por orden superior al Hospital de su dirección, para efectuar las evacuaciones que hubiere menester se ha portado en todo momento en forma excelente, cumpliendo en todo momento y a la hora más intempestiva los servicios que se les ha encomendado, llevados por el alto espíritu que, siempre ha guiado a todos aquellos que han pertenecido a la Institución que con tanto orgullo representan. Lo que hace constar para satisfacción de los interesados y puedan exhibir este documento a donde crean conveniente.

  Monegrillo, 25 de julio 1937. Firmado: P. Arqué.  

Lo que me complace poner en conocimiento de usted para los efectos consiguientes. Valfarta a 25 de julio de 1937.   El Teniente Ayudante. — Alfonso Castells. Firmado. Visto Bueno, Gebelli. Hay un sello que dice: CRUZ 110.1A ESPA-ÑOLA. Sector Bujaraloz. Barcelona. Hay otro sello que dice: EJERCITO DEL ESTE. Capitán Jefe Delegado. Frente Aragón. CRUZ ROJA ESPAÑOLA.
* * *
El que suscribe don Alfonso Castells Valls, Teniente Ayudante, pongo en su conocimiento los servicios que durante los días 23, 24 y 25, han prestado los Camilleros que fueron destacados al Cruce de Gelsa por indicación del Comisario de Guerra en Sanidad.  
Ambulancia núm. 10: Sargento: Jesús Pla. Cabo: Andrés Vila. Camilleros: José Pont, Mariano Ayora, Jaime Pomier.  
23 de julio: Evacuación de Pina de Ebro de un herido y trasladarlo a los Dockers.
24 de julio: Evacuación de tres soldados al Hospital de Bujaraloz; también fueron evacuados 2 al Hospital de Fraga.
25 de julio: Evacuación al Hospital de Bujaraloz de 3 heridos. Ha salido la ambulancia a Pina de Ebro para ir a buscar un herido. En dicho día por orden del Director del Hospital se retiró el retén regresando el personal y la ambulancia al Cuartel general. Lo que me place poner en conocimiento de usted para los efectos consiguientes.  

Valfarla a 26 de julio de 1937.  El Teniente Ayudante. — Alfonso Castells. Firmado. Visto bueno, Gebelli. Hay un sello que dice: EJERCITO DEL ESTE. Capitán Jefe Delegado. Frente Aragón. CRUZ ROJA ESPAÑOLA DE SASTAGO.   (Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/8/37)  

De acuerdo con estos documentos, en la localidad de Monegrillo también se estableció un hospital de guerra. También se montó un taller de mantenimiento y reparación de ambulancias en Valfarta, tal y como aparece en Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona del 1 de abril de 1937 “Material obtenido gratuitamente por Secretaría del Comité Local de Barcelona, a distribuir por la Brigada.  Montaje de un taller completo, para la reparación de ambulancias, en el garaje instalado  en Valfarta (Bujaraloz)”. Hubo mucho material destinado a los hospitales y en los boletines se daba la información completamente detallada:

Material con destino al frente de Bujaraloz, sector Valfarta, obtenido por La secretaria del comité local de la Cruz Roja de Barcelona

Ambulancia «Studebat» B.  63.373,  equipada  con 4 camillas,  a  la  moderna,  conducida por  el chófer Isidro  Cartés. Ambulancia «Stewar», capacidad 8 camillas, montada con toda la  técnica  moderna  conducida  por el  chófer Francisco Capdevila. 3  coches de turismo. Moto núm.1 «Norton», conducida por Luis  Miguel. Moto  núm.  2. «F. M.», conducida  por Manuel  Muñoz. Moto  núm. 3. «Beig-Anen». Moto  núm.  4.  «B. S.  A.». Para  sustituir  a las dos  anteriores  caso  de  avería.  15  camillas  de  campaña.  8 camillas  modelo Ambulancia. 6  cubiertas 160 x 40  para  Ambulancias.  6  estufas «Salamandras» para instalarlas en el  Hospital  de Valfarta. 1  fogón  «Coleman»  capacidad, 25 litros. 2 fogones «Coleman», capacidad 5  litros. 6 faroles  de  campaña.  1 máquina  de  escribir portátil

Relación  del  material  de  la cruz  roja,  que  ha salido  con  destino al  frente   de  Bujaraloz  (Sector  Valfarta) 

Ambulancia «Ford» B. 45.368, equipada con 4 camillas y conducida por el chófer Jesús Rodriguez. Ambulancia «Opel»  B.  64.441, equipada  con 4 camillas y  conducida por el  chófer Vicente  Gadea. Ambulancia «Ford»  B.  61.312,  equipada  con 4 camillas y conducida por el  chófer Paulino  Catalá. 2 tiendas  de campaña de  6 m. de  circunferencia. 2 aparatos  de  rayos X portátiles. 3  máquinas de  cortar pelo. 

Una  mochila  alemana,  con  lo  necesario  para  las  curas  de  urgencia.  8  placas  Radio   X   30  X  40.  8  placas  Radio   X  24  X  30.  90   kilos  de  esmalte. 

Material y construcción de 100 camas hierro, a 150 pesetas una. 12 bisturíes. 12 pinzas disección. Para La Zaida y Valfarta (Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/5/37)      

  

En febrero de 1937, el delegado de la Cruz Roja Internacional de Ginebra, Mr. Roland Martí visitó el frente de Aragón y el Hospital de Valfarta “ el cual está dotado de todo lo necesario, incluso aparatos de Rayos X. Refiriéndose a los servicios en todos los hospitales visitados, dijo que está satisfechísimo de su organización” La Vanguardia 18 febrero 1937.

En mayo de 1937 se presentó un informe al Comité Local de la Cruz Roja por parte de la comisión que formaron Estrany y Ráfales. En dicho informe se denuncia que el personal de la Cruz Roja en servicio al frente (División Durruti) no había cobrado los últimos meses, desde el 15 de marzo hasta el 20 de mayo. (Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona 1/6/37). No debió de ser fácil para la Cruz Roja mantener estos hospitales que necesitaban de bastantes recursos económicos, así se recoge en “Más allá: portavoz de la División «Francisco Ascaso» 22 de septiembre de 1937 Los gastos   ocasionados por los honorarios  del  personal movilizado  alimentación, material  sanitario y quirúrgico son elevadísimos, y la ayuda internacional nula, sólo haciendo un sin fin de sacrificios muy  a duras penas  la  institución  les puede  subvencionar”. Pues hacía poco que el hospital de Valfarta había dejado de ser subvencionado por la División, pasando a hacerse íntegramente la institución de la Cruz Roja.

En el Boletín oficial de la Brigada no.1 Cruz Roja Comisión Provincial de Barcelona del 1 de marzo de 1938 aún aparece el envió al Hospital de Valfarta de 31 libros, posiblemente en esa política de crear bibliotecas en los hospitales.

La existencia del hospital, de heridos y muertos, obligó a realizar la fosa común de Valfarta, localizada en el interior del cementerio. De acuerdo con el Sistema de Información de Patrimonio Aragones (SIPCA) “En ella reposan los restos de un número indeterminado de soldados republicanos muertos en el hospital militar que se instaló en esta pequeña localidad durante los primeros tiempos de la guerra. Los restos permanecen aún en el escueto recinto del cementerio, aunque los informantes no recordaban su paradero exacto, ni mucho menos el número preciso de los que fueron enterrados allí «.

Al poco, las tropas nacionales del sector de los Monegros fueron avanzado en una profundidad de 32 kilómetros, apoderándose de los pueblos de Valfarta, Peñalba y Candasnos. “En este profundo avance la columna motorizada ha encontrado volados todos los puentes y alcantarillas y ha sido preciso hacer desviaciones en todos esos pasos” Nueva España 27 marzo 1938.

Hospital de Sariñena, fallecidos de guerra


Sariñena fue un enclave estratégico del frente de Aragón, albergando el cuartel general del alto mando militar del XI Cuerpo Republicano, el aeródromo de Alas Rojas y el Hospital Militar. La presencia de altos mandos, destinados principalmente al campo de aviación de Sariñena Alas Rojas, como es el caso del Comandante Reyes, proporcionó orden y control en la zona, produciéndose pocos desmanes y asesinatos. No obstante, el Hospital de Militar de Sariñena acogió numerosos heridos y fallecidos, soldados y milicianos, tanto del frente de Alcubierre como del de Huesca.

Artículo enmarcado en la serie sobre la guerra civil en Sariñena

En las actas de defunciones encontramos abundante información que desarrollamos y compartimos, esperando que sea de ayuda para muchos de sus familiares que puedan desconocer que les había deparado. Las diferentes letras-grafías han dificultado mucho su lectura, así que existen muchos errores por subsanar, por lo que manifiesto las oportunas disculpas.

En el hospital militar de Sariñena ingresaron soldados y milicianos por combates en el frente y por combates aéreos, fallecían por heridas de bala, principalmente del máuser, de metralla, de accidentes automovilísticos y en los últimos tiempos de la contienda por los bombardeos. Algunos ingresaban ya cadáveres y otros fallecían a los pocos días, aparecen anónimos y otros que se identifican por medio de postales y testimonios de otros milicianos.

Todas las actas vienen certificadas por los diferentes directores del Hospital Militar de Sariñena. Encontramos al médico Vidal Bosqued Gimeno, M. Blay, Hermenegildo Claret, Pedro Cascales Ballarín, Juan Marcé, Antonio Porta, Antonio Carrera, Pelayo Vila y unos difícilmente legibles y mal transcritos: G. Sevelvo, Muvi Lameca e Yoace Bogueras. También encontramos la certificación por parte del médico del campo de aviación “Alas Rojas” de Sariñena el doctor  Manuel  Conde López.

Como juez municipal aparece Candido Alegre Sarrate y secretario Manuel Carpi Arroyos.

De muchos de los soldados, milicianos y fallecidos se conoce su procedencia, así encontramos diversas localidades como: Almería, Baleares, Bellcaire (Gerona)  Calaceite, Calamocha (Teruel), Casas Benister  (Cuenca), Ejea de los Caballeros, Francia, Gijón, Lanaja, Leciñena, Pamplona, París, Peracals (Montcortes, Lérida), Portugal, Tarragona, Tornos (Teruel), Teruel. Además, en muchas actas figura la unidad a la que pertenecían: Ametralladoras de Manresa, Brigada mixta internacional nº 159, Brigadas Mixtas 119, 121, 122, 123, 124, 126, 131, 134, 137, 140 y 141, Columna del 19 de abril, Columna de los Agrupados, Columna de Barrio, Columna Francisco Ascaso, Columna Valles y Rovira, de la 32 división, del Escuadrón de caballería de Barcelona, Guardias de asalto, Regimiento Gerona y Voluntarios de aviación. También aparecen dos fallecidos del ejército franquista: Fausto Comas, del Regimiento Gerona y Juan Eltoro Pueyo, del mismo regimiento, que había sido hecho preso.

Reseñable es acta de un fallecido perteneciente al Batallón Thälmann, un batallón integrado en las Brigadas Internacionales. Su nombre fue un homenaje al líder comunista alemán Ernst Thälmann (nacido en 16 de abril de 1886 y ejecutado el 18 de agosto de 1944). A lo largo de su existencia llegó a tener hasta 1.500 integrantes, principalmente alemanes y austriacos, así como de otros países de Centroeuropa y Escandinavia. (Wikipedia)

La actividad del aeródromo Alas Rojas también se ve reflejado en las actas de defunciones. En ellas parecen las actas del teniente de aviación Luis Aguilera, el Alferéz Faustino Ferret, el Sargento José Fernández González y el cabo de bombardero de aviación Emilio Navarro Colay, que fallecieron el día 19 de octubre de 1936 en combate aéreo “a consecuencia de heridas de armas de fuego”.

En el acta de Emilio Navarro encontramos una importantísima información, la descripción exacta y detallada de una posible fosa común: “Se consigna que se halla enterrado en una fosa a las distancias siguientes por norte a 7 metros del camino central del cementerio, por sur a 25,50 metros de los nichos, por este a 22 metros de los nichos, por oeste a 77 metros de la tapia del cementerio.”

Las actas van reflejando hechos y sucesos de la guerra en Sariñena, así los días 11 y 12 de diciembre  de 1937 se produjeron bombardeos sobre Sariñena, unos bombardeos por parte de la aviación fascista de los cuales resultaron fallecidos Ricardo Casas Blando, Miguel Cabristany Roca y Ramón Figueras Miguel. Otro bombardeo registrado fue el 10 de marzo de 1938, cuando resultó fallecido Ángel Ariste Justo.

No obstante, encontramos algún fallecido en el Hospital militar de Sariñena cuya acta de defunción no consta en el registro de Sariñena y si en cambio en el registro de su población. Este es el caso de Ernest Amorós i Figueres, natural de La Sentiu (Lérida), donde, en dicha localidad, consta su acta de defunción. Fuente: Ferran Dalmau. No obstante, en este sentido Josep Benet, Jordi Oliva, Robert Bonjorn, Josep Pla, Joan Civit y Delfí Solé, en su trabajo «Combatientes de la Noguera muertos en el frente y civiles muertos de accidentes derivados de la guerra. Evaluación final del coste humano.» matizan: «Según la versión del Registro Civil de La Sentiu, Ernest Amorós murió en el Hospital de sangre de Sariñena a causa de las heridas producidas por la metralla el día 11 de noviembre de 1936. La nuestra, sin embargo, es que recogiendo la información que se ha podido obtener paralelamente en el Registro Civil de Lleida y en el Registro de Cementerio de esta misma ciudad, que el lugar donde realmente habría muerto, si tenemos en cuenta que fue el mismo lugar donde lo enterraron, habría sido Lleida.»

Con la entrada de las tropas “nacionales” se produjeron las primeras víctimas registradas por el bando vencedor. El 18 de abril de 1938 el Equipo Quirúrgico Móvil del Capitán Vizcaíno inscribió el fallecimiento de un soldado perteneciente a la 1ª de Tetuán, otros soldados franquistas pertenecían a falange nº 49, al regimiento de Valladolid y a la 2ª Bandera del tercio de África. También aparece el doctor Luis Mella.

Así, esperamos que este trabajo de investigación contribuya al conocimiento y difusión de la memoria histórica en torno al Hospital Militar de Sariñena. En su memoria.

Relación de personas fallecidas durante la guerra

Unos de los primeros ingresos debieron ser los italianos Mario Angeloni y el anarquista Vicente Perrone, miembros de la columna italiana que operaba en el frente de Huesca. “Casi sin poder reaccionar, Angeloni fue gravemente herido en un pulmón, quedando en mala situación toda la patrulla, que finalmente, pudo retirarse, recogiendo Bolgiani al herido Angeloni, que aún llegó con vida al hospital de Sariñena, donde murió al día siguiente.”

Ambos fueron heridos el 28 de agosto de 1936 y trasladados al hospital de Sariñena donde fallecieron. (La Columna Italiana en el frente de Huesca J.L. Alcofar Nassaes.  Revista Historia y vida, nª101). No se han encontrado sus actas de defunción.

Mario Angeloni

Fallecido el 28 de agosto de 1936.

Abogado y político antifascista italiano, dirigente del Partido Republicano, combatió en la Primera Guerra Mundial como oficial de Caballería, obteniendo en la batalla de Capporetto la Medalla de Plata al Valor Militar. Participó en la Guerra Civil española con Carlo Rosselli (comandante político) y Camillo Berneri (representante de los anarquistas), se convirtió en el comandante militar de una columna militar republicana en el frente aragonés. Murió en el hospital de Sariñena de las heridas sufridas en la batalla de Monte Pelado. Presencia italiana en la milicia española José María Blanco Núñez (Coord.)

Francisco Rebollo Martínez

Acta de defunción 8.147, 5 de septiembre de 1936

Natural de Cartagena, ingresó en el hospital de Sariñena el día 1 de septiembre, perteneciendo a la Columna García Oliver de la F.A.I. La causa una peritonitis producida por herida de bala en el vientre. Inscripción realizada por el doctor Nogueras,  no habiéndose podido saber más datos.

Un miliciano

Acta de defunción 8.148, 5 de septiembre de 1936

No se puede inscribir el nombre de un miliciano por no poder declarar el difunto por hallarse en estado comatoso, según hace ver en nombre de la certificación facultativa presentada por D. Vidal Bruged. Falleció en el Hospital de esta villa el 3 de septiembre de 1936.

José Segarra Cases

Acta de defunción 8.149, 2 de septiembre de 1936

_____ mono que le da esta _____ por llevar en el bolsillo _____ de la granota tres postales con la dirección siguiente José Segarra Cases, Batallón de montaña nº 6 1ª compañía Barbastro rematado con sello postal en el matasellos de Alcolea de Cinca y firmadas la una por Vicenta Cases y las dos siguientes por  Pilar Folaus. Entró cadáver en el hospital de esta villa el 31 de agosto de 1936. Presentaba una herida al parecer producida por bala del máuser región parental derecha. Sepultura en esta población. Inscripción médico Vidal Bruger/Porqued

Bernardino Bosque

Acta de defunción 8.150, 8 de septiembre de 1936

Llamado con estos nombres por haberlo reconocido Luis Porta vecino de esta localidad, barrio de la estación nº 18. El cadáver aparenta tener una edad de 21 años, de altura 1,60. Complexión no muy fuerte tenía una herida al parecer producida por bala del máuser en la región parental  derecha con salida por un borde de la nariz encefálica. Llegaron en la ambulancia ya cadáver el día 31 de agosto. Sepultura en el cementerio de esta villa. Inscripción médico Vidal Bruger/Porqued.

Enrique Duran

Acta de defunción 8.151, 9 de septiembre de 1936

Ingresó en este hospital el día dos de septiembre y falleció a los quince minutos. Fallecido en el Hospital de Sariñena el día dos de septiembre. Manifestación inscrita por el Director de este Hospital. Sepultura en el cementerio de esta población.

José Guember

Acta de defunción 8.152, 8 de septiembre de 1936

Natural de Pamplona. Ametralladora de Manresa, ingresó en este hospital de Sariñena el día 23 de agosto y falleció el 24 del mismo. Manifestación inscrita por el Director de este Hospital. Sepultura en el cementerio de esta población.

Eduardo Perello 

Acta de defunción 8.153, 8 de septiembre de 1936

Natural de Tarragona. Ingresó en este Hospital el día 23 de agosto del ______ y falleció el 24 del mismo agosto. Sepultura en el cementerio de esta población.

Bautista Suñen Gombao de Calaceite (Miliciano antifascista)

Acta de defunción 8.194, 10 de septiembre de 1936

Natural de Calaceite y de profesión miliciano antifascista ingresó en este Hospital el día 2 de septiembre fallecía el día tres del mismo mes. Manifestación inscrita por el Director de este Hospital.

Ernest Amorós i Figueres

Natural de La Sentiu (Lérida), miliciano de Estat Català, murió en el hospital militar de Sariñena el 11 de septiembre de 1936 (día de la Diada Nacional de Catalunya). Ernest Amorós i Figueres se encuentra enterrado en el cementerio de Lérida. Fuente: Ferran Dalmau.

Emilio Diestre Landro

Acta de defunción  8.190, 13 de septiembre de 1936

Perteneciente a la Columna de Barrio 1ª Centuria 1er Grupo.  Ha fallecido a causa de las heridas recibidas de metralla en abdomen, brazo y antebrazo izquierdo. Falleció en este Hospital el día 12 de septiembre Manifestación inscrita por el Director de este Hospital M. Blay. Sepultura en el cementerio de esta población.

Ricardo Chofer Rojo (Miliciano)

Acta de defunción 8.158, 13 de septiembre de 1936

Barcelona. Perteneciente Columna de los Agrupados 9º Grupo 1º. Muerto a consecuencia de heridas de ametralladores en la lucha antifascista de Tardienta. Falleció en este hospital el día 12 de septiembre de 1936. Manifestación inscrita por el Director de este Hospital M. Blay. Sepultura en el cementerio de esta población.

Antonio Comesa Oreta (Miliciano)

Acta de defunción 8.159,  13 de septiembre de 1936

De veintiún años de edad natural de Alumbres (Almeria). Muerto a consecuencia de herida de metrallas en las luchas antifascistas. Perteneció a la Columna del Barrio. Falleció en este Hospital el día 13 de septiembre. Manifestación inscrita por el Director de este Hospital Yoace Bogueras.

Andres Brunet

Acta de defunción 8.160, 14 de septiembre de 1936

Natural de Paris, oficial de artillería. Perteneciente a la sección de ametralladoras de la columna del 19 de abril. Ha fallecido a los veintidós horas del día 13 de septiembre de mil novecientos treinta y seis a consecuencia de las heridas de bala, que tenía en la región lumbar derecha.

 Luciano Lacorz Rodón

 Acta de defunción 8.162, 28 de septiembre de 1936

Natural de Rosal, hijo de Manuel y Bárbara. Muerto a consecuencia de lesión de médula cervical por herida de bala, sufrida luchando en el frente antifascista. Falleció en este Hospital el día 27 de septiembre. Certificación facultativa del médico director.

Eusebio Zoriel Jaime

Acta de defunción 8.163, 28 de septiembre de 1936

De 32 años de edad, fallecido en este Hospital el día 27 de 1936.

José Pérez Patoes

Acta de defunción 8.16?, 28 de septiembre de 1936

Sargento de aviación en destino en este aeródromo. Falleció en este aeródromo el día 24 de septiembre a causa de fractura de bóveda y base cráneo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por D. Manuel  Conde López, médico de aviación de Sariñena. 

Ángel Gómez  Laynatie

Acta de defunción 8.163,  13 de octubre de 1936

Perteneciente a la Columna de Francisco Ascaso 4ª centuria. Falleció en el Hospital el trece de octubre de 1936, a consecuencia “luchando contra el fascismo”. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por el director de este Hospital M. Blay.

Antonio González Valdovinos

Acta de defunción 8.171, 17 de octubre de 1936

Natural de Sariñena. Hijo de Mariano González y Paciencia Valdovinos. Soltero de diecisiete años de edad. Falleció luchando contra el fascismo el ciudadano Antonio González Valdovinos, en este Hospital el 16 de octubre de 1936 a causa de “luchando contra el fascismo”. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por el médico de este Hospital Vidal Bosqued.

Vicente Simarro Toledano

Acta de defunción 8.172, 17 de octubre de 1936

Miliciano voluntario de aviación. De diecisiete años de edad, Casas Benister  (Cuenca). Domiciliado en Barcelona C/ Blanco Garay 21 4º. Ocurrió el óbito a las 2.31 del día de (hoy) digo de ayer por haber sido arrollado por el O.R.G. en el km 92.545 (Contusión) y era miliciano voluntario de aviación. Contusión craneal, 16 de octubre de 1936. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por el médico Pedro Cascales Ballarín.

Sebastián Forné

Acta de defunción 8.173, 17 de octubre de 1936

Miliciano perteneciente a la 5ª Columna del Poum. Por falta de documentación no se ha podido identificarle con más detalle. Falleció en este Hospital el 17 de octubre de 1936. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por el médico Hermenegildo Claret.

Víctor “El Moro”

Acta de defunción 8.174, 18 de octubre de 1936

Perteneciente a la Columna Valles POUM. (Columna Valles y Rovira). Por falta de documentación no se ha podido identificar con más detalle. Falleció en este Hospital el 17 de octubre de 1936. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por el médico Hermenegildo Claret.

Félix Pérez Álvarez

Acta de defunción 8.175, 20 de octubre de 1936

Natural de ¿Gijón?. Falleció en este Hospital el 20 de octubre de 1936 a consecuencia de “luchando contra el fascismo”. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por M. Blay_____ de este Hospital.

Justo Latorre Rabanaque

Acta de defunción 8.176, 20 de octubre de 1936

Natural de Tornos (Teruel), hijo de Celestino que vive en Tornos. Falleció en este hospital el veinte de octubre de 1936. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita.

Faustino Ferret Aguilera

Acta de defunción 8.177, 22 de octubre de 1936

Alférez aviador. Natural de Barcelona, casado y  de profesión Alferez, fue trasladado a Barcelona para su enterramiento. Casado en primeras nupcias con Eulalia Pilar García, habiendo dejado tres hijos llamados Pilar, Wilfredo y Faustino. Falleció el 19 de octubre de 1936. A consecuencia de heridas de armas de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico del campo de aviación.

Saliendo de Almudévar, la columna fascista de Tardienta, topa igualmente con las milicias de la república que les barren el paso. La lucha fue intensa, fueron contenidos y finalmente se les obliga a replegarse.

En estos combates murieron heroicamente los aviadores Fernández Aguilera, Ferret y Navarro, los cuales fueron enterrados ayer a la tarde en el cementerio de Sariñena.

Resultaron también heridos los pilotos Batlle y Foyer.

Villalba, al volver del entierro de Sariñena, el cual ha constituido una gran manifestación de duelo, se dispone a trabajar activamente y se pone en contacto con los sectores de nuestro frente.

La Humanitat: Any 5, núm. 1452 (21 oct. 1936).

Luis Aguilera Cullell

Acta de defunción 8.178, 22 de octubre de 1936

Teniente de aviación. Natural de Barcelona. Soltero, fue trasladado a Barcelona para su enterramiento. Falleció el día de hoy 19 de octubre de 1936 a consecuencia de heridas de arma de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico del campo de aviación.

José Fernández González

Acta de defunción 8.179,  22 de octubre de 1936

Sargento Bombardero. Sargento de aviación, soltero, pertenecía a Getafe (Estaba en los ministerios) y fue trasladado a Barcelona para su enterramiento. Falleció el día de hoy 19 de octubre de 1936 a consecuencia de heridas de arma de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico del campo de aviación.

Emilio Navarro Colay

Acta de defunción 8.180, 22 de octubre de 1936

Cabo bombardero de aviación, pertenecía a la escuadrilla de los ¿alcray? (Tiene a su hermano que se  llama Federico. Falleció el día de hoy 19 de octubre de 1936 a consecuencia de heridas de arma de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico de este aeródromo de aviación. Se consigna que se halla enterrado en una fosa a las distancias siguientes por norte a 7 metros del camino central del cementerio, por sur a 25,50 metros de los nichos, por este a 22 metros de los nichos, por oeste a 77 metros de la tapia del cementerio.

2021_10_24_21_50_00_Arxiu_de_Revistes_Catalanes_Antigues_La_Humanitat_Any_5_núm._1452_21_oct._1

La Humanitat: Any 5, núm. 1452 (21 oct. 1936).

Eugen Wayuer

Acta de defunción 8.181,  25 de octubre de 1936

Perteneciente a la columna Thaelmann Falleció en el lugar de la estación.  El 24 de octubre a consecuencia de “luchando contra el fascismo”. Manifestación inscrita presentada por el médico  M. Blay.

José Cardona

Acta de defunción 8.183, 26 de octubre de 1936

Guardia de Asalto. Fallecido en el vagón de tren quirófano estación. El 26 de octubre de 1936.  Manifestación inscrita por el médico de guardia ¿Findeu?

Santiago ¿Montiner?

Acta de defunción 8.184, 26 de octubre de 1936

Guardia de Asalto. Falleció en este Hospital el día 26 de octubre de 1936 a consecuencia “luchando contra el fascismo”. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita.

Alfonso Solanas Farlete

Acta de defunción 8.185, 26 de octubre de 1936

De diecinueve años, natural de Leciñena, hijo de Fermín. Falleció en este Hospital el 26 de octubre de 1936 a consecuencia “luchando contra el fascismo”. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por el _______ de guardia Hermenegildo Claret.

Joao Amputo das Heres 

Acta de defunción 8.186, 26 de octubre de 1936

Natural de Sao Martinho (Portugal). Nació el 30 de marzo de 1905. Falleció el 23 de octubre de 1936, a consecuencia de heridas por arma de fuego. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita presentada por Manuel Conde López, Capitán médico del campo de aviación.

Mateo Omare Ferrer

Acta de defunción 8.187, 29 de octubre de 1936

Natural de ¿Brunola? Baleares. Nacido el 28 de octubre de 1917 según certificación facultativa y falleció a consecuencia de heridas por arma de fuego.  Fallecido el 23 de octubre de 1936.  Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación inscrita por el médico de aviación D. Manuel Conde.

José Luis Marías de Lafuente

Acta de defunción 8.200, 19 de diciembre de 1936

Capitán del 2º batallón. Natural de Ejea de los Caballeros, de profesión Capitán y de estado soltero, de 36 años de edad perteneciente al 2º batallón. Falleció en Barbastro, el 17 de diciembre a consecuencia de heridas de arma de fuego recibidas. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación _____ por el teniente coronel y el jefe ¿m. formavile grible?

Joan Rovira Xampeny

1936 inicios 1937. Falleció en el Hospital a causa de fiebres tifoideas. Soldado ejercito republicano. Escribiente en Josep Maynou. (En recuerdo de. Todas las victimas).

Ambrosio Daverio

“El Italiano”, fallecido el 10 de enero de 1937. No hay acta de defunción, su tumba aparece en el cementerio municipal de Sariñena.

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Francisco Sus Lardiés

Principios de 1937. Natural de Gurrea de Gállego, falleció en Sariñena a causa de heridas en el frente. Confederal, miliciano 126 Brigada 28 División Ascaso. (En recuerdo de. Todas las victimas).

Bernardo Albelda Peris

Acta de defunción, 8.236 , 16 de abril de 1937

Perteneciente al regimiento Infantería nº2, batallón de ________ nº 3 ametralladoras y falleció a causa de las heridas. Fallecido en este Hospital el día 14 de abril, a consecuencia de las heridas recibidas. Manifestación inscrita por el director de este hospital M.Blay.

Fausto Comas

Acta de defunción 8.237, 16 de abril de 1937

Del ejército fascista. Falleció en este Hospital el día 13 de abril a las cuatro horas y pertenecía al regimiento Gerona del ejército faccioso. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay. 

Francisco Marey Astruch

 Acta de defunción 8.238, 17 de abril de 1937

Miliciano. Falleció en este Hospital el 18 de abril de 1937 a consecuencia de varias heridas de arma de fuego en región torácica. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Emiliano Tomás Ramo

Acta de defunción 8.239, 17 de abril de 1937

De cuarenta y siete años, natural de Calamocha (Teruel). De profesión _________  Casado y deja tres hijos no habiendo otorgado_________.  Falleció en este Hospital el día 19 de abril de 1937 a consecuencia de fractura de ___ cráneo aplastamiento. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Leandro Maicas Martín

Acta de defunción 8.240, 20 de abril de 1937

Natural de Calamocha (Teruel). De profesión sastre, casado habiendo dejado tres hijos y no habiendo hecho testamento según consta en este _____ facultativa manifestada por el director de este hospital M. Blay. Estaba casado con____________. Fallecido en este Hospital el día 19 de abril de 1937 a causa amputación traumática brazo y aplastamiento base cráneo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita presentada por el director de este Hospital M. Blay.

Miguela Lacruz Espada

Acta de defunción 8.241, 20 de abril de 1937

De estado soltera no habiendo hecho testamento. Falleció en este Hospital el diecinueve de abril de 1937. A consecuencia de fractura base cráneo _________ Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Ángel Ayuda Blanco

Acta de defunción 8.242, 20 de abril de 1937 

Fallecía a consecuencia de varias heridas que recibió el mismo día en _________________. Fallecido en este Hospital el día 19 de abril a consecuencia aplastamiento base cráneo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Aurelio Auserón Escanero

Acta de defunción 8.243, 21 de abril de 1937

Soltero y falleció en este Hospital a consecuencia de ______________________________________  y extensas heridas en la cara. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

José Medina Pallarols

 Acta de defunción 8.257, 22 de junio de 1937

Soldado, de dieciocho años. Falleció en este Hospital el 18 de junio de 1937 a causa de una herida penetrante en el pie derecho. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay. 

Valero Arronia Rojo

Acta de defunción 8.257, 22 de junio de 1937

Soldado de dieciocho años. Falleció en este Hospital  el 21 de junio de 1937 a consecuencia de una herida de bala de región abdominal. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

 Ernesto  Porquet Peiro

Acta de defunción 8.261, 12 de julio de 1937

Fallecido en este Hospital el 9 de julio de 1937 a consecuencia de __- traumático y heridas en ambas _____. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital Juan Marcé.

Juan Vera López

Acta de defunción 8.263, 22 de julio de 1937

De diecinueve años. De la 124 brigada mixta ha fallecido en este Hospital,_______________ con diagnóstico de arma de fuego extensa en el mulo derecho. Fallecido en este Hospital el día 21 de julio a consecuencia gangrena gaseosa. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director Muvi Lameca.

Juan Planisi Mercadal

Acta de defunción 8.267, 3 de agosto de 1937

De veintitrés años, vecino de Barcelona. Casado domicilio calle Anselmo Clave nº 9 y pertenencias. Soldado del Escuadrón de caballería de Barcelona. Falleció en este Hospital de Sariñena el 2 de agosto de 1937 a consecuencia de choque traumático con estallido de bazo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay Gimener.

Marino Font Coll

Acta de defunción 8.271, 26 de agosto de 1937

Natural de Bellcaire (provincia de Gerona) fallecido en este Hospital el día 25 de agosto a consecuencia fractura abierta tibia derecha. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación por el director de este Hospital Antonio Porta.

Juan Eltoro Pueyo 

Acta de defunción 8.272, 28 de agosto de 1937

Prisionero fascista de veinte años de edad perteneciente al Regimiento de Gerona nº 18 6º batallón ametralladores a consecuencia de fractura humero derecho bala abdomen. Fallecido en este Hospital el día 25 de agosto de 1937 a consecuencia fractura humero derecho. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay. 

Miguel Barba Fernandez

Acta de defunción 8.273, 28 de agosto de 1937

De veintidós años de edad perteneciente a la brigada mixta 123 4º Batallón 4ª compañía. Fallecido en este Hospital el día 26 de agosto de 1937 a consecuencia de herida de bala fosa ¿ilacea? Derecha. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Antonio Ferqueda Benet 

Acta de defunción 8.274, 28 de agosto de 1937

De veintidós años de edad perteneciente a la brigada mixta 122 1e Batallón de ametralladoras. Fallecido en este Hospital el día 27 de agosto de 1937 a consecuencia herida metralla, región frontal con grandes destrozos. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Juan Oller Carreras

Acta de defunción 8.275, 28 de agosto de 1937

Soldado perteneciente a la brigada mixta nº 122 a consecuencia de amputación muslo izquierdo gangrena gaseosa. Fallecido en este Hospital el día veintisiete de agosto de 1937 a consecuencia amputación muslo izquierdo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Gabriel Aguilar

Acta de defunción 8.278,  5 de septiembre de 1937

Falleció en la carretera Venta Ballerías el día 3 de septiembre de 1937, a consecuencia de un vuelco de automóvil. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital Antonio Porta.

Francisco García Gonzalez

Acta de defunción 8.279, 5 de septiembre de 1937

De veintidós años, natural de Madrid. Estado soltero. Falleció en la carretera Venta Ballerías el día 3 de septiembre de 1937, a consecuencia de un vuelco de automóvil. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital Antonio Porta. 

Ismael Ridrer Conet

Acta de defunción 8.280, 5 de septiembre de 1937

De veintiséis años de Alcoy, soltero.  Falleció en la carretera Venta Ballerías el día 3 de septiembre de 1937, a consecuencia de un vuelco de automóvil. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital Antonio Porta.

Rafael Reyes de la Rosa

Acta de defunción 8.281, 8 de septiembre de 1937

Perteneciente a la brigada mixta internacional nº 159 2º Batallón. Fallecido en este Hospital militar el día 4 de septiembre de 1937 a consecuencia de herida de arma de fuego. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita por el médico de este hospital Antonio Porta.

Siptime Jacques

Acta de defunción 8.282  8 de septiembre de 1937

De veintisiete años, teniente de las brigada internacional mixta 110 1ª Brigada 4ª compañía. Fallecido en este Hospital militar el día 6 de septiembre de 1937 a consecuencia de herida de bala en el abdomen. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita por el médico de este hospital Antonio Porta.

Juan Diez Avellanos

Acta de defunción 8.285, 13 de septiembre de 1937

Perteneciente a la brigada mixta 131 de intendencia ingresó muerto en este Hospital el día 10 del presente a consecuencia  de ________ traumático producido por accidente de automóvil. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita por el médico de este hospital M. Blay. 

Jacinto Jaurey Berenguer

Acta de defunción 8.286,  14 de septiembre de 1937

De veintidós años, soldado de la 122 Brigada mixta 4º__ plana mayor, falleció a consecuencia de accidente de automóvil en la carretera de Sesa con gran choque traumático. Fallecido en este Hospital militar el día 14 de septiembre de 1937 a consecuencia de choque traumático. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita por el director G. Sevelvo.

Joaquín Ferrer Vidal

Acta de defunción 8.28, 27 de septiembre de 1937

De la 32 división. Cuartel General, escolta. Fallecido en este hospital el 25 de septiembre de 1937 a consecuencia de traumatismo torácico. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita por el médico de este hospital M. Blay.

Juan Heredia Ramón

Acta de defunción 8.289,  27 de ¿septiembre? de 1937

De la brigada mixta 119 E. motorizada. Falleció en este Hospital el 23 a consecuencia herida ____ muslo izquierdo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital M. Blay.

 José Morera Muñoz

Acta de defunción 8.290, 4 de octubre de 1937

De la brigada mixta 112 batallón 3º ametralladores. Fallecido en este Hospital el día 1º de octubre de 1937. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital M. Blay.

Jesús Gutierrez  Gutierrez

Acta de defunción 8.293, 25 de octubre de 1937

De estado se ignora y pertenecía este soldado _____________________________. Fallecido en este Hospital el día 20 de octubre de 1937 a consecuencia se choque traumático con fractura base craneal. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital M. Blay.

Francisco Luis 

Acta de defunción 8.301, 8 de noviembre de 1937

Perteneciente a la 126 brigada mixta 2º batallón compañía 3ª sección procedente de Vicien.  Fallecido en este hospital el 5 de noviembre de 1937 a consecuencia de una herida bala en cara doble fractura. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital M. Blay. 

Antonio Segarra Amoros

Acta de defunción 8.318,  1 de diciembre de 1937

De la 126 brigada mixta 2º batallón 2ª compañía procedente de _____. Falleció en este hospital el 26 de noviembre a consecuencia de herida metralla_________ y cabeza. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta.

Pedro Prat Ninato 

Acta de defunción 8.319, 1 de diciembre de 1937

De la 121 brigada mixta 4º batallón Compañía perteneciente de Alcubierre. Falleció en este hospital el 26 de noviembre a consecuencia de herida con arma de fuego región _______. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta.

Enrique Vilada

Acta de defunción 8.323, 6 de diciembre de 1937

Perteneciente a la 134 Brigada mixta 546 Batallón 1ª Compañía procedente del Vedado de ____. Ingresó cadáver en este Hospital a consecuencia de amputación traumática pierna derecha.  Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el jefe ______ de servicios____.

Ricardo Casas Blando 

Acta de defunción 8.325, 13 de diciembre de 1937

De veintiséis años hijo de Antonio casas ferranet? Y Joaquina Bland____ Casado con Pilar Clemente Peralta y deja una niña de este matrimonio. Pertenecía ________ a la 140 Brigada mixta intendencia. Fallecido en este hospital el día 12 de diciembre  de 1937 a consecuencia de las heridas producidas por el bombardeo de aviación facciosa en esta localidad. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta.

José Marcen Landier

Acta de defunción 8.329, 13 de diciembre de 1937

Soldado perteneciente a la 126 Brigada mixta 5 o 3 Batallón 4ª compañía. Fallecido en este hospital el día 7 de diciembre a consecuencia de herida de bala pierna izquierda. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta.

Miguel Cabristany Roca

Acta de defunción 8.332, 19 de diciembre de 1937

El Sargento. Entró cadáver en dicho Hospital de Sariñena a consecuencia del bombardeo de la aviación facciosa. Fallecido el día 11 de diciembre del año actual a consecuencia del bombardeo aviación facciosa. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta.

 Ramón Figueras Miguel

 Acta de defunción8.333, 17 de diciembre de 1937

Soldado. Entró en este Hospital de Sariñena ya cadáver a consecuencia bombardeo aviación fascista. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta.

Juana Otín Alcubierre

Acta de defunción 8.339,  17 de diciembre de 1937

De treinta y seis años. Natural de Lanaja falleció a consecuencia de heridas metralla varias partes del cuerpo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta.

Ramón Bueno Font

Acta de defunción 8.359, 25 de enero de 1938

Soldado de la Brigada mixta 141 Batallón 161 2ª Compañía. Falleció en este Hospital el día 23 de enero a consecuencia de herida de fuego  perforación de estómago e intestino delgado y grueso. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el médico de este hospital Antonio Porta y el capitán médico Cento/anto/Antonio?? Carrera.

En virtud de auto recaído con esta fecha seguido en expediente  a instancia de Dª. Teresa Font, de conformidad a la R.O. 14 enero 1842 se rectifica la inscripción por error que se llamara el inscrito Ramón Bruna Font, soltero, labrador, hijo legítimo de Antonio Bueno y Teresa Font, natural y vecino de Peracals (Montcortes) Lérida, nacido el 22 de octubre de 1912 según acreditó. Sariñena 23 de febrero de 1944. El juez municipal.

Juan Cano Penen

Acta de defunción 8.370,  28 de febrero de 1938

Perteneciente soldado a la brigada mixta 137, Brigada 547 Compañía de ametralladoras. Falleció en este Hospital a consecuencia de _________ hombro izquierdo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director Antonio Porta y Pelayo Vila.

  • Juan Cano Pérez, 25 de febrero de 1938, falleció en el Hospital de Sariñena a los 21 años de edad. Natural de Turre, era herrero y soldado republicano, 137 Brigada mixta. (En recuerdo de. Todas las victimas).

Ángel Ariste Justo

Acta de defunción 8.373, 10 de marzo de 1938

Hijo de salvador y de Presentación, de Sariñena. Falleció en este hospital  a consecuencia de las heridas recibidas durante el bombardeo de aviación el día 10 de marzo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director Antonio Porta y Pelayo Vila.

Ramón Franco

Acta de defunción 8.374, 18 de abril de 1938

Soldado perteneciente a la 1ª de Tetuán.  Falleció en este Hospital Equipo Quirúrgico móvil, capitán Vizcaíno, el día 3 de abril a consecuencia de heridas en acción de guerra. Manifestación escrita del capitán jefe firma ilegible del equipo quirúrgico móvil. Mes abril II año triunfal 1938.

Miguel Codreiro

Acta de defunción 8.375, 18 de abril de 1938

Perteneciente a la 2ª Bandera de la 5ª Compañía. Falleció en este Hospital el día 3 de abril a consecuencia de heridas sufridas en acción de guerra.

Soldado falangista sin identificar de la falange nº 49

Acta de defunción 8.376, 18 de abril de 1938

Ingresó ya cadáver en este Hospital el soldado falangista sin identificar del equipo quirúrgico móvil, capitán Vizcaíno. Falleció el 3 de abril según resulta de certificación escrita por el capitán jefe.

 Francisco Bernal

Acta de defunción 8.377, 18 de abril de 1938

Soldado del regimiento de Valladolid nº 20 1er Batallón. Falleció el día de hora consecuencia de heridas recibidas en acción de guerra, falleció el día 3 de abril. Certificación escrita por el (médico) Capitán. Certificación escrita por el capitán del equipo quirúrgico móvil capitán Vizcaíno, firma ilegible.

Francisco Campos

Acta de defunción 8.378,  18 de abril de 1938

Alferez de la 2ª Bandera del tercio de África 5ª Compañía a consecuencia de heridas recibidas en acción de guerra. Falleció en este Hospital el día tres de abril a consecuencia de heridas en acción de guerra. Certificación escrita por el capitán del equipo quirúrgico móvil capitán Vizcaíno.

Miguel Martinez García

Acta de defunción 8.379, 18 de abril de 1938

Sargento de artillería ligera de Cataluña. Natural de Huerva. Falleció en este Hospital el 6 de abril, certificación escrita por el médico Luis Mella.

Enric Ferrer Arnau

20 de abril de 938. Natural de Palamós, Gerona. Soldado ejército republicano. (En recuerdo de. Todas las victimas).

Luis García Sierra/Serra

Junio de 1938. De Barcelona, miliciano columna Durruti 26 división y comisario, cía ametralladoras. Batalla de Sariñena. (En recuerdo de. Todas las victimas).

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La post guerra


* Prototipo de carro de combaste realizado en Barbastro que fue trasladado a Sariñena. Info: Foro Worldoftanks.

Conversaciones con Manuel Olivan Foj

Episodios de la memoria histórica de Sariñena, 3ª Parte.

Fue dura la guerra y fue dura la postguerra. Durante la dictadura, muchas mujeres de maridos republicanos encarcelados o muertos, para poder alimentar a sus hijos y sobrevivir, iban a recoger el carbón quemado que tiraba el tren en un terraplén de la vía. Aquel carbón aún servía y las mujeres acudían a recogerlo, les costaba llenar sacos que después debían de llevar hasta el pueblo, a más de tres kilómetros de distancia. Volvían negras, destrozadas por el peso y la distancia, y asustadas por no encontrarse con la guardia civil, quienes les quitaban el saco a las pobres mujeres, les hacían la vida imposible. Una cara más de la represión franquista. Manuel recuerda esconder los sacos en el carro cuando volvía con su padre de recoger leña, normalmente romeros, para el horno de pan. El saco lo vendían por unas tres pesetas, para aquellas mujeres tan represaliadas y humilladas era la única forma de sobrevivir.

A una mujer la iban a coger todos los domingos la guardia civil, la mujer de Manuel fue a coser para ellas. El padre estaba exiliado en Francia y el acalde les enviaba a la guardia civil todos los domingos, a ella y a sus hijas las llevaban al cuartel, ya no comían, y reiteradamente las interrogaban. Las marcaban, las sometían, las culpaban… la represión tuvo infinitas caras en la dictadura fascista de Franco.

En la postguerra existió el “Auxilio social”, unos comedores sociales para las personas que no tenían para comer. A muchos niños y niñas de republicanos cuando les tocaba la vez los mandaban de nuevo al final de la cola, a veces ni les daban comida. A los pobres niños los trataban con odio y desprecio, como basura, y simplemente eran sólo unos niños.

Manuel tuvo que ir a la escuela, recuerda que un día les hicieron rezar, solamente alguno sabía rezar, otros balbuceaban las oraciones y otros comenzaron a reír sin parar. A un amigo de Manuel, que no podía parar de reír, el cura le soltó un manotazo que le rompió las narices. Manuel salió en su defensa -si fuéramos hombres no te atreverías-  y el cura soltó un manotazo a Manuel, rompiéndole también las narices. Manuel escapó corriendo del cura, pero el fascismo se estaba instaurando, la represión y el adoctrinamiento debían de mantener el poder del régimen franquista.

Escuchar a Manuel es abrir la tapa del arcón de la memoria de la vieja cadiera sariñenense.  La historia siempre está presente, en el silencio es amarga y en su recuerdo está la verdad y la libertad, el conocimiento y la dignificación de quienes sufrieron  el fascismo. Queda mucho por contar, muchas historias que rescatar del olvido. Historias como la de “La Mala”, una mujer que al ver pasar los aviones nacionales exclamó -¡ojala os esnucarais, (desnucarais) que vais a matar a mis hijos!-, la escucharon los republicanos y la detuvieron, después de la guerra aún permaneció unos años en la cárcel. La cárcel de Sariñena se encontraba en la plaza de Mecin, donde estaba la casa de las monjas. Otra  mujer, la siñora Juana, con una trompeta llamó a la manifestación a las mujeres para manifestarse contra el secretario, fue detenida y fue un acto muy impactante llevado a cabo por una mujer.

Ha sido un gran honor escuchar, un placer recoger la memoria y una suerte de contar con Manuel. Persona de un enorme carácter afable y familiar, gracias Manuel por compartir tus recuerdos.

Publicau en Os Monegros el 25 de octubre del 2013.

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Zancarriana w

* 31 de Octubre del 2013

Repasando lo recopilado para la elaboración de los “Apuntes etnográficos de Sariñena”, me he encontrado la memoria a las mujeres carboneras de la post guerra.

«Recuerdan como iban mujeres a recoger el carbón quemado a las vías del tren. Al carbón quemado y muy seco se le decía cagacierros. Las mujeres pobres lo cogían para venderlo. A muchos maquinistas les daban pena aquellas mujeres y les tiraban alguna vez viguetas de carbón, se lo disputaban entre ellas.»

Conversaciones con Manuel Olivan Foj


                    * Manuel Olivan Foj

Episodios de la memoria histórica de Sariñena, 1ª Parte.

Juegos interrumpidos por la guerra

Manuel Olivan Foj nació en Sariñena en el año 1927, ha trabajado como agricultor y ha sido militante del Partido Comunista. Conserva una esplendida memoria, la guerra civil la vivió con 9 años, pero hay episodios que los recuerda como si hubiesen sucedido ayer. Manuel refleja la mirada de una persona integra, honesta y de fuertes convicciones. Narra la historia con absoluto respeto, con sinceridad, con nostalgia de una juventud interrumpida por la guerra, hubo tragedia pero también tuvo su lugar la felicidad. Sirvan estas palabras como reconocimiento al ejemplo de tantas personas, como Manuel, que mantienen en su memoria el dolor que tanto se sufrió por una guerra que después instauró una terrible dictadura que oscureció los aires de libertad que soplaron en su juventud.

La familia de Manuel regentaba un horno de pan en la calle del muro (Ronda San Francisco), cerca de la plaza de la iglesia. Vivió la guerra mientras jugaba en la plaza con sus amigos, recuerda el trasiego de tropas, las fiestas, los bombardeos y varios hechos muy marcados en la historia de Sariñena. Recuerda como se llevaban al cura detenido, Manuel se encontraba jugando en la plaza. Al cura le habían ordenado en varias ocasiones que no debía celebrar misa, pero él contestaba mal, no reconocía la autoridad y a regañadientes cerraba la iglesia. Era un cura joven, al anterior lo querían mucho en el pueblo, Mosén Pedro murió antes de la guerra, era muy mayor. Un día, el joven cura, a la media hora de cerrar la iglesia por orden de ayuntamiento, la volvió a abrir para realizar misa. Cuando entró la comitiva del ayuntamiento le encontraron una pistola escondida, lo apresaron y se lo llevaron; más tarde, lo asesinaron en el cementerio.

En aquellos tiempos enterrar costaba mucho, el enterrador era mayor y las fosas las tenía que picar a mano. El cuerpo del joven cura lo quemaron, fue la solución más fácil. También quemaron los cuerpos de unos treinta falangistas que atraparon y fusilaron en la sierra de Alcubierre. Relatan que los cuerpos al quemarse parecían encogerse y el enterrador asustado vio como algún cadáver se sentaba, infundiendo un miedo desconocido para un hombre muy curtido en el oficio de enterrador.

Tras la guerra, el enterrador permaneció preso cuatro años, el pobre nunca se había significado, simplemente lo encerraron por ser enterrador. Antes de la guerra muchos zagales iban de rabadanes, a veces tan sólo por un trozo de pan al día. Cuando el enterrador contaba con once años acudía como rabadán a una finca de Moncalvo, en el lugar permanecían por periodos de unos quince días; así que tenía que ir al pueblo en busca de provisiones cada cierto tiempo. Una vez volvía con la burreta cargada de pan, patatas, judías, aceite… que el amo del ganau, el siñor Pedro Salavert les había proporcionado. Al pasar por unos corrales escachados cerca de la viña de Portera (a la salida del pueblo dirección Pallaruelo), le salió al paso un gitano -¿ande vas chiquer? ¡trae to p´aca!-, y le arrebató toda la comida. Entonce, el joven enterrador, agarró la vara de pastor (con la que cazaban alguna liebre) y lo pilló por detrás, arreándole un garrotazo que lo dejó muerto. Preocupado retornó al pueblo para contárselo al siñor Pedro, quién además era el alcalde, -¡siñor, siñor, lo he muerto!- . Quedaron en tirarlo al brazal de los Estopañales, nadie lo había visto, así que si lo escondía bien y nadie lo veía, de lo acontecido nadie se enteraría, y así ha sucedido durante años.

Cuando fueron a quemar todo lo de la iglesia ofrecieron la madera para el horno de la familia de Manuel. Su madre se negó rotundamente, aunque la tirasen al río. Para tirar el altar ataron una soga a un santo y una veintena de hombres se pusieron a tirar, el altar era tan fuerte que solamente se rompió el santo. Muchos zagales dejaron sus juegos para ver lo que hacían. Todo se quemó, todas la imágenes y altares de la iglesia.

Cuando se produjo el alzamiento militar, Luis el capitán de la Guardia Civil del puesto de Sariñena telefoneó a su hermano, el teniente coronel de la Guardia Civil de Huesca. El encargado de la telefonía de Sariñena, Mariano López Javierre, espió las conversaciones. Luis le contó a su hermano la situación en Sariñena, mala para los sublevados. Luis recibió la orden de bajar hasta Fraga e ir sublevando los cuarteles hasta Huesca, Luis le trasladó a su hermano que no había incidentes y que no querían exponer sus vidas. Pero era una orden y la tuvo que acatar, así que se montó en un coche junto a otros guardias civiles y se dirigieron hasta Monzón. Ahí les recibieron unos vecinos que montaban guardia, les dejaron pasar y les dijeron que realizaban una patrulla rutinaria. En Binefar también se encontraron a varios vecinos haciendo guardia, pero pronto se percataron que los estaban esperando y viéndose atrapados pensaron en disparar, pero sabían que no tenían escapatoria, además tenían familia y debían velar por ella. Al final dejaron marchar a todos menos al capitán Luis, lo encarcelaron en Barbastro y lo fusilaron al poco tiempo, en el mes de agosto.

 Al mando del cuartel de Sariñena se quedó un Brigada, pronto un comité de personas del ayuntamiento les hizo entregar las armas. El brigada tenía un hijo que marchó de voluntario a la columna de Durruti. Eran una familia numerosa y pidió al ayuntamiento sustento, se quedaba sin nada al dejar el puesto, así que lo contrató el ayuntamiento y se dedicó a supervisar y organizar las guardias que se hacían en el pueblo.

En Lanaja había varios obreros que se encontraban realizando las obras del canal de Los Monegros. Aquellos obreros supusieron para Lanaja una entrada de ideas sindicalistas, compartían conversaciones con las gentes del lugar cuando se tomaba un café o cuando se juntaban para tomar un chaterde vino. A unos dos o tres días de comenzar el alzamiento militar, dos sobrinos falangistas de una casa de Lanaja, subieron desde Zaragoza con dos camiones junto a unos 6 u 8 falangistas. Detuvieron a unos 16 trabajadores y sindicalistas del canal, los subieron a los camiones y comenzaron su regreso a Zaragoza. Los camiones se detuvieron en la plaza del pueblo de Alcubierre, donde antes existía un frontón. Ahí fueron rápidamente fusilados los 16 obreros, pues los falangistas sabían que dos camiones habían partido desde Sariñena para interceptarlos. Los falangistas no tuvieron tiempo de rematar los cuerpos, de dar el tiro de gracia y así, uno de los trabajadores, sobrevivió haciéndose pasar por muerto entre los cadáveres de sus compañeros.

       Continuará…

Publicau en Os Monegros el 11 de octubre del 2013.

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Zancarriana w

Recuperando la memoria de Elisa García Sáez


Recuperando la memoria de Elisa García Sáez

La memoria de Elisa García Sáez se continúa recuperando y dignificando. El historiador  Jordi Rabassa, del barrio barcelonés de Sant Andreu, lleva realizando un valioso trabajo de investigación, plasmado en un imprescindible y recomendable artículo “Elissa García. La història de l’oblidada miliciana andreuenca”, que podemos encontrar en su blog“perqué vull”. En otro artículo, Jordi Rabassa rescata una fotografía familiar de la miliciana Elisa García Sáez, en la cual podemos apreciar su juventud, además aparecen nuevas informaciones sobre Elisa.

También se puede encontrar información sobre Elisa en la página de la enciclopedia virtual de Wikipedia. Animamos a que se traduzca el artículo a otras lenguas.

Desde el proyecto cultural “Os Monegros” manifestamos nuestra solidaridad y apoyo a las activistas que homenajeaban a la miliciana y cooperativista Elisa García Sáez, que sufrieron la represión de la Guardia Urbana de Sant Andreu. Represión  por realizar una acción de recuperación y dignificación del pasado, dentro de las Jornades d’Acció Feminista Autònoma de Barcelona. Animamos para manifestar solidaridad,  ¡Absolució!.

Continuamos tratando de leer las frases que se picaron en la tumba de Elisa García Sáez. Su lectura es muy difícil y la gente mayor no se acuerda. Vamos preguntando y difundiendo para encontrar a alguien que recuerde y nos ayude a recuperar su memoria picada. Este próximo miércoles 13 de marzo, divulgaremos su figura en la emisora local de Ser-Sariñena. Confiamos que pronto su memoria sea recuperada: Elisa García Sáez ¡Estás muerta y no lo estás!

Publicau en “ Os Monegros el 11 de febrero del 2013.