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XI Cuerpo del Ejército del Este


Sariñena fue Cuartel General del XI Cuerpo del Ejército del Este. En el presente trabajo, realizamos una aproximación a la estructura militar durante la guerra civil en la zona republicana, contextualizada en el Frente de Los Monegros y su punto neurálgico de Sariñena. Un desarrollo complejo no exento de conflictos y lucha de poderes, de organizaciones paralelas; una historia compleja y controvertida, aún en nuestros días, donde dar una foto fija resulta complicado. Donde cometer errores es fácil, pero que tratamos de dilucidar con diversos apuntes, tratando de comprender un entramado complejo hasta llegar al XI Cuerpo del Ejército del Este establecido en Sariñena como Cuartel General hasta la caída del frente de Aragón y su traslado a Lérida.  

La sublevación

Con el inicio de la sublevación militar, el 18 de julio de 1936, Aragón queda dividido en dos, de norte a sur, partido por la mitad. En Zaragoza, las tropas de Miguel Cabanillas secundan la sublevación militar e igualmente pasa en Huesca y Teruel capital. La zona oeste de Aragón queda en manos de los nacionales, mientras la parte este de los republicanos.

Aquellos primeros días, la estructura del ejército, en la España leal a la República, queda trastocada. Los Estados Mayores en Madrid, Valencia y Barcelona se desintegran: “En la División catalana buena parte del Estado Mayor había participado directamente en la conspiración y la sublevación. En la Primera División (Madrid), disuelta el 22 de julio, la oficialidad pasó a situación de disponibilidad y en muchos casos buscó ocultarse, pasar a zona rebelde o refugiarse en una embajada. El Estado Mayor de la Tercera División (Valencia) se mantuvo sobre el papel, hasta que el general Miaja lo disolvió a mediados de agosto cuando ya el poder civil y miliciano estaba en manos del Comité Ejecutivo Popular. En la Cuarta División (Barcelona) el caos revolucionario frustró un intento de recomponer la División.” (Tesis doctoral Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española (1936-1939). Arturo García Álvarez-Coque).

El Ministerio de la Guerra del gobierno de la República, presidido por José Giral, con grandes dificultades, trata de crear un Ejército de Voluntarios, formando para ello la Inspección General de Milicias: «Pero la realidad de su atomización y la urgencia de las operaciones, así como la formación de milicias populares armadas por partidos y organizaciones sindicales dificultó el proyecto» (Wikipedia). Este vacío es ocupado por los partidos y sindicatos para organizar columnas de milicianos para combatir la sublevación militar.

El Comité Central de Milicias

El Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña se crea el 21 de julio de 1936, formado por partidos y sindicatos catalanes para organizar, principalmente, milicias populares. Se considera que nace ante la falta de legitimidad del estado y de la misma Generalidad de Cataluña, organizándose como un gobierno paralelo a la Generalidad, con la que convivio durante dos meses y dominado principalmente por fuerzas de la CNT.

Diversas columnas de milicianos, formadas y organizadas por partidos políticos y sindicatos, parten desde Barcelona al Frente de Aragón.

El 31 de julio de 1936, el gobierno de la Generalidad establece una Consejería de Defensa para hacerse cargo de las cuestiones militares. El teniente coronel Felipe Díaz Sandino es nombrado Consejero de Defensa y Vicente Guarner subsecretario de la Consejería quien, en agosto de 1936, queda encargado de organizar las columnas que parten al Frente de Aragón. El 3 de septiembre de 1936, la Consejería de Defensa de la Generalidad, decreta la creación de la Escuela Popular de Guerra. “Oficiales de Estado Mayor leales (Matilla, Martínez Anglada, Martínez Visiedo, San Juan y Guarner), pasaron a servir en la Consejería de Defensa de la Generalitat” (Tesis doctoral Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española (1936-1939). Arturo García Álvarez-Coque).

El Comité Central de Milicias continúa hasta su disolución el 27 de septiembre de 1936 por parte de Díaz Sandino. El 1 de octubre es disuelto definitivamente, quedando las milicias en un cuestionable control bajo la Consejería de Defensa de le Generalidad de Cataluña.

El Consejo Regional de Defensa de Aragón 

El Consejo Regional de Defensa de Aragón (CRDA), también conocido como Consejo de Aragón, se crea el 6 de octubre de 1936; aunque no es legalizado hasta el 23 de diciembre del mismo año. Un gobierno autónomo que constituyó un Estado Libertario propio en el Aragón republicano.

El Consejo, en su esencia dominado por la CNT, es presidido por Joaquín Ascaso. Durante sus diez meses de existencia, actúa organizando administrativamente la mitad oriental de Aragón; aunque, de facto, no tuvo ningún control sobre las milicias que operaban en el frente de Aragón. Es considerado un gobierno autónomo y revolucionario, impulsando las colectividades; se puede decir que impulsó medidas económicas revolucionarias, fortaleciendo las colectividades al mismo tiempo que luchaba contra el fascismo.

El Consejo Regional de Defensa de Aragón opera hasta su ilegalización y disolución tras el decreto del 18 de agosto de 1937 por parte del presidente de la República Juan Negrín. Joaquín Ascaso es detenido, interviniendo la 11ª División del comandante Lister. José Ignacio Mantecón es nombrado gobernador general de Aragón.

La militarización de las milicias, hacia un Ejército Popular de la Republica

El 11 de septiembre de 1936, el Estado Mayor del Ministro de la Guerra, dicta las Directivas a que deben sujetar su actuación los jefes de columna, sector y teatro de operaciones, a fin de garantizar la unidad de acción. En el mismo se definen las zonas de operaciones: Centro, Aragonés, Andaluz y Norte y su composición sectorial, estableciendo “En cada teatro de operaciones ejercerá el mando de todas las fuerzas […] un jefe militar auxiliado por un Estado Mayor […]. Igualmente, en cada sector existirá un jefe militar con su Estado Mayor así como en las columnas de un mismo sector cuando el efectivo de ellas sea superior a 4.000 hombres” (AGMAV, C.232, 1, 2).

A su vez, el gobierno de Largo Caballero comienza la militarización de las milicias, una serie de medidas que unifican y organizan todas las fuerzas en un ejército regular, hasta suprimir las columnas de milicias de sindicatos y partidos para ser englobados en el ejército popular subordinado al gobierno.

Así, las milicias son disueltas y las distintas unidades son reorganizadas en el Ejército Popular de la República, entre octubre de 1936 y la primera mitad de 1937. En realidad, este proceso es convulso, debido a la oposición de las milicias anarquistas y del POUM a la militarización, por lo que esta no llega a materializarse hasta los sucesos de mayo de 1937.

Mando de la circunscripción del Centro

Con la organización del Ejército Popular de la República, a finales de octubre de 1936, se reorganiza el frente aragonés y sus columnas. Para ello, la Consejería de Defensa de la Generalidad, a través del Comité Central de Milicias, en la denominada Asamblea del Comité de Guerra del Frente de Aragón o Conferencia de Sariñena, impone «A todo el frente de Aragón un mando único» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). El Comité Central de Milicias, en el mismo mes de octubre, se autodisuelve, pasando sus miembros a formar parte del gobierno de la Generalidad como consejeros. Para el historiador y periodista Víctor Pardo Lancina, es un intento de la Generalitat por recuperar el control del frente de Aragón (A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Pardo Lancina, Víctor).

De esta manera, en octubre de 1936 el frente aragonés queda dividido en tres circunscripciones y dos sectores. De las tres circunscripciones del frente aragonés, el frente de Los Monegros abarca parte de la Circunscripción Norte y Centro del frente de Aragón, asumiendo Sariñena el Mando de la Circunscripción del Centro.

La restructuración, aprobada en octubre de 1936, del frente de Aragón, establece tres grandes circunscripciones y dos sectores:

  • La circunscripción del Norte, con mando en Barbastro, comprendía las columnas “Roja” y “Negra”, “Aguiluchos”, la del P.O.U.M. y la del coronel Villalba.
  • La circunscripción del Centro, con mando en Sariñena incluía las columnas de Durruti y la Del Barrio.
  • La circunscripción del Sur, con mando en Caspe, agrupaba todas las columnas que se habían agregado a la de Ortiz.

“Los dos sectores eran el «Maciá-Companys» con mando en Montalbán, y el Pirenaico con mando en Boltaña. Todas estas fuerzas quedaban bajo el mando del comandante don Alfonso de los Reyes, quien además seguía teniendo a su cargo todas las fuerzas de Aviación”. (Morera, Arturo. La guerra del 36 en Sariñena).

Asimismo, las circunscripciones se dividen en sectores y subsectores, quedando Aragón definido en seis sectores: Alto Aragón, Norte Aragón, Centro Aragón, Sur-Ebro, Montalban y Teruel. De aquellos seis sectores, los sectores Norte Aragón y Centro Aragón abarcan el frente de Los Monegros.

Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad en Sariñena

Sin embargo, antes de asumir completamente el mando de todas las fuerzas por parte del Gobierno de la República, en octubre de 1936, con la reorganización del frente, se establece una Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad en Sariñena. El comandante Alfonso de los Reyes es elegido como jefe único de todas las fuerzas, con su cuartel general en Sariñena, como jefe general de operaciones del frente aragonés.

Todas las fuerzas del frente de Aragón quedan bajo el mando del comandante Alfonso de los Reyes, además seguía teniendo a su cargo todas las fuerzas de Aviación. Así, en palabras de Arturo Morera «En Sariñena se establecía una Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad». Mientras el comandante Reyes es elegido como jefe único de todas las fuerzas, la jefatura o jefe del Estado Mayor, de la delegación de Sariñena, recae a cargo del comandante de infantería José Guarner Vivancos, hermano del comandante Vicente Guarner Vivancos, encargado en la organización de la Consejería de Defensa de la Generalitat como un Estado Mayor.

«El teniente coronel Vicente Guarner, jefe de Estado Mayor en la Consejería de Defensa de la Generalidad de Cataluña, sugirió al Comité Central de Milicias sus ideas de cómo debían coordinarse las actividades de las columnas. El plan fue aceptado, no sin resistencias, y Sariñena se convertiría en pieza clave en la marcha de la guerra a partir de mediados de octubre de 1936.» (Morera, Arturo. La guerra del 36 en Sariñena).

El Estado Mayor, Cuartel General de Sariñena

El establecimiento del mando único, entre las fuerzas republicanas, se asume el 16 de octubre de 1936 por el Ministerio de la Guerra a través del Estado Mayor Central: “No como órgano ejecutivo del Mando, sino como cuerpo consultivo y auxiliar de quien lo ejerce, o sea, del jefe superior” (Decreto publicado en la Gaceta el 16 de octubre de 1936. Tesis doctoral Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española (1936-1939). Arturo García Álvarez-Coque). El mismo Arturo García Álvarez-Coque apunta que, después del decreto de militarización de las milicias, el papel del Estado Mayor debía ser el de dirigir la transformación de las fuerzas milicianas en un Ejército Popular que debería parecerse cada vez más a un ejército regular.

El Cuartel General de Sariñena se organiza como un Estado Mayor, como Delegación en el frente de Aragón. Como se ha mencionado anteriormente, se estable por el comandante Vicente Guarner, quien se encarga de la jefatura del Estado Mayor de Sariñena: “Se organizó como un Estado Mayor con militares profesionales, elegidos por el Comité de Milicias. Entre ellos figuraba como jefe José Guarner, hermano de Vicente, aunque el único profesional de EM era el comandante Ricardo Clavería. Se intentaba una coordinación con el EMC en Valencia. Vicente Guarner fue enviado a esa ciudad a final de noviembre “Para exponer la situación del frente, la organización militar catalana y la escasez de medios de guerra de que disponíamos. Traté de estos asuntos con mi compañero de Estado Mayor Manuel Estrada” (Tesis doctoral Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española (1936-1939). Arturo García Álvarez-Coque).

El Estado Mayor de Sariñena se engloba bajo el Estado Mayor Central, con sede en Valencia, cuyo mando respondía a Toribio Martínez Cabrera.

Tarragona. Hacia el frente de Sariñena. El sacerdote Ángel García i Rollán ha estado designado para formar parte del Estado Mayor de Sariñena, por la cual cosa ha de abandonar sus actividades en el comité antifascista local.
  La Publicitat: (16 de octubre 1936).
Por el alto mando ha estado designado al Estado Mayor del frente de Sariñena el capitán de infantería Josep García Rollán. El señor García Rollán hasta ahora había actuado en el comité de las milicias tarraconenses.
La Veu de Catalunya: diari catalá d’avisos, noticias y anuncis.  Any 46, Núm. 12580 (17 oct. 1936) Ed. Matí.

El Cuartel General se ubica en casa Torres, en la actual plaza Estatuto de Aragón, conocida popularmente como plaza de Villanueva. «La ubicación física de estas personas y muchas otras a sus órdenes en general, tuvo su lugar preferente en la casa señorial de D. Mariano Torres, previamente requisada.» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

El Estado Mayor de Sariñena contaba con tres secciones: «Organización del Frente», al mando del comandante García Rollán; «De Información», dirigida por el comandante Jaime Bosch y «Operaciones» a cargo del comandante de Estado Mayor Ricardo Clavería Iglesias. «Completaban la nómina de cuadros militares en Sariñena el teniente coronel diplomado de Estado Mayor Carlos Botet, como comandante principal de la Artillería en el frente; el comandante Martorell, de Ingenieros, tenía a su cargo la organización de las unidades de su especialidad en todo el frente aragonés; por último, el doctor Bergós fue el encargado de organizar puestos de socorro y curación en las líneas, así como los hospitales de Barbastro, Fraga y Caspe» (Morera, Arturo. La guerra del 36 en Sariñena).

«Las funciones de este Estado Mayor van a comenzar con la creación de un grupo de unidades de fortificación y obras de las cuales fueron responsables tres ingenieros militares entre ellos Miguel Ramírez de Cartagena, con dos arquitectos, dos aparejadores y dos técnicos del ramo de la construcción. Además, los trabajos de organización del Estado Mayor para las operaciones en Aragón se van a complementar con la constitución de un grupo de transmisores y señales del que fue responsable el ingeniero de telecomunicaciones Sánchez Cordobés y se impulsará a cargo del responsable de municiones de las industrias de guerra con el nombramiento de María» (La columna MaciàCompanys. Hernández Cardona, Francesc Xavier i David Iñiguez Gràcia).

A mediados de diciembre de 1936, Toribio Martínez Cabrera visita el Estado Mayor de Sariñena junto al teniente coronel Vicente Guarner Vivancos. Unas semanas antes, Vicente Guarner Vivancos, entre los días del 16 al 21 de noviembre del 36, ya había visitado el Estado Mayor de Sariñena: «Para inspeccionar el funcionamiento del Estado Mayor en el cuartel general de Sariñena, el teniente coronel Vicente Guarner se personó en nuestra villa en los días 16 al 21 de noviembre. Vicente Guarner volvió a Sariñena acompañado del general jefe del Estado Mayor Central, Toribio Martínez Cabrera, a mediados de diciembre de 1936, en un intento de montar operaciones en Aragón para descongestionar el frente de Madrid» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

«Las diferentes columnas se relacionaron entre sí mediante una Dirección Superior del Frente de Aragón y Estado Mayor Técnico, residente en Sariñena».  

Carlos Hervas Puyal, Sanitat a Catalunya durant la República i la Guerra Civil.

Aunque el Cuartel General de Sariñena contaba con militares profesionales, elegidos por el Comité de Milicias, Arturo García Álvarez-Coque (Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española 1936-1939), apunta que el único profesional de Estado Mayor era el comandante Ricardo Clavería: «Como Delegación en el frente de Aragón, en octubre de 1936 Guarner estableció el Cuartel General de Sariñena, que se organizó como un Estado Mayor con militares profesionales, elegidos por el Comité de Milicias. Entre ellos figuraba como jefe José Guarner, hermano de Vicente, aunque el único profesional del Estado Mayor era el comandante Ricardo Clavería. Además, Arturo García Álvarez-Coque detalla cómo se intentaba una coordinación con el Estado Mayor Central en Valencia: «Vicente Guarner fue enviado a esa ciudad a final de noviembre “para exponer la situación del frente, la organización militar catalana y la escasez de medios de guerra de que disponíamos. Traté de estos asuntos con mi compañero de Estado Mayor Manuel Estrada”. 

José Guarner Vivancos fue un militar catalán, asesor de la columna de Los Aguiluchos y miembro del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña. Llegó a ser jefe de Estado Mayor de la 24.ª División y del XXIV Cuerpo de Ejército. Acabó exiliado en México.

El Ejército Popular de Cataluña

A pesar de asumir el mando único el Gobierno de la República, el 6 de diciembre de 1936, la Generalidad de Cataluña crea el Ejército Popular de Cataluña, en el mismo sentido de militarizar las milicias del frente de Aragón y tener su control. Su creación choca con el reciente formado Ejército Popular, creando reticencias por parte del Gobierno Republicano. A su vez, la propuesta del Ejército Popular de Cataluña, se apunta que no contó con el apoyo de las fuerzas del PSUC y la UGT, inclinadas a integrarse en el Ejército Popular de Largo Caballero, mientras que las filas anarquistas no llegaron a oponerse del todo al permitirles cierta independencia que perderían al integrarse en el Ejército Republicano. Sin embargo, aunque el 28 de octubre se decreta la militarización de las milicias, el Ejército Popular de Cataluña nunca logra tener el control de ellas.

Aun así, el coronel Vicente Guarner, subsecretario de la Consejería de Defensa, el 20 de febrero firma el decreto que reorganizó la estructura del Ejército catalán, conformado por cinco divisiones «Ascaso», «Durruti», «Jubert», «Carlos Marx» y «Lenin» y  dos agrupaciones independientes, las antiguas columnas Macià-Companys y Volant Catalana (Castillo, Santiago (2011). Historia de la UGT. Un sindicalismo en guerra, 1936-1939. Siglo XXI de España).

Los sucesos de mayo de 1937

En mayo de 1937, la militarización de las milicias y su control genera enfrentamientos ante la negativa de columnas que se negaban a ello, por un lado, el gobierno de Largo Caballero y los comunistas y por la otra parte los anarquistas y el POUM, acabando desencadenando los sucesos de mayo de 1937 en Barcelona, unos enfrentamientos violentos entre las dos facciones por las calles de Barcelona.

Tras los sucesos, el Ejército Popular de Cataluña es disuelto, siendo su estructura asumida por el Ejército Popular Republicano, culminando la militarización de las milicias. 

El Ejército del Este

Disueltos el Consejo de Aragón y el Ejército Popular de Cataluña y con la definitiva militarización de las milicias, la organización del frente de Largo Caballero continúa su proceso. El Ejército Popular de la República se fracciona en varios ejércitos a lo largo del territorio leal a la república, constituyendo los ejércitos del Centro, Sur, Levante, Este y Norte. Cada Ejército, que se componía en diferentes Cuerpo, estos en Divisiones; cada División se componía de unas dos a cuatro Brigadas Mixtas; mientras las Brigadas Mixtas englobaban cuatro Batallones y estos unas cuatro Compañías. Así, el 6 de mayo de 1937, con la unificación de todos los ejércitos en divisiones y brigadas mixtas, la organización del frente de Aragón pasa a denominarse Ejército del Este. (Situación de las diversas unidades y milicias republicanas en Los Monegros).

El Ejército del Este integra todas las fuerzas que operaban en el frente de Aragón, a las órdenes del general Sebastián Pozas Perea, dividido en tres cuerpos de ejército X, XI y XII con sus divisiones y brigadas. El frente cubierto llegaba desde la frontera francesa hasta Rilo, en la provincia de Teruel y contó con las divisiones 28º y 29º en Huesca, 26º y 27º en Sariñena y 25º y 30 en Caspe. “En el mes de junio se le añadió la 44º División, mientras la 33º fue a Andalucía.” («Historia de las Brigadas Mixtas del Ejército Popular de la República 1936-1939» de Carlos Engel). Para Arturo García Álvarez-Coque, en mayo de 1937, el “l’Exèrcit de Catalunya” se transforma en el Ejército del Este (Tesis doctoral Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española (1936-1939). Arturo García Álvarez-Coque).

“En diciembre de 1937 sufre algunos cambios: Ejército del Centro, Ejército de Extremadura, Ejército de Andalucía, Ejército de Levante, Ejército de Maniobra y, Ejército del Este. Julio-Agosto de 1938 se reestructura en: Grupo de Ejércitos de la Región Central, Grupo de Ejércitos de la Región Oriental.” (Pares).

“Finalmente quedó formado por los cuerpos del ejercito X XI y XII, hasta la campaña de Aragón, en que se le incorporó el XVIII Cuerpo de Ejército de Maniobra, que había quedado aislado al Norte del Ebro. Con estas unidades formó dos agrupaciones, la Agrupación Norte, con los Cuerpos de Ejército X (divisiones 42, 31 y 34) y XI (divisiones 26″, 30 y 32″), con los Cuerpos XVIII (divisiones 27, 60 y 72 y XII (divisiones 16, 44 y Bellvís). Mandaba la agrupación Norte el teniente coronel de Estado Mayor Javier Linares Aranzabe, y la Sur, el teniente el de Artillería Antonio Cordón García. En estos momentos el frente defendido por el Ejército del Ese abarcaba desde la frontera francesa, hasta la línea Villagrasa-Tárrega-Cervera-Manresa, en que limitaba con el Ejército del Ebro. En la batalla del Ebro y en la retirada por Cataluña dispuso de los Cuerpos de Ejército X, XI y XVIII, uniéndosele en la carrera hacia la frontera el XV Cuerpo de Ejército, procedente de la Reserva General.”

“Estaba mandado por el general de división Sebastián Pozas Perea, teniendo como comisario, a Virgilio Llanos Mantecón; jefe de Estado Mayor, al teniente coronel de Infantería Vicente Guarner Vivancos, comandante general de artillería, al coronel de artillería Ricardo Jiménez de la Beraza y comandante general de Ingenieros al teniente coronel de Ingenieros Heriberto Durán Casalpeu. Estos mandos sufrieron cambios en los meses siguientes, así. Pozas fue relevado por el teniente coronel de Infantería Juan Perca Capulino el teniente coronel de Estado Mayor Javier Linares Aranzabe y el comandante de Infantería Aniceto Carvajal Sobrino, fueron jefes de Estado Mayor, el teniente coronel de artillería Carlos Botet Vehí, comandante general de artillería, y Crescenciano Bilbao Castellanos y Eduardo Castillo Blanco, comisarios.”

«Historia de las Brigadas Mixtas del Ejército Popular de la República 1936-1939» de Carlos Engel.

Mandos, de acuerdo con Carlos Engel, antes de su retirada a Cataluña:

  • Jefe teniente coronel de Infantería Juan Perea Capulino.
  • Comisario José Ignacio Mantecón Navasa.
  • Jefe de Estado Mayor, teniente coronel de Estado Mayor Javier Linares Aranzabe.
  • 1ª Sección coronel de Caballería Pedro Sánchez Plaza.
  • 2ª Sección comandante Jaime Bosch Biosca.
  • 2 jefe de Estado Mayor y 3 Sección: teniente coronel de Infantería José Martínez Anglada.
  • 4ª Sección teniente coronel de Infantería Enrique Sacanell Lázaro.
  • 5ª Sección capitán de milicias José Caparrós Flores.
  • Comandante General de Artillería.
  • Teniente coronel de Artillería Ricardo Ballinas Pasarón.
  • Grupo de Información Artillera comandante de Artillería Cándido Rancaño Rodríguez.
  • Parque de Artillería teniente coronel de Artillería Ismael Palau Ferrer.
  • Comandante General de Ingenieros coronel de Ingenieros Ramón Martorell Orzet.
  • Fortificaciones comandante de Ingenieros Pedro Llabrés Sancho.
  • Servicio de Ingenieros: mayor de milicias Jesús Belón Díaz.
  • Transmisiones: mayor de milicias Santiago Herrera.
  • Intendencia coronel de Intendencia Juan Rodríguez Quirós.
  • Sanidad mayor Carlos Diez.

Ejército Popular de la República (EPR)

Ejército del Este: Se encontraba a lo largo y ancho del frente de Aragón y en aquel momento no era más que un ejército sobre el papel si bien se mantenían numerosas columnas y unidades de anarquistas de la CNT-FAI, nacionalistas catalanes o los comunistas del PSUC y el POUM. Disfrutaban de una superioridad de 80.000 hombres frente a 30.000 que alineaban los sublevados, pero la permanencia de milicias y columnas impedía un funcionamiento eficaz.

La organización del ejército se basó al principio mismo de su creación en las Brigadas Mixtas: Estas se componían de cuatro batallones (las cuales en un primer momento solían organizarse según sindicatos y partidos políticos); A su vez, cada batallón estaba formado por varias compañías. Las Brigadas Mixtas no solían exceder el número de 3000 combatientes y conforme avanzase la guerra se organizarían en regimientos, divisiones, cuerpos de ejército y Ejércitos de campo.

Wikipedia

El XI Cuerpo del Ejército del Este

La unidad del XI Cuerpo del Ejército del Este es creada el 6 de junio de 1937, en el seno del Ejército del Este. El XI Cuerpo se componía por las divisiones 26.ª, 27.ª y 32.ª,​ teniendo su cuartel general en Sariñena. ​ Cubría la línea del frente que iba desde el sur de Huesca, en unión con el X Cuerpo de Ejército, hasta el Ebro, donde se unía con el XII Cuerpo de Ejército. Durante los siguientes meses algunas de sus fuerzas intervienen en las ofensivas de Zaragoza y Belchite, las cuales, sin embargo, no llegaron a dar los frutos apetecidos («Historia de las Brigadas Mixtas del Ejército Popular de la República 1936-1939» de Carlos Engel).

En la primavera de 1938, durante la campaña de Aragón, las fuerzas del XI Cuerpo de Ejército no son capaces de hacer frente a la presión de las unidades franquistas. Para comienzos de abril, los restos del cuerpo de ejército había establecido sus posiciones a lo largo de la línea defensiva del río Segre. Durante los siguientes meses no toma parte en operaciones militares de relevancia, reorganizando sus maltrechas fuerzas tras la retirada en Aragón. Tras el comienzo de la campaña de Cataluña, mantiene la resistencia en sus posiciones defensiva, logrando algunas unidades ofrecer una fuerte oposición —como fue el caso de la 26.ª División—. A pesar de ello, la presión enemiga no remite y a comienzos de 1939 el XI Cuerpo de Ejército se ve obligado a retirarse hacia la frontera francesa junto al resto del Ejército del Este.

Carlos Engels recoge la siguiente relación de mandos de XI Cuerpo del Ejército del Este:

Comandantes

  • Teniente coronel de infantería Alfonso Reyes González-Cárdenas.
  • Comandante de infantería Antonio Gil Otero (agosto 1937).
  • Comandante de infantería Bartolomé Muntané Cirici (13 de marzo de 1938).
  • Teniente coronel de Carabineros Francisco Galán Rodríguez (4 de abril de 1938).
  • Teniente coronel de infantería Manuel Márquez Sánchez de Movellán (30 de diciembre de 1938).

Comisarios

  • Juan Manuel Molina, de la CNT.
  • Julián Muñoz Lizcano, del PSOE (1 de agosto de 1938).

Jefes de Estado Mayor

  • Comandante de Estado Mayor Ricardo Clavería Iglesias.
  • Coronel de infantería Mariano Fernández Berbiela (diciembre de 1937).

Mayor de milicias Antonio Muñoz Lizcano (diciembre 1938).
CPA: capitán de Artillería Feliciano Escalona Agrar.
CPI D de milicias Antonio Muñoz Lizcano (diciembre 1938).
CPA: capitán de Artillería Feliciano Escalona Agrar.
CPI: D.
INTENDENCIA: mayor de milicias Miguel Martí Reverté.
SANIDAD: D.
BATALLAS: Aragón y Cataluña.
PUBLICACIÓN: «Independencia» y «Noviembre».

En la documentación consultada aparece Jerónimo Roig (Septiembre de 1937) como jefe del Estado Mayor de Sariñena. Igualmente F. López (Septiembre de 1937). F. Saiz (Septiembre de 1937).

Alzola Mendiola, Juan (1909-?)  (Participa con varios cargos, teniente ayudante del Jefe de Sanidad, del sector de Ubidea-Gorbea, Oficial de jefatura de Sanidad (14 Cuerpo), Capitán ayudante del XI y XX Cuerpo del ejército y en el Estado Mayor del Ejército de Tierra). (Pares).

Carlos Engel apunta que la culminación del proceso de militarización de las columnas es la creación de las Brigadas Mixtas, unidades básicas del nuevo ejército. Para supervisar la fidelidad de las distintas fuerzas se crea la figura de Comisario Político, un oficial militar designado por el gobierno para garantizar la unidad militar.

Composición del XI Cuerpo del Ejército del Este.

La Brigada Mixta, en su estructura inicial de octubre de 1936, “Estaba formada por un cuartel general, cuatro batallones de infantería, cada uno compuesto por cuatro compañías, un escuadrón de caballería, un grupo de artillería de campaña, un grupo mixto de ingenieros y trasmisiones, y unidades de servicios” (Herrero Pérez, José Vicente (2003). «De la división orgánica a la brigada mixta: la evolución de las grandes unidades en España, 1914-1939». Revista de Historia Militar (Instituto de Historia y Cultura Militar) (93): 109-134).

En relación a la distribución de las Brigadas Mixtas, Engel subraya que las adscripciones de las Brigadas Mixtas, a las grandes unidades, es muy variable en el transcurso de la guerra y por ello no es posible dar una visión estática de la organización del ejército popular. Las Brigadas Mixtas desaparecen con la disolución del Ejército Popular al final de la guerra civil.

Como hemos visto anteriormente, las brigadas mixtas se enmarcaban en divisiones, divisiones que desglosamos con sus respectivas brigadas mixtas de acuerdo a la relación e información desarrollada por Carlos Engel en su trabajo «Historia de las Brigadas Mixtas del Ejército Popular de la República 1936-1939».

  • Divisiones 26ª, 27ª y 32ª (julio 1937).
  • Divisiones 26ª, 32ª, 44ª y 45ª (octubre 1937).
  • Divisiones 26ª y 32ª (diciembre 1937).
  • Divisiones 26ª, 30ª y 32ª (19 de abril de 1938).
  • Divisiones 26ª y 34ª (3 de septiembre de 1938).
  • Divisiones 26ª, 32ª y 30ª (diciembre 1938).
  • Divisiones 26 y 34 y BM 62 Y 176 (27 de diciembre de 1938).
  • Divisiones 30ª y 31ª (2 de enero de 1939).

26ª División.

Creada el 28 de abril de 1937. Frente de Aragón y Cataluña con puesto de mando avanzado en Bujaraloz comprendiendo las Brigadas Mixtas 119ª, 120ª y 121ª, jefe mayor de milicias Ricardo Sanz García, comisario Ricardo Rionda Castro (CNT) y Pedro Pey Sardá, de CNT (2.1938), jefe de Estado Mayor comandante de infantería Ramón Rodríguez Bozmediano, comandante de infantería Pedro Cervera Serreta (febrero de 1938). (Carlos Engel).

  • La 119ª Brigada Mixta se organiza en mayo de 1937 en el frente de Aragón, con el 1º Regimiento de la División «Durruti». La unidad fue puesta bajo el mando del mayor de milicias Domingo Belmonte Cova y encuadrada en la 26ª División del XI Cuerpo del Ejército, nueva designación de la «Durruti». El jefe de Estado Mayor era el oficial de milicias José Marculet y el comisario, Martín Gental Masdeu, de la CNT; Marculet fue relevado pronto por el capitán de Infantería Ismael Massot Pascual que, al comenzar la guerra, era teniente del Cuerpo de Asalto en Madrid. (Carlos Engel).

La Brigada es trasladada desde su sector, al de Pina, a Farlete para colaborar en la batalla de Belchite. Su papel en los combates no debió ser muy brillante, cuando Kleber decía de ella «No sirve para nada…». Después de estas operaciones pasa a cubrir el sector de Noguera-Pallaresa del frente de Huesca. Su actuación en la campaña de Aragón pasa totalmente desapercibida, uniéndose a las fuerzas situadas al Norte del Ebro y termina el 19 de abril de 1938, en La Granja de San Vicente Ferrer. En la ofensiva nacional sobre Cataluña, la 119ª Brigada Mixta fue adscrita a la reserva general del GERO, careciendo su actuación de relieve. La 119ª Brigada Mixta publicaba el periódico «Trazos». (Carlos Engel).

  • La 120ª Brigada Mixta se crea en mayo de 1937 en el frente de Aragón, con el 2º Regimiento de la División «Durruti» ahora 26ª, del XI Cuerpo de Ejército, en la que queda encuadrada. Su jefe respondía al mayor de milicias Joaquín Morlanes Jaulín y el comisario Manuel Pobel Uriarte, de la CNT. En la jefatura de Estado Mayor se sucedieron el capitán de Infantería Ramón Ramos Babiloni, un antiguo capitán retirado, el alférez de complemento de Infantería Manuel Fuentes Nieto, pasado a la escala activa, y el capitán de milicias G. Marquina. La Brigada cubría el sector de la Ermita de San Martín en el frente de Huesca. (Carlos Engel).
  • La 121ª Brigada Mixta, creada en mayo de 1937, se organiza en el frente de Aragón y a base del 3º Regimiento de la División «Durruti”, ahora 26ª, del XI Cuerpo de Ejército, en la que queda encuadrada. Su primer jefe es el teniente de Caballería Pascual Gil de Montes Villar, un alférez de complemento pasado a la escala activa, y el comandante de Infantería Manuel Bustos García que, el 18 de julio de 1936 era capitán del Cuerpo de Asalto e Barcelona, como jefe de Estado Mayor. En el comisariado se sucedieron Pedro Fernández Alonso, José Nadal, Adolfo Arnal García y Juan San Ricart, todos de la CNT. LA 121ª BM cubría el sector de Farlete. Participa en la batalla de Belchite en el sector de Fuentes de Ebro. (Carlos Engel).

27ª División.

Creada el 28 de abril de 1937. Frente de Aragón y compuesta por las brigadas mixtas 122ª, 123ª y 124ª. Jefe mayor de milicias Manuel Trueba Mirones, mayor de milicias José del Barrio Navarra (Diciembre 1937) / Marcelino Usatorre (28.3.38). Comisario Felipe García-Guerrero Matas del PSUC y César Abis Gundián (1.8.38). Jefe EM comandante de infantería Eligio Mateo Sousa, mayor de milicias Manuel Colinas (diciembre 1937). (Carlos Engel).

  • La 122ª Brigada Mixta se constituye en mayo de 1937 con el 1º Regimiento de la División «Carlos Marx», ahora 27ª, del XXI Cuerpo de Ejército, a la que queda adscrita. Como jefe el mayor de milicias Marcelino Usatorre Royos, jefe de Estado Mayor el capitán de Infantería Manuel Labandera Genovés que, al comenzar la guerra, lo era del Batallón de Montaña Madrid nº 5 de guarnición en la Seo de Urgel y comisario, Ignacio Tresaco Ayerre, del PCUS. AL formarse la Brigada se hallaba en el frente de Huesca, donde toma parte en la ofensiva de junio de 1937. (Carlos Engel).
  • En mayo de 1937 se forma la 123ª Brigada Mixta con el 2ª Regimiento de la División «Carlos Marx», ahora 27ª, del XXI Cuerpo de Ejército, a la que fue adjudicada. Su jefe el comandante de Infantería Enrique Oubiña Fernández-Cid que había sido capitán del Batallón de Montaña Madrid nº 5 de la guarnición de la Seo de Urgel. El jefe de Estado Mayor el capitán de Infantería Silverio Gallego Salvador quien, el 18 de julio de 1936, era teniente del Regimiento Alcántara nº 14 de Barcelona, y el comisario Francesco Scotti. La 123ª Brigada Mixta tenía una alta proporción de extranjeros en sus filas, reclutados entre los participantes en la Olimpiada Popular de Barcelona. Participa en la ofensiva sobre Huesca en junio de 1937 y el 11 de agosto procede a disolver el Consejo de Aragón en su sector. (Carlos Engel).
  • La 124ª Brigada Mixta se forma en mayo de 1937, con el 3ª Regimiento de la División «Carlos Marx», 27ª, según la nueva denominación, del XXI Cuerpo de Ejército, en la que quedó encuadrada. Su jefe el teniente coronel de la Guardia Civil Alfredo Semprún Ramos quien, al iniciarse el conflicto, era comandante del 4º Tercio en Madrid. Su mando es breve, pues al mes siguiente, ya había sido reemplazado por el mayor de milicias José del Barrio Navarra. El jefe de Estado Mayor era el capitán de milicias Comas y el comisario Millán Muñoz Galache, del PSUC.  Situada en el frente de Huesca, participa en la ofensiva contra esta capital en junio de 1937. (Carlos Engel).

32ª División.

Creada el 28 de abril de 1937. Cuerpo de Ejército: XI CE; X CE (2.1.39) y XI CE (27.1.39) Frente: Aragón y Cataluña. Puesto de mando: Gerona, Tarragona (28 de julio de 1938) y Alcañiz (agosto 1938). Composición: BM 137ª, 140ª y 141ª; BM 137ª, 141ª y 142ª (febrero 1938) y BM 137ª y 142ª (2 de enero de 1939). Mandos Jefe: coronel de Caballería Alfonso Arana Vivanco, comandante de Infantería Manuel Gancedo Sáinz (julio 1937) Comisario: Cristóbal Albadetrecu, Francisco Señer Martín, de CNT y Andrés Semitiel Rubio, del PSOE. Jefe de EM: mayor de milicias Emilio Bosch Montes teniente de milicias Felipe Félix Moreno Gómez (6.11.38). (Carlos Engel).

  • La 137ª Brigada Mixta se crea en mayo de 1937 como reserva del Ejército del Este, al mando del teniente coronel José Brinquis Moure quien, al comenzar la guerra, era comandante mayor del regimiento Alcántara nº 14 de guarnición en Barcelona. Se incorpora a la 32ª División del XI Cuerpo de Ejército y, a finales de julio, es enviada al Parque Samá, cerca de Tarragona, donde completa su instrucción. Al iniciarse la ofensiva nacional, en el frente de Aragón, la Brigada recibe orden de cubrir la orilla izquierda del Ebro en Quinto, donde se produce el paso del río por las fuerzas de la 13ª División del general Barrón y de la 5ª de Navarra del general Sánchez González. Los combates en esta cabeza de puente son encarnizados y la 137ª Brigada Mixta sufre importantes pérdidas que la obligan a retirarse por Los Monegros. El 25 de marzo de 1938 se hallaba en Bujaraloz, plaza que tuvo que abandonar. Finalmente puede reagruparse con la 32ª División en Mongay. (Carlos Engel).
  • La 140ª Brigada Mixta se organiza en mayo de 1937, como reserva del Ejército del Este, integrándose en la 32ª División del XI Cuerpo de Ejército. Su primer jefe el teniente coronel de Infantería Humberto Gil Cabrera quien, el 18 de julio de 1936, era comandante y se hallaba en situación de disponible en Barcelona. El jefe de Estado Mayor el capitán de Infantería Manuel Tió Vila, antiguo capitán retirado y comisario Luis Deltell Bernal, del PSUC. Después del período de instrucción se hace cargo de la Brigada el mayor de milicias Rodolfo Bosch Pearson, pero al ser procesado por el fusilamiento de milicianos del POUM integrantes de la Brigada, es reemplazado por el mayor de su misma escala Eusebio Sanz. (Carlos Engel).
  • En mayo de 1937 se crea la 141ª Brigada Mixta como reserva del Ejército del Este, en la 32ª División del X Cuerpo de Ejército. Estaba integrada principalmente por milicianos anarquistas. El mando recae en el comandante de Infantería Sebastián Zamora Medina quien, al comenzar la guerra, era capitán del Regimiento Albuera nº 16 de Lérida. Desempeña las funciones de jefe de Estado Mayor el capitán de milicias Hernández Oñate y las de comisario Justino Villaverde Ramos, de la CNT. El mando de la Brigada pasa pronto a manos del mayor de milicias Eduardo Barceló Llacuri. La 141ª Brigada Mixta operaba en el frente de Huesca. (Carlos Engel).
  • En los meses de mayo y junio de 1937 se organiza en Cataluña la 142ª Brigada Mixta, disuelta en octubre de 1937 sus efectivos son incorporados a la 32ª División del XI Cuerpo de Ejército y se forma una nueva 142ª Brigada Mixta con los batallones 565º al 568º, perdiendo su carácter original. La unidad reaparece en la campaña de Aragón, cubriendo la orilla izquierda del Ebro en Quinto, donde es arrollada por los nacionales al cruzar el río por ese punto. La retirada lleva a la 142º Brigada Mixta a Bujaraloz, plaza que pierde el 25 de marzo de 1938; Candasnos; Fraga, evacuada el día 27, y Lérida. (Carlos Engel).

El Estado Mayor del XI Cuerpo del Ejército del Este en Sariñena

El Estado Mayor de Sariñena con su Cuartel General continúo funcionando. Actuaba, como hemos comentado anteriormente, no como mando si no como órgano de organización “El Estado Mayor es un órgano impersonal, auxiliar directo del jefe de la unidad. No tiene funciones de mando ni puede dar órdenes por su obra, siempre por delegación del jefe, cuyas ordenes debe transmitir exactamente, cuidando y vigilando su puntual cumplimiento.” (AGMAV,C.813,1,2 Instrucción nº2 del XI cuerpo de Ejército sobre normas para el funcionamiento y organización de los estados mayores de división y brigada 2 hojas).

Su organización respondía a la siguiente estructura:

En las Divisiones

  • Un jefe de Estado Mayor.
  • Una sección de organización (A cargo de un oficial).
  • Una sección de información (Dos oficiales, dos sargentos y equipos correspondientes).
  • Una sección de operaciones (Con tres oficiales).
  • Una sección de servicios (A cargo de un oficial y un sargento).
  • Una sección de cartografía (A cargo de un oficial).

En las Brigadas

  • Un jefe de Estado Mayor, además jefe de instrucción.
  • Una sección de organización y servicios (A cargo de un oficial).
  • Una sección de información (A cargo de un oficial, un sargento y los equipos de observación necesarios).
  • Una sección de operaciones (A cargo de un oficial).
  • Una sección de cartografía (A cargo de un oficial).

Cada sección tenía los siguientes asuntos encomendados:

  • Organización: Selección de jefes, oficiales y asimilados. Fichero de los mismos. …. de fuerza. Altas y bajas por todos conceptos. Licencias y permisos. Cambios de destino y de situación. Documentación de carácter personal. Sueldos y haberes y gratificaciones. Reclutamiento. Voluntariado. Ascensos. Justicia militar. Pases y pasaportes. Servicios de orden. Comandancias militares. Proclamas. Relaciones con las autoridades civiles.
  • Información: Información del campo enemigo. Gráficos del despliegue enemigo. Orden de batalla enemigo. Observatorios. Observación. Planes de investigación. Proclamas de información. Evadidos. Prisioneros. Claves. Cifrado y descifrado. Información y control del personal. Relación con el S.I.M. Censura postal y telegráfica. Censura de prensa. Escucha radiotelegráfica. Material de observación. Partes de información.
  • Operaciones: Operaciones en campaña. Movimientos de fuerzas. Instrucción de los cuadros y de la tropa. Fortificación. Destrucciones. Planes de fuego. Gráficos del despliegue de las fuerzas propias.  Partes de operaciones. Reconocimientos militares. Transmisiones. Mano de obras de ingenieros y obreros. Servicio de campaña. Servicios de guarnición.

Servicios:

  • Artillería: Estado de municiones. Partes de consumo de municiones. Dotaciones. Exposición de municiones. Entregas y estados de armamento. Hadompoziciones. Material de protección contra gases. Depósitos. Falleres. Petición al escalón superior
  • Ingenieros: Material de fortificación. Movimiento del parque. Entregas. Explosivos. Parque. Depósitos. Talleres. Peticiones al escalón superior.
  • Intendencia: Abastecimiento de toda clase de víveres y combustible. Vestuario. Equipo. Material de acuartelamiento y campamento. Menaje de cocina. Recuperación. Material regimental. Gasolina. Lubrificantes. Grasas. Pagaduría. Parques. Depósitos. Talleres. Peticiones al escalón superior.
  • Sanidad: Dotaciones de material sanitario y cura y su reposición. Enfermerías y hospitales. Recuperación de enfermos y heridos. Higiene. Profilaxis. Epidemias. Enterramientos. Estadística sanitaria. Asistencia al ganado. Higiene veterinaria. Epizoótica. Parques. Farmacias.  Peticiones al escalón superior.
  • Remonta: Estados y dotaciones de ganado. Reposición. Bajas. Altas. Depósitos de remonte. Peticiones al escalón superior.
  • Correo: Todo lo relacionado con este servicio excepto en lo que afecta a la censura postal.
  • Cartografía: Cartografía del sector. Dotaciones. Entregas. Trabajos de dibujo y fotografía. Peticiones al escalón superior.

En el funcionamiento interno de los Estados Mayores, todo trabajo interno de un Estado Mayor, sea cual sea el escalón de mando al que pertenezca, se ejecutaba bajo la dirección del jefe de Estado Mayor, quien respondía ante el jefe de la unidad de su buen funcionamiento.

Los cometidos de cada uno de sus componentes son:

  • Jefe de Estado Mayor: Apertura de la correspondencia oficial. Resumen de la misma y su distribución decretada a las distintas secciones (Pasando previamente por el registro general de entradas). Los decretos los estampará el jefe de su puño y letra y señalarán claramente lo que se debe hacer y la fecha en que se debe hacer. Resumir los datos de índole toda que influyan en la situación material y moral de la unidad, para poder informar a su jefe. Recibir las orientaciones del bando para acordar a ellas al trabajo de las secciones. Informarse por los jefes de los servicios del estado de estos, a fin de facilitar su misión, coordinándolos y anticipándose a sus necesidades. Distribuir los cometidos especiales entre los oficiales del Estado Mayor. Inspección de la contabilidad del material y del gobierno del Cuartel General.
  • Primera sección (Organización): Llevar al día: Registro de entradas y salidas de los documentos de la sección. Relaciones y ficheros de jefes y oficiales. Estado de fuerza de unidades dependientes del Cuartel General. Alta y baja del personal, por todos los conceptos. Libro-registro de permisos concedidos, procedimientos judiciales y gubernativos y pasaportes y pases. Diario de bajas de guerra clasificadas. Tramitación a dos fechas (Como máximo) de los demás asuntos.
  • Segunda sección (Información) Llevar al día: Diarios de información. Gráfico de despliegue del enemigo.
  • Tercera sección (Operaciones): Llevar al día registro de entradas y salidas de documentos en la sección. Diario de operaciones. Gráficos del despliegue propio. Gráficos de la red de transmisiones. Progresos del pala de fortificación. Progresos del plan de destrucciones. Registro de ordenes de operaciones. Partes de operaciones. Distribución de la mano de obra. Memoria descriptiva del sector por reconocimientos efectuados. Tramitar demás documentos con la urgencia que el asunto exija.
  • Cuarta sección (Servicios): Llevar al día registro de entradas y salidas de documentos en la sección. Estados de armamentos, ganados, municiones y material de transportes. Parte de consumo de municiones de todas clases. Existencias en los parques de artillería, ingenieros y sanidad. Movimiento suministro en los depósitos de intendencia. Estados de vestuario, equipo y menaje. Resumen de peticiones pendientes de concesión. Gráficos de carreteras, caminos, pistas y su viabilidad. Existencias y consumo de gasolina, lubricantes y grasas. Camas vacantes en enfermería y hospitales. Movimiento de la enfermería de mando. Tramitar los asuntos que no sean urgentes con menos de tres fechas de su entrada en la sección.
  • Quinta sección (Cartografía): Llevar al día: Registro de entrada y salida de documentos en la sección. Registro de cartografía. Los mapas del sector o zona. Panorámicas del frente desde los diversos observatorios. Ejecución de cuantos trabajos de fotografía y dibujo se le encomienden.

AGMAV,C.813,1,3 Plantilla de cuartel general del  XI cuerpo del Ejército 1 hojas.

Ordenes Generales

Desde el Estado Mayor en Sariñena se dictaban Ordenes Generales, prácticamente comunicados de circulares del Ministerio de Defensa Nacional y transmisión de diferentes Ordenes Generales (AGMAV,C.813,1,1 Órdenes generales del XI cuerpo del Ejército 31 hojas). A la vez aparecen documento firmados en Lérida, sede del XI cuerpo del Ejército que debió compartir con Sariñena algunos meses antes de la caída del frente de Aragón, documentos que no incluimos.

  • Orden General del 12 de agosto de 1936, firmado por el jefe del Estado Mayor Ricardo Claveria. La orden cita la incorporación de jefe de los servicios farmacéuticos del XI Cuerpo del Ejército Pablo Cirera Feliu y la necesidad del adecuado transporte y almacenamiento de a “subsistencia animal” para evitar problemas de salud en las tropas.
  • Orden General del día 5 de septiembre de 1937 de nombramiento de José Del Barrio jefe de la 27. ª División, firmado en Sariñena por el entonces jefe del Estado Mayor Jerónimo Roig. 
  • Orden General del día 5 de septiembre de 1937: Arts único. Los jefes de División, Brigada, Cuerpo o Unidad, dependientes de este Cuerpo de Ejército procurarán, por todos los medios a su alcance, que bajo ningún concepto ni pretexto, se retengan los vehículos que se utilicen para transportes generales, los cuales forman parte de la Reserva General, que la mueve exclusivamente el Jefe del E.M. por conducto de la Jefatura de los Servicios de Retaguardia y Transporte. Las infracciones de esta disposición serán consideradas como falta muy grave y corregidos por el alto Mendo con las sanciones, que estime pertinentes. Los jefes y oficiales del Cuerpo de Tren, darán cuente por el conducto más rápido, de todas las faltes que se cometan en la ejecución de estas instrucciones. Firmado en Sariñena por el jefe del Estado Mayor Jerónimo Roig. 
  • Orden General del día 7 de septiembre de 1937 de “Concentración en Caja e incorporación a filas de los individuos del cuerpo de Servicios Auxiliares pertenecientes a los reemplazos de 1936 a 1931 ambos inclusive”. Firmado por el jefe del Estado Mayor F. López. En el mismo mes de septiembre hay un comunicado para localizar milicianos requeridos por el tribunal popular.
  • Orden General del día 9 de septiembre de 1937, por la que se transmite la felicitación de Ministro de Defensa Nacional al Ejército del Este por la toma de Belchite. La felicitación se hace pública “Para general satisfacción de todos los componentes del ejército” desde el mando de del jefe del Estado mayor A. Cordón. Igualmente se reproducen diversas felicitaciones al comandante del Ejército del Este Sebastián Pozas, telegramas del presidente del congreso de los diputados Martínez barrios, del comisario de la 107 Brigada, del 201 Batallón, del comisario inspector Ejército Centro, del comisario de la 5ª Brigada de Carabineros, del jefe superior de policía de Cataluña, del jefe regimiento naval, del jefe y comisario de la 36ª Brigada, del secretario del PSUC o del general Miaja. La orden, firmada en Sariñena, está realizada por el jefe del Estado Mayor Jerónimo Roig.
  • Orden General del día 12 de septiembre de 1937, circular para cubrir las setecientas plazas de la escuela popular de guerra nº 3. Firmado F. Saiz.
  • Orden General del día 20 de septiembre de 1937, traslada una circular del Ejército de Tierra y lleva la firma del jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 22 de septiembre de 1937, traslada circular del Ministerio de Defensa Nacional. Firmado por el jefe de Estado Mayor A. Cordón.
  • Adición a la Orden General del día 20 septiembre de 1937 del Ejército de Tierra sobre el plazo de liquidación y pago de las obligaciones del cuerpo correspondientes al ejercicio de 1936. Firmado por el jefe del Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 17 septiembre de 1937, sobre el poder de suministrar con las debidas garantías la cartera militar al personal con derecho a ella. A la vez dictamina la creación del distintivo de mando, en adición a la orden circular del Ministerio de Defensa Nacional: “El distintivo consistirá en una estrella de tres puntas, dorada, para los jefes de Gran Unidad e Inspectores, y de color azul celeste, para los jefes de Estado Mayor, llevando una los mandos de Brigada, dos de División, tres los de Cuerpo de Ejército, y cuatro los de Ejército.”
  • Comunicación debida a ausentarse el comisario del ejército del Este Virgilio Llanos, siendo sustituido por unos días por José Miret, comisario de la 31.ª División.  Orden de S.E. jefe de Estado Mayor A. Cordón y el jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 17 septiembre de 1937, traslado de la circular del subsecretario de defensa nacional sobre normalizar la entrega de material cartográfico necesario a las fuerzas combatientes. Firmado jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 2 de octubre de 1937, sobre oficialidad de milicias. Firmado jefe del Estado Mayor A. Cordón.
  • Orden General del día 5 de octubre de 1937, sobre reclamación de haberes o pensiones. Firmado jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 11 de octubre de 1937, “Ante la necesidad de proveer al personal de los frentes y a los enfermos y heridos, a consecuencia de la campaña, de los elementos de abrigo necesarios”. Firmado jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Adición a la Orden General 11 de octubre de 1937, “A partir de mañana el reconocimiento facultativo lo pasarán los oficiales médicos de cada Cuerpo a las nueve horas”. Firmado jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 15 de octubre de 1937, “Los jefes de Cuerpo de Ejército, Unidades independientes y comandantes militares de este ejército, manifestarán con urgencia a la Sección de Organización, Personal y A.G. de este Cuartel General si pertenece a los mismos el individuo Jaime Villa y Castells de 27 años natural de Oló. Firmado jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 17 de octubre de 1937, comunicación de la publicación en el Diario Oficial 246 de la convocatoria para Escuela Popular número 3 (Ingenieros) y para la número cinco (Transmisiones) para el conocimiento de interesados. Firmado jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Adición a la Orden General del día 18 de octubre de 1937, “Queda terminantemente prohibido el que las familias de los jefes, oficiales, clases y soldados residan en la zona avanzada de este Cuerpo de Ejército (Limitada por el río Cinca), debiendo las familias mencionadas que se encuentren en la zona de referencia trasladarse fuera de ella teniendo de plazo hasta fin del presente mes. Firmado jefe de Estado Mayor J. Sitjar.
  • Orden General del día 21 de octubre de 1937, para que los jefes de cuerpos, dependencias y unidades dependientes de este cuerpo de Ejército remitan a este cuartel general (Sección Organización) relación del personal que sea de oficio panadero.
  • El Ministerio de Defensa Nacional en Orden Singular de fecha 14 de octubre de 1937 (D.O. 247) publica lo siguiente:

El derecho a extracción de raciones concedido a generales, jefes, oficiales, sargentos y personal militarizado afecto a los ejércitos por los artículos 43 y 44 del Reglamento de los servicios de Intendencia en campaña, queda modificado en el sentido de que nadie podrá extraerse, con carácter reintegrable, sea cualquiera la categoría del perceptor y la zona en que preste servicio, una diaria de la composición máxima siguiente:

20 gramos de café tostado.

50 gramos de azúcar.

250 gramos de legumbres secas o pastas para sopa.

250 gramos de carne fresca o sustitutivos.

100 mililitros de aceite.

250 mililitros de vino.

Una ración de pan.

Cada 100 gramos de legumbres secas pueden sustituirse por 150 de arroz.

Mensualmente y con el mismo carácter, podrán extraer seis latas de leche condensada, dos kilogramos de tomate en conserva y dos kilogramos de jabón.

Los artículos que por su calidad lo permitan, podrán extraerse diaria, semanal, quincenal o mensualmente.

Quedan terminantemente prohibidas extracciones que excedan de la cuantía fijada.

Articulo 2.-Los jefes de las unidades dependientes de este ejército y afectos al mismo, remitirán a la brevedad posible a este Estado Mayor (Sección de Organización) relación nominal del personal que sea de oficio panadero.

Firmado el jefe del Estado Mayor.

  • Adición a la Orden General del día 21 de octubre de 1937, sobre la orden anterior, artículo 2.
  • Orden General del día 22 de octubre de 1937, sobre circular para que los oficiales y clases de las escalas activas del ejército que se encontrasen, además, en posición de empleos superiores en milicias manifestasen por instancia su opción entre ambos empleos de ejército o de milicias. Firmado el jefe del Estado Mayor A. Codón.

La historia del Cuartel General del XI Cuerpo del Ejército en Sariñena acaba con la ofensiva del bando sublevado en Aragón, Sariñena cae el 26 de marzo de 1938. El Ejército del Este dejó de existir el 8 de febrero de 1939, al cruzar la frontera en Le Perthus. («Historia de las Brigadas Mixtas del Ejército Popular de la República 1936-1939» de Carlos Engel).

Situación de las diversas unidades y milicias republicanas en Los Monegros.  


La distribución de las diferentes milicias y unidades militares, a lo largo del Frente de Los Monegros, no es una foto fija, pues fue variable a lo largo de la guerra. Su situación resulta complicada ante el número de columnas, regimientos, compañías, secciones, batallones, centurias, divisiones y brigadas mixtas. A partir de diversa documentación y biografía, se realiza, en el presente artículo, una radiografía de las distintas unidades republicanas en el frente de Los Monegros, su distribución y evolución a lo largo de la contienda.

Situación de las diversas unidades y milicias Rojas en el Frente de Aragón. Marzo de 1937.

Las Milicias

El 21 de julio de 1936, con la creación del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña, se comienza a formar y organizar numerosas columnas que parten al frente aragonés. Entre finales de julio y principios de agosto, son numerosas las columnas que llegan al frente de Aragón, tomando posiciones en un Aragón dividido por la mitad de norte a sur. Dichas columnas, organizadas por partidos y sindicatos, operan autónomas y autoorganizadas. Las columnas avanzaron con los objetivos de tomar Huesca y Zaragoza. Por la zona de Huesca llegan hasta sus inmediaciones, tratando de cercar la ciudad, estableciendo un frente sin poder llegar a tomar la ciudad en manos nacionales. El frente se va estableciendo hacia el sur hasta Alcubierre, por Tardienta, Torralba de Aragón y Robres. Mientras, las fuerzas sublevadas de la 5ª División, al mando del general Cabanellas, junto a compañías y centurias de voluntarios de Falange, requetés y reemplazos de 1934 a 1931, se hicieron con Leciñena, tomando posiciones en Farlete y Osera, al norte del Ebro, y en Quinto y Azaila, al sur, con dos puntos avanzados en Pina y Gelsa.

Por la zona de Alcubierre, las milicias republicanas llegan hasta Leciñena, finales de agosto de 1936, posición que es ocupada por parte de los nacionales el 11/12 de octubre de 1936. Las tropas republicanas se retiran a las partes altas de la sierra de Alcubierre, donde queda definido el frente sobre el puerto de Alcubierre. A su vez, tras la toma de Leciñena, se produce el fracaso del Grupo Internacional de la Columna Durruti en su ataque a Perdiguera, el 16 de octubre de 1936, viéndose también obligadas las milicias a retirarse, estas a posiciones elevadas en torno a Monteoscuro. Más al sur, por el frente de Bujaraloz, las milicias anarquistas de la columna Durruti son frenadas en su avance a Zaragoza en Pina de Ebro, el 27 de julio de 1936, estableciendo su cuartel general en Bujaraloz. Finalemente, esa parte del frente se establece desde Monteoscuro, Farlete, Monegrillo, Osera, Pina de Ebro Gelsa a Velilla de Ebro. Desde mediados de octubre de 1936 a la caída del frente de Aragón, en marzo de 1938, el frente estuvo estable.

Regiones militares

Durante la contienda, militarmente, Aragón quedó definido en seis sectores: Alto Aragón, Norte Aragón, Centro Aragón, Sur-Ebro, Montalban y Teruel. El Frente de Los Monegros perteneció a la Circunscripción Norte y Centro del frente de Aragón.

Circunscripción Norte

El sector Norte comprendió desde Huesca hasta Tardienta, con sede en Barbastro a las órdenes del General Villalba. Gonzalo Berguer considera el sector desde Arguis hasta Leciñena: «Formado por 15.106 efectivos situados de norte a sur. Al norte de Tardienta se encontraba la Columna Carlos Marx, con 300 efectivos. En Tardienta se encontraba el Batallón de Montaña nº 3, con 457 efectivos y la Columna Guàrdies d`Assalt núm. 14, con 200 efectivos. Entre Torralba y Robres se encontraba la Columna Del Barrio, con 1.200 milicianos. Entre Robres y Alcubierre estaba la Columna Macià-Companys, con 300 efectivos, la Columna Guàrdies d´Assalt núm. 14, con 136 efectivos y  la Columna Macià-Companys, con 400 efectivos. Al sur de Alcubierre estaban las columnas del Poum, con 952 efectivos y el Batallón núm. 1 del Regimiento de Cataluña, con 621 efectivos. (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo).» Hay que añadir que de Huesca a Sangarrén se estableció la Columna García Oliver – Ascaso con unos 3.700 efectivos.

Circunscripción Centro de Aragón

El sector Centro de Aragón se desarrolló desde Tardienta hasta el Ebro, con sede en Sariñena. Se centró en las posiciones de la sierra de Alcubierre y entre Farlete y la localidad de Gelsa. «Dispuso de 5.222 efectivos, en sentido Norte-Sur. La Columna Durruti ocupaba las posiciones delante de Perdiguera, con 400 milicianos (4 centurias, 432 milicianos); entre Farlete y Monegrillo, con 1.493 efectivos (15 centurias); entre Monegrillo y Osera, con 1.329 efectivos (13 centurias), y ente Osera y Gelsa, con 2.000 efectivos (21 centurias); y la reserva de la Columna Alas Rojas que tenía 500 efectivos en Sariñena. (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo).» Su Cuartel General se ubicó en Bujaraloz.

La disolución de las milicias y la creación del Ejército Popular de la República

En septiembre de 1936, el gobierno de Largo Caballero decreta la disolución del Comité de Milicias y comienza la organización de un ejército regular. En octubre de 1936, con la reorganización del frente, se estableció una Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad en Sariñena. El comandante Reyes fue el elegido como jefe único de todas las fuerzas de Aragón, con su cuartel general en Sariñena. a la vez, aquel mismo mes de octubre de 1936, se produce la militarización de las milicias, pasando estas a formar parte del Ejército Popular de la República (EPR), a las ordenes del Gobierno de la República. El proceso fue largo debido a a las reticencias de diversas columnas de la CNT y del PUOM, hasta los hechos de los sucesos de mayo de 1937. A partir de entonces, la militarización de las milicias culmina su proceso, siendo su unidad básica las Brigadas Mixtas; enmarcadas en Divisiones dependientes de los diferentes Cuerpos del Ejército.

El Ejército del Este

El 6 de mayo de 1937, la organización del frente de Aragón pasó a denominarse Ejército del Este. El Ejército del Este integró todas las fuerzas que operaban en el frente de Aragón, bajo las órdenes del general Sebastián Pozas Perea, dividido en tres Cuerpos de Ejército X, XI y XII, con sus respectivas Divisiones y Brigadas. El frente cubierto llegaba desde la frontera francesa hasta Rilo, en la provincia de Teruel y contó con las Divisiones 28.ª y 29.ª en Huesca, 26.ª y 27.ª en Sariñena y 25.ª y 30.ª en Caspe.

El frente de Los Monegros quedó bajo las ordenes del XI Cuerpo del Ejercito, cuyo Estado Mayor estuvo ubicado en Sariñena. Las unidades operaron en el frente hasta la caída de este en marzo de 1938.

El XI Cuerpo Ejército

Creado el 6 de junio de 1937, en el seno del Ejército del Este, el XI Cuerpo fue compuesto por las divisiones 26.ª, 27.ª y 32.ª,​ teniendo su Cuartel General en Sariñena. Cubría la línea del frente que iba desde el sur de Huesca, en unión con el X Cuerpo de Ejército, hasta el  Ebro, donde se unía con el XII Cuerpo de Ejército. La 26 División estuvo compuesta por las Brigadas Mixtas 119.ª, 120.ª y 121.ª; la 27.ª por las 122.ª, 123.ª y 124.ª; y la 32.ª por las 137.ª, 140.ª, 141.ª y 142.ª.

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Mapa divisiones frente del XI Ejército del Este.

En Sariñena se instaló el Cuartel General del XI Cuerpo del Ejército Republicano, albergando el mando de la Circunscripción del Centro a partir de octubre de 1936: «Cubría la línea del frente que iba desde el sur de Huesca —en unión con el X Cuerpo de Ejército— hasta el río Ebro —donde, a su vez, se unía con el XII Cuerpo de Ejército». Sariñena fue centro neurálgico del sector Centro, donde la línea férrea jugó un papel esencial, junto a Poleñino, Grañén y Tardienta. En sus inmediaciones, cerca de Albalatillo, se instaló el aeródromo de “Alas Rojas” compuesto, principalmente, por las milicias de aviación del PSUC.

Distribución de las distintas unidades por el Frente de Los Monegros:

Frente Huesca, Sector sur

Al frente de Huesca y Tardienta, Sangarrén y Vicién, llegaron las columnas cenetistas de la Columna de Ascaso, comandada por García Vivancos, y la Columna de los Aguiluchos, al mando de Juan García Oliver; llegaron hasta Grañén por vía férrea (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo). A Tardienta llegaron el día 27 de julio de 1936 y establecieron su cuartel general en Grañén el 28 de agosto de 1936. Ambas participaron en la ofensiva a Huesca. «Las posiciones de Huesca, controladas por el PSUC se situaban a la izquierda de la columna Ascaso y a la derecha de la Columna Alas Rojas. Eran un total de 1.000 efectivos sin segunda línea ni reserva.» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo).

Para Pere Cornellá i Roca (Cataluña 1937), las columnas «Aguiluchos» y «Roja y Negra», con García Oliver y el comandante Josep Guarner, de la CNT, estaban formadas por unos 3.000 milicianos: «Ocuparon el territorio situado al SO. de Huesca, cortaron el ferrocarril Huesca – Zaragoza (30 de agosto) y fortificaron la zona comprendida entre la carretera de Sariñena y los castillos de Torres Secas.»

En abril de 1937, la Columna Ascaso se convirtió en la 28.ª División. La nueva División, formada  por las fuerzas de la columna Ascaso, sumó los restos de otras fuerzas milicianas y pasó a estar compuesta por las Brigadas Mixtas 125.ª, 126.ª y 127.ª. Estuvo comandada por Gregorio Jover. La División participó en la ofensiva a Huesca del 12 de junio de 1937 que acabó con numerosas bajas entre sus filas sin llegar a cumplir su objetivo. La División estuvo operativa hasta el 27 de marzo de 1939. 

La 127.ª Brigada Mixta fue formada por el Regimiento «Rojo y Negro», de la División «Ascaso», el 28 de abril de 1937. En junio de 1937 tomó parte en la ofensiva a Huesca y el 28 de septiembre de 1937 en los ataques a Zuera. Las otras dos Brigadas de la 28ª División, 125.ª y 126.ª, se dirigieron al frente de Teruel, la 127.ª Brigada Mixta permaneció en el Alto Aragón como reserva del Ejército del Este.(Carlos Engel).

Operación Zuera – Leciñena. Carpeta Monès 13-261 Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya Fons de la guerra civil (1936-1939). El mapa muestra las diferentes posiciones republicanas frente a las nacionales desde Huesca hasta Osera.

Distribución de José Bertrán y Musitu en marzo de 1937:

Arguis

División Francisco Ascaso.

3.er Regimiento Rojo y Negro.

2.º Batallón.

1.ª y 2.ª Compañías.

Columna Rojo y Negra Centuria 13.ª y 14.ª y Ayerbe.

Frente de Lierta

Columna de Aragón.

Milicias de Barbastro y 1ª Centuria Vida.

Frente de Arascues

1.ª Centuria de Aragón.

3.era Centuria.

Grupo Ametralladoras.

Milicias de Barbastro.

5.ª Centuria.

Apiés

División Francisco Ascaso.

Columna Rojo y Negra.

Grupo Minadores Zapadores.

1.ª Columna Aragón

4.ª Centuria.

Milicias de Barbastro.

Igriés

División Francisco Ascaso.

3.er Regimiento Rojo y Negro. Sección Ametralladoras.

1.er Batallón y Sección Fus. Ametralladoras.

Columna Rojo y Negra.

Centurias 6.ª y 10.ª

Sección Ametralladoras.

Columna CNT FAI. 3.er Batallón. 1.ª Compañía. Sección Ametralladoras.

Banastas

Fuerzas Columna Ascaso.

Fuerzas Columna Rojo y Negra.

Loporzano

Columna Rojo y Negra.

Destacamento.

Frente de Huesca (Granja)

División Francisco Ascaso

Batallón Internacional. 1.ª Compañía.

Los Aguiluchos. Centurias 9.ª y 15.ª

Columna Ascaso. Centuria 4.ª. Grupo 19.º

Huerrios (Casa Blanca)

División Francisco Ascaso.

Batallón Internacional y Aguiluchos.

Batallón Italiano.

6.ª Sección Ametralladoras. 2.ª Compañía Liber.

Entre Huerrios y Banariés

División Francisco Ascaso.

2.º Regimiento 19 de Julio.

1.er Batallón Paso a la idea.

3.ª Compañía y 3.ª Compañía Sección Ametralladoras.

Cuarte

Artillería 7.º Ligero.

Los Aguiluchos.

Batería Durruti.

Vicién

División Francisco Ascaso,

Batallón Internacional.

2.ª Batería 7`5.

93.ª Batallón Artillería Ligera.

Batallón Ingenieros Minadores Zapadores Castillo Vicente Segura.

Fuerzas Infantería Regimiento Durruti División Ascaso.  

Sangarrén

División Francisco Ascaso 1.ª y 2.ª Compañía.

1.er Regimiento infantería. Sección ametralladoras. 2.ª centuria.

Entre Sangarrén y Frente de Almudévar

División Francisco Ascaso 1er Regimiento Durruti.

2.º Batallón 1.ª Compañía 2.ª y 3.ª Sección.

Frente de Almudévar

División Francisco Ascaso.

1.er Regimiento de Infantería.

1.er Batallón 1.ª Compañía. 2.º Batallón 1.ª y 2.ª Compañías.

3.º Batallón 2.ª Compañía.

Fuerzas antifascistas Aragón

Sello Cuartel General de las Fuerzas Antifascistas de Aragón.

Sector Tardienta

El 24 de julio la Columna Carlos Marx, también llamada Columna «Trueba-Del Barrio», partió de Barcelona con unos 2.000 efectivos hacia el frente de Aragón. La columna, organizada por la Unión General de Trabajadores (UGT) y el Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), salió de Barcelona en un tren blindado dirección Grañén, convoy al que acabó sumándose el batallón de ametralladoras guarnicionado en Manresa: «El tren blindado, que ya era largo al salir de Barcelona, casi dobló en el camino. En varias estaciones se engancharon vagones repletos de milicianos voluntarios» (José Barrio. Memorias políticas y militares). Al caer la noche, el convoy alcanzó Lérida partiendo a la madrugada siguiente hacia Grañén; el objetivo inmediato era ocupar Tardienta aunque no sabían si Grañén estaba en mano de los «fascistas». A su paso por Selgua, Del Barrio se reunió con el coronel Villalba; los enlaces motorizados que enviaba para conocer la situación ya le habían advertido. La idea era establecer una línea «Floja» entre Leciñena y Tardienta pero los enfrentamientos con grupos falangistas en Lanaja obligó a desviar dos centurias a Lanaja: «Del Barrio va atacar Lanaja con dos centurias sumadas a una compañía de infantería y un grupo de Guardias Civiles» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo). Sobre los sucesos de Lanaja: Las batallas de Lanaja, libro de Roberto Mateo Caballero.

Una vez en Grañén, la columna sufrió un bombardeo aéreo. Allí se encontraba un comité anarcosindicalista a las órdenes de un personaje conocido como Pancho Villa (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo). José Barrio, Memorias políticas y militares, relata «El pueblo no era en realidad de nadie. Ugetistas y cenetistas por un lado u fascistas por otro patrullaban por los alrededores del pueblo, sin que llegaran a dominarlo ni unos ni otros. Nuestra llegada resolvió la situación. Los fascistas huyeron». Barrio continúa sus memorias relatando como una vez asegurada la posición de Grañén «Empezó a reinar un anarcosindicalista que se hacía llamar Pancho Villa y que había constituido un comité que pretendía ejercer toda clase de poderes, el tren continuó hasta Tardienta».

A Tardienta comenzaron a llegar milicianos de distintas partes de Aragón y Cataluña. Llegaron varios trenes con voluntarios: el Batallón de Montaña Madrid nº1, al mando del capitán Enric Scanell Lázaro, un destacamento de voluntarios llamados «Columna Motorizada», al mando del coronel portugués Alejandrino dos Santos, y la Centuria Thaelman, centuria que llegó a contar con 135 combatientes alemanes (Entre ellos Hans Beimler, Albert Schiindler y Franz Raab), húngaros e italianos (Como Nino Nanetti y Francesco Scotti). (José Barrio, Memorias políticas y militares).

Manuel Gutiérrez, Diario de un miliciano, partió al frente de Aragón desde Barcelona el 18 de septiembre con la Centuria Serafí Espinós (JSUC) junto a la Centuria Mateotti. Llegaron a Grañén en tren, estuvo en Robres y Tardienta, así como en posiciones de la sierra de Alcubierre. En Tardienta la Centuria la Serafí Espinós, compuesta por unos 130 a 140 hombres, relevaron a la Compañía del Regimiento Cataluña nº 2. (Aula Militar “Bermúdez de Castro). Manuel Gutiérrez perteneció a la 124 Brigada mixta, 493 Batallón, Sección de Transmisiones.

«Una columna, cuyo núcleo lo constituyeron los dos batallones de montaña de Barbastro bajo el mando del coronel Villalba, ocupó Tardienta el día 25. Fue reforzada por cuatro pequeñas columnas, dos del POUM, la Francisco Ascaso y una de montañeros aragoneses y catalanes, con lo que pudo cerrase la línea desde el Ebro hasta Panticosa.» (Aula Militar “Bermúdez de Castro”).

El 28 de julio, la Carlos Marx ocupó Sangarrén y Almuniente, estableciéndose en Poleñino, Torralba y Robres. Estableció su Cuartel General en Tardienta «Al sector de Tardienta se disponían de 1.000 efectivos: 500 milicianos y 500 soldados del Batallón de Montaña nº3 (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo). La Columna “Carlos Marx” acabó integrándose en el XI Cuerpo del Ejército Popular republicano formando la 27.ª División con sus tres Brigadas Mixtas 122.ª, 123.ª y 124.ª. En Robres se instaló el Cuartel General de la 123.ª Brigada Mixta, en casa Ribas. Al mando de aquella 27.ª División estuvo Manuel Trueba Mirones. En la sierra de Robres ocuparon posiciones como La Pasionaria, El Negus y La Imposible.

El 29 de julio, la Columna Carlos Marx ocupó Almudévar, viéndose frenado su avance hacía Zuera, quedando desplegada en el sector de Huesca y estableciendo su Cuartel General en Tardienta «Al sector de Tardienta se disponían de 1.000 efectivos: 500 milicianos y 500 soldados del Batallón de Montaña nº 3 (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo).

«La columna del Barrio – comandante Sacanell. Partió hacia el frente el día 25 de julio con unos 2.000 milicianos, 3 baterías y una centuria de alemanes (Thaelmann). Ocuparon Zuera y, a continuación, fracasaron ante el ejército faccioso. A finales de 1936 tenían el frente establecido desde el SO. de Tardienta hasta Perdiguera.» (Cataluña 1937. Pere Cornellá i Roca.).

El 28 de abril de 1937, la columna Carlos Marx pasa a ser la 27.ª División. La nueva unidad quedó constituida por tres Brigadas Mixtas, la 122.ª, la 123.ª y la 124.ª, cada una con cuatro batallones de cinco compañías cada uno. En cada brigada agregaban, además, unidades de artillería y de caballería. Una de sus más conocidas unidades fue el 1.er Batallón de la 122.ª Brigada Mixta, denominado batallón de choque «La Bruja» (Maldonado, José M.ª (2007). El frente de Aragón. La Guerra Civil en Aragón (1936–1938). Mira Editores.). El jefe mayor de milicias fue Manuel Trueba Mirones, mayor de milicias José del Barrio Navarra (Diciembre 1937) / Marcelino Usatorre (28.3.38). Comisario Felipe García-Guerrero Matas del PSUC y César Abis Gundián (1.8.38). Jefe Estado Mayor comandante de infantería Eligio Mateo Sousa, mayor de milicias Manuel Colinas (diciembre 1937). (Carlos Engel). La División estuvo operativa hasta febrero de 1939.

  • La 122ª Brigada Mixta se constituyó, en mayo de 1937 con el 1.º Regimiento de la División «Carlos Marx», ahora 27.ª, del XXI Cuerpo de Ejército, a la que quedó adscrita. Su jefe fue el mayor de milicias Marcelino Usatorre Royos, jefe de Estado Mayor el capitán de Infantería Manuel Labandera Genovés que, al comenzar la guerra, lo era del Batallón de Montaña Madrid nº 5 de guarnición en la Seo de Urgel y comisario, Ignacio Tresaco Ayerre, del PCUS. AL formarse la Brigada se hallaba en el frente de Huesca, donde tomó parte en la ofensiva de junio de 1937. (Carlos Engel).
  • En mayo de 1937 se formó la 123.ª Brigada Mixta con el 2.ª Regimiento de la División «Carlos Marx», ahora 27ª, del XXI Cuerpo de Ejército, a la que fue adjudicada. Su jefe el comandante de Infantería Enrique Oubiña Fernández-Cid que había sido capitán del Batallón de Montaña Madrid nº 5 de la guarnición de la Seo de Urgel. El jefe de Estado Mayor era el capitán de Infantería Silverio Gallego Salvador que, el 18 de julio de 1936, era teniente del Regimiento Alcántara nº 14 de Barcelona, y el comisario Francesco Scotti. La 123ª Brigada Mixta tenía una alta proporción de extranjeros en sus filas, reclutados entre los participantes en la Olimpiada Popular de Barcelona. Participó en la ofensiva sobre Huesca en junio de 1937 y el 11 de agosto procedió a disolver el Consejo de Aragón en su sector. (Carlos Engel).
  • La 124.ª Brigada Mixta se formó en mayo de 1937, con el 3.ª Regimiento de la División «Carlos Marx», 27.ª, según la nueva denominación, del XXI Cuerpo de Ejército, en la que quedó encuadrada. Su jefe fue el teniente coronel de la Guardia Civil Alfredo Semprún Ramos que, al iniciarse el conflicto, era comandante del 4.º Tercio en Madrid. Su mando fue breve, pues al mes siguiente, ya había sido reemplazado por el mayor de milicias José del Barrio Navarra. El jefe de Estado Mayor era el capitán de milicias Comas y el comisario Millán Muñoz Galache, del PSUC.  Situada en el frente de Huesca, participo en la ofensiva contra esta capital en junio de 1937. (Carlos Engel).

La Columna del Negus se desplegó por Tardienta participando en los combates del 14 y 16 de agosto de Almudévar y Tardienta. En el mes de septiembre estuvo desplegada al sur de Tardienta hasta las fuerzas del POUM a Leciñena. La Columna José María Hurtado, formada por militares profesionales y miembros del PSUC, salió de Barcelona el 10 de agosto desplegándose en Tardienta e integrándose en la Columna Del Barrio. También a Tradienta llegó la Columna Jaume Graells, del PSUC-UGT. La columna partió de Barcelona el 15 de septiembre y tras una corta estancia en Tardienta en el mes de octubre fue destinada al frente de Madrid. Batallón de la Muerte, o del 19 de Julio, partió al frente de Aragón en febrero de 1937, convirtiéndose en la 153.ª Brigada Mixta de la 28.ª División. El batallón sufrió un gran castigo durante el ataque del 16 de junio de 1937 a la ermita de santa Quitèria de Tardienta.

Las fuerzas de la columna Del Barrio-Estivill-Trueba y la de Piquer-Arquer y Grosi, del PSUC y del POUM, habían ocupado Sariñena, apoderándose después de Grañén, donde unas bombas lanzadas por los aviones piratas nos causaron ocho muertos y treinta y seis heridos. Siguió el avance hacia Tardienta y Almudévar, siendo ocupados estos dos pueblos, si bien fue necesario retirarse del último después de aguantar las promesas acometidas serias del enemigo. El capitán Mimensa quedó cercado con sus hombres, batiéndose bravamente hasta que llegaron en su auxilio fuerzas del batallón de Seo de Urgel y milicianos. Alcubierre y La Naja quedaron también en muestro poder. Mi Revista. Barcelona, 1 de mayo de 1938. Los catalanes en Aragón.

La Posición de Santa Quiteria

La posición estratégica de Santa Quiteria, en Tardienta, fue una posición elevada que fue ocupada por milicianos de la Columna Carlos Marx, frente a los nacionales que habían tomado posiciones en Almudévar. La posición, junto a sus posiciones exteriores de las lomas Centro, del Medio y Larga, controlaban la línea férrea entre Huesca y Zaragoza. El 19 de octubre de 1936, las tropas nacionales, que días antes habían tomado Leciñena, atacó la posición, produciéndose un duro combate que acabó con una gran cantidad de bajas en ambos bandos cayendo la posición de Santa Quiteria en manos nacionales.

“Los cuarenta se quedaron en la harinera y los noventa restantes continuaron el camino hacia la ermita de Santa Quiteria (Se refiere a la Centuria la Serafí Espinós), posición nuestra que por la mañana habían empezado a atacar los fascistas. La ermita es una posición alta muy importante porque domina toda la plana de Tardienta”. (Manuel Gutiérrez. Diario de un miliciano).

Línea Vorochilov.

Línea Vorochilov

En el sector de Tardienta se estableció la Línea Vorochilov, tenía unos 40 kilómetros de longitud y fue construida en el sector de Tardienta. Prácticamente empezaba a los 16 km al norte de la estación del ferrocarril de Tardienta y continuaba durante unos 13 km en dirección norte-sur la línea del ferrocarril Huesca-Tardienta. «En todo ese tramo la trinchera estaba adosada a la línea férrea en forma tal que el talud de piedras de los raíles servía de parapeto.. De acuerdo a los informes del servicio de información franquista, «Esta línea defensiva tenía cada 100 metros un nido de tirador, construido en madera y hormigón, para emplazamiento de ametralladoras ligeras. También contaba con refugios a prueba contra impactos directos de artillería (sin especificar calibre); además de contar con una alambrada casi de una forma continúa. En el lugar en que el acueducto de los Monegros cortaba la línea del ferrocarril, al norte de Tardienta, la trinchera abandonaba dicha línea y seguía bajo el acueducto, pasando frente a la población de Tardienta y su estación de tren. Luego seguía paralela a la vía de Tardienta a Grañén hasta encontrar la carretera de Tardienta a Robres, a la que seguía, pero alejándose en algunos tramos entre 500 y 800 metros, según los accidentes naturales del terreno. Este último tramo estaba constituido entre la carretera y la falda de la montaña que la ladeaba. Al parecer las fuerzas que la guarnecían pertenecían a la llamada “Milicia Catalana” y eran entre 80 y 100 hombres por km, pero carecían de artillería y ametralladoras.» (GRIEGC, citando a Martínez de Baños, Fernando; Arcarazo, Barrachina Luis; Guerra Civil en Aragón. Huesca (El Cerco). Zaragoza. Editorial Delsan. 2007).

Línea Gorka

La Línea Gorka, iniciada en otoño de 1936, fue construida por los alemanes de la Columna Thaelman: «Esta línea discurría desde la Granja del Cuervo hasta las posiciones de la Sierra de Alcubierre, y englobaba las obras del canal de Monegros desde el puente de la carretera de Almudévar y el acueducto de Tardienta. Dos kilómetros delante del mencionado acueducto se encontraban las posiciones de vanguardia de dicha línea, que consistían en la zona del llano de Tardienta en nidos de hormigón semienterrados; para luego seguir aprovechando las estribaciones de la Sierra de Tardienta.» (GRIEGC, citando a Martínez de Baños, Fernando; Arcarazo, Barrachina Luis; Guerra Civil en Aragón. Huesca (El Cerco). Zaragoza. Editorial Delsan. 2007).

Línea Durruti.

Línea Durruti

De Velillas hasta el monte Mogache, en Marcén (Lalueza), se estableció la Línea Durruti, con una longitud de 30 kilómetros. «Dicha línea estaba basada, según informaciones franquistas, en trincheras sencillas con algunos trozos de alambradas, sin defensas de hormigón, cortando a lo largo de su extensión el conjunto de comunicaciones que llevaban a Barbastro, Monzón y Sariñena. Empezaba a 2 km al norte de la carretera de Lérida a Huesca, cerca de Velillas, pasaba detrás de Pueyo, formaba un ángulo para bordear la carretera de Huesca a Sariñena, que cortaba detrás de Sesa, formando dicha carretera un ángulo casi agudo. Al final de esta línea comenzaba la Línea Lenin.» (GRIEGC, citando a Martínez de Baños, Fernando; Arcarazo, Barrachina Luis; Guerra Civil en Aragón. Huesca (El Cerco). Zaragoza. Editorial Delsan. 2007).

Línea Lenin.

Línea Lenin

A continuación de la Línea Durruti, continuaba la Línea Lenin. Partía del monte Mogache hasta Poleñino, tenía una longitud de 15 km «Se apoyaba en las alturas del vértice Mogache, de 535 metros de altitud, y las alturas de Saso de 480 metros, siendo su profundidad de varios kilómetros. Estaba compuesta de trincheras sencillas en tierra con obra de hormigón, aunque otras informaciones hablaban de que había pasillos, cobertizos, fortines y todo lo necesario para su total defensa, siendo por tanto más fuerte y mejor preparada que la Línea Durruti. Según informaciones del bando sublevado, se decía que trabajaron en ella brigadas de Ingenieros de Barcelona cuyas edades oscilaban entre los 30 y los 45 años, bajo la supervisión de un Ingeniero de Obras Públicas de Barcelona apellidado Álvarez. No tenían armas y eran al menos 350, que al terminar la jornada de trabajo se alojaban, 50 hombres en Marcén, 100 en Poleñino, otros 100 en Lanaja, y 50 en Pallaruelo. En marzo de 1938, ante la ofensiva del ejército sublevado, estaba guarnecida por una brigada de Carabineros que no pudieron hacer nada ante el empuje de las tropas de Urrutia.» (GRIEGC, citando a Martínez de Baños, Fernando; Arcarazo, Barrachina Luis; Guerra Civil en Aragón. Huesca (El Cerco). Zaragoza. Editorial Delsan. 2007).

Distribución de José Bertrán y Musitu en marzo de 1937:

Tardienta

División Carlos Marx. Centurias 6.ª, 8.ª, 10.ª, 13.ª y 18.ª

1.ª Columna Aragón.

5.ª Centuria Regimiento infantería nº 1. 3.ª Compañía.

Grañén

División Francisco Ascaso.

Centuria Pancho Villa.

Intendencia General.

Bons Kropotkine.

Sanidad.

Torralba (Sierra de Torralba)

Regimiento URSS nº 1, 3.er Batallón 4.ª Compañía.

Guerrilleros de Zuera.

Grupo de guerrilleros de Torralba.

«Refugio echo (sic) de los Leones Rojos«. También conocida como cueva de los leones, la construcción responde a un refugio con tres entradas y paredes revestidas en cemento donde se puede leer la inscripción. Por relación, podemos atribuir su autoría a miembros del Batallón Leones Rojos, perteneciente al 5.º Regimiento de las Milicias Populares del Ejército de la República, formado por unidades de milicianos con individuos de las sindicales obreras y partidos políticos frentepopulistas. Fue creado por el Sindicato de Dependientes de Comercio. A su vez. «Los leones rojos» fue el himno de la selección republicana.

Robres

Regimiento URSS nº 3.

2.º Batallón. 3.era Compañía.

A finales de julio la columna Carlos Marx llegó a la localidad monegrina de Robres; columna organizada por el Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) y la Unión General de Trabajadores (UGT)se instaló el Cuartel General de la 123.ª Brigada Mixta de la Carlos Marx.

El vedadico – La Pizquerra – Leciñena – Villatuerta – Valmasera. Carpeta Monès 11-228 Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya Fons de la guerra civil (1936-1939).

Sector Alcubierre

Las milicias republicanas del POUM, Columna Arquer-Grossi, comandada por Manuel Grossi y Jordi Arquer, partió de Barcelona el 24 de julio: «El 29, la columna va avanzar sobre Berbegal y Sariñena. En Sariñena la columna finalizaba la formación de las secciones auxiliares. Cuerpo de tren, intendencia, enlaces, control, pagaduría, transmisiones y servicios sanitarios se ponían en funcionamiento» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo). Manuel Grossi (Cartas de Grossi, Sariñena Editorial) cita la llegada de la Columna del POUM a Sariñena el 30 de julio con 2.800 milicianos.

La columna del POUM alcanzó Alcubierre el 3 de agosto, llegando desde Sariñena tras su paso por Grañén y Robres. La columna, dirigida por Rovira y Arquer, se concentró con unos 400 milicianos en Alcubierre mientras otra parte marchó al norte de Huesca.

«Columnas del POUM, Rovira, Arquer y Russo. Salió el 15 de agosto con 2.000 milicianos y una centuria extranjera. Se dirigieron a Sariñena y Leciñena, llegando hasta Ballester.» (Cataluña 1937. Pere Cornellá i Roca).

A finales de julio de 1936 las milicias del POUM, Columna Lenin, comenzaron a ocupar posiciones en la sierra de Alcubierre. Mientras algunas posiciones del frente de Alcubierre fueron ocupadas por la Columna del Barrio, montes de Iranzo y Pucero, otras fueron ocupadas por la Columna del POUM que llegó a adentrarse hasta Perdiguera. «El día 10 de agosto se va a sumar a la columna una centuria formada por miembros  del POUM procedente de Balaguer y comandada por Josep Pagès y el 17 de septiembre se incorporaron unas decenas de milicianos de Sitges de la Juventud Comunista Ibérica, organización juvenil del POUM» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo). En agosto Leciñena cayó en manos de Del Barrio (Columna Carlos Marx).

En febrero de 1937, las milicias del POUM fueron disueltas, mucho antes de  la disolución del Consejo de Aragón, el 18 de agosto de 1937. En abril de 1937 la Columna del POUM se convierte en la 29.ª División, compuesta por las Brigadas Mixtas 128.ª y 129.ª, a las ordenes del comandante José Rovira. En el mes de junio de 1937, debido a la represión del gobierno de la republicano contra el POUM, Rovira es detenido y en agosto la división termina siendo disuelta y reorganizada,​ distribuyéndose a sus antiguos miembros entre otras unidades (Casanova, Julián (1985). Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938. Siglo XXI Editores). La zona es ocupada por la columna Carlos Marx, la 27.ª, con Cuartel General en Tardienta. Nuevamente fundada a comienzos de 1938, la división estuvo operativa hasta marzo de 1939. La 29.ª División llegó a participar en la ofensiva de Huesca.

También, por el sector de Alcubierre estuvieron unos 700 hombres de la Columna Maciá-Companys, formada por voluntarios de ERC y en menor parte de Estat Catalá. La unidad acabó respondiendo a la División 30.ª, Brigadas Mixtas 131.ª y 132.ª, al mando de Jesús Pérez Salas. Además estuvo una unidad de Guardias de Asalto nº 14, algunos de ellos por el sector de Barbués.

Marxistas aragonesas milicias

Sello Milicias Marxistas Aragonesas. Comité Militar

La columna Macià-Companys formó la 30.ª División hasta febrero de 1939. 

«El 13 de septiembre, provenientes de Barcelona, llegan a la zona del Puerto de Alcubierre dos compañías del 14º grupo de Asalto (Martínez de baños, 2010). Su labor es apoyar a las fuerzas milicianas de manera profesional, ya que los Guardias de Asalto estaban bregados en el combate y habían recibido instrucción suficiente. Operan como una unidad «de élite” (por lo menos, comparados con los milicianos) de unos 500 hombres, manteniendo sus rangos y mandos propios.»

Robres: la experiencia de recrear un campamento republicano en los Monegros.
Pablo Gracia Vera.

Milicianos ERC Columna Macià-Companys en la sierra de Alcubierre

Milicianos de Izquierda Republicana de Cataluña (ERC) de la Columna Macià-Companys en la sierra de Alcubierre, noviembre de 1936. Lluís Torrents / AGA. La Columna Macià-Companys Francesc Xavier Hernández y David Íñiguez.

La Columna Miguel Lobo, del POUM, va participar en la batalla de Alcubierre del 12 de octubre (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Berguer, Gonzalo).

Alcubierre, y su sector del frente de la sierra de Alcubierre, fue estratégico en la contienda española. Su gran actividad y diferentes sucesos quedan recogidos en un completo trabajo de investigación y recopilación: Alcubierre, última parada camino al frente. 

Distribución de las posiciones en el puerto de Alcubierre. Servicios Cartográficos Italianos.

Tras la caída de Lecñena, el 11 de octubre de 1936, las tropas republicanas se retiraron hasta las posiciones de la sierra. Los republicanos tomaron posiciones como monte Irazo, La Pasionaria, La Imposible, El Negus, La Pajera, o la Plaza de Toros, actualmente renombrada como posición de Orwell. El croquis, realizado por el servicio de cartografía italiano, cortesía de Antonio Escartín, resulta bastante representativo. La plaza de toros se encuentra al este de monte Irazo y al oeste se encuentra la línea defensiva de la Pinada hasta Valdelumbierre, un poco más avanzada se encuentra la posición de la balsa Ontina. Al norte se encontraban las mencionadas posiciones de La Pasionaria, La Imposible, El Negus, La Pajera, Pocero y Sierra Alta, frente a las posiciones nacionales en San Simón, también conocido como Puig ladrón o las tres Huegas y Puig Mazorra. Posiciones más retraídas de los nacionales, correspondían a las de Los Quemados, Vagüero y Los Estancos. El frente de Alcubierre se estableció principalmente en el camino entre Sariñena y Zaragoza, en torno al puerto de la sierra de Alcubierre.

En frente, la división V, legionarios, falangistas de la Segunda Bandera Móvil de Aragón, el Regimiento de Carros Ligeros de Combate nº 2 y soldados regulares se parapetaron al frente de las milicias, ocupando posiciones señaladas como el santuario de Magallón en Leciñena y en trincheras en el frente

La posición del Negus no está clara, todo apunta a que se encontraba al norte de la posición nacional de San Simón, parece que muy próxima a la Imposible. Manuel Gutiérrez, en su Diario de un miliciano, relata un episodio en dicha zona que bien se puede entender como la toma de San Simón «En la posición que habíamos ocupado últimamente cerca de la del “Negus”, en la Sierra de Alcubierre, los fascistas estaban completamente rodeados y antes de ayer se pasaron dos del campo fascista y sirvieron de guías para tomarles la principal colina por sorpresa. Pero, para no perder la costumbre, ayer se perdió aquella importante posición que dominaba mucho llano enemigo por culpa del “Mando”. Los fascistas iniciaron un fuerte contraataque de artillería y aviación y nuestras fuerzas, sin la ayuda de nuestra artillería y aviación que aquí nunca actúan cuando es necesario, se vieron obligadas a abandonar la posición.»

El Negus respondía al último emperador de Etiopía, Haile Selassie, que luchó contra las fuerzas italianas de Mussolini, nombre que fue adoptado por la posición, un avión republicano o un militar africanista, republicano y socialista, que al frente de milicianos de la Columna Carlos Marx, realizaba incursiones nocturnas en territorio sublevado.

Posiciones según los Servicios Cartográficos Italianos.

El 9 de abril de 1937, un batallón republicano de la Brigada Macià-Companys, logró tomar la posición de San Simón, provocando un centenar de víctimas entre los franquistas, entre ellos el teniente Eugenio Hernández Santamaría, condecorado con la Cruz Laureada de San Fernando a título póstumo. El ataque fue respondido por la Segunda Bandera Móvil de la Falange y el Tercio Sanjurjo, recuperando la posición causando un elevado número de víctimas republicanas. Actualmente se encuentra un monolito en recuero de la «Gesta nacional».

El frente se mantuvo estable hasta su caída en marzo de 1938.

Distribución de José Bertrán y Musitu: en marzo de 1937:

Alcubierre (Sierra de Alcubierre)

Columna Comandante Piquer.

Entre Alcubierre y Monte Oscuro (Perdiguera).

División Durruti. 2.ª Sección.

Ametralladoras. 4.ª Agrupación 7.ª Maquina.

3.er Regimiento. 2.º Batallón. 2.ª Compañía.

Base Farlete.

Posición de Monte Oscuro (Perdiguera)

Monte Oscuro respondió a una posición republicana ocupada por milicianos de la Columna Durruti y del Grupo Internacional. Otras posiciones cercanas a Perdiguera fueron las del Macerado o de las de Santa Cruz.

Líneas republicanas y nacionales antes y después de el intento de toma de Perdiguera por el Grupo Internacional. Fotos e información: Constantino Escuer.

La posición estuvo compuesta por tres colinas con sus trincheras, pozos de tirador, abrigos, casamatas y casetas de piedra. “Las posiciones de Punta del Calvario hasta Los Quemados era una línea defensiva que defendía Perdiguera de los ataques que las tropas republicanas realizaban en la zona desde Alcubierre. Durante la ofensiva que llevaron a cabo las tropas republicanas en agosto de 1937, lograron ocuparlas posiciones situadas en torno a la ermita de Santa Cruz (en la Punta del Calvario).” (Ruta memoria Aragón Frente de Los Monegros).

Posiciones Frente de Los Monegros. C.T.V. Comando Reggimento Artiglieria, Divisione `»Frecce» Carpeta Monès 11-237 Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya Fons de la guerra civil (1936-1939).

-Monte Oscuro es solo la continuación de la línea del frente republicano. Las numerosas posiciones, que se pueden encontrar durante varios kilómetros, controlaban los ataques de las tropas nacionales entre la carretera de Farlete y Monte Oscuro. La posición de Monte Oscuro y Peñaguila se encontraban situadas frente a las posiciones del ejército sublevado de Punta del Calvario, los Quemados y los Cabezones. Durante la ofensiva republicana de agosto de 1937 se vivieron intensos ataques en la zona-. (Martínez de Baños y Pérez, 2008, pp. 64-68).

Posiciones Monte Oscuro. Croquis de Constantino Escuer.

En la posición estuvo el celebre escritor George Orwell, quien escribió «Como se decidió que los ingleses estuviéramos juntos en este frente, a Williams y a mí nos llevaron donde ellos. Nuestra nueva posición estaba situada en Monte Oscuro, varios kilómetros hacia el oeste y a la vista de Zaragoza. La posición estaba encaramada en una especie de cresta afilada de piedra caliza, con cuevas cavadas horizontalmente en el risco como nidos de golondrinas. Estoy echado, oculto entre unos pequeños abetos, en el terreno bajo que está al oeste de Monte Oscuro, con Kopp y Bob Edwards y tres españoles. En la desnuda colina gris a nuestra derecha, una hilera de fascistas trepan como hormigas. No se puede dormir bien en un horrible agujero cavado en la tierra. Estábamos constantemente hambrientos, tremendamente hambrientos; cualquier comida nos parecía sabrosa.» 

Monte Oscuro [Mapa Leciñena – Alcubierre – Perdiguera – Farlete]. Instituto Geográfico Nacional (España) Mapa topográfico nacional 1:50 000. RM.209670. Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya Fons de la guerra civil (1936-1939).

Los nacionales establecieron una línea defensiva entre Perdiguera y Villamayor, constituyendo el frente más cercano a la ciudad de Zaragoza. Cerca de la carretera a Farlete,`por el camino de los Petrusos, se encuentra la fortificación de Los Petrusos. Una posición a cota 445 metros, que consta de dos unidades defensivas, abrigos cubiertos, pozo tirador, nidos de ametralladoras, aljibes y una zona de vivac.

Distribución de José Bertrán y Musitu: en marzo de 1937:

Mote Oscuro

División Durruti.

Columna Volante.

Centuria Federica Montseny.

La columna Voltant, formada por militantes de Estat Català, se desplegó por las posiciones de Monte Oscuro (Perdiguera) a partir de enero de 1937. La columna acabó reconvirtiéndose en la 132.ª Brigada Mixta. (Fuente: Fons de Documentació de l’Esquerra Independentista a les comarques de Ponent).

Monte Oscuro Sello Columna Volant Catalana

Sello Columna Volant (Divisió Durruti) Exercit Popular de Catalunya- Monte Oscuro (Alcubierre).

Sector Bujaraloz

En el sector de Bujaraloz se distribuyó la Columna cenetista de Durruti-Pérez Farras, que partió de Barcelona el 23 de julio. Llegaron en camiones unos dos mil hombres al mando del comandante Pérez Farrás y de Buenaventura Durruti, como Delegado Político; llegando a Bujaraloz el 25 de julio con el objetivo de avanzar hacía Zaragoza. Pere Cornellá i Roca cifra en 3.000 hombres que componían la columna: «La columna estaba formada por 59 centurias, 28 ametralladoras, 5 morteros y 3 baterías de diferentes calibres. Llegaron al Ebro, tomaron Pina y Osera; la columna se detuvo a 20 km. de Zaragoza. A finales de 1936, la columna, falta de municiones, había establecido un frente fortificado ante Pina y Quinto, y partiendo de Osera hasta los contrafuertes de la sierra de Perdiguera, frente a las tropas de Zaragoza. Las columnas de milicianos estaban organizadas en decurias (diez milicianos), secciones (treinta milicianos} y centurias (de ochenta a cien milicianos)» (Cataluña 1937. Pere Cornellá i Roca).

Frenado su avance, la columna consolidó Bujaraloz como cuartel general de la milicia anarquista. Ocuparon posiciones en Monegrillo o Farlete e incluso llegaron a ocupar Perdiguera.

La columna Durruti – Pérez Farrás pronto desarrolló dos ofensivas destacables en su avance hacia Zaragoza, una hacía el sur, Pina, Quinto, Fuentes, Gelsa y otra hacía el norte, Monegrillo, Farlete y Perdiguera. De esta manera, la toma de Monegrillo y Farlete fue un gran objetivo de la columna anarquista Durruti – Pérezz Farrás. Así, fuerzas de los aguiluchos de la FAI “Se encarnizaron en lucha, campo a través”, hasta la localidad de Farlete. (Escenas de nuestra guerra en Los Monegros. Los cachorros de Durruti. Libertad, Cuenca, nº5, 1937).

El 28 de abril de 1937 se crea  la 26.ª División, la antigua Columna Durruti, con mando avanzado en Bujaraloz. División constituida durante toda la guerra por las brigadas mixtas 119.ª, 120.ª y 12​1.ª, correspondiendo a los regimientos 1.º, 2.º y 3.º de la División Durruti. Al mando estuvo como jefe mayor de milicias Ricardo Sanz García, comisario Ricardo Rionda Castro (CNT) y Pedro Pey Sardá, de CNT (2.1938), jefe de EM comandante de infantería Ramón Rodríguez Bozmediano, comandante de infantería Pedro Cervera Serreta (febrero de 1938). (Carlos Engel). La División estuvo operativa hasta febrero de 1939. 

  • La 119.ª Brigada Mixta se organizó en mayo de 1937 en el frente de Aragón, con el 1.º Regimiento de la División «Durruti». La unidad fue puesta bajo el mando del mayor de milicias Domingo Belmonte Cova y encuadrada en la 26ª División del XI Cuerpo del Ejército, nueva designación de la «Durruti». El jefe de Estado Mayor era el oficial de milicias José Marculet y el comisario, Martín Gental Masdeu, de la CNT; Marculet fue relevado pronto por el capitán de Infantería Ismael Massot Pascual que, al comenzar la guerra, era teniente del Cuerpo de Asalto en Madrid. (Carlos Engel).

La Brigada fue trasladada desde su sector, al de Pina, a Farlete para colaborar en la batalla de Belchite. Su papel en los combates no debió ser muy brillante, cuando Kleber decía de ella «No sirve para nada…». Después de estas operaciones pasó a cubrir el sector de Noguera-Pallaresa del frente de Huesca. Su actuación en la campaña de Aragón pasó totalmente desapercibida, uniéndose a las fuerzas situadas al Norte del Ebro y terminó el 19 de abril de 1938, en La Granja de San Vicente Ferrer. En la ofensiva nacional sobre Cataluña, la 119.ª Brigada Mixta fue adscrita a la reserva general del GERO, careciendo su actuación de relieve.  La 119.ª Brigada Mixta publicaba el periódico «Trazos». (Carlos Engel).

  • La 120.ª Brigada Mixta se creó en mayo de 1937 en el frente de Aragón, con el 2.º Regimiento de la División «Durruti» ahora 26ª, del XI Cuerpo de Ejército, en la que quedó encuadrada. Su jefe fue el mayor de milicias Joaquín Morlanes Jaulín y el comisario Manuel Pobel Uriarte, de la CNT. En la jefatura de Estado Mayor se sucedieron el capitán de Infantería Ramón Ramos Babiloni, un antiguo capitán retirado, el alférez de complemento de Infantería Manuel Fuentes Nieto, pasado a la escala activa, y el capitán de milicias G. Marquina. La Brigada cubría el sector de la Ermita de San Martín en el frente de Huesca. (Carlos Engel).
  • La 121.ª Brigada Mixta, creada en mayo de 1937, se organizó en el frente de Aragón y a base del 3.º Regimiento de la División «Durruti”, ahora 26.ª, del XI Cuerpo de Ejército, en la que quedó encuadrada. Su primer jefe fue el teniente de Caballería Pascual Gil de Montes Villar, un alférez de complemento pasado a la escala activa, y el comandante de Infantería Manuel Bustos García que, el 18 de julio de 1936 era capitán del Cuerpo de Asalto e Barcelona, como jefe de Estado Mayor. En el comisariado se sucedieron Pedro Fernández Alonso, José Nadal, Adolfo Arnal García y Juan San Ricart, todos de la CNT. LA 121.ª Brigada Mixta cubría el sector de Farlete. Participó en la batalla de Belchite en el sector de Fuentes de Ebro. (Carlos Engel).

Distribución de José Bertrán y Musitu en marzo de 1937:

Farlete

División Durruti

Batallón Monte Oscuro 1.ª y 2.ª Compañía.

Centurias 2.ª, 16.ª, 22.ª, 31.ª, 33.ª, 49.ª y 50.ª

3.er Regimiento 1er Batallón 1.ª y 3.ª Compañía.

3.er Regimiento 1er Batallón 1.ª Compañía Sección F.A.

3.er Regimiento 2.º Batallón 2.ª Compañía.

1.ª Compañía Hijos de la noche.

4.ª y 5.ª Agrupación.

Ametralladoras.

2.ª Sección.

1.ª y 2.ª Batería de Montaña.

5.ª Batería. 7.º Regimiento Ligero. Tanque número 3.

Cuartel Sanidad Montaña 5.º Grupo.

Sección Tanque número 15.

El grupo exploración «Hijos de la noche», un grupo de combatientes de asalto llamado así por su necesidad de moverse en la oscuridad (Antoine Giménez. Del amor, la guerra y la revolución.). Farlete.

Frente de Alfajarín

División Durruti.

2.º Batallón. 1ª Compañía.

3.ª Sección 2º. Batallón. 3.ª Compañía. 3.ª Sección. 5.ª Agrupación.

1.ª Sección Ametralladoras.

Monegrillo

División Durruti

2.ª Batería de Montaña de Garrido Escuadrón de Caballería.

2.ª Batería de Montaña del 10`5.

Monegrillo fue tomado el 11 de agosto de 1936 por la Centuria Tarrasa, compuesta por milicianos anarquistas. En Monegrillo se instaló el cuartel de la 120.ª Brigada Mixta de acuerdo a la comunicación publicada en La Vanguardia de 18n de junio de 1937: “División Durruti (26.ª) Se comunica a los individuos que a continuación se expresa, pertenecientes al segundo batallón de la 120.ª Brigada Mixta (antes segundo regimiento), que en el plazo máximo de cuarenta y ocho horas deben presentarse en el cuartel de dicha Brigada (Monegrillo), ya que de no hacerlo se tomarán las determinaciones pertinentes o se entregarán a los Tribunales militares.”

Bujaraloz

5.ª Agrupación Ametralladoras.

Compañía Rojo y Negra del Bajo Llobregat.

Sección Morteros.

Ambulancia 27.

Delegación de Guerra.

Osera

División Durruti.

1.er batallón. 2.ª Compañía y 3.ª Compañía. Sección Ametralladoras.

3.er Batallón, 1.ª Compañía.

Centurias 8.ª, 36.ª y 37.ª

4.º Grupo de Montaña.

Plana Mayor.

Los Calabazales. Juv, Lib. (Juventudes Libertarías),

3.ª Sección Exploración.

3.ª Batería Montaña.

Tanque nº 1.

Aguilar de Ebro

División Durruti.

Centuria 12.ª

Pina de Ebro

División Durruti.

1.er Regimiento 2.º Batallón. 2.ª Compañía.

Centurias 22.ª, 43.ª, 47.ª, 51.ª, 53.ª y 62.ª

1.ª Sección Ametralladoras.

Grupo Exploración.

1.er Batallón 3.ª Compañía.

Centurias 11.ª y 22.ª

Gelsa

División Durruti

10.ª Sección Ametralladoras.

Grupo Internacional.

Centuria 19.ª

Tanque nº 5.

Velilla de Ebro

División Durruti.

Grupo Internacional.

Velilla de Ebro

División Durruti.

Grupo Internacional.

La Zaida

División Luis Jubert.

1.er Regimiento 3.er Batallón

1.ª Compañía.

Sección de Abastos.

Azaila

División Durruti.

1.er Regimiento. 2.º Batallón. 2.ª Compañía.

Centurias 22.ª, 43.ª, 47.ª, 51.ª, 53.ª y 62.ª

1.ª Sección Ametralladores.

Grupo Exploración.

1.er Batallón. 3.ª Compañía.

Centurias 11.ª y 22.ª

La caída del frente

El frente de Aragón se encontraba operado por el 5º. Cuerpo de Ejército Nacional, creado el 12 de abril de 1937, por Orden General, y dependiente de él la Brigada Mixta de Posición y Etapas, mando que ejercía el coronel de Infantería del Regimiento de Carros de Combate núm, 2. Antonio Civera Ayxemus, con la misión de cubrir el frente a Aragón, desde Zuera a Villafranca de Ebro (Ambos inclusive).

El cuerpo estaba compuesto por diferentes unidades de infantería: seis batallones de infantería Gerona; 3ª., 7ª. y 9ª. Bandera FET Aragón (Denominada Bandera Móvil); 3ª y 5ª Unidad de Pontoneros; 4ª., 5ª. y 7ª. Compañía de la 5ª. Comandancia de intendencia; 1º. y 5ª. Batallón de la Milicia Nacional; Compañía Móvil 4º. sector Zaragoza; 8º. Escuadrón de Caballería (A pie); Compañía Servicios Auxiliares, Regimiento Carros Combate nº. 2 y la 1ª. Batería Ametralladoras Regimiento Artillería Ligera nº. 2. La unidad de caballería el 4º Escuadrón Regimiento Cazadores Castillejos, 9º Cabª. Las unidades de Artillería 2ª., 8ª., 11ª. y 4ª. Baterías Regimiento Artillería Ligera y una sección del Grupo Antiaéreo. Ingenieros: Compañía Batallón Zapadores Minadores núm. 5 y una compañía de Transmisiones. Intendencia: Sección de la 5º. Comandancia de Intendencia. Sanidad: Compañía de la 2ª. Comandancia y una sección de Desinfección de la 2ª Comandancia. («División 55: diario de operaciones de la División, correspondiente al período de tiempo comprendido entre el 20 de abril 1937 (I Año Triunfal) y 1 de abril 1939 (Año de la Victoria)». ES/AHPZ – P/002680/0005 Archivo Histórico Provincial de Zaragoza). 

El 13 de octubre de 1937 se dan las instrucciones y fases sobre el frente de Aragón, señalando los objetivos a la Aviación nacional y la Legionaria: “Neutralización del material, pista e instalaciones” de los aeródromos de Sariñena, Bujaraloz, Puebla de Hijar y Selgua». Una segunda fase fue atacar los “Centros militares y depósitos de material de guerra, -con la intención de conseguir los siguientes efectos- ataque a concentraciones de tropas, material, parques etc.” Entre los destinos de estos bombardeos estaban señaladas las poblaciones de Bujaraloz, Sariñena y Grañén. Igualmente figuran Bujaraloz y Sariñena como objetivos a bombardear como importantes nudos de comunicaciones. También las centrales telefónicas de Sariñena y Tardienta. (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

Con la caída de Asturias, completada el 22 de octubre de 1937, el gran grueso del Ejército del Norte, Cuerpo de Ejército de Navarra y Cuerpo de Ejército de Galicia, además de otras unidades y parte de la aviación adscrita a ellas, refuerzan el frente nacional en Aragón. El frente de Aragón cambia por completo, los nacionales pasan de resistir a preparar la ofensiva sobre Aragón. Además, se uniría la legión alemana Condor.

A mediados de marzo de 1938, la aviación Condor se encarga del frente norte de Aragón mientras la aviación italiana del sur. En Los Monegros fueron bombardeadas las poblaciones de Grañén, Torralba, Sangarrén, Bujaraloz, Sariñena, Lanaja, Castejón de Monegros Robres.  (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

El 22 de marzo de 1938 se inicia la ofensiva nacional del Cuerpo del Ejército de Aragón, al mando del general José Moscardó Ituarte, quien rompió y avanzó imparable en el frente de Aragón. A su mando las divisiones 51, 53, 54 y 55: «El día 23 de marzo la 53 División llegó a un kilómetro de Sangarrén y la 54 ganó y rebasó Tardienta. Al día siguiente, la División 54 ocupaba Torres de Barbues y Almuniente, y la 54 se situaba en Torralba. El día 25, la 53 ocupó Grañén, la 54 Senén y Robres y la 55 Bujaraloz y La Almolda. El día 26 la División 53 alcanzó Capdesaso, Lalueza y Poleñino, mientras la 54 lo hacía con Alcubierre y Lanaja y la 55 alcanzaba Castejón y Pallaruelo» (Arturo Morera. La guerra del 36).

Sariñena fue ocupada el 26 de marzo por las divisiones 53, 54 y 55 «No todos los efectivos pisaron las calles de la población, pero todos atravesaron sus campos y andaron sus caminos persiguiendo a los republicanos que huían a la desbandada por las planicies del Saso de Miranda, las Almunias Altas, Cachicorba, Cajal o Saso las Fitas» (Arturo Morera. La guerra del 36).

«La División 53 estaba mandada por el general Alvaro Suciro Vilariño y se componía de las siguientes unidades: Tabores 1ª y 3ª de la Mehala de Tetuán (moros); 2ª y 15ª Banderas de la Legión; Tercio de Requetés del Pilar; 2ª y 7ª Banderas de Falange; un grupo de artillería del 75 y otro mixto de montaña; por último, una compañía de zapadores y otra de Transmisiones.

En la División 54 dirigida por el general Ricardo Marzo Pellicer, se integraban los siguientes efectivos: Batallones 283, 286 y 289 de Tiradores de Ifni (moros); 6° Batallón de San Quintín; el 7° de América; el 3º de Palma; el 2°de Bailén el 8º de Vitoria y el «C» de Ceriñola; el Tercio de Requetés Ntra. Sra. de Valvanera y los Batallones de Infantería 131 y 287. Había también un grupo de cañones y otro de obuses ligeros y dos grupos de Ingenieros.

Por último, la División 55 (antes 13rigada Mista de Posición y Etapas) estaba al mando del coronel Enrique Adrados. Disponía de los Batallones 1 al 10 del Regimiento de Carros de combate y de la 1ª y 9ª Banderas de Falange; una Batería del 75, otra del 105 y una sección de antitanques, dos compañías de Zapadores y una de Transmisiones.»

Arturo Morera. La guerra del 36.

Marzo de 1938. Diario de campaña de un requeté pamplonés

Manuel Sánchez Forcada perteneció al Tercio del Rey, encuadrado en el batallón América, junto con falangistas navarros y soldados regulares. En un diario dejo escrito su avance por Aragón tras la caïda del frente:

  1. Pasamos todo el día en Zuera, lo que aprovecho para hacerme higiene general, pues desde el día 30 de enero que fuimos a Teruel no me he afeitado; por la noche salimos para Almudévar a preparar la operación.
  2. Se toman de madrugada las posiciones rojas, continuando el avance durante todo el día; por la noche pasamos una borda desmantelada sin tejado no pudiendo pegar ojo, pues se pasa toda la noche lloviendo torrencialmente.
  3. Amanece el día como se ha pasado la noche, a media mañana aclara el tiempo y se continua la operación, después de un pequeño combate se toma el pueblo de Tardienta, haciendo muchos prisioneros.
  4. Continua el avance, no pudiendo en todo el día tomar las posiciones rojas; a pesar de las preparaciones artilleras los rojos no ceden, en los varios intentos que hemos hecho ha habido varios heridos, Martín, etc.; llega el anochecido y dan la orden de asalto, no sabemos donde vamos y por toda contestación nos dicen que hay que ir a donde salen los fogonazos, allá vamos, nos mezclamos con ellos y en un gran revuelo sin saber donde estamos, hemos tomado el pueblo de Torralba; en la confusión lo mismo se oyen gritos de Viva la República como Viva el Rey y España, se han hecho muchos prisioneros.
  5. Después de una noche muy intranquila pasada debajo de un puente, continuamos el avance y, sin enemigo delante, se toman los pueblos de Senés y Robres pasando la noche en éste.
  6. Hoy empezamos el avance muy temprano, hoy por carreteras y en columna, pues no se ve el enemigo, pasando por Alcubierre, La Naja y Pallaruelos de Monegros, donde pasamos la noche, cogiendo una bandera de la U.G.T.; como trofeo se guarda.
  7. Salimos de operación por la carretera hasta unos tres kilómetros del pueblo, como no hay nada volvemos al pueblo a la noche.
  8. Salimos de operación dejando la carretera de los Monegros, cruzamos el río Ribagorzana y tomamos los pueblos de Albatillo, Sena y Villanueva de Sigena, pasando la noche.
  9. Salimos de Villanueva de avance, se toma Ontiñena, a boca (sic) oscuro cruzamos el río Cinca con agua a la cintura, pasamos Chalamera y paramos en Osso de Cinca, pues no han podido cruzar el río 2 Batallones y todas las cocinas al soltar los rojos las puertas de un pantano y bajando una gran riada.

J. María Pinto de la Rosa. El Grupo Mixto de Ingenieros Nº 4.

El día 22 de Marzo dieron comienzo las operaciones para alcanzar la línea del río «Alcanadre», ocupándose el Vértice Radiva e iniciando el envolvimiento de Tardienta; el día 23 se tomó después de vencer dura resistencia, el citado pueblo de Tardienta; el 24, después de durísimo combate, el de «Torralba de Aragón» cogiéndose numerosos prisioneros y material; también se tomó ese día la Torre del Moro; el 25, con menor resistencia. Senes, Robles y Macizo de Santa Elena; el 26 Lanaja, Alcubierre, La Cartuja y Pallaruelo, cooperando a la ocupación de Sariñena por la División n.° 53; se alcanzó el Alcanadre en su confluencia con el «Isuela»; el 27 se ocupó Albalatillo y su campo de Aviación; en la noche del 27 al 28 las Compañías de Zapadores en unión de la del Grupo n.° 3 restablecieron la comunicación a la salida de Sariñena, permitiendo que al amanecer del 28 pudiesen emprender la marcha las Divisiones 53 y 54, por lo que fueron felicitados los Zapadores Divisionarios. El día 28 se vadeó el río Alcanadre ocupándose los pueblos de Sena, Villanueva de Sigena con su Monasterio, Ontiñena, Ballobar y Chalamera, alcanzando en este último, con alguna resistencia, el río Cmca, día éste en que la Compañía de Transmisiones tuvo una de sus más acertadas actuaciones, dando comunicación desde Sariñena hasta el río Cinca, conforme iban avanzando las columnas.

La guerra en Robres


El subsector de Robres formó parte del frente de Aragón, en el sector de la sierra de Alcubierre, circunscripción norte-centro. Fue un lugar cercano al frente de Alcubierre, a las posiciones de las Tres Huegas, Pui Ladrón y luego rebautizado como San Simón, y La Pajera, El Negus, La Imposible o La Pasionaria; posiciones integradas en la actual denominada Ruta Orwell y del frente de Los Monegros. Milicias frente a legionarios, falangistas de la Segunda Bandera Móvil de Aragón, el Regimiento de Carros Ligeros de Combate nº 2 y soldados regulares.

La guerra marcó profundamente los pueblos y sus gentes, generando dolor que aún va costando superar, heridas profundas en nuestra sociedad de las que cuesta hablar pero que forman parte de nuestra historia, de aquella amarga memoria que no hay que olvidar para que jamás vuelva a suceder. Por ello, con todo el respeto, en su recuerdo y memoria. 

Ramón Hernando (1944), hijo de Antonio Hernando Villacampa, ha investigado la historia de Robres. Fruto de todo su trabajo es una valiosa información que constituye gran parte del presente trabajo: Su historia no deja de ser complicada y años de estudio, consulta de documentos y testimonios han ido estableciendo un relato complejo que va arrojando luz a diversos episodios oscuros y dudosos, en un ejercicio de memoria, dignidad, reparación y verdad. De hecho, este relato quiere ser lo más imparcial posible, todos los hechos, actuaciones, nombres y apellidos, apodos  de personas salen de los documentos establecidos por la Causa General de Salamanca, documentos recogidos por responsables de la Falange, la Guardia Civil, ayuntamientos falangistas nombrados por el ejército de Cabanellas, la Comisaria de Huesca y entrevistas con responsables de la cárcel de Zuera y la DPH de Huesca. Además del Circulo Republicano de Huesca, archivos de Madrid, archivos personales de Antonio Hernando Villacampa y de la memoria de mi abuela Antonia Villacampa Susin y las familias de Robres, mil gracias a ellos, mil gracias a mis amigos y amigas.

Robres, Los Monegros.

Robres se ubica en plena comarca de Los Monegros, en la parte septentrional de la sierra de Alcubierre. Un contexto de clima árido y seco que ha condicionado la vida de sus habitantes, donde el agua se aprovechaba en balsas y balsetes, incluso para su consumo. Además, la escasez de lluvias y aguas ha limitado la vida y su principal actividad de la agricultura, tradicionalmente de secano, habiendo años de cosechas escasas o nulas. Los  pastos, aunque abundantes, se agostan en verano. Así, las actividades de agricultura de secano y de ganado lanar aportaban, a duras penas, escasamente recursos para la subsistencia. No obstante, la importancia de la ganadería lanar en Robres fue importante, ya que llegó a contar con tres mataderos.

La vida de los pueblos se regía por un dominante sistema caciquil que tanto marcó en la España rural. El pueblo llano pronto abandonaba la escuela, había mucho analfabetismo, así que el único futuro que tenían era los hombres al campo y las mujeres a servir a las casas ricas.

Así, en 1930 Robres contaba con 1.245 habitantes, población que descendió hasta los 972 después de la guerra. Sufrió duramente la guerra y la posterior represión, dejando una huella profunda.

Periodo de anteguerra, la influencia del canal

La construcción del canal de Monegros, dentro del plan de Riegos del Alto Aragón, para regar las tierras monegrinas, fue una magna obra que requirió de abundante mano de obra. Una obra que generó amplias perspectivas de futuro y trabajo en su construcción y en la transformación agraria de parte de Los Monegros. Sobre los principios de la década de 1930, comenzaron a llegar, desde muchas partes de España, obreros para la construcción el tramo de Robres. Aquellos trabajadores obra, trajeron nuevas corrientes político sindicales que crearon conflictos, especialmente significativos cuando los trabajos en el canal comenzaron a aflojar y desembocaron en una seria confrontación laboral y social. La mayoría de los trabajadores del canal estaban afiliados a la CNT (Confederación Nacional de Trabajadores). Entre aquellos trabajadores estaba el robresino Antonio Hernando Villacampa (1912-1992) que comenzó a trabajar en el Canal de Los Monegros en 1933 “Con carnet de la CNT, como casi todos, y allí conocí a los hermanos Ascaso”.

Para las gentes de Robres fue toda una oportunidad. Únicamente conocían trabajar de sol a sol, todos los días y escasos jornales. Eternas jornadas de siega que se abastecía de jornaleros locales y que se cogía poco. Además pagaban lo que querían tras 15 horas de faena.

Algunos trabajaban de pastores, hacían la trashumancia, subían a la montaña en busca de pastos. Los Villacampas descendían del señorío de Sabiñanigo a través de la trashumancia. De Teruel venían esquiladores y algunos descienden de aquellos esquiladores del siglo XIX, como la familia Brosed.

La gente del pueblo acabó marchando a trabajar a las obras del canal. Descubrieron jornadas de trabajo de 8 o 9 horas, 48 horas por semana, los domingos fiesta y buen sueldo. Incluso gente de las casas ricas fueron a trabajar al canal, pues, por decir de alguna manera, muchas de las casa ricas en Los Monegros eran casas pobres comparadas con otras de su clase social.  

Ya con 12 o 13 años los cogían como pinches en el canal. Antonio Hernando comenzó a trabajar con 14 años, pues en casa tenían poca tierra y no podían vivir de ella. Su madre, viuda, trabajaba en uno de los mataderos.

En Robres, expone Ramón, a partir de las obras del Canal de Monegros, se formó un fantástico laboratorio de ideas de progreso, de bien estar, de tener una sociedad más justa. La población subió en torno a las 1600-1800 habitantes. “Las ideas anarquistas se implantaron poco a poco, tanto en la pequeña clase rural, como en la clase trabajadora del canal. Anarco/sindicalistas de Huesca, Barbastro, Jaca… de esas localidades que, a través de maestros, ateneos libertarios, sindicalistas de Barcelona, Lérida… venían a difundir sus ideas. Ramón Acín vino varias veces a Robres, discutía también con la JSU (Juventud Socialista Unificada). En Robres se formó un sindicato agrario de la CNT anarco sindicalista y otro para los obreros que querían afiliarse”.

Las obras del canal significaron una revolución social, en su sistema. Obreros de Barcelona, Madrid y otros lugares se albergaban en las casas de los robresinos. Una sociedad aún sin luz, sin agua… se veía mucho la desigualdad. Igual pasó con la mujer, lavarse, cuidarse o incluso no quedarse preñada, descubrían que podían vivir y entender la vida mucho mejor de la que conocían. 

Cortesía Ramón Hernando.

A aquellos obreros de ideología anarquista se les conocía como los “Rompe-márgenes”. La explicación a dicho calificativo la escuchó Ramón Hernando en boca del tío Blas de Robres. El tío Blas trabajó en el canal, compartiendo faenas con muchos obreros de la CNT/FAI, asumiendo muchas de sus ideas, entre ellas las relativas a la tierra “Había que aplicar lo que decían los anarquistas y con los más duros pronuncio la frase: nada de márgenes, a romperlas; la tierra, toda la tierra para nosotros. Y de ahí salió lo de rompe-márgenes.” 

A la vez los campesinos y jornaleros de Robres se daban cuenta que tenían derechos, se podían organizar en sindicatos, defender sus derechos, hacer huelgas… Entraron en juego los sindicatos, tanto la CNT como UGT.

En Robres se formó un sindicato agrario de la CNT, anarco sindicalista, y otro para los obreros que querían afiliarse en la UGT. El Partido Comunista se componía por sus Secretario General Marino Gracia, Secretario de Organización Esteban Rivas y Paco Villacampa (Hijo de Julián Villacampa) y Tomas Villacampa (Archivo PC y Archivo Salamanca). La Juventud socialista Unificada por Antonio Hernando Villacampa, Secretario General, con José Lasheras – asesinado en Mauthasen/Gusen y los de casa Ballarin, están en las fotos de las fiestas de San Blas de 1936, simpatizantes como Paco Moreu, el Apache (hermano del Lechero) etc… (Archivo PC, Salamanca y Ramón Hernando). Como miembros del PC Gregorio Anzano Serrano y  Ángel Colominas Edo (Secretario General del PC  de la Provincia de Huesca), sobrevivió al campo de exterminio de Mauthasen, Miguel Granged Berdún y Valdivia Pardo Juan.

Además, trabajar en el canal les permitía aprender y mejorar profesional, aprender un oficio de los distintos gremios que trabajaban en el canal.

La tensión fue considerable, incluso ocho trabajadores fueron detenidos y acusados por tenencia de explosivos. El juicio resultó muy concurrido, debido a la gran expectación que generó, viéndose ante el jurado la causa contra los ocho jóvenes detenidos en Robres por “Retención de dinamita y confección de explosivos”. La sala apareció completamente abarrotada de público, predominando los obreros “No se registró el menor incidente. En las obras en construcción hubo paro en tanto duró el juicio. Tras los informes muy brillantes del fiscal don José María Carreras y defensor don Adriano Méndez, se retiró a deliberar el jurado, dictando veredicto de inculpabilidad. Los procesados fueron absueltos y libertados” (Diario de Huesca 21 de septiembre de 1933).

Hallazgo de un cartucho. En Robres, fue hallado por el niño Jesús Alcubierre Sieso, de 11 años, en un huerto, un cartucho de dinamita y un metro de mecha. La Guardia civil realizó con este motivo registros en otros huertos y en algún domicilio, resultando infructuosos.
Huesca 27 de septiembre de 1934.

La falta de trabajo en Robres fue un serio problema, de hecho en toda la comarca de Los Monegros, las malas cosechas y la ralentización de las obras del canal acuciaron una profunda crisis y malestar en la población, sobre todo en los trabajadores que así lo manifestaron en abril de 1936. Los obreros del canal formularon distintas peticiones, en parte forzoso, al Ayuntamiento de Robres, para que fuesen elevadas al excelentísimo señor gobernador civil de la provincia, como solución a la crisis del trabajo:

1ª. Establecimiento de turnos en las obras del tercer tramo del Canal y Acueducto con lo que aumentaría notoriamente el ingreso de trabajo y el adelanto de las mismas.

2ª. Limpieza de total tramo segundo del Canal, a cargo de Compañía Fierro, en la que a la par que sería posible la colocación de bastante número de obreros, por regular tiempo podría ser llenado de agua dicho Canal, en beneficio directo da la obra y del trabajo.

3ª. Reparación inmediata de la carretera de Huesca a Robres, kilómetros 25 al 35, en cuya obra y por otro regular tiempo, se colocarían otro regular número de obreros, y se regularizaría el transito pésimo que en la actualidad tiene.

4ª. Estando procediéndose a la limpieza del Canal desde Tardienta a Torralba, ver la posible colocación de un número de obreros en este trabajo.

Robres 5 de Abril de 1934.- La Comisión. Huesca 7 de abril de 1934.

Otras corrientes fluyeron en el ambiente obrero de Robres. Ramón Hernando recogió el testimonio de su padre Antonio Hernando Villacampa, notas sobre su vida, aportando su valiosísima memoria de aquellos tiempos: “En este mismo año, de 1933, conocí al histórico José Villacampa y con él entré en las JJCC (Juventudes Comunistas en Robres. En aquella época, los reaccionarios se cebaron con el PCE. Tuve el carnet de la UGT (Unitaria). Preparamos el Partido en Robres sobre todo con Paco Gavín o Gabino, en realidad se llamaba Francisco Brosed Brosed que leía Mundo Obrero y me formaba políticamente. En Robres, bajo la dirección de José Villacampa, en el 35 viendo lo que se avecinaba hacíamos instrucción y formación política a escondidas” (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988).

Fue un fluir de personalidades, intelectuales, sindicalistas… hombres políticos. Ramón Acin estuvo en la localidad, el catedrático y comunista jaques Pena Rocha, Villacampa (Comunista)… venían en un plan revolucionario, a formar políticamente.

También estuvo Juan Valdivia Pardo, médico de Robres y gran impulsor de la  extensión cultural y la higiene en Robres: «La figura del médico Juan Valdivia Pardo Juan fue muy significativa en aquella pequeña revolución. Valdivia fue médico de Robres y gran impulsor de la extensión cultura y el higienismo en Robres. Organizó mítines en el pueblo, fue detenido en 1938 y tras haber prestado servicio, durante ese tiempo como médico en el campo de trabajo de Barbastro (franquista), a los diez meses fue liberado.«

Cortesía Ramón Hernando.

Otro de los muchos robresinos y sus avatares, fue Braulio Serrano Capuz. Braulio fue fundador de la CNT en Caspe. Jesús Cirac, miembro del Instituto de Estudios Caspolinos, se encargó de revisar y maquetar el cuaderno manuscrito autobiográfico que les hizo llegar la hija de Braulio y que han publicado con el título: “Memorias de un hombre cualquiera” (Centro de Estudios Comarcales del Bajo Aragón-Caspe, 2007, Braulio Serrano Capuj, fundador de CNT en Caspe). 

Los inicios de la guerra

Al estallar la guerra, “Tomamos la radio y teléfonos, la gente salió a defender la república”, (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988). Además, según investigaciones de Ramón Hernando, el mismo 16 de Julio de 1936, los falangistas de Robres llamaron a Zaragoza para que viniera un grupo armado y tomar el pueblo. “Unos días antes se habían reunidos en el Corral de Rosa, habían preparado una lista de más de 130 personas para remitirla a la falange pidiendo que se les detuviera, llevárselos a Zaragoza y liquidar unos cuantos de ellos. El camión se presentó por la bajada de Alcubierre, pero la gente de Robres los paró y tuvo que dar media vuelta. Se dice que los Oto esperaban el camión para guiarlos. Algunos de ellos trabajaban para los “ricos” y estaban en la reunión del corral de Rosa… La lista de los 130 cayó en mano de los republicanos, hasta hace poco estaba en una casa de Robres”.

Documentos correspondientes a Causa General del A.H.N. Subdirección General de los Archivos Estatales Ministerio de Cultura .España

La lista de los 114 Republicanos efectuada en el Corral o Paridera de Rosa en la Sierra.

Poco antes del 18 de Julio 1936, un grupo de derechistas y falangistas de Robres realizaron una lista con nombres de republicanos de Robres. Aquella lista fue elaborada por Vicente Alcubierre, Román Luna, Antonio Pano y Francisco Sieso, según testimonios el instigador fue Francisco Sieso Barrio y Ramón Maza; otros se acercaron. Francisco Sieso empleaba a Joaquín Oto Serreta y sus hijos, a Martin Juan Olivan. La lista preparada fue remitida al Gobernador de Huesca que la dio a la Falange de Zaragoza pidiendo que se les detuviera: “Llevarlos hacía Zaragoza y liquidar a unos cuantos”.

Un par de camiones, con falangistas armados de Zaragoza, tenían que llegar a Robres por el camino que viene de Alcubierre (Plan de Burro) y llegar al pueblo por detrás del Pimendón. Los Oto tenían que serviles de guía, según testimonios de Robres.

La lista de las 114 personas de izquierdas cayo en mano de los republicanos, hasta hace poco estaba en una casa de Robres, en  casa Capistros y Florentín Oto, según testimonio de él mismo en varias entrevistas.

Comité

El comité local de Robres fue principalmente de mayoría anarquista, los llamaron “Rompe Margenes”, al principio pocos comunistas estuvieron en ese comité.

Durante los primeros días, Ramón Rivases Cuello de Torralba de Aragón, según acusaciones, fue el primer presidente del comité de Robres. Comunista, antes del golpe de Estado, se pasó a la CNT. Igualmente, la acusación manifestó que practicó guardias armadas, participó en la destrucción de la iglesia y, a pesar de ello, de tener buenas conductas favoreciendo a algunos derechistas encerrados en la cárcel del pueblo; participó en la detención de Luis Berdun. Además, fue vicepresidente de Alianzas Obreras y Campesinas y secretario del Centro de Izquierda Republicana de Robres.

Efectivamente, en esos primeros días de Julio del 36 se detuvieron a los “ricos y derechas del pueblo”, aquellos que habían participado en la famosa reunión de las derechas en el corral de Rosa en plena sierra: Vicente Alcubierre Alaman, Antonio Paño Santafe, Ramón Maza Gonzales, Manuel Abardia, Román Luna, Ventura Serrano, Martin Juan Olivan Lacruz y Luis Berdun. (Actas de Huesca, nombrado de los revolucionarios que detuvieron estas personas).

Estuvieron pocos días en la cárcel y de todos ellos no se mató a nadie ¿Por qué? sabiendo que los anarquistas tenían las órdenes de fusilar a ricos, curas etc… ¿Quién del Comité local los puso en libertad?.  Nadie les molesto en la cárcel de Robres… ¿Por qué? Se sabe por un archivo memoria de 1988 que las derechas y falangistas de Robres habían fichado  desde 1933/34 a las personas de izquierdas de Robres, en particular a las Juventudes Comunistas (JSU) a los miembros del Partido, a los afiliados a la CNT que trabajan en el Canal de Monegros y a los pequeños campesinos.

Pronto se creó el comité local “De la CNT/FAI, dirigido por Laporta miembro de la FAI–AIT asistido por Ramón Rivases Cuello de Torralba de Aragón y Alejandro Becana Gros “El Grande” como vicepresidente y mandado por los anarquistas de Barcelona”. El comité se constituyó con una mayoría de anarquistas y unos pocos comunistas “En ese comité local entra los que llamaban los rompe/márgenes. La bandera anarquista se subió a lo alto de la torre de la iglesia y se crearon billetes de racionamientos” (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988). Laporta o Antonio Porta fue el responsable de la FAI en Robres, quien, de acuerdo a las notas de Antono Hernando, era “Natural de Lérida y vivió en Robres desde los años 33, llevaba con su mujer una pequeña tienda de ultramarinos en casa del Huescano. Se puso de presidente del comité local, asistido por Ramón Rivases Cuello de Torralba de Aragón y con Alejandro Becana Gros (el Grande) como vicepresidente”. Los miembros de aquel primer comité fueron Jesús Becana Gros, Blas Granged Aznarez, Enrique Brosed Pisa, Victoriano Serrano, Domingo Abardia Brosed, Domingo Cuello Lafita con su hermano Ramón, Joaquín Lacruz  Novales, Manuel Brosed  Brosed, Joaquín Brosed Sanz, Carmelo Brosed, Antonio Villacampa Pisa, Francisco Luna, un forastero de la FAI, llamado el Gallego (vivía en casa Casildo), miembros de Casa Miserias, etc… (Notas de Ramón Hernando).

Ramón Hernando detalla cómo el comité puso en marcha el programa de la FAI (Federación Anarquista Internacional), negándose a aplicar la Reforma Agraria de Urribe, Ministro de la República, lo que provocó choques muy violentos con la población de Robres, en particular con los Republicanos y Comunistas. “A Antonio Laporta se le acusó públicamente de ser un ladrón, de aprovechar su pertenencia a la FAI para robar los bienes de los robresinos: los principales acusadores fueron Antonia Villacampa, Francisco Arazo, Anselmo Conte y otras familias como Adelaida y las mujeres de Robres, en particular todos los comunistas de Robres. Esos bienes iban a Tardienta, los cargaban en camiones dirección Barcelona para venderlos en Barcelona para el bien de la CNT” (Notas de Ramón Hernando).

Aquel comité, además estuvo formado por Jesús Becana Gros, Blas Granged Aznarez, Enrique Brosed Pisa, Victoriano Serrano, Domingo Abardia Brosed, Cuello Lafita Domingo con su Hermano Ramon, Joaquin Lacruz Novales, Domingo Abardia Brosed, Manuel Brosed Brosed, Joaquín Brosed Sanz, Carmelo Brosed, Antonio Villacampa Pisa, Francisco Luna, Domingo Abardia Brosed, Blas Granged Aznarez, Jesús Serreta Miro, Antonio Brosed Sanz ( guarda del Canal de Monegros), Julián Brosed Pisa (Presidente de Alianzas Obreras y Campesinas de Robres) y Esteban Rivas Pisa.

Laporta, natural de Salas Altas (Huesca), desde los años 1933-1934 se había establecido en Robres donde, junto a su mujer, regentaban una pequeña tienda de ultramarinos en la céntrica casa del Huescano. Su Esposa Julia Subias Castan natural de Castillazuelo (Huesca) también pertenecía a la CNT/FAI, además ella de las Juventudes Libertarias (Archivo Ramón Hernando). Además, en la localidad monegrina, como en muchas otras, hubo saqueo de la Iglesia, se quemaron muchos objetos cogidos en el interior y la bandera anarquista apareció en la torre de la Iglesia… muchas familias fueron molestadas en sus casas o en las calles (Archivos de Salamanca).

Esteban Rivas era secretario de organización del Partido Comunista de Robres (Archivo  Causa General Salamanca).

En los primeros días de agosto se detuvieron a los “ricos y falangistas del pueblo, estuvieron quince días, algunas familias untaron al presidente y a algunos miembros del comité”.

La llegada de la Columna Carlos Marx

A finales de julio la columna Carlos Marx llegó a la localidad monegrina de Robres; columna organizada por el Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) y la Unión General de Trabajadores (UGT). La columna partió de Barcelona para el frente de Aragón el 25 de julio de 1936, ocupando Sangarren y Almuniente, el 28 de julio, y estableciéndose en Poleñino, Torralba y Robres. En Robres instalaron el cuartel general de la 123, en casa Ribas. La 123 respondía a una de las tres brigadas mixtas 122,123 y 124 de la 27 División de la Columna “Carlos Marx”, que acabó integrándose en el XI Cuerpo del Ejército Popular republicano. El cuartel general de la columna “Carlos Marx” se instaló en Tardienta.

“Es el día 26 de julio cuando de Barcelona sale la columna Del Barrio (PSUC) que lleva a éste como delegado y al comandante de infantería Sacanell como técnico militar, habiéndoles sido encomendada por el Comité Central de Milicias Antifascistas, ocupar la región comprendida entre la ciudad de Tardienta y la Sierra de Alcubierre, debiendo fijar su puesto de mando en Grañén y rebasar con su acción Huesca por el sur y ocupar Zuera. Esta columna tenía una característica especial, pues contaba con un grupo de alemanes exiliados antifascistas que habían acudido a la Olimpiada Popular, esa olimpiada que nunca se celebró, ya que debía de inaugurar sus juegos en Barcelona el día 19 de julio.” 27 División, Ejército del Este La Trinchera Por Bizén D’o Río Martínez. Diario del Alto Aragón del 15 de octubre del 2006.

http://www.griegc.com/2020/04/01/las-lineas-de-fortificacion-republicanas-en-la-provincia-de-huesca/

Por Robres también pasaron las milicias republicanas del POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista), dirección a Alcubierre, según el relato de Manuel Grossi (Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial). Grossi, al mando de la columna del POUM, junto a Jordi Arquer, narra en sus cartas cómo parte de la columna salió de Robres el 3 de agosto de 1936 hacía Alcubierre. Llegaron a Alcubierre desde Sariñena tras pasar por Grañen y Robres. En Grañen estuvieron el 1 de agosto y el 2 debieron de pasar por Robres.

Cortesía Ramón Hernando.

Con la llegada de las milicias del POUM sucedió un trágico suceso. Varias personas que iban en busca del cura de Robres fueron interceptadas por la milicia del POUM. Manuel Benito Moliner, en su artículo “Robres, dos relatos para una historia” recogió el testimonio de  Luis Maynard: “Lo conocí a través de nuestro común amigo Pedro González. Es un militar a la vieja usanza: cordial, caballero y sin que los años afecten a su firmeza espiritual y corporal. Luis era carlista y por tanto estuvo desde el primer momento con los sublevados en Zaragoza, iba –y va- todos los días a misa y lo tenía muy claro: los rojos en cuanto pudieran quemarían las iglesias y destruirían la religión. Vivía con su familia junto al Centro Requeté y desde allí el 19 de julio de 1936 organizaban patrullas que vigilaban los templos zaragozanos para evitar al “camarada llamarada”. Lo que mejor recuerda de esos momentos es a la gente que enseguida se solidarizó con ellos sacándoles pastas y vino para hacerles las guardias más llevaderas. Luego vinieron las patrullas por los alrededores para ir a rescatar a los curas. Un veintitantos de julio cayó enfermo, con fiebre y un malestar que le postró en la cama. Sus amigos, sus camaradas del alma, lo fueron a buscar, tenían la difícil misión de salvar a un cura en Los Monegros, en un pueblo que se llamaba Robres a punto de caer en manos de los rojos. No los pudo acompañar, los despidió en la cama rogándoles que para la próxima contaran con él. Nunca los volvió a ver. Le contaron –siguiendo el tópico de la época- que los habrían cogido antes de llegar y después de hacerles toda clase de vejaciones a ellos y a sus despojos, los habrían tirado por allí. Durante años buscó informes. Le dijeron que si los habían llevado a Sariñena, pero preguntó en su Ayuntamiento y nada sabían. Era como si la Guerra se los hubiera tragado, no había manera de dar con sus restos y enterrarlos en la forma que ellos y sus familias hubieran querido.”

El blog de Miguel Antonio recuerda las vivencias de su padre en el artículo Guerra civil en Robres: “Papá tenía ocho años cuando estalló la guerra; en Robres el personaje más importante era «el Negus», comandante de las tropas leales a la República… «estaba en boca de los mayores su nombre se pronunciaba con admiración», en la Sierra se le dio el nombre de Negus al parapeto que estaba enfrente al de San Simón, que era el fascista, y digo fascista porque a las tropas franquistas le apoyaban Hitler y Mussolini, o sea Alemania y Francia , países que en 1936 tenían régimen fascista” (Miguel Antonio 123). Por rancia se debería de entender Italia pues hace mención a Mussolini.

Episodios de guerra

Los inicios en Robres fueron convulsos, incluso hasta después de la consolidación del frente los asesinatos y desmanes continuaron con la llegada de las milicias. El 7 de agosto de 1936 fue saqueada la iglesia parroquial “Y destruidas sus imágenes que fueron quemadas también en la plaza del pueblo” (Causa General de Robres). Muchos fueron asesinados, detenidos en Robres y llevados a Tardienta para ser fusilados. Todas las victimas aparecen en la causa General de Robres pero la información viene ampliada por Jesús Inglada Atarés en su artículo “Los robresinos víctimas de la guerra y de los campos nazis” publicada en el periódico de Robres “El Pimendón” y por Ramón Hernando.

  • Benigno Nieto, maestro nacional apresado en Robres y fusilado el 10 de agosto de 1936. El estallido de la guerra le sorprendió fuera de la localidad, de vacaciones escolares. Este maestro, que era de derechas, se había ido de Robres y se alistó en las fuerzas franquistas que tomaron Almudevar. En un enfrentamiento, cerca de Tardienta, fue hecho preso (preso de guerra) siendo fusilado el 10 de agosto 1936.
  • Valentín Gavín Pisa, fusilado cuando era conducido a Tardienta el 24 de agosto de 1936. Casado y con dos hijas, labrador de 54 años y natural de Robres. Fue detenido en el pueblo de Lalueza, el 21 de agosto de 1936. Su hija Mercedes Gavín Alpin, declaró que su padre fue llevado a Robres el día 24 y aquella noche lo mataron en Tardienta. Sospecha que participaron en el crimen Jesús Serreta Miro, Alejandro Becana Gros, Joaquín Brosed, Antonio Laporta, Francisco Brosed y Manuel Brosed. Testigos de la inscripción: Román Luna Otal y Gregorio Olivan  (Documento nº 26). Los autos nº 57 y 58 de Juan Merino Sánchez, guardia civil, dicen que “Siendo como corría peligro en Robres, se marchó a refugiarse a Lalueza, donde por orden del Comité fueron a detenerlo Ramón Rivases Cuello, Ángel Colomina y Sebastián Borbón”. Se lo llevaron en un coche hacia Robres y, según rumores, antes de llegar a Tardienta lo asesinaron.
  • Simeón Villacampa Pisa, fusilado el 7 de septiembre de 1936 en la plaza España de Robres. Casado y padre de cuatro hijos. Industrial carnicero de 43 años.
  • Martín Juan Olivan Lacruz, fusilado en Tardienta el 10 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos, labrador de 63 años y natural de Robres. Uno de sus hijos, Martín Juan Olivan Luid murió en la guerra. Su viuda Trinidad Luid Alcantara, declaró que su marido, de 63 años y labrador, afiliado a derechas, fue detenido por unos milicianos forasteros en su domicilio, en la cama, enfermo el día 10 de septiembre 1936. Estuvo tres o cuatro días en la cárcel del pueblo y después lo llevaron a Tardienta. Las personas sospechosas que participaron fueron los componentes del Comité de Robres. Testigos de la inscripción: dos firmas (Documento nº11).
  • Bautista Fajó Maza, fusilado el 11 de septiembre de 1936. Casado en terceras nupcias, dejando un hijo del primer matrimonio, tres del segundo y uno del tercero. Alcalde e industrial cafetero de 50 años. Su viuda Resti Talayero Villanueva declaró que su marido, de 50 años, fue detenido en su domicilio por Esteban Ribas y Andrés Brosed el día 7 de Septiembre de 1936. Siendo conducido a la cárcel del pueblo, salió al encuentro Pascual Gracia que lo quería matar. Los otros acompañantes no lo dejaron. Fue trasladado a Tardienta donde lo mataron. Las personas sospechosas que participaron fueron Antonio Laporta, Joaquín Brosed Sanz, Alejandro Becana Gros, Francisco Brosed Brosed, Manuel Brosed Brosed, Jesús Serreta y Vicente Maza y Pascual Gracia. El matrimonio tenía 5 hijos: Ricardo, Desiderio, Miguel, Araceli y Luis. Testigos de la inscripción Gregorio Oliva y Francisco Conte más la firma del juez Román Luna. (Documento nº 23).                   
  • Francisco Sieso Barrio fusilado en Tardienta el 11 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos. Concejal del Ayuntamiento y labrador de 38 años, natural de Robres. Su viuda Teodora Moreu Abardia, declaró que su marido de 38 años, labrador, fue detenido por Andres Brosed Sanz en el pajar de su propiedad el 8 de septiembre 1936, siendo conducido en un local del pueblo y más tarde a Tardienta donde fue asesinado. Las personas sospechosas que participaron en los hechos fueron Alejandro Becana Gros y Jesús Serreta Miro, además le consta que estos dos sujetos se presentaron en Tardienta a las autoridades rojas pidiendo y obligando que le asesinara. Tenían 5 hijos: Francisco, Alvaro, Amparo, Ángeles y Carmen. Los testigos de la inscripción fueron Gregorio Olivan y Francisco Conte.  Documento nº 17.
  • Andrés Mateo Langa fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Natural de La Muela, sacerdote de 36 años.
  • Timoteo Fajó Casaús, fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Casado y con dos hijos. Sacristán de 48 años.Su viuda María Cuello Brosed declaró que su marido de 48 años, sacristán, fue detenido en su domicilio por Andres Brosed con 4 milicianos desconocidos el 7 de Septiembre 1936. Fue conducido  a la cárcel del pueblo, llevándolo a Tardienta en unión de otros el día 10, siendo más tarde asesinado. Las personas sospechosas que participaron Antonio Laporta, Joaquín Brosed Sanz, Jesús Serreta Miro, Francisco Brosed Brosed, Manuel Brosed Brosed, Alejandro Becana Gros y Vicente Maza Abardia que intervinieron como denunciantes e influyeron realizando todo lo posible para que lo mataran, al igual que a otros del pueblo también muertos. Los testigos de la inscripción fueron Gregorio Oliva y Francisco Conte. (Documentos nº 13 y 19).
  • Joaquín Barrio Lacambra, fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos, herrero de 58 años. Su hijo Julio Barrio Novales declaró que su padre, de 60 años y carretero fue detenido por 4 milicianos desconocidos en su domicilio la noche del 7 de Septiembre 1936, llevado a Tardienta el día 10 por Jesús Serreta y Alejandro Becana. Las personas sospechosas de participar: Joaquín Brosed, Antonio Laporta, Miguel Granged, Francisco Brosed, Manuel Brosed, Alejandro Becana, Fidel Bolea Falces, Nicasio Becana Cebollero, Sebastiana Berdun Bolea y Manuel Ballarin Becana. Testigos de la inscripción: Gregorio Oliva y Francisco Conte. (Documento nº 28).
  • Domingo Berdum Pallás, fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936. Casado y con cinco hijos. Guarnicionero de 46 años y natural de Alcubierre. Su hijo Luis Berdun Franco declaró que “Su padre, de 46 años, guarnicionero fue detenido por Joaquín Brosed Sanz en su domicilio, siendo conducido el día 7 de septiembre 1936 a la cárcel de Tardienta donde allí fue asesinado. Las personas sospechosas que participaron fueron Joaquín Brosed Sanz, Alejandro Becana Gros, Jesús Serreta Miro y Antonio Laporta. El matrimonio tenía 5 hijos: Luis, Gloria, Araceli, Enrique y Eliseo. Testigos de la inscripción: Gregorio Oliva, Francisco Conte y Roman Luna como juez. Documento nº 24.
  • Mariano Barrio Otal, Se ignora su fecha y lugar aunque su inscripción en el Registro Civil de Robres se inscribió el 12 de septiembre de 1936. Casado y con seis hijos. Herrero de 42 años.Su viuda Sebastiana Serrano Capuj declaró que “Su marido de 41 años, herrero, fue detenido en su propio domicilio el 8 de septiembre 1936 por Andrés Brosed Sanz  con 5 milicianos desconocidos. Conducido a un local del pueblo y más tarde a Tardienta donde lo mataron. Las personas sospechosas que participaron fueron Joaquín Brosed Sanz,  Antonio Laporta, Manuel Brosed Brosed, Nicasio Becana Cebollero, Alejandro Becana Gros, Jesús Serreta Miro y Vicente Maza Abardia. El matrimonio tenía 6 hijos: Carmen,  Gerónimo, Eliada, Cruz, Pilar y Manuel. Testigos de la inscripción Gregorio Oliva y Francisco Conte.  (Documento Nº 18).
  • Joaquín Oto Serreta, fusilado en Tardienta el 20 de octubre de 1936. Casado y con dos hijos, comerciante e industrial de 60 años y natural de Robres. Aafiliado a Acción Ciudadana, fue detenido en su domicilio el 28 de Julio 1936 por Antonio Laporta, Joaquín Oto Guiseris y Miguel Granged Berdùn; según declaración de su viuda Magdalena Portoles Vinas. Fue conducido al pueblo de Alcubierre hasta que, el 15 de septiembre, fue trasladado a Tardienta donde quedo detenido hasta el día 20 cuando fue asesinado. Las personas sospechosas que participación en el crimen: Fermín Otal y su esposa, Joaquín Brosed Sanz, Alejandro Becana Gros, Jesús Serreta  Frontinan y Manuel Brosed Brosed; todos del comité. Testigos de la inscripción: Mariano Abardia Ortas y Francisco Conte López (Documento nº 21).
  • Ángel Oto Portolés, fusilado en Tardienta el 20 de octubre de 1936 junto a su padre Joaquín Oto Serreta. Soltero y natural de Zaragoza. Perito de marina de 33 años de edad. Fue detenido en el domicilio familiar con su padre el 28 de Julio 1936, por las mismas personas nombradas, según declaración de su madre Magdalena Portoles Vinas. Lo llevaron también a Alcubierre y después fue asesinado en el mismo día con su padre. Las personas sospechosas que participación fueron las mismas que con su padre más José Villacampa El Albañil. Los testigos de la inscripción fueron los mismos que para el padre (Documento nº 9 y 22).                 
  • Jesús Oto Portolés, fue detenido en Robres y fusilado en Sariñena el 27 de julio de 1936. Era soltero y natural de Robres, aunque domiciliado en Zaragoza. Hijo de Joaquín Oto Serreta y hermano de Ángel Oto Portolés. Su madre Magdalena Portoles Vinas declaró que su hijo, de 28 años y perito de comercio, fue detenido el mismo día que su padre y su hermano, que se lo llevaron primero a Sariñena y después a Tardienta donde cree que presentaba heridas por armas de fuego y fue enterrado en ese pueblo. Personas sospechosas que participaron: Fermín Otal y Crisógono Capistros, con sus mujeres Antonia Berdun y Emilia Otal, todos los del “Ayuntamiento”, Lorenza Miro y Matías Serreta que comentaban sus muertes. Todos ellos se encuentran en libertad en el pueblo de Robres. (Documento nº 9)
  • Modesto Catón Sampériz, asesinado en Poleñino el 25 de marzo de 1938. Viudo y con dos hijos, labrador de 72 años y natural de Robres. Fue encontrado muerto por un tiro de bala en la cabeza el 25 de febrero de 1938, en el término de Poleñino. Su hija Filomena Catón Fustero afirmó que su padre, de 72 años, no fue detenido, pues se hallaba en el campo. No puede sospechar de personas por desconocer por completo lo ocurrido.  Lo encontraron en la sarda de Grañen (camino de Curbe/Poleñino). Dicen varios testimonios que se le habían escapados unas caballerías y, a pesar del bombardeo franquista, salió a buscarlas. En esa sarda habían llegado los moros de las tropas de Cabanellas, se puede suponer… El  expediente de Salamanca dice que lo encontraron muerto el día 25, las últimas personas civiles salieron de Robres el día 23 de Marzo 1938  al amanecer (Testimonio de Luisa Miro, quien salió de Robres para Cataluña con Rafaela Arazo). Las tropas republicanas se retiraron entre el 20 y el 22 de Marzo, fueron hacia Balaguer (Lérida), así, las tropas franquistas ya estaban en Robres el día 24. Los testimonio recogidos dicen que, al volver hacia Robres, lo cogieron los moros o las fuerzas franquistas, las caballerías  no aparecieron. Su hija dijo que lo mataron en Poleñino (Documento nº 27).

A los detenidos en Robres, entre el 7 y 9 de setiembre 1936, los llevaron a Tardienta en camiones miembros del comité acompañados de milicianos. Se sabe que era Antonio Laporta quien daba las órdenes de fusilar. Las viudas de estos robresinos citaron a los miembros del Comité de haber matado a sus maridos, más otros vecinos como Matías Serreta Frontinan, Vicente Maza Abardia, Emilio Otal o mujeres como Antonia Berdun, Lorenza Miro, Dorotea Matías… En estos documentos aparecen otros acusados por estas mujeres, pero todas nombran primero a Antonio Laporta salvo una, Antonia Monesma Lassiera, viuda de Simeón Villacampa, quien nombra como criminal a David Abardia Ortiz (Archivo Ramón Hernando y Folletos declaración del testigo, Salamanca  nº 20).Escrito de Magdalena Portoles Vinas, viuda de Joaquín Oto: Liberado el pueblo denuncio a Fermin Otal, Antonia Berdun  Emilia Otal  Crisógono Capistros, Matías Serreta y Fermín Otal de ser los responsables de los asesinatos de su marido y de sus dos hijos. Magdalena acusa al alcalde, al juez municipal y al jefe de la Falange local de proteger a esas personas por ser familia y primos hermanos y que los dejen en libertad en el pueblo. Expone sobre dos páginas, carta dirigida al Sr Fiscal Instructor de la Causa General de Huesca – Zaragoza. Carta firmada y escrita en Robres a 27 de Octubre 1941. (Autos de Salamanca números 14 y 15).

Placa a los caídos, Centro de Interpretación de la Guerra Civil en Aragón (Robres).

El caso del párroco Andrés Mateo Langa

En los primeros días que funcionó el Comité local, quisieron fusilar a Andrés Mateo Langa, el párroco de la localidad. Lo llevaron a las Afueras del pueblo. Antonio Hernando Villacampa, como responsable de la JSU de Robres, se opuso a ese acto. Después, el cura fue  secretario/escribiente de dicho comité hasta finales de Agosto 1936  (testimonio José María Aznarez). Fueron los milicianos de Sariñena que se lo llevaron bajo las ordenes de Antonio Laporta. Su hermana Cecilia certificó que su hermano fue detenido tres veces consecutivas siempre en libertad en el pueblo, la última vez el 8 de Septiembre 1936, cuando lo condujeron para ser asesinado. Cecilia declaró que los que practicaron la detención eran patrulleros de pueblos vecinos y no habitantes del pueblo. Las personas sospechosas fueron María “La Santera” y su esposo Andrés Brosed (Documento nº 32 y 33 Fiscal Causa General de Barcelona Gerona y Baleares).

El testimonio de Vicente Alcubierre Alamán, del 26 de Agosto 1942, dice que su amigo Andrés Mateo Langa, de 33 años de edad, cura párroco de Robres,  fue detenido por Joaquín Brosed, Antonio Laporta y Alejandro Becana el día 7 de septiembre 1936, conducido en un camión a Tardienta donde lo asesinaron. Personas sospechosas: Francisco Villacampa y todo el comité Revolucionario. Testigos para la inscripción: Vicente Alcubierre, el juez Julio Barrio y el secretario Luis Berdun (Documento nº 30).

Fantasmas de Durruti. Archivo Ramón Hernando

En la Nueva España del 9 de julio 1938 se da cuenta de una relación de los muchos religiosos asesinados en la diócesis de Huesca, entre los que aparecen varios sacerdotes que ejercían en la comarca de Los Monegros: “Se poseen datos plenamente comprobados y oficiales de los sacerdotes asesinados en esta Diócesis por las hordas marxistas durante su invasión y dominio”. En la diócesis de Huesca aparecen contabilizados 32, de ellos 8 responden a pueblos monegrinos: “don Andrés Mateo Langa, de Robres, don Alejandro Aguilló, Capellán en Tardienta; don Lorenzo José Buera Altemir, de Poleñino; don José Campo Vivas, de Grañén; don Eduardo Colay Bierge, Coadjutor de Sariñena; don Roberto Lavilla Buil, residente en Castejón de Monegros don Rafael Pano, de Valfarta; don Paulino Pejón Miguel, de Torres de Barbués…”

Víctor Pardo Lancina (Agnes Hodgson, A una milla de Huesca) apunta a que fueron 18 los religiosos asesinados en Los Monegros, a la anterior lista añade algunos como Eusebio Antolín Moliner, párroco beneficiado de La Almolda que acudió a refugiarse a Bujaraloz y murió fusilado el 30 de julio de 1936; Vicente Monserrat Millán, de 33 años y párroco de Villanueva de Sigena que fue fusilado aunque se barajan diferentes escenarios, también de Villanueva de Sigena el sacerdote encargado del monasterio Antonio Montull Carilla asesinado, el 1 de agosto de 1936, sobre el puente nuevo sobre el río Alcanadre donde recibió nueve balazos.

El caso de los maestros

La escuela en Robres, gracias a la valentía de una maestra permaneció abierta durante la guerra. Desalojaron el Granero de Primicias, donde daban clase las niñas y habilitaron el granero de casa Ribas. Las clases se dieron con “cierta regularidad” gracias a la maestra Victoria Artero y la ayuda de las exalumnas Ángeles More, Luz Ribas y Teresa Maza. El maestro nacional Benigno Nieto fue apresado en Robres y fusilado el 10 de agosto de 1936, por sus ideas derechistas, aunque Pedro Oliván “La Escuela de Robres en el siglo XX” (El Pimendón. Periódico de Robres) cita que fue fusilado en septiembre del mismo año en Tardienta. Ramón Hernando apunta que al estallar la guerra eran vacaciones escolares “Este maestro, que era de derechas, se había ido de Robres. Se alistó en las fuerzas franquistas que tomaron Almudévar. En un enfrentamiento cerca de Tardienta, fue hecho preso y fusilado el 10 de agosto 1936”. También fue fusilado el maestro Valeriano Estaún, en Huesca en 1936 mientras se encontraba en la capital altoaragonesa; detenido y fusilado por su pertenencia al sindicato UGT. Los casos del cura como del maestro desmienten claramente la versión oficial que mantuvo el régimen, señala Ramón Hernando.

La noche que mataron a Simeón Villacampa

“Laporta manda a fusilar unas cuantas personas, amenaza a los comunistas de Robres ya que se oponen a la colectivización de las tierras, me amenazó de muerte por oponerme al fusilamiento del cura, convocó a mi madre y miembros de mi familia para matarles (la noche que mataron a Simeón Villacampa)” (Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988).

En plena plaza España de Robres, la noche del 7 de septiembre de 1936, apareció sin vida el cuerpo de Simeón Villacampa Pisa, natural de Robres. Contaba con 43 años de edad, casado y padre de cuatro hijos. Carnicero de profesión, llevaba negocios de carnes y era el proveedor de la zona para todos los milicianos republicanos. Eran tiempos de guerra.

Pronto las voces corrieron por el lugar, un miliciano había matado de un tiro a Simeón Villacampa Pisa desde la torre de la Iglesia. ¿Lo fusilaron los milicianos? nunca hubo salva de fusiles ni varios tiros de pistola, ¿Quién lo mato?, ¿Gente de Robres? ¿O miembros del Comité con Laporta? ¿O milicianos de Tardienta?. Hay algo extraño en su muerte, envidias, ajuste de cuentas…

Su prima Antonia Villacampa y otras personas de su entorno le avisaron de no salir esa noche, aquella que lo mataron en la esquina del Huescano, plaza del Plegadero. Sabiendo, en periodo de guerra, si uno no se presenta a una convocatoria los propios milicianos van a buscar a la gente casa por casa y si fusilan se oye la salva de los fusiles. No fue así, dos tiros.

Desde esa misma esquina ni siquiera se ve la torre de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Tiempos de guerra, convulsos, de rencillas o recelos entre personas, por llevarse bien con algunos y mal con otros, incluso se rumeaba que Simeón tenía carnet de falangista.

Aquella noche del 7 de septiembre de 1936, el comité local había convocado a varias personas que se oponían a la colectivización, todas ellas vinculadas al Partido Comunista de la localidad. Entre ellas Antonia Villacampa Susin, Fernando Arazo Cuello, Anselmo Conte y al mismo Siméon Villacampa Pisa. “Laporta manda a fusilar unas cuantas personas, amenaza a los comunistas de Robres, ya que se oponen a la colectivización de las tierras, me amenazó de muerte por oponerme al fusilamiento del cura, convocó a mi madre y miembros de mi familia para matarles (La noche que mataron a Simeón Villacampa. Notas de Antonio Hernando Villacampa. Ramón Hernando, 1988).

En verdad, todo se remonta a que Laporta había sido acusado públicamente de ser un ladrón, de aprovechar su pertenencia a la FAI para robar los bienes de los robresinos. Los principales acusadores fueron Antonia Villacampa, Francisco Arazo y su esposa Adelaida Cuello Cuello, Anselmo Conte y otras familias, en particular todos los comunistas de Robres. A Antonia Villacampa Susín, Laporta quería condenar a muerte. A otras mujeres les amenazó con detenerlas, a Manuela Fajo Casaus  esposa de Anselmo Conte y prima hermana de Antonia; Juliana Gavín Villacampa  “La Comadre” hija de Engracia Villacampa (También comadre), prima hermana de Antonia y esposa de Domingo Moreu y Rosa Lassiera.

Al parecer, los bienes robados eran enviados a Tardienta donde los cargaban en camiones dirección Barcelona para venderlos para el bien de la CNT (Archivo de  Madrid). Curiosamente, el hermano de Simeón, Antonio Villacampa Pisa, pertenecía a la CNT y formaba parte del Comité Local, del que incluso llegó a ser Juez Municipal. Al parecer no dijo nada, cuestión que parece extraña, incluso una fuente oral dice que Antonio tiene que ver en ese asesinato.

Los expedientes del caso de Simeón Villacampa Pisa

El asesinato de Simeón Villacampa Pisa guarda varios interrogantes que resolver, principalmente el de su autor o autores. Una verdad que en los distintos expedientes parece quererse asomar pero no llega a aflorar del todo. Antonia Monesma Lasierra, viuda de Simeón Villacampa, curiosamente acusó a David Abardia Ortiz, también carnicero de Robres (Documento del Archivo de Salamanca. Causa General  nº 20). De la misma manera se manifiestan otros dos documentos de la Comisaria de Huesca que recogen como David Abardia Ortiz y Manuel Brosed Brosed manifestaron que “Han matado a Simeón Villacampa” (Documentos Archivo Comisaria de Huesca nº 631 y 677). Ellos dos lo reconocen y firman delante del comisario Claudio Villacampa (Alberuela de Tubo). Otro informe oral dice que Simeón tenía problemas personales con David Abardia. Quizá, ambos expedientes nº 631 y 677, de los Archivos Comisaria de la Huesca, fueron forzados por la policía o Falange.

David Abardia Ortiz fue condenado por el Tribunal por “Exaltación Marxista” a seis años de cárcel (Expediente de Responsabilidades Políticas de Huesca). No obstante, el tribunal no menciona a ningún momento el asesinato de Simeón Villacampa –¿Por qué?-. Todo a pesar de tener las acusaciones de su viuda y las declaraciones hechas por David Abardia y Manuel Brosed Brosed (Documentos de Salamanca y Comisaria de Huesca nº 631 y 677). Manuel Brosed Brosed fue fusilado en 1942.

Sin embargo, los autos nº 47 y 48 del guardia civil Juan Merino Sánchez, Comandante del puesto de Alcubierre, describe claramente que fue el presidente del comité local Antonio Laporta con otros del comité quienes se liaron a tiros con Simeón Villacampa: “El día 8 de Septiembre 1936, Simeón fue llamado al local que servía de oficina al Comité por el Presidente Antonio Laporta  sobre las 22 horas, haciéndole saber que para él no había carne, etc que se podía marchar cuando quisiera, al salir a la calle, empezaron a tiros con él, hasta que cayó muerto. Un tal Rodríguez, natural de Villanueva i Geltru,  fue el que le dio el  tiro de gracia”. Curiosamente este auto de acusación no apareció en el Tribunal de Huesca.  Este documento no aparece en las condenas de David Abardia y de Manuel Brosed Brosed.

La verdad, dicen que es la primera víctima de las guerras, una de las muchas. El asesinato de Simeón Villacampa Pisa continúa siendo un misterio, con sus dudas y sospechas, viejas heridas  de las que hablar es la mejor manera de cerrarlas, para superar uno de los más tristes episodios de la reciente historia de España.

Hechos desencadenados

Aquel 7 de septiembre de 1936 se produjeron diversas detenciones en Robres, generando una gran tensión en la localidad en contra del comité y de Laporta. El guardia civil Juan Merino Sánchez (Causa General  autos Nº 35 a 60), confirmó las detenciones del 7 y 8 de septiembre de 1936, las de Mariano Barrio Otal, Domingo Berdún Pallas, Ángel Oto Portolés, Timoteo Fajo Casaus, Bautista Fajo Casaus, Francisco Sieso Barrio, Ángel Mateo L, Joaquín Oto Serreta, Martin Olivan Lacruz y Joaquín Barrio Lacambra. Merino señaló a los sospechosos de las detenciones en esos autos. Todo acabó desencadenando que, entre finales de Setiembre y primeros días de octubre de 1936, de la sierra bajase un grupo importante de milicianos armados que se enfrentaron al comité local al lado de los comunistas de Robres, produciéndose enfrentamiento de forma oral.

Los milicianos pidieron al Comité llevar las cosas con más tranquilidad con la población civil, de no llegar a una guerra interna. ¿Quién llamo a estos milicianos?, ¿Eran de la 27* División o de la Carlo Marx?. Muchos de ellos vivían en las casas republicanas del pueblo, bajaban y subían a las trincheras. Aunque la Carlos Marx estaba en Torralba de Aragón, algunos de ellos vivían en Robres (Testimonio de un Catalán cuyo padre murió en Torralba pero dormía y comía en Robres). ¿Fue Esteban Rivas, como secretario del Partido, quien intervino para que vinieran? ¿y/o quizá familias que se quejaron directamente a los soldados de la sierra?.

Tenemos pocos informes sobre la manera de gobierno del comité revolucionario rocal, entre el mes de Julio 1936 hasta el mes de Febrero 1937, tanto la situación revolucionaria y de insurrección y que función exacta tuvieron los partidos (Partido Comunista  -Socialista- Izquierda Republicana) durante ese periodo, papel político de la CNT/FAI para implantar el comunismo primitivo, colectivización de los bienes mobiliarios y tierras, requisas de cosechas y otros bienes, erradicar la religión, nada de bautizos, casamientos civiles, perseguir curas, sacristanes, ricos, personas de derechas… hacer desaparecer “el Mundo Viejo”. Todo encontró un terreno favorable con los rompe/márgenes de Robres herederos del movimiento canalista.

Caso del Falangista hecho preso en la Sierra de Robres

En octubre de 1936 fue hecho prisionero y después asesinado en el pueblo de Robres “una persona desconocida con el grado de Teniente, de Ejea de los Caballeros y según referencia del parche es o era Teniente de la Guardia Civil y un hermano en Madrid”. Según la Causa General, el prisionero presentaba una pierna rota, desconociendo su edad y cuya afiliación política se le desconocía. Su muerte no fue inscrita en el registro civil y de profesión aparece anotado “Se dice que era herrero”. Manuel Benito Moliner, en su artículo “Robres, dos relatos para una historia”, recogió el testimonio de Domingo Brosed de Robres “Cuenta la historia de un militar que lo apresaron en la Sierra y lo condenaron a muerte: -aquello fue una barbaridad, con meterlo en la cárcel sobraba. Luego además vinieron las represalias y murieron más inocentes. Absurdo-”.

Ramón Hernando lo sitúa el 28 de Noviembre 1936. Entre los montes de San Simón y de La Pasionaria hicieron preso a un falangista. Lo bajaron herido a Robres y al parecer era teniente y marques. Fue entregado al Comité Revolucionario, tenía una pierna rota y lo llevaron al cementerio con un volquete. En el “asesinato” intervino Nicasio Becana y lo presenció Joaquín Lacruz (carta firmada el 28 de Octubre 1940 por Luis Berdun. Documento Nº 8. Jefe Local de Robres de la Falange Española Tradicionalista y de las JONS).

En el auto nº 43 de la cárcel de Torrero dice que Nicasio Becana, con Antonio Laporta,  intervino en el asesinato de un teniente del Ejército Nacional hecho prisionero en la posición de San Simón el 28 de noviembre 1936, llevado al cementerio matándole allí.

En el auto nº674 de Huesca  se acusa a Pascual Serrano Capuj, que prestó numerosos servicios armados al Comité de Enlace de intervenir en la ejecución de un falangista herido hecho prisionero y apoderándose de él, en el cementerio del pueblo y que con otras personas lo mataron a tiros.

En otro documento de Huesca se acusa también a Manuel Brosed Brosed (Archivo Ramón Hernando).

La guerra se va sucediendo

La guerra fue sucediéndose y esta fue quedando recogida en los distintos medios de información. En distintos medios aparecen diferentes informaciones que van dando cuenta del desarrollo del frente en Robres, fuegos cruzados, ligeros tiroteos, deserciones, calma en el frente…    

  • Entre Robres y Alcubierre es rechazado el enemigo en un nuevo intento de ataque (La Vanguardia 15 de octubre de 1936).
  • En octubre de 1936 la Columna Carlos Marx perdió Puig Ladrón, pero contuvo la ofensiva en Robres y Torralba, desbaratando el movimiento envolvente contra Tardienta (Durruti en el laberinto. Miquel Amorós).
  • En el sector de Alcubierre ha renacido la calma después del combate de hace 24 horas. Al amanecer, el coronel Villalba ha recorrido este frente, haciéndose cargo de la situación de nuestras avanzadillas y mostrándose satisfecha de la disciplina y entusiasmo de nuestras fuerzas. Después se ha trasladado al sector de Robres. La situación es buena en este sector. (La Vanguardia 30 de octubre de 1936).
  • Sector de Huesca. Entre Robres y Alcubierre se ha repelido al enemigo en un nuevo intento de ataque. (Diario de Barcelona 15 de octubre de 1936).
  • Bajas y deserciones del enemigo. Barbastro. Nuestras ambulancias han recogido unos 30 cadáveres de elementos facciosos en el sector de Robres, donde las fuerzas leales han desalojado de posiciones lejanas al enemigo y han perseguido lejanamente. Tres soldados de la guarnición de Huesca han pasado a nuestras filas. Dicen que la vida en Huesca es imposible, además de la falta de agua se ha declarado una fuerte epidemia de sarna. Front: òrgan del Partit Obrer d’Unificació Marxista. 11 de noviembre de 1936.
  • Parte de guerra del sector Norte Barbastro, 30. En el cuartel general del sector de Huesca ha sido facilitado a última hora el siguiente parte de guerra: «El enemigo atacó duramente nuestras posiciones entre el sur de Puig Ladrón y observatorio de artillería de Robres, durando el ataque hasta las cuatro de la madrugada, en que fue totalmente rechazado, con numerosas bajas vistas. Durante todo el día se ha observado que sus servicios sanitarios intentaban retirar del campo a sus muertos y heridos. No hay más novedad. (La Vanguardia 31 de octubre de 1936).
  • «En los sectores de Alcubierre, Tierz, Fornillos y Robres, ligeros tiroteos sin consecuencias, y en este último la artillería leal hizo fuego sobre posiciones enemigas, con gran eficacia. Resto del frente, sin novedad.» (La Vanguardia 8 de noviembre de 1936).
  • En el sector de Barbastro (Huesca), hay tranquilidad. Solamente, durante la noche anterior, hubo una lucha, bastante intensa, en la línea de Robres a la Sierra de Alcubierre. El enemigo inició un pequeño ataque que fue rechazado enérgicamente por nuestras fuerzas apenas iniciado, e inmediatamente hemos emprendido el contraataque, manteniendo la iniciativa por nuestra parte y desalojando al enemigo no solo de las posiciones que había intentado tomarnos, sino que se le obligó a retroceder hasta posiciones mucho más internadas en sus líneas. Durante esta operación, el enemigo ha sufrido un gran número de bajas castigándosele duramente  (La Vanguardia 11 de noviembre de 1936).
  • Barbastro.–Nuestras ambulancias han recogido más de 30 cadáveres de facciosos abandonados en el sector de Robres, donde las fuerzas leales desalojaron al enemigo de sus posiciones (La Vanguardia 12 de noviembre de 1936).
  • En el sector de Robres, tiroteos de fusil y ametralladora (La Vanguardia 19 de enero de 1937).
  • «Circunscripción Norte.—En Robres, en la tarde de ayer, hubo cañoneo enemigo sobre nuestras líneas, disparándose además seis granadas de mortero sin consecuencias(La Vanguardia 2 de febrero de 1937).
  • En Robres se han pasado a nuestras filas tres soldados del Tercio Sanjurjo. (La Vanguardia 23 de febrero de 1937).
  • En los subsectores de, Tardienta, Robres y Alcubierre, intenso fuego de fusil, ametralladora y duelo de artillería. En los mencionados subsectores se han pasado a nuestras filas 18 soldados procedentes del campo rebelde. (La Vanguardia 16 de abril de 1937).
  • La lucha en Aragón Comunicados del Consejero da Defensa a S. E. el Presidente de Cataluña Intenso fuego de fusil, mortero y artillería en nuestras posiciones del Este y Nordeste de Huesca. Igualmente tiroteos y duelos de artillería en el subsector de Robres y Tardienta. Por la sierra de Alcubierre se han pasado a nuestras filas un jefe de escuadra y un falangista con armamento. En el resto del frente, sin novedad. (La Vanguardia 17 de abril de 1937).
  • Fuego de fusilería y ametralladora en los subsectores de Alcubierre, Robres y Tardienta. (La Vanguardia 18 de abril de 1937).
  • Fuertes tiroteos de fusil ametralladora en e1 subsector de Robres, así como en Tardienta y Alcubierre. (La Vanguardia 24 de abril de 1937).
  • Fuerte tiroteo de fusil ametralladora al subsector de Robres, Tardienta y Alcubierre.  Diario de Barcelona 24  de abril de 1937.
  • Avisos. Eloy Gibaja: Diagonal, 442, 1.° desea conocer noticias acerca  de su hijo Hipólito Gibaja,  27  División, 123  Brigada Mixta,  2,°  Batallón Ametralladoras: Robres sector Tardienta. Euzkadi en Catalunya 12 de junio de 1937.
  • Van a evacuar Alcubierre y el Estado Mayor se trasladará a Robres. 7 de julio de 1937. Agnes Hodgson, A una milla de Huesca. Víctor Pardo Lancina.
  • La Vanguardia 20 noviembre de 1937 En el sector de Robres los leales vuelan una pieza enemiga. Robres, 19. Nuestras baterías han disparado sobre las posiciones enemigas de El Pedruso. Contestaron los facciosos descubriendo sus emplazamientos sin hacer fuego sobre Suelta Alta. Entonces las artillerías leales afinaron la puntería, localizando una pieza instalada en el Pedroso, cayendo algunos proyectiles en el mismo emplazamiento provocando una explosión, a la vez que se levantaba densa columnas de humo, restableciéndose a partir de entonces la calma en ambos sectores.  También dispararon nuestros soldados sobre el blocao de El Pedroso, ignorándose el resultado, aunque se vio como salían corriendo algunos soldados.

«En el pueblo de Tardienta estuvimos tres días y, en la noche del tercero, nos trasladaron en camiones al pueblo de Robres. En ese pueblo había población civil y eran muy buenas gentes. Por poco dinero, en cualquier casa del pueblo, te daban un buen trozo de pan, tocino frito y vinillo de la tierra.

No fue una marcha muy larga porque, aunque en el pueblo de Robres había población civil, el frente no se encontraba lejos. El pueblo se encontraba muy bien resguardado por la sierra de Alcubierre.

Llegamos a las trincheras y a mi pelotón lo mandaron al parapeto del Negus, que estaba situado en el monte más alto de aquella sierra y que nos costó trabajo escalar. El parapeto era una fortificación circular rodeada de alambradas de espino, y en las trincheras estaban las chabolas para dormir y descansar. Se hizo el relevo, y los hombres que marchaban relevados tenían la barba muy crecida, parecían mis padres; salieron corriendo monte abajo demostrando alegría y gastándose bromas entre ellos.»

Morales Torres, A. (2009): Recuerdos de guerra y represión de un miliciano malagueño, Sevilla: Federación Local de Sindicatos de la CGT de Málaga.

A Manuel Benito Moliner, el robresino Domingo Brosed le contó sus vivencias durante la guerra en Robres: “Recogimos a Domingo Brosed y a su nieta en Robres y desde allí nos encaminamos a lo más belicoso de la Sierra de Alcubierre con sus tres famosas cotas: La Pasionaria, El Negus y La Imposible, unas pegadas a las otras. Con sus ochenta y muchos años se adentró por la espesura del monte, siguiendo una senda que pronto quedó borrada, hasta alcanzar un claro donde había restos de construcciones y algunas pequeñas cuevas. Domingo es un hombre bueno, se le nota al hablar de los que mataron en su pueblo. Mientras se mete en un pequeño hoyo me dice: “aquí tenía yo la maxim, una ametralladora soviética que manejaba con el amigo Guiseris que hoy vive en Lérida”. Con el índice señala el emplazamiento de la casamata del famoso Negus, la cocina, los refugios… Como Orwell estuvo a unos pocos kilómetros de aquí, en el Monte Irazo, encima de donde han hecho las trincheras modernas, no puedo por menos que preguntarle sí era verdad que todo estaba lleno de ratas y deposiciones, se queda extrañado: “Aquí estábamos en el monte, no lo ve. Podías hacer tus necesidades lejos, teniendo cuidado de no ponerte a tiro. No íbamos a ser tan marranos de evacuar donde tantas horas pasábamos, eso ocurrió por el Ebro cuando entre los francotiradores, los aviones y la artillería no te dejaban mover… aquí no, era como cuando íbamos al campo a trabajar”.

Domingo Brosed, en sus historias dio luz al relato que Manuel Benito había escuchado a Luis Maynard “En Robres había uno de Casa Anzano que era el jefe de la Falange en el pueblo, como veía que los obreros y labradores pobres, poco a poco, nos íbamos organizando para mantener la legalidad y nada podían hacer, decidió marchar a Zaragoza por Tardienta. No le dijimos nada, además se llevó a su mujer que estaba embarazada. Nos llegaron noticias de que se acercaban los primeros milicianos desde Cataluña por la Carretera de Monzón y fuimos a Alcubierre a verlos. Estaban llegando y ante la proximidad del pueblo se desplegaron por los campos. En un automóvil, delante, iba uno que parecía tener mando y al poco rato llegó por dirección contraria un coche grande o una camioneta con varios elementos fascistas de Zaragoza, entre ellos el tal Anzano de Robres. Los del POUM los mandaron parar y los falangistas que querían seguir, el propio Anzano les dijo que había pasado por Tardienta y nadie le había dicho nada. Entonces el jefe del POUM con una media sonrisa y haciendo una contraseña convenida, le dijo que sería mejor que bajaran, señalando a toda la columna que se iba asomando a la carretera. No les quedó más remedio que rendirse y en el mismo vehículo se los llevaron por la carretera de Lanaja, donde los fusilaron sin más. Luego vinieron tantos cadáveres y bombas que ya nadie se acordó de ellos, ni siquiera los nacionales que eran tan cumplidos con sus muertos. En Casa de Anzano, en Robres, mataron un cordero y prepararon una buena mesa para recibir a su hijo. Pero nunca más lo vieron, hubo que decírselo…”.

Uno de los amigos de Luis Maynar fue Tomás Aguilar Refusta, que permanece enterrado en la fosa común el cementerio municipal de Sariñena, quizá con sus otros compañeros. Manuel Maynar Aguilar, nieto de Tomas y sobrino de Luis, relata sobre su abuelo “Otra buena persona, cuyo único delito fue tener coche y llevar a unos amigos desde Zaragoza a Robres para recoger al cura del pueblo antes de que la zona cayese en poder de las fuerzas paramilitares que avanzaban desde Cataluña para combatir a los insurrectos en Aragón. Y no se llevó también por delante a mi tío Luis Maynar Ferrer porque una alta fiebre le impidió acompañarle siendo sustituido por otro de los allí enterrados”. La captura de Tomás Aguilar Refusta y sus compañeros debió de ser el día dos o tres de agosto de 1936. No llegaron a Robres ni consiguieron salvar la vida al cura, al anteriormente citado Andrés Mateo Langa fusilado en Tardienta el 12 de septiembre de 1936.  En la misma fosa común de Tomás Aguilar Refusta, del cementerio de Sariñena, descansa también Jesús Oto Portolés, anteriormente mencionado entro los robresinos detenidos y fusilados.

Robres, pueblo del frente

En marzo de 1937 la Republica ordenó la disolución de los comités revolucionarios, en Robres hubo elecciones municipales saliendo como alcalde Pascual Serrano (el Tuerto de Gerónimo), Crisógono Capistros de secretario y como concejales Joaquín Lacruz (Capuj), Nicasio Becana Cebollero (el Habanero), José Otín Pueyo, Ramon Cuello Lafita, Joaquín Subías, Victoriano Serrano, Ramon Cuello Lafita (delegado de abastos), Francisco Arazo Canudas, Máximo Becana Mur etc. Este nuevo Ayuntamiento funcionó con toda normalidad hasta el 23 de marzo de 1938, eran casi todos comunistas.

En Robres se instaló un centro de intendencia que abasteció a las posiciones cercanas, Manuel Grossi lo recogió en sus Cartas “En Robres además de la Colectividad Agrícola se formó un Comité de Abastos, que comenzó a organizar la vida del pueblo resolviendo las necesidades que se suscitan en todo movimiento”. Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial. Además Grossi escribió “En Robres se ha dado vida a la colectividad Agrícola, mediante asamblea, democráticamente, donde los campesinos han sabido plantear la iniciación de cómo se debían de encauzar y resolver sus problemas”. Lo cierto es que Robres había sido una localidad con la tierra bastante repartida y la colectivización no fue tan idílica según los testimonios locales. Joaquim Pisa Carilla en su obra “Las cenizas del sueño eterno: Lanaja, 1936-1948” señala: “establecieron una colectividad la misma tarde que llegaron los milicianos del POUM, al mando de Manuel Grossi plantearon la colectivización que aprobaron en asamblea los vecinos de Robres -Hacer acto de presencia, pero solo como principio de iniciativa-”. Al final, en Robres se creó una colectividad marcada por el Partido Comunista. Víctor Pardo Lancina apunta que la colectividad de Robres fue creada el 1 de agosto “Al tiempo que se nombraba un comité de abastos” (Agnes Hodgson, A una milla de Huesca), además de considerar que Robres fue una de las muchas localidades que emitieron moneda propia o vales para el intercambio de sus productos.

Se atendieron a los heridos del frente. En la Documentación referenciada en el Fichero General de la Delegación Nacional de Servicios Documentales se hace referencia a la Célula Sanitaria del Partido Socialista Unificado de Robres. En dicha documentación aparecen informes enviados por el Estado Mayor de la División Carlos Marx, de las Milicias Antifascistas de Cataluña relativos a la situación en el Frente, a las células sanitarias del Partit Socialista Unificat de Catalunya en Sariñena, Grañén, Almuniente, Tardienta, Torralba de Aragón, Robres y Lanaja. Entre aquellos papeles acompaña copia del acta de la reunión celebrada por la Célula de Tardienta el 30 de noviembre de 1936  

En Robres se debieron de dar las primeras atenciones médicas después de los primeros auxilios en el frente, en primera línea, para su posterior evacuación a los hospitales de sangre de retaguardia, como los de Grañen, Poleñino o Sariñena. Robres, sanitariamente respondió al sector norte dependiente de Sariñena.

La enfermera Agnes Hodgson recogió dos referencias sobre Robres, la primera el 22 de marzo de 1937 “Han traído un caso de herida en la cabeza, aunque no demasiado grave; estaba durmiendo en una habitación en Robres  cuando estalló una bomba, y resultó con un par de heridas superficiales a cada lado de la cabeza”. La segunda el 17 de julio de 1937 “Se rumorea que el ataque de la sierra de Robres ha finalizado, y que no se trataba de un ataque en serio, sino de una distracción para aliviar el aburrimiento de las tropas” (Diario de Agnes Hodgson, A una milla de Huesca. Víctor Pardo Lancina).

Iglesia de Robres

Se instaló un refugio antiaéreo bajo la iglesia, pero también en el frente se escavaron cuevas para protegerse. Muchos milicianos se parapetaban de la aviación en los barrancos por la subida de san Blas a las posiciones de la sierra. Era el camino de suministro al frente desde la intendencia de Robres. Milicianos se quedaban en casas y pajares y subían al frente por la cuesta de san Blas, hasta la posiciones de La Pajera donde se situaban las trincheras frente las posiciones del bando nacional.

“En verano de 1937 editaban un periódico quincenal desde la sierra, Vencer, dirigido por el periodista Avelino Artís Gener, Tísner, compañero de Arendt (Erich)” (El Hospital Inglés de Grañén. Julián Jesús Castiella Hernández, Pablo J. Castiella Guerrero.

“Tísner” Avelí Artís Gener, periodista, dibujante, pintor y escritor, recoge Víctor Pardo Lancina en su artículo Vademécum de la contienda [Presentación de libro de José Luis Melero Rivas en el Museo Pedagógico de Aragón y en Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza]. “Militante del PSUC, se enroló en la 123 Brigada Mixta de la División «Carlos Marx», que luego sería la 27 División con la creación del Ejército Popular. Combatió en Sariñena, Almuniente, Robres (donde se había establecido el Estado Mayor de la unidad), la ermita de Magallón, la Sierra de Alcubierre…”. Avelí lo contó en su relato autobiográfico sobre la Guerra Civil titulado 556 Brigada Mixta.”Esta «556 Brigada» nunca existió en organigrama alguno del Ejército Popular, pero el autor, tras cambiar los nombres verdaderos de los protagonistas de su novela, también quiso escamotearnos la verdadera identidad de la unidad de combate”, expone Víctor Pardo Lancina. 

El 24 de marzo de 1938 fue incendiado el edificio de horno de cocer pan, desconociendo quienes fueron los autores”. El horno era propiedad de Pascual Pisa Lacruz, “con domicilio en Zaragoza” (Causa General de Robres).

En febrero 1938, poco antes de la caída del frente de Aragón, tuvo lugar la reunión del sindicato agrario de la CNT de Robres, los grandes dueños fueron convocados pero no se presentaron (Archivo Ramón Hernando).

Consejo municipal

En marzo de 1937 la Republica ordenó la disolución de los comités revolucionarios, en Robres hubo elecciones municipales saliendo como Alcalde Pascual Serrano (el Tuerto de Gerónimo), Capistros Crisogono de secretario y como concejales Joaquín Lacruz (Capuj), Nicasio Becana Cebollero (el Habanero), José Otín Puyeo, Ramon Cuello Lafita, Joaquín Subias, Victoriano Serrano, Ramon Cuello Lafita (delegado de abastos), Francisco Arazo Canudas, Maximo Becana Mur etc. Este nuevo Ayuntamiento funcionó con toda normalidad hasta el 23 de marzo de 1938, eran casi todos comunistas.

Finales de la guerra

El día 1 febrero 1938, poco antes de la caída del frente de Aragón, tuvo lugar la reunión del sindicato agrario de la CNT de Robres, calle Argensola, los grandes propietarios fueron convocados, pero no se presentaron (Archivo Ramon Hernando).

Llamada Junta Administrativa presidente Segismundo Brosed Otal, vicepresidente  Jesús Becana Gros, secretario Abel Larras Canudas, vice- secretario Vicente García Cavero, contador Cosme Oto Guarga, tesorero Ramon Brosed Brosed, bibliotecario Cándido Brosed. Asisten Manuel Brosed Brosed, Andrés Brosed, Fidel Brosed, Fidel Bolea , Juan Ruiz,  Gregorio Brosed. Los ricos o derechas que fueron convocados el 15 de febrero 1938, no se presentaron. Por la Junta Calificadora de la reforma agraria Román Otal Luna, Vicente Maza Abardia, Antonio Pano Santafé, Ramon Serrano Anzano, Francisco Luna Oto, Vicente Alcubierre Alaman, Joaquín Barrio Lacambra, Joaquín Oto Serreta, Nicolas Pertusa Pisa, Pedro Giménez, Francisco Sieso Barrio, Manuel Abardia Pano, Antonio Pano Santafé y Manuel Abardia Pano se encontraban en el monte , fueron avisados por el Alguacil , Ramon Serrano Anzano firmo el recibo en su casa pero no vino tampoco, firma el presidente de la Junta Joaquín Subías (Archivo Ramon Hernando).

Nota: Cándido Brosed, soltero, al irse de Robres se alisto en el Ejercito Nacional en Zaragoza, enviado a Pamplona logró a huir y pasar a Francia donde murió.

La caída del frente

El 8 de marzo comenzó la ofensiva del bando nacional rompiendo el frente y propiciando la retirada de tropas republicanas. Las últimas personas que salieron de Robres fue el día 23 al amanecer (Notas de Ramón Hernando. Testimonio de Luisa Miro). El 25 de marzo de 1938 Robres sufrió un intenso bombardeo, ametrallando a la población civil durante su huida de la localidad “mientras trataba de huir hacia los campos del entorno” (Agnes Hodgson, A una milla de Huesca. Víctor Pardo Lancina). Avelí Artís Gener en su libro 556 Brigada Mixta (Avance, 1975) confunde el bombardeo de Alcubierre con el de Robres. José Luis Dumas Brosed, que cuando comenzó la guerra tenía 8 años, relata en El Pimendón, Periódico de Robres, que Robres fue bombardeada en dos o tres ocasiones. “Muchas casas del pueblo fueron escachadas por los bombardeos” y, cree recordar, “que solamente murió un hijo de don Goyo, el practicante y barbero, que estaba en la torre para dar la alarma cuando vieran aviones y tuvo la mala suerte que una bomba dio en el chapitel”.

El blog de Miguel Antonio en la Guerra civil española en Robres también hace mención a aquel episodio: “Papa recordaba bien los bombardeos que sufrió Robres, cuando se producían los ataques aéreos, se hacía sonar la campana del pueblo y los vecinos iban a refugiarse a cuervas, la escuela estaba situada en el edificio que hoy es de la «tercera edad», así es que la cueva más próxima estaba debajo de la iglesia, junto a casa de Andresico… en uno de los bombardeos murió un hermano de Goyo el barbero cuando tocaba la campana para avisar de la llegada de los aviones”.

Robres sufrió varios bombardeos, recogidos por José María Maldonado en “Aragón bajo las bombas, Gobierno de Aragón, colección Amarga Memoria. 2009.” El primero 3 aviones el 22 de noviembre de 1937; el segundo 8 S.81 160×50 Kg el 10 de diciembre del mismo año, como objetivo el pueblo y al día siguiente el tercer bombardeo sobre concentraciones de tropas, a las 11:55 horas y fue ejecutado por 9 S81 108×50 Kg. El cuarto y último bombardeo fue realizado por la legión alemana Cóndor (HE 111) el 25 de marzo de 1938.  En cambio, Víctor Pardo Lancina señala los cuatro bombardeos, según testimonios, el 17 de junio, el 16 de julio y el 10 de diciembre de 1937, “así como en marzo de 1938”. “Robres fue bombardeado ayer; no hubo bajas, pero sí muchas casas destruidas, y las ambulancias se salvaron por poco” 18 de junio de 1937, Agnes Hodgson, A una milla de Huesca.

El día 10 de diciembre de 1937 hubo un bombardeo sobre Robres y murieron tres personas; una niña de 17 años, un joven de 18 años, y Marino Gracia Villuendas,  de 31 años,  natural de Robres, fue el mayor de seis hermanos, de la antigua “Casa del Tejero. De aquel bombardeo  contamos con el testimonio familiar de Mº Rosa Gracía Cano:

Quienes vivieron el bombardeo de Robres, del 10 de diciembre de 1937, decían que iban a destrozar Robres. Eran aviones de tropas aliadas con el ejército franquista, italianas o alemanas.

Mi madre nos explicaba que el bombardeo fue por la mañana, cerca del mediodía, y que mi padre dijo de llevar comida a unos milicianos que estaban por el Serrallo al sol, con hambre y mucho frío: “¿Qué tenemos para darles de comer a estos jóvenes?-sólo tenemos patatas. -Pues hazles una sartenada de patatas.”

Fueron con mi madre a la bodega a por vino y al volver ya estaba la aviación sobre Robres. Mi padre dijo “¡Estos vienen dando, todos al refugio¡”. Hizo entrar en un refugio que había en el Serrallo a las personas de su familia y vecinos que por allí se encontraban. Él se quedó el último y no llegó a entrar; en la puerta del refugio le alcanzó una bomba.

Los otros fallecidos de ese día fueron una chica y un chico de 17 y 18 años.

La chica era de “casa Pesquito”, casa actualmente desaparecida, próxima a la farmacia actual. El chico era hijo de Don Gregorio, el practicante, originario de Almudévar. Se decía que el chico quiso esconderse en el campanario de la iglesia pensando que sería un sitio seguro, y que rodó por las escaleras de la torre.

Marino Gracvia Villuendas. Os Monegros.

La muerte de Modesto Catón Sampériz, en Poleñino el 25 de marzo de 1938, cuando se produjo las tropas republicanas ya habían abandonado la localidad. Al parecer, algunos testigos aseguran que se le habían escapado unas caballerías y, a pesar del bombardeo, salió a buscarlas. “En esa sarda ya habían llegado los Moros de las tropas de Cabanellas, las tropas republicanas se habían retirado desde hace dos días y se lo encontraron en la sarda de Granen, solo los moros se comían las caballerías (Notas de Ramón Hernando).

Así, un día antes del bombardeo, el día 24 ya había tropas del 5º cuerpo del ejército de Cabanellas y fuerzas de marroquíes. Al parecer, el mismo día del bombardeo ya entraron en el pueblo.

 “En el Sur de Huesca el ejército de Aragón, en cuatro días de operaciones, ha rescatado mil kilómetros cuadrados, liberando más de 20 pueblos de una comarca rica, avanzando 10 kilómetros más en un extenso frente. Al caer de la tarde, Robres y Sangarren eran nuestros y seguía el avance” Nueva España, 26 de marzo de 1938. El imparable avance del bando sublevado acabó ocupando Robres, continuando su avance hacia el este. Aquellas fechas, según la prensa de la época, ocuparon Piracés, Tramaced, Fraella, Poleñino, la paridera del Argelino, Mascarada y Robres “En esta parte del frente se han hecho 453 prisioneros, se han cogido 10 ametralladoras y gran número de fusiles, municiones y vestuario” Nueva España, 26 de marzo de 1938. Aunque Ramón Hernando matiza que las tropas de Cabanellas pasaron sin parar en Fraella, Piraces y Tramaced, “Iban hacia Balaguer para coger Cataluña por la Litera, así que esos pueblos se quedaron casi un mes republicanos”.

Diario de campaña de un requeté pamplonés (1936-1939)Manuel Sánchez Forcada. Manuel perteneció al Tercio del Rey, encuadrado en el batallón América, junto con falangistas navarros y soldados regulares:

24 de marzo de 1938. Continua el avance, no pudiendo en todo el día tomar las posiciones rojas; a pesar de las preparaciones artilleras los rojos no ceden, en los varios intentos que hemos hecho ha habido varios heridos, Martín, etc.; llega el anochecido y dan la orden de asalto, no sabemos dónde vamos y por toda contestación nos dicen que hay que ir a donde salen los fogonazos, allá vamos, nos mezclamos con ellos y en un gran revuelo sin saber dónde estamos, hemos tomado el pueblo de Torralba; en la confusión lo mismo se oyen gritos de Viva la República como Viva el Rey y España, se han hecho muchos prisioneros.

25 de marzo de 1938. Después de una noche muy intranquila pasada debajo de un puente, continuamos el avance y, sin enemigo delante, se toman los pueblos de Senés y Robres pasando la noche en éste.

El 27 de marzo, el jefe de policía del 5º cuerpo del ejército de Cabanellas nombró al presidente del consejo local, vicepresidente, concejales y secretario. Presidente del consejo local Vicente Alcubierre Alaman, vicepresidente Alfonso Barrio Novales, concejales Pascual Abardia  Alamán, Joaquín  Sieso Barrio y Victorian Cambra Luna. Como secretario Florencio Domec  Serrano. En el acta del 2 de mayo en la junta aparece el juez municipal Román Luna y jefe de la falange Francisco Luna. (Notas de Ramón Hernando).

A los pocos días, la Nueva España del 1 de abril de 1938 se hacía eco de unos hermanos robresinos que pasaron y sobrevivieron la guerra escondidos, Julio y Alfonso Barrio Novales: “Será la tragedia. Y es. Su padre fue fusilado y ellos.., estos hombres, pasaron la campaña en el interior de una cuba. Así fue. En Robres. Ellos van diciendo toda la historia trágica de su situación, pero allí están sin haber levantado el puño y conservando esta vida que puede resultar preciosa para la España que nace. Estos casos son una fuerte nota de entereza que muestran las mejores virtudes de una raza. El aspecto del pueblo es desolador. La gente que se encuentra en él, que es la inmensa mayoría, levanta el brazo. Y yo he sentido una reacción especial contemplando el gesto de promesa en aquel escenario doloroso de un pueblo en ruina. Surgirá. Lo esperamos de estas gentes que tienen ya impaciencia por comenzar a construir el pueblo y rehacer sus economías absolutamente rota. Estos pueblos de Aragón necesitan miliares de brazos tensos que nunca se doblen; siempre rígidos en la tarea diaria.”

Muchos robresinos acabaron en las cárceles y exiliados, los recoge Jesús Inglada en El Pimendón, periódico de Robres “Dorotea Lóriz Otin, natural de lanaja y domiciliada en Robres, condenada a 30 años de cárcel y que falleció en la Prisión Central de Mujeres de Saturrarán, en el municipio guipuzcoano de Moho, el 1 de mayo de 1942. Algunos de los encarcelados fueron explotados en los trabajos lazados. Y al menos cinco, fueron fusilados: Andrés Brosed Sanz 56 años, fusilado en Zaragoza el 29 de octubre de 1938-, Nicolás Berdún Becana -51 anos, fusilado en Huesca el 11 de marzo de 1939-. Esteban Rivas Pisa -28 años, fusilado en Huesca el 14 de agosto de 1940-, Jesús Serreta Miró -30 años, fusilado en Huesca el 17 de enero de 1942- y Manuel Brosed Brosed -45 años, fusilado en Huesca el 6 de julio de 1943”.

El 2 de mayo de 1939, la comisión provincial de incautación de bienes de Huesca nombra a dos legados en Robres que “Administraran  hasta que se resuelva el expediente de los bienes de aquellos individuos que fueron por hostilidad al glorioso movimiento nacional” (Notas de Ramón Hernando). Jesús Inglada, en El Pimendón, cita a los 42 vecinos de Robres a quienes les fueron incoados expedientes Responsabilidades Políticas “En muchos casos, se tradujeron en multas, destierros, requisas e incautaciones (de casas, tierras, herramientas del campo, ropas, enseres domésticos…).” Incluso a algunos fusilados se les incoaron expedientes después de ser fusilados, señala Inglada, fueron los casos de Andrés Brosed Sanz y Manuel Brosed Brosed “Para esquilmar la poca o mucha herencia que dejaran”.

Acta del 2 de mayo en la junta aparece el juez municipal Román Luna y el jefe de la falange Francisco Luna. La comisión provincial de incautación de bienes de Huesca a nombrado dos delegados que serán como presidente Ramón Maza González y Vicente Rivas Monaj, nombrados el primero por el presidente (Vicente Alcubierre) y el segundo por el jefe de la falange (Francisco Luna).  Administrarán hasta que se resuelva el expediente de los bienes de aquellos individuos que fueron por hostilidad al glorioso movimiento nacional.

Ramón Hernando cuenta como los tasadores o testigos o acusadores, en muchos casos el mismo, ponían las multas a los presos o ex republicanos de Robres sobre el valor de los bienes personales (casa, campos, etc.…) pagar primero y después eran condenados por el Tribunal. El pago de la multa lo recogía el jefe falangista de Robres que lo mandaba a Sariñena para acabar en Falange Huesca. Pero había partes que se perdían, “Un caso muy extraño es el de Francisco Arazo Cuello (BONE) fue condenado por el tribunal de Responsabilidades Políticas a varios años de cárcel, uno de los motivos, a más de ser rojo, es que había robado el dinero del ayuntamiento. Francisco Arazo dijo que no, que nunca había cogido ese dinero. En el archivo de Robres están consignados los primeros plenos del consejo falangista que dirigió el pueblo: en el mes de abril se reúnen y escriben que han recuperado 6600 pesetas del ayuntamiento. De los rojos, ese dinero lo confían a uno de entre ellos. Firman y ya no se sabe nada más.., ¿Qué pasó con ese dinero? ¿Para qué sirvió?”.

Estos archivos están en el Ayuntamiento de Robres, acta del 14 de abril 1938: Bajo la presidencia del Sr alcalde Vicente Alcubierre con la presencia de los concejales Alfonso Barrio y Don Antonio Pano, nombra a este último depositario de esta junta y le entrega 6610 pesetas en billetes de los rojos y levanta la sesión. Firman Vicente Alcubierre, Antonio Pano, Alfonso Barrio y el secretario Florencio Domec”. ¿Dónde están los otros concejales? El consejo falangista se reúne cada quince días, en las actas siguientes ya no se habla más de ese dinero ¿para qué fue empleado?.

Nota particular escrita y firmada por el Juez Torres de Sariñena de atención a su amigo Bierge de Robres: «Con arreglo a la Ley, se tiene que embargar – cuando se trate de bienes inmuebles – por doble de lo que se señala y en el caso presente son treinta mil pesetas. Así es que le ruego haga otra diligencia y valorar por treinta mil pesetas.  Le saluda suyo…«.

Al terminar la Guerra el “ Gobierno de Franco” se enfrentó a un problema económico gravísimo, no había dinero en el Banco de España, sobre todo no disponía de dinero en papel. Las zonas Republicanas habían creado dinero local, cada pueblo o ciudad editaba su propia moneda en billetes y en metálico.

Los franquistas permitieron que se utilizara los billetes editados por la Republica, hasta los años 1940/1941, después fueron retirados y sellados por la censura franquista y falangista.

En el Archivo de Huesca aparecen solo 45 expedientes de Responsabilidades Políticas de las condenas hechas contra los “Rojos” en Robres. Faltan otros documentos de la cárcel de Zuera o Barbastro. En Salamanca más de 100 documentos igual en la comisaria de Huesca. Los jueces franquistas tenían prisa para condenar, no querían mucho averiguar. Los testimonios del cura, guardia civil o familiares no aparecen.

Testimonios del Cura Margimino Abad cura ecónomo de Robres, documento 0255 del 12 de marzo 1942 para el fiscal de Sariñena:

1º La actuación de las hordas rojas en Robres fueron desastrosas, quemando todo de la Iglesia arrastradas y quemadas en la plaza del pueblo.

2º Las víctimas fueron el cura y doce personas más que fueron llevadas a Tardienta y fusiladas entre los días 12 y 14 de agosto 1936 (Nota: se equivoca con las fechas, fue en septiembre).

3º Margimino Abad establece un escrito particular para cada acusado en los expedientes de los tribunales falangistas (Causa General de Huesca).

Del guardia civil Juan Merino Sánchez, comandante del puesto de Alcubierre, Causa General autos n.º 35 a 60: Confirma las detenciones del 7 y 8 de septiembre 1936 de Mariano Barrio Otal, Domingo Berdún Pallas, Ángel Oto Portolés, Timoteo Fajo Casaus, Bautista Fajo Casaus, Francisco Sieso Barrio, Ángel Mateo L., Joaquín Oto Serreta, Martin Olivan Lacruz y Joaquín Barrio Lacambra. Señala los sospechosos de las detenciones en esos autos.

En el Auto n.º 47 y 48 Juan Merino escribe por el caso de Simeón Villacampa Pisa: El día 8 de septiembre 1936 Simeón fue llamado al local que servía de oficina al comité por el presidente Antonio Laporta, sobre las 22 horas, haciéndole saber que para él no había carne, que se podía marchar cuando quisiera. Al salir a la calle, empezaron a tiros con él hasta que cayó muerto. Un tal Rodríguez, natural de Villanueva i Geltru, fue el que le dio el tiro de gracia.

Este documento no aparece en las condenas de David Abardía y de Manuel Brosed Brosed.

Auto n.º 348 Alcaldía Nacional de Robres carta del 10 de noviembre 1941 dirigida al Sr Fiscal Instructor de la Causa General en Zaragoza:

1º Las victimas antes de ser asesinadas por los rojos los encerraban en la cárcel y en un granero de Robres, permitieron en ellos de uno a dos días.

2º Les hacían muchos insultos y amenazas de muerte, dándoles algunos palos sobre todo el que recibió Valentín Gavin de manos de Joaquín Oto Guiseris.

3º Los miembros del comité les acusaban y exigían de los jefes rojos que les asesinaran.

4º Los nombres de los dirigentes son: Antonio Laporta, Alejandro Becana, Francisco Brosed, Joaquín Brosed, Miguel Granged, Fidel Bole y Manuel Ballarin; todos estos se encuentran en el extranjero. Jesús Serreta Miro pendiente de muerte, Manuel Brosed en cárcel de Barbastro, que mató a un teniente Falangista, Vicente Maza en la cárcel de Huesca con David Abardía, Francisco Villacampa y Ramon Brosed que se hallan en esta localidad, Don Juan Valdivia Pardo, Enrique Brosed en cárcel y Antonio Brosed que se encuentra en Zaragoza. Firma el Alcalde J. Barrio.

Muchos sufrieron el exilio, los campos de refugiados en Francia, las Compañías de Trabajadores Extranjeros y se enfrentaron de nuevo contra el fascismo, contra el nazismo en la segunda guerra mundial. Acabaron apátridas y muchos murieron en los campos de exterminio nazi. Los hermanos Antonio y Fortunato Hernando Villacampa y su tío Domingo Becana Lacasa acabaron exiliados a Francia. José Lasheras Nasarre murió el  14 de enero de 1942 en Gusen (Campo anexo de Mauthausen) a los 23 años. Blas Buisán Sampériz también perdió la vida en Gusen, el 12 de agosto de 1944, a los 50 años de edad tras haber sufrido tres años y medio en el campo nazi. Mariano Conte López sobrevivió al campo de Mauthausen, al igual que José Purroy Noguero, natural de Albelda, y Ángel Colomina Edo, natural de Fañanás, ambos casados en Robres. (Jesús Inglada. El Pimendón).

En julio de 1938 se constituyó la primera alcaldía franquista en Robres, con Antonio Paño como alcalde y jefe de la falange Luis Berdun.

Monumento en memoria de todos. Robres.

Se dejó atrás una guerra para adentrarse en una dictadura que duró 37 años. Luego llegó la transición y la democracia, ya más de 80 años desde que se sucedió la guerra. Tiempo más que suficiente como para poder hablar de lo sucedido, tratando de ser rigurosos con la historia, respetuosos con las víctimas y justos con la memoria.

Alcubierre, última parada camino primera línea de fuego


Alcubierre, a los pies de la sierra de Alcubierre, fue un lugar estratégico en la contienda de la Guerra Española de 1936 a 1939. La sierra de Alcubierre formó parte del frente de Aragón, respondiendo al sector de la sierra de Alcubierre, una extensa línea defensiva a lo largo de las crestas del relieve monegrino. El puerto de la sierra de Alcubierre, como importante vía de comunicación, fue crucial para hacer frente y frenar el avance nacional apostado en la parte zaragozana. Gracias a la colaboración de Antonio Escartín Barrios y Alberto Lasheras Taira y de la distinta documentación y bibliografía consultada reconstruimos parte de lo que significó la contienda en el pueblo y sierra de Alcubierre encuadrado en el frente de Los Monegros.

La guerra civil en Alcubierre

 

Introducción

El presente trabajo nació con la pretensión de recoger retazos de la historia reciente de la localidad de Alcubierre relacionados con la guerra civil. Pero su estrecha vinculación con el frente, del sector que llevaba su nombre, hace su historia indisociable. Así, se ha ido desarrollando un relato de lo acontecido durante aquellos años convulsos y de guerra con diferentes episodios sucedidos tanto en el pueblo como en su entorno.

Además de testimonios transmitidos en la localidad, se ha consultado diferente bibliografía, hemerotecas de diarios, páginas web y documentos de los archivos provinciales de Huesca y Zaragoza. Gracias a Antonio Escartín Barrios y Alberto Lasheras Taira se ha contado con el valor humano de la memoria colectiva de Alcubierre, asimismo de sus diversos conocimientos e investigaciones.

Os Monegros, Febrero del 2019.

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Alcubierre. Fotografía Alberto Lasheras.

 

Alcubierre

Celebre por la famosa batalla ganada al general Paris el año 1813, Alcubierre es un lindo pueblecito al pie de la Sierra de su nombre de 1.600 habitantes que pertenece al partido Judicial de Sariñena, produciendo muy buenos cereales y buenos vinos.

El Ayuntamiento actual está compuesto todo de hombres conscientes de su deber y verdaderos repúblicos que todas sus obras solo las inspiran en el deseo de dotar a este bello pueblo de cuanto la higienización moderna exige, sin olvidar todo aquello que tenga relación la cultura, por estar convencidos que así únicamente es como se hacen grandes y respetables los pueblos.

En la dura labor de administrar y administrar bien merece que hagamos constar los nombres de Don Antonio Bendún  y Don Remigio Orduna dos verdaderos enamorados del terruño, que sólo por la tranquilidad y por el engrandecimiento de Alcubierre trabajan.

Ediciones regionales, 1932.

Alcubierre responde a un pequeño pueblo del medio rural aragonés, en la árida comarca de Los Monegros. Situado al suroeste de la provincia de Huesca hace muga con la provincia de Zaragoza, donde la predominante sierra de Alcubierre constituye una barrera natural entre las dos provincias. Acubierre se sitúa a los pies de la sierra, ante planicies cerealistas de secano, donde la agricultura de secano y ganadería lanar constituían las principales formas de vida. Igualmente, la sierra siempre formó parte de aquella vida del pueblo, proporcionando múltiples recursos y aprovechamientos.

En los años treinta del siglo pasado, Alcubierre contaba con cerca de los 1.250 habitantes, un pueblo subdesarrollado sin agua corriente, electricidad y calles de tierra. El escritor británico George Orwell, en su archiconocida novela Homenaje a Cataluña, queda “Impresionado por la miseria peculiar de las aldeas aragonesas”. Orwell define los pueblos aragoneses como “Una masa de casuchas de barro y piedra apiñadas alrededor de la iglesia. Ni siquiera en primavera se ven flores. Las casas no tienen jardines, sólo cuentan con patios donde flacas aves de corral resbalan sobre lechos de estiércol y barro”.  Como en la mayoría de los pueblos monegrinos, en Alcubierre tenían que coger el agua de balsas y pozos, una tierra árida, seca, de escasas lluvias y a la vez de duros inviernos. El Aragón rural de pobreza, subdesarrollado, con terratenientes y de pasado de bandolerismo, como el célebre bandido Cucaracha.

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Cuando en julio de 1936 se produjo el alzamiento militar, el pueblo de Alcubierre estaba ya inmerso en época de siega del cereal, con numerosos jornaleros venidos de fuera para realizar duras jornadas de siega. Además, en la comarca se estaba construyendo el canal de Monegros, un canal para regar las tierras de Los Monegros iniciado en 1915, encontrándose numerosos obreros trabajando en su construcción.

Con la sublevación militar, la localidad monegrina de Alcubierre quedó en zona leal a la república, como la mayor parte de Los Monegros, y la tensa calma, hasta la configuración del frente, no estuvo exenta de pequeños enfrentamientos.

Al comienzo del conflicto bélico, las incursiones de distintas fuerzas sublevadas se sucedieron por la zona hasta que comenzaron a llegar las milicias catalanas y definir la línea del frente de la sierra de Alcubierre. Muchos obreros se acopiaron de armas y así lo ratifica Alberto Lasheras a través de una nota obtenida en un texto dirigido al Ilmo. Sr. Fiscal de la Causa General de Huesca, marcado como folio 18: Ramón Barrague Carrasque, vigilante del canal de Monegros, vecino de Alcubierre, afiliado a la U.G.T., pasando más tarde a la C.N.T. Al estallar el Movimiento Nacional, la noche del 18 de Julio de 1936 repartió armas a los obreros para hacer frente a las Fuerzas Nacionales. Estuvo encargado de la Junta de Abastos y ordenaba a los obreros recoger el trigo de las casas particulares. Considerado elemento peligroso”.

«El que quiera comer bien/ barato y de buena forma/  vayan a la sierra de Alcubierre/ que los rojos tienen fonda/ El primer plato que dan/ son granadas rompedoras/el segundo la metralla/ para postre tiran bombas». 

Archivo de la tradición oral: música tradicional. Provincia de Zaragoza: Músicos populares. Inventario inédito, Diputación de Zaragoza, 2002-2012. Intérpretes: Balbina Jauregui Vaquero, localidad de grabación: Navardun. Observaciones: Con la música de «El frente de Gandesa». Sipca.

Primeros enfrentamientos

Se conocen informes de cómo actúan las fuerzas fascistas, más bien partidas, en el frente aragonés. Cerca de Alcubierre es donde con más refinada crueldad han procedido los rebeldes, y en las proximidades del poblado observase la desolación que dejan tras de sí los facciosos. Refieren los vecinos de Alcubierre que, al apoderarse del pueblo los fascistas, amarraron por los codos a trece jóvenes, los rociaron con bencina y después les prendieron fuego. La causa del monstruoso tormento fue la sospecha que dichos jóvenes pudieran estar en relación con la columna Medrano. Estos actos de crueldad los llevan a efecto individuos titulados “Legionarios de la muerte”, uniformados con camisa negra, en la que se ve como distintivo del grupo una calavera entre huesos.

ABC 11 de agosto de 1936.

Significantes fueron los sucesos narrados en “Las batallas de Lanaja”, de Roberto Mateo Caballero (Edición a cargo del proyecto “Amarga memoria” del Gobierno de Aragón y del Consejo Comarcal de Los Monegros. Zaragoza, 2008). Incursiones de grupos rebeldes a la república y falangistas que comenzaron a llegar a Lanaja pasando por Alcubierre. Así, el 20 de julio fueron rechazados de Lanaja unos 30 a 40 falangistas y el día 24 un nuevo ataque, de la 12ª Bandera de Falange, también fue rechazado. Fallecieron dos milicianos y tres falangistas “Cuyos cuerpos fueron incinerados en el pajar del Carlista, situado en el Saso, muy cerca del pueblo”, también fueron fusilados dos falangistas en la plaza (SIPCA).

Aquel 20 de julio, Roberto Mateo narra como un grupo de Lanaja salió para Alcubierre con armamento, incautado a la Guardia Civil, para desarmar y someter al cuerpo de la Guardia Civil de Alcubierre «Que se hallaba acuartelada y sin ánimo de rendirse». Al parecer, el grupo se enteró que por la carretera de Leciñena se aproximaba un camión con «Entre 30 Y 40 falangistas o quizás miembros de otras organizaciones derechistas como las JAP o Acción Ciudadana procedentes de Zaragoza». Roberto cuenta como en la última curva antes de llegar a Alcubierre se apostaron para sorprender a los falangistas: «Nada  más llegar al punto donde estaban apostados los cenetistas fueron recibidos con una cerrada descarga de disparos que los cogió totalmente desprevenidos y sin posibilidad efectiva de poder repeler la agresión. La derrota aún pudo haber resultado más trágica para estos de no ser por el conductor del vehículo quien, en un alarde de pericia echó marcha atrás de forma apresurada hasta que quedó algo alejado de los disparos y pudo volverse finalmente  hacia la capital llevando 3  heridos y un muerto llamado Julio Sánchez Blázquez de 22 años de edad».

El 21 de julio volvieron a Alcubierre «Varios miembros del sindicato najino, acompañados por sindicalistas de otros municipios de la comarca monegrina, en especial de Sariñena, además de algunos forasteros de los muchos que se había, quedado en la zona y que estaban trabajando  en la construcción del canal, no serían más  de 20 o 30″. Roberto Mateo relata como se adelantaron algunos najinos y se vieron sorprendidos por nuevas tropas falangistas que se habían parapetado en la localidad, algunos quedaron atrapados y combatiendo en un pajar falleció José Pontaque Lorda, de casa Peralta; «Puede ser, no obstante, que hubiera al menos otro muerto y varios detenidos». Uno de los detenidos  «Lo ataron en la parte delantera de un vehículo y lo llevaron por la carretera hasta el alto del saso, en donde fue soltado para que bajara andando hasta Lanaja para comunicar al comité la demanda de que liberasen a los Marcellan». (Roberto Mateo. Las Batallas de Lanaja).

El 25 de julio Lanaja sufrió un ataque muy notable, a pesar de ser defendida por cerca de 400 hombres. La falta de armamento de los defensores de Lanaja les obligó a retroceder hacía Sariñena o la sierra, hasta que la proximidad de la llegada de las milicias catalanas hizo huir a las tropas falangistas. Al parecer murieron dos falangistas y un soldado por la parte rebelde y un vecino de Lanaja, dos milicianos desconocidos y una decena de milicianos republicanos que tuvieron la desgracia de caer prisioneros de los rebeldes que serían ejecutados más tarde en la plaza del vecino pueblo de Alcubierre (SIPCA).

En el cementerio de Alcubierre se encuentra la fosa común de aquellos once milicianos fusilados, aunque el lugar no aparece identificado. De acuerdo al Sistema de Información del Patrimonio Cultural Aragonés (SIPCA), los milicianos fueron “masacrados desde un camión enfrente mismo de la fachada del ayuntamiento”. Entre los milicianos aparecen Félix Ferrer Ferrer de Almudevar, Ismael Alastruey Penella de Lanaja o Juan José Aniés Naya de Zuera, “Mientras que otros, en opinión de un vecino de Alcubierre, podrían ser segadores valencianos que se habían trasladado hasta Alcubierre para alquilar sus servicios en la recogida de la cosecha de trigo, como solía ser habitual en la época”.

Una visita al frente aragonés

Al siguiente día continuamos avanzando y nos internamos en la parte de Alcubierre, donde pudimos observar los estragos del paso de los fascistas, refiriéndosenos el caso de trece jóvenes de la población que fueron amarrados por los codos, se les roció con bencina y se les quemó vivos, poniéndose junto a sus restos carbonizados unos carteles en los que se leía «Viva España», «Viva el fascio».

En La Naja tuvimos que enterarnos de otros casos verdaderamente espeluznantes, violaciones, asesinatos; dos jóvenes que a presencia de su madre se les saltaron los ojos con agujas de hacer calceta tan sólo por la sospecha de que estuvieran en relación con la columna de Medrano.

La Vanguardia. 9 de agosto de 1936.

El sariñenense Luis Buil fue uno de los voluntarios que, en autobuses, partieron hacía Alcubierre para frenar al enemigo: A la altura de Lanaja nos escoltó un tal Breguer de guerra francés que venía de Barcelona y que pertenecía a la aviación que estaba con nosotros. Solamente podía tirar bombas con la mano pero daba moral. Ocupamos Alcubierre donde los falangistas habían fusilado a unos once obreros del canal en construcción. Lo hicieron en la fachada del ayuntamiento. De los fusilados encontramos en la carretera  a uno herido pero vivo. Ese se salvó.  (Toda la vida en guerra de un pacifista. Luis Buil Espada, Solsona, 1991).

El vacío que reinó en los primeros días, tras el estallido de la guerra, dio píe a múltiples fechorías, desmanes y asesinatos por toda España. Algunas de esas incursiones buscaron evacuar a personas de derechas o relacionadas con la iglesia para llevarlas a zonas nacionales, aunque en Lanaja y Alcubierre solamente dejaron muerte.

Desde Monzón la Columna de Rovira, tras asesinar a varios supuestos derechistas, partió a Sariñena donde tuvieron la primera baja, de allí salieron hacia Zaragoza pero se enteraron de que la “Carlos Marx” del PSUC estaba copada por Tardienta y marcharon a ayudarles. En Lanaja y Alcubierre encontraron obreros fusilados aún calientes.

 

Manuel Benito Moliner “Orwell en el Alto Aragón”.

Se aproximan las milicias

En la causa general de Alcubierres se ve como muchas personas huyeron de la localidad dirección Zaragoza, incluso familias enteras, abandonando prácticamente todo, ante el avance de las milicias. Luego las milicias se apropiaron de todo, de bienes y pertenencias. Alguno huyó al monte y cuando volvió se encontró la puerta tirada y la casa saqueada.

26 de julio de 1936. El interesado al aproximarse las hordas rojas marchó a Zaragoza quedando sus padres en casa; el mismo día 26 de julio entraron los rojos en el pueblo y sobre las diez de la mañana se presentaron en su casa los vecinos Daniel Ardid Pau y Benito Berreguer Sauras con un grupo de milicianos preguntando que donde estaba Tomás y al contestar que estaba en Zaragoza empezaron a saquear la tienda del declarante llevándose genero por un valor de cinco a seis mil pesetas. Tomás ramón Mené, calle General Franco nº 26 Alcubierre.

Causa general Alcubierre.

Es el caso del párroco Andrés Monzón Lalueza.

«El 26 de julio de 1936 el declarante huyó a Zaragoza al aproximarse las hordas rojas en donde permaneció durante el dominio rojo del pueblo, el día 26 fue saqueada e incendiada su casa adosada a la iglesia parroquial ascendiendo los perjuicios de todo su mobiliario, enseres, ropas y biblioteca a veintitrés mil ochenta y siete pesetas.» (Causa General de Alcubierre).  ´

Llegada de las milicias

El pueblo de Alcubierre sirvió de retaguardia donde llegaron las milicias como última parada camino a primera línea de fuego. La madrugada del 26 de julio llegó a Lanaja una avanzadilla de las milicias catalanas, pero su llegada a Alcubierre tardó unos días. A finales de julio de 1936 las milicias del POUM, Columna Lenin, comenzaron a ocupar posiciones en la sierra de Alcubierre, el 29 de julio de 1936 la aviación republicana bombardeó posiciones nacionales en la sierra y ante la huida de los nacionales, dirección Zaragoza, las milicias catalanas ocuparon Lanaja (ABC 30 julio 1936).

De acuerdo a una carta de un miliciano de iniciales J. G. del POUM, redactada en Sariñena el 30 de julio de 1936 y publicada en La Batalla: Número 3, del 5 de agosto de 1936, la columna del POUM partió de la estación del Norte de Barcelona el sábado 25 de julio. Llegaron a Lérida donde se les dio comida y unas horas de descanso. A las siete de la tarde se les unió artillería y en camiones marcharon dirección Zaragoza “La columna continuó adelante hasta Monzón, donde tuvimos que volver a hacer alto, pues estaban juzgando a 18 fascistas”. Al cabo de dos horas llegaron a Barbastro “donde hicimos gasolina y partimos inmediatamente hacía el frente, llegando a las doce a Sariñena donde cenamos y dormimos. Aquí se nos dio un día de descanso y el lunes por la tarde, a los milicianos de la cuarta bandera se nos confió la misión de ir a Alcubierre”.

«Llegamos allí sin novedad, donde nos enteramos que los fascistas habían fusilado a once paisanos del pueblo antes de marchar. Vimos sus cuerpos en el suelo de la fachada del Ayuntamiento con las paredes del mismo llenas de sangre de aquellos valientes que no quisieron someterse a los reaccionarios. Mientras estábamos instalando ametralladoras (pues debéis saber que he aprendido el manejo de la ametralladora y se nos ha confiado una a nuestro grupo del manejo de la cual me encargo yo) y apenas teníamos hecho el parapeto, se nos presentaron dos coches de turismo, saludándonos sus ocupantes al estilo fascista y nos preguntaron por qué llevábamos el brazal rojo; inmediatamente pusimos la ametralladora al descubierto y los desarmamos, mirándoles los documentos encontrándoles cartas del general Cabanellas y de la Patronal de Zaragoza. Por lo visto creían que el pueblo se hallaba en poder de los fascistas. Los pusimos en la misma pared donde todavía se veía la sangre de nuestros camaradas y los fusilamos. Quedaba cumplida la justicia del pueblo.

Después de hacer parapetos y de instalar las ametralladoras se nos dio la cena en el mismo parapeto.

Nadie durmió; todos estábamos deseando entrar en combate, pero no se presentaron los enemigos por tierra como esperábamos, sino que un aeroplano que enarbolando nuestras insignias rojas, nos bombardeó.

Nosotros hicimos fuego de ametralladora y fusil y entonces huyó como pájaro negro que después de sembrar la muerte, no quiso presentar combate a otro avión de los nuestros.»

La Batalla: Número 3 _ 05/08/1936.

30 de julio

Nuestras fuerzas avanzan en estas regiones de Zaragoza, en un frente amplio de combate. Desde Bujaraloz, en el sur, donde se encuentra la columna de Pérez Farrás-Durruti, hasta Labarta y Aguas, al NO de Barbastro, en la provincia de Huesca.

La columna die Arquer-Grossi, que hace unos días tiene el Cuartel general en Sariñena, avanza hacia Zaragoza.

Tiene avanzadas en Lanaja y Alcubierre, donde también hay milicianos de Barbastro. Allí se encuentra nuestro valiente compañero Sabadell con unos treinta valerosos compañeros del POUM.

La Batalla: Número 1 _ 02/08/1936.

POUM Alcubierre

Las milicias republicanas, del Partido Obrero de Unificación Marxista, llegaron a Alcubierre desde Robres, según el relato de Manuel Grossi (Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial). Grossi, al mando de la columna del POUM, junto a Jordi Arquer, llegó a Alcubierre desde Sariñena tras pasar por Grañen y Robres. En sus cartas cuenta que parte de la columna salió de Robres el 3 de agosto de 1936 hacía Alcubierre. El recorrido lo realizaron con cierta dificultad ante la posibilidad de toparse con falangistas: “Parapetados por los surcos de las eras”. “Según informes que habíamos recibido de los campesinos les habían hecho mucho mal, además de haber asesinado a un gran número de obreros, vecinos de aquellos pueblos entre los que se contaban algunas mujeres. Organizada una operación de limpieza, y no sin dificultad, se ha podido poner  fin a las impertinencias de una quincena de elementos falangistas, que han sido juzgados por el mismo tribunal del pueblo. A dos se les condenó a muerte y al resto se les ha llevado prisioneros a Lérida” (Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial).

La columna llegó a Alcubierre entrando sin encontrar “Una visible resistencia”, pues los elementos sublevados se habían retirado hacía Leciñena. “Antes de haber abandonado el pueblo fusilaron a los campesinos y esposas de éstos que habían votado por el Frente Popular”. La columna en la calle principal colocó una pancarta de lado a lado con sus siglas “POUM”.

El mismo 26 entraron las hordas rojas y se entregaron al saqueo, saqueando y robando cereales, vinos, autos, ganado, aves, mobiliario y enseres. Saquearon casa Calvo, el Centro Primario de Higiene Rural, incautaron ganados, máquinas de escribir, una trilladora Ballesteros, un tractor Fordson y un coche Ford.

Cabo de las milicias del POUM Gregorio Utrillas.  A José Fernando Guerrero le simularon un fusilamiento, disparando finalmente un disparo al aire. Fue detenido y encarcelado en varias ocasiones.

Causa General de Alcubierre.

Parte de las fuerzas del POUM, que se habían quedado en Sariñena, fueron acoplándose a las de Alcubierre antes de continuar el 5 de agosto su avance hacía Leciñena. Otra parte marchó hacía el frente de Huesca. Además, el 25 de julio de 1936 partió de Barcelona una nueva columna de 1.500 hombres organizada por el PSUC, al mando del dirigente José del Barrio, que incluía la Centuria alemana Thälman, la primera unidad extranjera que intervino en España, “Se dirigió a Sariñena y a la sierra de Alubierre y quedó incorporada a la de Durruti” (Manuel Gutiérrez. Diario de un miliciano). La columna luego fue conocida como la columna Carlos Marx. Con ellos combatió Domingo Brosed, natural de Robres “En primera línea con el PSUC desde el comienzo de la insurrección” (Manuel Benito. Orwell en tierras de Aragón). “Cuando la columna iniciaba el despliegue por los alrededores se encontraron una camioneta con falangistas que venía desde Zaragoza, entre los que iba el jefe fascista de Robres, de casa Anzano, los desarmaron y los fusilaron a la salida del pueblo, en la carretera de Lanaja”, cuenta Manuel Benito en Orwell en las tierras de Aragón.

 “La columna del POUM llegó a finales de julio de 1936, los fascistas acababan de fusilar a 11 personas en las tapias del ayuntamiento, cuentan que otra consiguió escapar herida. Cuando la Columna iniciaba el despliegue por los alrededores se encontraron que venía desde Zaragoza una camioneta con falangistas, entre los que iba el jefe de Robres, de casa Anzano, los desarmaron y los fusilaron a la salida del pueblo, en la carretera de Lanaja”.

  Manuel Benito Moliner, Orwell en el Alto Aragón.

En Alcubierre se comenzaron a alojar los milicianos que iban llegando, muchos se distribuían por las diferentes casas de la localidad y trabajaban en diferentes tareas y trabajos colectivos. “El pueblo se había preparado para ser un cuartel de aprovisionamiento de las fuerzas que luchaban en los altos que rodeaban el pueblo» señala Manuel Benito Moliner en Orwell en el Alto Aragón. “El constante ir y venir de las tropas había reducido la aldea a un estado de mugre indescriptible”, Orwell dibuja un ambiente sucio e insalubre debido a la cantidad de excrementos: “No había ni un solo centímetro cuadrado donde se pudiera pisar sin fijarse dónde se ponía le pie. Hacía ya mucho que la iglesia se utilizaba como letrina, y lo mismo ocurría con los campos en medio kilómetro a la redonda”.

ARAGÓN – Victoria de las fuerzas leales en Tardienta

Esta mañana a primera hora nos liemos trasladado de Caspe a Sariñena para recorrer las
lineas de fuego establecidas en Alcubierre y Tardienta. Operan en este írente Milicias del
partido socialista unificado del P. O. U. M. y del partido comunista. Al pasar por Alcubierre, camino de Tardienta, saludamos de nuevo al comandante Piquer.

En este último pueblo están Estivill, Trueba y Del Barrio, que llevan el mando de las fuerzas destacadas en esa posición. Los milicianos que luchan aquí, como los de Bujaraloz, Sástago y Siétamo, están poseídos de un entusiasmo extraordinario, que advierte en ellos la enorme impaciencia de avanzar hasta Zaragoza y el ferviente deseo de aniquilar a los fascistas que sojuzgan la capital aragonesa.

La vanguardia 6 de agosto de 1936.

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La organización debió de ser difícil y probablemente la pequeña localidad se vio superada ante la llegada de milicias. Desde Alcubierre se abastecía al frente y con mulas se subía agua, provisiones y víveres, incluso recuerdan que las mulas iban solas ya que se sabían el camino. Orwell lo recoge en Homenaje a Cataluña: “El agua que bebíamos, al igual que los alimentos, se traían en mulas desde Alcubierre, y la porción diaria para un hombre no llegaba a un litro. Era un líquido repugnante, apenas más trasparente que la leche”. Eric Arthur Blair (1903-1950), conocido como George Orwell llegó a Alcubierre un día de niebla, al anochecer y montado en un camión: «En los últimos días del frío mes de diciembre de 1936, encontrando un pueblo embarrado donde pasó la noche en una cuadra”. Orwell es alojado en una cuadra donde duerme sobre las granzas que quedaron de la trilla: “Por la mañana descubrí que el lugar estaba lleno de migas de pan, trozos de periódicos, huesos, ratas muertas y latas vacías” (Orwell, Homenaje a Cataluña).

“La vida fue apacible desde en un principio y la población mantuvo estrecha colaboración con las tropas locales al Gobierno. Los chavales de 16 a 18 años se encargaban de subir los víveres y el agua –de balsa- en carros y en cubas, hasta las posiciones del Puerto.”

Manuel Benito Moliner, Orwell en el Alto Aragón.

Aunque para Orwell no todo fue malo “La comida era bastante satisfactoria y abundaba el vino”. Además les distribuían cada día un paquete diario de tabaco, fósforos y “Tres pulgadas” de velas.

Cuando Orwell estuvo en la posición de Moneteoscuro, narra como por las noches podían ver las luces de los camiones de abastecimiento que subían desde Alcubierre. Allí coincidió con tres milicianas que fueron relegadas como cocineras. Se trataba de Dolores Estrada Torres (Albelda 1 de marzo de 1923), Pilar Estrada Torres (Albelda) y María Sales Teixido. Las hermanas Dolores y María, aunque nacieron en Albelda, procedían de Alfarras. Orwell las define “Como no precisamente hermosas”, pero que consideraron necesario “Aislarlas de los hombres  de otras compañías”. Aquellas tres milicianas pertenecían a las Juventudes Comunistas Ibéricas, las juventudes del POUM. Igual que Pedro Arnó, a quien vieron morir con tan sólo 19 años, fue herido por un cañonazo y bajado a curar a Alcubierre, le cortaron las dos piernas falleciendo al final por las graves heridas. Las milicianas acabaron exiliadas, dos a Francia y una a México. Las fotografías siguientes son facilitadas gracias a la cortesía de Antonio Escartín, en una de las imágenes, las milicianas aparecen  señalando la mancha de sangre de Arnó que quedó en las piedras.

Manuel Benito describe su paso de Orwell por tierras de Aragón, un excelente trabajo lleno de hechos, datos y anécdotas. Entre aquellas historias, resulta curiosa la de un camión blindado con colchones que subía el desayuno al frente y que fue abatido por tropas moras. El camión era conducido por uno de los muchos apodados como “Pancho Villa”, quien resultó muerto en el ataque. “Las tropas rebeldes se hicieron con dos ametralladoras y catorce cajas de cartuchos Máuser” (Manuel Benito Moliner, Orwell en tierras de Aragón).

“En Alcubierre fue fusilado el capitán Pancho Villa “He tenido un momento de cobardía pero la república triunfará”, lo fusilaron porque se había pegado un tiro en el pie para volver a casa, pero lo pillaron y lo fusilaron”.

Testimonio de Julián Royo Martínez.

En definitiva, Alcubierre, como otras localidades del frente, se vio sorprendida por una actividad frenética. Fue necesario organizar y abastecer el frente, además de acoger el ir y venir de milicianos, atender heridos y sufrir los duros golpes de la guerra. La estación de ferrocarril de Grañen posiblemente debió de ser la estación de referencia del sector de Alcubierre, tanto de llegada, marcha y evacuación de milicianos como el transporte de mercancías y armamento.

Asesinato de tres guardias civiles

El 9 de agosto de 1936 en las tapias del cementerio aparecieron los cadáveres de los guardias civiles Francisco Sarriá Sancho y José Gutiérrez Rivares y el brigada Francisco Borrega.  Los tres presentaban una bala en la cabeza.(Causa General de Alcubierre).

El avance hacía Zaragoza

Manuel Benito Moliner narra aquellas primeras maniobras militares en el frente de la sierra de Alcubierre en “La caída de Leciñena”, donde relata como el POUM rebasó la sierra de Alcubierre y descendió hasta Leciñena para ocupar la población. Tras no encontrar apenas resistencia, en pleno agosto se lanzaron hacía Perdiguera donde se vieron completamente superados: Los fascistas se reforzaron y a las ametralladoras que escupían balas sin cesar desde el campanario se les unieron algunos cañones”. La milicia del POUM se vio obligada a retroceder: “Auxiliados desde Zaragoza los rebeldes, la Columna se retiró hacia Leciñena. Sedientos, sin apenas munición, dejando los muertos en el campo y los heridos llevados por sus compañeros, ni una triste camilla tenían. Muchos milicianos que acababan de dejar Sitges, Igualada, Sabadell, Balaguer, Bellvís…, caen exhaustos en cuanto se sienten seguros”.

“El POUM quedó aislado, la línea natural de defensa es la Sierra de Alcubierre. Forman una bolsa con un punto vital en el Puerto, allí, en La Casilla de Camineros, dejan una sección, unos 12 hombres todos de Sitges que controlan el paso de vehículos”. Se formó lo que Manuel Benito denomina La bolsa de Leciñena: “No es posible avanzar ni retroceder, la bolsa de Leciñena, es dejada a su suerte. Arquer, Piquer, Grossi y Rovira se van a organizar el Cerco de Huesca. Quedan tres centurias con Josep Vallès, Ochoa de Barcelona y Narcís Fita, éste al mando de los inquietos muchachos de Bellvís”. En el puerto de Alcubierre “dos posiciones a cada lado de la carretera vigilaban cualquier ataque frontal”.

“El 10 de octubre a las ocho de una noche oscura y lluviosa, dos tabores de la mehala de Tetuán con una sección de zapadores y un guía nativo, parten de Perdiguera. Recorren Asteruelas, la Balsa Ontina, El Irazo, Monte Pucero y llegan a las siete de la mañana al Puerto de Alcubierre. Un miliciano que hace guardia a la puerta de La Casilla, es abatido de un tiro, los moros matan al resto bajo las mantas sin tiempo a coger los fusiles.

Un camión blindado defectuosamente por unos pasteleros catalanes, subía el desayuno al Puerto conducido por Pancho Villa -apodo muy común en esas fechas. Los moros lo matan y se hacen con las dos ametralladoras y las catorce cajas de cartuchos máuser que lleva el vehículo. Los zapadores construyen defensas y cortan la carretera por algunos puntos.

Mientras, al amanecer del 11, el batallón de infantería del Regimiento de Carros nº 2 que viene desde Zuera se lanza por el poniente, al sur una combinación de fuerzas militares y milicianas  -falangistas y requetés- al mando de Urrutia, comienzan a envolver Leciñena bajo la lluvia.

Unos 4.000 rebeldes participan en la operación frente a poco más de 300 milicianos que resistirán durante todo el día. Un tercio murió allí, el resto consiguió abrir una brecha y alcanzar con algunos civiles el pueblo de Robres, donde fueron abucheados.”

Manuel Benito Moliner “Orwell en el Alto Aragón”.

Las tropas sublevadas del teniente coronel Gustavo Urrutia salieron de Zaragoza el 4 de octubre de 1936 hacia la sierra de Alcubierre, atacando primero distintas posiciones en Osera y Villafranca de Ebro, siendo rechazados en Farlete y continuando su avance hasta la toma de Leciñena (1936 La Serena en Los Monegros) . El 12 de octubre, las tropas nacionales tomaron definitivamente Leciñena, estabilizando el frente y ocupando posiciones estratégicas en el puerto de Alcubierre, a la izquierda y derecha de la carretera.

“La columna al mando del teniente coronel de Estado Mayor Darío Gazapo ocupó Leciñena y tomaron posiciones estratégicas en la sierra de Alcubierre”.

Diario de Huesca, 17 de octubre de 1936.

Recomendable la lectura de las experiencias de Manuel Grossi recogidas en “Cartas de Grossi. Sariñena Editorial”, donde Grossi recoge, entre muchas otras vivencias, la toma de Leciñena, episodios del frente en Leciñena y el ataque a Perdiguera.

Comienzan los combates en la sierra de Alcubierre.

En octubre del 36, las fuerzas del POUM ocupaban una amplia zona de la sierra a las que se fueron uniendo unidades de Guardias de Asalto y miembros de la Columna Macià Companys. Estableciéndose milicias de la CNT al sur, en Farlete y Monegrillo (4 y 15 centurias) y la División Carlos Marx en el sector de Robres, con posiciones míticas como “La imposible” (Bautizada por la Columna Durruti), “La Pasionaria” y “El Negus” (Estas últimas, junto a Puig Mazorra, fueron las zonas donde se fortificó la Columna Carlos Marx). Las diferentes tropas se enmarcaban en el XI Cuerpo del Ejército Popular de la República. En algunas señas aparece como responsable el Comandante Villalba, quién al parecer tuvo discrepancias con Durruti por la forma de llevar la lucha en el Frente de Aragón, “En algunos documentos de este periodo aparece como jefe del Frente de Aragón, pero este cargo ni le fue otorgado oficialmente ni llegó a desempeñarlo, ya que toda su labor se centró en torno a Huesca”. (Wikipedia)

“No comparecieron en solitario las centurias anarquistas en el frente aragonés, también las milicias del POUM, la división Macià-Companys, unidades de Carabineros y Guardia Nacional Republicana o militantes socialistas y comunistas del PSUC englobados en la columna “Carlos Marx”, plantaron cara a los sublevados en todo el territorio.”

Territorio de las memorias, CazarabetVíctor Pardo Lancina.

Un conjunto de trincheras, parapetos, posiciones de tiro, casamatas, polvorines y abrigos para mandos y tropas se fueron abriendo en las diferentes posiciones. “Se pueden observar los diferentes tipos de trincheras en función de lo que buscaban”, señala Antonio Escartín, los republicanos eran más lineales y con muchas cuevas, mientras los nacionales, a partir de una loma circular, eran más sinuosos. En las trincheras nacionales cada loma tenía una cueva, un polvorín y una habitación con techo para el mando: “además contaban con puestos de tirador y puntos estratégicos”. Orwell describe un panorama desolador, de basuras, latas y desechos orgánicos. El relato de Orwell en las trincheras de Alcubierre es clarificador para comprender  como vivieron los milicianos en esta parte del frente aragonés.

En el frente nacional se encontraba la 5ª división del Ejercito del Norte, legionarios, falangistas de la Segunda bandera Móvil de Aragón, el Regimiento de Carros Ligeros de Combate nº2 y soldados regulares.

 Las principales actuaciones de los militares sublevados tuvieron lugar en el entorno de la Sierra de Alcubierre y fueron protagonizadas por el comandante Nicolás de Arce Alonso, jefe del Regimiento de Carros número 2; la Bandera Móvil de Falange, mandada por Manuel Lostaló Vidal; el teniente coronel Gustavo Urrutia; y el coronel Antonio Civera, al mando de una circunscripción que tenía su cabecera en Zaragoza y comprendía los sectores de la Sierra de Alcubierre, Leciñena, Perdiguera, Villamayor y Alfajarín hasta el Ebro.

La Guerra Civil en Los Monegros.

En el bando nacional luchó el escritor gallego y premio Nobel de literatura Camilo José Cela, que “Resultó herido de gravedad en la sierra de Alcubierre”. Sucedió sobre el mes de octubre de 1937, dejando constancia en su obra “Mazurca para dos muertos” (La guerra riojana del soldado Camilo José de Cela, Marcelino Izquierdo).

«Sentí un golpe seco en la nuca y me quedé sin conocimiento, la metralla de una granada de piña se me clavó en el pecho… después me fui despertando… me dio un vómito de sangre, eché sangre por la boca, no mucha…»

Mazurca para dos muertos’ Camilo José de Cela

 Una columna facciosa, compuesta de dos regimientos de infantería, dos baterías de artillería, una sección de morteros y 500 hombres de caballería han atacado nuestra línea de Alcubierre. La rápida y enérgica de las fuerzas leales hizo retroceder al enemigo, abandonando más de cien muertos y gran cantidad de armamento. En nuestro poder han quedado además 75 prisioneros.  

ABC 10 de octubre 1936, Edición Madrid.

 Una columna facciosa, compuesta de dos regimientos de infantería, dos baterías del 7`5, ametralladoras, morteros, 200 caballos y 200 falangistas atacaron nuestras líneas por la sierra de Alcubierre, entre Farlete y Perdiguera. Nuestras fuerzas, que conocían la envergadura de esta operación, se colocaron estratégicamente, dejando al descubierto las líneas avanzadas. Cuando el enemigo se acercó, se abrió nutrido fuego seguido de un avance que no pudieron resistir los facciosos, que emprendieron rápida huida, abandonando importante armamento, municiones y unos 100 muertos. Además les hicimos 120 prisioneros.

En el sector Sur, entre Alcubierre y Leciñena, se acusa una incursión del enemigo, que ha sido localizada y contenida. El enviado de Febus de Huesca se había preparado ayer domingo un plan de rectificación del frente para lograr la comunicación rápida entre diversas posiciones del Sur y del Este. Los objetivos fueron conseguidos totalmente después de breve lucha. Los facciosos, al darse cuenta de la importancia estratégica de la rectificación, trataron de neutralizarla, intentando de recuperar las posiciones perdidas.

Una incursión facciosa intentada entre Alcubierre y Leciñena ha sido rápidamente cortada, con las consiguientes pérdidas para el enemigo. 

ABC 13 de octubre 1936, Edición Madrid.

La toma de San Simón

La toma de la posición de San Simón fue condicional para el desarrollo de la guerra en el frente de Alcubierre, señala Antonio Escartín. Sobre los días 11-12 de octubre de 1936, las tropas nacionales tomaron la posición de San Simón, una cresta sobresaliente y estratégica que junto a otras posiciones, al otro lado de la carretera, frenaron cualquier posibilidad de avance de las tropas republicanas.

Mientras, las milicias republicanas se afianzaron en las posiciones de monte Irazo, la actualmente conocida como Loma Orwell y Pucero. La toma de San Simón siempre fue un objetivo para las milicias republicanas y así, a los pocos días, el 26 de octubre de 1936 “Salen de Alcubierre tropas para ocupar Puig Ladrón, junto a la columna del sector centro de Bujaraloz. En la sierra de Alcubierre solo quedan por ocupar dos cimas” ABC 27 octubre 1936.

Las columnas de Robres y Alcubierre han atacado en la sierra la posición de Puigladrón, que hemos cercado, haciendo abandonar posiciones estratégicas a los facciosos, que han sufrido numerosas bajas.

23 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid.

En la sierra de Alcubierre nuestras fuerzas, una vez cercado Puig Ladrón, han proseguido el avance hacia el otro lado de la sierra, dominando posiciones del valle que circunda la carretera que va a Leciñena.  

24 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid.

Frente de Aragón. Las milicias han rechazado un ataque al sur de Alcubierre, en el sector de Barbastro, ocupando en el contraataque, protegidas por la aviación y la artillería, seis lomas que constituyen magnificas posiciones ofensivas para acciones futuras y ocasionando al enemigo más de cien bajas.

 ABC 16 octubre 1936, Edición Madrid.

En Alcubierre, las fuerzas leales han consolidado las posiciones tomadas al enemigo, que, batido por el fuego de nuestra Artillería, huyó en desorden. En este sector ha sido tomada una posición en extremo estratégica, se trata de Punta de los Ladrones, que domina todos los lugares de concentración del enemigo, siendo acogida la ocupación con gran entusiasmo por las tropas. El ímpetu de las tropas fue magnifico, a pesar del ataque de cinco aviones facciosos, que huyeron hacía Perdiguera. La colaboración de los aviones leales contribuyó al éxito de la operación. Febus. 

ABC 17 de octubre 1936, Edición Madrid.

 El 9 de abril de 1937, milicianos de la columna Maciá-Companys atacaron la posición de las tres Huegas, San Simón, cogiendo de improviso y produciendo numerosas víctimas en las tropas nacionales, entre ellas el teniente de la posición Eugenio Hernández Santamaría. Pronto, las unidades de la Segunda Bandera Móvil de Falange y el Tercio de Sanjurgo recuperaron la posición. En conmemoración de estos hechos, el franquismo erigió un monolito en su memoria en la loma de San Simón.

Los combates se van sucediendo en el frente

A través de la prensa se extrae abundante información sobre el desarrollo del frente, entendiendo que los medios de comunicación, a la vez que actuaban como medios de información, también fueron instrumentos de propaganda. Así, se recogen noticias aparecidas en el diario ABC, tanto en la edición en el bando republicano (Edición Madrid) como en el nacional (Edición Sevilla). También del Diario de Huesca y Nueva España.

En la hemeroteca se van sucediendo diversas informaciones sobre los violentos ataques y los periodos de calma, ataques y tomas de posiciones, captura de prisioneros, victimas, incautaciones de armamiento y munición, patrullas de reconocimiento, personas que se pasan de bando, evadidos, nieve en el frente, paralización de las actividades, organización, fortificación, resistencia y rotura de frente. Abundante información sobre tiroteos, fusilería, ametralladoras, granadas, artillería, cañoneo, morteros, bombardeos, fuego antiaéreo, aviación…

“En cierto día memorable, quince desertores llegaron de una sola tanda. Un individuo, montado en un caballo blanco, los conducía triunfalmente a través de la aldea (Alcubierre). Me las ingenié para sacar una fotografía que resultó bastante borrosa y que más tarde me robaron”.

George Orwell. Homenaje a Cataluña.

Un relato interesante y revelador, que habría que destacar, es el papel jugado por la agencia de noticias Febus. La agencia Febus fue una agencia de noticias española fundada por Nicolás María de Urgoiti en 1924 para abastecer de noticias a sus periódicos El Sol y La Voz. Durante la guerra mantuvo corresponsables de guerra en la zona republicana siendo uno de sus corresponsales Fernández Aldana, presente en el sector de Alcubierre, informando muchas veces desde Sariñena.

Un avión derribado por ametralladora antiaérea. En un parapeto enemigo se encuentra un fusil alemán. El avión faccioso derribado el sábado en la sierra de Alcubierre, lo fue por disparo de ametralladora antiaérea, hecho por el miliciano de Villanueva y Geltrú Ramón Codina.

3 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid.

En el sector de Alcubierre, un grupo de facciosos descargaba cajas de municiones en una casita que intentaban convertir en polvorín; pero al advertirlo nuestras fuerzas, merced a una maniobra envolvente, fueron cogidos los facciosos entre dos fuegos, y tuvieron que huir, quedando la casita en poder de nuestras fuerzas, las que rápidamente han fortificado aquel lugar. Febus.

ABC 23 de octubre 1936, Edición Madrid.

Otro fusilado redivivo. En el hospital general ingresó Joaquín Casanovas, de veinte años, para ser sometido a una operación quirúrgica. El 25 de julio intervino en unos combates desarrollados en el sector de Alcubierre. Juntamente con otros once compañeros cayó en poder de los facciosos, los que resolvieron fusilarlos. Se llevó a cabo la ejecución; pero Joaquín sólo resultó herido. Aguantando el dolor que le producían las heridas, se hizo el muerto, y una vez que marcharon los facciosos huyó campo traviesa, logrando llegar a las filas republicanas, donde se le practicó una cura de urgencia. Desde aquella fecha ha permanecido en un hospital del frente y ahora será operado. Joaquín Casanovas está muy animado y dice que tan pronto como se restablezca volverá al frente. Febus.

ABC 25 de octubre 1936, Edición Madrid.

Al final del presente trabajo se adjunta la relación de noticias que, de forma cronológica, relata diferentes hechos y sucesos relacionados con el frente de Alcubierre. Las noticias constituyen un relato que aporta valiosa información histórica para contribuir en su estudio y difusión.

ALGUNOS CASOS DE HUMANIDAD EN PERIODO DE GUERRA

 

Ana Cisuelo Pau vio en una femera a un hombre herido y semidesnudo escondido entre el estiércol. Le ayudó en lo que pudo, dándole cobijo, material para curarse, ropa y algo de comer. Tan pronto pudo, este hombre marchó para no comprometerles. Al cabo de un tiempo, Ana fue a parar a la cárcel de Torrero, en Zaragoza y cuando iba a ser fusilada, el oficial que mandaba el pelotón la reconoció y la hizo salir salvándole la vida. Se trataba de la persona a la que ayudó cuando la encontró entre el fiemo y que no iba vestido porque se había desprendido de su uniforme para no ser identificado.

También está el caso de Modesto, un niño de Gurrea de Gállego que estuvo durante una parte de la guerra en casa Taira, creándose una relación de afecto y familiaridad que ha perdurado en la siguiente generación.

Miguel Puivecino Cano, conocido como “Migueler”, fue detenido en la puerta falsa de su casa el día 15-3-37. En la “Causa General de Huesca, Pieza principal, Rama Separada nº 314, Alcubierre, Partido Judicial de Sariñena”, aparece lo siguiente: ”Que hallándose saliendo a la puerta de su casa, se presentaron un tal Alcubierre de Tardienta, quien actuaba de jefe con cuatro o cinco milicianos más. Llevándolo a casa de Don Alfredo Cajal donde estuvo dos días, llevándolo después a Almuniente donde estuvo detenido ocho días hasta que le llamó el juez a declarar y después lo pusieron en libertad”Según testimonio de sus  familiares, Migueler se saltaba el toque de queda y se asomaba o salía a la puerta falsa de su casa. Ésto hizo que le acusaran de espionaje y lo llevaran detenido. Cuando la familia lo fue a visitar a Tardienta, Migueler les entregó el reloj y alguna pertenencia creyendo que lo iban a fusilar. Al visitarlo, se encontraron con un oficial al que una familiar conocía, al cual le había facilitado el acceso a la escuela de la que era maestra, para dar un mitin. Este encuentro dejó huella en el militar y al reconocerla, viendo la situación de Puivecino, dada su influencia testificó e intercedió a su favor y fue liberado, librándose de ser fusilado. (Las dichas y venturas del tío Migueler, osmonegros).

Alberto Lasheras Taira.

Diario de un miliciano

Un testimonio interesante es el del miliciano Manuel Gutiérrez, que escribió en un diario sus vivencias durante sus últimos meses de vida en el frente de Huesca, incluyendo pasajes en la sierra de Alcubierre. Diario de un miliciano fue encontrado en septiembre de 1937 en el frente de Zuera junto al cadáver de Manuel Gutiérrez. El diario aparece publicado por Aula Militar “Bermúdez de castro”

10 de abril de 1937

En la posición que habíamos ocupado últimamente cerca de la del Negus, en la sierra de Alcubierre, los fascistas estaban completamente rodeados y antes de ayer se pasaron dos del campo fascista y sirvieron de guías para tomarles la principal colina por sorpresa.   

11 de abril de 1937

Hoy me han dicho que la posición que en la sierra de Alcubierre tomamos a los fascistas es aún nuestra y por suerte antes de ayer no la ocuparon a pesar de que contraatacaron.

12 de abril de 1937

La colina que hay delante de la posición que ocupábamos en la sierra de Alcubierre es nuestra y continuamente nuestras fuerzas atacan para tomar las otras colinas.

Esta noche se ha luchado fuerte en la sierra de Alcubierre.

15 de Julio de 1937

Estoy otra vez en la Sierra de Alcubierre; mejor dicho todo el batallón. A media noche nos hemos equipado, y sentados delante de la harinera esperábamos la llegada de los camiones que tenían que transportarnos no sabíamos dónde. Cuando llegaron no había bastantes camiones para todos y por tanto yo me he quedado para el segundo viaje. Nada; más de dos horas de impaciencia, cantos y risas y a las ocho salíamos de Tardienta en dirección a Torralba donde hemos parado una hora. De Torralba a Senés; de Senés a Robres y de Robres a … la Sierra.

Por más que recuerdo el tiempo pasado en esta Sierra solo veo el hambre que pasé. Tal como llego y ya tengo hambre; es natural que empiece a sentir hambre no habiendo almorzado y sin ver preparativos para comer a pesar que ya son casi las once.

Al poco rato se ha presentado la aviación facciosa. La esperábamos pues de las posiciones enemigas se distinguía la hilera de camiones con la polvareda que levantaban. Eran dos cazas y se han hartado de ametrallar inútilmente, pues la sierra es muy abrupta y estábamos bien escondidos.

Dicen que esta noche atacaremos.

Efectivamente: poco después de comer nos equipamos, dejando todo lo que nos molestaba y emprendemos la marcha todo el Batallón. Nos hemos hartado de caminar bajo la virulencia de aquel potente sol que en aquellos momentos habríamos declarado faccioso.

Caminamos más de un par de horas subiendo y bajando montañas (más subiendo que bajando) y a las cuatro de la tarde llegamos a la cima de «la colina del Negus» pasando por la paridera de «Mando», completamente sudados; y la faena fue para buscar chabolas y reposar.

Hacía justo media hora que habíamos llegado cuando nuestra artillería abrió el fuego. Había de todo: morteros y artillería de diferentes calibres. Estuvo tres horas tirando sobre los parapetos rebeldes. Los de transmisiones estábamos reposando en unas chabolas y primero un disparo, después otro, se inició fuego de fusilería. Esperando órdenes y oyendo el tiroteo nos dormimos.

Nos despertamos de madrugada y por más que buscamos a las Compañías no las encontramos. Sólo quedó la Compañía de Especialistas. Esta noche fue una de las que noté en mi cuerpo la presencia de piojos.

16 de abril de 1937

Sin almorzar emprendimos el camino hacia Robres donde había ido el Batallón a las cinco de la mañana y después de atacar, pues se habían atacado las posiciones fascistas.

Cuando ya llegábamos a Robres hemos notado la presencia de la aviación rebelde que venía en dirección a nosotros. Nos hemos dispersado por los lados de la carretera y a pesar de que estábamos poco escondidos no nos ha visto.

En el pueblo he encontrado a los compañeros: el «Penques» «La Tella» y Rius y «Cameta». Todos estaban bien pero me he enterado de las bajas que hemos tenido.

El Negus

El Negus, además de ser una posición republicana en el sector de Alcubierre, fue el sobrenombre que se dio a varios milicianos y a un avión oscuro republicano que bombardeaba líneas nacionales. Carlos Urzainqui Biel lo recoge en el blog Noticias de Villanueva de Gallego en su artículo ¡Que viene el Negus!, una expresión que ponía en alerta a las gentes de “Villanueva y por extensión en todo el bajo Gallégo” para correr a refugiarse no más sentir el “Ensordecedor ruido de sus motores”. Un bombardero que según Carlos Urzainqui quizá respondía a un Fokker 7, un Dragón Rapide o simplemente a cualquier aparato que destacara en oscuro sobre el cielo. “Retomando el ABC, éste periódico cita el 18 de octubre del mismo año a las llamadas escuadrillas de las Alas Rojas «en armoniosa formación que preside un avión negro, el famoso “Negus del Aire”» que marchan hacia la sierra de Alcubierre «para arrojar sobre los enemigos toneladas de pólvora». 

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El Negus sobre Perdiguera.

Carlos Urzainqui Biel indaga sobre la identidad del mítico miliciano apodado El Negus, un mito que según Carlos fue creado para infundir miedo al avance fascista: “El Negus es uno de los nombres por los que fue conocido Haile Selassie, el último emperador de Etiopía o Abisinia. Cuando su reino fue invadido por tropas italianas hacia 1935 este descendiente de Salomón y la reina de Saba comenzó a ser conocido por todo el mundo, sobre todo tras su intervención en la Sociedad de Naciones pidiendo ayuda. La crisis de Etiopía coincidió en el tiempo con nuestra Guerra Civil. En paralelo el sobrenombre de su rey “Negus” comenzó a ser temido entre el bando nacional” (Carlos Urzainqui Biel, ¡Que viene El Negus!).

Alcubierre, organización del frente

Ayuntamiento Republicano de Alcubierre

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Con la irrupción militar contra el gobierno republicano, el Ayuntamiento Republicano de Alcubierre, cuyo último alcalde republicano fue Ignacio Mené Irigoyen (El Diario de Huesca 13 de marzo de 1936), dio paso a los distintos comités que se constituyeron a lo largo de la guerra. En diferentes vales emitidos aparece el sello del Ayuntamiento Republicano de Alcubierre, un sello con una impresión débil donde se aprecia una corona mural con cuatro torres almenadas sobre un cuerpo interior aparentemente dividido en cuatro cuarteles y rodeado por ramas de olivo o laurel.

“El POUM, por cada pueblo que iban tomando sus unidades y una vez hecho los preparativos de seguridad, guardias, etc., se accedía a la rápida organización de la vida económica del pueblo, bajo nombramiento de un Comité” (Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial). Grossi cuenta como, tras la ocupación de Alcubierre, se convocó a la población para la constitución del Comité y comenzar a atender las necesidades de la población, dirigiendo la Colectividad Agrícola. “También, en Alcubierre, se ha establecido el sistema de los vales, que corría a cargo del Comité de campesinos, instalado éste en los locales del Ayuntamiento”. En el Archivo Provincial de Zaragoza aparecen varios de aquellos vales con el sello del Ayuntamiento Republicano de Alcubierre y firmados por El Comité, los vales son por diferentes cantidades de carne.

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Al menos hubo tres comités a lo largo de la guerra, señala Antonio Escartín. En el Archivo Provincial de Zaragoza se encuentra abundante documentación de vales, facturas, recibos, partes etc., que dejan constancia de los diferentes comités, consejos y organismos políticos sindicales que describen el importante centro de distribución que fue Alcubierre en su propio sector de guerra. En los documentos aparecen diferentes comités, planteando la hipótesis que quizá las distintas denominaciones correspondan a las mismas organizaciones. Así, encontramos el Comité Local de Alcubierre (Primeros del 37), Comité Popular (primeros del 37), Consejo municipal de Alcubierre (principios 37), Consejo local de defensa de Alcubierre (principios del 37), Consejo Municipal de Alcubierre (A partir de agosto del 37) y el Comité Antifascista de Alcubierre.

Comité Local de Alcubierre

Como hemos manifestado antes, los comités se crean con la llegada de las milicias del POUM, considerando que las denominaciones de los distintos comités puedan corresponder a la misma organización. Entre los numerosos documentos aparecen notas de abono de Consejo Regional de Defensa de Aragón y de la Generalitat de Catalunya, abonos por productos necesarios para el frente que van desde productos básicos de alimentación a productos de limpieza, tabaco o boinas entre muchos otros.

  • Nota de abono. Consejo Regional de Defensa de Aragón. Economía y abastos. 2 sacos de azúcar, 6 cajas lejía, 2 sacos sal gorda, 60 chocolate, 500 paquetes tabaco, 1250 paquetes tabaco y 2 envases tabaco. Géneros servidos por n/ almacenes. Caspe, 16 de enero de 1937.
  • Se ha entregado al Comité Local de Alcubierre 3 cascos de sardinas saladas, un fardo de bacalao de 50 kilos, una caja de leche, esto todo a liquidar a los compañeros de dicho comité, para que conste firman al pie de la presente.

Lérida, 16 de febrero de 1937.

Generalitat de Catalunya

Consell Provincial de Proveiments. Comissió Cerealista Lleida

Compañeros del comité de Alcubierre! Salut.

  • Los compañeros del transporte de la C.N.T. os entregarán para efectuar el intercambio con los seis mil kilos de trigo, del género de que son portadores.
  • Las boinas y demás géneros pedidos que faltan ahora a la mayor brevedad posible os lo enviaremos. Vuestros y de la causa antifascista. El consejero.

Comité Popular

Aparece el Comité Popular en diversas facturas entre las que destacamos facturas como las de pastas alimenticias o sacos de harina.

  • Facturas Pastas alimenticias Emilio Llobet Jové. Lérida, 13 de marzo de 1937. 100 pastas sopa y 2 sacos envases.
  • Factura a Comité Popular de Alcubierre. Guix y Cia, Lérida 14 de agosto de 1936. 10 sacos de harina 4ª a 20 pesetas saco.

Comité de Alcubierre

También aparece la denominación del comité como Comité de Alcubierre. En la siguiente factura se refiere a la vital harina.

  • Factura al Comité de Alcubierre. Guix y Cia, Lérida 2 de septiembre de 1936. 10 sacos de harina 4ª a 20 pesetas saco y 10 sacos de cabezuela a 8 pesetas saco.

Comité Antifascista de Alcubierre

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La información firmada por el Comité Antifascista de Alcubierre es diversa, de los vales por carne a los partes de trabajo. Jornales a obreros que realizaban trabajos, pagos a camaradas que realizaban viajes y por simiente.

  • Vale por 1/2 Kg de carne de oveja. Alcubierre 10 de octubre de 1936. El comité.
  • Parte del 8 de octubre de 1936 de jornales de obreros. Encargado Joaquín Rodilla.
  • Trabajo en casa de Alfredo Cajal. Pago doscientas cuarenta y cuatro pesetas. 5 jornales de siega a 11 horas 55, 17 jornales de siega a 17 horas 289, Total 344. A la de Alfredo 50 en la de Cajal 294. José Lasheras de Robres. Alcubierre 2 de diciembre de 1936.
  • Treinta y tres pesetas por 60 kg de trigo por simiente que le corresponde. José barrios. Alcubierre, 29 de noviembre de 1937.
  • Compañero Remigio: le liquidaras a Basiliano a razón de 34 jornales a 6 ptas a favor de él, que son los jornales que tiene el obrero Manuel Pérez que lo mandemos nosotros a trabajar para él. Alcubierre a 9 de enero de 1937.
  • Liquidación presentada por Francisco Casterad del viaje a Sariñena el 15 de enero de 1938. Concepto en efectivo de caja, gasto comida y gastos bebidas.

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Alcubierre 26 de septiembre de 1936

 

A Tarragona Industrial S.A.

Salud: En nuestro poder la suya del 23 corriente siendo conforme la entrega de 9.000 pesetas, hecha a nuestro camarada Sebastián Ariño y que abonamos en su cuenta.

Adjuntamos dos talones ferrocarril correspondientes a los últimos vagones de trigo que les teníamos vendido por mediación de Francisco Marimon de Reus y  cuyo importe de 9859,85 pesetas, les cargaremos en cuenta, rogándoles si les es posible liquide a nuestro camarada Ariño el saldo que resta a nuestro favor.

Saludale                       

 El Comité

Consejo local de defensa de Alcubierre

Consejo defensaEl Consejo local de defensa de Alcubierre aparece en diversa documentación relacionada con el funcionamiento de la localidad. Así aparecen diferentes vales como “200 g de carne. Alcubierre, 7 de junio de 1937”“150 g de carne. Alcubierre 20 de junio de 1937”. Notas de abono del Consejo Regional de Defensa de Aragón,  Economía y abastos como “15 sacos de trigo de 70 Kg 1.050 Kg. Caspe, 27 de enero de 1937”“11 sacos de trigo conteniendo 770 Kg, descargados en nuestra fabrica  nº 1. Caspe, 24 de enero de 1937”. También aparecen facturas curiosas como Papelería y librería Francisco Casas: “3 kg de cuartillas, 75 cuadernillos de papel barba diferentes Rayados, 25 cuadernillos de papel barba Vilaseca, 5 lapiceros Paber, 3 portaplumas, 2 gomas 2 usos, 1 tintero y 2 plazas Baquelite, 1 tampón, 1 fechador, 1 sello consejo y 1 cinta de máquina. 18 de junio de 1937”.

El abastecimiento a las tropas operantes en el frente es un aspecto vital para para entender el importante papel que la localidad jugo en la guerra, así aparecen diferentes recibos de provisiones y avituallamiento para el frente.

  • He recibido del consejo local la cantidad de ciento treinta y cinco pesetas importe de tres cientos kilos de cebada vendida a las fuerzas que operan en este sector. Alcubierre a 8 de junio de 1937.
  • He recibido del consejo local la cantidad de ciento treinta y cinco pesetas importe de tres cientos kilos de cebada vendida a las fuerzas que operan en este sector. Alcubierre a 8 de junio de 1937.
  • He recibido del consejo local la cantidad de trescientas setenta y ocho pesetas importe de 840 kilos de cebada vendida a las fuerzas que operan en este sector. Alcubierre a 8 de junio de 1937.
  • He recibido del consejo local de defensa la cantidad de quinientas pesetas importe de diez cabezas de ganado vendidas a las fuerzas que operan en este sector. Alcubierre a 8 de junio de 1937.
  • He recibido del consejo local la cantidad de quinientas pesetas importe de diez cabezas de ganado vendidas a las fuerzas que operan en este sector. Alcubierre a 9 de junio de 1937.
  • Transacciones Municipales 73, Recibido de la colectividad la cantidad de trescientas y cinco pesetas por los derechos devengados en el arbitrio de sesenta y un cerdos. Alcubierra, 12 de junio de 1937.

Compañero Manuel. Le darás a ser posible cuatro sabanas al chico pues son para una de Leciñena que está enferma.

El Consejo.

Consejo Municipal de Alcubierre

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Con la creación del Consejo Regional de Defensa de Aragón, presidido por Joaquín Ascaso, entre el 6 de octubre de 1936 y el 11 de agosto de 1937, los Comités Revolucionarios pasan a constituirse como Consejos Municipales. Así se creó el Consejo Municipal de Alcubierre, del que existen diferentes documentos entre ellos varios vales de carne de cordero. Pero lo más significativo es una especie de cartilla de racionamiento: Cartilla Nº 76 familia (firma) sello Consejo Municipal de Alcubierre. 3er Turno (anotación a lápiz) A cargo del consejo de diariamente su ración a Felipe Suñen. Alcubierre a 21 de agosto de 1937. Un documento excepcional, que gracias a las anotaciones diarias nos permite hacernos una idea de la distribución de alimentos entre la población local.

  • Día 1-9-37: 100 gr de cordero a 0´55.
  • Día 2 -9-37: 100 gr de cordero.
  • Día 3-9-37: 100 gr cordero. Aceite 1´75, patatas 0´75, arroz 0´50, judías 0´80, azúcar 0´70, leche 2´75, pan 0´70 = 7´95.
  • Día 4 -9-37: 200 gr de cordero 1´10.
  • Día 27-9-37: 200 gr de oveja 1´00.
  • Día 28-9-37: Pastas 0´30, alcachofas 2´70, judías 0´45, garbanzos 0´70 y pan 0´70 = 4,85.
  • Día 29-9-37: 200 gr oveja 1´00.
  • Día 30-9-37: 200 gr de cordero a 1´10.
  • Día 1-10-37: ¼ aceites 0´55, garbanzos 0´70, azúcar 0´65, leche 1´80 = 3´70 pan 0´70 = 4´4.

Otro documento interesante es un salvoconducto (Hoja de ruta) al camión marca Ford matricula L32 P. de 25 H.P. con el chofer Teodoro Casterad que se dirige a Sariñena a buscar harina para esta localidad valedero para el regreso. Alcubierre a 28 de Noviembre de 1937. El salvoconducto, un documento que permite la libertad de movimiento, consta con los sellos del Consejo Municipal de Alcubierre y de la 122 Brigada Mixta, Batallón Infantería 483.

  • Vale por un paquete de clavos de peso de cinco quilos. El Consejo Municipal. Alcubierre, 19 de agosto de 1937.

Consejo Municipal.jpgLa maquinaria del frente necesitaba de numerosos suministros, uno de los principales era el combustible. En el Archivo Provincial de Zaragoza aparecen recibos con pedidos de gasolina a nombre del Consejo municipal de Alcubierre. Además, entre los documentos se encuentra una nota que manifiesta la falta de crédito del Consejo municipal y que es sufragado por su presidente.

  • Como presidente del consejo municipal y por no haber fondos en el mismo debido a las actuales circunstancias acredito que la colectividad de esta localidad, viene pagándome durante nueve meses los jornales, que son desde el 1º de marzo de 1937 hasta el 31 de diciembre del mismo año, cobrando 6´50 por cada jornal y para que coste espedo en Alcubierre a 16 de febrero de 1938. Francisco Malo.
  • Pedido C.A.M.P.S.A. agencia de Barbastro. Consejo local de Alcubierre. Gasolina auto, 1.000 l. 12 de febrero de 1937.
  • Pedido C.A.M.P.S.A. agencia de Barbastro. Consejo local de Alcubierre. Gasolina auto, 1.300 l. 3 de abril de 1937.
  • Pedido C.A.M.P.S.A. agencia de Barbastro. Consejo municipal de Alcubierre. Gasolina auto, 1.000 l. 20 de abril de 1937.

Consejo de abastos de Alcubierre

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Los comités de abastos nacieron ante la necesidad de organizar la vida del pueblo, en palabras de Grossi “resolviendo las necesidades que se suscitan en todo movimiento”. En la documentación consultada en el Archivo Provincial de Zaragoza ha sido mínima, tanto su posible destrucción como el amplio complejo entramado organizativo de Alcubierre pueden explicar su pérdida o falta de documentos.

Existen resguardos de la Compañía de los Caminos de Hierro del Norte, de transporte por vía ferrocarril desde Barcelona a la estación ferroviaria de Grañen. Como consignatario aparece la Cooperativa local. Abril de 1937.

Colectividad Libre de Alcubierre y Cooperativa Obrera de Alcubierre

Además se crearon la Colectividad Libre de Alcubierre y la Cooperativa Obrera de Alcubierre, que entre muchas funciones, emitieron billetes de 1 pesetas, 50 y 25 céntimos.  (Relación de billetes y vales emitidos en el Aragón Republicano 1936-1938).

Colectividad Libre de Alcubierre

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La Colectividad Libre de Alcubierre fue conjunta de los sindicatos Confederación Nacional del Trabajo “CNT” y Unión general de Trabajadores “UGT”. Fue una de las 275 colectividades que participó en el primer Congreso Extraordinario de Colectividades de Aragón, celebrado en Caspe los días 14 y 15 de febrero de 1937, donde la colectividad contó con 3 delegados (Pelai Pagès. El sueño igualitario entre los campesinos de Huesca 1936-1938). Entre los muchos documentos consultados aparecen hojas de partes de trabajos donde hacían constar el número del obrero, las horas trabajadas, el jornal (pesetas y céntimos), el trabajo efectuado y observaciones. Trabajos colectivos que se renumeraban y que redundaban en la colectividad. Excepcional es la aparición del Acta de la Asamblea de la Federación comarcal de colectividades agrícolas de Grañen celebrada en Grañén el día 7 de marzo de 1937.

  • Parte del 19 de julio “Trilla sacos …… 70”: nº 0 Silverio Español, nº 01 Nicolás Lacambra, nº 10 José Buisac y nº 9 Enfermo.

Otro documento da idea de la organización de la colectividad mediante asambleas, juntas y comisiones:

  • He recibido de la colectividad la cantidad de mil pesetas por acuerdos tomados en asamblea en julio, y cuyos acuerdos han de detallarse en junta administrativa y comisión fiscalizadora. Recibí Pilar Foncillas. Alcubierre, 14  noviembre 1937.

También aparecen notas de abono a la colectividad desde el Consejo Regional de Defensa de Aragón, Economía y abastos. Como el pedido de 6 cajas tomate en latas de 1 Kg, 2 sacos cebollas. Géneros servidos por n/ almacenes. Caspe, 15 de marzo de 1937. También factura de la Generalitat Catalunya, Comissaria de Lleida, Comisió Cerealista. Algunos ejemplos son:

  • 200 kg Patatas de comer. Lleida 14 de abril de 1937.
  • 100 kg Patatas de comer, 200 Kg arroz, 50 Kg café, 50 kg havallu, 12 sacos sal y 240 kg de azúcar. Lleida 24 de abril de 1937.
  • 50 kilos bacalao, 200 kg arroz, 100 kg Judías, 10 sacos de sal, 2 cascos sardinas (2752 unidades), 1 casco sardinas (727 unidades) y 50 Kg de garbanzos. Lleida 26 de mayo de 1937.

Colectividad Libre Alcubierre 2

Sello Colectividad Libre de Alcubierre.

Otros tipos de facturas dan cuenta del diverso material que se requería, tanto de ferretería, de material agrícola, mecánico… como abasto de vino, intercambio de trigo, comercio con otras colectividades como la de Graus, la solicitud de crédito al Banco de Aragón o la factura de luz del Control Obrero de la Ex-Electra de Tardienta (Agua, Gas y Electricidad. CNT-AIT Tardienta, 31 de marzo de 1937). En la dirección de la factura ubica a la colectividad de Alcubierre en la plaza de la República de Alcubierre. La relación e intercambio con otras colectividades se manifiesta con varios recibos, especialmente con la de Graus, pero también con la de Tardienta o Sariñena.

  • Abono a la colectividad de Alcubierre la cantidad de 25.000 pesetas, recibo del banco de Aragón. 29 de enero de 1937.
  • Recibo de la colectividad libre de Alcubierre al Regimiento de Infantería de Cataluña nº 1. Comisario político. He recibido de la colectividad una cofra, una barriquer, un sillón y dos sogas y 100 sacos. Alcubierre 3 de febrero de 1937.
  • Hemos recibido de la colectividad de Alcubierre 6.000 Kg de trigo para intercambio más 86 envases que serán devueltos a la colectividad. Alcubierre, 2 de marzo de 1937.
  • Recibo: He recibido de la colectividad 80 sacos de 70Kg. El oficial de compras Francisco Alvira. Alcubierre, 13 de marzo de 1938.
  • Factura: Ferretería- Batería de cocina. E. Aguadé Granell. 1 berbiquí chichan, 1 llana, 1 maza, 5 barras 6-8-9-11-12, 3 barras 14-16-18, 1 ¿? Y 1 alicate.  Reus, 3 de abril de 1937.
  • Factura: Estatuto del vino y el alcohol. 4 bocoyes vino tinto 2335 litros, a 16 grados. Reus, 9 de abril de 1937.
  • Factura: Casa Pifarré. 200 varillas segadora, 75 arcas arpilleras, 172 kg. remaches aligazón, grampillones… Lérida 27 de abril de 1937.
  • Factura: Blas Vallverdú, Concesionario de la General Motors Peninsular S.A. 1 de aceite. Anotación: Sindicato CNT. Lérida, 22 de junio de 1937.
  • Liquidación presentada por Luis Nogues del viaje a Graus correspondiente al día 1 de agosto de 1937. Concepto en efectivo de caja, por 40 litros gasolina para el camión abastos más gastos de viaje.
  • Factura: Colectividad de Graus 12 cerdos 999 kg 29 de abril de 193?
  • Recibo de la Colectividad Agropecuaria de Sariñena a la Colectividad de Alcubierre. Se detallan los pies de olivas molidas en el molino de Sariñena, descontando 11 arrobas que se cobran de la mitad de lo molido. Por pago de la molienda de 62 pies a razón de 10 pts cada pie asciende a un total de 620 pts que se paga en aceite y en dinero.

Remigio Ord.. Pérez secretario accidental del consejo municipal de este pueblo

Certifico: Que según declaración presentada por la colectividad libre de este pueblo tiene en marcha en la actualidad los siguientes tractores: uno marca “Munktells” número 4542 de 22 H.P. de aceite pesad, consume siete litros horas. Otro “Internacional” número 98286 de 10/20 H.P. de gasolina consume seis litros hora. Tres “Fordson” números 704996, 613359 y 670836 de 20 H.P. consumo seis litros hora y todos trabajan nueve horas diarias.  

Y para que conste extiendo el presente certificado en asamblea a seis de octubre de mil novecientos treinta y siete.

Consejo Municipal de Alcubierre.

El presidente Francisco Malo.

 Sindicato de trabajadores de Alcubierre CNT-AIT

El sindicato CNT en Alcubierre contaba en 1936 con 42 campesinos afiliados (Juan Pablo calero. Vísperas a la revolución. El congreso de la CNT 1936).

  • Vale por 1 Kg de carne. Alcubierre 28 de septiembre de 1936. El comité.
  • Vale por 200 gr de carne Alcubierre 3 de septiembre de 1936. El comité.
  • Vale por 400 gr de carne Alcubierre 23 de septiembre de 1936. El comité.

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 FEDERACIÓN COMARCAL DE COLECTIVIDADES AGRÍCOLAS DE GRAÑÉN

Acta de la Asamblea celebrada en Grañén el día 7 de marzo de 1937, para tratar de la re-organización de la Comarcal:

Da comienzo la sesión a las tres de la tarde, leyéndose las credenciales por la comisión revisora. Asisten a la Asamblea dieciséis delegaciones, que son: Grañén, Lalueza, Poleñino, Alcubierre, Barbués, Cuarte, Senés, Callen, Lanaja, Albero Bajo, Tabernas, Capdesaso, Vicién, Fraella y Piracés.

      Varios pueblos de los que tienen que formar parte de la Comarcal y no asistieron, manifiestan por carta que no han podido delegar por las dificultades propias del momento.

      Pasándose al segundo punto del orden del día, se procede al nombramiento de la mesa de discusión, recayendo los cargos de: Presidente, delegado de la Federación de Colectividades; Secretario de actas, PIRACES; Secretario de palabras, POLENINO.

      Acto seguido, la mesa en función, pone a discusión de la Asamblea el tercer punto, que dice: INFORME DE LA COMARCAL.

     Informa el compañero de la delegación de GRAÑEN, siendo aprobada la información.

     Se pasa al cuarto punto, que dice: ¿DEBE CONSTITUIRSE LA COMARCAL DE COLEC-TIVIDADES Y DONDE DEBE RESIDIR?

      Las delegaciones se manifiestan en sentido mayoritario por Grañén, y minoritario por Poleñino. Al entablarse un ligero debate sobre si debía estar en Sariñena, la delegación de LANAJA expone las dificultades de ello, manifestando la gran cantidad de pueblos que asumiría, y se manifiesta en el sentido de que sean dos las comarcales: la de Sariñena y la de Grañén. Lo cual queda aprobado por todas las delegaciones.

     Quinto punto, que dice: SI SE PROCEDE AL NOMBRAMIENTO DE LOS COMPAÑEROS DE LA COMARCAL.

      Después de manifestar las delegaciones que sí, la mesa pregunta de cuántos miembros se ha de componer. Se acuerda que sean cinco. Los cargos recaen sobre: Hilarlo Villacampa, de PIRACES, Mariano San Agustín, de GRANEN; Francisco Zamora, de POLEÑINO; Pascual Mercadé, de AL-BERO ALTO; Emilio Pascual, de Lalueza, acordándose también que se relacione para asuntos de organización el compañero Torralba, de SANGARREN.

      Sexto punto del orden del día: ASUNTOS GENERALES.

      La delegación de GRAÑEN, exponiendo las dificultades que encontrarán los compañeros que representan a la Comarcal, dice: que el mismo Consejo Local de donde residan puede proporcionárselo, previo intercambio. Se refiere a aquello que no pudieran encontrar en los almacenes comarcales.

     Se manifiesta también que los gastos y organización del transporte sea estudiado con detenimiento y de acuerdo con las colectividades.

     De las dos manifestaciones se toma en consideración la primera, acordándose para la segunda que lo estudien los que forman la Federación Comarcal e informen.

    Pide la palabra LALUEZA para exponer que los componentes de esta Comarcal se desplacen a Sariñena, para efectuar, previa propaganda, la constitución de la respectiva Comarcal.          

    Queda aprobada la proposición de esta delegación.

     GRANEN pide la palabra y expone que debe mandarse una protesta a los departamentos de Economía y Abastos del Consejo de Defensa de Aragón, haciendo alusión también a Orden Público, por la indebida forma de actuación para la economía regional.

     Se adhieren varias delegaciones y se toma en consideración.

     Pregunta el presidente de Mesa si hay algunas manifestaciones más que exponer, y no habiendo ninguna, después de una peroración en la que expone la ardua labor que debe realizar la Comarcal, levanta la sesión a las seis de la tarde.

Cooperativa Obrera de Alcubierre

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La Cooperativa Obrera de Alcubierre respondió a la tradición organizativa de trabajadores, de intercambio, adquisición y distribución. Durante la guerra estuvieron en convivencia con las colectividades, propulsadas por los sindicatos CNT y UGT. La cooperativa mantuvo relación con el Consejo Regional de Defensa de Aragón, el Consell General de Proveíments de la Generalitat de Cataluña, el Comité Comarcal de Abastos de Barbastro y la Colectividad de Graus, entre otras organizaciones. Debajo de la cooperativa hubo una sedería.

  • Recibo: Sobrante del día 6 para el 7, 5 cordero, 16 cordero, 17 oveja, 1, 6 cordero, hígado 1.300 gr y 700 gr y 1,4 espalda de cordero. 7 septiembre de 1937.
  • Anotaciones sobre cuartales de olivas, de gallinas y pollos y gr. de oveja (10 de septiembre de 1937).

* Cuartal: Medida de capacidad para áridos, cuarta parte de la fanega de Aragón, que equivale a cinco litros y seis decilitros.

  • Factura de material a la fábrica de Alpargatas, Ramón Soler Curriu. 1 de abril de 1937.
  • Factura de 100 kg de café extra 28´75 = 875

“Manuel Ardid Fuentes como miembro de los comités formados en esta época, así como de la Cooperativa que en esta villa funcionó. A la liberación de esta localidad marchó a Cataluña y desde allí a Francia.”

 (Alcubierre 12 de marzo de 1957. El Comandante Jefe del Puesto. Firma ilegible).

Alberto Lasheras Taira.

 Cooperativa Antifascista de Alcubierre

  • Vale por 1 kg carne para P. Casterat para viaje de molino Sariñena. Alcubierre, 7 de enero de 1938.
  • Vale por 1´500 cordero para viaje camión Sariñena para olivas. Alcubierre, 21 de enero de 1938.

Otra documentación

Documentos curiosos que han aparecido:

  • 7ª Brigada Mixta Compañía de Deposito Calle Montesa número 23 Madrid. Ver por aquí y que allí protestábamos pues hay que salir de casa para saber bien las cosas
  • Factura de 4 docenas de cepillos de un comercio de Lérida, 31 de marzo de 1937.
  • Pedido de 3 docenas de boinas Bilbaina 11 ½ pulgadas azul. Jorba hermanos de Tarrasa para Alcubierre.

Alcubierre, pueblo del frente

En la localidad monegrina se instaló el Hospital de sangre y cuartel en casa Ruata, fue sede de la columna Carlos Marx y cárcel; aunque otros sitios también fueron habilitados como cárceles, señala Alberto Lasheras. La sede de mando del POUM se instaló en casa Cajal (Casa Biescas); la intendencia en casa Ferrando; la cooperativa en casa Calvo “Donde se racionaba el vino y la comida”; la cocina en casa Gabarre y la lavandería “Centro de acondicionamiento y remiendo de las ropas de los milicianos» en casa de Antonio Ramón (antigua casa Bazán). En la lavandería “Las mozas del pueblo despiojaban, lavaban y remendaban la ropa de los milicianos”, Manuel Benito Moliner, Orwell en el Alto Aragón. La cocina instalada en casa Gabarre respondió a una cocina colectivizada para todos los milicianos y milicianas repartidos por las casas de Alcubierre, la comida se iba repartiendo por aquellas casas. Todas las tierras, utensilios y medios pasaron a la colectivización y fue normal ir de vecinal, principalmente subir a cavar trinchera. Las herramientas las ponía el pueblo.

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Ayuntamiento de Alcubierre. Fotografía: Alberto Lasheras.

Para Alberto Lasheras resulta curioso que casa Ramón, que tuvo una misión concreta durante la colectivización como lavandería y taller de reparación de ropas y uniformes de las tropas, tuviese rótulos de legumbres en habitaciones de la planta principal: “La casa era muy grande y posiblemente más adelante se reutilizó para guardar y repartir desde allí este tipo de alimentos. Recuerdo ver escrito en las paredes: garbanzos, lentejas, judías…, con una pintura rojiza del tono del óxido de hierro”.

Por necesidad de guerra y vista la extensión del terreno que teníamos que cubrir las unidades del POUM, se organizó un Hospital Central en Alcubierre, a cuyo frente, y nombrado por mí mismo, se destinó a un elemento rumano que él mismo quiso decirse el Dr. Mina.

Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial.

El hospital de Alcubierre fue obra del POUM: «Un hospital de segunda línea, en Alcubierre, provincia de Huesca, a cuyo frente está el capitán médico Irañeta y las funciones de su mando las realizan tres enfermeros.» Cómo funcionan nuestros servicios sanitarios. Organización, técnica y humanitarismo de nuestra columna sanitaria. La Batalla: Número 27 _ 02/09/1936.

«El doctor Mina, durante largo tiempo ha residido en Francia y Bélgica. Es un consumado cirujano, especializado en heridas de la cabeza y de los miembros. En aquellos países ha puesto en práctica sus estudios sobre accidentes de trabajo y reside solamente tres meses en Barcelona, donde ha publicado en «Nueva Era», la revista del POUM., y en su número del pasado Julio, un excelente estudio titulado: «Hacia una Medicina del Trabajo».»

Organización, técnica y humanitarismo de nuestra columna sanitaria.
La Batalla: Número 27 _ 02/09/1936.

Grossi negó la condición del doctor Mina que ejerció en el Hospital de sangre de Alcubierre. Grossi lo consideró un impostor que no sabía nada de medicina ni cirugía: “Se había creído dueño y señor de aquel hospital”. Grossi narra las carnicerías del supuesto Dr. Mina, hasta que médicos de Gerona solicitaron el traslado a Alcubierre, haciéndose cargo del mismo y provocando la marcha de Mina.

Un expediente en el Arxiu Nacional de Catalunya recoge el «Hospital de evacuación primaria de Alcubierre» citando como personal del mismo a Francisco Irañeta Urriza como director capitán médico, a Emilio Bordes Grau como practicante, Francisco Borjas Buil enfermero y Vidal Cebrián Simón enfermero chofer. Igualmente señala el personal de ambulancia: Chofer Mariano Costa, ayudante José Eugenio y camilleros Roberto Rodenas y José Viescas. ANC1-1-T-11488. La información responde a una comunicación del Hospital de Alcubierre al Director del Comité Central de Sanidad, solicitando  las tarjetas de nombramiento del personal que facilitaba dicho comité, Alcubierre a 7 de septiembre de 1936. (Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-1-T-11488).

El Diario Oficial del Ministerio de la Guerra, del 22 de enero de 1937, publicó el destino de personal médico a diferentes destinos, entre ellos los practicantes militares provisionales para Alcubierre:

D. Joaquín Villanueva, 13 septiembre 1936, Alcubierre.
D. Carlos de la Calle García, 9 septiembre 1936, Alcubierre.
D. Pedro Moles limeño, 10 octubre 1936, Alcubierre.
D. Francisco Codína Barrera, 29 octubre 1936, Alcubierre.
D. Francisco Ruiz Navarro, 23 septiembre 1936, Alcubierre.

El retablo de la iglesia fue quemado durante la guerra por milicias republicanas, una obra del siglo XVIII, ejecutada en madera de pino y recreado exactamente gracias a una fotografía que se conservó del antiguo retablo. Para Alberto Lasheras las fotografías antiguas que se tienen no muestran la totalidad del retablo y para su recreación se hizo un estudio de los retablos de esta época y un trabajo comparativo. Además, Alberto Lasheras señala que el incendio del retablo mayor, de los retablos menores, de los bancos y de telas y maderas, provocó la caída del techo, de las bóvedas de crucería,  y la humareda provocada se veía desde todo el pueblo. Un proyecto de 1942 reparó esos daños, siendo el albañil encargado de las obras Leoncio Bielsa Lasheras.

También las casa ricas fueron saqueadas. Alberto Lastheras explica que en casa de Ruata, el día 26 de julio de 1936, destrozaron la capilla que hay a la izquierda de la entrada principal, en el patio. Agustín Ruata en el expediente de la Causa de Huesca, pone que “Se destrozó un oratorio gótico con un retablo que presidía su capilla cuyo valor no se atreve a tasar, junto al resto de imágenes de carácter religioso que había, y todo el mobiliario de la casa que quedó completamente desmantelada”. Años más tarde, en 1952 su esposa Ascensión Rufas promovió y costeó la construcción del monumento al Sagrado Corazón de Jesús, cuya imagen tiene una connotación de carácter expiatorio.

En el altillo del Ayuntamiento, uno de los puntos más altos del casco urbano, había un puesto de “Alerta la aviación que pasa”. Hay un grafiti que pone:

Primitivo Novales día 19-12-38

Guardia de Aviación. De Zaragoza puesto de Alcubierre Prov. Hu.

Debajo de éste hay otro con distinta letra y de mayor tamaño: “Alerta La Aviación que pasa”.

Hay una zona con bastantes grafitis en los que dejaron sus nombres, algunas fechas y dibujos. Hay varios aviones, un tren, caras y algún animal, también algún uniformado. Algunos de estos dibujos tienen cierta calidad y estilo.

Alberto Lasheras Taira.

Por el monte de Alcubierre muchas casetas cercanas al frente fueron usadas como polvorines y para guardar materiales y provisiones. Sobre todo guardaban bombas de mano. En la paridera de Cirilo, por la balsa Pina y cerca de la paridera de los catalanes, había un grafiti de lápiz de un miliciano de Guíxols, en noviembre de 1937, tuvo que pasar la noche y pertenecía a motorizada de Durruti. También por la balsa de la Ontina había un puesto avanzado republicano, quizá de brigada y curiosamente de cemento. El puesto consistía en un banco circular de cemento excavado en la tierra, con la fecha de “junio 1937” con una mesa circular en el centro; mesa que lamentablemente fue sustraída ilegalmente.

Por la paridera de Ruata había una alambrada que cruzaba toda la filada, por Val de Lumbierre, y al lado se instaló un hospital de campaña: “Tuvo que ser un hospital de sangre, para cuidados inmediatos” apuntan Escartín y Lasheras. En el diario de La Vanguardia, del domingo 31 de octubre de 1937, se hace eco de tiroteos por la «Paridera Hospital». La noticia aparece recogida desde Sariñena, donde se ubicaban e informaban distintos corresponsales. La noticia hace referencia a los combates «en la montaña» lo que nos puede llevar a situarnos en la sierra de Alcubierre, recogiendo además el testimonio de la existencia de la «Paridera Hospital». 

En Sariñena, se han registrado duelos de artillería

Duelos de artillería en la montaña. Nuestras baterías han disparado sobre unos movimientos de tropas que pasaban por Paridera Hospital y han conseguido disolverlas.

Los cañones facciosos han dirigido su actividad contra las posiciones leales de la Loma de Enmedio, sin que se registrara ninguna baja ni desperfecto.

Por el llano de la ribera del Ebro el terreno sigue inundado, lo que imposibilita toda clase de obras.

A pesar de los continuos enfrentamientos, el frente fue estable y con largos periodos de tregua. Orewell la llegó a llamar “la guerra en punto muerto”.

Entre Alcubierre y Robres se instaló en un tollo sobresaliente una batería del 10 y medio para la defensa republicana.  Orwell narra que toda la artillería asignada al sector, Orwell estuvo en el frente de Alcubierre durante los meses de enero y febrero de 1937, “consistía en cuatro morteros de trinchera con quince cargas cada uno”. Armamento muy valioso que según Orwell, lo guardaban en el mismo Alcubierre.

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En el cementerio de Alcubierre existe una segunda fosa común que recoge los restos de varios milicianos que en el verano de 1937 fallecieron en combates en el frente: “Aquí reposan Melchor Celiméndiz López y sus camaradas caídos el 24 de junio de 1937” (SIPCA).

RECITAL DE ARIAS DE OPERA EN LA PLAZA DE ALCUBIERRE.

 

En 1937 se produjo un hecho sorprendente: unas trescientas personas asistieron en la plaza, frente al ayuntamiento a un recital a cargo de un tenor acompañado al piano por un músico. El público rodeó al cantante con un silencio extraño y rompió al final con una ovación clamorosa. No conocemos la identidad del pianista.

Sobre la identidad del tenor, en un principio creíamos que fue Pedro Terol (Orihuela 1909-Madrid 2003). Hay coincidencias en cuanto a la edad y el repertorio, pero su biografía no lo acerca hasta este territorio.

Bonifacio Fernández Aldana, escritor, periodista y corresponsal de guerra en Aragón, escribió sobre personajes y episodios de la contienda en Alcubierre, Lanaja, Siétamo… En una de sus crónicas “Opera en un pueblo aragonés”, describe el hecho de un miliciano que baja de la sierra a Alcubierre, interpretó unas arias y entre ellas cantó con “depurado gusto” el “Adiós a la vida” de la opera Tosca, de Puccini,  con el mismo entusiasmo que si lo hiciese en la Scala de Milán o en la Ópera de París”.  Continúa diciendo “Es un famoso artista que hoy se siente satisfecho de ser un simple soldado. La obra de Puccini oída en este pueblecito aragonés, tiene otra emoción que en los teatros de damas enjoyadas”.

Fernández Aldana no da el nombre de ese cantante, pero podría tratarse de Carlos Lizondo  (Segorbe 1913-Zaragoza 1940), el tenor de quien habla Ramón Rufat en su libro “En las prisiones de España”, (Editorial Cajica, Puebla. Méjico, 1966), un duro relato autobiográfico sobre los veinte años que pasó en las cárceles franquistas, de 1938 a 1958. Al salir de la cárcel marchó exiliado a París.

Ramón Rufat Llop (Maella 1916 – Vilanova i la Geltrú 1993), fue un destacado miembro de los servicios secretos de la República (SIEP). Condenado a muerte, pasó veinte años preso, se   exilió y se dedicó a escribir, regresando a España en 1976. Coincidió con Carlos Lizondo en la cárcel de Torrero, en Zaragoza donde estuvo preso desde noviembre de 1939 a mayo de 1942. En este periodo se fusilaron en Torrero 878 presos republicanos.

En una de esas sacas, la del 5 de agosto de 1940, fue fusilado Carlos Lizondo. Ramón Rufat ya no estaba en Torrero, pero siguiendo el relato del capellán Jesús Llera, nos escribe en su libro: “Entre las víctimas inocentes de este día había un hombre Carlos Lizondo, que ha quedado como legendario en aquella etapa de represión. Tenía 27 años, era tenor profesional y antes de la guerra había cantado “La Dolorosa” en el teatro Argensola, con una compañía valenciana, pues era nacido en Segorbe.

En la prisión formaba parte del orfeón, y condenado a muerte y todo, cantaba de solista. Era el orfeón la única expresión artística y cultural de las prisiones en estos años, y estaba permitido y hasta mimado por el régimen por el hecho de actuar durante las misas obligatorias de los domingos y días festivos (…).

Al comenzar la misa, pidió permiso para cantar y dedicó, al único compañero que se había confesado, la plegaria de Álvarez: “A vos señora, la Santa Virgen…” Los otros doce de la saca, miraban al “penitente” con desprecio. Lizondo le obsequió con una canción.

Arrancaron los camiones con víctimas y piquetes, y la voz de Lizondo se hizo oír dominante y sublime en la carretera hasta el cementerio. Eran las cinco de la mañana con un alba risueña y llena de esplendor. A petición de los acompañantes iba cantando “La Dolorosa”. Las ventanas de la prisión se llenaron de sonoridad y nuestros cuerpos se pusieron en carne de gallina. Lizondo cantaba como nunca lo había hecho y se despedía de la vida dejando la vida en su voz. Aquellas frases “La silueta del madero…”, “el hijo agonizante…”, cobraban en el ambiente un valor extraño de realidad y de tragedia. El “Camina, camina llorosa…” lo cantaba él mientras el camión doblaba la esquina de las tapias del cementerio.

Delante del piquete pidió que le dejaran cantar el “Adios a la vida”. Adelantó el pecho, inspiró fuerte mirando al cielo que se despedía de las estrellas al paso del alba y cantó…Ni en sueños lo habría hecho mejor. Lo vivía todo, hasta el lamento trágico del final cuando reconoce que no había amado “mai tanto la vita”. El piquete debió de quedar estupefacto y amilanado, porque dijo luego que iba a cantar “Morucha divina” en recuerdo de su mujer, y que dispararan mientras tanto, y se lo concedieron.

Disparó el piquete y la voz quedó eclipsada  por la descarga. Estaba en el momento de “Decirte te quiero”. En el “Decirte” se cortó. Pero al  instante, como tras la pausa de una semifusa, resonó en el aire, potente, triunfal: “¡Te quiero!”…Lizondo había quedado en pie y seguía cantando. Un guardia del piquete, frente a él, se había desmayado. Una nueva descarga rápida lo tumbó al suelo, donde balbuceaba entre la sangre y el barro, queriendo y sin poder: “ di…vi…na…cla…vel…”

Y el tiro de gracia lo dejó con esta flor en los labios”.

“Aún queda un testigo de aquel tremendo fusilamiento. Tiene cien años. Y suscribe este relato punto por punto.” José Luis Melero en “Los libros de la Guerra”.

Alberto Lasheras Taira.

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Pinturas en el granero de la guerra civil, Casa Ruata de Alcubierre. Fotografías Tomas Mora Ruata.

Disolución de las milicias del POUM

Las milicias comienzan a tener serias diferencias con el gobierno republicano con la entrada en vigor del decreto de militarización de las milicias el 20 de octubre de 1936. Agustín Guillamón en su trabajo “Documentación histórica del trosquismo español, 1936-1948” relata el conflicto de la columna internacional BL (Bolchevique Leninista), que tras cinco semanas en el frente de Aragón disfrutó de ochos días de permiso en Barcelona. A su vuelta al frente de Huesca, fueron desviados a la sierra de Alcubierre tras la caída de Leciñena, donde el decreto les llevó a pedir explicaciones al “Comité militar de Alcubierre”, al final la columna rehusó tomar posiciones y solicitó su relevo.

En febrero de 1937, las milicias del POUM fueron disueltas, mucho antes de  la disolución del Consejo de Aragón, el 18 de agosto de 1937. Las milicias del POUM pasaron a convertirse en la 29 división republicana en abril de 1937, aunque fue disuelta y nuevamente fundada a comienzos de 1938. La zona es ocupada por la columna Carlos Marx, la 27, con Cuartel General en Tardienta. La columna Carlos Marx, inicialmente columna Trueba-Del Barrio, salió de Barcelona el 25 de julio hacia el frente de Aragón, estableciéndose principalmente en el sector de Huesca.

En la documentación del archivo Provincial de Zaragoza aparece un vale de provisiones para la División Carlos Marx: Regimiento de infantería de Cataluña nº 1. Vale por: 32 litros de vino, 2 kg de carne, 35 sacos, 500 kg de cebada, 8 litros de lejía, 20 kg de cal, 1 saco de serrín, 8 escobas, 20 botellas de lejía, 8 sacos vacíos, 50 kg de cebada, 50 kg de cebada y 2 sacos de cebada. Alcubierre del 10 al 24 de febrero de 1937. El comisario de guerra Miguel Alcubierre, Regimiento Infantería de Cataluña nº 1, Comisario político. Otro documento relacionado con la columna es una factura de los litros de leche “Que he entregado al Regimiento de Infantería nº1 de la división Carlos Marx. Número de litros doscientos ochenta y dos, valor de dichos litros ciento cuarenta y una pesetas. El interesado Antonio Gavín. El comisario de guerra Miguel Alcubierre, Regimiento Infantería de Cataluña nº 1, Comisario político. Alcubierre, 13 de marzo de 1937”.

 El comisario de guerra Miguel Alcubierre (Tardienta, 1905-México, 1972). Alcubierre, aragonesista de fructífera trayectoria emigrado a Barcelona, pertenecía en el momento de la sublevación a UGT, tras haber abandonado su militancia ácrata dos años antes coincidiendo con la expulsión del mismo sindicato de su amigo y correligionario José del Barrio. Del Barrio, secretario general ugetista en 1936 y jefe de la columna de voluntarios a la que dio nombre, determinó la ubicación de su cuartel en Tardienta a instancias de Miguel, de acuerdo con el relato de Antonio Peiró en “Miguel Alcubierre. Testimonio de la emigración y el exilio”.

Hasta el nombramiento de Alcubierre como director general de Servicios Públicos de la Generalitat de Barcelona y después director general del Transporte, intervino en distintos episodios bélicos desarrollados en los Monegros, alternando la actividad militar con la impartición de conferencias y las tareas ideológicas inherentes a su comisariado. El penoso exilio –sus padres fueron integrados en el convoy de los 927- le llevó junto a su mujer y sus cinco hijos por Santo Domingo y México, donde murió alejado de la política, aunque sin abandonar su carné de UGT.

Territorio de las memorias. Cazabaret.

Víctor Pardo Lancina.

La disolución de la milicia del POUM quedó reflejada en la obra de Orwell “Homenaje a Cataluña”, adquiriendo transcendencia con su representación cinematográfica en “Tierra y Libertad” del cineasta británico Ken Loach.

 “División Carlos Marx: En Alcubierre, anoche, a las veintitrés horas, atacó el enemigo nuestras posiciones de este sector, siendo rechazado valientemente por nuestras fuerzas”. 

1 de marzo 1937, ABC Edición Madrid.

Sector Norte. El enemigo hizo fuego de ametralladora contra nuestras avanzadillas de la sierra de Alcubierre. Las nuestras contestaron adecuadamente. En el resto de los frentes, sin novedad. Febus

23 de febrero 1937, ABC Edición Madrid.

Fallecimiento de un aviador catalán

Después de larga agonía ha fallecido el aviador y redactor  de “La Publicitat” Mariano Follé. Hace tres meses, cuando con otros tres compañeros iba en un avión de bombardeo por el frente de Aragón, cerca de Alcubierre, el aparato fue abatido por uno faccioso. Los compañeros murieron y Follé resultó gravemente herido. Cuando parecía que su cura era segura por su juventud, ha sobrevenido la muerte, ocurrida pocos días después del entierro de su padre político el director de  “La Publicitat” Carlos Capdevila. Febus.

23 de febrero 1937, ABC Edición Madrid.

Bombardeos sobre Alcubierre

El enemigo ha presionado con alguna intensidad sobre el sector de Alcubierre. Durante dos horas bombardeó esta localidad utilizando piezas del diez y quince y medio. No ha habido ni un solo herido en las filas republicanas. Febus.

19 de junio 1937, ABC Edición Madrid.

Hubo dos bombardeos especialmente duros en Alcubierre, un primero fue para San Juan, del 23 al 24 de junio de 1937, en el que fallecieron unos 14 milicianos que estaban haciendo formación en la plaza del ayuntamiento. Para Manuel Benito “Los milicianos estaban haciendo la instrucción en la plaza y murieron entre 25 y 30. A un hombre le cayó la casa encima resultando indemne. Muchos marcharon a vivir al monte en busca de mayor seguridad”. De casa Calvo salió despedida una pila de lavar del pozo, narran Escartín y Lasheras. El segundo bombardeo fue el 10 de diciembre de 1937. “Hace unos años una excavadora, abriendo una zanja, descubrió una bomba de aviación alemana, de doble espoleta eléctrica” recuerda Antonio Escartín. En la edición de Madrid del ABC del 12 de diciembre 1937 aparece la siguiente reseña: “Esta mañana han volado sobre el frente doce aviones facciosos, que han arrojado varias bombas sobre Alcubierre y Lanaja. Después tomaron rumbo a Lérida, pero no llegaron a entrar en esta ciudad”.

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Imagen del bombardeo de Alcubierre, 24 de junio de 1937.

El testimonio de Avelí Artís Gener, conocido como Tisner, resulta sumamente interesante. Avelí fue un periodista, escritor, caricaturista, escenógrafo,… catalán que luchó en el frente de Aragón y que recogió, en su obra “556 Brigada Mixta”, el bombardeo sobre Alcubierre:

“Recuerdo un día de San Juan. Estábamos en el ayuntamiento de Alcubierre, en una reunión del partido. Vilanova presidía y nos había puesto al corriente de las últimas consignas. Como nuestro partido era infalible, le escuchábamos en silencio.

Nos interrumpió el sonido de la agrietada campana de la iglesia. Sus toques eran persistentes e interminables, de rebato, indicaban alarma. El ronquido de motores de aviación apagó el sonido de la campana, y los silbidos y las explosiones de las bombas parecían simultáneos. Unos se tumbaron en el suelo de la casa con una ramilla entre los dientes. Alguien, en algún momento, había explicado la utilidad de aquella ramilla, pero por entonces, para nosotros, era más bien una práctica supersticiosa, ignorantes de que, si te quedabas enterrado bajo los escombros, tenías más posibilidades de sobrevivir si algo te mantenía la boca entreabierta. Otros nos apretamos contra los muros, a pie firme. Las formidables explosiones nos ensordecían. Y, de súbito, una más fuerte y la casa se llenó de humo y polvo y de la fuerte pestilencia a trilita quemada. Fue como si, de pronto, alguna poderosa fuerza nos hubiese aplastado contra las paredes. Quedamos con el pecho oprimido y durante unos minutos estuvimos sin ver nada, con una presión en los oídos que parecía que tuviésemos la cabeza puesta dentro de una prensa de copiar cartas. Después, al desvanecerse la humareda, comenzamos a comprender lo que había pasado. Los cascotes nos tenían atrapados hasta las rodillas, y una viga nos apretaba contra lo que quedaba de pared. ¿Dónde estaban los demás? Entre ladrillos, tejas y maderos sobresalían brazos y piernas. Nos desembarazamos como pudimos y comenzamos a remover los despojos. ¡Qué espectáculo! Nos llenaba de escalofríos.

No sé cuántas horas empleamos en desenterrar muertos y heridos. A los heridos se los llevaban en camiones, que corrían como posesos. De Bori recogimos un trozo de la piel del cráneo pegada a la pared. Lo separamos con una horquilla y lo identificamos porque Bori era el único pelirrojo que había entre nosotros. Llenamos toda una paridera con las camillas de los muertos y después acudimos a las otras casas derrumbadas. ¡Pobre Alcubierre, aquel día de san Juan! Una de las bombas cayó en la balsa del pueblo y encontramos ranas adheridas a la pared del campanario. Era imposible saber el número de casas que se habían hundido.

El resto del día lo pasamos como atolondrado; vagábamos por las calles como fantasmas de nosotros mismos. No sé cómo explicar nuestro estado de ánimo después del bombardeo. Ni ahora mismo encuentro fuerzas para definirlo. Recuerdo la angustia, un permanente estado de entumecimiento de piernas, una especie de alegría indefinible por habernos salvado del desastre, pero también una especie de sentimiento de  culpa y un vago deseo de haber estado entre las víctimas. Nos dolíamos de los muertos, pero al mismo tiempo hubiéramos querido yacer con ellos en la paridera. Muntaner, Cendrá, Solá y yo les fuimos a ver al anochecer.

No porque nos agradase la sangre, sino porque les queríamos decir adiós. Y los cuatro permanecimos un rato larguísimo en silencio, enmudecidos por el llanto.

No dormimos en toda la noche. Al día siguiente, ya habían cavado una interminable zanja en el cementerio, parecida a una trinchera. El cielo gris hacía juego con la ceremonia y con el estado de ánimo. El crepúsculo vio cómo colocábamos a nuestros compañeros en la zanja, encajados en hilera unos a otros, con las piernas abiertas para ganar espacio. Genachte, el comisario belga del regimiento, echó las primeras paletadas de tierra.”

Según algunos testimonios que hemos recogido, trasladaron los cadáveres al cementerio en una especie de carretones, escena que fue contemplada por unos, entonces chiquillos, que acompañaron el cortejo hasta la entrada del cementerio y se pudieron fijar en el estado en el que quedaron aquellos cuerpos. Esta fosa permaneció durante muchos años sin que dispusiera de una clara identificación. Más tarde, con la llegada de la democracia se colocó una pequeña placa de mármol blanco sobre la tierra, en la que puede leerse: “Aquí reposan Melchor Celeméndiz López y sus camaradas, muertos el 24 de Junio de 1937.”

Avelí Artís Gener. 556 Brigada Mixta, Editorial AVANCE.

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Refugio de Alcubierre.

Los refugios de Alcubierre fueron principalmente los refugios antiaéreos debajo de la virgen del Remedio, explican Escartín y Lasheras. Los refugios fueron construidos por el comité y no estaban comunicados entre sí. Dos entradas juntas y otra al otro lado, cada entrada se dividía en dos partes, una bifurcación que en palabras de Alberto Lasheras “Lo más cerca posible de la entrada se hacía una bifurcación para atenuar la fuerza de la onda expansiva en las dos galerías”. Los refugios estaban cerca de la iglesia, por la berbecana, el muro que rodea a la iglesia y que sujeta y da consistencia al terreno, por donde cuentan que vieron a Durruti haciendo fotografías Durruti haciendo fotografías. También estaban Las Bodeguetas, refugios cerca del cementerio, algo lejos, corrían y casi no les daba tiempo a llegar. Por último estaban las cuevas de san Antonio, Alberto Lasheras cuenta que “Era otro refugio que está a la entrada del Rincón de San Antonio, una calle en forma de L con una única entrada, que da a la berbecana, frente a la entrada de la iglesia. Actualmente está tapado”. Cuando se acercaba la aviación tocaba la campana Eugenio el de Torralbeta, se tocaba a Rebato. Los aviones, provenientes de Zaragoza, pasaron primero para bombardear a la vuelta y así escapar más rápido. Manuel Benito también recogió los refugios de Alcubierre: “Los paisanos se escondieron en el refugio que había bajo la ermita del Remedio, construido por el Comité, un intricado pasadizo con tres bocas de entrada, que quedó clausurado hace unos años bajo el cemento. Hubo otros más pequeños en las eras y en otras calles como el que estaba frente a la de san Antonio”.

LAS CUEVAS EXCAVADAS COMO REFUGIOS ANTIAÉREOS.

Se encuentran en varios puntos, principalmente bajo la ermita de la Virgen del Remedio. De las tres entradas que había, solamente una permanece abierta, con acceso protegido por una puerta a modo de reja. Dos que había hacia la derecha actualmente están tapadas. De críos, los domingos entrábamos con velas por el interior, jugando a exploradores. Prácticamente a la entrada de la cueva hay una bifurcación con dos túneles, cuyo objeto es disminuir la intensidad de la onda expansiva reduciéndola a la mitad en cada uno de ellos, para que tuviese menor efecto en los que ocupaban el refugio en el momento del bombardeo.

Otra de esas entradas estaba frente al Rincón de San Antonio, una calle cerrada en forma de L, que sale frente a la berbecana de la iglesia.

Parece que hubo un intento de comunicar uno de los refugios bajo la ermita con otro que se empezó a abrir en la Calle Palacio, no se concluyó y posteriormente se utilizó como carbonera para la fragua del taller de Lorenzo Lasheras y para guardar las virutas de la parte de taller que era carpintería. Cuando no había neveras allí se guardaba la fruta junto a otros alimentos perecederos y el mejor botijo de agua fresca del pueblo, según comentaban quienes acudían al taller.

También en alguna era cercana al pueblo había pequeñas cuevas o cuevetas (como la era de Teodoro) que podían utilizarse como refugio. Otro ejemplo podría ser la zona de Las Bodeguetas, que tiene pequeñas cuevas, con una somera construcción delante y que también se utilizaron ocasionalmente como viviendas.

Fue precisamente en este lugar donde el 25-3-38, en el momento de la retirada de los milicianos, fueron detenidos Ramiro Lacoma Peña y Mariano Suñen Gavin, llevados al matadero municipal junto a Manuel Bailo Giménez donde fueron brutalmente asesinados (folios 12, 13 y 14 de Declaración del Testigo de la Causa General 314).

Alberto Lasheras Taira

En el matadero de la localidad fueron encontrados los cadáveres de tres personas de Alcubierre, el 25 de marzo de 1938.

Mariano Suñen Gavin, 68 años, jornalero, de izquierdas, no desempeñó cargos.
Manuel Bailo Gimenez 41 años, jornalero, de derechas, no desempeñó cargos.
Ramiro Lacoma Peña, 48 años, jornalero, de izquierdas, no desempeñó cargos.

Detenido en el refugio de las bodegas, Manuel Bailo Gimenez, fue asesinado el 25 de marzo de 1938, al menos su cadáver apareció en el matadero y presentaba herida de machete en la frente. Testimonio de su viuda Salvadora Ardid Gavin. También asesinaron a Mariano Suñén Gavin, Viuda Felipa Martín Lalana. Ramiro Lacoma Peña, viuda Crencia/Orencia Peña Gavin.

Causa General de Alcubierre.

Una larga caravana formaba el convoy que nos conducía hacia el frente de batalla. Artillería, cocinas de campaña, carros ligeros de combate, en fin todo lo que necesita una verdadera brigada motorizada, llevábamos nosotros la intendencia en cada sitio marcado por el mando que nos aprovisionaba de víveres en conserva, puesto que era materialmente imposible hacerlo en caliente. Con 6 horas de retraso sobre el horario marcado llegamos a Alcubierre, población cerca de la línea de fuego, y lugar de concentración de todas las fuerzas del Ejército del Este XI Cuerpo del Ejército.

Hacia el frente de Huesca 25-27 septiembre de 1937.

Francesc Roca Matamoros.

LOS CORRALES Y CASETAS DEL MONTE, UN LUGAR PARA ALEJARSE DE LOS BOMBARDEOS.

 

Muchos son los corrales y casetas que hay alrededor de Alcubierre y que fueron ocupados por sus familias propietarias además de ser acogidos en ellos vecinos y parientes, que compartieron espacio, alimentos y penurias. Los amplios corrales o parideras de los grandes propietarios, también fueron ocupados por los habitantes del pueblo: los de Valmayor, El Abejar, Las Fierlas, El Pilón,  los de Puliceto y Fernander en el Puyalón, el de Lasheras en el Saso Cavero…

Allí llevaron en carros a niños, ancianos, sus enseres, colchones, camas, animales buscando seguridad al a alejarse del casco urbano. No obstante los miembros de los diferentes comités sabían dónde se encontraba cada uno de los vecinos de la localidad, por si era requerida su presencia por algún motivo. Tenemos algún ejemplo de estos casos: a Julián Lasheras Alvira y a su hermano Pascual, el día 24-6-37 fueron a buscarlos y detenerlos un oficial y dos milicianos al corral de Puliceto en la partida del Puyalón. Los llevaron a casa de Ruata donde tenía el cuartel la Brigada Carlos Marx, permaneciendo allí detenidos tres días y cuatro horas. Julián y Pascual escucharon a sus captores decir: “Si piden agua les dais abadejo y si piden pan, un tiro”.

En la retirada de los milicianos, ante el avance de las fuerzas franquistas, los corrales seguían habitados por buena parte de la población de Alcubierre. En el corral de Octavio Lasheras, en el Saso Cavero, había mucha gente; sobre todo críos y mayores. Cuando se retiraban los republicanos hacia Cataluña, se presentaron unos hombres y dijeron que “saliesen todos porque le iban a pegar fuego al corral”. El tio Abizanda (José Abizanda) salió levantando los brazos y les dijo “que por favor no se les ocurriera hacerlo porque allí sólo había viejos y críos”. El veterinario D. Pascual, mayor, salió con los brazos en alto y pidió que no les mataran. Otras personas que habitaban ese corral se habían ido a esconder a la sierra y a los barrancos cercanos.

Entre los milicianos había uno de Lanaja y al final no incendiaron el corral.

Alberto Lasheras Taira.

La rotura del frente

La sierra de Alcubierre es rebasada en marzo de 1938, con la ruptura del frente de Aragón en su avance hacía Cataluña y Levante. “El 8 de marzo de 1938, el general Yagüe puso en marcha la ofensiva definitiva en el frente de Aragón. Las tropas republicanas iniciaron al tiempo el repliegue en dirección a Cataluña. A finales de este mes prácticamente todo el territorio aragonés estará en manos del ejército sublevado”. La Guerra civil en Los Monegros. Alcubierre fue tomado por los nacionales a las 13:30 horas y a las 16:00 horas estaban entrando en Lanaja, señala Escartín. Fue la división 53/55, “No atacaron directamente el frente, la rotura fue por el llano a través de Farlete y Tardienta, envolviendo las posiciones de Alcubierre”. Los milicianos en retirada mataron cuatro personas.

El cuerpo marroquí del experto y valeroso general Yagüe progresó hacia Bujaraloz, cortando la carretera general llamada de Francia, y este movimiento supone otra amenaza para el envolvimiento por el sur de la tan mentada sierra de Alcubierre, con lo que la maniobra de gran estilo quedaría completa.

25 de marzo 1938, ABC Edición Sevilla.

Se conjuga el batallar de las columnas Sur de Huesca, centro y Norte del Ebro sobre la sierra de Alcubierre, que pronto quedará totalmente pisada –dominada está ya- por las tropas del Norte, bajo el mando del ilustre general Dávila, ejecutante de la asombrosa maniobra de la que se deduce el rescate del reino aragonés, con el desplazamiento del frente de combate a tierras catalanolevantinas, donde sí se alienta la resistencia desesperada de los pobres milicianos rojos es porque allí no se sintieron aún los espantos de la guerra.

26 de marzo 1938, ABC Editorial Sevilla.

Interesante es el relato que aparece en las memorias escritas por el Comisario de Guerra de Compañía Francesc Roca Matamoros durante su exilio en Méjico:

Serían las 3 de la madrugada, del día 23 de marzo, cuando todavía no habíamos descansado de la fatigada jornada del día anterior, y la orden de evacuar las nuevas posiciones se nos había dado, pues el enemigo en su avance se nos había colocado a nuestra retaguardia una vez más, y teníamos que evitar el peligro de caer en sus manos, pues nada menos que toda una brigada está cercada. Emprendimos la marcha y gracias a que el comandante Ugena, de la 137a brigada, que conocía bien el terreno que pisábamos, no fuimos prisioneros pues llegó un momento en que nuestra columna llegó a pasar como a 1 km. de distancia del enemigo. Después de andar hasta las 11 de la mañana llegamos a Robres, pueblo situado al sur de Torralba de Aragón y cuando pasamos por él, ya el enemigo con sus fuerzas motorizadas había tomado Torralba. Allí nos organizamos y seguimos la marcha hasta Alcubierre, pueblo donde se encontraba nuestra brigada. Estuvimos andando todo el día y a las 4 de la tarde llegábamos a las proximidades de este pueblo.

Una vez acantonados, no propusimos descansar, pero la aviación enemiga no nos dejaba un momento de reposo, continuamente nueve aviones de caza, estaba ametrallando las unidades de combate republicanas que iban a la desbandada pues las líneas habían sido cortadas por todos los lados. A las 6 de la tarde entramos en el pueblo, allí tomamos contacto con nuestra brigada y grande fue la alegría del jefe y comisario de la misma cuando nos vio, porque creían que habíamos sido hechos prisioneros. Nos incorporamos a nuestra unidad, y a las 8 de la noche el enemigo atacó la vía férrea, que estaba en nuestro poder. Le interesaba en gran manera porque de esta forma dejaba cortadas las comunicaciones para ayudar a nuestros compañeros que se encontraban al norte de la población. Su ataque resulto inútil, fue rechazado con pérdidas de vidas por dos veces y a las once recibíamos la orden de evacuar aquellas posiciones que tanto habíamos defendido porque el enemigo del flanco derecho se había infiltrado con peligro de cercar nuestra brigada. La orden fue dada de repliegue hasta Sariñena.

Robres de Aragón y Alcubierre 23 de marzo de 1938

Francesc Roca Matamoros.

Notas de guerra. Un voluntario cubano, herido ocho veces, ha destruido quince tanques. Un periódico publica una interviú con Juan Campos, ciudadano cubano, que ha participado en nuestra lucha desde su iniciación, y ha resultado herido ocho veces. Campos fue sargento en el Tercio Extranjero, y en talavera se pasó a nuestras filas, juntamente con otros compañeros. Eran portadores de un mortero, una caja de bombas de mano, 14 fusiles y una pistola. Dice que entre la paz que le puede blindar el regresar a su país y la guerra española, ha preferido seguir luchando en España, porque entiende que así es como trabaja por la paz.

Formó parte de la expedición que marchó a Mallorca, y fue herido en el asalto a Puerto cristo. Después fue herido en Talavera y Brunete. Más tarde, luchando en el Puente de los Franceses, en Montearagón, en Alcubierre y, finalmente, en la ermita de santa Quiteria. Por sus heroicos comportamientos alcanzó en el Ejercito Popular el grado de teniente. Es un destacado antitanquista, y en su hoja de servicios figura ya la destrucción de 15 tanques enemigos. Febus.

11 de junio 1938, ABC Edición Madrid.

Marzo de 1938 Diario de campaña de un requeté pamplonés

Manuel Sánchez Forcada perteneció al Tercio del Rey, encuadrado en el batallón América, junto con falangistas navarros y soldados regulares. En un diario dejo escrito su avance por Aragón tras la caída del frente:

Día 26 marzo 1938 Hoy empezamos el avance muy temprano, hoy por carreteras y en columna, pues no se ve el enemigo, pasando por Alcubierre, La Naja y Pallaruelos de Monegros, donde pasamos la noche, cogiendo una bandera de la U.G.T.; como trofeo se guarda.

El frente caído

Una vez llegadas las fuerzas franquistas a Alcubierre, hubo detenciones, interrogatorios y palizas dirigidas a personas con pasado republicano, explica Alberto Lasheras “Uno de los lugares en los que se llevaban a cabo estas acciones, era el piso más alto del Ayuntamiento, una especie de granero o buhardilla”. Según Lasheras “Nos puede dar una idea de la dureza de estas sesiones, el hecho de que uno de los detenidos (Novales de apellido), en un descuido de quienes le custodiaban se arrojó al exterior, al vacío, desde una ventana circular a modo de óculo que podemos ver en lo más alto de la fachada del citado edificio, falleciendo ante el impacto con el suelo. Si algún amigo o familiar con influencia, informaba o testificaba a tu favor, el trato era menos duro y se podían evitar algunos golpes o el corte del pelo al cero a algunas mujeres, evitando el escarnio público. Vecinos de Alcubierre estuvieron condenados a trabajos forzados en las obras del Valle de Los Caídos, como Manuel Suñén Casamayor. Una forma de explotación laboral de los detenidos que se convirtieron en esclavos del régimen por  el Patronato para la Redención de Penas por el trabajo. Una vez liberados de la pena, todavía en 1958 eran acompañados por una pareja de la Guardia Civil a misa primera, los domingos.”

Por la sierra de Alcubierre, tras la contienda, subían brigadas de 30 a 40 personas para recoger todo lo aprovechable, sobre todo chatarra, metralla, hierros para reutilizar… También hubo gente que tuvo que subir a recoger los cadáveres y no faltó quien se llevó los dientes de oro de los muertos. También la sierra sirvió de refugio de paso de maquis.

Aun así han ido quedando restos, tanto en las trincheras como por sus inmediaciones y se ha encontrado multitud de material bélico: cartuchos, balas, granadas, trozos de morteros, latas… Por los años sesenta había centenares de granadas de la FAI que vendían bien caras a coleccionistas. También restos de embutido catalán, señala Antonio Escartín: “Embutido de Castellfollit de la Rocca, se sabe por las etiquetas de plomo que llevaba el embutido y que aparecen por la sierra”.

En el museo de Robres, Centro de Interpretación de la Guerra Civil en Aragón, se puede contemplar diversos objetos de la contienda, así como documentación, fotografías, prensa de la época… y exposiciones itinerantes. También se han recuperado y acondicionado zonas de trincheras, como “La ruta Orwell”, “La ruta de las tres Huegas” y “El bunker de Lanaja”.

La recuperación de las trincheras ha convertido la zona en un interés turístico y recibe numerosas visitas, un monumento a la memoria. La ruta Orwell ha recuperado y recreado parte de las trincheras y nos traslada a aquel escenario de batallas y guerra. Una parte de nuestra historia reciente, donde la mayor lección es aprender que las guerras nunca deben de suceder.

Rugen los cañones

Y empieza el combate

Y el soldado pone

Su gran corazón

Lucha con fiereza

Con su sangre joven

Y con sus ideas

De liberación.

Pero la metralla

No respeta nada

Y los hombres caen

En fila sin fin.

Y por todas partes

Se oyen los heridos

Gritan con angustia

Y suplican así

Camillero, llévame despacio

Que me haces sufrir

Camillero tengo una herida

No quiero morir.

Canción recogida a Teresa, 16 de abril del 2012. “Se cantaba en la escuela, quizá después del paso de los nacionales”, Antonio Escartín

A la memoria y recuerdo de todas las víctimas.

Relación de noticias en el frente de Alcubierre

ABC

30 julio 1936, ABC Edición Madrid. El 29 de julio de 1936 la aviación republicana bombardeo posiciones nacionales en la sierra de Alcubierre. Ante la huida de los nacionales dirección  Zaragoza, las milicias catalanas ocuparon Lanaja, procediendo a dominar la sierra de Alcubierre.

11 de agosto de 1936, ABC Edición Madrid. Se conocen informes de cómo actúan las fuerzas fascistas, más bien partidas, en el frente aragonés. Cerca de Alcubierre es donde con más refinada crueldad han procedido los rebeldes, y en las proximidades del poblado observase la desolación que dejan tras de sí los facciosos. Refieren los vecinos de Alcubierre que, al apoderarse del pueblo los fascistas, amarraron por los codos a trece jóvenes, los rociaron con bencina y después les prendieron fuego. La causa del monstruoso tormento fue la sospecha que dichos jóvenes pudieran estar en relación con la columna Medrano. Estos actos de crueldad los llevan a efecto individuos titulados “Legionarios de la muerte”, uniformados con camisa negra, en la que se ve como distintivo del grupo una calavera entre huesos.

10 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. Una columna facciosa, compuesta de dos regimientos de infantería, dos baterías de artillería, una sección de morteros y 500 hombres de caballería han atacado nuestra línea de Alcubierre. La rápida y enérgica de las fuerzas leales hizo retroceder al enemigo, abandonando más de cien muertos y gran cantidad de armamento. En nuestro poder han quedado además 75 prisioneros.

Una columna facciosa, compuesta de dos regimientos de infantería, dos baterías del 7`5, ametralladoras, morteros, 200 caballos y 200 falangistas atacaron nuestras líneas por la sierra de Alcubierre, entre Farlete y Perdiguera. Nuestras fuerzas, que conocían la envergadura de esta operación, se colocaron estratégicamente, dejando al descubierto las líneas avanzadas. Cuando el enemigo se acercó, se abrió nutrido fuego seguido de un avance que no pudieron resistir los facciosos, que emprendieron rápida huida, abandonando importante armamento, municiones y unos 100 muertos. Además les hicimos 120 prisioneros.

13 de octubre 1936,ABC Edición Madrid. En el sector Sur, entre Alcubierre y Leciñena, se acusa una incursión del enemigo, que ha sido localizada y contenida. El enviado de Febus de Huesca se había preparado ayer domingo un plan de rectificación del frente para lograr la comunicación rápida entre diversas posiciones del Sur y del Este. Los objetivos fueron conseguidos totalmente después de breve lucha. Los facciosos, al darse cuenta de la importancia estratégica de la rectificación, trataron de neutralizarla, intentando de recuperar las posiciones perdidas.

Una incursión facciosa intentada entre Alcubierre y Leciñena ha sido rápidamente cortada, con las consiguientes pérdidas para el enemigo.

14 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. Un violento ataque rechazado con grandes pérdidas para el enemigo. En la sierra de Alcubierre, un contingente rebelde, protegido por la artillería y morteros, inició un violento ataque. La lucha, después de un paréntesis de calma, se desarrolló con extraordinaria dureza. En este nuevo encuentro, que corresponde a la serie de descalabros sufridos por el enemigo, se intentó como otras veces el empeño inútil de abrirse paso.

El 15 de octubre de 1936 aparecen por la sierra de Alcubierre varios contingentes de moros. Un fugitivo del bando nacional les cuenta que hay muchos legionarios y que estos se han negado a combatir contra el que fue su jefe en África, el coronel Villalba, leal a la república y que mandó a las tropas republicanas del Alto Aragón. Muchos legionarios fueron encarcelados y algunos fusilados.

16 octubre 1936, ABC Edición Madrid. Frente de Aragón. Las milicias han rechazado un ataque al sur de Alcubierre, en el sector de Barbastro, ocupando en el contraataque, protegidas por la aviación y la artillería, seis lomas que constituyen magnificas posiciones ofensivas para acciones futuras y ocasionando al enemigo más de cien bajas.

17 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. En Alcubierre, las fuerzas leales han consolidado las posiciones tomadas al enemigo, que, batido por el fuego de nuestra Artillería, huyó en desorden. En este sector ha sido tomada una posición en extremo estratégica, se trata de Punta de los Ladrones, que domina todos los lugares de concentración del enemigo, siendo acogida la ocupación con gran entusiasmo por las tropas. El ímpetu de las tropas fue magnifico, a pesar del ataque de cinco aviones facciosos, que huyeron hacía Perdiguera. La colaboración de los aviones leales contribuyó al éxito de la operación. Febus.

18 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. La situación de los rebeldes es tan apurada en la sierra de Alcubierre que desde Zaragoza han tenido que enviarles importantes refuerzos.

20 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. En la sierra de Alcubierre nuestras tropas avanzan y ocupan nuevas posiciones. Frente de Aragón: La aviación republicana bombardea las posiciones enemigas de la sierra de Alcubierre, y la infantería avanza por el flanco derecho de esta zona, ocupando nuevas posiciones; la resistencia es cada vez más débil.

22 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. En la sierra de Alcubierre casi no hay enemigo, y es que la columna volante que salió de Zaragoza para atacar nuestras líneas topó con la resistencia enérgica de nuestras milicias.

23 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. En el sector de Alcubierre, un grupo de facciosos descargaba cajas de municiones en una casita que intentaban convertir en polvorín; pero al advertirlo nuestras fuerzas, merced a una maniobra envolvente, fueron cogidos los facciosos entre dos fuegos, y tuvieron que huir, quedando la casita en poder de nuestras fuerzas, las que rápidamente han fortificado aquel lugar. Febus.

25 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. Otro fusilado redivivo. En el hospital general ingresó Joaquín Casanovas, de veinte años, para ser sometido a una operación quirúrgica. El 25 de julio intervino en unos combates desarrollados en el sector de Alcubierre. Juntamente con otros once compañeros cayó en poder de los facciosos, los que resolvieron fusilarlos. Se llevó a cabo la ejecución; pero Joaquín sólo resultó herido. Aguantando el dolor que le producían las heridas, se hizo el muerto, y una vez que marcharon los facciosos huyó campo traviesa, logrando llegar a las filas republicanas, donde se le practicó una cura de urgencia. Desde aquella fecha ha permanecido en un hospital del frente y ahora será operado. Joaquín Casanovas está muy animado y dice que tan pronto como se restablezca volverá al frente. Febus.

25 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. Extracto del artículo “El hambre y terror se adueñan de la población civil de Huesca”, conferencia telefónica de nuestro corresponsal en el frente de Aragón Fernández Aldana. Por la documentación encontrada a los moros caídos, se ha demostrado que la leva la ha hecho Franco recientemente, pues la mayoría figuran alistados en los meses de agosto y septiembre. Estos moros, que tan caro han pagado el deseo del mando faccioso de avanzar por Tardienta, iban armados con fusiles de fabricación alemana, construidos en el año 1926. Duro ha pagado su intento de avance en Tardienta la columna móvil que el estado mayor de Zaragoza está lanzando a romper inútilmente el cerco a la sierra de Alcubierre, pues nuestros milicianos, soldados y guardias de Asalto han detenido en su avance a dicha columna, a pesar de los cinco mil hombres que la componen y los modernos medios de guerra de que disponen. Fracasado lo de Tardienta, han intentado movilizar a través de la sierra por otros sectores; pero han sufrido un contraataque, que ha sido victorioso para nuestras milicias.

Esta tarde misma, nuestras centurias de Alcubierre, en una importante operación, han tomado al enemigo Puig Ladrón y otras posiciones que aseguran y dominan las operaciones de nuestra línea de Tardienta con Alcubierre.

27 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. En los Frentes de Aragón: Ante un ataque de nuestras fuerzas, huye el enemigo dejando abandonados muertos y armas. Sector Norte. El enemigo se encuentra en situación difícil delante de Alcubierre. Además, han sufrido el bombardeo de nuestra aviación. Febus.

Todas las crestas de la sierra de Alcubierre están ya en nuestro poder, ocupando las fuerzas leales posiciones preponderantes y obligando al enemigo a situarse en la parte baja.

18 octubre 1936, ABC. El 26 de octubre de 1936 salen de Alcubierre tropas para ocupar Puig Ladrón, junto a la columna del sector centro de Bujaraloz. En la sierra de Alcubierre solo quedan por ocupar dos cimas ABC 27 octubre 1936.

27 octubre 1936, ABC. Ocupación del puerto de Alcubierre. Captura de treinta y seis prisioneros del Tercio. Frente de Aragón: Las operaciones realizadas ayer sobre las posiciones rebeldes de Puig Ladrón dieron por resultado la captura de 36 prisioneros del Tercio y numerosas armas. En la madrugada de hoy, las tropas de la República han ocupado totalmente el puerto de Alcubierre.

28 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. Derrotados los facciosos en Alcubierre en un combate que se prolongó cuatro días sufriendo perdidas de consideración en hombres y material: vencidos en Tardienta, donde quedó aniquilada la columna salida de Zaragoza.

29 de octubre 1936, ABC Edición Sevilla. Ejercito del norte. 5ª División. En nuestras posiciones de Alcubierre hubo cierta presión por parte del enemigo, siendo rechazado.

30 de octubre 1936, ABC Edición Madrid. Es rechazado un violento ataque en la carreta de Alcubierre. El enemigo, apoyado por su artillería y aviación, ha realizado un violento ataque a nuestras posiciones del norte de la carretera de Alcubierre, siendo rechazado con muchas bajas.

Barcelona, 29, 12 noche, el comunicado del coronel Sandino dice: “Siguen ocupándose posiciones favorables en la zona de Alcubierre. El enemigo, ante el movimiento de nuestras fuerzas, ha intentado oponerse, siendo rechazado valientemente, con abundantes bajas.

Edición Madrid. Tiroteo en Alcubierre. Frente de Aragón: Intenso tiroteo en la sierra de Alcubierre, sin que se hayan modificado las líneas de contacto con el enemigo.

Un espía descubierto. Obedeciendo órdenes del coronel Villalba, la policía ha detenido a un individuo que figuraba en las milicias y que últimamente estaba destinado en Alcubierre, de donde desapareció. Ha ingresado rigurosamente incomunicado en los calabozos de la comisaría general de Orden Público. Febus.

1 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Continúa la ocupación de la sierra de Alcubierre. Frente de Aragón: por la sierra de Alcubierre continúan nuestras tropas ocupando las diversas lomas, desde donde nuestra artillería castiga duramente a las tropas facciosas.

3 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Un avión derribado por ametralladora antiaérea. En un parapeto enemigo se encuentra un fusil alemán. El avión faccioso derribado el sábado en la sierra de Alcubierre, lo fue por disparo de ametralladora antiaérea, hecho por el miliciano de Villanueva y Geltrú Ramón Codina.

7 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Nuestra artillería de Alcubierre batió eficazmente las posiciones enemigas situadas en ese sector.

11 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Ligeros tiroteos en los frentes de Huesca, sierra de Alcubierre y Robres.

13 noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Después de un fuerte combate, nuestras fuerzas ocuparon nuevas posiciones en la sierra de Alcubierre y ocasionaron al enemigo numerosas bajas.

13 noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Conquista de nuevas posiciones en la sierra de Alcubierre. Barcelona 12, 3 tarde. El comunicado facilitado esta madrugada en el cuartel general del Sector Norte de Aragón dice: Después de un fuerte combate, nuestras fuerzas ocuparon nuevas posiciones en la sierra de Alcubierre y ocasionaron al enemigo numerosas bajas. Febus.

14 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Comunicado del Cuartel del Norte: Nuestra artillería ha bombardeado las posiciones enemigas en el sector de Robres, destruyendo un parapeto y una trinchera donde se encontraban fuerzas facciosas. Desde primera hora de la mañana, las fuerzas enemigas han iniciado un ataque, protegidos por la aviación y la artillería, sobre nuestras posiciones de la sierra de Alcubierre, maniobrando las nuestras con la cooperación de los carros brindados y batiendo a la columna facciosa, que ha huido desordenadamente dejando en el campo treinta cadáveres y gran número de fusiles y munición. Febus.

17 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Sector de Bujaraloz. Se han presentado en la zona de Alcubierre tres legionarios de la legión Sanjurjo, con su armamento completo. Han facilitado informaciones militares de gran interés. Febus.

18 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Dos soldados Navarros se pasan a nuestras filas. El enviado de Febus en el frente de Aragón en el sector de Alcubierre comunica que se han pasado a nuestras filas dos soldados navarros, que han referido hechos repulsivos que comenten los facciosos a su paso por los pueblos. Cuando los jefes de las fuerzas facciosas observan que sus soldados manifiestan deseos de pasarse a nuestras posiciones los alejan del frente para impedir efectúen sus propósitos. Febus.

22 de noviembre 1936, ABC Edición Sevilla. En Aragón atacaron Almudévar y Alcubierre, habiendo sido rechazados violentamente, a pesar de que también llevaban carros de asalto y se han recogido en el campo 150 muertos enemigos.

23 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Las columnas de Robres y Alcubierre han atacado en la sierra la posición de Puigladrón, que hemos cercado, haciendo abandonar posiciones estratégicas a los facciosos, que han sufrido numerosas bajas.

24 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. En la sierra de Alcubierre nuestras fuerzas, una vez cercado Puig Ladrón, han proseguido el avance hacia el otro lado de la sierra, dominando posiciones del valle que circunda la carretera que va a Leciñena.

28 de noviembre 1936, ABC Edición Madrid. Sigue el avance en el sector de Alcubierre. Barcelona 27, 7 tarde. El enviado de Febus en el frente de Aragón dice que continúa el avance de las fuerzas republicanas en el sector de Alcubierre.

29 de noviembre 1936, ABC Edición Sevilla. Ejercito del norte. 5ª división. En nuestras posiciones de Alcubierre hubo cierta presión por parte del enemigo, siendo rechazado.

2 de enero 1937, ABC Edición Madrid. Se han sostenido acciones locales en Igries, Tierz, Robres y Alcubierre, castigando con fuego de artillería y ametralladora las posiciones de los facciosos y contrabatiendo a su artillería en los escasos intentos realizados de cañonear nuestras posiciones.

22 de enero 1937, ABC Edición Madrid. En tierras de Alcubierre se han pasado a nuestras filas tres soldados.

23 de enero 1937, ABC Edición Madrid. Tiroteos en Alcubierre.

2 de febrero 1937, ABC Edición Madrid. Sector Norte. Tiroteo de monte Irazo, con bajas vistas. En Alcubierre se presentó un cabo con armamento y dos soldados con él. En Robres, en la tarde de ayer, hubo cañoneo enemigo sobre nuestras líneas, disparándose además seis granadas de mortero, sin consecuencias. De han pasado a nuestras filas un soldado y once legionarios, alguno de estos con armamento.

5 de febrero 1937, ABC Edición Madrid. Circunscripción Norte: en el sector Alcubierre, ligero tiroteo en Monte Iranzo. Se han pasado a nuestras filas cinco legionarios, un soldado y un sargento de Infantería.

10 de febrero 1937, ABC Edición Madrid. Una patrulla de reconocimiento se ha internado en el campo rebelde de la sierra de Alcubierre y ha capturado un coche con dos caballerías. En el resto del frente sin novedad. Febus.

23 de febrero 1937, ABC Edición Madrid. Sector Norte. El enemigo hizo fuego de ametralladora contra nuestras avanzadillas de la sierra de Alcubierre. Las nuestras contestaron adecuadamente. En el resto de los frentes, sin novedad. Febus

Fallecimiento de un aviador catalán. Después de larga agonía ha fallecido el aviador y redactor  de “La Publicitat” Mariano Follé. Hace tres meses, cuando con otros tres compañeros iba en un avión de bombardeo por el frente de Aragón, cerca de Alcubierre, el aparato fue abatido por uno faccioso. Los compañeros murieron y Follé resultó gravemente herido. Cuando parecía que su cura era segura por su juventud, ha sobrevenido la muerte, ocurrida pocos días después del entierro de su padre político el director de  “La Publicitat” Carlos Capdevila. Febus.

24 de febrero 1937, ABC Edición Sevilla. Ejercito del Norte, 5ª división. Un pequeño golpe de mano en la sierra de Alcubiere permitió a los nuestros apoderarse de varios fusiles y cajas de municiones.

1 de marzo 1937, ABC Edición Madrid. División Carlos Marx: En Alcubierre, anoche, a las veintitrés horas, atacó el enemigo nuestras posiciones de este sector, siendo rechazado valientemente por nuestras fuerzas.

5 de marzo 1937, ABC Edición Madrid. El enemigo cañoneó con bastante intensidad las posiciones de Alcubierre, siendo contestado enérgicamente por nuestra parte.

23 de marzo 1937, ABC Edición Madrid. La nieve y la lluvia entorpecen las operaciones. Dicen de Caspe que la lluvia ha paralizado las operaciones. Nieva en la sierra de Alcubierre y al norte de la provincia de Teruel.

26 de marzo 1937, ABC Edición Madrid. Comunicado del consejero de Defensa. Esta mañana, una patrulla de reconocimiento, en servicio de descubierta en la sierra de Alcubierre, ha sorprendido a otra patrulla enemiga, a la que ha puesto en fuga, causándola bajas vistas.

3 de abril 1937, ABC Edición Madrid. En Alcubierre, una patrulla leal ha sorprendido una brigada enemiga, atacándola, cuando trataba de fortificarse en las proximidades de la ermita de santa Cruz, haciéndola huir, dejando dos muertos.

11 de abril 1937, ABC Edición Madrid. Nuestras fuerzas atacan en Puigladrón, causando numerosos muertos al enemigo.  En el sector de Alcubierre, nuestras fuerzas han atacado en las cercanías de Puigladrón, demostrando la alta moral del ejército del pueblo. El enemigo ha tenido numerosos muertos y en nuestras filas dejaron unos cuarenta.  Entre ellos había varios oficiales. Se ha capturado abundante material de guerra, entre el que figuran dos ametralladoras.

11 de abril 1937, ABC Edición Madrid. Una expedición de prisioneros procedentes de Alcubierre. Sariñena 10, 8 noche. A las cinco y media de la tarde ha llegado a esta localidad una expedición de prisioneros hechos en los recientes combates librados en la sierra de Alcubierre. Al salir del camión en que han sido traídos, el público que los presenciaba, y que era muy numeroso, prorrumpió en entusiastas vivas a la República. Febus.

11 de abril 1937, ABC Edición Sevilla. 5ª división. En el sector de Alcubierre se han cogido al enemigo 25 muertos, 40 fusiles y una ametralladora.

14 de abril 1937, ABC Edición Madrid. El enemigo se bate en retirada en la sierra de Alcubierre. En la sierra de Alcubierre se bate ya a estas horas en retirada. Una compañía de fuerzas rebeldes que todavía se encontraba en las inmediaciones de la ermita de Santa Quiteria ha sido totalmente dispersada ante el brioso empuje de las tropas republicanas. Con esta operación queda dominada por completo la carretera que parte de Almudévar y va a Zaragoza y la de Almudévar a Huesca. Los facciosos que defienden esta última ciudad  se encuentran desde este momento en una situación bastante apurada.

15 de abril 1937, ABC Edición Madrid. El enemigo ha contraatacado durante todo el día de hoy las posiciones que las tropas leales han arrebatado en Alcubierre y Huesca.

18 de abril 1937, ABC Edición Madrid. Fuego de fusilería y ametralladora en los subsectores de Alcubierre, Robres y Tardienta.

24 de abril 1937, ABC Edición Madrid. En los frentes de Huesca, Tardienta y Alcubierre hubo intensos tiroteos de fusil y ametralladora entre las avanzadillas y duelos de artillería, sin consecuencias por nuestra parte.

4 de junio 1937, ABC Edición Sevilla. Ejercito del norte. Frente de Aragón. Pequeño ataque a una de nuestras posiciones del sector Alcubierre, rechazado con bastantes bajas para el enemigo.

19 de junio 1937, ABC Edición Madrid. El enemigo ha presionado con alguna intensidad sobre el sector de Alcubierre. Durante dos horas bombardeó esta localidad utilizando piezas del diez y quince y medio. No ha habido ni un solo herido en las filas republicanas. Febus.

19 de junio 1937, ABC Edición Sevilla. En la sierra de Alcubierre hubo cañoneo, contestado energéticamente por nuestra parte sobre los pueblos de Alcubierre y Robres. El servicio de emboscada hizo huir a una partida de marxistas en ese sector, que dejó abandonadas algunas armas.

21 de junio 1937, ABC. Edición Sevilla. En los frentes aragoneses el día transcurrió sin novedad, salvo algún fuego de mortero en la sierra de Alcubierre.

29 de junio 1937, ABC Edición Sevilla. En los frentes aragoneses el día transcurrió sin novedad, salvo algún fuego de mortero en la sierra de Alcubierre y la cotidiana presentación de evadidos en nuestras filas.

4 de julio 1937, ABC Edición Sevilla. En Alcubierre se pasó un miliciano.

27 de julio 1937, ABC Edición Madrid. El enemigo cañoneó nuestras posiciones de Colado de Maestro, en la sierra de Alcubierre.

12 de agosto 1937, ABC Edición Madrid. Actuación artillera en Alcubierre y monte Oscebo. Sariñena, 11, 4 tarde. En todo el sector de la sierra de Alcubierre hubo intenso cañoneo. En algunos puntos, donde se observaron movimientos de tropas, las baterías republicanas impidieron con sus disparos las maniobras que los rebeldes pretendían realizar. También trabajaron nuestras ametralladoras y fusiles. A última hora renació la calma. Por nuestra parte, no hubo bajas.

13 de agosto 1937, ABC  Edición Madrid. Muestra artillería y la rebelde. Sariñena 12, 4 tarde. A lo largo de todo el frente se ha registrado un intenso cañoneo, particularmente por la parte de la sierra de Alcubierre, y de una manera especial frente a la ermita de Magallón. Perseguían los rebeldes conocer el emplazamiento de una batería nuestra que, magníficamente situada, parece molestarles extraordinariamente. Desde luego, sus propósitos no fueron conseguidos, y la acción artillera resultó en este sentido ineficaz., por cuanto ninguna de las granadas fascistas dio en el objetivo perseguido por el enemigo. Voló también la aviación enemiga, sin duda pretendiendo localizar los citados emplazamientos, más tampoco pudo sacar provecho alguno.

Por nuestra parte, en cambio, logramos destruir una fortificación enemiga situada en la vertiente opuesta de Perdiguera, acallando el fuego que desde este lado se nos hacía

19 de agosto 1937, ABC Edición Madrid. La actividad en los frentes de Huesca. Se registró cañoneo en la sierra de Alcubierre.

19 de agosto 1937, ABC Edición Madrid. También por esta demarcación nos son favorables las operaciones por los sectores del sur de Huesca por las montañas que encierran Alcubierre y Monte Oscuro, donde hay duelos de cañón y ametralladora. El enemigo ha bombardeado Purvurel, balsa Salada y Artigas, sin ocasionar daño alguno en nuestras filas. Febus.

20 de agosto 1937, ABC Edición Madrid. Las luchas en el campo faccioso cada vez son más encarnizadas. Todo el interés se concentra en los sucesos que se están desarrollando en Zaragoza y que revisten una importancia extraordinaria. Sin embargo no cesan los tiroteos en los sectores de la sierra donde los facciosos tratan de interceptar todos nuestros movimientos. Nuestras patrullas coincidieron con los facciosos en la sierra de Alcubierre. Los leales se distribuyeron convenientemente y cuando el enemigo estaba cerca rompieron el fuego. Los facciosos huyeron en todas las direcciones y no fueron pocos los que cayeron para no levantarse más.

21 de agosto 1937, ABC Edición Sevilla. Ejercito del centro, frente de Aragón. El enemigo intentó atacar anoche y hoy nuestras posiciones de Monte Calvario y sierra de Alcubierre, siendo rechazado.

24 de agosto 1937, ABC Edición Madrid. Tiroteos poco intensos en la sierra de Alcubierre.

25 de agosto 1937, ABC Editorial Sevilla. Hoy ha sido un día de gran actividad en los írentes de Aragón. El enemigo, para contrarrestar los brillantes éxitos del Ejercito Nacional en el Norte, desencadenó una ofensiva general en todo el frente de Aragón, adquiriendo su mayor violencia en la sierra de Alcubierre y principalmente en las zonas de Perdiguera, Quinto y Zuera.

26 de agosto 1937, ABC Editorial Sevilla. Nuestra aviación, al terminar el día, había derribado otros siete aparatos más enemigos en distintos sectores de la sierra de Alcubierre. La aviación marxista, que había concentrado el grueso de sus unidades en este frente para apoyar la ofensiva roja de Aragón, en vista del enorme descalabro, se retiró. Los aparatos derribados son un Praga, seis ratas y ocho Martín Bomberg.

14 de septiembre 1937, ABC Edición Madrid. En la sierra de Alcubierre nuestra artillería acalló a la enemiga, que fue localizada.

25 de septiembre 1937, ABC Edición Madrid. Sariñena 24, 10 noche. En los sectores de la sierra de Alcubierre, tiroteo de fusil y ametralladora, sin que en momento alguno llegara a revestir gran importancia.

10 de octubre 1937, ABC Edición Madrid. Nuestras tropas hostilizaron los grupos que se dedicaban a trabajos de fortificación frente la línea de Alcubierre.

Fuego de fusil y ametralladora posición de Alcubierre.

17 de octubre 1937, ABC Edición Madrid. Tranquilidad en los sectores cercanos a Huesca, en la sierra de Alcubierre y en la parte norte de la provincia de Teruel.

2 de noviembre 1937, ABC Edición Madrid. Por la sierra de Alcubierre, tiroteos de trincheras. Febus.

18 de noviembre 1937, ABC Edición Madrid. Duelos de artillería al norte de la sierra de Alcubierre sin que se registraran bajas por nuestra parte ni desperfectos en las obras de defensa. La aviación facciosa ha volado sobre nuestras posiciones de la Portillada pero ha tenido que huir ante el fuego de los antiaéreos.

21 de noviembre 1937, ABC Edición Madrid. Tiroteo y fuego de mortero en el Alto Aragón y en las posiciones del Collado del Maestro y norte de Alcubierre.

4 de diciembre 1937, ABC Edición Madrid. Por la sierra de Alcubierre, durante la noche pasada, hubo tiroteos de posición, sin consecuencias para el Ejército Popular.

12 de diciembre 1937, ABC Edición Madrid. Esta mañana han volado sobre el frente doce aviones facciosos, que han arrojado varias bombas sobre Alcubierre y Lanaja. Después tomaron rumbo a Lérida, pero no llegaron a entrar en esta ciudad. Febus.

19 de diciembre 1937, ABC Edición Madrid. La nieve paraliza las operaciones en el Alto Aragón. Según las noticias del Ejército del Este, nieva intensamente por las sierra de Alcubierre. Esto paraliza toda clase de operaciones, pues resulta muy difícil de transitar por los caminos y carreteras. La moral de los soldados republicanos no decrece por este contratiempo, y despreciando los rigores de la temperatura mantienen estrecha vigilancia en los lugares donde es posible un ataque rebelde. Febus.

11 de enero 1938, ABC Edición Madrid. Calma absoluta en la sierra de Alcubierre y monte Oscuro.

25 de marzo 1938, ABC Edición Sevilla. El cuerpo marroquí del experto y valeroso general Yagüe progresó hacia Bujaraloz, cortando la carretera general llamada de Francia, y este movimiento supone otra amenaza para el envolvimiento por el sur de la tan mentada sierra de Alcubierre, con lo que la maniobra de gran estilo quedaría completa.

26 de marzo 1938, ABC Editorial Sevilla. Se conjuga el batallar de las columnas Sur de Huesca, centro y Norte del Ebro sobre la sierra de Alcubierre, que pronto quedará totalmente pisada –dominada está ya- por las tropas del Norte, bajo el mando del ilustre general Dávila, ejecutante de la asombrosa maniobra de la que se deduce el rescate del reino aragonés, con el desplazamiento del frente de combate a tierras catalanolevantinas, donde si se alienta la resistencia desesperada de los pobres milicianos rojos es porque allí no se sintieron aún los espantos de la guerra.

29 de abril 1938, ABC Edición Sevilla. El pueblo de Leciñena, que ha sido frente durante toda la guerra, por estar al píe de la sierra de Alcubierre, ha organizado una peregrinación al Pilar. Han hecho una jornada de 30 kilómetros a pie,

11 de junio 1938, ABC Edición Madrid. Notas de guerra. Un voluntario cubano, herido ocho veces, ha destruido quince tanques. Un periódico publica una interviú con Juan Campos, ciudadano cubano, que ha participado en nuestra lucha desde su iniciación, y ha resultado herido ocho veces. Campos fue sargento en el Tercio Extranjero, y en talavera se pasó a nuestras filas, juntamente con otros compañeros. Eran portadores de un mortero, una caja de bombas de mano, 14 fusiles y una pistola. Dice que entre la paz que le puede blindar el regresar a su país y la guerra española, ha preferido seguir luchando en España, porque entiende que así es como trabaja por la paz.

Formó parte de la expedición que marchó a Mallorca, y fue herido en el asalto a Puerto cristo. Después fue herido en Talavera y Brunete. Más tarde, luchando en el Puente de los Franceses, en Montearagón, en Alcubierre y, finalmente, en la ermita de santa Quiteria. Por sus heroicos comportamientos alcanzó en el Ejercito Popular el grado de teniente. Es un destacado antitanquista, y en su hoja de servicios figura ya la destrucción de 15 tanques enemigos. Febus.

Diario de Huesca

17 de octubre de 1936, Diario de Huesca. Operaciones en Aragón: Las columnas que operan en la sierra de Alcubierre, tuvieron un encuentro con el enemigo en las proximidades del pueblo de Perdiguera. Los marxistas fueron brillantemente batidos y huyeron hacia Farlete. Se cogieron por nuestras fuerzas más de 60 muertos marxistas y gran cantidad de víveres y municiones. La mayoría de los muertos eran extranjeros, de nacionalidad francesa y rusa y también algunas mujeres

Victoria importante de las tropas de Aragón

Una columna, al mando del teniente coronel Gazapo, ha infligido una derrota al enemigo

En la División fue facilitado ayer el comunicado siguiente: «Después de la ocupación de Leciñena y Collado de Alcubierre por nuestras columnas, el enemigo, dándose cuenta de las excelentes posiciones que ha perdido y la importancia de nuestro avance, ha acumulado gran cantidad de elementos en el frente de Leciñena y Perdiguera para tratar de compensar el descalabro sufrido con la ocupación de puntos que permitieran envolver nuestras posiciones avanzadas. Sus intentos no han tenido éxito, sino que por el contrario, su derrota ha tenido una verdadera continuación en el día de hoy. Nuestras tropas, con un excelente espíritu y llenas del mayor entusiasmo, han partido de Perdiguera, formando una columna al mando del teniente coronel de Estado Mayor don Darío Gazapo, rechazando al enemigo en una profundidad de cinco kilómetros. Este, que al principio oponía una tenaz resistencia, ha acabado por huir hacia Farlete. En esta acción se han hecho al enemigo 89 muertos, entre los que se cuentan cinco mujeres rusas, polacas y una francesa. Se le han recogido más de 50 fusiles y cinco ametralladoras, abundantes municiones, víveres y documentación. Nuestra artillería ha logrado además abatir un avión enemigo de bombardeo que ha caído en las líneas enemigas y ha sido probablemente tocado otro por el fuego de la misma batería. Por otra parte, otras fuerzas que han partido de Perdiguera hacia el Collado de Alcubierre, han encontrado sobre el campo ciento diez cadáveres, han cogido prisionero un oficial francés y han fusilado a un oficial español que estaba al lado de los rojos.

20 de octubre de 1936, Diario de Huesca. Detalle de las operaciones en la sierra de Alcubierre Zaragoza. Tras la ocupación de Leciñena y el descalabro sufrido por los rojos al intentar aproximarse a Perdiguera, nuestras fuerzas continuaron el avance y ocuparon el collado de Alentisque. Esta posición tiene gran valor estratégico. Los rojos se hallaban perfectamente atrincherados, y en esta situación ventajosa intentaron resistir el ataque de nuestros soldados. La operación fue planeada admirablemente y alcanzó un resultado plenamente satisfactorio. Ante el arrollador avance de las fuerzas del Ejército, las hordas catalanes emprendieron la huida.

25 de noviembre de 1936, Diario de Huesca. En el sector de Leciñena Alcubierre vienen desarrollándose desde la ocupación del mismo numerosos hechos de armas que han culminado en la acción del día 21 del actual en que la segunda bandera de África y en especial su jefe el capitán de Infantería habilitado para el empleo de comandante, don Enrique García Ruiz Soldado y las Falanges del comandante Lostaló, dieron una prueba más de su sangre fría y serenidad, dejando acercar a sus líneas al enemigo, logrando con ello causarle numerosísimas bajas y poniéndolo en franca huida.

Felicito a todas las fuerzas de ese sector, que tantas pruebas de abnegación y valor ante fuerzas muy superiores en número vienen dando y a su jefe teniente coronel de Caballería don Gustavo Urrutia, que con su elevado espíritu militar y acierto en el mando ha sabido elevar de tal modo el espíritu combativo de las fuerzas a sus órdenes, por lo que cito su actuación como muy distinguida; haciendo también extensiva esta distinción al capitán de E. M. don Mariano Bernardos y al capitán de Infantería, alumno de la Escuela Superior de Guerra, en prácticas de E. M. don Pedro Latorre, los cuales no solamente destacan de manera notoria en su difícil función, sino que en todo momento, rebasando sus obligaciones, no rehúsan los mayores peligros para los que siempre son voluntarios.

28 de noviembre de 1936, Diario de Huesca. Quinta División. En los frentes de Alcubierre y de Almudévar ligero tiroteo.

19 de mayo de 1937. Nueva España. EJERCITO DEL NORTE. Frente de Aragón: Cañoneo en os sectores de Huesca y Alcubierre.

4 de junio de 1937. Nueva España. EJERCITO DEL NORTE. Frente de Aragón: Pequeños ataques a una de nuestras posiciones del sector de Alcubierre, rechazados con bastantes bajas para el enemigo.

17 de julio de 1937. Nueva España.

También atacó con 10 tanques; rusos nuestras posiciones del Sur de Alcubierre. Se le rechazó valientemente dejando 53 muertos en las alambradas y un centenar en los barrancos próximos

21 de agosto de 1937. Nueva España. Frente de Aragón. El enemigo intentó atacar anoche y hoy nuestras posiciones de Monte Calvario y Sierra de Alcubierre, siendo rechazado.

25 de marzo de 1938. Nueva España. En la estribación Norte de la Sierra de Alcubierre se ha operado hoy en un gran fondo y en un gran frente. Ya ayer recibió el enemigo un golpe terrible al verse privado de la línea ferroviaria de Lérida por donde le llegaban al frente de Huesca los recursos de Barcelona y Lérida que en traban al frente rojo por el empalme de Tardienta. Todo el Cuerpo de Ejército de Aragón, mandado por el general Moscardó, cuyos laureles heroicos se remozaron ayer en su pecho, sigue la progresión iniciada con la toma de Tardienta.

Se ha operado en la vertiente Norte de la Sierra de Alcubierre, derrotándose al enemigo y persiguiéndole hasta donde se quiso. La resistencia que intentaron oponer los rojos, fue aniquilada por el heroico empuje del Cuerpo de Ejército de Aragón.

Después de una metódica y eficaz preparación artillera, pulverizadas las defensas enemigas, los soldados aragoneses, veteranos ya en la lid con los rojos, se lanzaron al asalto de los puntos de resistencia que conducían a las alturas de la sierra de Alcubierre.

Los soldados del Cuerpo de Ejército de Aragón, con facilidad, tal como si se hallaran en unas maniobras ocuparon Vicién, Barbués, Sangarrén y Torres de Barbués e infinidad de caseríos y pequeños lugares de la sierra. No hay que decir que hemos hecho centenares de prisioneros. Es lo de todos los días. Los rojos diríase que prefieren la prisión a la huida. Es más halagüeño el porvenir que les aguarda en campos de concentración, donde se trabaja en condiciones humanas, se come bien y descansa, que a esclavitud en el orden social y la muerte sin honor en el campo de batalla, que es lo que les espera antes y después en la zona roja.

Ha quedado rescatada y limpia de enemigos la sierra de Alcubierre, otro pedazo de Aragón que arrancamos al enemigo; otro gran trozo de la Patria que se rescata. Vuelven a la paz y al trabajo once pueblos de la serranía de Huesca.

Y como siempre ocurre, una gran inquietud, una incógnita para el enemigo: ¿Hacia dónde van los fascistas? Y la trágica certeza de que de nada les serviría adivinar la dirección de cualquiera de nuestros avances porque toda resistencia es inútil. Va derrumbándose el frente cada día. Y si nada pueden hacer en el orden militar, ¿por qué prolongar la guerra?

Resuenan ya los estampidos de nuestros cañones en la tierra del buen sentido. No es tiempo de inútiles bizarrías, ni las bizarrías van con el modo de ser de los marxistas. No esperen reacciones del ánimo caído. Por el empuje insostenible de nuestras armas se derrumba el frente. Ya solo es tiempo de usar en la entrega, salvando la vida y preparándose para una larga penitencia, a fin de merecer algún día la gracia de los que han forjado una nueva hazaña, salvado cada día por el fuego de los combates de la Patria. Justo Sevillano.

26 de marzo de 1938. Nueva España. Hoy ha sido la toma de Alcubierre con toda la parte de Sierra que va desde Alcubierre hasta la ermita de Santa Quireria y en Alcubierre se ha estado luchando desde que empezó la guerra y se han escrito en ella páginas gloriosísimas del heroísmo, la abnegación y resistencia de los soldados aragoneses. El triunfo de hoy al dejar liberados estos pueblos y estas sierras fue de los más significativos y producirá seguramente enorme júbilo en Aragón y más especialmente en Zaragoza. Zaragoza que ya queda absolutamente tranquila y con el enemigo a muchas docenas de kilómetros alejados del Pilar. El Tebib Arrumi.

27 de marzo de 1938. Nueva España. Las fuerzas de Moscardó rebasaron Alcubierre y tomaron Usón, Lalueza, Lanaja y Monegrillo.

Se ha rebasado Alcubierre por el Sur en tres kilómetros. Estas fuerzas han cogido gran cantidad de prisioneros, cuatro carros blindados, un tractor, varios coches ligeros, una ambulancia y bastante armamento de varias clases.

La Guerra Civil en Sariñena


Con el levantamiento militar del 18 de julio de 1936, se crea de urgencia, esa misma noche, el Comité Local de Sariñena. Más de 300 sariñenenses, entre afiliados a partidos y sindicatos, salen a la calle a defender la república instando a la Guardia Civil a que se una al pueblo. El Capitán de la Guardia Civil, del puesto de Sariñena, respondió negativamente, erigiéndose como única autoridad. Durante los primeros días convivieron en una tensa calma. La Guerra Civil en Sariñena, retaguardia del frente de Los Monegros

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A la memoria de Arturo Morera Corull, gran investigador de la historia local de la Villa de Sariñena, por su excepcional trabajo sobre la guerra civil en la localidad y el aeródromo de aviación Alas Rojas: «La guerra del 36 en Sariñena». Sus diferentes artículos, de un total de ocho, fueron publicados en la revista Quio de Sariñena y Los Monegros entre los números 22 al 32, del 21 de marzo de 1992 a febrero de 1994. Sin duda, su trabajo constituye la base del presente trabajo y a quien con todo mi respeto y admiración dedico.  

Joaquín Ruiz Gaspar. Responsable del proyecto cultural Os Monegros.

Artículo enmarcado en la serie sobre la guerra civil en Sariñena

Los primeros días

El 18 de julio de 1936, tras los años convulsos, las noticias sobre la sublevación contra el gobierno van llegando a todos los rincones de España. En el café teatro Romea de Sariñena, sede de la UGT, se van agolpando vecinos para seguir las noticias de Radio Madrid. El Sariñenense Daniel Grustán Ballarín (Guerra, Exilio y Represión. Zaragoza, 2005) recoge como aquella misma noche, urgentemente, se constituyó el Comité Local de Guerra de Sariñena asumiendo el control e instando a entregar las armas al capitán de la guardia civil. Asimismo, las fuerzas de la guardia civil se habían acuartelado en pro del levantamiento militar y el capitán de la guardia civil Luis Fernández de la Vega, llega a declarar el Estado de Guerra en Sariñena (Relación nominal de investigados y expedientados de Sariñena). Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal (Todos los nombres) recogen como Luis Fernández de la Vega «Declaró el estado de guerra el 19 de julio, pero varios de sus subordinados desobedecieron y no solo secundaron a su jefe, sino que lo amenazaron si persistía en su actitud».

El mismo 19 de julio, según la declaración de Rosario Cabellud Viñuales, ya se realizaron las primeras detenciones de personas de derechas en Sariñena. Declaración recogida en la Causa General de Sariñena, en relación con la detención de su padre Teodoro Cabellud Blanco.

Es el 20 de julio cuando el capitán de la guardia civil abandona el puesto de Sariñena y sale hacia Monzón con parte de su destacamento. Aquella circunstancia fue aprovechada por los republicanos sariñenenses para tomar definitivamente las calles y desarmar las fuerzas restantes de la guardia civil; pasando a formar parte de la Guardia Nacional Republicana. Ese fue el caso de Julián Cambero Hernández, guardia civil que se puso al servicio del comité, además Julián había sido acusado por revelar el secreto de un telegrama que daba órdenes al capitán del puesto de Sariñena.

Aquellos hechos aparecen recogidos en las solicitudes de Informes Políticos-Sociales consultadas en el Archivo Municipal de Sariñena. Diferentes testimonios dan cuenta de lo ocurrido durante el desarme, es el caso del vecino Antonio Olivan Mir: «El desarme de la fuerza se hizo en tres puntos diferentes, o sea a dos parejas las desarmaron en la calle y al resto en la casa cuartel, siendo este último punto donde vio que Ignacio Biosca Salfe iba armado con un fusil tomando parte en dicho desarme, por ser el diciente vecino de dicho edificio y desde una ventana de su casa vio lo sucedido, manifestando también que no hubo ninguna víctima y que ocurrió el 19 o 20 de julio del 36.»

El capitán Luis Fernández de la Vega huyó junto al brigada Antonio Acín Jiménez y, según Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal (Todos los nombres) «Otros seis agentes que, procedentes de Castejón, Valfarta y Alcolea de Cinca, se sumaron a estos hacia Monzón». Aunque son varios los testimonios que afirman que desde Sariñena el capitán salió con varios de sus agentes. A continuación, algunos vecinos se organizaron para salir en coche en persecución del capitán de la guardia civil huido junto a sus 12 compañeros, según algunas fuentes: «Carrera, Vicente Millera, Fulgencio Esteban Oliván y Pedro Bornao tomaron un vehículo conducido por Millera para alcanzarlos». No obstante, antes los perseguidores dieron aviso a Monzón para que estuviesen prevenidos ante la llegada del capitán y sus hombres. Al final fueron detenidos en Monzón y el capitán Luis Fernández de la Vega fusilado el 6 de agosto en Barbastro (Relación nominal de investigados y expedientados de Sariñena). El brigada Antonio Acín Jiménez sobrevivió a aquel episodio y a la misma guerra.

Fulgencio Esteban Olivan declaró que, tras el alzamiento, «Se mantuvo el orden algunas horas, pero al salir el Capitán de la guardia civil para Monzón con algunos números, los elementos más destacados de izquierdas se lanzaron a la calle y la fuerza que había quedado de la guardia civil se unió al pueblo estableciéndose seguidamente turnos para hacer guardias en las entradas del pueblo y unos días más tarde se formó el comité» (Causa General). José Zamorano Cabellud testificó: «Que el Comandante del puesto de este pueblo declaró el día 18 del mismo mes y año el estado de guerra, por lo que no ocurrió nada nada anormal hasta el día 21 que salió el Capitán mencionado con algunos números hacía Monzón continuando el elemento civil haciendo guardias con el resto de la fuerza, pero según cree el declarante se recibieron órdenes de Cataluña y por elemento de las sindicales CNT, UGT y partidos de izquierdas se pidieron las armas a la guardia civil que les fueron entregadas sin oponer ninguna resistencia y una vez desarmados estos se procedió a la formación del Comité Revolucionario» (Causa General).

Efectivamente, una vez Sariñena en manos de los republicanos, se establecieron, en las diferentes entradas del pueblo y especialmente en las de Huesca y Zaragoza, controles al mandó del comité. «Los afiliados a los partidos y sindicalistas constituían más de trescientas personas dispuestas a defender la republica» (Daniel Grustán Ballarín. Guerra, Exilio y Represión. Zaragoza, 2005). También lo recoge Luis Buil Espada, en sus memorias, como las diferentes entradas al pueblo fueron cortadas con árboles y se mantuvieron guardias. También se cortó la comunicación telefónica con Huesca, con el objetivo de evitar que pudieran pedir auxilio, acción atribuida a Fermín Orquín Bardají, perteneciente al sindicato UGT. Además, en los documentos de responsabilidades políticas se cita a Francisco Cabellud Mazuque, quien, al parecer, «Llevó el revólver del Capitán de la Guardia Civil».

Un frente sin definir

Pronto llegaron noticias del futuro frente de Aragón: Unos falangistas de Zaragoza habían entrado en Alcubierre. Luis Buil fue uno de aquellos voluntarios sariñenenses que, en autobuses, partieron hacía Alcubierre para frenar al enemigo: A la altura de Lanaja nos escoltó un tal Breguer de guerra francés que venía de Barcelona y que pertenecía a la aviación que estaba con nosotros. Solamente podía tirar bombas con la mano pero daba moral. Ocupamos Alcubierre donde los falangistas habían fusilado a unos once obreros del canal en construcción. Lo hicieron en la fachada del ayuntamiento. De los fusilados encontramos en la carretera a uno herido pero vivo. Ese se salvó. En palabras de Luis: Algunos volvieron al pueblo y otros, armados, continuaron hacía Tardienta y Almudevar, donde se produjeron algunos combates y se logró estabilizar el frente. Estos sucesos se enmarcan dentro de «Las Batallas de Lanaja» que recogió Roberto Mateo Caballero en su publicación «Las Batallas de Lanaja». También para más información: Alcubierre, última parada camino primera línea de fuego.

Los sucesos de Lanaja ocurrieron el 25 de julio de 1936, un grupo de falangistas armados alcanzaron Lanaja donde la población civil salió a hacerles frente. Durante el enfrentamiento, los falangistas sufrieron dos muertos y tres heridos, retirándose a Alcubierre llevándose con ellos 11 prisioneros que fueron fusilados en el mismo pueblo de Alcubierre.

Demetrio Bodero, Antes del M.G.N. prestaba sus servicios como guardia civil en el puesto de esta villa, sin afiliación política, siendo su ideología derechista. Al iniciarse el… fue desarmado al igual que las demás fuerzas del puesto por las hordas marxistas, el informado se refugió en el campo de aviación rojo establecido en este término municipal donde presto el servicio de su clase hasta los últimos días de marzo de 1938, que fue liberado por las tropas nacionales y, incoado expediente de depuración, fue resuelto favorable y licenciado del sustituto por haber cumplido la edad reglamentaria. No intervino en hechos delictivos y se le considera adicto a la nueva España

Notas en las solicitudes de Informes Políticos–Sociales.

Detenciones y fusilamientos

Anteriormente a la llegada de milicias catalanas, fueron varios los individuos o grupos de ellos, de localidades cercanas, que acudían a zonas conflictivas, tal y como hemos visto con las batallas de Lanaja. En Sariñena, Arturo Morera relata como los primeros milicianos eran en su mayoría de la CNT, aunque iban mezclados con gentes de otras filiaciones, en especial los que pertenecían al POUM, «Llegaron a nuestra villa como «liberadores», creyendo que Sariñena estaba de parte del alzamiento militar» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Aquellas circunstancias iniciales, de ausencia o escasa autoridad local, la presencia de milicianos y elementos descontrolados llegados a Sariñena y la implicación de algunos sariñenenses permitió abusos y desmanes e incluso detenciones y asesinatos en la villa de Sariñena. Para Arturo Morera «No teniendo enemigos con quien enfrentarse, la principal preocupación de sus líderes fue la de aniquilar a todas las personas que pudieran ser consideradas como de derechas. La decidida intervención de gentes influyentes en nuestro pueblo evitó que aquellos exaltados milicianos perpetraran el fusilamiento de muchas personas acusadas de ser simpatizantes de los sublevados, Cesáreo Casabona explicó muy bien esta situación en su artículo publicado en el «QUIO» n.° 5 del año 1989, y yo abono su relato en todo cuanto tiene de verídico.»

Detenciones

Las primeras detenciones a personas ideológicamente de derechas, parece ser que ya se practicaron tras el estado de guerra, al día siguiente, el 19 de julio. En este sentido se manifestó Rosario Cabellud Viñuales, en relación con la detención de su padre Teodoro Cabellud Blanco, caminero de 54 años de edad: «Fue detenido por los milicianos en la puerta de su casa el 19 de julio de 1936, siendo conducido a la cárcel donde se encontraban ya otros detenidos y permaneciendo allí durante cuatro o cinco días, puesto en libertad, se le obligó a trabajar en el campo de aviación siendo asesinado en la retirada de los rojos, sabiendo solo que fue fusilado y su cadáver hallado en la calle Fatas» (Sariñena, la retirada). José Paraled Sarrate, Causa General, también se manifestó en la misma línea y al poco de formarse el Comité, en los primeros días tras del inició de la guerra, «Cuyos componentes realizaron seguidamente algunas detenciones, pero a los tres días fueron puestos en libertad».

Otras detenciones se produjeron en el mes de septiembre y prácticamente se enmarcarían en el conjunto de detenciones que se debieron llevar a cabo en aquellos primeros días: «En el mes de septiembre, por orden del Comité, el declarante detuvo a los hermanos Blasco-Mirallas, que a los dos días fueron puestos en libertad y en los primeros meses del alzamiento fueron detenidos siete personas entre los que se encontraba el teniente Coronel de Lastanosa sr. Cariello, los cuales después de estar unos días en la prisión de Sariñena fueron asesinados en el cementerio» (Declaración de Fulgencio Esteban Olivan, Causa General).

La misma Causa General de Sariñena (ES.28079.AHN//FC-CAUSA_GENERAL,1412,Exp.1) recoge aquellas detenciones practicadas en la localidad: «Fueron atormentados y torturados la mayoría de personas de orden, religiosas y cuyos ideales eran derechistas, además de saqueados y desvalijados sus edificios y propiedades, cosechas, negocios y existencias. Asimismo fueron destrozadas las dos iglesias de la localidad y capillas de los particulares, destrozados sus altares y robados cuantos objetos y alhajas existían, así como profanando los lugares sagrados.» 

Daniel Pinos, rescatando las vivencias de su padre Eusebio Pinos, relata cómo se incautaron los comercios del pueblo y detuvieron, por unos días, a Manuel Basols Salaber (posterior alcalde durante el franquismo), Ignacio Ballarín Segura, Benjamín Portera, Bernardo Guillen, Miguel Anoro Casañola y Victoriano Buisan, entre otras personalidades. Fueron puestos en libertad el 26 de agosto de 1936. Diversos testimonios enmarcan aquellas detenciones con un fin protector ante elementos descontrolados de milicias que hacían peligrar la vida de personas de derechas.

Relación de personas detenidas y encarceladas:

  • Bernardo Guillen Lasierra.
  • Bernardo Guillen Asín
  • Francisco Castanera Mirallas.
  • Antonio Gálligo Pérez.
  • Mariano Torres Guillen.
  • Ángel Pardo Novales.
  • Teresa Pardo Carbonell.
  • Marí Luz Pardo Carbonell.
  • Pilar Murlanch Agudo.
  • Joaquín Blasco Mirallas.
  • Mariano Blasco Mirallas.
  • Dolores Gabarre Subias.
  • Pilar Alvarez Anoro.
  • Bernardino Navarro Gallego.
  • Benjamín Portera Segura.
  • Miguel Anoro Pueyo.
  • Pascual Segura Baringo.
  • Ramón Abenoza Paul.
  • Victorián Buisan Izuel.
  • Manuel Basols Salaver.
  • Ignacio Ballarin Segura.
  • José Casabón Tisaire.
  • Manuel Gilaberte Corvinos.
  • Eduardo Colay.
  • Pedro Segura.
  • Y otros más cuyos nombres no se recuerda.

La cárcel

La cárcel de Sariñena se encontraba ubicada en el antiguo convento franciscano de la localidad sariñenense, la actual casa de la cultura en Plaza de Mezín. Joaquín Blasco Miralles, uno de aquellos «derechistas» encarcelados, después de la contienda, declaró: «Funcionó en esta villa una prisión oficial dependiente de la Dirección General de prisiones marxistas, funcionando en la antigua cárcel del partido.» 

Para Luis Buil Espada el comité se portó bien y mantuvo el orden. Hasta que «Empezaron a llegar miembros incontrolados de la parte de Barcelona que quisieron fusilar a unos detenidos que había en la cárcel, pero el comité puso una guardia alrededor de la misma con fusiles Mauser y tuvieron que desistir». Después, muchos presos fueron liberados «Los presos de la cárcel volvieron pronto a su casa incluido alguno que fue juzgado en Lérida (mi padre y otros fueron a declarar en su favor). Todos estaban vivos cuando volví de Francia. No todos se comportaron bien.»

De aquellos sucesos fueron investigados, entre otros, Jesús Penón Corvinos, huido a Francia, o Julio Casabona Gracia (Veterinario municipal) quién, según declaración de la alcaldía «Se distinguió en impedir toda clase de hechos inhumanos, conquistando su impopularidad por estos actos entre los medios rojos de la localidad. Parece ser que marchó exiliado a Francia.»

El sariñenense Julio Cesáreo Casabona Marías, hijo de Julio Casabona Gracia, recogió en «Sucesos que ocurrieron en Sariñena hace 54 años», revista Quio nº5, el momento en el que su padre se opuso a una columna de milicianos que pretendían fusilar a personas de derechas presas en la localidad. Entre otros miembros del comité, su padre Julio y su hermano Antonio se plantaron ante las milicias evitando que fuesen asesinadas. 

Tras la guerra, Julio y sus dos hijos Antonio y Julio Cesáreo sufrieron el exilio y la posterior deportación al campo de concentración nazi de Mauthausen. La familia Casabona consiguió sobrevivir al holocausto nazi. Julio Casabona Gracia y sus hijos Antonio y Julio.

Fusilados

El 28 de julio de 1936 fueron asesinados el sacerdote Eduardo Colay Biarge, a los 24 años de edad, el teniente coronel E.M. Bernardo Cariello Torrente, a los 65 años de edad, los señores Mariano Caballero, Arbeloa (comerciante), Oto, Rivera, Baile (Industrial), Desentre (Contable), Aguilar (Industrial), Cativiela (Agricultor) y tres personas de identidad desconocida. La Causa General de Huesca, Pieza Principal, Rama Separada nº 131 Sariñena dicta que Fueron fusilados por la canalla roja, la fecha indicada, en la carretera de Sariñena a la Estación del Ferrocarril, y después trasladados al Cementerio y quemados.

A Eduado Colay Biarge, en verdad coadjutor de Sariñena, recién ordenado sacerdote, se le instó en repetidas ocasiones la prohibición de celebrar oficios eclesiásticos. Aun así, celebró misa en una casa particular, por lo que fue detenido, encarcelado y ejecutado. Daniel Pinos data su encarcelación el 21 de julio y su ejecución el 28 del mismo mes. Al parecer, Eduardo Colay y Bernardo Cariello gritaron, antes de morir fusilados: ¡Viva Cristo Rey! (La fosa común del cementerio de Sariñena.). También estuvieron a punto de ejecutar al párroco Pedro Segura Gavín. Mosén Pedro se libró por la intervención del Molinero, aunque desafortunadamente, mosén Pedro no aguantó aquellos años convulsos, cayendo en coma y falleciendo el 6 de octubre de 1936.

“El cura, don Pedro, se quedó y estuvo bien cuidado así como la casera que era hermana suya. Este cura se había comportado siempre muy bien. A pesar de su edad se quitó una vez los pantalones en la iglesia para dárselo a un necesitado. El también era pobre; después de mucho tiempo murió de enfermedad pero nunca le faltó nada.”

Luis Buil Espada

Profanaciones, saqueos, quemas y otros desmanes

Todo apunta que fuerzas del POUM fueron responsables del saqueo de las tres iglesias de Sariñena y de las primeras detenciones, aunque a los pocos días fueron liberados. Las milicias del POUM sacaron de las dos iglesias y capillas privadas sariñenenses las imágenes y ornamentos a la calle y en carros fueron llevadas a la orilla del río Alcanadre donde les prendieron fuego. José Zamorano Cabellud, en su declaración, señala: «Después de haber sacado las imágenes y ornamentos sagrados a la calle ordenaron a los vecinos que con carro las llevasen al puente del río Alcanadre y en la orilla de dicho río les prendieron fuego y seguidamente se incautaron de los negocios del pueblo.» Los hechos los podemos enmarcar el 24 de julio de 1936 según el relato, mencionado anteriormente, de Manuel Brosed Brosed (Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal. Todos los nombres).

Daniel Pinós relata la quema del archivo en la plaza mayor: «Atizada por los miembros de la Federación Ibérica de las Juventudes Libertarias y ante la alegría de muchos sariñenenses». Además de los diferentes archivos se quemó todo lo relativo al registro de la Propiedad.

Franz Borkenau centra la quema de la iglesia días antes de su visita a Sariñena, junto a otros dos corresponsables, el 13 de agosto, «Donde les invitaron a visitar la plaza, donde unos días antes la iglesia había sido quemada. También había habido doce ejecuciones. Entre estas víctimas estaba el notario» (1936- 2011: 75 años de la crónica de la guerra civil en el Alto Aragón de Franz Borkenau. Virgilio Ibarz). «Todos los documentos de la notaría estaban siendo quemados en una gran hoguera en el centro de la plaza para que no quedase ninguna evidencia de los derechos de propiedad».

“Las llamas se alzan más allá del techo de la iglesia y los jóvenes anarquistas continúan trayendo más y más materias de casa del notario, echándolo a las llamas con gesto triunfal. Gran número de personas mira silenciosamente al fuego. No era, de ninguna manera, una destrucción como otra cualquiera de algunos documentos indeseables, sino un acto que revestía para sus participantes profunda significación, como símbolo de la liquidación del viejo orden económico” 

Borkenau, El reñidero español, pp 81-82.

La quema de documentos notariales, para Franz Borkenau, representaba la abolición de la propiedad, de alguna manera como paso previo a la colectivización: «El comité local, dirigido por anarquistas, había abolido los alquileres y expropiado cuatro grandes fincas junto con toda su maquinaria agrícola. la propiedad campesina, a excepción de aquella perteneciente a los ejecutados, no se había tocado, pero muchos de los documentos del notario debían de referirse a ella.»

Lo cierto es que tanto el juzgado como el registro civil se encontraban en el antiguo convento franciscano de Sariñena, en la entonces plaza Alvarado y actual plaza de la Constitución. La numerosa documentación fue quemada en la misma plaza por fuerzas republicanas.

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Hoguera, hecha por las fuerzas republicanas, con la quema de documentos de la notaría relativos a las propiedades rurales y asuntos financieros, para eliminar el viejo orden económico. «Ante el wsificio del juzgado y registro civil. Incendiadas las causas y demas documentos y requisitos» (Anotación en la parte de atrás de la fotografía) Sariñena, Frente de Aragón. Arxiu Nacional de Catalunya. Fondo Martí Bas i Blasi Referencia: ANC1-109-N-161.

El convento de las Hermanas Carmelitas de Sariñena también estuvo amenazado y en alguna ocasión peligró de ser asaltado por elementos descontrolados. Según testimonios, se evitó gracias a la actuación de varios vecinos. Finalmente las religiosas fueron respetadas (Expediente de responsabilidades políticas de Manuel Lacruz Espada. AHPHU_J_005622_002180). Luis Buil vio a las monjas carmelitas acudir, vestidas de paisano, llorando al ayuntamiento: «Desde la puerta escuché como los miembros del comité las tranquilizaban y les decían que las que quisieran quedarse allí no tenían nada que temer y que si querían irse a su casa les escoltarían».

Ante los diversos abusos y tropelías, el Comité Revolucionario de Sariñena se vio obligado a trasladar el problema al Cuartel General de la Columna Durruti en Bujaraloz. Al día siguiente, Buenaventura Durruti se personó en Sariñena, restableciendo de nuevo el orden y aprovechando la ocasión para celebrar un histórico discurso llamando a la movilización y a la disciplina en todos los frentes. Dicho discurso se produjo el 30 de julio de 1936, antes de la llegada de la Columna del POUM. Manuel Grossi en sus memorias (Cartas de Grossi, Sariñena Editorial), recoge como llegaron a Sariñena el 30 de julio de 1936, el mismo día que, a las cuatro de la tarde, Durruti se había presentado en Sariñena con un grupo de milicianos «Posiblemente de los duros de su columna» y pronunció «Desde el balcón de una casa sin que nadie se lo pensara» un «inflamable discurso contra el POUM. Pudo haber surgido un incidente lamentable de no haber sido por la compresión de los militantes del POUM».

En este sentido Arturo Morera cita un testimonio que se dio en el pleno extraordinario de sindicatos de CNT, celebrado en Bujaraloz el 6 de octubre de 1936, «… El compañero Hermes de Soli también da referencia del comportamiento de determinado sector de opinión que en una asamblea que había convocado el sindicato de Sariñena, irrumpieron en el local y la suspendieron. Explica la conducta que observaron los aviadores  que de acuerdo con los socialistas, realizan toda clase de tropelías a nuestros compañeros, habiendo llegado incluso a desarmarnos. Se acuerda hacer gestiones para evitar todos estos excesos y caso de no rectificar, proceder entonces con energía…».

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Milicia popular: Diario del 5º Regimiento de Milicias Populares: Año I Número 40 – 1936 septiembre 10.

Luis Buil Espada sitúa el discurso de Durruti meses más tarde, siempre que no hubiese sido otro, «En mi pueblo estuvo el Batallón de la muerte del POUM, con uniforme vistoso y puñal al cinto. Meses comiéndose las reses  y de todo completamente gratis pero sin ir al frente.  El pueblo protestó y Durruti vino de Bujaraloz con dos escoltas. Les habló en la plaza del ayuntamiento y les dijo que fueran al frente o volvería con su División para echarles. Estaban todos en la plaza con sus fusiles, pero no dijeron nada y desaparecieron del pueblo. Nunca les vi en el frente.»

Arturo Morera recoge como en los primeros días del mes de agosto de 1936, la Generalitat catalana envió a tierras aragonesas «Al ya entonces célebre escultor Apeles Fenosa, para que intentara salva guardar la riqueza artística de las iglesias de nuestros pueblos. El artista recibió instrucciones, en el sentido de que las obras recuperadas serían restauradas y conservadas hasta su devolución después de acabada la guerra.»

El escultor Fenosa, pudo salvar de su destrucción, unas tablas valiosas de las iglesias de Robres y Lanaja. Pero no consiguió salvar el magnífico retablo del altar mayor de la iglesia de Pallaruelo, que era una obra del siglo XV. Lo encontró desmontado y almacenado al aire libre y no pudo convencer a los hombres del Comité para que se lo entregaran, o de que al menos, lo pusieran bajo cubierto, para preservarlo de la lluvia y del sol. Apeles Fenosa, en un artículo publicado en el diario «Treball», lo explica con un sentimiento de amargura. Ofreció a los del Comité local un maestro y una biblioteca, pero ellos se negaron a entregar el gran retablo, si no era a cambio de recibir una camioneta. Como el escultor no disponía de tal vehículo, en Pallaruelo se quedó el retablo, bajo la lluvia y el sol, esperando ser convertido en leña para el invierno. ¿Cuántos millones valía?, se preguntaba desesperado Apeles Fenosa, cuando tuvo que marchar de Pallaruelo acusado de «fascista».

Arturo Morera Corull. La guerra del 36 en Sariñena.

Las milicias

Es el 21 de julio de 1936, con la creación del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña, cuando se comenzaron a formar y organizar numerosas columnas que acabaron partieron, principalmente, al frente aragonés. El objetivo de las milicias catalanas era avanzar hacía Zaragoza y Huesca capital.

El 25 de julio de 1936 llega a Sariñena la Columna miliciana del PSUC del Barrio-Trueba, 3.000 milicianos y tres baterías de artillería a mando de su jefe Manuel Trueba Mirones; luego conocida como Columna de Carlos Marx. «Una nueva columna de 1.500 hombres organizada por el PSUC, al mando del dirigente José del Barrio, que incluía a la Centuria alemana Thälman, la primera unidad extranjera que intervino en España, se dirigió a Sariñena y a la Sierra de Alcubierre y quedó incorporada a la de Durruti» (Diario de un miliciano). La columna pasó dirección a Grañen a través de un convoy de tren blindado donde llegaron el mismo día 25 de julio.

La ocupación de Sariñena

De Sariñena comunican que aquella población que se encontraba en poder de los rebeldes, a última hora de la tarde ha tenido que rendirse a las fuerzas leales de la columna catalana. Parece que esta columna no se propone avanzar más en el día y que por no pernoctar en Sariñena, se continuará hoy con el avance.

Han salido de Lérida numerosos milicianos antifascistas. Parece que han tomado contacto con las fuerzas leales que están en Sariñena.

  La Humanitat: Any 5, núm. 1378 (26 jul. 1936).

Mientras, el 30 de julio llega a Sariñena la Columna del POUM, con 2.800 milicianos, comandada por Manuel Grossi y Jordi Arquer (Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial). La columna había salido de Barcelona el 24 de julio y Gonzalo Berguer recoge, como el día 29, la columna «Va a avanzar sobre Berbegal y Sariñena. A Sariñena la columna finalizaba la formación de las secciones auxiliares. Cuerpo de tren*, intendencia, control, pagaduría, transmisiones y servicios sanitarios se ponían en funcionamiento» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). En sus cartas, el líder revolucionario Manuel Grossi relata cómo llegaron al atardecer, el mismo día 30 de julio en que Durruti pronunció su discurso «Inflamable» contra el POUM. Grossi, a su llegada, también pronunció su propio discurso «Desde una de las dependencias del Ayuntamiento, enalteciendo la verdad del ser del POUM».

* El Cuerpo de Tren fue una unidad militar creada por la Ley de 12 de Septiembre de 1932 y organizada como servicio por la Disposición de 25 de Marzo de 1933. El cuerpo de tren tuvo por misión la ejecución, por vías ordinarias, de todos los transportes de tropas, ganado y material que afectaba a los movimientos importantes del Ejército que no podían efectuar las distintas unidades y servicios con sus elementos propios. El Cuerpo de tren se disolvió por la Ley de 12 de Agosto de 1940, pasando sus jefes y oficiales a sus cuerpos de procedencia. (Fundación Anastasio de Gracia). 

No obstante, José Paraled Sarrate, en su declaración en la Causa General de Sariñena manifiesta que las fuerzas del POUM llegaron el día 23: «Que sobre el día veintitrés del citado mes y año llegaron fuerzas del POUM, las cuales profanaron las tres iglesias de la localidad». También José Zamorano Cabellud «El Vicien» señala el día 23: «Que el día 23 del mismo mes llegaron unos camiones del POUM los cuales rápidamente empezaron por profanar las tres iglesias» (Causa General).

En este sentido, la semblanza del robresino Manuel Brosed Brosed (Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal, Todos los nombres) relata como el 23 de julio, junto a otros vecinos de Robres, acudió a Sariñena a recibir las nuevas tropas que llegaban al día siguiente:  “El 23 de julio de 1936 -Manuel ya estaba afiliado a la CNT-, Sí mal no recuerda y estando las tropas nacionales dominando los pueblos de Alcubierre y Grañen, marchó a Sariñena en compañía de Francisco Brosed, Joaquín Brosed, Alejandro Becana y Antonio Laporta todos capitoneados por este, para recibir a las milicias rojas que llegaron al día siguiente, yendo los nombrados a la cabeza y seguidamente procedieron a la destrucción de la iglesia parroquial quemando todos los santos e imágenes”.

De acuerdo a una carta de un miliciano de iniciales J. G. del POUM, redactada en Sariñena el 30 de julio de 1936 y publicada en La Batalla: Número 3, del 5 de agosto de 1936, la columna partió de la estación del Norte de Barcelona el sábado 25 de julio,  alcanzando Lérida donde se les dio comida y unas horas de descanso. A las siete de la tarde se les unió artillería y en camiones marcharon dirección Zaragoza “La columna continuó adelante hasta Monzón, donde tuvimos que volver a hacer alto, pues estaban juzgando a 18 fascistas”. Al cabo de dos horas llegaron a Barbastro “donde hicimos gasolina y partimos inmediatamente hacía el frente, llegando a las doce a Sariñena donde cenamos y dormimos. Aquí se nos dio un día de descanso y el lunes por la tarde, a los milicianos de la cuarta bandera se nos confió la misión de ir a Alcubierre”. En la misma carta, el miliciano da cuenta de los primeros enfrentamientos en Alcubierre, por lo que podemos suponer que el 25 de julio milicias del POUM ya se encontraban en la localidad de Sariñena.

Todo apunta a que avanzadas del POUM llegasen mucho antes que el grueso de la columna, al menos de la parte oficial al mando de Manuel Grossi y Jordi Arquer. En este mismo sentido se manifiesta Gonzalo Berguer «Es mas que probable que hubiesen elementos avanzados e incluso pequeñas unidades procedentes de Lleida o provincia». Así, en el periódico «Treball: Diari dels Treballadors de la Ciutat i del Camp: Any I Número 8» en su edición del 30 de julio de 1936 aparece todo un reportaje sobre el avance de la columna del POUM sobre Sariñena el 28 de julio:

«Con las columnas que van liberar Aragón

Sariñena, 28. Hoy hemos visitado con el camarada Comorera, su compañía y otras compañías, otra parte del frente. Hemos estado en Sariñena, con la columna del POUM y hemos recorrido todo un país donde aún campan fascistas, hasta Grañen, donde se han instalado con gran audacia y perfectamente situada, la columna de la UGT y el Partido Socialista Unificado que avanza entre Tardienta y Grañen.

No hemos sufrido ningún incidente y por la tarde todos los aminos estaban completamente cubiertos por los avances y guardias de las columnas, que van estrechando el cerco de Zaragoza y acumulando material de…

Vamos sabiendo de los horrores fascistas. En Lanaja, muy cerca, fueron quemados vivos ocho compañeros del pueblo dentro de la iglesia. Cuando las tropas obreras llegaron, encontraron los carnets de la UGT  y del Partido Comunista al lado de los cadáveres. Es la inquisición que rebrota, con todos los excesos crueles de las guerras carlistas.»

La columna del POUM instaló en Sariñena su Cuartel General hasta consolidar sus posiciones en el frente. Lo cierto es que la columna del POUM estuvo durante un tiempo en Sariñena  «Los del POUM continúan en Sariñena a decenas de kilómetros del frente, ¿Por qué no avanzamos? se preguntaban los milicianos». La milicia del POUM tuvo que acatar las ordenes del coronel Villalba «Del Barrio— si bien por causas diferentes, ¿no podía tener nuestra columna razones tácticas para estar unos días parados en Sariñena? El Comité Militar de nuestra columna pidió repetidas veces al coronel Villalba que nos dejara avanzar, cosa que nos lo prohibió terminantemente por estas razones tácticas que obligaron la, columna a Del Barrio a abandonar Almudévar, pueblo al que fueron sin que nadie les obligara y desobedeciendo órdenes superiores.» (La Batalla: Número 13 _ 16/08/1936). A tenor de otras informaciones, mientras miembros del POUM hacían incursiones hasta Perdiguera «Hemos tenido la ocasión de hablar con el camarada Piquer, que junto con los camaradas Grossi y Arquer de la segunda columna que ópera en Sariñena. El grueso de la Columna continúa en Sariñena (La Batalla: Número 13 _ 16/08/1936).

El Cuartel General se instaló en casa «Frechinacha», en la plaza del ayuntamiento. Erróneamente, una publicación de La Batalla: Número 6 del 08 de agosto de 1936, lo sitúa en el ayuntamiento de la villa. «La otra columna, la de Arquer, siguió idéntico camino hasta Monzón dirigiéndose desde aquí a Sariñena donde estableció se convirtiendo esta bonita población oscense en su Cuartel General». (La Batalla: Número 88 _ 12/11/1936()

Cuartel General POUM Sariñena La Batalla 6

Cuartel General del POUM en Sariñena. La bandera del POUM flamea a los cuatro vientos sobre el tejado del Ayuntamiento de Sariñena (Exclusiva para LA BATALLA).

30 de julio

Nuestras fuerzas avanzan en estas regiones de Zaragoza, en un frente amplio de combate. Desde Bujaraloz, en el sur, donde se encuentra la columna de Pérez Farrás-Durruti, hasta Labarta y Aguas, al NO de Barbastro, en la provincia de Huesca.

La columna die Arquer-Grossi, que hace unos días tiene el Cuartel general en Sariñena, avanza hacia Zaragoza.

Tiene avanzadas en Lanaja y Alcubierre, donde también hay milicianos de Barbastro. Allí se encuentra nuestro valiente compañero Sabadell con unos treinta valerosos compañeros del POUM.

La Batalla: Número 1 _ 02/08/1936.

Sariñena

Entre altozanos y cabezos, a trechos elevada sobre el declive de las faldas de éstos, se levanta la histórica villa de Sariñena.

Amplias huertas únense a corralones de ganado, constituyendo así toda la riqueza de esta villa.

Sariñena, por el lado de oeste ve cruzado su término por el curso bastante caudaloso del río Alcanadre.

La vida en la población es todo lo tranquila que puede ser en una de estas villas aragonesas de la provincia de Huesca, cuya sencillez de costumbres y ruda franqueza son proverbiales. De noche, entre sus calles empedradas y algo en cuesta, entre corrales y paredones, luce la luna argentada cuya luz quebrándose en las esquinas hiere sombras cual puñales. De día, un fuerte sol hace arder el agua del río, la laguna y las piedras, y cuando después de comer se sestea, parece Sariñena moza encantada.

La Batalla: Número 1 _ 02/08/1936.

Arquer, Piquer y otros milicianos del POUM en el balcón del cuartel general de Sariñena

Arquer, Piquer y otros milicianos del POUM en el balcón del cuartel general de Sariñena (Exclusiva para La Batalla). La Batalla: Número 7 _ 09/08/1936. Realmente es el Hotel Anoro, ocupado por la UGT y altos mandos. 

ESCENAS DE LA VIDA DE LAS MILICIAS

Sariñena es el Campamento, o como tal, de las Milicias del Partido Obrero de Unificación Marxista. Nuestra columna con sus diez banderas, alegra el corazón de la pacífica villa hoy erigida en nuestro Cuartel General.

Es una nota en extremo pintoresca, el ver camiones, autos, ametralladoras y milicias junto a estas casas, muchas de ellas del «Renacimiento» o del «Barroco». Nuestros camaradas, con sus sombreros de fieltro, tela, paja o los cas[1]cos, constituyen una abigarrada nota de color que desentonando con el fondo y marco que forma el caserío contrasta en fuerte luz.

La plaza principal del pueblo, no muy trada, ha avanzado camino de una segrande y sombreada de acacias tiene salpicado completamente, uno de sus lados al Ayuntamiento. En esta plaza don de los Milicianos damos nuestra mayor impresión de vida cuartelera. Cuando no un camión, nunca falta un auto  pintado de grandes letreros que dicen: «Gobernación»; o bien, «Médico»; P.O.U.M. quizás «Frente Popular-Prensa»; junto a ellos forman grupos nuestros soldados que comentan en voz alta diversas incidencias de la campaña. A la alegría y el ruido sucédese el más profundo silencio cada vez que la radio grita atención y nuestro comandante general, el compañero Piquer, habla por radio. Otras veces hablan los camaradas Arquer o Grossi. Esta estación de radio tiene el bien de hacernos creer que estamos en Barcelona y demuestra la ingenuidad de muchos de nuestros compañeros que aplauden entusiasmados al terminar las órdenes o los discursos.

La gracia y simpatía pasan del “miliciano compañera”, alguna de las cuales son muy guapas, al andaluz que figura en nuestras banderas, al americano del sur, o al extranjero. Nuestro ejército tiene este bien; cumple el programa de universalización marxista y así en él pueden verse médicos rumanos, italianos de profesiones liberales, obreros alemanes, empleados franceses y multitud de obreros de todas las regiones españolas y sud-americanas con otros obreros intelectuales o gentes de profesiones libres.

Todo es simpatía y amor en la casa del proletariado y sobre nosotros parece campear una divisa que diga: «No perdáis jamás la esperanza», al contrario de lo que sucede a nuestros enemigos que llevan como leyenda en sus luchas, el; «-Dejad toda esperanza», del Dante.

UNA NOTA DE DOLOR

Una nota de dolor

Hemos pasado por el disgusto de que un camarada nuestro, Victoriano López, de las Milicias antifascistas de Sariñena, manejando el fusil se le escapase el tiro, resultando muerto. El hecho ha producido mucho disgustó en la población.

La Batalla: Número 2 _ 04/08/1936.

Milicianos POUM Sariñena La Batalla 4

La plaza de Sariñena, cuartel general de nuestras columnas, ocupada por las milicias del POUM. (Exclusiva para LA BATALLA). Plaza del ayuntamiento de Sariñena. 

En Sariñena, Los milicianos catalanes hacen prisioneros dos mil soldados enemigos.

Estos se aprestan a ponerse a la vanguardia de las columnas de milicianos para el asalto de Zaragoza.

A la una del mediodía el consejero de Defensa de la Gereralidad, teniente coronel Sandino, desde el campo de Sariñena comunicó al honorable Presidente de la Generalidad que nuestras fuerzas han copado una columna de facciosos compuesta de más de dos mil hombres que se han sumado a nuestras líneas, comprometiéndose a luchar en vanguardia en la toma de Zaragoza.

Dicen que en Zaragoza se ha engañado a los soldados que .no esperan más que nuestra llegada para enfrentarse al enemigo.

Entre todas las. fuerzas leales reina gran entusiasmo por esta victoria, que tendrá una gran repercusión en la moral de los facciosos.

La Batalla: Número 4 _ 06/08/1936.

Milicianos hacia el frente

Ayer tarde, a las seis, salió hacia Lérida y Sariñena una pequeña columna compuesta por unos ciento veinte milicianos que van a incorporarse a las milicias que luchan en el frente de Aragón.

La Batalla: Número 4 _ 06/08/1936.

Un aviso telefónico del camarada Masggrau, de la caballería del POUM en Sariñena nos comunica la llegada a Barcelona de siete compañeros de dos pueblos de Zaragoza, actualmente en poder de los fascistas.

La Batalla: Número 37 _ 13/09/1936.

La Columna Alas Rojas, comandada por el Capitán Alfonso de los Reyes González, partió de Barcelona el 28 de julio de 1936. Llamadas Milicias Antifascistas de Aviación, estuvo formada por un contingente de voluntarios adscritos principalmente al PSUC. Fue una columna compuesta por cuatro centurias que se estableció en Sariñena «Donde comenzó a funcionar un aeródromo por la 3ª Escuadra Republicana». El aeródromo de Sariñena se instaló el 2 de agosto de 1936 y a, partir del 3 de agosto, «recibió una importante de contingentes, durante todo el mes» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). La instalación del aeródromo de Sariñena, llamado de «Alas Rojas», llegó a desempeñar un evidente protagonismo en el desarrollo de las operaciones militares y también en la vida cotidiana de las gentes de nuestra villa (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

  • El día 2 de agosto de 1936 los periódicos de Barcelona señalan la existencia de cinco columnas cuyo objetivo principal era la conquista de la ciudad de Zaragoza.
  • La primera columna, llamada «Carlos Marx», con gente del PSUC y de la UGT, llegó a situarse en la línea de Grañén-Tardienta-Almudévar y estaba mandada por el socialista José del Barrio y el comunista Luis Trueba.
  • La segunda columna, conocida como «Lenin», agrupaba a gentes del POUM (comunistas disidentes), estaba al mando de los dirigentes Arquer, Grossi y Piquete, y se hallaba instalada en Sariñena y sus alrededores.
  • La tercera reunía a los anarco-sindicalistas de la CNT y estaba operando en la zona de Bujaraloz al mando de Durruti, con el asesoramiento militar del comandante Pérez Farrás.
  • La cuarta columna operaba en Siétamo, al mando del capitán Medrano, y la última se situaba en Caspe y estaba mandada por García Miranda y el capitán Zamora.

Arturo Morera Corull.

Una anécdota de Sariñena

Un miliciano granadino, en la cocina, hace elogios de Cataluña, con su gracia peculiar, todo discutiendo con diversos compañeros no catalanes. De repente dice seriamente a un compañero aragonés:

-Zi no me hablas er catalán no t´entiendo!.

Risotada general.

 Treball: Diari dels Treballadors de la Ciutat i del Camp: Any I Número 22 – 1936 agosto 15.

Este pequeño pueblo era un feudo del POUM; sus milicias estaban organizadas siguiendo el modelo clásico de todos los ejércitos del mundo: la jerarquía reinaba sin discusión… Una vez en el Cuartel General, me dirigí al que estaba de plantón, el cual me envió al cabo, éste al sargento y así sucesivamente  hasta el capitán que me hizo pasar a una gran sala diciéndome que esperara.

Antoine Giménez.
Del amor, la guerra y la revolución.

Al sector de Sariñena. Ha llegado la columna “Los Aguiluchos”

Ha llegado, a este sector, sin novedad, la columna “Los Aguiluchos”, organizada y dirigida por nuestro camarada J. García Oliver.  

La Publicitat: (30 Agost 1936).

Los Aguiluchos en Sariñena

La Batalla: Número 25 _ 30/08/1936.

Ana María Martínez Sagi “Escenas de la campaña por tierras de Aragón”.

Ana María Martínez Sagi (Barcelona, 16 de febrero de 1907 – Sampedor, Barcelona, 2 de enero de 2000) fue una poetisa, sindicalista, periodista, feminista y atleta (https://datos.bne.es/). Una figura excepcional recogida por Juan Manuel de Prada en su novela Las esquinas del aire y La voz sola, una antología de sus trabajos más desconocidos y biografía  ‘El derecho a soñar: Vida y obra de Ana María Martínez Sagi’ (2022).

Ana María pasó por Sariñena, publicando sus impresiones en La Noche del 5 de agosto de 1936. Texto recogido en Dones que surten del paper. Periodistes catalanes que expliquen un país: 15 (Lo Plançó) Tapa blanda – 27 noviembre 2018. Edición en Catalán  de Elena Yeste Piquer (Colaborador), Francesc Canosa Farran (Colaborador).

Un texto magnifico con un final poético «El río Alcanadre, es una sierpe de plata, bajo las altas estrellas».

La Noche, 5 de agosto

En Sariñena —polvo, calor, moscas, casas con viejos soportales, calles empinadas y sucias— están las columnas del POUM. Jorge Arquer, Piquer, Viscarri y Grossi, van a la cabeza de las fuerzas que, perfectamente equipadas y disciplinadas, luchan contra los fascistas.

Una casa particular, la mejor sin duda del pueblo, se ha habilitado para hospital. Allí se encuentran atendidos perfectamente ocho o diez heridos, y algunos enfermos; estos en su mayoría sufren de acolitis (Colitis) aguda, debido al agua insalubre de aquellos pueblos de la provincia de Huesca. También se encuentra allí un muchacho que en unión de otros siete, fusilaron los fascistas en La Naga (Lanaja).

—Tú sí que con razón puedes asegurar que has vuelto a nacer —le digo.

—¡Figúrese! Nos mandaron andar diez pasos y ordenaron que nos quedáramos junto al edificio del ayuntamiento. ¡Ya sabíamos lo que nos esperaba! Efectivamente, una descarga cerrada y los siete muchachos caíamos al suelo. A mí me hirieron en el brazo, pero me guardé muy bien de moverme. Nos dieron a todos por muertos y salieron huyendo. Cuando juzgué que todo peligro había pasado, me incorporé, ¡y aquí me tiene usted!

 —¡Bravo muchacho! ¡Que te mejores pronto y que continúe protegiéndote tu buena estrella!

Sariñena: tolvaneras de polvo, viento huracanado a todas horas. De día, calor insufrible; frío vivo, en la noche. Los muchachos del POUM —barbas de ocho días, «pintas» de guerreros salvajes— se portan como lo que son: como unos valientes. Obedecen a sus jefes como un solo hombre. En un puesto de observación, cuatro muchachos aguantaron por espacio de doce horas, un fuego nutrido de artillería. Se defendieron heroicamente sin abandonar un minuto la guardia encomendada. En otro pueblo de provincia, los campesinos, con las navajas de esquilar el ganado, coparon a la Guardia Civil, que, perfectamente armada, se había hecho fuerte en el cuartel.

Ceno en la mesa de los oficiales. Arquer —pálido, pequeñito— la preside. Este muchacho, de una cultura vastísima y un espíritu revolucionario auténtico, junto con el comandante Piquer, son el alma de la organización política de las columnas que operan en este frente: Grossi, autor del libro La insurrección en Asturias, es el brazo ejecutor, el hombre de acción al que siguen las milicias obreras con una fe ciega y un entusiasmo sin límites.

Cambiamos impresiones sobre el futuro plan de operaciones de las columnas. Grossi, con los hombres de la primera y segunda bandera, se encuentra ya en Grañén, aguardando instrucciones. Expongo al comandante mis deseos de trasladarme a las avanzadas.

—Aquello ofrece aún peligro. Tropas fascistas y milicianos insurrectos, andan huyendo por los montes ante el avance de nuestras columnas y tirotean a cuantos cruzan por las carreteras. No obstante, si tiene usted interés en ir, haré que la acompañen dos hombres armados, y saldrá en el coche con mi chofer, muchacho que conoce bien el camino, conductor seguro que sabe correr como un relámpago, cuando las ametralladoras de las avionetas enemigas se empeñan en convertir el coche en blanco de acción… ;A qué hora desearía, usted salir?

—A las nueve de la mañana, si es posible.

—¿Tiene usted buena puntería? —me pregunta sonriendo.

 —Cuando era niña, con la honda, rompía todos los faroles del pueblo, a donde solíamos ir a veranear. No me he ejercitado más, desde entonces —respondo.

 —Bueno. De todos modos, le extenderé una licencia de uso de armas y haré que le entreguen municiones y una winchester.

—Muy agradecida, comandante.

Me retiro temprano a descansar. Gracias a la amabilidad de un oficial, dispongo de una nueva habitación en el hotel donde se hospeda la oficialidad del POUM. Este tiene ya otro aspecto. Es más confortable y más limpio. Abro el balcón y enciendo un cigarrillo. La carretera, las copas de las acacias y el campo llano, que se extiende hasta la línea del horizonte, están blancos de luna. El río Alcanadre, es una sierpe de plata, bajo las altas estrellas.

Apuntes sobre las milicias

Para Arturo Morera, «La guerra del 36 en Sariñena», las milicias Llegaron a nuestra villa como «liberadores», creyendo que Sariñena estaba de parte del alzamiento militar. Según el historiador sariñenense, el signo liberador de las primeras columnas de milicianos, que llegaron a Sariñena, tiene algunos valedores como Dolores Ibárruri. La «Pasionaria» señala,  en su obra «Guerra y Revolución en España», como una columna, después de llegar a Barbastro, «continuó avanzando y, tras denotar a la Guardia Civil sublevada en esa zona, liberó Sariñena, Grañén y Tardienta».

Morera continúa con una noticia fechada en Madrid el día 27 de julio y publicada en el periódico «La Veu de Catalunya«, decía que la primera columna había entrado en Pina de Ebro y que la segunda había tomado Sariñena. Todavía el 19 de septiembre, el periódico «El Diluvio» de Barcelona publicaba un artículo de su corresponsal en el que relataba su visita al hospital de Barbastro, en donde permanecía herida de guerra Remedios Carballo, miliciana de la columna del POUM. Entre otras cosas, decía de ella: «la brava miliciana que tanto se destacó en la toma de Sariñena y en el asalto a Perdiguera y en Tierz». La verdad que todo el mundo conoce es que nuestra villa fue invadida (y no liberada) por las columna de milicianos, quienes no pudieron cometer demasiadas tropelías ante la decidida actitud de muchos hombres que actuaron con dignidad  y valentía en defensa de su pueblo.»

El escritor Hugh Thomas, en su obra «La guerra civil española», comenta Arturo Morera Corull, «Se atreve a decir que en Sariñena, los primeros días de la guerra, se había perdonado la vida a algunos miembros de la clase media, incluido el veterinario. Su aseveración se basa sin duda alguna en el testimonio del escritor inglés Franz Borkenau, quien estuvo tres días en Sariñena y publicó sus impresiones en un libro titulado El Reñidero Español».

Efectivamente, Franz Borkenau estuvo los días 12 al 14 de agosto de 1936 en Sariñena y publicó sus impresiones en un libro titulado «El Reñidero Español». Arturo Morera mantiene que su visión es, sin duda, desenfocada por el ambiente que había vivido en otros lugares en las fechas precedentes:

«El escritor sólo veía anarquistas por todas partes: dice que había mantenido una charla con el jefe del comité local, panadero anarquista. y junto a él fue hasta  la plaza, donde unos días antes la iglesia había sido quemada, y en donde los jóvenes anarquistas estaban ahora trayendo más y más material procedente de la casa del notario (léase registrador), echándolo a las llamas con gesto triunfal, en una inmensa hoguera en el centro de la plaza. Así se destruían todos los documentos de los derechos de la propiedad, como símbolo de la liquidación del vejo orden económico.

Al día siguiente, Borkenau acompañó a dos jóvenes anarquistas, quienes le llevaron a una era en donde unas máquinas trilladoras estaban funcionando al servicio de la colectividad campesina, aunque se dio cuenta de que había otras gentes que preferían trillar al modo tradicional, eludiendo el  trabajo en colectividad. El escritor interpretó que las relaciones entre el pueblo anarquista y la milicia del POUM, que se encontraba cerca, estaban lejos de ser buenas, y reconocía que «el núcleo anarquista era lo suficientemente inteligente como para no intentar forzar a la colectivización a la parte renuente del pueblo». Pero Borkenau dice algunas barbaridades, como la de afirmar que los Intelectuales de Sariñena, a la pesar de ser nacionalistas catalanes (sic), colaboraban de todo corazón con los anarquistas. Sin duda, el hombre no estaba muy instruido en geografía y el lenguaje de los milicianos catalanes le debió proporcionar confusión y la indujo a no saber en qué territorio estaba.

Al escritor inglés le sorprendieron muchísimo las buenas relaciones entre los labriegos (supuestamente anarquistas) y los que él llama intelectuales. Y es curioso el modo en que describe tal situación: «En las calles de Sariñena tropecé, por primera vez en muchos días, con un hombre vestido con ropas burguesas; estaba rodeado por gran número de campesinos y hablaba con ellos de manera animada y amistosa. Parecía un alto oficial catalán y resultó ser el cirujano veterinario del pueblo. Era evidente que no temía mantener su vieja apariencia burguesa. Conocí poco después a su hija, enfermera en el hospital improvisado por el pueblo para albergar la milicia. Servía, eso era evidente, de modo más competente las enfermeras voluntarias de Barcelona.

Realmente, el testimonio de Franz Borkenan, muy deformado, sirve sólo a medias para conocer  parte de la realidad de Sariñena en aquellos días azarosos de julio y agosto de 1936.»

En definitiva, tal y como apunta Arturo Morera «La práctica totalidad de los componentes de las columnas «Carlos Marx”  y «Lenin» pasaron por Sariñena antes de dirigirse a sus posiciones más avanzadas». A estas hay que añadir las llamadas Milicias Antifascistas de Aviación, adscritas al PSUC, que llegaron el 2 de agosto con la instalación del aeródromo de «Alas Rojas» y la llegada, el 30 de agosto de 1936, de la nueva columna de la CNT «Los Aguiluchos». Sobre aquello, Arturo Morera recoge la siguiente noticia «Los periódicos barceloneses de la época reflejaron la llegada a Sariñena de la columna de la CNT, organizada y dirigida por el líder anarco-sindicalista Juan García Oliver. Se relata que la llegada a Sariñena de «Los Aguiluchos» y de su líder produjo gran entusiasmo y también sorpresa por la perfecta disciplina y organización de la columna«.

El pueblecito nos acoge y nos envuelve en la oscuridad de sus calles. Este pueblecito de calles polvorientas, estrechas, de casas pardas y antiguas, es un hervidero de milicianos que van y vienen al frente de combate. Nubes de polvo levantan los camiones que conducen víveres al frente y otros que transportan soldados de la libertad.     

A las seis de la mañana la claridad de los gallos mañaneros me ponen en acción y mi primera visita es al hospital de sangre en el que se encuentran diez heridos; y al ver hasta sesenta camas vacías, me hace presumir, como compruebo más tarde, que las bajas en nuestro frente de Huesca son pocas, para la importancia que tiene los distintos frentes que sitian en rodeo a dicha ciudad y los combates estratégicos que a diario suceden. 

Frente de Huesca, Los aguiluchos de la F.A.I., impacientes por entrar en Huesca.

Por Hermes, Sariñena, 7 de septiembre de 1936. 

Solidaridad Obrera, nº 1376

Dos hombres y dos mujeres retornados del frente por indeseables: Procedentes del frente de Sariñena, van a ser reportados por indeseables dos mujeres y dos hombres, los cales quedaran detenidos en los calabozos en la Comisaría General de Orden Público.

Diari de Barcelona, 27 de octubre de 1936.

Tal fue la presencia de milicias catalanas, que Arturo Morera narra como en Sariñena la lengua más hablada era el catalán. Incluso en una ocasión, unos policías catalanes organizaron una conmemoración del levantamiento catalán del 6 de octubre. La noticia de «El Diluvio» recogida por Arturo Morera dice así: «Han inaugurado una calle en Sariñena con el nombre de Jaume Compte y la plaza del 6 de octubre. El pueblo, con entusiasmo fervoroso, ha acudido en masa a este acto y la banda de música del cuerpo de Aviación militar ha interpretado La Internacional y Els Segadors que fueron ovacionados por el público. Los citados compañeros han repartido entre la población y los milicianos más de mil banderas catalanas…».

El 6 de octubre al sector sur del frente Aragones

Alcañiz, 7. · 1.35 mañana (De nuestro enviado especial al frente de guerra sur aragonés, Lluís Capde- vila.)

En Sariñena, por tal de conmemorar la jornada del 6 de octubre, ha estado dada una calle de esta localidad el nombre del malogrado Jaume Compte. També se ha descubierto una placa con el nombre de Seis de octubre que es dirá, de ahora para adelante, una de aquellas plazas.

Al acto ha asistido el consejero del primer distrito de Barcelona, señor Delmir Ibáñez, el cual se encuentra accidentalmente a Sietamo. El citado consejero reparte por el frente banderas catalanas. Con él se encontraba Baldomer Suis, del cuerpo administrativo. Ambos dirigieron palabras apropiadas a la jornada y organizaron una manifestación que fue de un éxito estrepitoso.

A la comisaria de Sariñena fueron colocadas banderas catalanes y republicanas, y al pasar el público por delante de ellas desfilaba la manifestación, les ovaciona largamente.

Fueron descubiertas unas placas que daban nombre a las nuevas calles, la banda de aviación ejecuta Els Segadors.

Tanto el citado consejero, como el señor Baldomer Suis han sido recibidos cordialmente en todos los pueblos por donde han pasado, especialmente en Caspe, donde les hicieron una sonora recibida.

 La Humanitat: Any 5, núm. 1440 (7 oct. 1936)

Finalmente, Arturo Morera matiza que, al parecer, todas estas columnas estaban bajo el mando teórico del coronel Villalba, que era el militar profesional jefe de la guarnición de Barbastro antes de la sublevación o movimiento nacional que se alzó en contra de la República. «El total de los efectivos que componían tales unidades en aquellos primeros días de agosto podía ser del orden de unos tres mil hombres, con escasa o nula organización militar y armados deficientemente. También pasaron por Sariñena muchos milicianos que acabaron formando parte de la columna Durruti. El entusiasmo de todos ellos era enorme, pero su desorganización tremenda» (Arturo Morera, La guerra del 36 en Sariñena).

El flujo de milicias en Sariñena debió de ser considerable, provocando problemas de abastecimiento que se manifestaron en la asamblea Popular celebrada en Binefar el 28 de agosto de 1936. La delegación de Sariñena planteó el problema que el abastecimiento de gasolina estaba generando en la localidad: «Toda vez que por ser Sariñena centro de aprovisionamiento y lugar de paso para muchas de las columnas del frente, ha de abastecer una infinidad de vehículos de gasolina, que después nadie satisface su importe. A pesar de tener que exigir los oportunos avales por el sello del jefe de columna o de milicias antifascistas, son una multitud los casos una multitud los casos de ambulancias que transportan heridos, de servicios de urgencia, llevar partes, etc. y sería una felonía negarles la gasolina». El desabastecimiento de combustible fue un problema serio, ya que la Generalitat de Cataluña solamente abonaba la gasolina avalada, así que debieron de adoptar más control en su distribución (Orientación Social. Órgano del frente aragonés, nº 41).

En Marcha hacía Huesca. Crónica de nuestro colaborador Marcial Fernández.

Van quedando atrás Fraga, Candasnos, Velilla de Zinca, Ballobar. Al fin Sariñena. Nos detenemos un momento a desayunar. En el frontal de una casa de labor, con traza de venta castellana, un rótulo pomposo: Hotel del Cisne. Entramos. Una mujer, que trae a nosotros evocaciones de Gabriel y Galán, nos sirve solícita.

Cuando inquirimos el importe de lo que hemos consumido, en el rostro agraciado y cetrino una sonrisa ancha: -No es nada. Ustedes servirán de otro modo a la República, yo la sirvo así-.

De nada vale nuestra insistencia: tenemos que marcharnos sin pagar.

A partir de Sariñena vamos encontrando por todas partes gentes dedicadas a las faenas de la recolección. Las gavillas que amarillean sobre los rastrojos nos recuerdan la consigna difundida profusamente por toda la tierra catalana: «La collita es la reraguarda deis que lluiten.» Los campesinos de Aragón la cumplen exactamente.

La Vanguardia, 29 de septiembre de 1936.

PARA LOS LLAMADOS A FILAS:

Por acuerdo del Comité de Guerra del frente de Aragón, y siempre de acuerdo con el Comité Superior de Milicias Antifascistas de Barcelona se pone en conocimiento de todos los reclutas de los reemplazos llamados por decretos del Gobierno, que no puede tolerarse de ninguna de las maneras que con el pretexto de la desmilitarización y constitución de las milicias antifascistas existan ciudadanos que se queden en sus casas mientras los amantes de la libertad luchan en la calle. Por lo tanto, este Comité, de acuerdo siempre con el Comité Superior y Central de Milicias Antifascistas de Barcelona, ordena a todos los incluidos en los decretos mencionados de incorporación a filas que se presenten con toda urgencia en sus respectivos cuarteles o en alguna milicia controlada por los partidos u organizaciones obreras, dando éstas cuenta a los cuarteles donde debieran haberse presentado los milicianos en ellas existentes, para el debido control y para que jamás pueda ningún camarada perteneciente a estos reemplazos quedarse en casa mientras los demás luchan en bien de sus intereses.

Sariñena, 26 de agosto de 1936.

Por el Comité de Guerra: Buenaventura Durruti, CNT; Antonio Ortiz, CNT; Cristóbal Aldabaldetrecu, CNT; José del Barrio, UGT; Jorge Arquer, POUM; Franco Quinza, Aviación; Coronel Villalba, Comandante Reyes, Aviación, Capitán Medrano; Capitán Menéndez; Teniente Coronel Joaquín Blanco.

EL FRENTE, núm. 3 Boletín de guerra de la columna Durruti. Pina de Ebro, 27 de agosto de 1936.

Noticias falsas o erradas

Resulta curioso encontrar noticias sobre la toma, por parte de las fuerzas nacionales, de Sariñena en octubre de 1936. Ambas noticias se pueden encuadrar tanto en el marco de la importancia propagandística como quizá en algún error o confusión, confundiendo Sariñena por Leciñena, que justamente aquellos días había caído bajo el dominio de los sublevados. Sin duda, esta última posibilidad es la más probable.

Ejército del Norte

Quinta División. Se ha tomado al enemigo Sariñena causándole más de 100 bajas. Se le cogieron 25 camiones, 20 ametralladoras y dos morteros, así como numerosas municiones.

El Adelanto: Diario político de Salamanca: Año 52 Número 16092 – 1936 octubre 13.

El botín cogido en Sariñena

Sariñena es un pueblecito aragonés que los catalanes tenían en su poder, habiéndolo convertido en cuartel general. El sábado, las fuerzas que operan en la provincia de Zaragoza, ocuparon brillantemente el pueblo y cogiendo a los rojos un botín numerosísimo: seis cañones, varias ametralladoras, fusiles en gran cantidad, víveres, veinte automóviles ligeros y camiones, y hasta una imprenta que los rojos habían establecido allí para editar sus bulerías. Más de un centenar de muertos y setenta prisioneros quedaron en nuero poder. En esta ocupación se distinguieron dos sargentos de Falange que por su heroísmo han sido ascendido al grado inmediato.

La Falange: Diario de la tarde. Órgano en Extremadura de Falange Española de las J.O.N.S: Año I Número 39 – 1936 octubre 14.

Sariñena Guerra

Organización militar

La desorganización de las columnas de milicianos en Aragón fue absoluta durante los tres primeros meses de la contienda. Arturo Morera lo recoge en “La guerra del 36 en Sariñena” a través del testimonio de Vicente Guarner (Cataluña en la guerra de España, 1936-1939), quien fue teniente coronel del Estado Mayor: «…cada columna tenía también su asamblea, que trataba con el mando de tú a tú. Se daba el caso de que los combatientes milicianos, al cumplirse las ocho horas, jornada de trabajo, en una marcha de aproximación o en un combate, colgaban el arma y regresaban a las parideras donde pernoctaban o a las casas de los pueblos en que acantonaban. Los milicianos, de noche, y a veces de día, entraban en Zaragoza o Huesca sin armas para tomar café”. Ante aquel desbarajuste,  en palabras de Arturo Morera, los jefes de columnas y los militares profesionales republicanos intentaron poner orden en el desbarajuste y se esforzaron en coordinar las acciones bélicas frente al enemigo común.

Ante la llegada de milicias al frente de Aragón «El Comité de Milicias, y más tarde la misma Generalitat catalana, buscó un mando único con sede en Sariñena para coordinar los esfuerzos» (Eladi Romero García, Cazarabet).

Comité de Guerra de Sariñena

El 29 de julio de 1936 se constituyó el Comité de Guerra de Sariñena: «Muy tempranamente, el 29 de julio de 1936, se constituyó un Comité de Guerra en el Ayuntamiento de Sariñena. En ese día nuestro pueblo soportaba la presencia de toda la columna del POUM, y bajo sus auspicios se reunieron en nuestro Ayuntamiento el coronel Villalba, el comandante Pérez Farrás y los jefes de columnas Del Barrio, Arquer y Piquer. En dicha reunión constitutiva se acordó la designación del coronel Villalba como jefe de las fuerzas antifascistas en Aragón» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Al día siguiente, el 30 de julio se crea la Delegación Militar de Guerra de Sariñena. De alguna manera nace paralelamente a la creación del Comité de Guerra del Frente de Aragón creado en Barbastro el 28 de julio de 1936 (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo).  Para Gonzalo «Esta delegación era el Estado Mayor de todas las fuerzas que operaban al sector norte de Aragón». Según Roberto Mateo (Las batallas de Lanaja) «El jefe de este primer Estado Mayor va ser el Comandante de Infantería Alfredo Sanjuán Colomer».

El Comité de Guerra de Sariñena dio nueva reunión en Sariñena el 26 de agosto para unificar criterios y también dictar una disposición por la cual se urgía la incorporación a los acuartelamientos de los reclutas de los remplazos llamados a filas por el gobierno de la Generalidad de Cataluña. Por el llamado Comité de guerra firmaron el documento las siguientes personas: Buenaventura Durruti, CNT; coronel Villalba; Franco Quintá, Aviación; Cristóbal Aldabeltreco, CNT; José del Barrio, UGT; Jordi Arquer, POUM; capitán Méndez, Asalto; comandante Reyes, Aviación; capitán Medrano, militar; teniente coronel Joaquín Blanco; Antonio Ortiz, CNT (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Disposición de guerra

Muy importante. Disposición del Comité de Guerra del Frente Aragonés.

El Comité de guerra del frente aragonés ha dictado una disposición que dice:

Por acuerdo del Comité de guerra del frente de Aragón, y siempre de acuerdo con el Comité Superior de Milicias Antifascistas de Barcelona, se pone en conocimiento de todos los reclutas de los remplazamientos llamados por el decreto del gobierno que no pueden tolerarse de ninguna de las maneras que, con el pretexto de la desmilitarización y constitución de las milicias antifascistas existan ciudadanos que se queden en sus casas mientras los amantes de la libertad luchan en los frentes de batalla. Por este motivo, este comité, de acuerdo siempre con el Comité Superior de Milicias Antifascistas de Barcelona, ordena a todos los individuos en los decretos mencionados de incorporación a filas, por tal que se presenten inmediatamente a sus respectivos cuarteles o en alguna milicia controlada por los partidos u organizaciones obreras, dando estos cuenta a los cuarteles donde deberían de haberse presentado los milicianos en ellas existentes, por su buen control y por tal que no pueda nunca ningún camarada perteneciente a estas levas, quedarse en casa mientras otros luchan en defensa de sus intereses.

Sariñena, 26 de agosto del 1936. Por el Comité de Guerra: Bonaventura Durruti, CNT; coronel Villalba; Francesc Quinta, Aviación; Cristóbal Adabaltreco, CNT; Josep del Barrio, UGT; Jordi Arquer, POUM; capitán Méndez, Asalto; comandante Reyes, Aviación; capitán Medrano, militar; teniente coronel Joaquín Blanco y Antonio Ortiz, CNT.

Extraído del Boletín de Información de la CNT y FAI.

 La Veu de Catalunya: diari catalá d’avisos, noticias y anuncis: Any 46, Núm. 12537 (28 ag. 1936) Ed. Matí

Aquella reunión aparece reflejada en la edición de La Vanguardia del 28 de agosto de 1936: «Para articular mejor el frente, hemos celebrado una reunión en Sariñena todos los mandos y jefes de columna que actúan en los sectores Norte y Centro. Se ha formado, como consecuencia, un Comité del frente, integrado por Durruti, Arquer y Del Barrio por parte de las columnas de milicianos; Reyes, por la aviación; Medrano, por la artillería, y Villalba, como jefe militar del sector Norte. No ha podido asistir a esta reunión Ortiz, del sector sur. con el cual procurará ponerse de acuerdo.»

Atravesamos pueblos pegados a la tierra como un camaleón a su rama. Patrullas de campesinos circulan por las carreteras. La mayoría sólo llevan como armamento, escopetas de caza; algunos tienen pistolas que deben ser de la guerra carlistas. Llegamos así a Sariñena, pequeña ciudad perdida en medio de una llanura desecada. Allá se encuentra el abastecimiento de las columnas que operan entre Zaragoza y Huesca. A un lado, el campo de aviación de las milicias catalanas. Por la tarde la ciudad está en calma, casi desierta, bajo su cielo de fuego. Desde allá, otro coche lleva el correo y a nosotros hacía el frente.

Agosto de 1936

La vida y la muerte en Aragón. José Gabriel.

El Perro Malo y Salvador Trallero editor.

«El 15 de septiembre llegaron a Barbastro, procedentes del campo de aviación de Sariñena, el Consejero de Defensa de la Generalidad, teniente coronel Díaz Sandino y el jefe de la base aérea  “Alas Rojas”, comandante Reyes. Estos dos jefes del ejército republicano se reunieron seguidamente con los jefes de columnas de milicianos Del Barrio, Rovira, Piquer, Aldabeltreco, un delegado de García Oliver, el capitán Medrara y el coronel Villalba. La reunión obedecía al deseo de impulsar las operaciones ofensivas sobre la ciudad de Huesca tras la toma de Siétamo.» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

«En Sariñena, toda la población está militarizada. Se trata de un pueblo esen­cialmente republicano a quien no asusta el movimiento de la guerra».

A la vista de Huesca. Mientras se hace el Avance. Antonio de la Villa.
Ahora, 17 de septiembre de 1936.

Mando de la circunscripción del Centro

A finales de octubre de 1936, se reorganizó el frente aragonés y sus columnas, determinando, el gobierno, la organización de un Ejército Popular de la República. Para ello, la Consejería de Defensa de la Generalitat, a través del Comité Central de Milicias, en la denominada Asamblea del Comité de Guerra del Frente de Aragón o Conferencia de Sariñena, impuso «A todo el frente de Aragón un mando único» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). Para el historiador y periodista Víctor Pardo Lancina fue un intento de la Generalitat por recuperar el control del frente de Aragón (A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene).

Así, en octubre de 1936 el frente aragonés quedó dividido en tres circunscripciones y dos sectores. De las tres circunscripciones del frente aragonés, el frente de Los Monegros abarcó parte de la Circunscripción Norte y Centro del frente de Aragón, asumiendo Sariñena el Mando de la Circunscripción del Centro.

«La circunscripción del Norte, con mando en Barbastro, comprendía las columnas «Roja» y «Negra», «Aguiluchos», la del POUM y la del coronel Villalba. La del Centro, con mando en Sariñena incluía las columnas de Durruti y la de Del Barrio. La del Sur, con mando en Caspe, agrupaba todas las columnas que se habían agregado a la de Ortiz. Los dos sectores eran el «Maciá-Companys» con mando en Montalbán, y el Pirenaico con mando en Boltaña. Todas estas fuerzas quedaban bajo el mando del comandante don Alfonso de los Reyes, quien además seguía teniendo a su cargo todas las fuerzas de Aviación»

Arturo Morera, La guerra del 36 en Sariñena.

Asimismo, las circunscripciones se dividieron en sectores y subsectores, quedando Aragón definido en seis sectores: Alto Aragón, Norte Aragón, Centro Aragón, Sur-Ebro, Montalban y Teruel. De aquellos seis sectores, los sectores Norte Aragón y Centro Aragón abarcaron el frente de Los Monegros.

La Asamblea del Comité de Guerra del Frente de Aragón tuvo lugar en Sariñena el 13 de octubre. En ella participaron todos los jefes de columnas que operaban en el frente de Aragón: «Con la intención de llegar a un acuerdo para establecer un mando único ante la proyectada reorganización del frente. La convención fue presidida por el teniente coronel Díaz Sandino (Consejero de Defensa), y a ella asistieron, entre otros, el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas (por el sector del Sur), Durruti (por el sector del Centro), García Oliver (del Comité Superior de Milicias) y el comisario civil de las columnas catalanas, Moles».

«El artífice del plan de la nueva re-estructuración militar de las fuerzas republicanas en Aragón fue el teniente coronel Vicente Guarner, quien, desde su puesto de jefe de Estado Mayor en la Consejería de Defensa de la Generalidad de Cataluña, sugirió al Comité Central de Milicias sus ideas de cómo debían coordinarse las actividades de las columnas. El plan fue aceptado, no sin resistencias, y Sariñena se convertiría en pieza clave en la marcha de la guerra a partir de mediados de octubre de 1936.» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Víctor pardo Lancina recoge la participación en la asamblea al teniente coronel Díez Sandino, consejero de Defensa de la Generalitat; el subsecretario del departamento y asesor militar del Comité de Milicias de Barcelona, Vicente Guarner; el coronel jefe de las fuerzas de Aragón, José Villalba, llegado desde Barbastro; y los jefes de columnas Durruti, Pérez Salas, García Oliver, Del Barrio, Rovira, el comisario Moles, de las milicias catalanas y el comandante Reyes, jefe del aeródromo de «Aquella conferencia -afirma el historiador Alejandro Díez Torre»- convocada bajo referencia del desastre miliciano de Leciñena, fue en cierta medida una respuesta catalana a la posición aragonesa y miliciana libertaria, adoptada en la asamblea regional de Bujaraloz» y organiza-da por la CNT.»(A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene).

«Del Barrio, el líder ugetista catalán y jefe de una de las principales columnas de milicias en el frente aragonés, denunció abiertamente el 13 de octubre de 1936 en Sariñena, ante los jefes de las distintas columnas, los fusilamientos de ugetistas en los pueblos ocupados por las columnas confederares que proclamaban el comunismo libertario.»  

Historia de la UGT.  Santiago Castillo.

Reunión de los jefes de columnas

Ayer por la tarde en Sariñena se celebró una reunión de los jefes de columna de Aragón. Presidió el Consejero de Defensa señor Sandino y asistieron el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas, Durruti, García Oliver y el Comisario civil de las columnas catalanas, Moles.

  Heraldo de Castellón: Año XLVII Número 14394 – 14 Octubre 1936.

El mando único en el frente de Aragón Barbastro.

—Esta tarde se celebra, en Sariñena, una reunión de todos los jefes de columna que operan en el frente de Aragón. Esta reunión está presidida por el consejero de Defensa de la Generalidad, teniente coronel señor Díaz Sandino; y a ella asisten, también, el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas, por el sector del Sur; Durruti, por el sector del Centro, habiendo acudido, asimismo García Oliver, de la consejería de Defensa y el comisario civil de las columnas catalanas, Moles.

Se asegura que de la reunión saldrán importantes acuerdos para la unificación de operaciones, especialmente el nombramiento de jefe único de todo el frente que, posiblemente recaerá en uno de los actuales jefes que luchan en este sector.

La Batalla: Número 63 _ 14/10/1936.

La Dirección General del Frente

La Consejería de Defensa de la Generalitat estableció en Sariñena la Dirección General del Frente, recayendo el mando de general en Jefe del Estado Mayor sobre el Comandante Reyes, jefe del aeródromo de Sariñena.

 «El teniente coronel Blanco Valdés, segundo. jefe, del sector norte y a las órdenes inmediatas de Villalba se ha trasladado a Sariñena para ponerse en contacto con el comandante Reyes, nuevo jefe de todas las fuerzas que operan en Aragón.»

La Batalla: Número 64 _ 15/10/1936.

Mientras, como Jefe de Estado Mayor fue designado el capitán Guarner y el capitán Botet como Comandante General de Artillería. Antonio Ortiz fue designado jefe del sector Sur-Ebro, Buenaventura Durruti jefe del sector Centro y el Coronel Villalba del sector Alto y Norte de Aragón (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). Arturo Morera concluye «En Sariñena se establecía una Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad. Así pues, el comandante Reyes era el elegido como jefe único de todas las fuerzas, con su cuartel general en Sariñena».

«El 23 de octubre una delegación formada por el capitán Josep Guarner y el teniente Bosch Biosca establece el Estado Mayor del Frente de Aragón en Sariñena. El responsable del mencionado Estado Mayor va ser el capitán Ricardo Clavería Iglesias» (La columna MaciàCompanys. Hernández  Cardona, Francesc Xavier i David Iñiguez Gràcia).

Una de las consecuencias de ser Sariñena Cuartel General del Frente de Aragón, fue el establecimiento en la localidad de la Auditoría de Guerra. En ella se celebraron consejos de guerra «Juicios populares y la aplicación sumaria de sentencias» (A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene). Además, en el aeródromo se celebraron bautizos y bodas civiles, muchas de las cuales ofició el mismo comandante Reyes.

El Estado Mayor y Cuartel General de Sariñena

En octubre de 1936 se instaló en Sariñena el Cuartel General de Sariñena organizándose como un Estado Mayor. El Cuartel General se ubicó en casa Torres, en la actual plaza Estatuto de Aragón, conocida popularmente como plaza de Villanueva. «La ubicación física de estas personas y muchas otras a sus órdenes en general, tuvo su lugar preferente en la casa señorial de D. Mariano Torres, previamente requisada. Del mismo modo se instaló el Hospital de Sangre en la mansión de D. Joaquín Paraled en la plaza de la iglesia» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Fue a raíz de una reunión que se celebró el día 13 de octubre en Sariñena. Para Arturo Morera fue «Una importante y decisoria reunión de todos los jefes de columnas que operaban en el frente aragonés, con la intención de llegar a un acuerdo para establecer un mando único ante la proyectada reorganización del frente. La convención fue presidida por el teniente coronel Díaz Sandino (Consejero de Defensa), y a ella asistieron, entre otros, el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas (por el sector del Sur), Durruti (por el sector del Centro), García Oliver (del Comité superior de Milicias) y el comisario civil de las columnas catalanas, Moles.»

El teniente coronel Vicente Guarner, jefe de E. M. en la Consejería de Defensa de la Generalidad de Cataluña, «Sugirió al Comité Central de Milicias sus ideas de cómo debían coordinarse las actividades de las columnas. El plan fue aceptado, no sin resistencias, y Sariñena se convertiría en pieza clave en la marcha de la guerra a partir de mediados de octubre de 1936.» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Dicha restructuración  aprobada en octubre de 1936 del frente de Aragón  estableció tres grandes circunscripciones y dos sectores.

  • La circunscripción del Norte, con mando en Barbastro, comprendía las columnas “Roja” y “Negra”, “Aguiluchos”, la del P.O.U.M. y la del coronel Villalba.
  • La circunscripción del Centro, con mando en Sariñena incluía las columnas de Durruti y la Del Barrio.
  • La circunscripción del Sur, con mando en Caspe, agrupaba todas las columnas que se habían agregado a la de Ortiz.

Los dos sectores eran el “Maciá-Companys” con mando en Montalbán, y el Pirenaico con mando en Boltaña. (A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene).

Todas las fuerzas del frente de Aragón quedaron bajo el mando del comandante Alfonso de los Reyes, además seguía teniendo a su cargo todas las fuerzas de Aviación. Así, en palabras de Arturo Morera «En Sariñena se establecía una Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad.» El comandante Reyes era el elegido como jefe único de todas las fuerzas, con su cuartel general en Sariñena mientras que la jefatura o jefe del Estado Mayor de la delegación de Sariñena recayó a cargo del comandante de infantería José Guarner Vivancos, hermano del comandante Vicente Guarner Vivancos, encargado en la organización de la Consejería de Defensa de la Generalitat como un Estado Mayor.

Tarragona. Hacia el frente de Sariñena.

El sacerdote Ángel García i Rollán ha estado designado para formar parte del Estado Mayor de Sariñena, por la cual cosa ha de abandonar sus actividades en el comité antifascista local.

 La Publicitat: (16 Octubre 1936).

Por el alto mando ha estado designado al Estado Mayor del frente de Sariñena el capitán de infantería Josep García Rollán.

El señor García Rollán hasta ahora había actuado en el comité de las milicias tarraconenses.

La Veu de Catalunya: diari catalá d’avisos, noticias y anuncis: Any 46, Núm. 12580 (17 oct. 1936) Ed. Matí.

El Estado Mayor de Sariñena contó con tres secciones: «Organización del Frente», al mando del Comandante García Rollán; «De Información», dirigida por el Comandante Jaime Bosch y «Operaciones» a cargo del Comandante de Estado Mayor Ricardo Clavería Iglesias. «Completaban la nómina de cuadros militares en Sariñena el teniente coronel diplomado de Estado Mayor Carlos Botet, como comandante principal de la Artillería en el frente; el comandante Martorell, de Ingenieros, tenía a su cargo la organización de las unidades de su especialidad en todo el frente aragonés; por último, el doctor Bergós fue el encargado de organizar puestos de socorro y curación en las líneas así como los hospitales de Barbastro, Fraga y Caspe» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

«Las funciones de este Estado Mayor van a comenzar con la creación de un grupo de unidades de fortificación y obras de las cuales fueron responsables tres ingenieros militares entre ellos Miguel Ramírez de Cartagena, con dos arquitectos, dos aparejadores y dos técnicos del ramo de la construcción. Además, los trabajos de organización del Estado Mayor para las operaciones en Aragón se van a complementar con la constitución de un grupo de transmisores y señales del que fue responsable el ingeniero de telecomunicaciones Sánchez Cordobés y se impulsará a cargo del responsable de municiones de las industrias de guerra con el nombramiento de María»

La columna MaciàCompanys. Hernández  Cardona, Francesc Xavier i David Iñiguez Gràcia.

El Estado Mayor de Sariñena se englobó bajo el Estado Mayor Central, con sede en Valencia, cuyo mando respondió a Toribio Martínez Cabrera. A mediados de diciembre de 1936, Toribio Martínez Cabrera visitó el Estado Mayor de Sariñena junto al teniente coronel Vicente Guarner Vivancos. Unas semanas antes, Vicente Guarner Vivancos, entre los días del 16 al 21 de noviembre del 36, ya había visitado el Estado Mayor de Sariñena: «Para inspeccionar el funcionamiento del Estado Mayor en el cuartel general de Sariñena, el teniente coronel Vicente Guarner se personó en nuestra villa en los días 16 al 21 de noviembre. Vicente Guarner volvió a Sariñena acompañado del general jefe del Estado Mayor Central, Toribio Martínez Cabrera, a mediados de diciembre de 1936, en un intento de montar operaciones en Aragón para descongestionar el frente de Madrid» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

«Las diferentes columnas se relacionaron entre sí mediante una Dirección Superior del Frente de Aragón y Estado Mayor Técnico, residente en Sariñena».  

Carlos Hervas Puyal, Sanitat a Catalunya durant la República i la Guerra Civil.

Aunque el Cuartel General de Sariñena contó con militares profesionales, elegidos por el Comité de Milicias, Arturo García Álvarez-Coque, Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española (1936-1939), señala que el único profesional de Estado Mayor era el comandante Ricardo Clavería: «Como Delegación en el frente de Aragón, en octubre de 1936 Guarner estableció el Cuartel General de Sariñena, que se organizó como un Estado Mayor con militares profesionales, elegidos por el Comité de Milicias. Entre ellos figuraba como jefe José Guarner, hermano de Vicente, aunque el único profesional del Estado Mayor era el comandante Ricardo Clavería. Además Arturo García Álvarez-Coque detalla como se intentaba una coordinación con el Estado Mayor Central en Valencia: «Vicente Guarner fue enviado a esa ciudad a final de noviembre “para exponer la situación del frente, la organización militar catalana y la escasez de medios de guerra de que disponíamos. Traté de estos asuntos con mi compañero de Estado Mayor Manuel Estrada”. 

José Guarner Vivancos fue un militar catalán, asesor de la columna de Los Aguiluchos y miembro del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña. Llegó a ser jefe de Estado Mayor de la 24.ª División y del XXIV Cuerpo de Ejército. Acabó exiliado en México.

Bando del Jefe superior de las fuerzas y milicias

El comandante jefe superior de las fuerzas y milicias del frente de Aragón, ha publicado en el cuartel general instalado en Sariñena un bando diciendo:

“Hago saber que, por decreto de 28 de julio próximo pasado, fue declarado zona de guerra el territorio de la región aragonesa ocupado por las fuerzas leales a la República.

En su virtud, todo ciudadano que en dicha zona comente el movimiento de fuerzas leales, resoluciones de jefes militares o políticos o sus delegados; que manifieste o propague cualquier noticia de guerra o bulos que puedan sobrecoger o deprimir el ánimo, cosa que en la mayoría de las veces se realiza por gentes cuya intención es claramente de animadversión a la lucha que el pueblo español sostiene por la República y su libertad, será detenido y puesto a disposición del Comité local, donde se encuentre, y previa declaración por dicho Comité de considerársele faccioso, será pasado por las armas».

    La Libertad: La Libertad – Año XVIII Número 5175 – 1936 octubre 29 (29/10/1936).

Toma de posesión del nuevo jefe de las fuerzas del sector de Barbastro:

Ha tomado posesión del mando de las fuerzas de este sector el teniente coronel Gómez García, después de celebra una entrevista con el coronel Villalba, el cual le da posesión del cargo.

El nuevo jefe de las fuerzas se despide del coronel Villalba, el cual marcha a última hora de la tardea Barcelona, por tal de incorporarse a su nuevo destino.

El comunicado oficial. El comunicado oficial de este sector no nos ha estado facilitado aún a la hora que telefoneamos, por encontrarse el nuevo jefe de las fuerzas reunido con su Estado Mayor en Sariñena, podemos asegurar que no discrepará de la impresión que hemos anticipado.    

Full oficial del dilluns de Barcelona: Número 571 – 1936 Noviembre 23.

Próxima reunión en Sariñena

Parece ser que mañana se celebrará una reunión en Sariñena, a la que asistirá una representación militar y civil de aquella región. 

Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14471 – 12 Enero 1937.

Una reunión importante

Parece ser que mañana se celebrará en Sariñena, una importante reunión a la que asistirá una representación del Consejo Regional de Defensa de Aragón y otras personalidades.

La Batalla: Número 141 _ 13/01/1937.

En Sariñena se reunieron las representaciones del Frente Popular de Aragón y del Consejo Provisional, para tratar de las cuestiones sociales, políticas y militares.

 Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14492 – 06 Febrero 1937.

Hace unos días en Sariñena hubo una reunión de representantes de fuerzas antifascistas. Se debía de sopesar todo. Quizás se habló de la necesidad de mostrarse unidos y compactos frente a potencias extranjeras. “Segurament es va tenir en consideracio la diversitat de parers i de campanya que de cara la nostra diversitat de parers i de colors es mena a les rengleres faccioses”.

Fue después de escuchar a todos los oradores cuando se llegó al acuerdo de albergar todas las horquillas bajo los pliegues de la bandera republicana presidida por el glorioso y revolucionario anagrama revolucionario U. H. P. ¿Todos de acuerdo? ¡Ya está!. Ya era bien entrada la madrugada ¡Ah, pero no! ¡No haría falta más! Aquí está el «Poum» decidido a romper el trato. No debería haber tal unanimidad. Cada uno que enarbole lo que quiera. ¡No faltaría más!

La Humanitat: Any 6, núm. 1556 (19 febr. 1937).

El teniente Coronel Alfonso de los Reyes, en febrero de 1937 renunció a su cargo como jefe de las fuerzas de todo Aragón en febrero de 1937. Su dimisión causó extrañeza entre milicianos y soldados, tal y como recoge Arturo Morera a raíz de una entrevista que Pere Foix realizó a de los Reyes y publicada en el diario «Treball» del 4 de febrero de 1937.

-«No ha de causar extrañeza mi dimisión. Fui nombrado jefe del Frente de Aragón por delegación del entonces Consejero de Defensa, Coronel Díaz Sandino, en unos momentos en que el frente pasaba por una situación difícil y que, además, era necesario servir de aglutinante entre los diferentes jefes de columnas, que hasta entonces habían operado por su cuenta, debido al dinamismo de los prime ros días. He conseguido con la ayuda y el buen sentido de todos, el dar el primer paso en la unificación del mando del frente. Una vez conseguida la misión, para la cual fui nombrado, y entendiendo que mi nombramiento era una cuestión personalísima del ex-consejero Díaz Sandino hacía mi persona, y además deseando dedicarme intensa mente al servicio de la Aviación, he solicitado y he obtenido del nuevo Consejero de Defensa, el ser relevado de mi cargo de jefe superior de las fuerzas del frente de Aragón.

La entrevista continúa con la pregunta de mantener el Cuartel en Sariñena «La pregunta parece preparada para que el Teniente coronel Reyes, respondiera en el sentido de desear que nuestra villa dejara de alojar a los mandos del Cuartel General, ahora que él iba a cesar en el cargo de jefe superior del frente.»

-«Hombre, dijo Reyes -los Cuarteles Generales no han de estar mucho tiempo seguido en el mismo lugar. Se habría de evitar la intimidad entre el personal del Cuartel General y la población civil, entre la cual el enemigo puede tener a sus agentes de espionaje. Se ha de tener en cuenta, que en las poblaciones que ocupamos, quedan muchos fascistas desconocidos. Nunca está de más tomar precauciones».

Arturo Morera concluye, por esta declaración, que «Se puede pensar que Reyes estuviera deseando que los jefes del E.M., que hasta entonces habían estado bajo su mando, se alejaran de Sariñena, en el momento que él perdía protagonismo por su cese. De esa manera, al mantener su puesto de jefe de la Aviación, Reyes, quizá esperara seguir actuando como «virrey» efectivo de nuestra población, dando continuidad a su papel preponderante desde que se instaló en Sariñena en los primeros días de agosto de 1936.»

El 28 de febrero de 1937, Vicente Guarner fue nombrado «Jefe de todo el frente de Aragón por parte del Consejero de Defensa y por el presidente Companys, no sin su sorpresa, dado que nadie le consultó esta decisión. Sin embargo y como militar profesional acatará las órdenes y se trasladará a la base de operaciones del frente emplazada en Sariñena. Desde este centro se trabajaba incansablemente de día y de noche, se visitaban los sectores y las posiciones, el cuerpo de transmisiones funcionaba de manera ejemplar y los servicios de información realizaban tareas de aviso del movimiento de tropas del enemigas» (La columna MaciàCompanys. Hernández Cardona, Francesc Xavier i David Iñiguez Gràcia).

La Humanitat: Any 6, núm. 1591 (1 abr. 1937) recoge la orden de la Comandancia Militar de Barcelona, publicada en «La revista del Comisario» del mes de abril de 1937, con los diferentes comisarios de intervención civil designados, entre ellos Josep Farrés Requena como interventor civil del Cuartel General del sector sur de Aragón, Batallón de montaña nº 4, plaza de Barbastro y Cuartel General de Sariñena.

En el mismo sentido La Humanitat (Any 6, núm. 1695 del 3 de  agosto de 1937. Ejército del Este. Revista del Comisario.) cita que la comandancia militar de Barcelona ha publicado el orden siguiente: «La revista del comisario del mes de agosto de 1937 se pasará desde las diez de la mañana ante los comisarios respectivos de intervención civil de guerra, designados a continuación: Josep Rocha Muñez. Plazas de Barbastro y Sariñena. Cuarteles generales del 10 y 11 Cuerpo del Ejército y de las Divisiones 27, 28, 29, 31 y 34 con sus brigadas mixtas, batallones de ametralladoras y regimientos de Caballería de Barbastro y Sariñena, batallones de obras y fortificaciones números 23, 24 y 26 y Prefectura administrativa comarcal de Barbastro con sus servicios.»

Estado Mayor Sariñena Comunicado 020437

Comunicado del Estado Mayor de Sariñena del 2 de abril de 1937.

Heraldo de Castellon 12 Abril 1937 Sariñena Guerra

Comunicado del Cuartel General de Sariñena. Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14545 – 12 Abril 1937.

Comunicado Cuartel general 020537

Comunicado oficial del cuartel general de Sariñena.
Nuevo Aragón, 2 de mayo de 1937.

Nuevo Aragón Estado Mator Sariñena 060637

Parte de guerra

Sarinena, 5 (12 noche). Parte de novedades facilitarlo, por el Estado Mayor del Ejército del Este: Parte de las 8 horas: A las 6,30 de la madrugada, fuertes tiroteos en el sector de la División 25. Se han pasado trece evadidos del campo faccioso Parte de las 20 horas: Sin novedad. – Corresponsal.

 Nuevo Aragón. 6 de junio de 1937.

Ejército del Este y el XI Cuerpo de Ejército del Este

Ejército del Este

A finales de abril de 1937 se produjo la unificación de todos los ejércitos en divisiones y brigadas mixtas, la organización del frente de Aragón pasó a denominarse Ejército del Este; formado el 6 de mayo de 1937. El Ejército del Este se estructuró con las divisiones 28ª y 29ª en Huesca, divisiones 26ª y 27ª en Sariñena y la 25ª y 30ª en Caspe. Al mando del Ejército del Este estuvo el General Pozas. De esta manera, el Frente de Aragón quedó cubierto por los Cuerpos de Ejército X, XII y XII hasta la campaña de Aragón cuando se sumó la XVIII Cuerpo del Ejército de Maniobra.

«Con estas unidades formó dos agrupaciones: la Agrupación Norte, con los Cuerpos de Ejército X (divisiones 421, 3V y 341) y XI (divisiones 261, 301 y 321), y Sur; con los Cuerpos XVIII (divisiones 271, 601 y 724) y XII (divisiones 161, 441 y Bellvís). Mandaba la Agrupación Norte el teniente coronel de Estado Mayor, Javier Linares Aranzabe, y la Sur, el teniente coronel de Artillería, Antonio Cordón García.»

(https://www.combatientes.es/)

El general Pozas visita el Frente de Aragón

Sariñena. El jefe del Ejército del Este, general Pozas, ha llegado con el objeto de recorrer el frente en viaje de inspección y reconocimiento para dejar acoplados todos los mandos y servicios a las órdenes del jefe del Estado Mayor.

El general Pozas recorrió los diversos sectores de la cuenca pirenaica descendiendo después al sector del centro para trasladarse después al del sur.

El Cantábrico: diario de la mañana: Año XLIII Número 14695 – 1937 junio 6.

XI Cuerpo de Ejército del Este

Sariñena albergó el Cuartel General del alto mando del XI Cuerpo de Ejército Republicano.  El XI Cuerpo de Ejército respondió a una Unidad militar creada el 6 de junio de 1937 y perteneciente al Ejército Popular de la República, adscrito al Ejército del Este. El XI Cuerpo de Ejército estuvo compuesto por las divisiones 26ª (Columna Durruti), 27ª (Columna Carlos Marx) y 32ª.

Parte Oficial del Ejército del Este desde Sariñena. Nuestra lucha: portavoz de la Unidad Obrera: Año II Número 265 – 1937 Junio 17.

Parte oficial

Se puede establecer la composición del XI Cuerpo de Ejército principalmente por las divisiones 26 y 27, aunque detallando en julio de 1937 estaba compuesto por las divisiones 26, 27 y 32; octubre de 1937 divisiones 26, 32, 44 y 45; diciembre de 1937 divisiones 26 y 32; 19 de abril de 1938 divisiones 26, 30 y 32; 3 de septiembre de 1938 divisiones 26 y 34; diciembre de 1938  divisiones 26, 30 y 32; 27 de diciembre de 1938 divisiones 26 y 34 y Brigadas Mixtas 62 y 176, 2 de enero de 1939 divisiones 30 y 31y el 27 de enero de 1939 divisiones 30, 31 y 32.

La campaña de Aragón u Ofensiva de Aragón fue llevada a cabo entre el 7 de marzo y el 19 de abril de 1938 y golpeó de lleno a las fuerzas del Ejército del Este. Sariñena acabó en manos de los nacionales mientras que el Ejército del Este quedó muy debilitado. El Ejército del Este dejó de existir el 8 de febrero de 1939 al cruzar la frontera, a Francia, por Le Perthus.

Un juicio sumarísimo

Sariñena. Se ha celebrado la vista del juicio sumarísimo instruido por la Secretaría Relatoría del Tribunal Permanente del XI Cuerpo del Ejército, contra el soldado del 4º Batallón 1ªCompañía de la 121 Brigada Mixta, Francesc Pires Inácio, por el supuesto delito de deserción.

El Ministerio Fiscal en sus conclusiones solicita para el procesado la pena de doce años de internamiento cumpliendo condena en un Batallón Disciplinario mientras dure la actual campaña.

El tribunal, vistas las circunstancias atenuantes al encausado, dicta sentencia condenando al soldado Francesc Pires a la pena de seis años de internamiento e ingreso en un Batallón Disciplinario para todo el tiempo de duración de la presente campaña.

La sentencia ha estado aprobada por el general en jefe y el comisario del Ejército del Este.

En el acto del juicio congregó a gran número de soldados y paisanos en la plaza.

La Humanitat: Any 6, núm. 1815 (21 des. 1937).

Organización Civil

Los comités locales

«En poco más de un año, en Aragón existieron los Comités Revolucionarios con Consejos, Comités Municipales y comisiones gestoras» Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938. Casanova, Julián.

Con el inicio de la guerra se van formando los Comités de Guerra en las diferentes localidades del bando republicano. Se mantienen, a veces y por muy poco escaso de tiempo, los gobiernos derivados del Frente Popular hasta la creación de Comités, impuestos por milicias o sindicatos fuertemente implantados en la localidad «Formados espontáneamente en los instantes graves de los primeros días de la sublevación militar» Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938. Casanova, Julián.

Ver: Sariñena, gobiernos en guerra. 

Comité Local  o Comité Revolucionario de Sariñena

Luis Buil Espada atribuye a la constitución del Comité Local de Sariñena o Comité Revolucionario a socialistas, comunistas, Izquierda Republicana, Unión Republicana (de derechas) y anarquistas. José Paraled, desde 1935, perteneció a Izquierda Republicana y ocupó el cargo de alcalde hasta que fue destituido cuando los sindicatos CNT y UGT tomaron el ayuntamiento de Sariñena, formando el Comité Revolucionario de Sariñena.

En la co1911868_10201632478286038_324754242_nnstitución del Comité Revolucionario de Sariñena el sindicato CNT fue una fuerza mayoritaria. Para Daniel Pinos esto explica que Se decretase, desde un principio, las colectivizaciones de las tierras, la abolición de arriendos y la expropiación de grandes fincas y maquinaria agrícola. Eusebio Pinos formó parte del comité, quien según las palabras de su hijo Daniel Pinos fue delegado de abastos. También se puso en marcha una pequeña colectividad: La Colectividad de Sariñena.

971112_659590757400840_1201107089_nEn las Solicitudes de Informes Políticos–Sociales de Sariñena aparece abundante información y testimonios sobre diversos sucesos que se desarrollaron durante la guerra civil en la capital monegrina. La formación del Comité Local de Sariñena, según el testimonio de Fulgencio Esteban Olivas, fue integrado por José Paraled y José Brunet, entre otros miembros que ignoraba: No ocurrió nada anormal durante la actuación de este comité a excepción de la profanación de la iglesia. Rumoreándose que las imágenes habían sido quemadas en la plaza, ignorando que hicieron de los objetos de valor y en cuyo hecho intervinieron individuos desconocidos. Días más tarde se constituyó un nuevo Comité Local con José Paraled, José Brunet, Manuel Blames, Dionisio Buil y Francisco Lana. Lo que parece claro que tanto José Paraled y José Brunet formaron parte del gobierno local del Frente Popular, anterior a la sublevación militar.

Segundo Comité

En la causa contra José Orquín Casañola (ES/AHPZ – J/005974/000023), se cita la creación del segundo comité en octubre de 1936. José perteneció a la UGT, fue directivo de las Juventudes Socialistas Unificadas y fue nombrado vocal de aquel segundo comité.

La declaración de José Zamorano Cabellud “El Vicien”, en los informes políticos sociales de Sariñena, cita como integrantes del comité a Tomás Izco (F) (Ferroviario de Sariñena fallecido en el momento de la declaración en 1943), Antonio Mir “El Tuerto”, Francisco Masueras Claveria, Andres Minguillón (F), José “El Huesetes”, Antonio Casabona Marías y Dionisio Buil Mesple. José Zamorano Cabellud se enroló voluntariamente en la veintiséis división dirigida por Durruti.

Se decía que el Capitán General Romerales era de Sariñena. “Paco, un conocido amigo mío, que era manco y trabajaba en el ayuntamiento, enviaba una pequeña cantidad, de su magro sueldo a la esposa del General a Madrid, pues ella no tenía pensión de viudedad (pasados muchos años se la concedieron) y él me decía que era la mujer de su tío, hijo del pueblo”.

Luis Buil Espada.

Toda la vida en guerra de un pacifista.

Consejo Municipal de Sariñena

Sello consejo SariñenaCon la creación del Consejo Regional de Defensa de Aragón y el Ministerio de Gobernación, presidido por Joaquín Ascaso, «Se decretaron las normas para la la sustitución de Comités Locales por Consejos Municipales (Decreto 19 de enero de 1937 firmado por Joaquín Ascaso) Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938. Casanova, Julián.  La creación del Consejo Regional de Defensa de Aragón, entre el 6 de octubre de 1936 y el 11 de agosto de 1937, tuvo sus inicios en Bujaraloz  a partir de un plenario sindical  de la CNT en septiembre de 1936. El Consejo Municipal estuvo activo hasta el 9 de marzo de 1938, pocos días antes de caer la población en manos de los sublevados.

El 2 de abril de 1937 se constituye el 1 er Consejo Municipal de Sariñena y el 3 de octubre, del mismo año, se constituye el 2º Consejo Municipal de Sariñena. Estuvo activo hasta el 9 de marzo de 1938, días antes de la caída de Sariñena ante las tropas sublevadas.

Billetes del Consejo Municipal de Sariñena, realizados el 10 de junio de 1937. Los billetes aparecen con el estampado del sello del Consejo Municipal y las firmas del presidente Mariano Basols Buil y el cajero municipal Jaime Solé Sanmartí. En aquella tirada se hicieron una serie de 10.000 vales de una peseta y otra de 10.000 vales de 0,5 pesetas, un valor total de 15.000 pesetas. El 4 de septiembre de 1937 se emitieron 5.000 billetes más de peseta y 5.000 de cincuenta céntimos y el 21 de diciembre, del mismo año, se ponen en circulación 2464 billetes más de 0,5 pesetas cada uno, hasta los 17.464 y 225 de una peseta hasta los 15.225 (Actas del Consejo Municipal de Sariñena).

En el Archivo General de la Guerra Civil Española, Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca, se conservan las Actas del Consejo Municipal de Sariñena (Expediente CDMH_PS_BARCELONA_C0902_EXP011 Actas Comité) desde el 1 de abril de 1937 hasta el 9 de marzo de 1938.

Frente Popular Antifascista

Tras la disolución del Consejo Regional de Defensa de Aragón, entre los días 14 y 16 de octubre de 1937 se crea el Frente Popular Antifascista de Sariñena. Por aquellos tiempos Sariñena alojaba el cuartel general del ejército republicano del Este (Arturo Morera: Un documento del archivo de Salamanca). El Frente o Comité Antifascista de Sariñena convivió con el Consejo Municipal de Sariñena. Se puede decir que uno actuaba como órgano político militar y el otro como político civil.

Convocados por el Delegado Gubernativo se reúnen el día 14 de octubre del corriente año y hora de las 10 de la noche, en la Delegación de esta localidad, dos representantes de cada una de las organizaciones y partidos políticos de Sariñena, con el objetivo de constituir en la misma el Frente Popular Antifascista.

Concurren, por la Confederación Nacional del Trabajo, Manuel Santolaria y José Ros. Por la Unión General de Trabajadores, Antonio Lacuna y Mariano Morén. Por Unión Republicana, Mariano Grustán y Pedro Tires. Por Izquierda Republicana, Manuel Tena (hace constar este representante que el otro compañero designado por su agrupación, que es José Morera no concurre por estar de viaje). Por el Partido Socialista, Severo Arroyos y Pedro Sanz. Por el Partido Comunista, Pedro Cáscales y Eloy Casabón. Por las Juventudes Libertarias, Gregorio Lozano y José Malo. Por las Juventudes Socialistas Unificadas Daniel Grustán.  

Preside la reunión el Delegado Gubernativo que declara abierta la sesión y expone el motivo de la reunión, que no es otro que el de constituir en Sariñena el Frente Popular Antifascista. Todos reunidos se manifiestan de conformidad con lo expresado por la Presidencia por ser necesario para ganar la guerra y consolidar la revolución. La Presidencia pasa a leer el compromiso que han firmado en Caspe por todas las organizaciones que ha llevado como consecuencia a la formación del Frente Popular en Aragón. Una vez leído es aprobado por todas las representaciones de esta localidad, haciéndose distintas las aclaraciones que son contestadas por la Presidencia y por algunos de los representantes.

En consecuencia se acuerda quede constituido en esta localidad el Comité de Frente Popular Antifascista, haciendo suyo el mismo articulado que se firmó en Caspe el 23 de septiembre para el mismo fin. Se pasó a discutir el número de representantes que formarán parte de dicho Comité, y tras amplias deliberaciones en que intervinieron todas las delegaciones se acuerda por unanimidad sea uno por cada partido y organización en calidad de efectivo y otro en calidad de suplente designado también por las distintas organizaciones para suplir al efectivo en ausencias y enfermedades, consiguiéndose de esta forma que nunca quede ningún partido ni organización sin representar en ninguna reunión. De acuerdo todos, queda en proseguir esta reunión el sábado próximo día 16 en que traerán el nombramiento efectivo.

El sábado y hora acordada vuelven a reunirse las mismas delegaciones que el día 14.

Preside el Presidente del Consejo Municipal que expone el motivo de la reunión. Pregunta el nombre del representante efectivo que mandan los distintos partidos y organizaciones para la constitución definitiva del Comité del Frente Popular Antifascista.

Por el Partido Socialista, Severo Arroyo. Por el Partido Comunista, Pedro Cáscales. Por Unión Republicana, Mariano Grustán. Por la Confederación Nacional del Trabajo Vicente Lapiedra. Por la Unión General de Trabajadores, Antonio Lacuna. Por Izquierda Republicana José Morera. Por las Juventudes Libertarias, Gregorio Lozano. Por las Juventudes Socialistas Unificadas José Romerales.

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Estudis sobre conflictos socials. Las Brigadas Internacionales: Nuevas perspectivas en la historia de la Guerra Civil y del exilio. Josep Sánchez Cervelló y Sebastián Agudo.

Sariñena se consolida estratégicamente.

La ubicación del Estado Mayor, el aeródromo «Alas Rojas» y la Estación ferroviaria de Sariñena, como nudo de comunicaciones, situaron a Sariñena como centro estratégico y neurálgico de las circunscripciones Norte y Centro del frente de Aragón. Sariñena debió de ser una población bulliciosa y llena de actividad como refleja una crónica del Diario Treball de Barcelona, febrero de 1937: «Sariñena es una población de cuatro mil habitantes, que parece que tenga diez mil. Sus calles y plazas siempre llenas de soldados y milicianos, Los comercios no dan abasto en despachar. Los cafés, llenos a tope a cualquier hora. Las chicas del pueblo están muy contentas de este amontonamiento de la flor y nata de nuestra juventud que asa por Sariñena, camino de las trincheras. El campo de aviación, contribuye a animar las estrechas y fangosas calles de Sariñena, de una manera particular. Coches, camiones, aviadores esbeltos y simpáticos, que a menudo demuestran su técnica volando sobre Sariñena».

Sección catalana del Socorro Rojo Internacional

A la vez que se desarrollaba y organizaba, realiza trabajos de importancia reconocida, como la instalación del hospital de sangre: la casa de reposo para los combatientes internacionales; lavaderos mecánicos, a Sariñena y Alcañiz; la construcción de coches ambulancia, que libra la sanidad de guerra; la organización de la ayuda moral y material a los refugiados y las expediciones de comestibles, ropas de abrigo y material sanitario a los frentes de más importancia.

 La Humanitat: Any 6, núm. 1589 (30 març 1937).

Sariñena albergó el Hospital Militar junto a una pequeña biblioteca en casa Paraled, una Farmacia Militar Internacional en calle Enado, un Comedor Popular y/o de Milicias, el Aeródromo Alas Rojas, un Depósito de Armas y Municiones y un Hospital de Evacuación en el barrio de la Estación de ferrocarril de Sariñena.

La Biblioteca se situó en una planta baja de la calle Mercado y otra cita ubica una segunda biblioteca en calle Goya número 72.

En la Iglesia, una vez saqueada, se estableció un Garaje y Taller de reparación de vehículos y automóviles. En su puerta principal existió un letrero colosal con la inscripción: UHP (Unión de Hermanos Proletarios). Tras la toma de Sariñena, por las fuerzas nacionales, el redactor Flecha relató «Hay restos de vehículos, grasas, herramientas. Sobre la fachada un gran parapeto de sacos terreros donde se escondían armas antiaéreas». Efectivamente, en la torre de la iglesia estuvo un puesto de vigilancia, con armas antiaéreas y una alarma para avisar a la población ante los ataques aéreos. El puesto debió de ser muy precario y así queda recogido en el acta del Consejo Municipal de Sariñena del 4 de octubre de 1937 “Da cuenta (presidencia) de que la vigilancia de la torre le es muy difícil prestar los servicios sino se instala una especie de cuarto que permita hacer la guardia evitando en lo posible el frío”. El 13 de octubre de 1937 se dio lectura a una comunicación del Comité local de defensa pasiva en la que solicitaba ayuda al Consejo “Con la cantidad que crea por conveniente para atender a los diferente gastos que se le ocasionan como son la compra de una sirena y más lentes para el puesto de guardia en la torre acordándose acceder a lo solicitado”. El 1 de diciembre de 1937 se acordó vender las campanas para sufragar los gastos de la Junta de Defensa Pasiva (Actas Consejo Municipal).

 Gabino Lavilla Arcal, Participo en la detección de personas “de orden”. Intervino en la destrucción  de las iglesias de Albalatillo y Castejón de Monegros, en la quema del archivo del ayuntamiento y juzgado de Albalatillo.  Prisión provisional de Las Capuchinas de Barbastro.

Solicitudes de Informes Políticos–Sociales.

La antigua capilla de Loreto fue destinada como garaje del Consejo Municipal «Local de Loreto. -Haciéndose las reparaciones que sean precisas-” (Actas Consejo Municipal).

El Hotel Anoro fue socializado por el sindicato UGT durante la guerra y sirvió de alojamiento, principalmente, para altos mandos; especialmente del aeródromo de aviación. También debieron de tener la sede en el Hotel las Juventudes Libertarias, «Telas rojas con rótulos inmensos, banderas, folletos del peor gusto, colores y colores, Prensa que atosiga, carteles que marean» (Flecha). El Hotel acabó saqueado y destrozado y la familia Anoro tuvo que comenzar de nuevo para devolver la vida a un hotel que ha significado el centro neurálgico de la villa monegrina.

En la plaza Enado tuvieron la sede las Juventudes Unificadas. «Tenían, vamos. Allí está Falange Española Tradicionalista y de las JONS» (Flecha).

El Casino de Sariñena albergó la Casa del Pueblo y la Central de Sindicatos. También estuvieron grados escolares, «En su fachada un gran letrero reza: Casa del pueblo, Central de Sindicatos” (Flecha). En el acta del Consejo Municipal del 13 de octubre de 1937 aparece la petición de instalar el Hogar del Combatiente en el Casino de Sariñena: “Se da lectura a una comunicación del Comisario de Guerra del XI Cuerpo de Ejército solicitando el Casino de Sariñena, hoy Casa del Pueblo, para instalar en el mismo el Hogar del Combatiente”. Al final se acordó no acceder ningún espacio, ni el casino ni un grado de la escuela “Por entender ser contraproducente y perjudicial mezclarse los niños y niñas de otros grados que asistan a clase con mayores, transeúntes y milicianos.”

También se instaló un servicio de paquetería para los milicianos del frente:

Servicio de paquetes al frente para los milicianos

Ha vuelto del frente la expedición organizadora del servicio dirigido por el profesor Escoda. Donde han montado oficinas de distribución en Barbastro, Angüés, Sariñena, Bujaraloz y Caspe. De esta manera, el envío de paquetes dará su máximo rendimiento.

La Veu de Catalunya: diari catalá d’avisos, noticias y anuncis: Any 46, Núm. 12561 (25 set. 1936) Ed. Matí.

Relación de paquetes devueltos del frente sin remitentes 

Entre los muchos devueltos, cuatro paquetes son devueltos desde Sariñena, los de Jesús Argensó Villanova, Tomás Beneit Ribera, Josep Boladeras y Climent Carné.

Paquetes del frente sariñena

La Humanitat: Any 7, núm. 1829 (6 gen. 1938).

Además se desarrollaron diferentes Comités de Intendencia, Abastos, Colectividad, Transportes… para la organización e intendencia, tanto como para el frente como por posición de retaguardia. Se crearon vales para comidas, en el comedor popular, para compras y hospedaje, además de billetes propios del Consejo Municipal en junio de 1937.

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Franz Borkenau, en El reñidero español relata como a partir de Fraga, en la línea del frente, «Toda comida está rígidamente racionada, al igual que el hospedaje». Cuando llega a Sariñena, el 13 de agosto de 1936, narra «Fue una lucha conseguir vales para nuestras comidas y habitaciones, ya que cada comida debía de ser solicitada  por separado al comité local. Se calculan las provisiones  regulares contando sólo con los habitantes y la milicia pero no se nos invitó, después de alguna discusión, a comer en el comedor de milicias y así logramos conocer a muchos de ellos».

Salvoconducto

* Autorización de circulación a nombre de Juan Segués para trasladarse a Sariñena. Comissaria Delegada de la Generalitat a Lleida. Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-1-T-9398.

Concha Buisan Ballarín recordaba como durante la guerra había ametralladoras por los tejados, su madre hacía la comida a altos mandos de las tropas republicanas que se encontraban por Sariñena.

En Sariñena estuvo destacada la 4ª compañía del 26 batallón de portificaciones al mando del capitán Juan Planae y los sargentos Juan Torrene y Salvador Fernández. Soldados Salvador Dalmen Serna y Vicente Marcos Amarde.

Algunos sariñenenses marcharon al cercano frente de Alcubierre a luchar y allí encontraron la muerte, entre otros Salvador y Mariano Grustán Tella, Manuel Villa y Antonio Ancho.

Desde Sariñena fueron evacuadas muchas milicianas y mujeres del frente a las que culpabilizaban por el elevado caso de enfermedades venéreas en el frente.

La orden de Durruti a Mosén Jesús, que éste cumplió disciplinadamente, fue la de recorrer todas las centurias, recoger a las mujeres “sin dejar una siquiera”, trasladarlas a Sariñena y enviarlas en tren a Barcelona. Esa escena la recreó Vicente Aranda en su película “Libertarias”, en la que un Miguel Bosé algo blandito y redicho interpreta el papel de Jesús Arnal.

Juan García Oliver

«Hay un capítulo sobre la columna que me gustaría aclarar: es totalmente falso que Durruti hiciera fusilar prostitutas. Efectivamente, llegaron algunas prostitutas por su cuenta y se les hizo regresar a Barcelona ante los temores de contagio de enfermedades venéreas, eso es todo. Esa imbecilidad del fusilamiento la inventó una escritora comunista.» El amor y la lucha de un anarquista, entrevista a Emilienne Morin compañera de Durruti, realizada el 12 de febrero de 1977 en Francia, por Pedro Cuesta y Luis Artime, revista «Interviú».

Hurtos en huertas y la piscina de los depósitos de agua potable

El comportamiento de los milicianos produjo algunos incidentes con la población, y a la vez curiosos, como el robo en huertas o el mal uso de los depósitos de agua potable, utilizados como baños y piscina. Así da cuenta del malestar de la población la siguiente declaración del Consejo Municipal de Sariñena del 21 de junio de 1937: “Se acuerda pasar un oficio al Cuartel General referente a que por los medios que estén a su alcance prohíban los abusos que a diario se vienen cometiendo con las hortalizas de la huerta por los milicianos y soldados de los diferentes destacamentos en esta villa y especialmente que nadie se bañe en los depósitos del agua potable como hasta la fecha vienen haciendo pues caso contrario serán denunciados todos estos hechos al jefe de la 4ª División del Ejército del Este.» (Actas Consejo Municipal).

Indeseables

De Sariñena han sido traídos a Barcelona dos hombres y tres mujeres cuyo comportamiento se consideró indeseable en aquella zona. Ingresaron en los calabozos da la Jefatura de Policía. La Voz, 26 de octubre de 1936.

Indeseables 1

Camión de Propaganda

En noviembre de 1936, una comisión compuesta, entre otros, por Miravitlles, representante de la Generalidad de Cataluña, Urales, uno de los venerables jefes de la CNT y Cusó de la UGT, Ehrenbourg visitó diferentes localidades del frente de Huesca, entre ellas Barbastro y Sariñena. La comisión consistía en una caravana compuesta principalmente por un Camión de Propaganda ofrecido por la Asociación Internacional de Escritores Antifascistas a los escritores catalanes. El camión llevaba instalada una imprenta, un aparato de cine y un altavoz que debía servir para todo un sistema de propaganda que la Generalidad de Cataluña se proponía establecer en el frente y en la retaguardia. El film que proyectaron fue Tchapaiev, una película de guerra soviética de 1934, “En Sariñena, en presencia del jefe superior del frente de Aragón, el comandante Reyes y del coronel Guarnel, tiene lugar otra representación” (Nuestra lucha: portavoz de la Unidad Obrera: Año I Número 85 – 1936 Noviembre 22).

Las bibliotecas

Para dar servicio de biblioteca y favorecer la lectura y cultura en el frente, la Generalidad de Cataluña, a través de un decreto del 17 de febrero de 1937, crea el Servicio de Bibliotecas del Frente. El servicio nació para la creación de “Bibliotecas en primera línea, en la retaguardia y en los hospitales de sangre así como en los hospitales de convalecencia y en los establecimientos de reposo” (EN CATALUÑA: Las bibliotecas como instrumento de libertad ).

Bibliotecas al frente

Servicio de bibliotecas al frente.
Amic: publicació quinzenal per a esplai del soldat català de l’Exèrcit de la República, editada pels Serveis de Cultura al Front del Departament de Cultura de la Generalitat: Núm. 2 (2a quinzena gen. 1938).

Bibliotecas al frente 2

El servicio de bibliotecas del frente.
Meridià: setmanari de literatura, art i política, tribuna del Front Intel·lectual Antifeixista: Núm. 39 (7 oct. 1938). p. 5-p. 8.

Todo apunta que en Sariñena llegaron a haber varias bibliotecas, una en el Hospital Militar de Sariñena y otra, al parecer, en la calle Goya número 72. Esta última citada también en el número 76 de la misma calle Goya: “Para pedidos de libros dirigirse a la subcentral de Sariñena del Servei de Biblioteques del Front c/ Goya 76.” (El Servei de Biblioteques del Front 1936-1939 María C. María Teresa Boada I Vilallonga Vicenç Allué I Blanch Cuguero I Conchelo). También hay una cita de una tercera biblioteca en calle del Mercado (Impresiones de Guerra. Flecha).

El día 28 de febrero de 1937, la Agrupación de Profesionales de Bibliotecarias de Catalunya, publica la siguiente nota “Debiéndose proveer las subcentrales de Barbastro, Monzón, Sariñena, Caspe y Alcañiz, se ruega a todas las bibliotecarias que deseen ocupar uno de esos lugares que lo comuniquen por escrito o personalmente, hoy, de once a una de la mañana, a esta agrupación” (Diario La Humanidad,).

Así, a partir de febrero de 1937, Sariñena se convierte en subcentral del Servicio de Bibliotecas del Frente, una de las dos subcentrales que, el servicio de bibliotecas en el frente, estableció en el frente aragonés: Sariñena y Alcañiz. Aunque, según Vicenç Allué, la sala de lectura de la subcentral de Sariñena no fue inaugurada hasta agosto de 1937 (El servei de Biblioteques del Front epopeia cultural del segle XX. Vicenç Allué). Además, apunta Allué, las dos subcentrales respondieron a la primera etapa del servicio de bibliotecas en el frente: «Es la etapa de las subcentrales de Sariñena y Alcañiz al frente de Aragón –posteriormente Ejército del Este. M. Felipa Español y Rosa Granés se encargarían inicialmente de forma voluntaria de las dos subcentrales y su despliegue respectivamente.»

«El Servicio de Bibliotecas del Frente quiso acercarse a los escenarios directos de la lucha y para ello se crean dos subcentrales en zonas del frente aragonés: en Sariñena y en Alcañiz, desde donde se llegará a los destacamentos de primera línea y a los hospitales de campaña, a los que se mandarán lotes de libros.» 

«En la Subcentral de Sariñena la persona responsable del servicio fue la bibliotecaria M.ª Felipa Español, que empezó a trabajar allí el mes de abril de 1937, Además de actuar como central, organizó una pequeña biblioteca de atención directa a los soldados, al estilo de las bibliotecas populares. Esta subcentral en 9 meses sirvió 12.488 volúmenes y prestó 24 muebles biblioteca. M.ª Felipa Español llevó a cabo una labor entusiasta e intensísima, multiplicando su actividad, para acercar los libros a los soldados que luchaban y a los heridos. Prueba del reconocimiento a su labor es que llegaron a nombrarla teniente!

En Cataluña: Las bibliotecas como instrumento de libertad
El Servei de Biblioteques del Front 1936-1939/ Cugueró, Boada, Allué. p.76.

Biblioteca Sariñena (2)

Servei de Biblioteques del Front, subcentral de Sarinyena, 13 de agost de 1937.
Arxiu General de la Diputació de Barcelona. Fotografía Felipa Español Coll. 

No obstante, antes ya existía una red de bibliotecas y un reparto de libros al frente y hospitales. La Vanguardia, el 19 de agosto de 1936, da cuenta del reparto de libros a través de la Oficina de reparto mensual de libros. En esta ocasión por encargo del Comité Central de Milicias, Servicios Sanitarios, regentado por Javier Escoda, efectuándose las siguientes remesas: “Hospital General de Cataluña, 130 obras; Hospital de Sangre de Tardienta, 20; ídem ídem de Bujaraloz, 20; ídem ídem de Sástago, 20; ídem ídem de Sariñena, 20; Clínica La Alianza, 120; Clínica de Barbastro, 15; Hospital Clínico, 118; Clínica Psiquiátrica, 30. Total, 493. Se espera recibir nuevas donaciones de libros destinados a los citados hospitales de sangre y casas de convalecencia”.

En el mismo sentido, libros para el frente y los Hospitales: «La Agrupació d’Escriptors Catalaus, U. G., continúa activando la recogida y remesa de libros para el frente, hospitales de sangre y centros antifascistas, con la colaboración del Comité Sanitario, que tiene a su cuidado hace llegar los paquetes a su destino. Últimamente han sido repartidos los volúmenes siguientes: 1.200 libros a los hospitales de sangre de Angués, Siétamo, Puebla de Híjar, Bujalaroz y avanzadas del frente. 100 al hospital de sangre de Sariñena.» (La Vanguardia, 22 de octubre de 1936).

Una labor cultural para el frente

La «Agrupació d’Escritors Catalans», continúa activando la recogida y remesa de libros para el frente, hospitales de sangre y centros antifascistas, con la colaboración del Comité Sanitario, que tiene a su cuidado hacer llegar los paquetes a su destino.

Últimamente han sido repartidos los volúmenes siguientes:

1.200 libros a los hospitales de sangre de Angués, Siétamo, Puebla de Híjar, Bujalaroz y avanzadas del frente.
100 al hospital de sangre de Sariñena.
250 al Comité Sanitario para diversos destinos.
180 al Ateneo Enciclopédico «Sempre Avant», de Sans.
150 a la Biblioteca Obrera de Mongat.
200 a la Biblioteca Obrera de Agramunt.
Un lote de libros franceses al frente aragonés.

La Gaceta de las artes gráficas.

La bibliotecaria M.ª Felipa Español Coll se hizo cargo de la biblioteca de Sariñena, desde el 1 de agosto de 1937, tal y como dejo constancia en una de sus cartas a Jordi Rubió, director del Servicio de Bibliotecas en el Frente: «La Biblioteca ha estado abierta al público militar desde el pasado 1 de agosto, de 11 a 2 de la mañana y de 6 a 9 de la tarde. Me sentía amiga de todo el mundo (…) Estoy entusiasmada de mi labor y quisiera que el día tuviera 48 horas para poder avanzarla más”.

“Del sector Norte, con la subcentral de Sariñena, está encargada María Felipa Español. Una chica interesante, de mirada inteligente, seria, callada, con la resolución reflejada en el rostro. No le preguntamos si tiene miedo, porque en el porte sereno se adivina la respuesta.”

Galeron Egaña (1938)
“Cataluña y la Guerra: El Servicio de Bibliotecas del Frente” Revista Blanco y Negro.

Carnet Felipa Espanyol

Felipa desarrollo una gran labor, una actividad que la misma M.ª Felipa detalló en varios informes al Servicio de Bibliotecas del Frente (El Servei de Biblioteques del Front 1936-1939 María C. María Teresa Boada I Vilallonga Vicenç Allué I Blanch Cuguero I Conchelo). Así, Allué recoge: «En los informes preparados por ambas bibliotecarias se destaca una actividad importante: a Sariñena, en los nueves meses de actividad de 1937, se sirvieron 12.488 volúmenes y 24 muebles-biblioteca, con una circulación de 10.680 volúmenes. M. Felipa Español pudo contar con la circunstancia favorable que Sariñena era plaza principal del ejército del frente del este, y dispuso de mayor colaboración por parte de las autoridades militares.» (El servei de Biblioteques del Front epopeia cultural del segle XX. Vicenç Allué).

 “Se cuenta, actualmente, en la central de Barcelona, ​​con más de 10.000 volúmenes, de los que se eligen los lotes que irán a las subcentrales de Cervera y Tarragona y de estos sitios en los hospitales y avanzadas de Aragón. Hasta ahora dos compañeras, Rosa Granés y María Felipa Español, se han ofrecido de encargarse de estas bibliotecas”.

Boletín del mes de marzo de la Escuela de Bibliotecarias y de las Bibliotecarias de Cataluña.

María Felipa Español Coll

María Felipa Español Coll. Foto carnet de bibliotecaria del Servei de Biblioteques del front. Cortesía Pilar Vives.

La figura de M.ª Felipa ha sido estudiada por la historiadora Pilar Vives Corbella. M.ª Felipa Español Coll, nació en Valls (Tarragona) en 1910 y residió en Barcelona donde estudió en la Escuela de Bibliotecarias. Al finalizar sus estudios en 1936, y con la creación del Servicio de Bibliotecas en el frente, M.ª Felipa se presenta voluntaria para ejercer de bibliotecaria en el frente de Aragón, labor que desarrolló en la subcentral de Sariñena a partir de la primavera de 1937. Se presentó como voluntaria al igual que Rosa Granés, que se ocupó de la subcentral de Alcañiz. María Felipa fue descrita como «Morena, fuerte, segura de sí misma, que tenía un espíritu muy guerrero. La nombraron teniente del ejército por su labor en primera línea del frente» (María Teresa Boada i María Cugueró «Érem tan, tan innocents…» Entrevista realitzada per Núria Ventura i Jesús Gascón).

Felipa abandonó Sariñena en marzo de 1938 con la caída del frente aragonés, “Bajo una avalancha de metralla, intentando salvar los libros, la documentación, y la vida” (Pilar Vives). Tras la guerra, M.ª Felipa ejerció como abogada laboralista y falleció en Barcelona en 1995.

«María Felipa debía ser mayor; recuerdo que, incluso físicamente, era una chica alta, fuerte, cuadrada y con el pelo negro y los ojos negros, con un poco de bigote. Estudió Derecho y dejó definitivamente el ámbito de las bibliotecas. Lo que me extraña es que no le pasara nada, porque había sido teniente del ejército y todo. Ejerció de abogada y trabajaba para mejorar la situación de la mujer. Murió mientras hacíamos el libro; de hecho, le habíamos pedido de hacerlo juntas, pero nos dijo que no, que de momento no, que ella también pensaba hacer algo. Murió poco después, pero».

María Teresa Boada i María Cugueró «Érem tan, tan innocents…»

Entrevista realitzada per Núria Ventura  i Jesús Gascón). 

El 2 de septiembre de 1937, María. Felipa Español Coll, desde Sariñena, dirigió una carta al Dr. Jordi Rubió Balaguer, director del Servei de Biblioteques del Front. ( M. Cugueró Conchelo, M. T. Boada Vilallonga, V. Allué BLANCH (1995) El Servei de Biblioteques del Front. Ed. Diputació de Barcelona). En dicha misiva describe la biblioteca de Sariñena y parte de su labor en ella:

 “Desde que me he quedado sola en el local que compartía con el “Servicio de Tramites al Fronte”, he procurado hacerlo parecer una Biblioteca. Por ahora el mobiliario es este: 16 m. de estanterías. 1 mesa que hace 9*3,5 palmos, 5 sillas (cuando necesito más, me las dejan ), un pupitre, una especie de mueble mitad armario mitad fichero que he hecho aprovechando unas cajas, una mesa con una máquina de escribir (que va muy mal) y 2 luces que iluminan muy bien el local. También un fuelle de flit que no vara cada día y gracias al cual he conseguido que las moscas me respeten y un jarrón que se ha de contentar con flores de campos porque no tengo otras.

En estas condiciones y prevista con 400 títulos y el doble de volúmenes, la Biblioteca ha estado abierta al público militar desde el 1er de agosto pasado, de 11 a 12 de la mañana y de 6 a 8 de la tarde”

En Cataluña: Las bibliotecas como instrumento de libertad, se apunta que de los informes elaborados por las bibliotecarias de Alcañiz y Sariñena «Se desprende que más de la mitad de los libros consultados eran de literatura, aunque también se leían libros otros temas». En ellos Mª Felipa Español cuenta «los heridos de los hospitales piden sobre todo novelas de aventuras y que “cuando a un lector le gusta mucho un libro, luego lo lee toda la sala. Me ha pasado con “Zalacaín” de Baroja, con “La tournée de Dios” de Poncela”. Y concluye “A la vista de los libros, se vuelve lector el más reaccionario, son poquísimos los que en el hospital pueden leer y no lo hacen”.

Con la caída del frente de Aragón, los bombardeos y la retirada, la subcentral de Sariñena cesó su actividad en marzo de 1938.

Desde el inicio de la Guerra Civil española, el Comisario de Propaganda de la Generalitat de Cataluña recogía y enviaba libros al frente de guerra dónde estaba la tropa. Esta iniciativa fue en aumento y dio origen a que la Consejería de Cultura de la Generalitat creara un servicio de lectura para los soldados bajo la denominación de «Servicio de Bibliotecas del Frente», creado por Decreto de 17 de febrero de 1937. Estaba inspirado en la experiencia americana de la I Guerra Mundial que puso en marcha bibliotecas para atender a los heridos. Se organizó con la creación de bibliotecas en primera línea, en la retaguardia y en los hospitales de sangre así como en los hospitales de convalecencia y centros de reposo. Se crearon dos subcentrales en zonas del frente aragonés, concretamente en Sariñena y en Alcañiz. Se nombró directora del Servicio de Bibliotecas a la bibliotecaria Concepción Guarro, aunque los motores y protagonistas de la iniciativa fueron Jordi Rubió y Pepita Callao. Los lotes de libros se enviaban según la demanda y en cuanto a su temática estaban pensados para ofrecer entretenimiento por lo que la mayoría eran obras de literatura. Además se establecieron bibliotecas en los hospitales de sangres, edificios habilitados como hospitales para tratar a los heridos y también se puso en marcha un servicio de bibliobús en 1938. Se calcula que el Servició pudo poner en circulación unos cien mil libros en los dos años que estuvo en funcionamiento. Al final de la guerra, cuando ya Franco estaba a punto de entrar en Barcelona, el bibliobús condujo a un grupo de escritores hacia Francia camino del exilio. (http://pares.mcu.es/).

Reparto de juguetes

El 10 de enero de 1937 se realizó un reparto de juguetes en Sariñena. Un acto simpático, como lo definió Arturo Morera, quien además señaló que la distribución de los juguetes «Contó con la meritoria ayuda de las muchachas de las Juventudes Socialistas y de las Juventudes Libertarias, presididas por la mujer del Teniente Coronel Reyes». La organización de los festejos corrió a cargo de la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel General del frente de Aragón.

Organizado por «La Dona a la retaguardia» ha tenido lugar en Sariñena y Albalatillo, pueblos fronterizos con la línea de fuego del frente aragonés, la fiesta del reparto de juguetes a los niños de aquellas poblaciones. 

La Oficina de Censura y Propaganda del Cuartel General quiso contribuir al lucimiento de la fiesta infantil organizando el reparto de los juguetes, a la vez que haciendo ejecutar un selecto programa de música, a cargo de la benemérita Banda del campo de Aviación Alas Rojas.  dirigida por el maestro Francisco Llop y cedida por el teniente coronel Alfonso de los Reyes.  

La Plaza Roja, de Sariñena, ofrecía un bello aspecto. niños y niñas de todas las edades daban la nota de alegría a estos pueblos de Aragón.

Terminado el concierto empezó el reparto recibiendo los juguetes, en primer lugar, los huérfanos de la guerra. después los hijos de los refugiados, y, por último, sin distinción recibieron el ansiado juguete el resto de niños de Sariñena.

La fiesta se celebró en la Casa de la Villa de Sariñena y en la escuela de Albalatillo, por una comisión de compañeras de las juventudes Socialistas y Juventudes Libertarias. 

Día Gráfico 1937.

Arturo Morera cita que también se repartieron juguetes en la escuela de Albalatillo al día siguiente.

La importancia de Sariñena en el frente

«Nuestra  villa jugó un papel muy importante en las vicisitudes nacionales de la guerra civil de 1936 a 1939», manifestó el historiador sariñenense Arturo Morera Corull en una serie de artículos publicados en «Quio, revista de Sariñena y Los Monegros»: «Escritores famosos, como el soviético Illya Ehrenburg; aviadores intrépidos como el «Diablo Rojo», Jesús García Herguido o el ruso Iván Kopts («José»); jefes de columnas de milicias, como el mítico anarquista Buenaventura Durruti o el socialista José del Barrio; jefes militares republicanos como los generales Pozas, Aranguren, Martínez Cabrera o el coronel Villalba; políticos como el presidente de la Generalidad de Cataluña, Luis Companys, o los ministros anarquistas García Oliver y Federica Montseny; personajes muy populares en Sariñena como fueron el teniente coronel Reyes, jefe del campo de aviación, o el comisario Franco quizá; médicos corno el creador de los hospitales de sangre, doctor Bergós, que tanto hizo por dotar con los mejores medios al hospital de Sariñena durante el dominio republicano; jefes prestigiosos del Estado Mayor republicano corno los tenientes coroneles Antonio Cordón y Vicente Guarner; jefes militares rusos como los coroneles Savin y Glinoidski («Jiménez Orgue»); generales del ejército de Franco que ocuparon Sariñena en marzo de 1938, como el laureado José Moscardó o a los generales Sueiro y Ricardo Marzo.» 

Noticias desde el frente

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Desde Sariñena, la agencia de noticias Febus enviaba sus partes de guerra al periódico ABC . También se cuenta con escritos en Solidaridad Obrera de su paso por Sariñena de su corresponsal Hermes de Soli. El 30 de septiembre de 1936, Hermes escribe sobre la llegada a Sariñena de una brigada de policía para investigar unos supuestos espías, quienes al parecer fueron fusilados en el campo de aviación. Hermes conoció al Teniente Reyes: “El jefe de este campo, es el Teniente Reyes; camarada de todos y gran experto en su oficio. Sus órdenes, dejan de serlo, por el acento que pone al darlas. La sencillez raya la modestia y todo lo ve, de todo se preocupa y hasta no escatima la vida cuando de jugársela se trata. Ahí está una hazaña que no es conocida. El día 5, remontó el vuelo en un avión de caza y -¿Cuáles eran sus propósitos? Lo cierto fue, que, sólo voló sobre Zaragoza y volvió sin darle poca importancia al gesto. ¿Qué paso en el campo de Zaragoza, donde tienen nueve aviones Italianos tipo Caprioni? ¿Seguramente, quedaron sus pilotos (dicen que Alemanes), atónitos del gesto de audacia?”. Hermes continua “es el guardia de ese campo y jefe de las milicias, un muchacho menudo, de nervios de acero y que ha dado pruebas de arrojo sin igual. Dicen que el movimiento le sorprendió como agente de seguros y ahora su porte guerrero y sus hazañas lo han convertido en el Alférez Franco. ¿Lástima que lleve el apellido de un traidor! Yo que él, me haría nombrar por el apellido materno pues resulta incongruente de que dos nombres, uno traidor a su pueblo y otro defensor del mismo, se nombren con las mismas letras”.

Dos guardias de Asalto, detenidos

Han ingresado en los calabozos de la Comisaría General de Orden Público, dos guardias de Asalto que procedían de Sariñena. La Policía ha abierto una información que tiene por objeto esclarecer algunos hechos que se atribuyen a los detenidos. Ambos ingresaron, rigurosamente incomunicados, en los calabozos de dicho establecimiento.

La Batalla: Número 39 _ 16/09/1936.

Espías detenidos

Procedentes de Sariñena fueron trasladados en calidad de detenidos, Luciano Rordíguez Vicente y Consuelo González Serra, los cuales están complicados, con los otros detenidos que pertenecían al regimiento de Santiago y que se alistaron en las milicias antifascistas después de los hechos facciosos de Barcelona, en los cuales tomaron parte.

La Batalla: Número 69 _ 21/10/1936.

Fueron muchos los corresponsales y periodistas que pasaron por Sariñena, dejando sus crónicas y testimonios, como Franz Borkenau, Ana María Martínez Sagi, Hugh Thomas, Lluís CapdeVila, Marcial Fernandez o J. Aymami Serra entre muchos otros.

Corresponsal de guerra J. Aymami Serra para La Humanitat

Los franceses Lucien Vogel, director del seminario ilustrado, Paul Ritelheuber, redactor en jefe e hijo del embajador de Francia en Oslo, el fotógrafo Meurisse y la redactora Madeleine Jacob pasaron por Sariñena el 14 de agosto de 1936.

La Humanitat: Any 5, núm. 1398 (19 ag. 1936).

Detención chofer

En Sariñena ha estado detenido un chofer que prestaba servicio en esa demarcación.

La Humanitat: Any 5, núm. 1399 (20 ag. 1936).

El exministro Barnés visita Sariñena y Bujaraloz

Barbastro 8 (1,30 m.).—El ex ¡ministro Sr. Barnés visitó los frentes de Sariñena y Bujaraloz.

Ministro Barnés

El Liberal, 8 de octubre de 1936.

(No consta cuál de los dos hermanos fue, Domingo o Francisco Barnés Salinas).

En el frente de Aragón

Estuvo, hoy, en el frente de Huesca, una comisión de periodistas barceloneses, entre los que vimos a los compañeros Massip, Pomés y González, que cumplimentaron al coronel Villalba y luego asistieron a una fiesta que, presidida por el comandante Reyes, se celebró en Sariñena para festejar la boda del oficial de aviación Robles (Hoja oficial de la provincia de Barcelona: Época Segunda Número 570 – 1936 Noviembre 16).

Convocó, un sábado a las nueve de la mañana, un Consejo de Guerra en Sariñena, en el puesto del comandante Reyes, en Sariñena. Debían de asistir el Coronel Villalba, el Comandante Reyes, Durruti, Ortiz, uno de los jefes de la columna “Rojinegra”, otro de los jefes de la columna del PSUC y uno de la columna del POUM. Viajó de noche aguantando una lluvia torrencial y gracias a la pericia de “gasolina” llegó al puesto de mando de la aviación en Sariñena. Penetró en la casita que servía de comandancia, donde le recibió la esposa del Comandante Reyes y por una hermana de ella. Llegados los convocados se celebró el Consejo de Guerra para designar el jefe de Operaciones del Frente de Aragón, quien al final fue José Villalba.

Juan García Oliver

El Eco de los pasos.

Estación de Radio Reinosa. Servicio de socorro

Nuestra emisora ha transmitido las siguientes notas de este servicio que tanta aceptación está teniendo: “Sebastián Novel, de Sariñena (Hueca). Sus hijos, Agapito y María, están sin novedad”.

El Cantábrico: Diario de la mañana: Año XLII Número 14431 – 1936 agosto 2.

Desaparecido

Félix Gómez, de 18 años que se encontraba el 5 de agosto en Sariñena (Huesca), en la primera columna Grossi-Arqués POUM. Darán razón a su padre José Gómez, domiciliado en Maqueda (Toledo).

Hoja Oficial del lunes: editada por la Asociación de la Prensa – Año VII Número 310 – 1936 septiembre 7 (07/09/1936).

Matrimonio

Joan Tora, miliciano en el frente de Aragón, en Sariñena, solicitó un permiso para contraer matrimonio con Enrica García de 20 años de edad. Natural del Hospitalet de Llobregat , Joan contaba con 23 años y estaba afiliado al PSUC (Diario de Barcelona 15 de septiembre de 1936).

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Aragón

En Sariñena toda la población está motorizada, pues se trata de un pueblo férvidamente republicano.

Heraldo de Castellón: Año XLVII Número 14372 – 18 Septiembre 1936.

En el frente de Zaragoza

Llegamos así a Sariñena, pequeña ciudad perdida en medio de una llanura desecada. Allá se encuentra el abastecimiento de las columnas que operan entre Zaragoza y Huesca. A un lado el campo de aviación de las milicias catalanas. Por la tarde la ciudad está en calma, casi desierta, bajo su cielo de fuego. Desde allá, otro coche lleva el correo y nosotros hacía el frente.

Reproducción de Le Jeune Garde, órgano de las Juventudes Socialistas del Sena.
La Batalla: Número 93 _ 18/11/1936

Tres mujeres y dos hombres detenidos en el frente

De Sariñena han sido traídos a Barcelona dos hombres y tres mujeres, cuyo comportamiento se consideró indeseable en aquella zona. Ingresaron en los calabozos de la Jefatura de Policía.

La Libertad: La Libertad – Año XVIII Número 5172 – 1936 octubre 26 (26/10/1936).

A Sariñena

A mediodía de hoy a marchado a Sariñena, el Consejero de Trabajo y Obras Públicas para efectuar una visita de inspección a las carreteras.

Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14469 – 09 Enero 1937.

Sariñena. Bajo una cobertura de plomo

El sol ha desaparecido hace días del cielo de este lienzo de Aragón – la población de Sariñena tiene el aspecto triste de la tierra alta, humedecida siempre por la niebla que, como, una humareda persistente, se escapa de su sol  rojo-negro. Los días fluyen con una monotonía abrumadora. Sólo el ir y venir de los milicianos, que dejan ir por el espacio la abigarrada policromía de sus canciones, deshace, por un momento, la dura continuidad de todas las horas.

Son los preparativos bélicos, la continua formación y transformación de los Ejércitos de la República, la única cosa que da algo de vitalidad a esta población, plácidamente callada, extraordinariamente quieta. Las canciones, los gritos, la efervescencia de los hombres que de las avanzadas de la sierra de Alcubierre retornan a la paz paradisiaca de Sariñena y los que desde esta posición de retaguardia van al relevo de sus hermanos de vanguardia, son el punto neurálgico de toda su actividad.

Sariñena vive bajo la influencia de la guerra y de la actividad de la guerra; pero bajo la apariencia de una vitalidad extraordinaria, bulliciosa, la población civil se mueve dentro de la monotonía placida de su tradición histórica.

Y aunque, en la paz de Sariñena, destaca, como un oasis en la chillante de la actividad bélica, la quietud permanente del Hospital de Sangre. Quietud y silencio que contrasta con la actividad, también permanente, de aquellos que abnegadamente han puesto todo su esfuerzo en defensa de los hombres que han caído al frente de batalla en plena lucha contra los asesinos del pueblo, puestos al servicio del fascismo internacional.

Cada día llegan a nuestras filas procedentes del campo enemigo, fugitivos que escapan de la barbarie fascista, y que rompen, por un momento, la monotonía de Sariñena. Los que han llegado hoy son cuatro hombres de izquierdas, soldados obligados  de los ejércitos del crimen, huidos de Huesca han pasado a Yequeda y desde allí a Barluenga, para venir después a Sariñena.

F. V. Jaquetot

Mirador: setmanari de literatura, art i política: Any IX Número 407 – 1937 febrero 12.

Los pobrecitos moros se mueren de frío.

Y a los que reclaman ropa y comida se les maltrata y encarcela.

BARCELONA 12.-Comunican de Sariñena que el duro temporal que desde hace tiempo se padece en los frentes de Aragón ha sido la causa de que muriera gran número de moros en este sector. En las posiciones enemigas conocidas con el nombre de Ermita Bella, ha sido donde se ha registrado el mayor número de defunciones. La escasa comida que se les proporciona tiene a los soldados de las líneas enemigas en lamentable estado. Además, carecen de ropas de abrigo, pues no llevan más que las chilabas que se trajeron de Marruecos.

Como los pocos moros que quedan han reclamado fuesen subsanadas estas deficiencias, han sido encarcelados algunos de ellos.

El Liberal, 13 de febrero de 1937.

Pobrecitos moros

Las patatas de la Estación de Bogatell

Los trabajadores del mercado del Borne barcelonés, empresa colectivizada, vienen, desde hace días negociando con la casa Pieraerts, de Amberes (Bélgica), cuarenta vagones de patatas, cantidad destinada a surtir a las diversas columnas de los frentes de Aragón, donde más que en la retaguardia barcelonesa, se nota la necesidad de este artículo alimenticio, así como a hospitales, clínicas, etc.., función que viene desempeñando de acuerdo con la Consejería de Defensa desde el 19 de julio.

El reparto fue el siguiente:

División Luis Jubert                   10.000 kilos
Columna Maciá Companys      10.000 Kilos
Columna Maciá Companys      10.000 Kilos
Columna Carlos Marx               10.000 Kilos
Columna Carlos Marx               10.000 Kilos
Columna Durruti                       10.000 Kilos
Columna Durruti                       10.500 Kilos
Columna Francisco Ascaso      10.000 Kilos
Columna Francisco Ascaso      10.100 Kilos
Columna Roja y Negra              10.000 Kilos
Columna Pedrola y Maurin     10.000 Kilos

Estas cantidades han sido facturadas a las estaciones de Puebla de Hijar, Alcañiz, Tardienta, Lérida, Selgua y Sariñena respectivamente, y cuyos talones de facturación obran en poder de la Consejería de Defensa.

Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14497 – 12 Febrero 1937.

Se sustituyen todas las banderas antifascistas por la nacional

BARCELONA, 16,—Comunican de Sariñena que todas las fuerzas que operan, en el frente de Aragón han puesto en práctica el acuerdo de retirar de los diferentes sectores las banderas y símbolos de las diversas organizaciones y partidos antifascistas representados еn las Milicias. Todas ellas han sido sustituidas únicamente por la bandera republicana con las iniciales «U. H. P,». Ahora, miércoles 17 de febrero de 1937.

Banderas

La bandera nacional

Sariñena. Las columnas gubernamentales han desfilado llevando como únicas banderas la enseña nacional. Muchos soldados se han puesto escarapelas en el gorro con la bandera tricolor.

Se remarca que las milicias de algunas organizaciones sindicales han desfilado también llevando al frente la bandera republicana.

La Voz de Menorca: diario republicano: Año XXXII Número 9624 – 1937 febrero 17.

Una caravana de víveres

Esta mañana, y después de breve estancia en Valencia, ha salido una caravana compuesta de ocho grandes camiones cargados de víveres, con un total de 32 toneladas de víveres que han sido adquiridos por la Agrupación Socialista de Sariñena.

Los alimentos son muy variados y de gran calidad.

La Publicitat Sariñena

  La Libertad: La Libertad – Año XIX Número 5296 – 1937 marzo 13 (13/03/1937).

Viveres Sariñena

El Liberal, 13 de marzo de 1937.

Aragón. Las operaciones al frente de Sariñena

Sariñena, 17. -El tiempo es frio y ventoso. Por eso las operaciones han quedado reducidas a insignificantes actuaciones de avanzada.

Se trabaja en todos los frentes con fuerte intensidad en previsión de futuras contingencias. Se siguen aquí con el mayor interés las incidencias de la lucha al frente de Madrid y se esperan repercusiones de aquellas operaciones en este sector.

Hoy se han vuelto a sentir el cañón en diversos lugares, pero el fuego ya no tiene la intensidad de días anteriores.

La Publicitat: (18 Març 1937).

Víveres a Madrid

El pueblo de Sariñena (Huesca) ha enviado 12.000 kilos de harina, 3.500 de patatas. 1.100 de azúcar, 1.025 de lentejas, 557 de judías, 100 de bacalao, 190 de chocolate, 1.23-1 litroLS de aceite, 1.470 kilos de jabón, etc., etc.

La Voz,  20 de marzo de 1937.

Víveres Madrid

Multas

Con esta fecha hace entrega la Delegación de Sariñena. de las cantidades que a continuación se detallan, impuestas como multa los individuos que se mencionan: Pedro Abat, 500 pesetas; Enrique Val. 500; Alejandro Calvo, 1.000; Pascual Galindo, 500; Pedro Uriol Pueyo, 200; Fidel Ardanay, 200; Rafael Giral, 200; Manuel Miralles, 500.

Orden público. Labor del Consejo de Aragón y notas oficiales.
Nuevo Aragón, 6 de abril de 1937.

Multas Nuevo Aragón

Los facciosos llaman a filas las quintas del 27 y 28

SARINENA , 20 (3,30 m.).—Unos soldados recién llegados del campo enemigo al frente de Aragón dan cuenta de que el Gobierno faccioso ha llamado a filas a la quinta de 1928 y anuncia el llamamiento de la de 1927.—Febus. Ahora, 21 de abril de 1937.

Comité Regional de Enlace CNT-UGT

El 2 de mayo de 1937, en diferentes poblaciones aragonesas, se celebraron actos de «unidad’ afirmación sindical», patrocinados por el Comité Regional de Enlace CNT-UGT. La reunión de Sariñena se llevó a cabo a las once de la mañana  (Nuevo Aragón, 2 de mayo de 1937).

Comité CNT UGT 2 mayo 37

Vibraciones del frente. Tipos y paisajes del frente. Por Ana María Sagi.

El miliciano que se equivoco

Venían de Sariñena, en un auto lleno de polvo; los faros rotos, los guardabarros abollados, el parabrisa hecho cisco. Los tres viajeros, vestían un mono azul, arrugado mugriento; llevaban alpargatas, que en tiempo inmemorial debieron de ser blancas, y una boina oscura metida hasta las orejas. Colgado, en el hombro, un fusil; y en el cinto, una pistola. Se combatía entonces, duramente en Azaila, en Lécera, en Monte Lobo y en Estrecho Quinto. En Caspe, Cuartel General de la Segunda Columna, había intenso movimiento de fuerzas. Llegaban de distintos puntos, y de aquí salían en dirección a los frentes.

Los ocupantes del coche que procedían de Sariñena, eran, a juzgar por su Indumentaria y el armamento, tres voluntarios del Ejército Popular

Me fije en uno de ellos, el ultimo que descendió del coche. Era delgado, pequeñito; tenía la nariz respingona, la boca breve bondadosa, los ojos de un azul pálido. Su expresión era dulce infantil.

Un miliciano, parecido a un monumento de granito de proporciones más que gigantescas, con una barba de dos meses un vozarrón de trueno, se acercó curioso a los recién llegados y a guisa de bienvenida, con sus manos fuertes anchas, comenzó aporrear la espalda del más endeble, del único en el que precisamente yo me había fijado.

-Qué, muchacho: ¿vienes a incorporarte a Ia columna? Porrazo que te crió.

-¿Has estado ya en algún frente? ¿Llegas de Barcelona? ¿Saldrás inmediatamente? ¿En qué trabajabas antes de venir aquí?

A cada pregunta, sucedían, implacables, los golpes «amistosos». El recién llegado debía tener Ia espalda al rojo vivo.

Por fin, al interpelado, con voz suave acento extranjero, imploró amargamente:

-«Please, please, your hands» ¡Usted romper mi espalda con terribles golpes!

El miliciano, atónito, abrió los ojos desmesuradamente. Intentó balbucir unas excusas que se le quedaron atascadas en la garganta. Por último, sin reponerse aún de la sorpresa, murmuró condolido:

-¡Hombre, con esta indumentaria, cualquiera lo adivina!

Tenía razón el miliciano: era extraordinariamente difícil, adivinar, que aquel ser menudo y desgarbado de cuerpo anguloso que llegaba con unos pantalones sucios arrugados, con una camisa de corte masculino, una pistola en el cinto, no era un hombre, sino una mujer.

Nada menos que una súbdita británica, redactora de uno revista femenina, enviada a España a instancias de una agrupación de mujeres feministas con Ia misión de entrevistar a las mujeres más destacadas de nuestra hora actual.

Nuevo Aragón. 06/05/1937.

El general Pozas declara desde Sariñena: «El frente de Aragón responderá en el momento que se consideré oportuno». 

La Publicitat 6 Juny 1937

La Publicitat: 6 de Junio, 1937.

Parte de Aviación

En la edición del viernes 11 de junio de 1937, La voz del combatiente, diario de los comisarios de guerra del ejército del pueblo, recogía un bombardeo sobre la estación ferroviaria de Sariñena. A la vez, daba cuenta de la existencia del cercano aeródromo de alas Rojas.

Zona del Este.— Esta mañana fue bombardeada la estación de Sariñena, en las inmediaciones de cuyo pueblo fue descubierto un aeródromo en construcción, en el cual habla varias apisonadoras.

Bombardeo estación sariñena

Una familia de Ayerbe llega a Sariñena huyendo del fascismo

La Publicitat 7 Juliol 1937

La Publicitat: 7 de Juliol, 1937.

Gestiones de un juez especial

Ha vuelto de Sariñena y otros lugares del frente aragonés el juez del juzgado número 13, señor Galben, donde ha realizado gestiones para descubrir los autores del asesinato de un individuo conocido como “Charles”.

La policía tiene instrucciones concretas para detener a los homicidas.

La Humanitat: Any 6, núm. 1689 (27 jul. 1937).

La aviación facciosa ha bombardeado los alrededores de Lérida y Sariñena.

Ayer, a las 14:40 tres Junkers enemigos bombardearon las proximidades de Sariñena y lanzaron cincuenta bombas sin causar desperfectos ni desgracias personales. Los aparatos escoltados por aparatos de caza volaban a gran altura.

La Humanitat: Any 6, núm. 1745 (30 set. 1937).

La aviación facciosa ha bombardeado las cercanías de Lérida y Sariñena, y posiciones de Camillo y Las Salinas.

Bombardeo Sariñena

La Hora, 30 de septiembre de 1937.

Creación de zonas de recogida en tierras de Aragón.

 Cumpliendo el acuerdo tomado por el Frente Popular Antifascista, se han constituido comisiones encargadas de recoger ropas de abrigo para los soldados del Ejército Popular.

Con objeto que la recogida de estas ropas se pueda verificar con mayor rapidez se han creado las siguientes zonas:

Provincia de Huesca: Barbastro, Benabarre y Sariñena.
Provincia de Teruel: Mora de Rubielos, Montalban y Alcañiz.

La labor correspondiente a la zona de Zaragoza ha estado encargada al Comité Regional del F.P.A. a Caspe, y se responsabiliza particularmente la agrupación femenina.

La Humanitat: Any 6, núm. 1775 (4 nov. 1937).

Incursiones aéreas

Unos aparatos enemigos se internaron en nuestras líneas y llegaron hasta las proximidades de Sariñena pero no pudieron bombardear.

La Humanitat: Any 6, núm. 1776 (5 nov. 1937).

No se atreven a llegar a Lérida

Por la vertical de Sariñena pasaron, a las doce y cuarto, once aviones facciosos en dirección a Lérida. Inmediatamente fue transmitido el aviso oportuno y sonaron las sirenas. Toda la población acudió a los refugios.

Inmediatamente se elevaron unos cazas leales que salieron al encuentro de los aparatos rebeldes pero como los aviones facciosos se dieron cuenta giraron nuevamente en dirección a Zaragoza.

La alarma duró escasamente quince minutos.

La Humanitat: Any 6, núm. 1785 (16 nov. 1937).

140 Brigada Mixta, 32 División

Por el interés de los familiares que componen esta Brigada, se recuerda que desde hoy deberán de enviar toda correspondencia al apartado de correos de Sariñena (Huesca).

La Humanitat: Any 6, núm. 1795 (27 nov. 1937).

La Humanitat 1795

Unos aviones que huían dejan caer algunas bombas cerca de Sariñena

Sariñena (Del enviado especial de Febus). La aviación facciosa, perseguida por nuestros cazas, han lanzado en su huida unas bombas al pasar por esta población: han causado tres leves y no han producido daños materiales.

La Publicitat:, 20 Novembre 1937.

Una bomba en Sariñena

Sariñena. 20 (9m) La aviación facciosa, cuando huía perseguida por nuestros cazas, arrojó una bomba al pasar por esta población y causó tres heridos leves. No produjo diaños materiales.

Bomba Sariñena

La Voz, 20 de noviembre 1937.

Lluvia

Sariñena. — A pesar de la lluvia, que desde hace dos días cae copiosamente, ha habido bastante; actividad en loa sectores de esta Agrupación. La aviación y las patrullas de Infantería se dedican a servicios de reconocimiento y observación, y han menudeado los tiroteos, pero no se han registrado bajas en las filas léales.

Actividad aviación lluvias

Adelante, 28 octubre de 1937.

La aviación facciosa ha bombardeado la sierra de Alcubierre y el pueblo de La Naja

-Esta mañana, a las doce han volado sobre Sariñena 19 aviones facciosos, que han arrojado algunas bombas en la sierra de Alcubierre y La Naja.

Como los piratas del aire tomaran la dirección de Lérida, se previno a aquella población, y sonaron las sirenas de alarma. Como, afortunadamente, no llegaron los citados aviones a Lérida, a los pocos momentos se restableció la normalidad. — Febus.

Bombardeo Lanaja Sariñena

Ahora, 12 de diciembre de 1937.

Wystan Hugh Auden

El poeta y ensayista británico, que posteriormente se nacionalizó estadounidense, participó en la guerra Española apoyando al bando republicano. «Su intención era la de ayudar en cuestiones médicas y sanitarias, y a su regreso a Inglaterra compuso Spain, destinando el dinero recaudado con el poema a la Ayuda Médica Española» (Wikipedia).

“En un diario de 1939, Auden escribía de algo que le había pasado en Sariñena, cuando pensaba alistarse» Orwell y Auden en Los Monegros. Daniel Gascón, El periódico de Aragón. “Allí había perdido un sentimiento que durante los últimos cuatro años llevaba dentro de mi, una parte de mi tenía la voluntad de moral. En aquel pueblecito Aragonés una voz interior me dijo NO. Aquella tarde en Sariñena (sic) me di cuenta de que otra parte de mí quería desesperadamente seguir viviendo” (Cuando la historia te quema las manos: Auden y Orwell entre dos guerras/ Miquel Berga. Barcelona: Tusquets, 2020).

La censura al frente de Aragón

En Sariñena se estableció la Oficina de Censura y Propaganda, adscrita a la caserna General del frente de Aragón o del cuartel general del frente de Aragón. Arturo Morera cuenta que fue creada mediante dos Órdenes dictadas en Sariñena, el 17 de diciembre de 1936, por el jefe supremo del frente, Alfonso de los Reyes «En dichas Órdenes se prohibía cualquier comunicación escrita, telegráfica o telefónica de prensa, que no tuviera previamente la autorización de aquella Oficina de Censura y Propaganda.»

Dicha orden queda recogida en el Diario de Barcelona del 22 de septiembre de 1936:

Primero. Que no sea censurada ninguna conferencia o comunicación gráfica de prensa que no esté debidamente autorizada por la oficina de Censura y Propaganda de esta Caserna General establecida en Sariñena.

Segundo. Todas las dependencias de Correos del territorio de mi comandancia, en recibir una crónica para la prensa o una carta privada en las cuales se den noticias de guerra, las remitirán inmediatamente a la oficina de Censura y Propaganda de Sariñena, lo cual, si procede, le dará su debido cuidado. Sariñena, 17 de septiembre de 1936.

Firmado por el teniente coronel jefe del frente de Aragón Alfonso de los Reyes.

Al frente de la Oficina de Censura y Propaganda, de la caserna general del frente de Aragón, en Sariñena, estuvo Pere Foix junto con Manuel Valldeperes y Joan Pila, quienes tomaron sus cargos en diciembre de 1936.

Censura Sariñena

Cuartel General del Frente de Aragón

Nuevo jefe de la Oficina de Censura y Propaganda. Ha tomado posesión del cargo de Jefe de la Oficina de Censura y Propaganda del Cuartel General del Frente de Aragón, en Sariñena, el compañero Pedro Poix, quien, junto con los compañeros Manuel Valldeperes y Juan Pila, llevará a término la misión que le ha sido confiada por el Alto Mando. 

La Batalla: Número 119 _ 18/12/1936.

Milicias. El jefe de censura del frente de Aragón.

Ha tomado posesión del cargo de jefe de la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel general del frente de Aragón, en Sariñena, el compañero Pere Foix quien juntamente con los compañeros Manuel Valldeperes y Joan Pila, llevaran a término la tarea que les ha estado encomendada por el alto mando.

La Humanitat: Any 5, núm. 1503 (19 des. 1936).

La Pasionaria y Federica Montseny

La Oficina de Censura y Propaganda, el 31 de enero de 1937, organizó una conferencia en Sariñena, en el teatro Romea, en la que intervino la ministra de sanidad Federica Montseny. Pero como ya se había comentado anteriormente, no fue la única, días antes la misma Pasionaria fue quien pronunció un mitin en Sariñena, esta vez organizado por el Frente Popular, el 16 de enero de 1937.

Un mitin en Sariñena

El domingo, en el teatro Romea, se celebrará un mitin organizado por el Frente Popular, y en el que entre otros oradores  intervendrá Dolores Ibarruri “La Pasionaria”.

La Libertad: La Libertad – Año XIX Número 5246 – 1937 enero 15 (15/01/1937).

“Si perdiéramos la guerra, el fascismo nos aplastaría a todos”, dice la Pasionaria.

Sariñena, 17. Ayer domingo se celebró en Sariñena un gran mitin del Frente Popular, organizado por la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel general del frente de Aragón. Al acto asistió un enorme gentío, trasladándose a Sariñena representaciones de diversos pueblos del distrito y de las columnas destacadas en el frente de guerra próximo, respondiendo a la expectación que había despertado el acto por la participación de la diputado a Cortes Dolores Ibarruri “La Pasionaria”.

El mitin se celebró en el teatro Romea y se instalaron altavoces en otras dependencias del local y en las plazas del pueblo.

Presidió Pedro Foix, de la oficina de Censura y Propaganda.

Hicieron uso de la palabra José Brunet, de Izquierda Republicana; José Duque, consejero del Consejo de Defensa de Aragón; Miguel Alcubierre, delegado de la división Carlos Marx; Miguel Cunillera, diputado del parlamento catalán, por Esquerra Republicana de Cataluña, quienes coincidieron en la necesidad de llegar a la unidad de mando y a la disciplina que imponen las actuales circunstancias de la lucha contra el fascismo.

Finalmente hizo uso de la palabra “La Pasionaria”, la que resaltó el entusiasmo del pueblo aragonés contra el fascismo. Habló de la gesta heroica de los aragoneses durante la guerra de la independencia contra el ejército invasor de Napoleón. Atacó a los que se ha dado en llamar incontrolados, tan nefastos a la revolución como favorables al fascismo, puesto que con su actuación insensata preparan, si el ejército del pueblo no estuviera ojo avizor, el triunfo del fascismo.      

Se extendió en consideraciones atinadísimas con respeto a algunas colectivizaciones que se llevan a cabo, sin tener en cuenta la guerra, indicando que si perdiéramos la guerra, el fascismo nos aplastaría a todos.

Abogó por el mando único en toda España y puso de relieve su firme esperanza de que pronto las milicias que actúan en Aragón corresponderán al entusiasmo del pueblo de Madrid.

Todos los oradores fueron muy aplaudidos, en especial la Pasionaria. El acto terminó cantándose La Internacional y vitoreándose a la Unión Soviética.

   Hoja oficial de la provincia de Barcelona: Época Segunda Número 579 – 1937 Enero 18.

La Vanguardia, jueves, 8 de enero de 1937 «Federica Montseny, conferenciante Organizado por la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel general del frente de Aragón, se celebrará una conferencia, a cargo de Federica Montseny, ministro de Sanidad. ¡Versará sobre el tema: «Vencer»,: El imperativo categórico de la hora».  Este, importante acto, tendrá lugar en el Teatro Romea, de Sariñena, a las once de la mañana del domingo, día 31 de enero de 1937. ¡Campesinos, trabajadores, combatientes antifascistas, ¡No faltéis!.»

En medio del entusiasmo popular, Federica Montseny habla en Sariñena en favor de la unidad sindical

Sariñena, 31. En el teatro romea, ante una multitud enorme que llenaba las dependencias el mismo y las plazas de Sariñena, donde se escuchaba por medio de altavoces, ha pronunciado una conferencia la ministro de sanidad Federica Montseny, que desarrolló el tema “Vencer, el imperativo de la hora”.

Comenzó haciendo historia de las luchas que para la libertad se han venido sucediendo en España desde la edad media hasta nuestros días. Analiza detalladamente el espíritu de nuestra lucha contra el fascismo. En estos momentos de tragedia hemos de dejar a lado nuestros puntos de mira, nuestras condiciones ideológicas, para realizar la unidad de todos los antifascistas desde los republicanos hasta los anarquistas. Se ha de llegar a la desaparición de la CNT y de la UGT, fundando una única central sindical, que recoja a todos los trabajadores españoles. Que los comunistas, por ejemplo, hayan de luchar contra bellas concepciones de su ideología es lo natural, pues nosotros los anarquistas por nuestra parte también hemos de hacer lo propio y hemos de hacer que desaparezca nuestra indisciplina y disciplinarnos para ganar la guerra, pues no olvidemos que si no se produce una intervención extranjera que imponga un armisticio que pueda deshonrarnos, la guerra será larga, y hemos de hacernos dignos de esta épica lucha por la libertad. El mundo nos mira. El proletariado de todos los países tiene puesta la esperanza en nosotros y en nosotros confían nuestros hermanos de todo el mundo.

Terminó con palabras llenas de emoción, y fue despedida con una imponente ovación.

Pedro Foix cerró el acto resaltando el gran discurso de la ministro de sanidad.

Hoja oficial de la provincia de Barcelona: Época Segunda Número 581 – 1937 Febrero 01.

La pasionaria nuevo aragon 200137Nuevo Aragón 20/01/37

Montseny Euzkadi en cataluñaEuzkadi en Catalunya 06/02/37

Federica Montseny habla en Sariñena. En el teatro Romea y delante de una multitud enorme, el pasado domingo, pronunció una conferencia la ministra de sanidad, Federica Montseny, la cual desarrolló el tema “Vencer, el imperativo de la hora”.

Diario de Barcelona, martes 2 de febrero de 1937.

El servicio de estadística e información de la generalidad de Cataluña en el frente de Aragón, oficina delegada de Sariñena

En Sariñena se ubicó una Central de Estadística, oficina delegada del Servicio de estadística e información de la generalidad de Cataluña en el frente de Aragón. En dichas oficinas, de acuerdo a un artículo de Fernández Arana, “Se conocía al día los soldados con que podía contar el alto mando, la situación de las columnas, las necesidades económicas de los milicianos, las cantidades que habían de percibir los familiares de los combatientes y hasta el estado sanitario de los hombres que luchaban en los lugares más avanzados de la lucha”. Además «Se remite correspondencia y encargos a todos los frentes, se tramitan licénciamientos y concesiones de permiso, ya que sin el aval de estas oficinas no se extiende pase alguno. Asimismo, se facilita el billete gratuito (lista de embarque) a los milicianos, haciendo constar que sin el certificado favorable de esta Delegación se niegan a concederlo. Mediante nuestros certificados se facilita alimentación, tabaco, alojamiento, etc., etc., a los milicianos con permiso o de paso en ésta. La policía secreta contra el espionaje se sirve también de nuestros servicios para efectuar toda clase de pesquisas y averiguaciones. Se llevan en estas oficinas unos estadillos numéricos para los informes de los organismos superiores, por medio de los cuales se sabe el número de jefes, oficiales, suboficiales, clases y soldados que integran nuestras filas. Se resuelven en esta Delegación infinidad de consultas que dirigen los jefes de columna, centurias y grupos respectivamente, sobre cuestiones de organización militar, tramitándose también por este Servicio toda la documentación para el ingreso en algún organismo armado del Estado. Y, finalmente, excluyendo otros muchos servicios largos de enumerar, se han organizado, de común acuerdo con el jefe de las fuerzas de Aragón, los Cuerpos de Vigilancia e Inspección, Comedores para las Milicias, Vestuario, etc., etc.». 

Central de Estadlstica en Sariñena

Fernández Aldana recorrió, en marzo de 1937, el frente de Aragón conociendo los servicios de estadística e información de la generalidad de Cataluña (En el frente de Aragón. Servicio de estadística e información de la generalidad de Cataluña. Mi revista (Barcelona. 1936). 1/3/1937). Aldana visitó la Delegación de Estadística de Barbastro y la Central de Estadística en Sariñena “En Sariñena visitamos la Delegación General del Frente y conversamos con el jefe del sector, Jaime Vidal Riba. Sencillamente, Vidal Riba nos hace un rápido relato de su estancia en estos frentes. Va recordando los primeros días de la lucha en Aragón, cuando había de suspender los trabajos estadísticos para animar con sus improvisados discursos a los milicianos; los penosos días vividos en el sector de Fuenferrada, que había de recorrer en compañía del inspector del frente, José Descárrega, pasando entre una continua lluvia de balas… Y, después de saludar a todos los empleados de la Delegación General, volvemos otra vez a la carretera para visitar las subdelegaciones del frente.”

Otros sucesos y muertes

En el expediente de Antonio Loste Bardají, (ES/AHPHU – J/005614/001650) aparece el testimonio del capitán de regulares Ignacio Gabasa Anoro. Ignacio declaró que, el 21 de febrero de 1937, se detuvo a la joven Emilia Loste Bardaji, por ser la jefa de Falange femenina del partido en Sariñena.

El 25 de marzo del 38 también fueron fusilados Teodoro Cabellud Blanco, de profesión caminero a los 54 años de edad, Pilar Conte Dueso, a los 20 años de edad, Antonio Loscertales Peralta, labrador de 60 años, Carmen Tierz Marias, sus labores 58 años y el 26 de marzo del 38 fue fusilado José Almerge Montel, caminero de 60 años de edad (Sariñena, la retirada).

En el campo de aviación “Alas Rojas” aparecieron los cadáveres “Incendiados” de los aviadores de derechas Abelardo Carazo y Muntaner. Las personas sospechosas fueron los responsables del campo de aviación, el comandante Reyes, el comisario político Franco y el Capitán Adonis Rodríguez.

CNT Sariñena.jpgPasquín del Comité Comarcal de Sindicatos de Sariñena. Pieza séptima de Huesca. Actuación de las autoridades gubernativas locales FC-CAUSA_GENERAL,1414,Exp.6. PARES.

Fueron atormentados y torturados la mayoría de personas de orden, religiosas y cuyos ideales eran derechistas, además de saqueados y desvalijados sus edificios y propiedades, cosechas, negocios y existencias. Así mismo fueron destrozadas las dos iglesias de la localidad y capillas de los particulares, destrozados sus altares y robados cuantos objetos y alhajas existían, así como profanado los lugares sagrados. 

Causa General Sariñena.

Visita de Luis Companys y de Ilya Ehrenburg

En 1937 el presidente de la Generalitat de Cataluña Luis Companys visitó Sariñena y el campo de aviación de Sariñena, noticia recogida por Arturo Morera: «Luis Companys pasó revista a las fuerzas militares republicanas estacionadas en la villa. Además, también relevante la visita a Sariñena y gran interés por la marcha de la guerra en la zona del afamado escritor soviético Ilya Ehrenburg.»

Companys Sariñena 2

Lluís Companys, presidente de la Generalitat de Catalunya, preside un desfile de combatientes republicanos acompañado por Jaume Miravitlles, jefe del Comisariado de Propaganda de la Generalitat de Catalunya, entre otras autoridades, durante su visita a Sariñena. Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-1-N-4059.

Companys Sariñena

Lluís Companys, presidente de la Generalitat de Catalunya, preside un desfile de combatientes republicanos acompañados por Jaume Miravitlles, jefe del Comisariado de Propaganda de la Generalitat de Catalunya, entre otras autoridades, durante su visita a Sariñena. Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-1-N-4060.

«Todo son muestras de cordialidad y de afecto y en todos los ojos se refleja vivamente la emoción. Y así todo el viaje por Aragón. Cordialísimo en Barbastro, en Siétamo, en Bujaraloz y en Híjar,-triunfal en Caspe y en Alcañiz. Cordialísimo y triunfal menos en Sariñena, donde «alguien» procuró ocultarlo al jefe del undécimo Cuerpo de Ejército para que éste no ordenara se rindieran los debidos honores o quien, además de la alta
jerarquía de su cargo, personifica a la Cataluña antifascista.»

La guerra en Aragón. El presidente Companys a cien metros del enemigo. Juan M. Soler. Mi Revista, 1 de agosto de 1936.

Companys Alas Rojas Sariññena

Companys en el aeródromo de Alas Rojas. Visions de guerra i de reraguarda. Serie B, Actualitats (Barcelona), 7 de agosto de 1937.

Conferencia del Partido Comunista en Aragón

Los días 9 y 10 de enero de 1937 se celebró en Sariñena la Conferencia Regional Extraordinaria del Partido Comunista en Aragón. La conferencia se llevó a cabo en el teatro Romea, entonces sede social del sindicato UGT. Cargos y mandos militares de unidades que operaban en el frente, delegados del partido, responsables de radios y células de los pueblos y gran número de trabajadores se dieron cita en Sariñena. Participó entre muchos Franco Quinzá de las milicias de aviación trasladando el saludo del teniente coronel Reyes del campo de aviación. Entre otros Vicente Sist de la Vera, José Duque, Manuel Trueba y Miguel Valdés. La gran afluencia de asistentes obligó a realizar un mitin en la cercana plaza del ayuntamiento, llena de campesinos y banderas de los distintos radios comunistas. La resolución más significativa adoptada en la conferencia fue la participación del partido comunista en el Consejo de Aragón

Sariñena plaza iglesia

Anoche llegaron a Sariñena veinte personas evadidas del campo faccioso, once de los cuales soldados, que confirman que la moral de la zona aragonesa dominada por los facciosos es desastrosa. Dicen que faltan artículos de primera necesidad y sobre todo ropas.  

Diario de Barcelona, 10 de febrero de 1937.

Explosión del Polvorín

El 19 de abril de 1937, a las nueve de la mañana, estalló el polvorín de Sariñena. En el polvorín trabajaban con trilita para hacer bombas hasta que se desató un pequeño incendio, incluso fueron a buscar extintores, al taller mecánico instalado en la iglesia, para sofocar las llamas pero no pudieron evitar el desastre y una tremenda explosión sacudió Sariñena. El polvorín se encontraba en el sótano de casa Tronchón, en la plaza de la Iglesia, entonces plaza Francisco Ascaso, con calle del Mercado. La terrible explosión causó varias víctimas mortales y lesiones, además de daños en varios edificios.

María Isabel Corral cuenta, a través de la memoria de su padre, que el polvorín «Era casa la Nena. Allí, en la bodega hacían en calderos la trilita para hacer bombas. Hacía mucho calor, iban todos en paños menores… la trilita empezó a subir, efervescente…no pudieron controlarla y corriendo subieron hasta arriba a la plaza y estalló todo. Desde donde comienza la calle del Mercado hasta casa Blasco voló todo por los aires…no quedó nada». Además, María Isabel Corral relata que la explosión afectó a casa de sus tías «A una de ellas, a Candela le cortaron una pierna por las heridas mientras que a Chon, la otra tía, llevaba un huevo en el bolsillo que resultó intacto y no le pasó nada. A mí padre lo bajaban todos los días allí, a casa de su abuela, ese día hacía mucho aire y no lo llevaron.»

Explosión Sariñena

Ahora, 21 de abril de 1937.

Arturo Morera lo recogió de la siguiente manera: «Resultaron completamente destruidos varios edificios, y pese al rápido socorro por los soldados del campo de aviación, los de una compañía de zapadores y por muchísima gente del pueblo, no pudieron rescatarse con vida una media docena de personas que habían quedado sepultadas entre los escombros. Varias niñas y otras personas adultas de Sariñena, se vieron afectadas por la explosión y resultaron heridas de distinta gravedad. El diario «La Vanguardia» dio cumplida reseña del suceso y resaltó la entereza del personal sanitario del Hospital, que consiguió tranquilizar a muchos heridos y enfermos, que saltaron de sus lechos al oír la explosión, tan cercana como impresionante».

Para las tareas de desescombro se ocupó el Batallón Los Topos pertenecientes al Regimiento de Zapadores Minadores, a los que el Consejo Municipal de Sariñena tuvo que buscar alojamiento, «Son los encargados de hacer la limpieza de los escombros, siendo igualmente de incumbencia a esta Comisión el dar las órdenes oportunas referentes al enterramiento de los diferentes cadáveres que puedan salir entre los escombros del referido siniestro.” También, el Consejo Municipal pronto acordó la creación de una comisión de investigación de los hechos, asimismo declaró el luto hasta que las victimas fuesen enterradas y obligaron a desalojar los edificios cercanos.

«Las víctimas mortales de la explosión fueron algunas más de las cuatro reseñadas en el periódico (La Vanguardia)» apuntaba Arturo Morera en su artículo «Explosiones en Sariñena», revista Quio de Sariñena y Los Monegros. «Entre los muchos heridos de consideración, se encontraba la niña Ascensión Vicente Coto (con tan solo trece años), la cual  años después, matrimonió con el autor de este artículo» (Arturo Morera. Explosiones en Sariñena).

Arturo Morera recogió en su artículo la noticia de la explosión en La Vanguardia, edición del 21 de abril de 1937, señalando como la crónica del corresponsal de Lérida «Pudo eludir la severa censura que pocos días antes había establecido en Sariñena el Cuartel General de las tropas republicanas».

Explosiones en Sariñena

Pánico en la población.  Casas derrumbadas. — Cuatro muertos y varios heridos,

Lérida, 20.

A las nueve en punto de la mañana de ayer, se oyeron en Sariñena dos explosiones; la primera, más fuerte que la segunda. La detonación de la primera se oyó hacia el exterior, y la otra de tipo interno. El suceso se desarrolló en la Plaza de Francisco Ascaso, y fueron tan fuertes las explosiones que saltaron cuatro casas y se desmoronaron otras doce.

En medio de la plaza, aparecieron enseres de todas clases, ropas, grandes vigas, etc, y todo ello envuelto en densa nube de polvo.

Algunos maderos cruzaron por encima de la plaza y cayeron en el techo de la iglesia.

En el Hospital, que está próximo al lugar de la explosión, la conmoción arrojó al suelo a los enfermos y heridos encamados.

A los pocos minutos, el pueblo en masa se congregó en la plaza, y se dedicó al descombro para extraer de las ruinas a las personas que pudieran haber quedado sepultadas entre ellas. Pronto aparecieron dos cadáveres, uno de un hombre y el otro de una mujer; y al poco rato, fue extraído otro cadáver de hombre.

El Cuartel general ordenó que regresaran del campo de aviación todos, los soldados disponibles y también 200 hombres del batallón «Los Topos», pertenecientes al regimiento de zapadores minadores.

Los trabajos de descombro fueron dificultados por las nubes de polvo que levantaba el viento que soplaba con fuerza y que cegaba a los que se dedicaban a esta tarea. Después de grandes esfuerzos por parte de los médicos, se consiguió tranquilizar a muchos enfermos y heridos del hospital.

Hasta ahora se tiene noticia de que han resultado cuatro heridos gravísimos, siendo muchos los que sufren lesiones de consideración y en más crecido número los que sufren lesiones leves.

Ha sido designado instructor del sumario, e! comandante Rojo, de Barbastro. Esta mañana se ha verificado el entierro de cuatro víctimas de este desgraciado suceso, tres hombres y una mujer. Al acto ha concurrido todo el pueblo y representaciones de las poblaciones cercanas.—Agusto.

La Vanguardia, edición del 21 de abril de 1937.

Efectivamente, el Consejo creó una comisión para tratar entrevistarse con el Ministro de Justicia García Oliver en Valencia. El asunto era tomar medidas oportunas para que no volviese a ocurrir. Aunque la comisión se desplazó hasta Valencia, al final no pudieron reunirse con el ministro que estaba de viaje y acabaron reuniéndose con su secretario.

Los responsables del polvorín fueron detenidos y hechos prisioneros, aunque contaron con el apoyo del Consejo que llegó a pedir su liberación: “Que en la actualidad siguen detenidos los camaradas Adon y Almenech (Dificultad de leer) manifiestamente inculpables en dicha  detención ya que saben positivamente que además de ser verdaderos antifascistas están afiliados a las juventudes socialistas unificadas de Valencia y los culpables del hecho no son estos camaradas  sino sus jefes, un teniente y su cuñado” (Actas Consejo Municipal de Sariñena).

Fallecidos por la explosión

De acuerdo con las Actas de defunción de Sariñena (Hospital de Sariñena, fallecidos de guerra), podemos establecer que las cuatro víctimas bien pueden responder a Leandro Maicas Martín, Miguela Lacruz Espada, Ángel Ayuda Blanco y Aurelio Auserón Escanero; tanto en relación a la fecha de la inscripción de su defunción como por la tipología de heridas y lesiones presentadas, causas de sus respectivas muertes.

Leandro Maicas Martín

Acta de defunción 8.240, 20 de abril de 1937

Natural de Calamocha (Teruel). De profesión sastre, casado habiendo dejado tres hijos y no habiendo hecho testamento según consta en este _____ facultativa manifestada por el director de este hospital M. Blay. Estaba casado con____________. Fallecido en este Hospital el día 19 de abril de 1937 a causa amputación traumática brazo y aplastamiento base cráneo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita presentada por el director de este Hospital M. Blay.

Miguela Lacruz Espada

Acta de defunción 8.241, 20 de abril de 1937

De estado soltera no habiendo hecho testamento. Falleció en este Hospital el diecinueve de abril de 1937. A consecuencia de fractura base cráneo _________ Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Ángel Ayuda Blanco

Acta de defunción 8.242, 20 de abril de 1937 

Fallecía a consecuencia de varias heridas que recibió el mismo día en _________________. Fallecido en este Hospital el día 19 de abril a consecuencia aplastamiento base cráneo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Aurelio Auserón Escanero

Acta de defunción 8.243, 21 de abril de 1937

Soltero y falleció en este Hospital a consecuencia de ______________________________________  y extensas heridas en la cara. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

El relato de Francisco Martínez Vega

Francisco Martínez Vega nació en 1910 en Villapendi (Asturias) y estuvo destinado a la compañía mecánica que se instaló en la iglesia de Sariñena. Antes de la guerra, Francisco se desplazó a Barcelona donde trabajó en la planta de Ford, luego Motor Ibérica y Ebro. Allí consiguió reunir su familia, a sus padres y hermanos. Con la guerra fue movilizado a la compañía o Grupo Mecánico Ford.

Foto Yayo[1]..

Francisco Martínez Vega recostado sobre la estribera. Archivo familiar Javier López Martínez.

Su testimonio lo recoge su nieto Javier López Martínez relatando cómo, estando en la iglesia, llegó un hombre preguntando si tenían “matafuegos”, antiguos extintores: «En tanto que si tenemos, que si no tenemos, explotó el polvorín. Me contó muchas veces como había pedazos de carne pegados hasta en las paredes de las casas donde está ahora el portillo. Detrás del altar, contaba que se bajaba por una escalera a la cripta de la iglesia, que no llegaron a verla, ya que las linternas eran muy pobres de luz. Allí se oían ruidos, golpes y trajinar que siempre relaciono con la actividad del polvorín. La casualidad hizo que una hija suya se casase con un aragonés que trabajaba en Barcelona y volviera a tener relación con Sariñena.»

Javier relata como el soldado, que pidió el extintor, salvó su vida gracias al ir a buscarlo “El polvorín explotó mientras hablaban”. Su abuelo Francisco vio como volaban el puente y estuvo hasta la entrada de los nacionales “Fueron encerrados en una bodega donde bebieron mucho vino y las pasaron canutas, pues no tenían agua”. Luego fueron liberados, no habían sido soldados, y marcharon hacia el pirineo para pasar a Francia.

Sariñena a través del SIPM y el SIFNE

En la zona sublevada, durante la Guerra civil española, se crearon servicios de información y espionaje, tales como el Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) y el Servicio de Información del Nordeste de España (SIFNE). Entre sus archivos aparece información relacionada con Sariñena, documentación depositada en el Archivo general Militar de Ávila.

Trincheras

En Sariñena se construyen trincheras.

1.000 = 2 = 13-1-37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Futuro avance

Para el avance de Sariñena sobre Barbastro, aparte de las carreteras que aparecen en los mapas, que hacen de Berbegal un enlace muy importante, existe une comunicación que puede resultar interesante por lo inesperada y es la siguiente: partiendo de Sariñena a Sena se dobla a la izquierda por la carretera de Castelflorite y El Tomillo, que está terminada.

1.000 -1 18-1-37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Cuartel General de Sariñena (Huesca)

El Cuartel General que tenían en dicha población ha sido trasladado a la finca “Monte Serafina” propiedad del Sr. Galve, gerente de la casa Cros cerca de Binefar y Esplús.

30-4-1937.
Servicio de Información del Nordeste de España (SIFNE) Archivo General Militar de Ávila.

Emplazamientos

Sariñena. En el plano nº 1 se puede distinguir el emplazamiento del edificio en que se aloja el E.M. de la aviación y del “Batallón Rojo” o “Legión Roja” y la iglesia que está convertida en un importantísimo taller de la casa Ford.

Sariñena 1

En el mismo pueblo de Sariñena saliendo por la carretera de Pallaruelo se encuentra a mano izquierda el cuartel general de la CNT en el que suele haber unos 500 hombres (nº 2).

Sariñena 2

El plano nº 3 señala el emplazamiento del cuartel de la legión roja o “Batallón Rojo” que son fuerzas internacionales de la UGT.

8.000 = 2 = 20 – 5 – 37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Sariñena 3

Cuerpo de dinamiteros

S.I.F.N.E. 9-9.1937 Sete. Información de un agente destacado en la zona roja.

Funciona actualmente en la zona roja, un cuerpo de dinamiteros que obra con absoluta independencia del ejército y están a las órdenes directas del Consulado de Rusia. Funcionan dos academias para instruir a los individuos del mismo, que son escogidos entre los que forman el Ejercito Popular.

Estas academias están instaladas, una en Valencia -ignorándose su emplazamiento-, y otra en Barcelona, señalándose su emplazamiento por nota de hoy, para ser trasladado al plano general de Barcelona. Los grupos que actúan ya, por haber recibido la oportuna instrucción, se hallan destacados en Alcañiz, Barbastro y Sariñena, y constan de unos 50 individuos cada uno.

Como ejemplo del trabajo que dichos grupos tienen encomendado, se indica en anexo número uno, un método para la destrucción del ferrocarril compuesto de varias unidades; las dos interrupciones del circuito tienden a que una maquina exploradora pase sin que explote la bomba, pues la separación de 25 metros de las dos interrupciones del circuito, hacen necesarias varias unidades para la explosión. La parte marcada en rojo, es para el caso de ser descubierta la instalación, que explotaría al ser removida la bomba del lugar en que se encuentra

En xxx anexo n° 2, combinación a base de tres o más bombas con el fin de que explotando una de ellas al pasar un convoy, explotan las siguientes o anteriores, al ir socorrer al vehículo siniestrado.

Biarritz 7/9/937. II 4.7.

Explosivos

Almacen

A medio kilómetro de la estación de la población de Sariñena hay unos barracones donde se almacenan camiones y material de guerra.

3.000 =15= 28-10-37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Refugios de Guerra

Manuel Antonio Corvinos en «Los refugios de la guerra y otros recuerdos» recoge el valioso testimonio de D.R.G.: El polvorín estaba en casa Tronchón que quedó totalmente destruida, también se derrumbaron casa Blasco, casa la Nena, casa Candela y casa la Rosa. En el edificio también estaba instalada una caja de ahorros cuyo director era un señor apellidado Maicas. Lo vimos salir al balcón  y cómo la explosión lo lanzaba contra las rejas de la iglesia. En el suceso también murieron su esposa, treinta o cuarenta soldados y un niño de 12 años. A varios de los que jugábamos en  la plaza nos hirieron y nos llevaron al hospital que estaba en casa Paraled (hoy casa Abadías-Ullod). Como ese día hacía mucho cierzo recuerdo que el humo y el polvo desaparecieron de la plaza muy deprisa y entonces pudimos ver cómo los escombros la llenaban casi toda.

El artículo de Manuel Antonio Corvinos aporta información sobre los distintos refugios que existieron durante la guerra, a los que acudían cada vez que la sirena comenzaba a sonar: Uno en la era Bolera, otro en las bodegas de Torres, un tercero en la bodega del Romea (en éste si hubiera caído alguna bomba hubieran muerto todos porque el edificio se habría hundido), otro en la calle del Mercado, más concretamente debajo de la tienda de Ramón el Cabalero, había otro refugio en el salón de Arcos del Casino, otro en la torre de la Iglesia  (en éste los que llegaban los últimos empujaban a los demás hacia arriba hasta que cabían todos), otro en las escaleretas del Castillo (en casa Mora) y por último en el huerto de Nogués, hicieron una zanja y allí íbamos todos los que vivíamos en esa zona del Muro cuando no había niebla o humedad.

El relato aportado por Manuel Antonio Corvinos da cuenta de las ametralladoras antiaéreas que había en Sariñena. Había dos y estaban en la torre de la Iglesia y en la zona de la Jinjolera (cerca de la actual cooperativa) «Después de la guerra se utilizó la plataforma de la ametralladora antiaérea de la iglesia para construir la torre nueva de la iglesia«. Los soldados de las ametralladoras antiaéreas vivían en las antiguas escuelas cercanas a la iglesia y actual abadía.

El 27 de febrero de 1938 la caída del frente se debía de sentir muy próxima y el miedo a bombardeos fue en aumento. Para evitar ataques aéreos nocturnos, las luces del pueblo se debían de apagar, lo que a la vez dificultaba algunas actividades nocturnas. Las actas del Consejo Municipal, de aquel día, reflejan el interés por atenuar algunas de las luces, colocar bombillas azules, al menos durante unas horas para poder ver algo y a la vez mantenerse protegidos o amortiguar algunas lámparas:

Bombillas azueles: “Así mismo propone que al objeto de que sea más fácil la circulación en la localidad por la noche se coloquen algunas bombillas pintadas de azul que podrían lucir una o dos horas diarias durante las nueve o las diez y siempre que la población no pueda correr peligro y así se acuerda.”

Luz: “También el camarada Viñuales propone que la lámpara instalada en el refugio de la Plaza Luis de Sirval sea amortiguada por la mucha luz que da al exterior como igualmente en la Colectividad luce una lámpara toda la noche y que sale al exterior mucho foco de luz y a proposición de Aznar se pone un comunicado a dicho organismo para que sea corregido.”

* Luis de Sirval, seudónimo de Luis Higón y Rosell, fue un periodista español, asesinado por legionarios en la represión de la Revolución de Asturias de 1934.

Grupo Tren del Socorro Rojo Internacional

El 1 de enero de 1938, en Sariñena se constituyó el grupo local del Socorro Rojo Internacional (SRI), en la Unidad del Cuerpo Tren del XI Cuerpo de Ejército, con el nombre “Grupo Tren”. Según un documento, de la secretaria de organización del Socorro Rojo de Cataluña, el cuerpo Tren XI C.E. de Sariñena estaba dedicado a los servicios tren automóvil base 8ª – C.C. N.º II. En dicho documento figura como secretario de la organización Eufemio Castellanos Ortiz, secretario de propaganda Bartolomé Prats Lorca y secretario de administración Antonio Conejo Tejero. El cuerpo contaba con 122 fundadores.

Igualmente, en un documento del comisario de la jefatura del XI Cuerpo de Ejército del servicio del tren automóvil del Ejército del Este, del 20 de enero de 1938, se vuelve a detallar los camaradas constituyentes del grupo:

  • Antonio Ausejo Tejero, comisario de los servicios Tren Automóvil del XIº. CE.
  • Bartolomé Prats, perteneciente al Estado Mayor del XIº. CE.
  • Eufemio Castellanos Ortiz, activista del SRI.

Un tercer documento, del 6 de marzo de 1938, al secretario de organización del CC del SRI F. Fernández, se comunica el envió del impreso de alta del grupo y a la vez se solicita unos “5.000 sellos ordinarios de cotización, propuestas y demás sellos y propaganda que anunciáis. También precisamos carnets y a ser posible algunas colecciones de la URSS y ayuda a la infancia”. La misiva es firmada por el secretario de la organización Eufemio Castellanos.

También existen dos cartas de la secretaria de organización del Socorro Rojo de Cataluña, ambas desde Barcelona a 1 y 11 de marzo de 1938, relativas a la formalización del grupo sariñenense. Documentos del Arxui Nacional de Catalunya (ANC1-886-T-392).

La guerra se acerca a su fin

Sariñena gozó de cierta tranquilidad al estar alejado del frente, aunque el flujo y la actividad debió de ser incesante. Hasta que llegaron los bombardeos y, en marzo de 1938, comenzó la retirada y produciéndose los más duros bombardeo que asolaron la villa monegrina, causando hasta un 65% de destrucción de su casco urbano. Sariñena fue bombardeada el 25 de marzo de 1938 por la aviación alemana Condor y  ocupada el 26 de marzo de 1938.

Durante el mes de septiembre se sucedieron una serie de bombardeos seguidos en Sariñena. El 21 de enero cayó una bomba en Casa Barrieras, en lo que antes llamábamos la placeta de la Iglesia (hoy Fray Zacarías Martínez) y “escachó” media casa (ésta fue la primera casa que derrumbaron las bombas en Sariñena). Una mañana de febrero cayó una bomba enfrente de la fuente que hay en la avenida de Goya (la que restauraron hace poco) y los que estaban en el refugio de Torres lo pasaron muy mal, pensaron que iban a quedar sepultados, incluso llegaron a  percibir el olor a la pólvora. Ese mismo día cayó otra bomba en el corral de Ariste y mató a un crío de 7 u 8 años. El suceso del corral de Ariste queda recogido en «Sariñena, la retirada».

La aviación facciosa sobre Sariñena. Sariñena, 19. – La aviación facciosa, perseguida por nuestros cazas, ha arrojado en su huida bombas al pasar por esta población, causando tres heridos leves y no produciendo daños materiales (La Vanguardia, 20 noviembre de 1937).

Diario de un miliciano

El miliciano Manuel Gutiérrez escribió en un diario sus vivencias durante sus últimos meses de vida en el frente de Huesca. Diario de un miliciano fue encontrado en septiembre de 1937 en el frente de Zuera junto al cadáver de Manuel Gutiérrez. El diario aparece publicado por Aula Militar “Bermúdez de castro”

El 3 de agosto de 1937, Manuel partió del frente desde Senés de Alcubierre narrando en su travesía su paso por Sariñena: “Por fin llegan camiones y de la mejor manera posible nos instalamos. A las siete emprendemos la marcha y al poco rato ya estábamos llenos de polvo. El camión en el que yo viajaba fue el primero en salir pero como iba excesivamente cargado pronto le han pasado los demás delante. Pasamos por Robres, Alcubierre, Lanaja y por el lado de La Cartuja; más pueblos pasamos hasta llegar a Sariñena donde descansamos. Allí se observaba un ambiente diferente de los pueblos cercanos a la línea de fuego. Había mucha gente mucha juventud que reía y hacia el efecto de que no se acordaba de la guerra”.

Estas son parte de las muchas historias de una de las páginas más tristes de nuestra historia. Un ejercicio de memoria para aprender que continúa en «Sariñena, la retirada».

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