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La Guerra Civil en Sariñena


Con el levantamiento militar del 18 de julio de 1936, se crea de urgencia, esa misma noche, el Comité Local de Sariñena. Más de 300 sariñenenses, entre afiliados a partidos y sindicatos, salen a la calle a defender la república instando a la Guardia Civil a que se una al pueblo. El Capitán de la Guardia Civil, del puesto de Sariñena, respondió negativamente, erigiéndose como única autoridad. Durante los primeros días convivieron en una tensa calma. La Guerra Civil en Sariñena, retaguardia del frente de Los Monegros

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A la memoria de Arturo Morera Corull, gran investigador de la historia local de la Villa de Sariñena, por su excepcional trabajo sobre la guerra civil en la localidad y el aeródromo de aviación Alas Rojas: «La guerra del 36 en Sariñena». Sus diferentes artículos, de un total de ocho, fueron publicados en la revista Quio de Sariñena y Los Monegros entre los números 22 al 32, del 21 de marzo de 1992 a febrero de 1994. Sin duda, su trabajo constituye la base del presente trabajo y a quien con todo mi respeto y admiración dedico.  

Joaquín Ruiz Gaspar. Responsable del proyecto cultural Os Monegros.

Artículo enmarcado en la serie sobre la guerra civil en Sariñena

Los primeros días

El 18 de julio de 1936, tras los años convulsos, las noticias sobre la sublevación contra el gobierno van llegando a todos los rincones de España. En el café teatro Romea de Sariñena, sede de la UGT, se van agolpando vecinos para seguir las noticias de Radio Madrid. El Sariñenense Daniel Grustán Ballarín (Guerra, Exilio y Represión. Zaragoza, 2005) recoge como aquella misma noche, urgentemente, se constituyó el Comité Local de Guerra de Sariñena asumiendo el control e instando a entregar las armas al capitán de la guardia civil.

Asimismo, las fuerzas de la guardia civil se habían acuartelado en pro del levantamiento militar y el capitán de la guardia civil, Luis Fernández de la Vega y Soto, llega a declarar el Estado de Guerra en Sariñena (Relación nominal de investigados y expedientados de Sariñena). Víctor Pardo Lancina apunta que la orden «No surtió ningún efecto entre los guardias civiles de tropa, que no sólo desoyeron la orden del capitán y comandante del puesto Luis Fernández de la Vega y Soto, sino que lo hicieron responsable de cualquier consecuencia que su actitud de subversión provocara en la localidad» (A una milla de Huesca. Pardo Lancina, Víctor). Igualmente lo refleja Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal en su obra «Todos los nombres», Luis Fernández de la Vega «Declaró el estado de guerra el 19 de julio, pero varios de sus subordinados desobedecieron y no solo secundaron a su jefe, sino que lo amenazaron si persistía en su actitud».

El mismo 19 de julio, según la declaración de Rosario Cabellud Viñuales, ya se realizaron las primeras detenciones de personas de derechas en Sariñena. Declaración recogida en la Causa General de Sariñena, en relación con la detención de su padre Teodoro Cabellud Blanco.

Es el 20 de julio cuando el capitán de la guardia civil abandona el puesto de Sariñena y sale hacia Monzón con parte de su destacamento. Aquella circunstancia fue aprovechada por los republicanos sariñenenses para tomar definitivamente las calles y desarmar las fuerzas restantes de la guardia civil; pasando a formar parte de la Guardia Nacional Republicana. Ese fue el caso de Julián Cambero Hernández, guardia civil que se puso al servicio del comité, además Julián había sido acusado por revelar el secreto de un telegrama que daba órdenes al capitán del puesto de Sariñena.

Aquellos hechos aparecen recogidos en las solicitudes de Informes Políticos-Sociales consultadas en el Archivo Municipal de Sariñena. Diferentes testimonios dan cuenta de lo ocurrido durante el desarme, es el caso del vecino Antonio Olivan Mir: «El desarme de la fuerza se hizo en tres puntos diferentes, o sea a dos parejas las desarmaron en la calle y al resto en la casa cuartel, siendo este último punto donde vio que Ignacio Biosca Salfe iba armado con un fusil tomando parte en dicho desarme, por ser el diciente vecino de dicho edificio y desde una ventana de su casa vio lo sucedido, manifestando también que no hubo ninguna víctima y que ocurrió el 19 o 20 de julio del 36.»

El capitán Luis Fernández de la Vega, viendo la situación, decide huir a caballo hacía Monzón «Donde se habían acuartelado varios guardias procedentes de la línea del Cinca» (A una milla de Huesca. Pardo Lancina, Víctor). Parte junto al brigada Antonio Acín Jiménez y, según Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal (Todos los nombres) «Otros seis agentes que, procedentes de Castejón, Valfarta y Alcolea de Cinca, se sumaron a estos hacia Monzón». Aunque son varios los testimonios que afirman que, desde Sariñena, el capitán salió con varios de sus agentes.

A continuación, algunos vecinos se organizaron para salir en coche en persecución del capitán de la guardia civil huido junto a sus 12 compañeros, según algunas fuentes: «Carrera, Vicente Millera, Fulgencio Esteban Oliván y Pedro Bornao tomaron un vehículo conducido por Millera para alcanzarlos». No obstante, antes los perseguidores dieron aviso a Monzón para que estuviesen prevenidos ante la llegada del capitán y sus hombres. Al final fueron detenidos en Monzón y el capitán Luis Fernández de la Vega fusilado el 6 de agosto en Barbastro (Relación nominal de investigados y expedientados de Sariñena). El brigada Antonio Acín Jiménez sobrevivió a aquel episodio y a la misma guerra.

Fulgencio Esteban Olivan declaró que, tras el alzamiento, «Se mantuvo el orden algunas horas, pero al salir el Capitán de la guardia civil para Monzón con algunos números, los elementos más destacados de izquierdas se lanzaron a la calle y la fuerza que había quedado de la guardia civil se unió al pueblo estableciéndose seguidamente turnos para hacer guardias en las entradas del pueblo y unos días más tarde se formó el comité» (Causa General). José Zamorano Cabellud testificó: «Que el Comandante del puesto de este pueblo declaró el día 18 del mismo mes y año el estado de guerra, por lo que no ocurrió nada nada anormal hasta el día 21 que salió el Capitán mencionado con algunos números hacía Monzón continuando el elemento civil haciendo guardias con el resto de la fuerza, pero según cree el declarante se recibieron órdenes de Cataluña y por elemento de las sindicales CNT, UGT y partidos de izquierdas se pidieron las armas a la guardia civil que les fueron entregadas sin oponer ninguna resistencia y una vez desarmados estos se procedió a la formación del Comité Revolucionario» (Causa General).

Efectivamente, una vez Sariñena en manos de los republicanos, se establecieron, en las diferentes entradas del pueblo y especialmente en las de Huesca y Zaragoza, controles al mandó del comité. «Los afiliados a los partidos y sindicalistas constituían más de trescientas personas dispuestas a defender la republica» (Daniel Grustán Ballarín. Guerra, Exilio y Represión. Zaragoza, 2005). También lo recoge Luis Buil Espada, en sus memorias, como las diferentes entradas al pueblo fueron cortadas con árboles y se mantuvieron guardias. También se cortó la comunicación telefónica con Huesca, con el objetivo de evitar que pudieran pedir auxilio, acción atribuida a Fermín Orquín Bardají, perteneciente al sindicato UGT. Además, en los documentos de responsabilidades políticas se cita a Francisco Cabellud Mazuque, quien, al parecer, «Llevó el revólver del Capitán de la Guardia Civil».

Un frente sin definir

Pronto llegaron noticias del futuro frente de Aragón: Unos falangistas de Zaragoza habían entrado en Alcubierre. Luis Buil fue uno de aquellos voluntarios sariñenenses que, en autobuses, partieron hacía Alcubierre para frenar al enemigo: A la altura de Lanaja nos escoltó un tal Breguer de guerra francés que venía de Barcelona y que pertenecía a la aviación que estaba con nosotros. Solamente podía tirar bombas con la mano pero daba moral. Ocupamos Alcubierre donde los falangistas habían fusilado a unos once obreros del canal en construcción. Lo hicieron en la fachada del ayuntamiento. De los fusilados encontramos en la carretera a uno herido pero vivo. Ese se salvó. En palabras de Luis: Algunos volvieron al pueblo y otros, armados, continuaron hacía Tardienta y Almudevar, donde se produjeron algunos combates y se logró estabilizar el frente. Estos sucesos se enmarcan dentro de «Las Batallas de Lanaja» que recogió Roberto Mateo Caballero en su publicación «Las Batallas de Lanaja». También para más información: Alcubierre, última parada camino primera línea de fuego.

Los sucesos de Lanaja ocurrieron el 25 de julio de 1936, un grupo de falangistas armados alcanzaron Lanaja donde la población civil salió a hacerles frente. Durante el enfrentamiento, los falangistas sufrieron dos muertos y tres heridos, retirándose a Alcubierre llevándose con ellos 11 prisioneros que fueron fusilados en el mismo pueblo de Alcubierre.

Demetrio Bodero, Antes del M.G.N. prestaba sus servicios como guardia civil en el puesto de esta villa, sin afiliación política, siendo su ideología derechista. Al iniciarse el… fue desarmado al igual que las demás fuerzas del puesto por las hordas marxistas, el informado se refugió en el campo de aviación rojo establecido en este término municipal donde presto el servicio de su clase hasta los últimos días de marzo de 1938, que fue liberado por las tropas nacionales y, incoado expediente de depuración, fue resuelto favorable y licenciado del sustituto por haber cumplido la edad reglamentaria. No intervino en hechos delictivos y se le considera adicto a la nueva España

Notas en las solicitudes de Informes Políticos–Sociales.

Detenciones y fusilamientos

Anteriormente a la llegada de milicias catalanas, fueron varios los individuos o grupos de ellos, de localidades cercanas, que acudían a zonas conflictivas, tal y como hemos visto con las batallas de Lanaja. En Sariñena, Arturo Morera relata como los primeros milicianos eran en su mayoría de la CNT, aunque iban mezclados con gentes de otras filiaciones, en especial los que pertenecían al POUM, «Llegaron a nuestra villa como «liberadores», creyendo que Sariñena estaba de parte del alzamiento militar» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Aquellas circunstancias iniciales, de ausencia o escasa autoridad local, la presencia de milicianos y elementos descontrolados llegados a Sariñena y la implicación de algunos sariñenenses permitió abusos y desmanes e incluso detenciones y asesinatos en la villa de Sariñena. Para Arturo Morera «No teniendo enemigos con quien enfrentarse, la principal preocupación de sus líderes fue la de aniquilar a todas las personas que pudieran ser consideradas como de derechas. La decidida intervención de gentes influyentes en nuestro pueblo evitó que aquellos exaltados milicianos perpetraran el fusilamiento de muchas personas acusadas de ser simpatizantes de los sublevados, Cesáreo Casabona explicó muy bien esta situación en su artículo publicado en el «QUIO» n.° 5 del año 1989, y yo abono su relato en todo cuanto tiene de verídico.»

Detenciones

Las primeras detenciones a personas ideológicamente de derechas, parece ser que ya se practicaron tras el estado de guerra, al día siguiente, el 19 de julio. En este sentido se manifestó Rosario Cabellud Viñuales, en relación con la detención de su padre Teodoro Cabellud Blanco, caminero de 54 años de edad: «Fue detenido por los milicianos en la puerta de su casa el 19 de julio de 1936, siendo conducido a la cárcel donde se encontraban ya otros detenidos y permaneciendo allí durante cuatro o cinco días, puesto en libertad, se le obligó a trabajar en el campo de aviación siendo asesinado en la retirada de los rojos, sabiendo solo que fue fusilado y su cadáver hallado en la calle Fatas» (Sariñena, la retirada). José Paraled Sarrate, Causa General, también se manifestó en la misma línea y al poco de formarse el Comité, en los primeros días tras del inició de la guerra, «Cuyos componentes realizaron seguidamente algunas detenciones, pero a los tres días fueron puestos en libertad».

Otras detenciones se produjeron en el mes de septiembre y prácticamente se enmarcarían en el conjunto de detenciones que se debieron llevar a cabo en aquellos primeros días: «En el mes de septiembre, por orden del Comité, el declarante detuvo a los hermanos Blasco-Mirallas, que a los dos días fueron puestos en libertad y en los primeros meses del alzamiento fueron detenidos siete personas entre los que se encontraba el teniente Coronel de Lastanosa sr. Cariello, los cuales después de estar unos días en la prisión de Sariñena fueron asesinados en el cementerio» (Declaración de Fulgencio Esteban Olivan, Causa General).

La misma Causa General de Sariñena (ES.28079.AHN//FC-CAUSA_GENERAL,1412,Exp.1) recoge aquellas detenciones practicadas en la localidad: «Fueron atormentados y torturados la mayoría de personas de orden, religiosas y cuyos ideales eran derechistas, además de saqueados y desvalijados sus edificios y propiedades, cosechas, negocios y existencias. Asimismo fueron destrozadas las dos iglesias de la localidad y capillas de los particulares, destrozados sus altares y robados cuantos objetos y alhajas existían, así como profanando los lugares sagrados.» 

Daniel Pinos, rescatando las vivencias de su padre Eusebio Pinos, relata cómo se incautaron los comercios del pueblo y detuvieron, por unos días, a Manuel Basols Salaber (posterior alcalde durante el franquismo), Ignacio Ballarín Segura, Benjamín Portera, Bernardo Guillen, Miguel Anoro Casañola y Victoriano Buisan, entre otras personalidades. Fueron puestos en libertad el 26 de agosto de 1936. Diversos testimonios enmarcan aquellas detenciones con un fin protector ante elementos descontrolados de milicias que hacían peligrar la vida de personas de derechas.

Relación de personas detenidas y encarceladas:

  • Bernardo Guillen Lasierra.
  • Bernardo Guillen Asín
  • Francisco Castanera Mirallas.
  • Antonio Gálligo Pérez.
  • Mariano Torres Guillen.
  • Ángel Pardo Novales.
  • Teresa Pardo Carbonell.
  • Marí Luz Pardo Carbonell.
  • Pilar Murlanch Agudo.
  • Joaquín Blasco Mirallas.
  • Mariano Blasco Mirallas.
  • Dolores Gabarre Subias.
  • Pilar Alvarez Anoro.
  • Bernardino Navarro Gallego.
  • Benjamín Portera Segura.
  • Miguel Anoro Pueyo.
  • Pascual Segura Baringo.
  • Ramón Abenoza Paul.
  • Victorián Buisan Izuel.
  • Manuel Basols Salaver.
  • Ignacio Ballarin Segura.
  • José Casabón Tisaire.
  • Manuel Gilaberte Corvinos.
  • Eduardo Colay.
  • Pedro Segura.
  • Y otros más cuyos nombres no se recuerda.

La cárcel

La cárcel de Sariñena se encontraba ubicada en el antiguo convento franciscano de la localidad sariñenense, la actual casa de la cultura en Plaza de Mezín. Joaquín Blasco Miralles, uno de aquellos «derechistas» encarcelados, después de la contienda, declaró: «Funcionó en esta villa una prisión oficial dependiente de la Dirección General de prisiones marxistas, funcionando en la antigua cárcel del partido.» 

Para Luis Buil Espada el comité se portó bien y mantuvo el orden hasta que «Empezaron a llegar miembros incontrolados de la parte de Barcelona que quisieron fusilar a unos detenidos que había en la cárcel, pero el comité puso una guardia alrededor de la misma con fusiles Mauser y tuvieron que desistir». Después, muchos presos fueron liberados «Los presos de la cárcel volvieron pronto a su casa incluido alguno que fue juzgado en Lérida (mi padre y otros fueron a declarar en su favor). Todos estaban vivos cuando volví de Francia. No todos se comportaron bien.»

De aquellos sucesos fueron investigados, entre otros, Jesús Penón Corvinos, huido a Francia, o Julio Casabona Gracia, veterinario municipal, quién, según declaración de la alcaldía «Se distinguió en impedir toda clase de hechos inhumanos, conquistando su impopularidad por estos actos entre los medios rojos de la localidad. Parece ser que marchó exiliado a Francia.»

El sariñenense Julio Cesáreo Casabona Marías, hijo de Julio Casabona Gracia, recogió en «Sucesos que ocurrieron en Sariñena hace 54 años», revista Quio nº5, el momento en el que su padre se opuso a una columna de milicianos que pretendían fusilar a personas de derechas presas en la localidad. Entre otros miembros del comité, su padre Julio y su hermano Antonio se plantaron ante las milicias evitando que fuesen asesinados. 

Tras la guerra, Julio y sus dos hijos Antonio y Julio Cesáreo sufrieron el exilio y la posterior deportación al campo de concentración nazi de Mauthausen. La familia Casabona consiguió sobrevivir al holocausto nazi. Julio Casabona Gracia y sus hijos Antonio y Julio.

Fusilados

El 28 de julio de 1936 fueron asesinados el sacerdote Eduardo Colay Biarge, a los 24 años de edad, el teniente coronel E.M. Bernardo Cariello Torrente, a los 65 años de edad, los señores Mariano Caballero, Arbeloa (comerciante), Oto, Rivera, Baile (Industrial), Desentre (Contable), Aguilar (Industrial), Cativiela (Agricultor) y tres personas de identidad desconocida. La Causa General de Huesca, Pieza Principal, Rama Separada nº 131 Sariñena dicta que Fueron fusilados por la canalla roja, la fecha indicada, en la carretera de Sariñena a la Estación del Ferrocarril, y después trasladados al Cementerio y quemados.

A Eduado Colay Biarge, en verdad coadjutor de Sariñena, recién ordenado sacerdote, se le instó en repetidas ocasiones la prohibición de celebrar oficios eclesiásticos. Aun así, celebró misa en una casa particular, por lo que fue detenido, encarcelado y ejecutado. Daniel Pinos data su encarcelación el 21 de julio y su ejecución el 28 del mismo mes. Al parecer, Eduardo Colay y Bernardo Cariello gritaron, antes de morir fusilados: ¡Viva Cristo Rey! (La fosa común del cementerio de Sariñena.). También estuvieron a punto de ejecutar al párroco Pedro Segura Gavín. Mosén Pedro se libró por la intervención del Molinero, aunque desafortunadamente, mosén Pedro no aguantó aquellos años convulsos, cayendo en coma y falleciendo el 6 de octubre de 1936.

“El cura, don Pedro, se quedó y estuvo bien cuidado así como la casera que era hermana suya. Este cura se había comportado siempre muy bien. A pesar de su edad se quitó una vez los pantalones en la iglesia para dárselo a un necesitado. El también era pobre; después de mucho tiempo murió de enfermedad pero nunca le faltó nada.”

Luis Buil Espada

Profanaciones, saqueos, quemas y otros desmanes

Todo apunta que fuerzas del POUM fueron responsables del saqueo de las tres iglesias de Sariñena y de las primeras detenciones, aunque a los pocos días fueron liberados. Las milicias del POUM sacaron de las dos iglesias y capillas privadas sariñenenses las imágenes y ornamentos a la calle y en carros fueron llevadas a la orilla del río Alcanadre donde les prendieron fuego. José Zamorano Cabellud, en su declaración, señala: «Después de haber sacado las imágenes y ornamentos sagrados a la calle ordenaron a los vecinos que con carro las llevasen al puente del río Alcanadre y en la orilla de dicho río les prendieron fuego y seguidamente se incautaron de los negocios del pueblo.» Los hechos los podemos enmarcar el 24 de julio de 1936 según el relato, mencionado anteriormente, de Manuel Brosed Brosed (Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal. Todos los nombres).

Daniel Pinós relata la quema del archivo en la plaza mayor: «Atizada por los miembros de la Federación Ibérica de las Juventudes Libertarias y ante la alegría de muchos sariñenenses». Además de los diferentes archivos se quemó todo lo relativo al registro de la Propiedad.

Franz Borkenau centra la quema de la iglesia días antes de su visita a Sariñena, junto a otros dos corresponsables, el 13 de agosto, «Donde les invitaron a visitar la plaza, donde unos días antes la iglesia había sido quemada. También había habido doce ejecuciones. Entre estas víctimas estaba el notario» (1936- 2011: 75 años de la crónica de la guerra civil en el Alto Aragón de Franz Borkenau. Virgilio Ibarz). «Todos los documentos de la notaría estaban siendo quemados en una gran hoguera en el centro de la plaza para que no quedase ninguna evidencia de los derechos de propiedad».

“Las llamas se alzan más allá del techo de la iglesia y los jóvenes anarquistas continúan trayendo más y más materias de casa del notario, echándolo a las llamas con gesto triunfal. Gran número de personas mira silenciosamente al fuego. No era, de ninguna manera, una destrucción como otra cualquiera de algunos documentos indeseables, sino un acto que revestía para sus participantes profunda significación, como símbolo de la liquidación del viejo orden económico” 

Borkenau, El reñidero español, pp 81-82.

La quema de documentos notariales, para Franz Borkenau, representaba la abolición de la propiedad, de alguna manera como paso previo a la colectivización: «El comité local, dirigido por anarquistas, había abolido los alquileres y expropiado cuatro grandes fincas junto con toda su maquinaria agrícola. la propiedad campesina, a excepción de aquella perteneciente a los ejecutados, no se había tocado, pero muchos de los documentos del notario debían de referirse a ella.»

Lo cierto es que tanto el juzgado como el registro civil se encontraban en el antiguo convento franciscano de Sariñena, en la entonces plaza Alvarado y actual plaza de la Constitución. La numerosa documentación fue quemada en la misma plaza por fuerzas republicanas.

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Hoguera, hecha por las fuerzas republicanas, con la quema de documentos de la notaría relativos a las propiedades rurales y asuntos financieros, para eliminar el viejo orden económico. «Ante el wsificio del juzgado y registro civil. Incendiadas las causas y demas documentos y requisitos» (Anotación en la parte de atrás de la fotografía) Sariñena, Frente de Aragón. Arxiu Nacional de Catalunya. Fondo Martí Bas i Blasi Referencia: ANC1-109-N-161.

El convento de las Hermanas Carmelitas de Sariñena también estuvo amenazado y en alguna ocasión peligró de ser asaltado por elementos descontrolados. Según testimonios, se evitó gracias a la actuación de varios vecinos. Finalmente, las religiosas fueron respetadas (Expediente de responsabilidades políticas de Manuel Lacruz Espada. AHPHU_J_005622_002180). Luis Buil vio a las monjas carmelitas acudir, vestidas de paisano, llorando al ayuntamiento: «Desde la puerta escuché como los miembros del comité las tranquilizaban y les decían que las que quisieran quedarse allí no tenían nada que temer y que si querían irse a su casa les escoltarían».

Ante los diversos abusos y tropelías, el Comité Revolucionario de Sariñena se vio obligado a trasladar el problema al Cuartel General de la Columna Durruti en Bujaraloz. Al día siguiente, Buenaventura Durruti se personó en Sariñena, restableciendo de nuevo el orden y aprovechando la ocasión para celebrar un histórico discurso llamando a la movilización y a la disciplina en todos los frentes. Dicho discurso se produjo el 30 de julio de 1936, antes de la llegada de la Columna del POUM. Manuel Grossi en sus memorias (Cartas de Grossi, Sariñena Editorial), recoge como llegaron a Sariñena el 30 de julio de 1936, el mismo día que, a las cuatro de la tarde, Durruti se había presentado en Sariñena con un grupo de milicianos «Posiblemente de los duros de su columna» y pronunció «Desde el balcón de una casa sin que nadie se lo pensara» un «inflamable discurso contra el POUM. Pudo haber surgido un incidente lamentable de no haber sido por la compresión de los militantes del POUM».

En este sentido Arturo Morera cita un testimonio que se dio en el pleno extraordinario de sindicatos de CNT, celebrado en Bujaraloz el 6 de octubre de 1936, «… El compañero Hermes de Soli también da referencia del comportamiento de determinado sector de opinión que en una asamblea que había convocado el sindicato de Sariñena, irrumpieron en el local y la suspendieron. Explica la conducta que observaron los aviadores  que de acuerdo con los socialistas, realizan toda clase de tropelías a nuestros compañeros, habiendo llegado incluso a desarmarnos. Se acuerda hacer gestiones para evitar todos estos excesos y caso de no rectificar, proceder entonces con energía…».

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Milicia popular: Diario del 5º Regimiento de Milicias Populares: Año I Número 40 – 1936 septiembre 10.

Luis Buil Espada sitúa el discurso de Durruti meses más tarde, siempre que no hubiese sido otro, «En mi pueblo estuvo el Batallón de la muerte del POUM, con uniforme vistoso y puñal al cinto. Meses comiéndose las reses  y de todo completamente gratis pero sin ir al frente.  El pueblo protestó y Durruti vino de Bujaraloz con dos escoltas. Les habló en la plaza del ayuntamiento y les dijo que fueran al frente o volvería con su División para echarles. Estaban todos en la plaza con sus fusiles, pero no dijeron nada y desaparecieron del pueblo. Nunca les vi en el frente.»

Arturo Morera recoge como en los primeros días del mes de agosto de 1936, la Generalitat catalana envió a tierras aragonesas «Al ya entonces célebre escultor Apeles Fenosa, para que intentara salva guardar la riqueza artística de las iglesias de nuestros pueblos. El artista recibió instrucciones, en el sentido de que las obras recuperadas serían restauradas y conservadas hasta su devolución después de acabada la guerra.»

El escultor Fenosa, pudo salvar de su destrucción, unas tablas valiosas de las iglesias de Robres y Lanaja. Pero no consiguió salvar el magnífico retablo del altar mayor de la iglesia de Pallaruelo, que era una obra del siglo XV. Lo encontró desmontado y almacenado al aire libre y no pudo convencer a los hombres del Comité para que se lo entregaran, o de que al menos, lo pusieran bajo cubierto, para preservarlo de la lluvia y del sol. Apeles Fenosa, en un artículo publicado en el diario «Treball», lo explica con un sentimiento de amargura. Ofreció a los del Comité local un maestro y una biblioteca, pero ellos se negaron a entregar el gran retablo, si no era a cambio de recibir una camioneta. Como el escultor no disponía de tal vehículo, en Pallaruelo se quedó el retablo, bajo la lluvia y el sol, esperando ser convertido en leña para el invierno. ¿Cuántos millones valía?, se preguntaba desesperado Apeles Fenosa, cuando tuvo que marchar de Pallaruelo acusado de «fascista».

Arturo Morera Corull. La guerra del 36 en Sariñena.

Las milicias

Es el 21 de julio de 1936, con la creación del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña, cuando se comenzaron a formar y organizar numerosas columnas que acabaron partieron, principalmente, al frente aragonés. El objetivo de las milicias catalanas era avanzar hacía Zaragoza y Huesca capital.

El 25 de julio de 1936 llega a Sariñena la Columna miliciana del PSUC del Barrio-Trueba, 3.000 milicianos y tres baterías de artillería a mando de su jefe Manuel Trueba Mirones; luego conocida como Columna de Carlos Marx. «Una nueva columna de 1.500 hombres organizada por el PSUC, al mando del dirigente José del Barrio, que incluía a la Centuria alemana Thälman, la primera unidad extranjera que intervino en España, se dirigió a Sariñena y a la Sierra de Alcubierre y quedó incorporada a la de Durruti» (Diario de un miliciano). La columna pasó dirección a Grañen a través de un convoy de tren blindado donde llegaron el mismo día 25 de julio.

La ocupación de Sariñena

De Sariñena comunican que aquella población que se encontraba en poder de los rebeldes, a última hora de la tarde ha tenido que rendirse a las fuerzas leales de la columna catalana. Parece que esta columna no se propone avanzar más en el día y que por no pernoctar en Sariñena, se continuará hoy con el avance.

Han salido de Lérida numerosos milicianos antifascistas. Parece que han tomado contacto con las fuerzas leales que están en Sariñena.

  La Humanitat: Any 5, núm. 1378 (26 jul. 1936).

Mientras, el 30 de julio llega a Sariñena la Columna del POUM, con 2.800 milicianos, comandada por Manuel Grossi y Jordi Arquer (Manuel Grossi. Cartas de Grossi, Sariñena Editorial). La columna había salido de Barcelona el 24 de julio y Gonzalo Berguer recoge, como el día 29, la columna «Va a avanzar sobre Berbegal y Sariñena. A Sariñena la columna finalizaba la formación de las secciones auxiliares. Cuerpo de tren*, intendencia, control, pagaduría, transmisiones y servicios sanitarios se ponían en funcionamiento» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). En sus cartas, el líder revolucionario Manuel Grossi relata cómo llegaron al atardecer, el mismo día 30 de julio en que Durruti pronunció su discurso «Inflamable» contra el POUM. Grossi, a su llegada, también pronunció su propio discurso «Desde una de las dependencias del Ayuntamiento, enalteciendo la verdad del ser del POUM».

* El Cuerpo de Tren fue una unidad militar creada por la Ley de 12 de Septiembre de 1932 y organizada como servicio por la Disposición de 25 de Marzo de 1933. El cuerpo de tren tuvo por misión la ejecución, por vías ordinarias, de todos los transportes de tropas, ganado y material que afectaba a los movimientos importantes del Ejército que no podían efectuar las distintas unidades y servicios con sus elementos propios. El Cuerpo de tren se disolvió por la Ley de 12 de Agosto de 1940, pasando sus jefes y oficiales a sus cuerpos de procedencia. (Fundación Anastasio de Gracia). 

No obstante, José Paraled Sarrate, en su declaración en la Causa General de Sariñena manifiesta que las fuerzas del POUM llegaron el día 23: «Que sobre el día veintitrés del citado mes y año llegaron fuerzas del POUM, las cuales profanaron las tres iglesias de la localidad». También José Zamorano Cabellud «El Vicien» señala el día 23: «Que el día 23 del mismo mes llegaron unos camiones del POUM los cuales rápidamente empezaron por profanar las tres iglesias» (Causa General).

En este sentido, la semblanza del robresino Manuel Brosed Brosed (Víctor Pardo Lancina y Raúl Mateo Otal, Todos los nombres) relata como el 23 de julio, junto a otros vecinos de Robres, acudió a Sariñena a recibir las nuevas tropas que llegaban al día siguiente:  “El 23 de julio de 1936 -Manuel ya estaba afiliado a la CNT-, Sí mal no recuerda y estando las tropas nacionales dominando los pueblos de Alcubierre y Grañen, marchó a Sariñena en compañía de Francisco Brosed, Joaquín Brosed, Alejandro Becana y Antonio Laporta todos capitoneados por este, para recibir a las milicias rojas que llegaron al día siguiente, yendo los nombrados a la cabeza y seguidamente procedieron a la destrucción de la iglesia parroquial quemando todos los santos e imágenes”.

De acuerdo a una carta de un miliciano de iniciales J. G. del POUM, redactada en Sariñena el 30 de julio de 1936 y publicada en La Batalla: Número 3, del 5 de agosto de 1936, la columna partió de la estación del Norte de Barcelona el sábado 25 de julio,  alcanzando Lérida donde se les dio comida y unas horas de descanso. A las siete de la tarde se les unió artillería y en camiones marcharon dirección Zaragoza “La columna continuó adelante hasta Monzón, donde tuvimos que volver a hacer alto, pues estaban juzgando a 18 fascistas”. Al cabo de dos horas llegaron a Barbastro “donde hicimos gasolina y partimos inmediatamente hacía el frente, llegando a las doce a Sariñena donde cenamos y dormimos. Aquí se nos dio un día de descanso y el lunes por la tarde, a los milicianos de la cuarta bandera se nos confió la misión de ir a Alcubierre”. En la misma carta, el miliciano da cuenta de los primeros enfrentamientos en Alcubierre, por lo que podemos suponer que el 25 de julio milicias del POUM ya se encontraban en la localidad de Sariñena.

Todo apunta a que avanzadas del POUM llegasen mucho antes que el grueso de la columna, al menos de la parte oficial al mando de Manuel Grossi y Jordi Arquer. En este mismo sentido se manifiesta Gonzalo Berguer «Es mas que probable que hubiesen elementos avanzados e incluso pequeñas unidades procedentes de Lleida o provincia». Así, en el periódico «Treball: Diari dels Treballadors de la Ciutat i del Camp: Any I Número 8» en su edición del 30 de julio de 1936 aparece todo un reportaje sobre el avance de la columna del POUM sobre Sariñena el 28 de julio:

«Con las columnas que van liberar Aragón

Sariñena, 28. Hoy hemos visitado con el camarada Comorera, su compañía y otras compañías, otra parte del frente. Hemos estado en Sariñena, con la columna del POUM y hemos recorrido todo un país donde aún campan fascistas, hasta Grañen, donde se han instalado con gran audacia y perfectamente situada, la columna de la UGT y el Partido Socialista Unificado que avanza entre Tardienta y Grañen.

No hemos sufrido ningún incidente y por la tarde todos los aminos estaban completamente cubiertos por los avances y guardias de las columnas, que van estrechando el cerco de Zaragoza y acumulando material de…

Vamos sabiendo de los horrores fascistas. En Lanaja, muy cerca, fueron quemados vivos ocho compañeros del pueblo dentro de la iglesia. Cuando las tropas obreras llegaron, encontraron los carnets de la UGT  y del Partido Comunista al lado de los cadáveres. Es la inquisición que rebrota, con todos los excesos crueles de las guerras carlistas.»

La columna del POUM instaló en Sariñena su Cuartel General hasta consolidar sus posiciones en el frente. Lo cierto es que la columna del POUM estuvo durante un tiempo en Sariñena  «Los del POUM continúan en Sariñena a decenas de kilómetros del frente, ¿Por qué no avanzamos? se preguntaban los milicianos». La milicia del POUM tuvo que acatar las ordenes del coronel Villalba «Del Barrio— si bien por causas diferentes, ¿no podía tener nuestra columna razones tácticas para estar unos días parados en Sariñena? El Comité Militar de nuestra columna pidió repetidas veces al coronel Villalba que nos dejara avanzar, cosa que nos lo prohibió terminantemente por estas razones tácticas que obligaron la, columna a Del Barrio a abandonar Almudévar, pueblo al que fueron sin que nadie les obligara y desobedeciendo órdenes superiores.» (La Batalla: Número 13 _ 16/08/1936). A tenor de otras informaciones, mientras miembros del POUM hacían incursiones hasta Perdiguera «Hemos tenido la ocasión de hablar con el camarada Piquer, que junto con los camaradas Grossi y Arquer de la segunda columna que ópera en Sariñena. El grueso de la Columna continúa en Sariñena (La Batalla: Número 13 _ 16/08/1936).

El Cuartel General se instaló en casa «Frechinacha», en la plaza del ayuntamiento. Erróneamente, una publicación de La Batalla: Número 6 del 08 de agosto de 1936, lo sitúa en el ayuntamiento de la villa. «La otra columna, la de Arquer, siguió idéntico camino hasta Monzón dirigiéndose desde aquí a Sariñena donde estableció se convirtiendo esta bonita población oscense en su Cuartel General». (La Batalla: Número 88 _ 12/11/1936()

Cuartel General POUM Sariñena La Batalla 6

Cuartel General del POUM en Sariñena. La bandera del POUM flamea a los cuatro vientos sobre el tejado del Ayuntamiento de Sariñena (Exclusiva para LA BATALLA).

30 de julio

Nuestras fuerzas avanzan en estas regiones de Zaragoza, en un frente amplio de combate. Desde Bujaraloz, en el sur, donde se encuentra la columna de Pérez Farrás-Durruti, hasta Labarta y Aguas, al NO de Barbastro, en la provincia de Huesca.

La columna die Arquer-Grossi, que hace unos días tiene el Cuartel general en Sariñena, avanza hacia Zaragoza.

Tiene avanzadas en Lanaja y Alcubierre, donde también hay milicianos de Barbastro. Allí se encuentra nuestro valiente compañero Sabadell con unos treinta valerosos compañeros del POUM.

La Batalla: Número 1 _ 02/08/1936.

Sariñena

Entre altozanos y cabezos, a trechos elevada sobre el declive de las faldas de éstos, se levanta la histórica villa de Sariñena.

Amplias huertas únense a corralones de ganado, constituyendo así toda la riqueza de esta villa.

Sariñena, por el lado de oeste ve cruzado su término por el curso bastante caudaloso del río Alcanadre.

La vida en la población es todo lo tranquila que puede ser en una de estas villas aragonesas de la provincia de Huesca, cuya sencillez de costumbres y ruda franqueza son proverbiales. De noche, entre sus calles empedradas y algo en cuesta, entre corrales y paredones, luce la luna argentada cuya luz quebrándose en las esquinas hiere sombras cual puñales. De día, un fuerte sol hace arder el agua del río, la laguna y las piedras, y cuando después de comer se sestea, parece Sariñena moza encantada.

La Batalla: Número 1 _ 02/08/1936.

Arquer, Piquer y otros milicianos del POUM en el balcón del cuartel general de Sariñena

Arquer, Piquer y otros milicianos del POUM en el balcón del cuartel general de Sariñena (Exclusiva para La Batalla). La Batalla: Número 7 _ 09/08/1936. Realmente es el Hotel Anoro, ocupado por la UGT y altos mandos. 

ESCENAS DE LA VIDA DE LAS MILICIAS

Sariñena es el Campamento, o como tal, de las Milicias del Partido Obrero de Unificación Marxista. Nuestra columna con sus diez banderas, alegra el corazón de la pacífica villa hoy erigida en nuestro Cuartel General.

Es una nota en extremo pintoresca, el ver camiones, autos, ametralladoras y milicias junto a estas casas, muchas de ellas del «Renacimiento» o del «Barroco». Nuestros camaradas, con sus sombreros de fieltro, tela, paja o los cas[1]cos, constituyen una abigarrada nota de color que desentonando con el fondo y marco que forma el caserío contrasta en fuerte luz.

La plaza principal del pueblo, no muy trada, ha avanzado camino de una segrande y sombreada de acacias tiene salpicado completamente, uno de sus lados al Ayuntamiento. En esta plaza don de los Milicianos damos nuestra mayor impresión de vida cuartelera. Cuando no un camión, nunca falta un auto  pintado de grandes letreros que dicen: «Gobernación»; o bien, «Médico»; P.O.U.M. quizás «Frente Popular-Prensa»; junto a ellos forman grupos nuestros soldados que comentan en voz alta diversas incidencias de la campaña. A la alegría y el ruido sucédese el más profundo silencio cada vez que la radio grita atención y nuestro comandante general, el compañero Piquer, habla por radio. Otras veces hablan los camaradas Arquer o Grossi. Esta estación de radio tiene el bien de hacernos creer que estamos en Barcelona y demuestra la ingenuidad de muchos de nuestros compañeros que aplauden entusiasmados al terminar las órdenes o los discursos.

La gracia y simpatía pasan del “miliciano compañera”, alguna de las cuales son muy guapas, al andaluz que figura en nuestras banderas, al americano del sur, o al extranjero. Nuestro ejército tiene este bien; cumple el programa de universalización marxista y así en él pueden verse médicos rumanos, italianos de profesiones liberales, obreros alemanes, empleados franceses y multitud de obreros de todas las regiones españolas y sud-americanas con otros obreros intelectuales o gentes de profesiones libres.

Todo es simpatía y amor en la casa del proletariado y sobre nosotros parece campear una divisa que diga: «No perdáis jamás la esperanza», al contrario de lo que sucede a nuestros enemigos que llevan como leyenda en sus luchas, el; «-Dejad toda esperanza», del Dante.

UNA NOTA DE DOLOR

Una nota de dolor

Hemos pasado por el disgusto de que un camarada nuestro, Victoriano López, de las Milicias antifascistas de Sariñena, manejando el fusil se le escapase el tiro, resultando muerto. El hecho ha producido mucho disgustó en la población.

La Batalla: Número 2 _ 04/08/1936.

Milicianos POUM Sariñena La Batalla 4

La plaza de Sariñena, cuartel general de nuestras columnas, ocupada por las milicias del POUM. (Exclusiva para LA BATALLA). Plaza del ayuntamiento de Sariñena. 

En Sariñena, Los milicianos catalanes hacen prisioneros dos mil soldados enemigos.

Estos se aprestan a ponerse a la vanguardia de las columnas de milicianos para el asalto de Zaragoza.

A la una del mediodía el consejero de Defensa de la Gereralidad, teniente coronel Sandino, desde el campo de Sariñena comunicó al honorable Presidente de la Generalidad que nuestras fuerzas han copado una columna de facciosos compuesta de más de dos mil hombres que se han sumado a nuestras líneas, comprometiéndose a luchar en vanguardia en la toma de Zaragoza.

Dicen que en Zaragoza se ha engañado a los soldados que .no esperan más que nuestra llegada para enfrentarse al enemigo.

Entre todas las. fuerzas leales reina gran entusiasmo por esta victoria, que tendrá una gran repercusión en la moral de los facciosos.

La Batalla: Número 4 _ 06/08/1936.

Milicianos hacia el frente

Ayer tarde, a las seis, salió hacia Lérida y Sariñena una pequeña columna compuesta por unos ciento veinte milicianos que van a incorporarse a las milicias que luchan en el frente de Aragón.

La Batalla: Número 4 _ 06/08/1936.

Un aviso telefónico del camarada Masggrau, de la caballería del POUM en Sariñena nos comunica la llegada a Barcelona de siete compañeros de dos pueblos de Zaragoza, actualmente en poder de los fascistas.

La Batalla: Número 37 _ 13/09/1936.

La Columna Alas Rojas, comandada por el Capitán Alfonso de los Reyes González, partió de Barcelona el 28 de julio de 1936. Llamadas Milicias Antifascistas de Aviación, estuvo formada por un contingente de voluntarios adscritos principalmente al PSUC. Fue una columna compuesta por cuatro centurias que se estableció en Sariñena «Donde comenzó a funcionar un aeródromo por la 3ª Escuadra Republicana». El aeródromo de Sariñena se instaló el 2 de agosto de 1936 y, a partir del 3 de agosto, «recibió una importante de contingentes, durante todo el mes» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). La instalación del aeródromo de Sariñena, llamado de «Alas Rojas», llegó a desempeñar un evidente protagonismo en el desarrollo de las operaciones militares y también en la vida cotidiana de las gentes de nuestra villa (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

  • El día 2 de agosto de 1936 los periódicos de Barcelona señalan la existencia de cinco columnas cuyo objetivo principal era la conquista de la ciudad de Zaragoza.
  • La primera columna, llamada «Carlos Marx», con gente del PSUC y de la UGT, llegó a situarse en la línea de Grañén-Tardienta-Almudévar y estaba mandada por el socialista José del Barrio y el comunista Luis Trueba.
  • La segunda columna, conocida como «Lenin», agrupaba a gentes del POUM (comunistas disidentes), estaba al mando de los dirigentes Arquer, Grossi y Piquete, y se hallaba instalada en Sariñena y sus alrededores.
  • La tercera reunía a los anarco-sindicalistas de la CNT y estaba operando en la zona de Bujaraloz al mando de Durruti, con el asesoramiento militar del comandante Pérez Farrás.
  • La cuarta columna operaba en Siétamo, al mando del capitán Medrano, y la última se situaba en Caspe y estaba mandada por García Miranda y el capitán Zamora.

Arturo Morera Corull.

Una anécdota de Sariñena

Un miliciano granadino, en la cocina, hace elogios de Cataluña, con su gracia peculiar, todo discutiendo con diversos compañeros no catalanes. De repente dice seriamente a un compañero aragonés:

-Zi no me hablas er catalán no t´entiendo!.

Risotada general.

 Treball: Diari dels Treballadors de la Ciutat i del Camp: Any I Número 22 – 1936 agosto 15.

Este pequeño pueblo era un feudo del POUM; sus milicias estaban organizadas siguiendo el modelo clásico de todos los ejércitos del mundo: la jerarquía reinaba sin discusión… Una vez en el Cuartel General, me dirigí al que estaba de plantón, el cual me envió al cabo, éste al sargento y así sucesivamente  hasta el capitán que me hizo pasar a una gran sala diciéndome que esperara.

Antoine Giménez.
Del amor, la guerra y la revolución.

Al sector de Sariñena. Ha llegado la columna “Los Aguiluchos”

Ha llegado, a este sector, sin novedad, la columna “Los Aguiluchos”, organizada y dirigida por nuestro camarada J. García Oliver.  

La Publicitat: (30 Agost 1936).

Los Aguiluchos en Sariñena

La Batalla: Número 25 _ 30/08/1936.

Ana María Martínez Sagi “Escenas de la campaña por tierras de Aragón”.

Ana María Martínez Sagi (Barcelona, 16 de febrero de 1907 – Sampedor, Barcelona, 2 de enero de 2000) fue una poetisa, sindicalista, periodista, feminista y atleta (https://datos.bne.es/). Una figura excepcional recogida por Juan Manuel de Prada en su novela Las esquinas del aire y La voz sola, una antología de sus trabajos más desconocidos y biografía  ‘El derecho a soñar: Vida y obra de Ana María Martínez Sagi’ (2022).

Ana María pasó por Sariñena, publicando sus impresiones en La Noche del 5 de agosto de 1936. Texto recogido en Dones que surten del paper. Periodistes catalanes que expliquen un país: 15 (Lo Plançó) Tapa blanda – 27 noviembre 2018. Edición en Catalán  de Elena Yeste Piquer (Colaborador), Francesc Canosa Farran (Colaborador).

Un texto magnifico con un final poético «El río Alcanadre, es una sierpe de plata, bajo las altas estrellas».

La Noche, 5 de agosto

En Sariñena —polvo, calor, moscas, casas con viejos soportales, calles empinadas y sucias— están las columnas del POUM. Jorge Arquer, Piquer, Viscarri y Grossi, van a la cabeza de las fuerzas que, perfectamente equipadas y disciplinadas, luchan contra los fascistas.

Una casa particular, la mejor sin duda del pueblo, se ha habilitado para hospital. Allí se encuentran atendidos perfectamente ocho o diez heridos, y algunos enfermos; estos en su mayoría sufren de acolitis (Colitis) aguda, debido al agua insalubre de aquellos pueblos de la provincia de Huesca. También se encuentra allí un muchacho que en unión de otros siete, fusilaron los fascistas en La Naga (Lanaja).

—Tú sí que con razón puedes asegurar que has vuelto a nacer —le digo.

—¡Figúrese! Nos mandaron andar diez pasos y ordenaron que nos quedáramos junto al edificio del ayuntamiento. ¡Ya sabíamos lo que nos esperaba! Efectivamente, una descarga cerrada y los siete muchachos caíamos al suelo. A mí me hirieron en el brazo, pero me guardé muy bien de moverme. Nos dieron a todos por muertos y salieron huyendo. Cuando juzgué que todo peligro había pasado, me incorporé, ¡y aquí me tiene usted!

 —¡Bravo muchacho! ¡Que te mejores pronto y que continúe protegiéndote tu buena estrella!

Sariñena: tolvaneras de polvo, viento huracanado a todas horas. De día, calor insufrible; frío vivo, en la noche. Los muchachos del POUM —barbas de ocho días, «pintas» de guerreros salvajes— se portan como lo que son: como unos valientes. Obedecen a sus jefes como un solo hombre. En un puesto de observación, cuatro muchachos aguantaron por espacio de doce horas, un fuego nutrido de artillería. Se defendieron heroicamente sin abandonar un minuto la guardia encomendada. En otro pueblo de provincia, los campesinos, con las navajas de esquilar el ganado, coparon a la Guardia Civil, que, perfectamente armada, se había hecho fuerte en el cuartel.

Ceno en la mesa de los oficiales. Arquer —pálido, pequeñito— la preside. Este muchacho, de una cultura vastísima y un espíritu revolucionario auténtico, junto con el comandante Piquer, son el alma de la organización política de las columnas que operan en este frente: Grossi, autor del libro La insurrección en Asturias, es el brazo ejecutor, el hombre de acción al que siguen las milicias obreras con una fe ciega y un entusiasmo sin límites.

Cambiamos impresiones sobre el futuro plan de operaciones de las columnas. Grossi, con los hombres de la primera y segunda bandera, se encuentra ya en Grañén, aguardando instrucciones. Expongo al comandante mis deseos de trasladarme a las avanzadas.

—Aquello ofrece aún peligro. Tropas fascistas y milicianos insurrectos, andan huyendo por los montes ante el avance de nuestras columnas y tirotean a cuantos cruzan por las carreteras. No obstante, si tiene usted interés en ir, haré que la acompañen dos hombres armados, y saldrá en el coche con mi chofer, muchacho que conoce bien el camino, conductor seguro que sabe correr como un relámpago, cuando las ametralladoras de las avionetas enemigas se empeñan en convertir el coche en blanco de acción… ;A qué hora desearía, usted salir?

—A las nueve de la mañana, si es posible.

—¿Tiene usted buena puntería? —me pregunta sonriendo.

 —Cuando era niña, con la honda, rompía todos los faroles del pueblo, a donde solíamos ir a veranear. No me he ejercitado más, desde entonces —respondo.

 —Bueno. De todos modos, le extenderé una licencia de uso de armas y haré que le entreguen municiones y una winchester.

—Muy agradecida, comandante.

Me retiro temprano a descansar. Gracias a la amabilidad de un oficial, dispongo de una nueva habitación en el hotel donde se hospeda la oficialidad del POUM. Este tiene ya otro aspecto. Es más confortable y más limpio. Abro el balcón y enciendo un cigarrillo. La carretera, las copas de las acacias y el campo llano, que se extiende hasta la línea del horizonte, están blancos de luna. El río Alcanadre, es una sierpe de plata, bajo las altas estrellas.

Apuntes sobre las milicias

Para Arturo Morera, «La guerra del 36 en Sariñena», las milicias Llegaron a nuestra villa como «liberadores», creyendo que Sariñena estaba de parte del alzamiento militar. Según el historiador sariñenense, el signo liberador de las primeras columnas de milicianos, que llegaron a Sariñena, tiene algunos valedores como Dolores Ibárruri. La «Pasionaria» señala,  en su obra «Guerra y Revolución en España», como una columna, después de llegar a Barbastro, «continuó avanzando y, tras denotar a la Guardia Civil sublevada en esa zona, liberó Sariñena, Grañén y Tardienta».

Morera continúa con una noticia fechada en Madrid, el día 27 de julio, y publicada en el periódico «La Veu de Catalunya«, decía que la primera columna había entrado en Pina de Ebro y que la segunda había tomado Sariñena. Todavía el 19 de septiembre, el periódico «El Diluvio» de Barcelona publicaba un artículo de su corresponsal en el que relataba su visita al hospital de Barbastro, en donde permanecía herida de guerra Remedios Carballo, miliciana de la columna del POUM. Entre otras cosas, decía de ella: «la brava miliciana que tanto se destacó en la toma de Sariñena y en el asalto a Perdiguera y en Tierz». La verdad que todo el mundo conoce es que nuestra villa fue invadida (y no liberada) por las columna de milicianos, quienes no pudieron cometer demasiadas tropelías ante la decidida actitud de muchos hombres que actuaron con dignidad  y valentía en defensa de su pueblo.»

El escritor Hugh Thomas, en su obra «La guerra civil española«, comenta Arturo Morera Corull, «Se atreve a decir que en Sariñena, los primeros días de la guerra, se había perdonado la vida a algunos miembros de la clase media, incluido el veterinario. Su aseveración se basa sin duda alguna en el testimonio del escritor inglés Franz Borkenau, quien estuvo tres días en Sariñena y publicó sus impresiones en un libro titulado El Reñidero Español».

Efectivamente, Franz Borkenau estuvo los días 12 al 14 de agosto de 1936 en Sariñena y publicó sus impresiones en el libro titulado «El Reñidero Español». Arturo Morera mantiene que su visión es, sin duda, desenfocada por el ambiente que había vivido en otros lugares en las fechas precedentes:

«El escritor sólo veía anarquistas por todas partes: dice que había mantenido una charla con el jefe del comité local, panadero anarquista. y junto a él fue hasta  la plaza, donde unos días antes la iglesia había sido quemada, y en donde los jóvenes anarquistas estaban ahora trayendo más y más material procedente de la casa del notario (léase registrador), echándolo a las llamas con gesto triunfal, en una inmensa hoguera en el centro de la plaza. Así se destruían todos los documentos de los derechos de la propiedad, como símbolo de la liquidación del vejo orden económico.

Al día siguiente, Borkenau acompañó a dos jóvenes anarquistas, quienes le llevaron a una era en donde unas máquinas trilladoras estaban funcionando al servicio de la colectividad campesina, aunque se dio cuenta de que había otras gentes que preferían trillar al modo tradicional, eludiendo el  trabajo en colectividad. El escritor interpretó que las relaciones entre el pueblo anarquista y la milicia del POUM, que se encontraba cerca, estaban lejos de ser buenas, y reconocía que «el núcleo anarquista era lo suficientemente inteligente como para no intentar forzar a la colectivización a la parte renuente del pueblo». Pero Borkenau dice algunas barbaridades, como la de afirmar que los Intelectuales de Sariñena, a la pesar de ser nacionalistas catalanes (sic), colaboraban de todo corazón con los anarquistas. Sin duda, el hombre no estaba muy instruido en geografía y el lenguaje de los milicianos catalanes le debió proporcionar confusión y la indujo a no saber en qué territorio estaba.

Al escritor inglés le sorprendieron muchísimo las buenas relaciones entre los labriegos (supuestamente anarquistas) y los que él llama intelectuales. Y es curioso el modo en que describe tal situación: «En las calles de Sariñena tropecé, por primera vez en muchos días, con un hombre vestido con ropas burguesas; estaba rodeado por gran número de campesinos y hablaba con ellos de manera animada y amistosa. Parecía un alto oficial catalán y resultó ser el cirujano veterinario del pueblo. Era evidente que no temía mantener su vieja apariencia burguesa. Conocí poco después a su hija, enfermera en el hospital improvisado por el pueblo para albergar la milicia. Servía, eso era evidente, de modo más competente las enfermeras voluntarias de Barcelona.

Realmente, el testimonio de Franz Borkenan, muy deformado, sirve sólo a medias para conocer  parte de la realidad de Sariñena en aquellos días azarosos de julio y agosto de 1936.»

En definitiva, tal y como apunta Arturo Morera «La práctica totalidad de los componentes de las columnas «Carlos Marx”  y «Lenin» pasaron por Sariñena antes de dirigirse a sus posiciones más avanzadas». A estas hay que añadir las llamadas Milicias Antifascistas de Aviación, adscritas al PSUC, que llegaron el 2 de agosto con la instalación del aeródromo de «Alas Rojas» y la llegada, el 30 de agosto de 1936, de la nueva columna de la CNT «Los Aguiluchos». Sobre aquello, Arturo Morera recoge la siguiente noticia «Los periódicos barceloneses de la época reflejaron la llegada a Sariñena de la columna de la CNT, organizada y dirigida por el líder anarco-sindicalista Juan García Oliver. Se relata que la llegada a Sariñena de «Los Aguiluchos» y de su líder produjo gran entusiasmo y también sorpresa por la perfecta disciplina y organización de la columna«.

El pueblecito nos acoge y nos envuelve en la oscuridad de sus calles. Este pueblecito de calles polvorientas, estrechas, de casas pardas y antiguas, es un hervidero de milicianos que van y vienen al frente de combate. Nubes de polvo levantan los camiones que conducen víveres al frente y otros que transportan soldados de la libertad.     

A las seis de la mañana la claridad de los gallos mañaneros me ponen en acción y mi primera visita es al hospital de sangre en el que se encuentran diez heridos; y al ver hasta sesenta camas vacías, me hace presumir, como compruebo más tarde, que las bajas en nuestro frente de Huesca son pocas, para la importancia que tiene los distintos frentes que sitian en rodeo a dicha ciudad y los combates estratégicos que a diario suceden. 

Frente de Huesca, Los aguiluchos de la F.A.I., impacientes por entrar en Huesca.

Por Hermes, Sariñena, 7 de septiembre de 1936. 

Solidaridad Obrera, nº 1376

Dos hombres y dos mujeres retornados del frente por indeseables: Procedentes del frente de Sariñena, van a ser reportados por indeseables dos mujeres y dos hombres, los cales quedaran detenidos en los calabozos en la Comisaría General de Orden Público.

Diari de Barcelona, 27 de octubre de 1936.

Tal fue la presencia de milicias catalanas, que Arturo Morera narra como en Sariñena la lengua más hablada era el catalán. Incluso, en una ocasión, unos policías catalanes organizaron una conmemoración del levantamiento catalán del 6 de octubre. La noticia de «El Diluvio», recogida por Arturo Morera, dice así: «Han inaugurado una calle en Sariñena con el nombre de Jaume Compte y la plaza del 6 de octubre. El pueblo, con entusiasmo fervoroso, ha acudido en masa a este acto y la banda de música del cuerpo de Aviación militar ha interpretado La Internacional y Els Segadors que fueron ovacionados por el público. Los citados compañeros han repartido entre la población y los milicianos más de mil banderas catalanas…».

El 6 de octubre al sector sur del frente Aragones

Alcañiz, 7. · 1.35 mañana (De nuestro enviado especial al frente de guerra sur aragonés, Lluís Capde- vila.)

En Sariñena, por tal de conmemorar la jornada del 6 de octubre, ha estado dada una calle de esta localidad el nombre del malogrado Jaume Compte. També se ha descubierto una placa con el nombre de Seis de octubre que es dirá, de ahora para adelante, una de aquellas plazas.

Al acto ha asistido el consejero del primer distrito de Barcelona, señor Delmir Ibáñez, el cual se encuentra accidentalmente a Sietamo. El citado consejero reparte por el frente banderas catalanas. Con él se encontraba Baldomer Suis, del cuerpo administrativo. Ambos dirigieron palabras apropiadas a la jornada y organizaron una manifestación que fue de un éxito estrepitoso.

A la comisaria de Sariñena fueron colocadas banderas catalanes y republicanas, y al pasar el público por delante de ellas desfilaba la manifestación, les ovaciona largamente.

Fueron descubiertas unas placas que daban nombre a las nuevas calles, la banda de aviación ejecuta Els Segadors.

Tanto el citado consejero, como el señor Baldomer Suis han sido recibidos cordialmente en todos los pueblos por donde han pasado, especialmente en Caspe, donde les hicieron una sonora recibida.

 La Humanitat: Any 5, núm. 1440 (7 oct. 1936)

Finalmente, Arturo Morera matiza que, al parecer, todas estas columnas estaban bajo el mando teórico del coronel Villalba, que era el militar profesional jefe de la guarnición de Barbastro antes de la sublevación o movimiento nacional que se alzó en contra de la República. «El total de los efectivos que componían tales unidades en aquellos primeros días de agosto podía ser del orden de unos tres mil hombres, con escasa o nula organización militar y armados deficientemente. También pasaron por Sariñena muchos milicianos que acabaron formando parte de la columna Durruti. El entusiasmo de todos ellos era enorme, pero su desorganización tremenda» (Arturo Morera, La guerra del 36 en Sariñena).

El flujo de milicias en Sariñena debió de ser considerable, provocando problemas de abastecimiento que se manifestaron en la asamblea Popular celebrada en Binefar el 28 de agosto de 1936. La delegación de Sariñena planteó el problema que el abastecimiento de gasolina estaba generando en la localidad: «Toda vez que por ser Sariñena centro de aprovisionamiento y lugar de paso para muchas de las columnas del frente, ha de abastecer una infinidad de vehículos de gasolina, que después nadie satisface su importe. A pesar de tener que exigir los oportunos avales por el sello del jefe de columna o de milicias antifascistas, son una multitud los casos una multitud los casos de ambulancias que transportan heridos, de servicios de urgencia, llevar partes, etc. y sería una felonía negarles la gasolina». El desabastecimiento de combustible fue un problema serio, ya que la Generalitat de Cataluña solamente abonaba la gasolina avalada, así que debieron de adoptar más control en su distribución (Orientación Social. Órgano del frente aragonés, nº 41).

En Marcha hacía Huesca. Crónica de nuestro colaborador Marcial Fernández.

Van quedando atrás Fraga, Candasnos, Velilla de Zinca, Ballobar. Al fin Sariñena. Nos detenemos un momento a desayunar. En el frontal de una casa de labor, con traza de venta castellana, un rótulo pomposo: Hotel del Cisne. Entramos. Una mujer, que trae a nosotros evocaciones de Gabriel y Galán, nos sirve solícita.

Cuando inquirimos el importe de lo que hemos consumido, en el rostro agraciado y cetrino una sonrisa ancha: -No es nada. Ustedes servirán de otro modo a la República, yo la sirvo así-.

De nada vale nuestra insistencia: tenemos que marcharnos sin pagar.

A partir de Sariñena vamos encontrando por todas partes gentes dedicadas a las faenas de la recolección. Las gavillas que amarillean sobre los rastrojos nos recuerdan la consigna difundida profusamente por toda la tierra catalana: «La collita es la reraguarda deis que lluiten.» Los campesinos de Aragón la cumplen exactamente.

La Vanguardia, 29 de septiembre de 1936.

PARA LOS LLAMADOS A FILAS:

Por acuerdo del Comité de Guerra del frente de Aragón, y siempre de acuerdo con el Comité Superior de Milicias Antifascistas de Barcelona se pone en conocimiento de todos los reclutas de los reemplazos llamados por decretos del Gobierno, que no puede tolerarse de ninguna de las maneras que con el pretexto de la desmilitarización y constitución de las milicias antifascistas existan ciudadanos que se queden en sus casas mientras los amantes de la libertad luchan en la calle. Por lo tanto, este Comité, de acuerdo siempre con el Comité Superior y Central de Milicias Antifascistas de Barcelona, ordena a todos los incluidos en los decretos mencionados de incorporación a filas que se presenten con toda urgencia en sus respectivos cuarteles o en alguna milicia controlada por los partidos u organizaciones obreras, dando éstas cuenta a los cuarteles donde debieran haberse presentado los milicianos en ellas existentes, para el debido control y para que jamás pueda ningún camarada perteneciente a estos reemplazos quedarse en casa mientras los demás luchan en bien de sus intereses.

Sariñena, 26 de agosto de 1936.

Por el Comité de Guerra: Buenaventura Durruti, CNT; Antonio Ortiz, CNT; Cristóbal Aldabaldetrecu, CNT; José del Barrio, UGT; Jorge Arquer, POUM; Franco Quinza, Aviación; Coronel Villalba, Comandante Reyes, Aviación, Capitán Medrano; Capitán Menéndez; Teniente Coronel Joaquín Blanco.

EL FRENTE, núm. 3 Boletín de guerra de la columna Durruti. Pina de Ebro, 27 de agosto de 1936.

Noticias falsas o erradas

Resulta curioso encontrar noticias sobre la toma, por parte de las fuerzas nacionales, de Sariñena en octubre de 1936. Ambas noticias se pueden encuadrar tanto en el marco de la importancia propagandística como quizá en algún error o confusión, confundiendo Sariñena por Leciñena, que justamente aquellos días había caído bajo el dominio de los sublevados. Sin duda, esta última posibilidad es la más probable.

Ejército del Norte

Quinta División. Se ha tomado al enemigo Sariñena causándole más de 100 bajas. Se le cogieron 25 camiones, 20 ametralladoras y dos morteros, así como numerosas municiones.

El Adelanto: Diario político de Salamanca: Año 52 Número 16092 – 1936 octubre 13.

El botín cogido en Sariñena

Sariñena es un pueblecito aragonés que los catalanes tenían en su poder, habiéndolo convertido en cuartel general. El sábado, las fuerzas que operan en la provincia de Zaragoza, ocuparon brillantemente el pueblo y cogiendo a los rojos un botín numerosísimo: seis cañones, varias ametralladoras, fusiles en gran cantidad, víveres, veinte automóviles ligeros y camiones, y hasta una imprenta que los rojos habían establecido allí para editar sus bulerías. Más de un centenar de muertos y setenta prisioneros quedaron en nuero poder. En esta ocupación se distinguieron dos sargentos de Falange que por su heroísmo han sido ascendido al grado inmediato.

La Falange: Diario de la tarde. Órgano en Extremadura de Falange Española de las J.O.N.S: Año I Número 39 – 1936 octubre 14.

Sariñena Guerra

Organización militar

La desorganización de las columnas de milicianos en Aragón fue absoluta durante los tres primeros meses de la contienda. Arturo Morera lo recoge en “La guerra del 36 en Sariñena” a través del testimonio de Vicente Guarner (Cataluña en la guerra de España, 1936-1939), quien fue teniente coronel del Estado Mayor: «…cada columna tenía también su asamblea, que trataba con el mando de tú a tú. Se daba el caso de que los combatientes milicianos, al cumplirse las ocho horas, jornada de trabajo, en una marcha de aproximación o en un combate, colgaban el arma y regresaban a las parideras donde pernoctaban o a las casas de los pueblos en que acantonaban. Los milicianos, de noche, y a veces de día, entraban en Zaragoza o Huesca sin armas para tomar café”. Ante aquel desbarajuste,  en palabras de Arturo Morera, los jefes de columnas y los militares profesionales republicanos intentaron poner orden en el desbarajuste y se esforzaron en coordinar las acciones bélicas frente al enemigo común.

Ante la llegada de milicias al frente de Aragón «El Comité de Milicias, y más tarde la misma Generalitat catalana, buscó un mando único con sede en Sariñena para coordinar los esfuerzos» (Eladi Romero García, Cazarabet).

Comité de Guerra de Sariñena

El 29 de julio de 1936 se constituyó el Comité de Guerra de Sariñena: «Muy tempranamente, el 29 de julio de 1936, se constituyó un Comité de Guerra en el Ayuntamiento de Sariñena. En ese día nuestro pueblo soportaba la presencia de toda la columna del POUM, y bajo sus auspicios se reunieron en nuestro Ayuntamiento el coronel Villalba, el comandante Pérez Farrás y los jefes de columnas Del Barrio, Arquer y Piquer. En dicha reunión constitutiva se acordó la designación del coronel Villalba como jefe de las fuerzas antifascistas en Aragón» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Al día siguiente, el 30 de julio se crea la Delegación Militar de Guerra de Sariñena. De alguna manera nace paralelamente a la creación del Comité de Guerra del Frente de Aragón creado en Barbastro el 28 de julio de 1936 (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo).  Para Gonzalo «Esta delegación era el Estado Mayor de todas las fuerzas que operaban al sector norte de Aragón». Según Roberto Mateo (Las batallas de Lanaja) «El jefe de este primer Estado Mayor va ser el Comandante de Infantería Alfredo Sanjuán Colomer».

El Comité de Guerra de Sariñena dio nueva reunión en Sariñena el 26 de agosto para unificar criterios y también dictar una disposición por la cual se urgía la incorporación a los acuartelamientos de los reclutas de los remplazos llamados a filas por el gobierno de la Generalidad de Cataluña. Por el llamado Comité de guerra firmaron el documento las siguientes personas: Buenaventura Durruti, CNT; coronel Villalba; Franco Quintá, Aviación; Cristóbal Aldabeltreco, CNT; José del Barrio, UGT; Jordi Arquer, POUM; capitán Méndez, Asalto; comandante Reyes, Aviación; capitán Medrano, militar; teniente coronel Joaquín Blanco; Antonio Ortiz, CNT (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Disposición de guerra

Muy importante. Disposición del Comité de Guerra del Frente Aragonés.

El Comité de guerra del frente aragonés ha dictado una disposición que dice:

Por acuerdo del Comité de guerra del frente de Aragón, y siempre de acuerdo con el Comité Superior de Milicias Antifascistas de Barcelona, se pone en conocimiento de todos los reclutas de los remplazamientos llamados por el decreto del gobierno que no pueden tolerarse de ninguna de las maneras que, con el pretexto de la desmilitarización y constitución de las milicias antifascistas existan ciudadanos que se queden en sus casas mientras los amantes de la libertad luchan en los frentes de batalla. Por este motivo, este comité, de acuerdo siempre con el Comité Superior de Milicias Antifascistas de Barcelona, ordena a todos los individuos en los decretos mencionados de incorporación a filas, por tal que se presenten inmediatamente a sus respectivos cuarteles o en alguna milicia controlada por los partidos u organizaciones obreras, dando estos cuenta a los cuarteles donde deberían de haberse presentado los milicianos en ellas existentes, por su buen control y por tal que no pueda nunca ningún camarada perteneciente a estas levas, quedarse en casa mientras otros luchan en defensa de sus intereses.

Sariñena, 26 de agosto del 1936. Por el Comité de Guerra: Bonaventura Durruti, CNT; coronel Villalba; Francesc Quinta, Aviación; Cristóbal Adabaltreco, CNT; Josep del Barrio, UGT; Jordi Arquer, POUM; capitán Méndez, Asalto; comandante Reyes, Aviación; capitán Medrano, militar; teniente coronel Joaquín Blanco y Antonio Ortiz, CNT.

Extraído del Boletín de Información de la CNT y FAI.

 La Veu de Catalunya: diari catalá d’avisos, noticias y anuncis: Any 46, Núm. 12537 (28 ag. 1936) Ed. Matí

Aquella reunión aparece reflejada en la edición de La Vanguardia del 28 de agosto de 1936: «Para articular mejor el frente, hemos celebrado una reunión en Sariñena todos los mandos y jefes de columna que actúan en los sectores Norte y Centro. Se ha formado, como consecuencia, un Comité del frente, integrado por Durruti, Arquer y Del Barrio por parte de las columnas de milicianos; Reyes, por la aviación; Medrano, por la artillería, y Villalba, como jefe militar del sector Norte. No ha podido asistir a esta reunión Ortiz, del sector sur. con el cual procurará ponerse de acuerdo.»

Atravesamos pueblos pegados a la tierra como un camaleón a su rama. Patrullas de campesinos circulan por las carreteras. La mayoría sólo llevan como armamento, escopetas de caza; algunos tienen pistolas que deben ser de la guerra carlistas. Llegamos así a Sariñena, pequeña ciudad perdida en medio de una llanura desecada. Allá se encuentra el abastecimiento de las columnas que operan entre Zaragoza y Huesca. A un lado, el campo de aviación de las milicias catalanas. Por la tarde la ciudad está en calma, casi desierta, bajo su cielo de fuego. Desde allá, otro coche lleva el correo y a nosotros hacía el frente.

Agosto de 1936

La vida y la muerte en Aragón. José Gabriel.

El Perro Malo y Salvador Trallero editor.

«El 15 de septiembre llegaron a Barbastro, procedentes del campo de aviación de Sariñena, el Consejero de Defensa de la Generalidad, teniente coronel Díaz Sandino y el jefe de la base aérea  “Alas Rojas”, comandante Reyes. Estos dos jefes del ejército republicano se reunieron seguidamente con los jefes de columnas de milicianos Del Barrio, Rovira, Piquer, Aldabeltreco, un delegado de García Oliver, el capitán Medrara y el coronel Villalba. La reunión obedecía al deseo de impulsar las operaciones ofensivas sobre la ciudad de Huesca tras la toma de Siétamo.» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

«En Sariñena, toda la población está militarizada. Se trata de un pueblo esen­cialmente republicano a quien no asusta el movimiento de la guerra».

A la vista de Huesca. Mientras se hace el Avance. Antonio de la Villa.
Ahora, 17 de septiembre de 1936.

Mando de la circunscripción del Centro

A finales de octubre de 1936, se reorganizó el frente aragonés y sus columnas, determinando, el gobierno, la organización de un Ejército Popular de la República. Para ello, la Consejería de Defensa de la Generalitat, a través del Comité Central de Milicias, en la denominada Asamblea del Comité de Guerra del Frente de Aragón o Conferencia de Sariñena, impuso «A todo el frente de Aragón un mando único» (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). Para el historiador y periodista Víctor Pardo Lancina fue un intento de la Generalitat por recuperar el control del frente de Aragón (A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene).

Así, en octubre de 1936 el frente aragonés quedó dividido en tres circunscripciones y dos sectores. De las tres circunscripciones del frente aragonés, el frente de Los Monegros abarcó parte de la Circunscripción Norte y Centro del frente de Aragón, asumiendo Sariñena el Mando de la Circunscripción del Centro.

«La circunscripción del Norte, con mando en Barbastro, comprendía las columnas «Roja» y «Negra», «Aguiluchos», la del POUM y la del coronel Villalba. La del Centro, con mando en Sariñena incluía las columnas de Durruti y la de Del Barrio. La del Sur, con mando en Caspe, agrupaba todas las columnas que se habían agregado a la de Ortiz. Los dos sectores eran el «Maciá-Companys» con mando en Montalbán, y el Pirenaico con mando en Boltaña. Todas estas fuerzas quedaban bajo el mando del comandante don Alfonso de los Reyes, quien además seguía teniendo a su cargo todas las fuerzas de Aviación»

Arturo Morera, La guerra del 36 en Sariñena.

Asimismo, las circunscripciones se dividieron en sectores y subsectores, quedando Aragón definido en seis sectores: Alto Aragón, Norte Aragón, Centro Aragón, Sur-Ebro, Montalban y Teruel. De aquellos seis sectores, los sectores Norte Aragón y Centro Aragón abarcaron el frente de Los Monegros.

La Asamblea del Comité de Guerra del Frente de Aragón tuvo lugar en Sariñena el 13 de octubre. En ella participaron todos los jefes de columnas que operaban en el frente de Aragón: «Con la intención de llegar a un acuerdo para establecer un mando único ante la proyectada reorganización del frente. La convención fue presidida por el teniente coronel Díaz Sandino (Consejero de Defensa), y a ella asistieron, entre otros, el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas (por el sector del Sur), Durruti (por el sector del Centro), García Oliver (del Comité Superior de Milicias) y el comisario civil de las columnas catalanas, Moles».

«El artífice del plan de la nueva re-estructuración militar de las fuerzas republicanas en Aragón fue el teniente coronel Vicente Guarner, quien, desde su puesto de jefe de Estado Mayor en la Consejería de Defensa de la Generalidad de Cataluña, sugirió al Comité Central de Milicias sus ideas de cómo debían coordinarse las actividades de las columnas. El plan fue aceptado, no sin resistencias, y Sariñena se convertiría en pieza clave en la marcha de la guerra a partir de mediados de octubre de 1936.» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Víctor pardo Lancina recoge la participación en la asamblea al teniente coronel Díez Sandino, consejero de Defensa de la Generalitat; el subsecretario del departamento y asesor militar del Comité de Milicias de Barcelona, Vicente Guarner; el coronel jefe de las fuerzas de Aragón, José Villalba, llegado desde Barbastro; y los jefes de columnas Durruti, Pérez Salas, García Oliver, Del Barrio, Rovira, el comisario Moles, de las milicias catalanas y el comandante Reyes, jefe del aeródromo de «Aquella conferencia -afirma el historiador Alejandro Díez Torre»- convocada bajo referencia del desastre miliciano de Leciñena, fue en cierta medida una respuesta catalana a la posición aragonesa y miliciana libertaria, adoptada en la asamblea regional de Bujaraloz» y organiza-da por la CNT.»(A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene).

«Del Barrio, el líder ugetista catalán y jefe de una de las principales columnas de milicias en el frente aragonés, denunció abiertamente el 13 de octubre de 1936 en Sariñena, ante los jefes de las distintas columnas, los fusilamientos de ugetistas en los pueblos ocupados por las columnas confederares que proclamaban el comunismo libertario.»  

Historia de la UGT.  Santiago Castillo.

Reunión de los jefes de columnas

Ayer por la tarde en Sariñena se celebró una reunión de los jefes de columna de Aragón. Presidió el Consejero de Defensa señor Sandino y asistieron el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas, Durruti, García Oliver y el Comisario civil de las columnas catalanas, Moles.

  Heraldo de Castellón: Año XLVII Número 14394 – 14 Octubre 1936.

El mando único en el frente de Aragón Barbastro.

—Esta tarde se celebra, en Sariñena, una reunión de todos los jefes de columna que operan en el frente de Aragón. Esta reunión está presidida por el consejero de Defensa de la Generalidad, teniente coronel señor Díaz Sandino; y a ella asisten, también, el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas, por el sector del Sur; Durruti, por el sector del Centro, habiendo acudido, asimismo García Oliver, de la consejería de Defensa y el comisario civil de las columnas catalanas, Moles.

Se asegura que de la reunión saldrán importantes acuerdos para la unificación de operaciones, especialmente el nombramiento de jefe único de todo el frente que, posiblemente recaerá en uno de los actuales jefes que luchan en este sector.

La Batalla: Número 63 _ 14/10/1936.

La Dirección General del Frente

La Consejería de Defensa de la Generalitat estableció en Sariñena la Dirección General del Frente, recayendo el mando de general en Jefe del Estado Mayor sobre el Comandante Reyes, jefe del aeródromo de Sariñena.

 «El teniente coronel Blanco Valdés, segundo. jefe, del sector norte y a las órdenes inmediatas de Villalba se ha trasladado a Sariñena para ponerse en contacto con el comandante Reyes, nuevo jefe de todas las fuerzas que operan en Aragón.»

La Batalla: Número 64 _ 15/10/1936.

Mientras, como Jefe de Estado Mayor fue designado el capitán Guarner y el capitán Botet como Comandante General de Artillería. Antonio Ortiz fue designado jefe del sector Sur-Ebro, Buenaventura Durruti jefe del sector Centro y el Coronel Villalba del sector Alto y Norte de Aragón (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). Arturo Morera concluye «En Sariñena se establecía una Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad. Así pues, el comandante Reyes era el elegido como jefe único de todas las fuerzas, con su cuartel general en Sariñena».

«El 23 de octubre una delegación formada por el capitán Josep Guarner y el teniente Bosch Biosca establece el Estado Mayor del Frente de Aragón en Sariñena. El responsable del mencionado Estado Mayor va ser el capitán Ricardo Clavería Iglesias» (La columna MaciàCompanys. Hernández  Cardona, Francesc Xavier i David Iñiguez Gràcia).

Una de las consecuencias de ser Sariñena Cuartel General del Frente de Aragón, fue el establecimiento en la localidad de la Auditoría de Guerra. En ella se celebraron consejos de guerra «Juicios populares y la aplicación sumaria de sentencias» (A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene). Además, en el aeródromo se celebraron bautizos y bodas civiles, muchas de las cuales ofició el mismo comandante Reyes.

El Estado Mayor y Cuartel General de Sariñena

En octubre de 1936 se instaló en Sariñena el Cuartel General de Sariñena organizándose como un Estado Mayor. El Cuartel General se ubicó en casa Torres, en la actual plaza Estatuto de Aragón, conocida popularmente como plaza de Villanueva. «La ubicación física de estas personas y muchas otras a sus órdenes en general, tuvo su lugar preferente en la casa señorial de D. Mariano Torres, previamente requisada. Del mismo modo se instaló el Hospital de Sangre en la mansión de D. Joaquín Paraled en la plaza de la iglesia» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Fue a raíz de una reunión que se celebró el día 13 de octubre en Sariñena. Para Arturo Morera fue «Una importante y decisoria reunión de todos los jefes de columnas que operaban en el frente aragonés, con la intención de llegar a un acuerdo para establecer un mando único ante la proyectada reorganización del frente. La convención fue presidida por el teniente coronel Díaz Sandino (Consejero de Defensa), y a ella asistieron, entre otros, el coronel Villalba, el comandante Pérez Salas (por el sector del Sur), Durruti (por el sector del Centro), García Oliver (del Comité superior de Milicias) y el comisario civil de las columnas catalanas, Moles.»

El teniente coronel Vicente Guarner, jefe de E. M. en la Consejería de Defensa de la Generalidad de Cataluña, «Sugirió al Comité Central de Milicias sus ideas de cómo debían coordinarse las actividades de las columnas. El plan fue aceptado, no sin resistencias, y Sariñena se convertiría en pieza clave en la marcha de la guerra a partir de mediados de octubre de 1936.» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

Dicha restructuración  aprobada en octubre de 1936 del frente de Aragón  estableció tres grandes circunscripciones y dos sectores.

  • La circunscripción del Norte, con mando en Barbastro, comprendía las columnas “Roja” y “Negra”, “Aguiluchos”, la del P.O.U.M. y la del coronel Villalba.
  • La circunscripción del Centro, con mando en Sariñena incluía las columnas de Durruti y la Del Barrio.
  • La circunscripción del Sur, con mando en Caspe, agrupaba todas las columnas que se habían agregado a la de Ortiz.

Los dos sectores eran el “Maciá-Companys” con mando en Montalbán, y el Pirenaico con mando en Boltaña. (A una milla de Huesca, diario de una enfermera australiana en la Guerra Civil española. Autores: Agnes Hodgson, Víctor Pardo Lancina, Judith Keene).

Todas las fuerzas del frente de Aragón quedaron bajo el mando del comandante Alfonso de los Reyes, además seguía teniendo a su cargo todas las fuerzas de Aviación. Así, en palabras de Arturo Morera «En Sariñena se establecía una Dirección General del Frente delegada de la Consejería de Defensa de la Generalidad.» El comandante Reyes era el elegido como jefe único de todas las fuerzas, con su cuartel general en Sariñena mientras que la jefatura o jefe del Estado Mayor de la delegación de Sariñena recayó a cargo del comandante de infantería José Guarner Vivancos, hermano del comandante Vicente Guarner Vivancos, encargado en la organización de la Consejería de Defensa de la Generalitat como un Estado Mayor.

Tarragona. Hacia el frente de Sariñena.

El sacerdote Ángel García i Rollán ha estado designado para formar parte del Estado Mayor de Sariñena, por la cual cosa ha de abandonar sus actividades en el comité antifascista local.

 La Publicitat: (16 Octubre 1936).

Por el alto mando ha estado designado al Estado Mayor del frente de Sariñena el capitán de infantería Josep García Rollán.

El señor García Rollán hasta ahora había actuado en el comité de las milicias tarraconenses.

La Veu de Catalunya: diari catalá d’avisos, noticias y anuncis: Any 46, Núm. 12580 (17 oct. 1936) Ed. Matí.

El Estado Mayor de Sariñena contó con tres secciones: «Organización del Frente», al mando del Comandante García Rollán; «De Información», dirigida por el Comandante Jaime Bosch y «Operaciones» a cargo del Comandante de Estado Mayor Ricardo Clavería Iglesias. «Completaban la nómina de cuadros militares en Sariñena el teniente coronel diplomado de Estado Mayor Carlos Botet, como comandante principal de la Artillería en el frente; el comandante Martorell, de Ingenieros, tenía a su cargo la organización de las unidades de su especialidad en todo el frente aragonés; por último, el doctor Bergós fue el encargado de organizar puestos de socorro y curación en las líneas así como los hospitales de Barbastro, Fraga y Caspe» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

«Las funciones de este Estado Mayor van a comenzar con la creación de un grupo de unidades de fortificación y obras de las cuales fueron responsables tres ingenieros militares entre ellos Miguel Ramírez de Cartagena, con dos arquitectos, dos aparejadores y dos técnicos del ramo de la construcción. Además, los trabajos de organización del Estado Mayor para las operaciones en Aragón se van a complementar con la constitución de un grupo de transmisores y señales del que fue responsable el ingeniero de telecomunicaciones Sánchez Cordobés y se impulsará a cargo del responsable de municiones de las industrias de guerra con el nombramiento de María»

La columna MaciàCompanys. Hernández  Cardona, Francesc Xavier i David Iñiguez Gràcia.

El Estado Mayor de Sariñena se englobó bajo el Estado Mayor Central, con sede en Valencia, cuyo mando respondió a Toribio Martínez Cabrera. A mediados de diciembre de 1936, Toribio Martínez Cabrera visitó el Estado Mayor de Sariñena junto al teniente coronel Vicente Guarner Vivancos. Unas semanas antes, Vicente Guarner Vivancos, entre los días del 16 al 21 de noviembre del 36, ya había visitado el Estado Mayor de Sariñena: «Para inspeccionar el funcionamiento del Estado Mayor en el cuartel general de Sariñena, el teniente coronel Vicente Guarner se personó en nuestra villa en los días 16 al 21 de noviembre. Vicente Guarner volvió a Sariñena acompañado del general jefe del Estado Mayor Central, Toribio Martínez Cabrera, a mediados de diciembre de 1936, en un intento de montar operaciones en Aragón para descongestionar el frente de Madrid» (Arturo Morera. La guerra del 36 en Sariñena).

«Las diferentes columnas se relacionaron entre sí mediante una Dirección Superior del Frente de Aragón y Estado Mayor Técnico, residente en Sariñena».  

Carlos Hervas Puyal, Sanitat a Catalunya durant la República i la Guerra Civil.

Aunque el Cuartel General de Sariñena contó con militares profesionales, elegidos por el Comité de Milicias, Arturo García Álvarez-Coque, Los militares de Estado Mayor en la Guerra Civil española (1936-1939), señala que el único profesional de Estado Mayor era el comandante Ricardo Clavería: «Como Delegación en el frente de Aragón, en octubre de 1936 Guarner estableció el Cuartel General de Sariñena, que se organizó como un Estado Mayor con militares profesionales, elegidos por el Comité de Milicias. Entre ellos figuraba como jefe José Guarner, hermano de Vicente, aunque el único profesional del Estado Mayor era el comandante Ricardo Clavería. Además Arturo García Álvarez-Coque detalla como se intentaba una coordinación con el Estado Mayor Central en Valencia: «Vicente Guarner fue enviado a esa ciudad a final de noviembre “para exponer la situación del frente, la organización militar catalana y la escasez de medios de guerra de que disponíamos. Traté de estos asuntos con mi compañero de Estado Mayor Manuel Estrada”. 

José Guarner Vivancos fue un militar catalán, asesor de la columna de Los Aguiluchos y miembro del Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña. Llegó a ser jefe de Estado Mayor de la 24.ª División y del XXIV Cuerpo de Ejército. Acabó exiliado en México.

Bando del Jefe superior de las fuerzas y milicias

El comandante jefe superior de las fuerzas y milicias del frente de Aragón, ha publicado en el cuartel general instalado en Sariñena un bando diciendo:

“Hago saber que, por decreto de 28 de julio próximo pasado, fue declarado zona de guerra el territorio de la región aragonesa ocupado por las fuerzas leales a la República.

En su virtud, todo ciudadano que en dicha zona comente el movimiento de fuerzas leales, resoluciones de jefes militares o políticos o sus delegados; que manifieste o propague cualquier noticia de guerra o bulos que puedan sobrecoger o deprimir el ánimo, cosa que en la mayoría de las veces se realiza por gentes cuya intención es claramente de animadversión a la lucha que el pueblo español sostiene por la República y su libertad, será detenido y puesto a disposición del Comité local, donde se encuentre, y previa declaración por dicho Comité de considerársele faccioso, será pasado por las armas».

    La Libertad: La Libertad – Año XVIII Número 5175 – 1936 octubre 29 (29/10/1936).

Toma de posesión del nuevo jefe de las fuerzas del sector de Barbastro:

Ha tomado posesión del mando de las fuerzas de este sector el teniente coronel Gómez García, después de celebra una entrevista con el coronel Villalba, el cual le da posesión del cargo.

El nuevo jefe de las fuerzas se despide del coronel Villalba, el cual marcha a última hora de la tardea Barcelona, por tal de incorporarse a su nuevo destino.

El comunicado oficial. El comunicado oficial de este sector no nos ha estado facilitado aún a la hora que telefoneamos, por encontrarse el nuevo jefe de las fuerzas reunido con su Estado Mayor en Sariñena, podemos asegurar que no discrepará de la impresión que hemos anticipado.    

Full oficial del dilluns de Barcelona: Número 571 – 1936 Noviembre 23.

Próxima reunión en Sariñena

Parece ser que mañana se celebrará una reunión en Sariñena, a la que asistirá una representación militar y civil de aquella región. 

Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14471 – 12 Enero 1937.

Una reunión importante

Parece ser que mañana se celebrará en Sariñena, una importante reunión a la que asistirá una representación del Consejo Regional de Defensa de Aragón y otras personalidades.

La Batalla: Número 141 _ 13/01/1937.

En Sariñena se reunieron las representaciones del Frente Popular de Aragón y del Consejo Provisional, para tratar de las cuestiones sociales, políticas y militares.

 Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14492 – 06 Febrero 1937.

Hace unos días en Sariñena hubo una reunión de representantes de fuerzas antifascistas. Se debía de sopesar todo. Quizás se habló de la necesidad de mostrarse unidos y compactos frente a potencias extranjeras. “Segurament es va tenir en consideracio la diversitat de parers i de campanya que de cara la nostra diversitat de parers i de colors es mena a les rengleres faccioses”.

Fue después de escuchar a todos los oradores cuando se llegó al acuerdo de albergar todas las horquillas bajo los pliegues de la bandera republicana presidida por el glorioso y revolucionario anagrama revolucionario U. H. P. ¿Todos de acuerdo? ¡Ya está!. Ya era bien entrada la madrugada ¡Ah, pero no! ¡No haría falta más! Aquí está el «Poum» decidido a romper el trato. No debería haber tal unanimidad. Cada uno que enarbole lo que quiera. ¡No faltaría más!

La Humanitat: Any 6, núm. 1556 (19 febr. 1937).

El teniente Coronel Alfonso de los Reyes, en febrero de 1937 renunció a su cargo como jefe de las fuerzas de todo Aragón en febrero de 1937. Su dimisión causó extrañeza entre milicianos y soldados, tal y como recoge Arturo Morera a raíz de una entrevista que Pere Foix realizó a de los Reyes y publicada en el diario «Treball» del 4 de febrero de 1937.

-«No ha de causar extrañeza mi dimisión. Fui nombrado jefe del Frente de Aragón por delegación del entonces Consejero de Defensa, Coronel Díaz Sandino, en unos momentos en que el frente pasaba por una situación difícil y que, además, era necesario servir de aglutinante entre los diferentes jefes de columnas, que hasta entonces habían operado por su cuenta, debido al dinamismo de los prime ros días. He conseguido con la ayuda y el buen sentido de todos, el dar el primer paso en la unificación del mando del frente. Una vez conseguida la misión, para la cual fui nombrado, y entendiendo que mi nombramiento era una cuestión personalísima del ex-consejero Díaz Sandino hacía mi persona, y además deseando dedicarme intensa mente al servicio de la Aviación, he solicitado y he obtenido del nuevo Consejero de Defensa, el ser relevado de mi cargo de jefe superior de las fuerzas del frente de Aragón.

La entrevista continúa con la pregunta de mantener el Cuartel en Sariñena «La pregunta parece preparada para que el Teniente coronel Reyes, respondiera en el sentido de desear que nuestra villa dejara de alojar a los mandos del Cuartel General, ahora que él iba a cesar en el cargo de jefe superior del frente.»

-«Hombre, dijo Reyes -los Cuarteles Generales no han de estar mucho tiempo seguido en el mismo lugar. Se habría de evitar la intimidad entre el personal del Cuartel General y la población civil, entre la cual el enemigo puede tener a sus agentes de espionaje. Se ha de tener en cuenta, que en las poblaciones que ocupamos, quedan muchos fascistas desconocidos. Nunca está de más tomar precauciones».

Arturo Morera concluye, por esta declaración, que «Se puede pensar que Reyes estuviera deseando que los jefes del Estado Mayor, que hasta entonces habían estado bajo su mando, se alejaran de Sariñena, en el momento que él perdía protagonismo por su cese. De esa manera, al mantener su puesto de jefe de la Aviación, Reyes, quizá esperara seguir actuando como «virrey» efectivo de nuestra población, dando continuidad a su papel preponderante desde que se instaló en Sariñena en los primeros días de agosto de 1936.»

El 28 de febrero de 1937, Vicente Guarner fue nombrado «Jefe de todo el frente de Aragón por parte del Consejero de Defensa y por el presidente Companys, no sin su sorpresa, dado que nadie le consultó esta decisión. Sin embargo y como militar profesional acatará las órdenes y se trasladará a la base de operaciones del frente emplazada en Sariñena. Desde este centro se trabajaba incansablemente de día y de noche, se visitaban los sectores y las posiciones, el cuerpo de transmisiones funcionaba de manera ejemplar y los servicios de información realizaban tareas de aviso del movimiento de tropas del enemigas» (La columna MaciàCompanys. Hernández Cardona, Francesc Xavier i David Iñiguez Gràcia).

La Humanitat: Any 6, núm. 1591 (1 abr. 1937) recoge la orden de la Comandancia Militar de Barcelona, publicada en «La revista del Comisario» del mes de abril de 1937, con los diferentes comisarios de intervención civil designados, entre ellos Josep Farrés Requena como interventor civil del Cuartel General del sector sur de Aragón, Batallón de montaña nº 4, plaza de Barbastro y Cuartel General de Sariñena.

En el mismo sentido La Humanitat (Any 6, núm. 1695 del 3 de  agosto de 1937. Ejército del Este. Revista del Comisario.) cita que la comandancia militar de Barcelona ha publicado el orden siguiente: «La revista del comisario del mes de agosto de 1937 se pasará desde las diez de la mañana ante los comisarios respectivos de intervención civil de guerra, designados a continuación: Josep Rocha Muñez. Plazas de Barbastro y Sariñena. Cuarteles generales del 10 y 11 Cuerpo del Ejército y de las Divisiones 27, 28, 29, 31 y 34 con sus brigadas mixtas, batallones de ametralladoras y regimientos de Caballería de Barbastro y Sariñena, batallones de obras y fortificaciones números 23, 24 y 26 y Prefectura administrativa comarcal de Barbastro con sus servicios.»

Estado Mayor Sariñena Comunicado 020437

Comunicado del Estado Mayor de Sariñena del 2 de abril de 1937.

Heraldo de Castellon 12 Abril 1937 Sariñena Guerra

Comunicado del Cuartel General de Sariñena. Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14545 – 12 Abril 1937.

Comunicado Cuartel general 020537

Comunicado oficial del cuartel general de Sariñena.
Nuevo Aragón, 2 de mayo de 1937.

Nuevo Aragón Estado Mator Sariñena 060637

Parte de guerra

Sarinena, 5 (12 noche). Parte de novedades facilitarlo, por el Estado Mayor del Ejército del Este: Parte de las 8 horas: A las 6,30 de la madrugada, fuertes tiroteos en el sector de la División 25. Se han pasado trece evadidos del campo faccioso Parte de las 20 horas: Sin novedad. – Corresponsal.

 Nuevo Aragón. 6 de junio de 1937.

Ejército del Este y el XI Cuerpo de Ejército del Este

Ejército del Este

A finales de abril de 1937 se produjo la unificación de todos los ejércitos en divisiones y brigadas mixtas, la organización del frente de Aragón pasó a denominarse Ejército del Este; formado el 6 de mayo de 1937. El Ejército del Este se estructuró con las divisiones 28ª y 29ª en Huesca, divisiones 26ª y 27ª en Sariñena y la 25ª y 30ª en Caspe. Al mando del Ejército del Este estuvo el General Pozas. De esta manera, el Frente de Aragón quedó cubierto por los Cuerpos de Ejército X, XII y XII hasta la campaña de Aragón cuando se sumó la XVIII Cuerpo del Ejército de Maniobra.

«Con estas unidades formó dos agrupaciones: la Agrupación Norte, con los Cuerpos de Ejército X (divisiones 421, 3V y 341) y XI (divisiones 261, 301 y 321), y Sur; con los Cuerpos XVIII (divisiones 271, 601 y 724) y XII (divisiones 161, 441 y Bellvís). Mandaba la Agrupación Norte el teniente coronel de Estado Mayor, Javier Linares Aranzabe, y la Sur, el teniente coronel de Artillería, Antonio Cordón García.»

(https://www.combatientes.es/)

El general Pozas visita el Frente de Aragón

Sariñena. El jefe del Ejército del Este, general Pozas, ha llegado con el objeto de recorrer el frente en viaje de inspección y reconocimiento para dejar acoplados todos los mandos y servicios a las órdenes del jefe del Estado Mayor.

El general Pozas recorrió los diversos sectores de la cuenca pirenaica descendiendo después al sector del centro para trasladarse después al del sur.

El Cantábrico: diario de la mañana: Año XLIII Número 14695 – 1937 junio 6.

XI Cuerpo de Ejército del Este

Sariñena albergó el Cuartel General del alto mando del XI Cuerpo de Ejército Republicano.  El XI Cuerpo de Ejército respondió a una Unidad militar creada el 6 de junio de 1937 y perteneciente al Ejército Popular de la República, adscrito al Ejército del Este. El XI Cuerpo de Ejército estuvo compuesto por las divisiones 26ª (Columna Durruti), 27ª (Columna Carlos Marx) y 32ª.

Parte Oficial del Ejército del Este desde Sariñena. Nuestra lucha: portavoz de la Unidad Obrera: Año II Número 265 – 1937 Junio 17.

Parte oficial

Se puede establecer la composición del XI Cuerpo de Ejército principalmente por las divisiones 26 y 27, aunque detallando en julio de 1937 estaba compuesto por las divisiones 26, 27 y 32; octubre de 1937 divisiones 26, 32, 44 y 45; diciembre de 1937 divisiones 26 y 32; 19 de abril de 1938 divisiones 26, 30 y 32; 3 de septiembre de 1938 divisiones 26 y 34; diciembre de 1938  divisiones 26, 30 y 32; 27 de diciembre de 1938 divisiones 26 y 34 y Brigadas Mixtas 62 y 176, 2 de enero de 1939 divisiones 30 y 31y el 27 de enero de 1939 divisiones 30, 31 y 32.

La campaña de Aragón u Ofensiva de Aragón fue llevada a cabo entre el 7 de marzo y el 19 de abril de 1938 y golpeó de lleno a las fuerzas del Ejército del Este. Sariñena acabó en manos de los nacionales mientras que el Ejército del Este quedó muy debilitado. El Ejército del Este dejó de existir el 8 de febrero de 1939 al cruzar la frontera, a Francia, por Le Perthus.

Un juicio sumarísimo

Sariñena. Se ha celebrado la vista del juicio sumarísimo instruido por la Secretaría Relatoría del Tribunal Permanente del XI Cuerpo del Ejército, contra el soldado del 4º Batallón 1ªCompañía de la 121 Brigada Mixta, Francesc Pires Inácio, por el supuesto delito de deserción.

El Ministerio Fiscal en sus conclusiones solicita para el procesado la pena de doce años de internamiento cumpliendo condena en un Batallón Disciplinario mientras dure la actual campaña.

El tribunal, vistas las circunstancias atenuantes al encausado, dicta sentencia condenando al soldado Francesc Pires a la pena de seis años de internamiento e ingreso en un Batallón Disciplinario para todo el tiempo de duración de la presente campaña.

La sentencia ha estado aprobada por el general en jefe y el comisario del Ejército del Este.

En el acto del juicio congregó a gran número de soldados y paisanos en la plaza.

La Humanitat: Any 6, núm. 1815 (21 des. 1937).

Organización Civil

Los comités locales

«En poco más de un año, en Aragón existieron los Comités Revolucionarios con Consejos, Comités Municipales y comisiones gestoras» Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938. Casanova, Julián.

Con el inicio de la guerra se van formando los Comités de Guerra en las diferentes localidades del bando republicano. Se mantienen, a veces y por muy poco escaso de tiempo, los gobiernos derivados del Frente Popular hasta la creación de Comités, impuestos por milicias o sindicatos fuertemente implantados en la localidad «Formados espontáneamente en los instantes graves de los primeros días de la sublevación militar» Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938. Casanova, Julián.

Ver: Sariñena, gobiernos en guerra. 

Comité Local  o Comité Revolucionario de Sariñena

Luis Buil Espada atribuye a la constitución del Comité Local de Sariñena o Comité Revolucionario a socialistas, comunistas, Izquierda Republicana, Unión Republicana (de derechas) y anarquistas. José Paraled, desde 1935, perteneció a Izquierda Republicana y ocupó el cargo de alcalde hasta que fue destituido cuando los sindicatos CNT y UGT tomaron el ayuntamiento de Sariñena, formando el Comité Revolucionario de Sariñena.

En la constitución del Comité Revolucionario de Sariñena, el sindicato CNT fue una fuerza mayoritaria. Para Daniel Pinos esto explica que Se decretase, desde un principio, las colectivizaciones de las tierras, la abolición de arriendos y la expropiación de grandes fincas y maquinaria agrícola. Eusebio Pinos formó parte del comité, quien según las palabras de su hijo Daniel Pinos fue delegado de abastos. También se puso en marcha una pequeña colectividad: La Colectividad de Sariñena.

971112_659590757400840_1201107089_nEn las Solicitudes de Informes Políticos–Sociales de Sariñena aparece abundante información y testimonios sobre diversos sucesos que se desarrollaron durante la guerra civil en la capital monegrina. La formación del Comité Local de Sariñena, según el testimonio de Fulgencio Esteban Olivas, fue integrado por José Paraled y José Brunet, entre otros miembros que ignoraba: No ocurrió nada anormal durante la actuación de este comité a excepción de la profanación de la iglesia. Rumoreándose que las imágenes habían sido quemadas en la plaza, ignorando que hicieron de los objetos de valor y en cuyo hecho intervinieron individuos desconocidos. Días más tarde se constituyó un nuevo Comité Local con José Paraled, José Brunet, Manuel Blames, Dionisio Buil y Francisco Lana. Lo que parece claro que tanto José Paraled y José Brunet formaron parte del gobierno local del Frente Popular, anterior a la sublevación militar.

Segundo Comité

En la causa contra José Orquín Casañola (ES/AHPZ – J/005974/000023), se cita la creación del segundo comité en octubre de 1936. José perteneció a la UGT, fue directivo de las Juventudes Socialistas Unificadas y fue nombrado vocal de aquel segundo comité.

La declaración de José Zamorano Cabellud “El Vicien”, en los informes políticos sociales de Sariñena, cita como integrantes del comité a Tomás Izco (F) (Ferroviario de Sariñena fallecido en el momento de la declaración en 1943), Antonio Mir “El Tuerto”, Francisco Masueras Claveria, Andres Minguillón (F), José “El Huesetes”, Antonio Casabona Marías y Dionisio Buil Mesple. José Zamorano Cabellud se enroló voluntariamente en la veintiséis división dirigida por Durruti.

Se decía que el Capitán General Romerales era de Sariñena. “Paco, un conocido amigo mío, que era manco y trabajaba en el ayuntamiento, enviaba una pequeña cantidad, de su magro sueldo a la esposa del General a Madrid, pues ella no tenía pensión de viudedad (pasados muchos años se la concedieron) y él me decía que era la mujer de su tío, hijo del pueblo”.

Luis Buil Espada.

Toda la vida en guerra de un pacifista.

Consejo Municipal de Sariñena

Sello consejo SariñenaCon la creación del Consejo Regional de Defensa de Aragón y el Ministerio de Gobernación, presidido por Joaquín Ascaso, «Se decretaron las normas para la la sustitución de Comités Locales por Consejos Municipales (Decreto 19 de enero de 1937 firmado por Joaquín Ascaso) Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938. Casanova, Julián.  La creación del Consejo Regional de Defensa de Aragón, entre el 6 de octubre de 1936 y el 11 de agosto de 1937, tuvo sus inicios en Bujaraloz  a partir de un plenario sindical  de la CNT en septiembre de 1936. El Consejo Municipal estuvo activo hasta el 9 de marzo de 1938, pocos días antes de caer la población en manos de los sublevados.

El 2 de abril de 1937 se constituye el 1 er Consejo Municipal de Sariñena y el 3 de octubre, del mismo año, se constituye el 2º Consejo Municipal de Sariñena. Estuvo activo hasta el 9 de marzo de 1938, días antes de la caída de Sariñena ante las tropas sublevadas.

Billetes del Consejo Municipal de Sariñena, realizados el 10 de junio de 1937. Los billetes aparecen con el estampado del sello del Consejo Municipal y las firmas del presidente Mariano Basols Buil y el cajero municipal Jaime Solé Sanmartí. En aquella tirada se hicieron una serie de 10.000 vales de una peseta y otra de 10.000 vales de 0,5 pesetas, un valor total de 15.000 pesetas. El 4 de septiembre de 1937 se emitieron 5.000 billetes más de peseta y 5.000 de cincuenta céntimos y el 21 de diciembre, del mismo año, se ponen en circulación 2464 billetes más de 0,5 pesetas cada uno, hasta los 17.464 y 225 de una peseta hasta los 15.225 (Actas del Consejo Municipal de Sariñena).

En el Archivo General de la Guerra Civil Española, Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca, se conservan las Actas del Consejo Municipal de Sariñena (Expediente CDMH_PS_BARCELONA_C0902_EXP011 Actas Comité) desde el 1 de abril de 1937 hasta el 9 de marzo de 1938.

Frente Popular Antifascista

Tras la disolución del Consejo Regional de Defensa de Aragón, entre los días 14 y 16 de octubre de 1937 se crea el Frente Popular Antifascista de Sariñena. Por aquellos tiempos Sariñena alojaba el cuartel general del ejército republicano del Este (Arturo Morera: Un documento del archivo de Salamanca). El Frente o Comité Antifascista de Sariñena convivió con el Consejo Municipal de Sariñena. Se puede decir que uno actuaba como órgano político militar y el otro como político civil.

Convocados por el Delegado Gubernativo se reúnen el día 14 de octubre del corriente año y hora de las 10 de la noche, en la Delegación de esta localidad, dos representantes de cada una de las organizaciones y partidos políticos de Sariñena, con el objetivo de constituir en la misma el Frente Popular Antifascista.

Concurren, por la Confederación Nacional del Trabajo, Manuel Santolaria y José Ros. Por la Unión General de Trabajadores, Antonio Lacuna y Mariano Morén. Por Unión Republicana, Mariano Grustán y Pedro Tires. Por Izquierda Republicana, Manuel Tena (hace constar este representante que el otro compañero designado por su agrupación, que es José Morera no concurre por estar de viaje). Por el Partido Socialista, Severo Arroyos y Pedro Sanz. Por el Partido Comunista, Pedro Cáscales y Eloy Casabón. Por las Juventudes Libertarias, Gregorio Lozano y José Malo. Por las Juventudes Socialistas Unificadas Daniel Grustán.  

Preside la reunión el Delegado Gubernativo que declara abierta la sesión y expone el motivo de la reunión, que no es otro que el de constituir en Sariñena el Frente Popular Antifascista. Todos reunidos se manifiestan de conformidad con lo expresado por la Presidencia por ser necesario para ganar la guerra y consolidar la revolución. La Presidencia pasa a leer el compromiso que han firmado en Caspe por todas las organizaciones que ha llevado como consecuencia a la formación del Frente Popular en Aragón. Una vez leído es aprobado por todas las representaciones de esta localidad, haciéndose distintas las aclaraciones que son contestadas por la Presidencia y por algunos de los representantes.

En consecuencia se acuerda quede constituido en esta localidad el Comité de Frente Popular Antifascista, haciendo suyo el mismo articulado que se firmó en Caspe el 23 de septiembre para el mismo fin. Se pasó a discutir el número de representantes que formarán parte de dicho Comité, y tras amplias deliberaciones en que intervinieron todas las delegaciones se acuerda por unanimidad sea uno por cada partido y organización en calidad de efectivo y otro en calidad de suplente designado también por las distintas organizaciones para suplir al efectivo en ausencias y enfermedades, consiguiéndose de esta forma que nunca quede ningún partido ni organización sin representar en ninguna reunión. De acuerdo todos, queda en proseguir esta reunión el sábado próximo día 16 en que traerán el nombramiento efectivo.

El sábado y hora acordada vuelven a reunirse las mismas delegaciones que el día 14.

Preside el Presidente del Consejo Municipal que expone el motivo de la reunión. Pregunta el nombre del representante efectivo que mandan los distintos partidos y organizaciones para la constitución definitiva del Comité del Frente Popular Antifascista.

Por el Partido Socialista, Severo Arroyo. Por el Partido Comunista, Pedro Cáscales. Por Unión Republicana, Mariano Grustán. Por la Confederación Nacional del Trabajo Vicente Lapiedra. Por la Unión General de Trabajadores, Antonio Lacuna. Por Izquierda Republicana José Morera. Por las Juventudes Libertarias, Gregorio Lozano. Por las Juventudes Socialistas Unificadas José Romerales.

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Estudis sobre conflictos socials. Las Brigadas Internacionales: Nuevas perspectivas en la historia de la Guerra Civil y del exilio. Josep Sánchez Cervelló y Sebastián Agudo.

Sariñena se consolida estratégicamente.

La ubicación del Estado Mayor, el aeródromo «Alas Rojas» y la Estación ferroviaria de Sariñena, como nudo de comunicaciones, situaron a Sariñena como centro estratégico y neurálgico de las circunscripciones Norte y Centro del frente de Aragón. Sariñena debió de ser una población bulliciosa y llena de actividad como refleja una crónica del Diario Treball de Barcelona, febrero de 1937: «Sariñena es una población de cuatro mil habitantes, que parece que tenga diez mil. Sus calles y plazas siempre llenas de soldados y milicianos, Los comercios no dan abasto en despachar. Los cafés, llenos a tope a cualquier hora. Las chicas del pueblo están muy contentas de este amontonamiento de la flor y nata de nuestra juventud que asa por Sariñena, camino de las trincheras. El campo de aviación, contribuye a animar las estrechas y fangosas calles de Sariñena, de una manera particular. Coches, camiones, aviadores esbeltos y simpáticos, que a menudo demuestran su técnica volando sobre Sariñena».

Sección catalana del Socorro Rojo Internacional

A la vez que se desarrollaba y organizaba, realiza trabajos de importancia reconocida, como la instalación del hospital de sangre: la casa de reposo para los combatientes internacionales; lavaderos mecánicos, a Sariñena y Alcañiz; la construcción de coches ambulancia, que libra la sanidad de guerra; la organización de la ayuda moral y material a los refugiados y las expediciones de comestibles, ropas de abrigo y material sanitario a los frentes de más importancia.

 La Humanitat: Any 6, núm. 1589 (30 març 1937).

Sariñena albergó el Hospital Militar junto a una pequeña biblioteca en casa Paraled, una Farmacia Militar Internacional en calle Enado, un Comedor Popular y/o de Milicias, el Aeródromo Alas Rojas, un Depósito de Armas y Municiones y un Hospital de Evacuación en el barrio de la Estación de ferrocarril de Sariñena.

La Biblioteca se situó en una planta baja de la calle Mercado y otra cita ubica una segunda biblioteca en calle Goya número 72.

En la Iglesia, una vez saqueada, se estableció un Garaje y Taller de reparación de vehículos y automóviles. En su puerta principal existió un letrero colosal con la inscripción: UHP (Unión de Hermanos Proletarios). Tras la toma de Sariñena, por las fuerzas nacionales, el redactor Flecha relató «Hay restos de vehículos, grasas, herramientas. Sobre la fachada un gran parapeto de sacos terreros donde se escondían armas antiaéreas». Efectivamente, en la torre de la iglesia estuvo un puesto de vigilancia, con armas antiaéreas y una alarma para avisar a la población ante los ataques aéreos. El puesto debió de ser muy precario y así queda recogido en el acta del Consejo Municipal de Sariñena del 4 de octubre de 1937 “Da cuenta (presidencia) de que la vigilancia de la torre le es muy difícil prestar los servicios sino se instala una especie de cuarto que permita hacer la guardia evitando en lo posible el frío”. El 13 de octubre de 1937 se dio lectura a una comunicación del Comité local de defensa pasiva en la que solicitaba ayuda al Consejo “Con la cantidad que crea por conveniente para atender a los diferente gastos que se le ocasionan como son la compra de una sirena y más lentes para el puesto de guardia en la torre acordándose acceder a lo solicitado”. El 1 de diciembre de 1937 se acordó vender las campanas para sufragar los gastos de la Junta de Defensa Pasiva (Actas Consejo Municipal).

 Gabino Lavilla Arcal, Participo en la detección de personas “de orden”. Intervino en la destrucción  de las iglesias de Albalatillo y Castejón de Monegros, en la quema del archivo del ayuntamiento y juzgado de Albalatillo.  Prisión provisional de Las Capuchinas de Barbastro.

Solicitudes de Informes Políticos–Sociales.

La antigua capilla de Loreto fue destinada como garaje del Consejo Municipal «Local de Loreto. -Haciéndose las reparaciones que sean precisas-” (Actas Consejo Municipal).

El Hotel Anoro fue socializado por el sindicato UGT durante la guerra y sirvió de alojamiento, principalmente, para altos mandos; especialmente del aeródromo de aviación. También debieron de tener la sede en el Hotel las Juventudes Libertarias, «Telas rojas con rótulos inmensos, banderas, folletos del peor gusto, colores y colores, Prensa que atosiga, carteles que marean» (Flecha). El Hotel acabó saqueado y destrozado y la familia Anoro tuvo que comenzar de nuevo para devolver la vida a un hotel que ha significado el centro neurálgico de la villa monegrina.

En la plaza Enado tuvieron la sede las Juventudes Unificadas. «Tenían, vamos. Allí está Falange Española Tradicionalista y de las JONS» (Flecha).

El Casino de Sariñena albergó la Casa del Pueblo y la Central de Sindicatos. También estuvieron grados escolares, «En su fachada un gran letrero reza: Casa del pueblo, Central de Sindicatos” (Flecha). En el acta del Consejo Municipal del 13 de octubre de 1937 aparece la petición de instalar el Hogar del Combatiente en el Casino de Sariñena: “Se da lectura a una comunicación del Comisario de Guerra del XI Cuerpo de Ejército solicitando el Casino de Sariñena, hoy Casa del Pueblo, para instalar en el mismo el Hogar del Combatiente”. Al final se acordó no acceder ningún espacio, ni el casino ni un grado de la escuela “Por entender ser contraproducente y perjudicial mezclarse los niños y niñas de otros grados que asistan a clase con mayores, transeúntes y milicianos.”

También se instaló un servicio de paquetería para los milicianos del frente:

Servicio de paquetes al frente para los milicianos

Ha vuelto del frente la expedición organizadora del servicio dirigido por el profesor Escoda. Donde han montado oficinas de distribución en Barbastro, Angüés, Sariñena, Bujaraloz y Caspe. De esta manera, el envío de paquetes dará su máximo rendimiento.

La Veu de Catalunya: diari catalá d’avisos, noticias y anuncis: Any 46, Núm. 12561 (25 set. 1936) Ed. Matí.

Relación de paquetes devueltos del frente sin remitentes 

Entre los muchos devueltos, cuatro paquetes son devueltos desde Sariñena, los de Jesús Argensó Villanova, Tomás Beneit Ribera, Josep Boladeras y Climent Carné.

Paquetes del frente sariñena

La Humanitat: Any 7, núm. 1829 (6 gen. 1938).

Además se desarrollaron diferentes Comités de Intendencia, Abastos, Colectividad, Transportes… para la organización e intendencia, tanto como para el frente como por posición de retaguardia. Se crearon vales para comidas, en el comedor popular, para compras y hospedaje, además de billetes propios del Consejo Municipal en junio de 1937.

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Franz Borkenau, en El reñidero español relata como a partir de Fraga, en la línea del frente, «Toda comida está rígidamente racionada, al igual que el hospedaje». Cuando llega a Sariñena, el 13 de agosto de 1936, narra «Fue una lucha conseguir vales para nuestras comidas y habitaciones, ya que cada comida debía de ser solicitada  por separado al comité local. Se calculan las provisiones  regulares contando sólo con los habitantes y la milicia pero no se nos invitó, después de alguna discusión, a comer en el comedor de milicias y así logramos conocer a muchos de ellos».

Salvoconducto

* Autorización de circulación a nombre de Juan Segués para trasladarse a Sariñena. Comissaria Delegada de la Generalitat a Lleida. Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-1-T-9398.

Concha Buisan Ballarín recordaba como durante la guerra había ametralladoras por los tejados, su madre hacía la comida a altos mandos de las tropas republicanas que se encontraban por Sariñena.

En Sariñena estuvo destacada la 4ª compañía del 26 batallón de portificaciones al mando del capitán Juan Planae y los sargentos Juan Torrene y Salvador Fernández. Soldados Salvador Dalmen Serna y Vicente Marcos Amarde.

Algunos sariñenenses marcharon al cercano frente de Alcubierre a luchar y allí encontraron la muerte, entre otros Salvador y Mariano Grustán Tella, Manuel Villa y Antonio Ancho.

Desde Sariñena fueron evacuadas muchas milicianas y mujeres del frente a las que culpabilizaban por el elevado caso de enfermedades venéreas en el frente.

La orden de Durruti a Mosén Jesús, que éste cumplió disciplinadamente, fue la de recorrer todas las centurias, recoger a las mujeres “sin dejar una siquiera”, trasladarlas a Sariñena y enviarlas en tren a Barcelona. Esa escena la recreó Vicente Aranda en su película “Libertarias”, en la que un Miguel Bosé algo blandito y redicho interpreta el papel de Jesús Arnal.

Juan García Oliver

«Hay un capítulo sobre la columna que me gustaría aclarar: es totalmente falso que Durruti hiciera fusilar prostitutas. Efectivamente, llegaron algunas prostitutas por su cuenta y se les hizo regresar a Barcelona ante los temores de contagio de enfermedades venéreas, eso es todo. Esa imbecilidad del fusilamiento la inventó una escritora comunista.» El amor y la lucha de un anarquista, entrevista a Emilienne Morin compañera de Durruti, realizada el 12 de febrero de 1977 en Francia, por Pedro Cuesta y Luis Artime, revista «Interviú».

Hurtos en huertas y la piscina de los depósitos de agua potable

El comportamiento de los milicianos produjo algunos incidentes con la población, y a la vez curiosos, como el robo en huertas o el mal uso de los depósitos de agua potable, utilizados como baños y piscina. Así da cuenta del malestar de la población la siguiente declaración del Consejo Municipal de Sariñena del 21 de junio de 1937: “Se acuerda pasar un oficio al Cuartel General referente a que por los medios que estén a su alcance prohíban los abusos que a diario se vienen cometiendo con las hortalizas de la huerta por los milicianos y soldados de los diferentes destacamentos en esta villa y especialmente que nadie se bañe en los depósitos del agua potable como hasta la fecha vienen haciendo pues caso contrario serán denunciados todos estos hechos al jefe de la 4ª División del Ejército del Este.» (Actas Consejo Municipal).

Indeseables

De Sariñena han sido traídos a Barcelona dos hombres y tres mujeres cuyo comportamiento se consideró indeseable en aquella zona. Ingresaron en los calabozos da la Jefatura de Policía. La Voz, 26 de octubre de 1936.

Indeseables 1

Camión de Propaganda

En noviembre de 1936, una comisión compuesta, entre otros, por Miravitlles, representante de la Generalidad de Cataluña, Urales, uno de los venerables jefes de la CNT y Cusó de la UGT, Ehrenbourg visitó diferentes localidades del frente de Huesca, entre ellas Barbastro y Sariñena. La comisión consistía en una caravana compuesta principalmente por un Camión de Propaganda ofrecido por la Asociación Internacional de Escritores Antifascistas a los escritores catalanes. El camión llevaba instalada una imprenta, un aparato de cine y un altavoz que debía servir para todo un sistema de propaganda que la Generalidad de Cataluña se proponía establecer en el frente y en la retaguardia. El film que proyectaron fue Tchapaiev, una película de guerra soviética de 1934, “En Sariñena, en presencia del jefe superior del frente de Aragón, el comandante Reyes y del coronel Guarnel, tiene lugar otra representación” (Nuestra lucha: portavoz de la Unidad Obrera: Año I Número 85 – 1936 Noviembre 22).

Las bibliotecas

Para dar servicio de biblioteca y favorecer la lectura y cultura en el frente, la Generalidad de Cataluña, a través de un decreto del 17 de febrero de 1937, crea el Servicio de Bibliotecas del Frente. El servicio nació para la creación de “Bibliotecas en primera línea, en la retaguardia y en los hospitales de sangre así como en los hospitales de convalecencia y en los establecimientos de reposo” (EN CATALUÑA: Las bibliotecas como instrumento de libertad ).

Bibliotecas al frente

Servicio de bibliotecas al frente.
Amic: publicació quinzenal per a esplai del soldat català de l’Exèrcit de la República, editada pels Serveis de Cultura al Front del Departament de Cultura de la Generalitat: Núm. 2 (2a quinzena gen. 1938).

Bibliotecas al frente 2

El servicio de bibliotecas del frente.
Meridià: setmanari de literatura, art i política, tribuna del Front Intel·lectual Antifeixista: Núm. 39 (7 oct. 1938). p. 5-p. 8.

Todo apunta que en Sariñena llegaron a haber varias bibliotecas, una en el Hospital Militar de Sariñena y otra, al parecer, en la calle Goya número 72. Esta última citada también en el número 76 de la misma calle Goya: “Para pedidos de libros dirigirse a la subcentral de Sariñena del Servei de Biblioteques del Front c/ Goya 76.” (El Servei de Biblioteques del Front 1936-1939 María C. María Teresa Boada I Vilallonga Vicenç Allué I Blanch Cuguero I Conchelo). También hay una cita de una tercera biblioteca en calle del Mercado (Impresiones de Guerra. Flecha).

El día 28 de febrero de 1937, la Agrupación de Profesionales de Bibliotecarias de Catalunya, publica la siguiente nota “Debiéndose proveer las subcentrales de Barbastro, Monzón, Sariñena, Caspe y Alcañiz, se ruega a todas las bibliotecarias que deseen ocupar uno de esos lugares que lo comuniquen por escrito o personalmente, hoy, de once a una de la mañana, a esta agrupación” (Diario La Humanidad,).

Así, a partir de febrero de 1937, Sariñena se convierte en subcentral del Servicio de Bibliotecas del Frente, una de las dos subcentrales que, el servicio de bibliotecas en el frente, estableció en el frente aragonés: Sariñena y Alcañiz. Aunque, según Vicenç Allué, la sala de lectura de la subcentral de Sariñena no fue inaugurada hasta agosto de 1937 (El servei de Biblioteques del Front epopeia cultural del segle XX. Vicenç Allué). Además, apunta Allué, las dos subcentrales respondieron a la primera etapa del servicio de bibliotecas en el frente: «Es la etapa de las subcentrales de Sariñena y Alcañiz al frente de Aragón –posteriormente Ejército del Este. M. Felipa Español y Rosa Granés se encargarían inicialmente de forma voluntaria de las dos subcentrales y su despliegue respectivamente.»

«El Servicio de Bibliotecas del Frente quiso acercarse a los escenarios directos de la lucha y para ello se crean dos subcentrales en zonas del frente aragonés: en Sariñena y en Alcañiz, desde donde se llegará a los destacamentos de primera línea y a los hospitales de campaña, a los que se mandarán lotes de libros.» 

«En la Subcentral de Sariñena la persona responsable del servicio fue la bibliotecaria M.ª Felipa Español, que empezó a trabajar allí el mes de abril de 1937, Además de actuar como central, organizó una pequeña biblioteca de atención directa a los soldados, al estilo de las bibliotecas populares. Esta subcentral en 9 meses sirvió 12.488 volúmenes y prestó 24 muebles biblioteca. M.ª Felipa Español llevó a cabo una labor entusiasta e intensísima, multiplicando su actividad, para acercar los libros a los soldados que luchaban y a los heridos. Prueba del reconocimiento a su labor es que llegaron a nombrarla teniente!

En Cataluña: Las bibliotecas como instrumento de libertad
El Servei de Biblioteques del Front 1936-1939/ Cugueró, Boada, Allué. p.76.

Biblioteca Sariñena (2)

Servei de Biblioteques del Front, subcentral de Sarinyena, 13 de agost de 1937.
Arxiu General de la Diputació de Barcelona. Fotografía Felipa Español Coll. 

No obstante, antes ya existía una red de bibliotecas y un reparto de libros al frente y hospitales. La Vanguardia, el 19 de agosto de 1936, da cuenta del reparto de libros a través de la Oficina de reparto mensual de libros. En esta ocasión por encargo del Comité Central de Milicias, Servicios Sanitarios, regentado por Javier Escoda, efectuándose las siguientes remesas: “Hospital General de Cataluña, 130 obras; Hospital de Sangre de Tardienta, 20; ídem ídem de Bujaraloz, 20; ídem ídem de Sástago, 20; ídem ídem de Sariñena, 20; Clínica La Alianza, 120; Clínica de Barbastro, 15; Hospital Clínico, 118; Clínica Psiquiátrica, 30. Total, 493. Se espera recibir nuevas donaciones de libros destinados a los citados hospitales de sangre y casas de convalecencia”.

En el mismo sentido, libros para el frente y los Hospitales: «La Agrupació d’Escriptors Catalaus, U. G., continúa activando la recogida y remesa de libros para el frente, hospitales de sangre y centros antifascistas, con la colaboración del Comité Sanitario, que tiene a su cuidado hace llegar los paquetes a su destino. Últimamente han sido repartidos los volúmenes siguientes: 1.200 libros a los hospitales de sangre de Angués, Siétamo, Puebla de Híjar, Bujalaroz y avanzadas del frente. 100 al hospital de sangre de Sariñena.» (La Vanguardia, 22 de octubre de 1936).

Una labor cultural para el frente

La «Agrupació d’Escritors Catalans», continúa activando la recogida y remesa de libros para el frente, hospitales de sangre y centros antifascistas, con la colaboración del Comité Sanitario, que tiene a su cuidado hacer llegar los paquetes a su destino.

Últimamente han sido repartidos los volúmenes siguientes:

1.200 libros a los hospitales de sangre de Angués, Siétamo, Puebla de Híjar, Bujalaroz y avanzadas del frente.
100 al hospital de sangre de Sariñena.
250 al Comité Sanitario para diversos destinos.
180 al Ateneo Enciclopédico «Sempre Avant», de Sans.
150 a la Biblioteca Obrera de Mongat.
200 a la Biblioteca Obrera de Agramunt.
Un lote de libros franceses al frente aragonés.

La Gaceta de las artes gráficas.

La bibliotecaria M.ª Felipa Español Coll se hizo cargo de la biblioteca de Sariñena, desde el 1 de agosto de 1937, tal y como dejo constancia en una de sus cartas a Jordi Rubió, director del Servicio de Bibliotecas en el Frente: «La Biblioteca ha estado abierta al público militar desde el pasado 1 de agosto, de 11 a 2 de la mañana y de 6 a 9 de la tarde. Me sentía amiga de todo el mundo (…) Estoy entusiasmada de mi labor y quisiera que el día tuviera 48 horas para poder avanzarla más”.

“Del sector Norte, con la subcentral de Sariñena, está encargada María Felipa Español. Una chica interesante, de mirada inteligente, seria, callada, con la resolución reflejada en el rostro. No le preguntamos si tiene miedo, porque en el porte sereno se adivina la respuesta.”

Galeron Egaña (1938)
“Cataluña y la Guerra: El Servicio de Bibliotecas del Frente” Revista Blanco y Negro.

Carnet Felipa Espanyol

Felipa desarrollo una gran labor, una actividad que la misma M.ª Felipa detalló en varios informes al Servicio de Bibliotecas del Frente (El Servei de Biblioteques del Front 1936-1939 María C. María Teresa Boada I Vilallonga Vicenç Allué I Blanch Cuguero I Conchelo). Así, Allué recoge: «En los informes preparados por ambas bibliotecarias se destaca una actividad importante: a Sariñena, en los nueves meses de actividad de 1937, se sirvieron 12.488 volúmenes y 24 muebles-biblioteca, con una circulación de 10.680 volúmenes. M. Felipa Español pudo contar con la circunstancia favorable que Sariñena era plaza principal del ejército del frente del este, y dispuso de mayor colaboración por parte de las autoridades militares.» (El servei de Biblioteques del Front epopeia cultural del segle XX. Vicenç Allué).

 “Se cuenta, actualmente, en la central de Barcelona, ​​con más de 10.000 volúmenes, de los que se eligen los lotes que irán a las subcentrales de Cervera y Tarragona y de estos sitios en los hospitales y avanzadas de Aragón. Hasta ahora dos compañeras, Rosa Granés y María Felipa Español, se han ofrecido de encargarse de estas bibliotecas”.

Boletín del mes de marzo de la Escuela de Bibliotecarias y de las Bibliotecarias de Cataluña.

María Felipa Español Coll

María Felipa Español Coll. Foto carnet de bibliotecaria del Servei de Biblioteques del front. Cortesía Pilar Vives.

La figura de M.ª Felipa ha sido estudiada por la historiadora Pilar Vives Corbella. M.ª Felipa Español Coll, nació en Valls (Tarragona) en 1910 y residió en Barcelona donde estudió en la Escuela de Bibliotecarias. Al finalizar sus estudios en 1936, y con la creación del Servicio de Bibliotecas en el frente, M.ª Felipa se presenta voluntaria para ejercer de bibliotecaria en el frente de Aragón, labor que desarrolló en la subcentral de Sariñena a partir de la primavera de 1937. Se presentó como voluntaria al igual que Rosa Granés, que se ocupó de la subcentral de Alcañiz. María Felipa fue descrita como «Morena, fuerte, segura de sí misma, que tenía un espíritu muy guerrero. La nombraron teniente del ejército por su labor en primera línea del frente» (María Teresa Boada i María Cugueró «Érem tan, tan innocents…» Entrevista realitzada per Núria Ventura i Jesús Gascón).

Felipa abandonó Sariñena en marzo de 1938 con la caída del frente aragonés, “Bajo una avalancha de metralla, intentando salvar los libros, la documentación, y la vida” (Pilar Vives). Tras la guerra, M.ª Felipa ejerció como abogada laboralista y falleció en Barcelona en 1995.

«María Felipa debía ser mayor; recuerdo que, incluso físicamente, era una chica alta, fuerte, cuadrada y con el pelo negro y los ojos negros, con un poco de bigote. Estudió Derecho y dejó definitivamente el ámbito de las bibliotecas. Lo que me extraña es que no le pasara nada, porque había sido teniente del ejército y todo. Ejerció de abogada y trabajaba para mejorar la situación de la mujer. Murió mientras hacíamos el libro; de hecho, le habíamos pedido de hacerlo juntas, pero nos dijo que no, que de momento no, que ella también pensaba hacer algo. Murió poco después, pero».

María Teresa Boada i María Cugueró «Érem tan, tan innocents…»

Entrevista realitzada per Núria Ventura  i Jesús Gascón). 

El 2 de septiembre de 1937, María. Felipa Español Coll, desde Sariñena, dirigió una carta al Dr. Jordi Rubió Balaguer, director del Servei de Biblioteques del Front. ( M. Cugueró Conchelo, M. T. Boada Vilallonga, V. Allué BLANCH (1995) El Servei de Biblioteques del Front. Ed. Diputació de Barcelona). En dicha misiva describe la biblioteca de Sariñena y parte de su labor en ella:

 “Desde que me he quedado sola en el local que compartía con el “Servicio de Tramites al Fronte”, he procurado hacerlo parecer una Biblioteca. Por ahora el mobiliario es este: 16 m. de estanterías. 1 mesa que hace 9*3,5 palmos, 5 sillas (cuando necesito más, me las dejan ), un pupitre, una especie de mueble mitad armario mitad fichero que he hecho aprovechando unas cajas, una mesa con una máquina de escribir (que va muy mal) y 2 luces que iluminan muy bien el local. También un fuelle de flit que no vara cada día y gracias al cual he conseguido que las moscas me respeten y un jarrón que se ha de contentar con flores de campos porque no tengo otras.

En estas condiciones y prevista con 400 títulos y el doble de volúmenes, la Biblioteca ha estado abierta al público militar desde el 1er de agosto pasado, de 11 a 12 de la mañana y de 6 a 8 de la tarde”

En Cataluña: Las bibliotecas como instrumento de libertad, se apunta que de los informes elaborados por las bibliotecarias de Alcañiz y Sariñena «Se desprende que más de la mitad de los libros consultados eran de literatura, aunque también se leían libros otros temas». En ellos Mª Felipa Español cuenta «los heridos de los hospitales piden sobre todo novelas de aventuras y que “cuando a un lector le gusta mucho un libro, luego lo lee toda la sala. Me ha pasado con “Zalacaín” de Baroja, con “La tournée de Dios” de Poncela”. Y concluye “A la vista de los libros, se vuelve lector el más reaccionario, son poquísimos los que en el hospital pueden leer y no lo hacen”.

Con la caída del frente de Aragón, los bombardeos y la retirada, la subcentral de Sariñena cesó su actividad en marzo de 1938.

Desde el inicio de la Guerra Civil española, el Comisario de Propaganda de la Generalitat de Cataluña recogía y enviaba libros al frente de guerra dónde estaba la tropa. Esta iniciativa fue en aumento y dio origen a que la Consejería de Cultura de la Generalitat creara un servicio de lectura para los soldados bajo la denominación de «Servicio de Bibliotecas del Frente», creado por Decreto de 17 de febrero de 1937. Estaba inspirado en la experiencia americana de la I Guerra Mundial que puso en marcha bibliotecas para atender a los heridos. Se organizó con la creación de bibliotecas en primera línea, en la retaguardia y en los hospitales de sangre así como en los hospitales de convalecencia y centros de reposo. Se crearon dos subcentrales en zonas del frente aragonés, concretamente en Sariñena y en Alcañiz. Se nombró directora del Servicio de Bibliotecas a la bibliotecaria Concepción Guarro, aunque los motores y protagonistas de la iniciativa fueron Jordi Rubió y Pepita Callao. Los lotes de libros se enviaban según la demanda y en cuanto a su temática estaban pensados para ofrecer entretenimiento por lo que la mayoría eran obras de literatura. Además se establecieron bibliotecas en los hospitales de sangres, edificios habilitados como hospitales para tratar a los heridos y también se puso en marcha un servicio de bibliobús en 1938. Se calcula que el Servició pudo poner en circulación unos cien mil libros en los dos años que estuvo en funcionamiento. Al final de la guerra, cuando ya Franco estaba a punto de entrar en Barcelona, el bibliobús condujo a un grupo de escritores hacia Francia camino del exilio. (http://pares.mcu.es/).

Reparto de juguetes

El 10 de enero de 1937 se realizó un reparto de juguetes en Sariñena. Un acto simpático, como lo definió Arturo Morera, quien además señaló que la distribución de los juguetes «Contó con la meritoria ayuda de las muchachas de las Juventudes Socialistas y de las Juventudes Libertarias, presididas por la mujer del Teniente Coronel Reyes». La organización de los festejos corrió a cargo de la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel General del frente de Aragón.

Organizado por «La Dona a la retaguardia» ha tenido lugar en Sariñena y Albalatillo, pueblos fronterizos con la línea de fuego del frente aragonés, la fiesta del reparto de juguetes a los niños de aquellas poblaciones. 

La Oficina de Censura y Propaganda del Cuartel General quiso contribuir al lucimiento de la fiesta infantil organizando el reparto de los juguetes, a la vez que haciendo ejecutar un selecto programa de música, a cargo de la benemérita Banda del campo de Aviación Alas Rojas.  dirigida por el maestro Francisco Llop y cedida por el teniente coronel Alfonso de los Reyes.  

La Plaza Roja, de Sariñena, ofrecía un bello aspecto. niños y niñas de todas las edades daban la nota de alegría a estos pueblos de Aragón.

Terminado el concierto empezó el reparto recibiendo los juguetes, en primer lugar, los huérfanos de la guerra. después los hijos de los refugiados, y, por último, sin distinción recibieron el ansiado juguete el resto de niños de Sariñena.

La fiesta se celebró en la Casa de la Villa de Sariñena y en la escuela de Albalatillo, por una comisión de compañeras de las juventudes Socialistas y Juventudes Libertarias. 

Día Gráfico 1937.

Arturo Morera cita que también se repartieron juguetes en la escuela de Albalatillo al día siguiente.

La importancia de Sariñena en el frente

«Nuestra  villa jugó un papel muy importante en las vicisitudes nacionales de la guerra civil de 1936 a 1939», manifestó el historiador sariñenense Arturo Morera Corull en una serie de artículos publicados en «Quio, revista de Sariñena y Los Monegros»: «Escritores famosos, como el soviético Illya Ehrenburg; aviadores intrépidos como el «Diablo Rojo», Jesús García Herguido o el ruso Iván Kopts («José»); jefes de columnas de milicias, como el mítico anarquista Buenaventura Durruti o el socialista José del Barrio; jefes militares republicanos como los generales Pozas, Aranguren, Martínez Cabrera o el coronel Villalba; políticos como el presidente de la Generalidad de Cataluña, Luis Companys, o los ministros anarquistas García Oliver y Federica Montseny; personajes muy populares en Sariñena como fueron el teniente coronel Reyes, jefe del campo de aviación, o el comisario Franco quizá; médicos corno el creador de los hospitales de sangre, doctor Bergós, que tanto hizo por dotar con los mejores medios al hospital de Sariñena durante el dominio republicano; jefes prestigiosos del Estado Mayor republicano corno los tenientes coroneles Antonio Cordón y Vicente Guarner; jefes militares rusos como los coroneles Savin y Glinoidski («Jiménez Orgue»); generales del ejército de Franco que ocuparon Sariñena en marzo de 1938, como el laureado José Moscardó o a los generales Sueiro y Ricardo Marzo.» 

Noticias desde el frente

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Desde Sariñena, la agencia de noticias Febus enviaba sus partes de guerra al periódico ABC . También se cuenta con escritos en Solidaridad Obrera de su paso por Sariñena de su corresponsal Hermes de Soli. El 30 de septiembre de 1936, Hermes escribe sobre la llegada a Sariñena de una brigada de policía para investigar unos supuestos espías, quienes al parecer fueron fusilados en el campo de aviación. Hermes conoció al Teniente Reyes: “El jefe de este campo, es el Teniente Reyes; camarada de todos y gran experto en su oficio. Sus órdenes, dejan de serlo, por el acento que pone al darlas. La sencillez raya la modestia y todo lo ve, de todo se preocupa y hasta no escatima la vida cuando de jugársela se trata. Ahí está una hazaña que no es conocida. El día 5, remontó el vuelo en un avión de caza y -¿Cuáles eran sus propósitos? Lo cierto fue, que, sólo voló sobre Zaragoza y volvió sin darle poca importancia al gesto. ¿Qué paso en el campo de Zaragoza, donde tienen nueve aviones Italianos tipo Caprioni? ¿Seguramente, quedaron sus pilotos (dicen que Alemanes), atónitos del gesto de audacia?”. Hermes continua “es el guardia de ese campo y jefe de las milicias, un muchacho menudo, de nervios de acero y que ha dado pruebas de arrojo sin igual. Dicen que el movimiento le sorprendió como agente de seguros y ahora su porte guerrero y sus hazañas lo han convertido en el Alférez Franco. ¿Lástima que lleve el apellido de un traidor! Yo que él, me haría nombrar por el apellido materno pues resulta incongruente de que dos nombres, uno traidor a su pueblo y otro defensor del mismo, se nombren con las mismas letras”.

Dos guardias de Asalto, detenidos

Han ingresado en los calabozos de la Comisaría General de Orden Público, dos guardias de Asalto que procedían de Sariñena. La Policía ha abierto una información que tiene por objeto esclarecer algunos hechos que se atribuyen a los detenidos. Ambos ingresaron, rigurosamente incomunicados, en los calabozos de dicho establecimiento.

La Batalla: Número 39 _ 16/09/1936.

Espías detenidos

Procedentes de Sariñena fueron trasladados en calidad de detenidos, Luciano Rordíguez Vicente y Consuelo González Serra, los cuales están complicados, con los otros detenidos que pertenecían al regimiento de Santiago y que se alistaron en las milicias antifascistas después de los hechos facciosos de Barcelona, en los cuales tomaron parte.

La Batalla: Número 69 _ 21/10/1936.

Fueron muchos los corresponsales y periodistas que pasaron por Sariñena, dejando sus crónicas y testimonios, como Franz Borkenau, Ana María Martínez Sagi, Hugh Thomas, Lluís CapdeVila, Marcial Fernandez o J. Aymami Serra entre muchos otros.

Corresponsal de guerra J. Aymami Serra para La Humanitat

Los franceses Lucien Vogel, director del seminario ilustrado, Paul Ritelheuber, redactor en jefe e hijo del embajador de Francia en Oslo, el fotógrafo Meurisse y la redactora Madeleine Jacob pasaron por Sariñena el 14 de agosto de 1936.

La Humanitat: Any 5, núm. 1398 (19 ag. 1936).

Detención chofer

En Sariñena ha estado detenido un chofer que prestaba servicio en esa demarcación.

La Humanitat: Any 5, núm. 1399 (20 ag. 1936).

El exministro Barnés visita Sariñena y Bujaraloz

Barbastro 8 (1,30 m.).—El ex ¡ministro Sr. Barnés visitó los frentes de Sariñena y Bujaraloz.

Ministro Barnés

El Liberal, 8 de octubre de 1936.

(No consta cuál de los dos hermanos fue, Domingo o Francisco Barnés Salinas).

En el frente de Aragón

Estuvo, hoy, en el frente de Huesca, una comisión de periodistas barceloneses, entre los que vimos a los compañeros Massip, Pomés y González, que cumplimentaron al coronel Villalba y luego asistieron a una fiesta que, presidida por el comandante Reyes, se celebró en Sariñena para festejar la boda del oficial de aviación Robles (Hoja oficial de la provincia de Barcelona: Época Segunda Número 570 – 1936 Noviembre 16).

Convocó, un sábado a las nueve de la mañana, un Consejo de Guerra en Sariñena, en el puesto del comandante Reyes, en Sariñena. Debían de asistir el Coronel Villalba, el Comandante Reyes, Durruti, Ortiz, uno de los jefes de la columna “Rojinegra”, otro de los jefes de la columna del PSUC y uno de la columna del POUM. Viajó de noche aguantando una lluvia torrencial y gracias a la pericia de “gasolina” llegó al puesto de mando de la aviación en Sariñena. Penetró en la casita que servía de comandancia, donde le recibió la esposa del Comandante Reyes y por una hermana de ella. Llegados los convocados se celebró el Consejo de Guerra para designar el jefe de Operaciones del Frente de Aragón, quien al final fue José Villalba.

Juan García Oliver

El Eco de los pasos.

Estación de Radio Reinosa. Servicio de socorro

Nuestra emisora ha transmitido las siguientes notas de este servicio que tanta aceptación está teniendo: “Sebastián Novel, de Sariñena (Hueca). Sus hijos, Agapito y María, están sin novedad”.

El Cantábrico: Diario de la mañana: Año XLII Número 14431 – 1936 agosto 2.

Desaparecido

Félix Gómez, de 18 años que se encontraba el 5 de agosto en Sariñena (Huesca), en la primera columna Grossi-Arqués POUM. Darán razón a su padre José Gómez, domiciliado en Maqueda (Toledo).

Hoja Oficial del lunes: editada por la Asociación de la Prensa – Año VII Número 310 – 1936 septiembre 7 (07/09/1936).

Matrimonio

Joan Tora, miliciano en el frente de Aragón, en Sariñena, solicitó un permiso para contraer matrimonio con Enrica García de 20 años de edad. Natural del Hospitalet de Llobregat , Joan contaba con 23 años y estaba afiliado al PSUC (Diario de Barcelona 15 de septiembre de 1936).

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Aragón

En Sariñena toda la población está motorizada, pues se trata de un pueblo férvidamente republicano.

Heraldo de Castellón: Año XLVII Número 14372 – 18 Septiembre 1936.

En el frente de Zaragoza

Llegamos así a Sariñena, pequeña ciudad perdida en medio de una llanura desecada. Allá se encuentra el abastecimiento de las columnas que operan entre Zaragoza y Huesca. A un lado el campo de aviación de las milicias catalanas. Por la tarde la ciudad está en calma, casi desierta, bajo su cielo de fuego. Desde allá, otro coche lleva el correo y nosotros hacía el frente.

Reproducción de Le Jeune Garde, órgano de las Juventudes Socialistas del Sena.
La Batalla: Número 93 _ 18/11/1936

Tres mujeres y dos hombres detenidos en el frente

De Sariñena han sido traídos a Barcelona dos hombres y tres mujeres, cuyo comportamiento se consideró indeseable en aquella zona. Ingresaron en los calabozos de la Jefatura de Policía.

La Libertad: La Libertad – Año XVIII Número 5172 – 1936 octubre 26 (26/10/1936).

A Sariñena

A mediodía de hoy a marchado a Sariñena, el Consejero de Trabajo y Obras Públicas para efectuar una visita de inspección a las carreteras.

Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14469 – 09 Enero 1937.

Sariñena. Bajo una cobertura de plomo

El sol ha desaparecido hace días del cielo de este lienzo de Aragón – la población de Sariñena tiene el aspecto triste de la tierra alta, humedecida siempre por la niebla que, como, una humareda persistente, se escapa de su sol  rojo-negro. Los días fluyen con una monotonía abrumadora. Sólo el ir y venir de los milicianos, que dejan ir por el espacio la abigarrada policromía de sus canciones, deshace, por un momento, la dura continuidad de todas las horas.

Son los preparativos bélicos, la continua formación y transformación de los Ejércitos de la República, la única cosa que da algo de vitalidad a esta población, plácidamente callada, extraordinariamente quieta. Las canciones, los gritos, la efervescencia de los hombres que de las avanzadas de la sierra de Alcubierre retornan a la paz paradisiaca de Sariñena y los que desde esta posición de retaguardia van al relevo de sus hermanos de vanguardia, son el punto neurálgico de toda su actividad.

Sariñena vive bajo la influencia de la guerra y de la actividad de la guerra; pero bajo la apariencia de una vitalidad extraordinaria, bulliciosa, la población civil se mueve dentro de la monotonía placida de su tradición histórica.

Y aunque, en la paz de Sariñena, destaca, como un oasis en la chillante de la actividad bélica, la quietud permanente del Hospital de Sangre. Quietud y silencio que contrasta con la actividad, también permanente, de aquellos que abnegadamente han puesto todo su esfuerzo en defensa de los hombres que han caído al frente de batalla en plena lucha contra los asesinos del pueblo, puestos al servicio del fascismo internacional.

Cada día llegan a nuestras filas procedentes del campo enemigo, fugitivos que escapan de la barbarie fascista, y que rompen, por un momento, la monotonía de Sariñena. Los que han llegado hoy son cuatro hombres de izquierdas, soldados obligados  de los ejércitos del crimen, huidos de Huesca han pasado a Yequeda y desde allí a Barluenga, para venir después a Sariñena.

F. V. Jaquetot

Mirador: setmanari de literatura, art i política: Any IX Número 407 – 1937 febrero 12.

Los pobrecitos moros se mueren de frío.

Y a los que reclaman ropa y comida se les maltrata y encarcela.

BARCELONA 12.-Comunican de Sariñena que el duro temporal que desde hace tiempo se padece en los frentes de Aragón ha sido la causa de que muriera gran número de moros en este sector. En las posiciones enemigas conocidas con el nombre de Ermita Bella, ha sido donde se ha registrado el mayor número de defunciones. La escasa comida que se les proporciona tiene a los soldados de las líneas enemigas en lamentable estado. Además, carecen de ropas de abrigo, pues no llevan más que las chilabas que se trajeron de Marruecos.

Como los pocos moros que quedan han reclamado fuesen subsanadas estas deficiencias, han sido encarcelados algunos de ellos.

El Liberal, 13 de febrero de 1937.

Pobrecitos moros

Las patatas de la Estación de Bogatell

Los trabajadores del mercado del Borne barcelonés, empresa colectivizada, vienen, desde hace días negociando con la casa Pieraerts, de Amberes (Bélgica), cuarenta vagones de patatas, cantidad destinada a surtir a las diversas columnas de los frentes de Aragón, donde más que en la retaguardia barcelonesa, se nota la necesidad de este artículo alimenticio, así como a hospitales, clínicas, etc.., función que viene desempeñando de acuerdo con la Consejería de Defensa desde el 19 de julio.

El reparto fue el siguiente:

División Luis Jubert                   10.000 kilos
Columna Maciá Companys      10.000 Kilos
Columna Maciá Companys      10.000 Kilos
Columna Carlos Marx               10.000 Kilos
Columna Carlos Marx               10.000 Kilos
Columna Durruti                       10.000 Kilos
Columna Durruti                       10.500 Kilos
Columna Francisco Ascaso      10.000 Kilos
Columna Francisco Ascaso      10.100 Kilos
Columna Roja y Negra              10.000 Kilos
Columna Pedrola y Maurin     10.000 Kilos

Estas cantidades han sido facturadas a las estaciones de Puebla de Hijar, Alcañiz, Tardienta, Lérida, Selgua y Sariñena respectivamente, y cuyos talones de facturación obran en poder de la Consejería de Defensa.

Heraldo de Castellón: Año XLVIII Número 14497 – 12 Febrero 1937.

Se sustituyen todas las banderas antifascistas por la nacional

BARCELONA, 16,—Comunican de Sariñena que todas las fuerzas que operan, en el frente de Aragón han puesto en práctica el acuerdo de retirar de los diferentes sectores las banderas y símbolos de las diversas organizaciones y partidos antifascistas representados еn las Milicias. Todas ellas han sido sustituidas únicamente por la bandera republicana con las iniciales «U. H. P,». Ahora, miércoles 17 de febrero de 1937.

Banderas

La bandera nacional

Sariñena. Las columnas gubernamentales han desfilado llevando como únicas banderas la enseña nacional. Muchos soldados se han puesto escarapelas en el gorro con la bandera tricolor.

Se remarca que las milicias de algunas organizaciones sindicales han desfilado también llevando al frente la bandera republicana.

La Voz de Menorca: diario republicano: Año XXXII Número 9624 – 1937 febrero 17.

Una caravana de víveres

Esta mañana, y después de breve estancia en Valencia, ha salido una caravana compuesta de ocho grandes camiones cargados de víveres, con un total de 32 toneladas de víveres que han sido adquiridos por la Agrupación Socialista de Sariñena.

Los alimentos son muy variados y de gran calidad.

La Publicitat Sariñena

  La Libertad: La Libertad – Año XIX Número 5296 – 1937 marzo 13 (13/03/1937).

Viveres Sariñena

El Liberal, 13 de marzo de 1937.

Aragón. Las operaciones al frente de Sariñena

Sariñena, 17. -El tiempo es frio y ventoso. Por eso las operaciones han quedado reducidas a insignificantes actuaciones de avanzada.

Se trabaja en todos los frentes con fuerte intensidad en previsión de futuras contingencias. Se siguen aquí con el mayor interés las incidencias de la lucha al frente de Madrid y se esperan repercusiones de aquellas operaciones en este sector.

Hoy se han vuelto a sentir el cañón en diversos lugares, pero el fuego ya no tiene la intensidad de días anteriores.

La Publicitat: (18 Març 1937).

Víveres a Madrid

El pueblo de Sariñena (Huesca) ha enviado 12.000 kilos de harina, 3.500 de patatas. 1.100 de azúcar, 1.025 de lentejas, 557 de judías, 100 de bacalao, 190 de chocolate, 1.23-1 litros de aceite, 1.470 kilos de jabón, etc., etc.

La Voz,  20 de marzo de 1937.

Víveres Madrid

Multas

Con esta fecha hace entrega la Delegación de Sariñena. de las cantidades que a continuación se detallan, impuestas como multa los individuos que se mencionan: Pedro Abat, 500 pesetas; Enrique Val. 500; Alejandro Calvo, 1.000; Pascual Galindo, 500; Pedro Uriol Pueyo, 200; Fidel Ardanay, 200; Rafael Giral, 200; Manuel Miralles, 500.

Orden público. Labor del Consejo de Aragón y notas oficiales.
Nuevo Aragón, 6 de abril de 1937.

Multas Nuevo Aragón

Los facciosos llaman a filas las quintas del 27 y 28

SARINENA , 20 (3,30 m.).—Unos soldados recién llegados del campo enemigo al frente de Aragón dan cuenta de que el Gobierno faccioso ha llamado a filas a la quinta de 1928 y anuncia el llamamiento de la de 1927.—Febus. Ahora, 21 de abril de 1937.

Comité Regional de Enlace CNT-UGT

El 2 de mayo de 1937, en diferentes poblaciones aragonesas, se celebraron actos de «unidad’ afirmación sindical», patrocinados por el Comité Regional de Enlace CNT-UGT. La reunión de Sariñena se llevó a cabo a las once de la mañana  (Nuevo Aragón, 2 de mayo de 1937).

Comité CNT UGT 2 mayo 37

Vibraciones del frente. Tipos y paisajes del frente. Por Ana María Sagi.

El miliciano que se equivoco

Venían de Sariñena, en un auto lleno de polvo; los faros rotos, los guardabarros abollados, el parabrisa hecho cisco. Los tres viajeros, vestían un mono azul, arrugado mugriento; llevaban alpargatas, que en tiempo inmemorial debieron de ser blancas, y una boina oscura metida hasta las orejas. Colgado, en el hombro, un fusil; y en el cinto, una pistola. Se combatía entonces, duramente en Azaila, en Lécera, en Monte Lobo y en Estrecho Quinto. En Caspe, Cuartel General de la Segunda Columna, había intenso movimiento de fuerzas. Llegaban de distintos puntos, y de aquí salían en dirección a los frentes.

Los ocupantes del coche que procedían de Sariñena, eran, a juzgar por su Indumentaria y el armamento, tres voluntarios del Ejército Popular

Me fije en uno de ellos, el ultimo que descendió del coche. Era delgado, pequeñito; tenía la nariz respingona, la boca breve bondadosa, los ojos de un azul pálido. Su expresión era dulce infantil.

Un miliciano, parecido a un monumento de granito de proporciones más que gigantescas, con una barba de dos meses un vozarrón de trueno, se acercó curioso a los recién llegados y a guisa de bienvenida, con sus manos fuertes anchas, comenzó aporrear la espalda del más endeble, del único en el que precisamente yo me había fijado.

-Qué, muchacho: ¿vienes a incorporarte a Ia columna? Porrazo que te crió.

-¿Has estado ya en algún frente? ¿Llegas de Barcelona? ¿Saldrás inmediatamente? ¿En qué trabajabas antes de venir aquí?

A cada pregunta, sucedían, implacables, los golpes «amistosos». El recién llegado debía tener Ia espalda al rojo vivo.

Por fin, al interpelado, con voz suave acento extranjero, imploró amargamente:

-«Please, please, your hands» ¡Usted romper mi espalda con terribles golpes!

El miliciano, atónito, abrió los ojos desmesuradamente. Intentó balbucir unas excusas que se le quedaron atascadas en la garganta. Por último, sin reponerse aún de la sorpresa, murmuró condolido:

-¡Hombre, con esta indumentaria, cualquiera lo adivina!

Tenía razón el miliciano: era extraordinariamente difícil, adivinar, que aquel ser menudo y desgarbado de cuerpo anguloso que llegaba con unos pantalones sucios arrugados, con una camisa de corte masculino, una pistola en el cinto, no era un hombre, sino una mujer.

Nada menos que una súbdita británica, redactora de uno revista femenina, enviada a España a instancias de una agrupación de mujeres feministas con Ia misión de entrevistar a las mujeres más destacadas de nuestra hora actual.

Nuevo Aragón. 06/05/1937.

El general Pozas declara desde Sariñena: «El frente de Aragón responderá en el momento que se consideré oportuno». 

La Publicitat 6 Juny 1937

La Publicitat: 6 de Junio, 1937.

Parte de Aviación

En la edición del viernes 11 de junio de 1937, La voz del combatiente, diario de los comisarios de guerra del ejército del pueblo, recogía un bombardeo sobre la estación ferroviaria de Sariñena. A la vez, daba cuenta de la existencia del cercano aeródromo de alas Rojas.

Zona del Este.— Esta mañana fue bombardeada la estación de Sariñena, en las inmediaciones de cuyo pueblo fue descubierto un aeródromo en construcción, en el cual habla varias apisonadoras.

Bombardeo estación sariñena

Una familia de Ayerbe llega a Sariñena huyendo del fascismo

La Publicitat 7 Juliol 1937

La Publicitat: 7 de Juliol, 1937.

Gestiones de un juez especial

Ha vuelto de Sariñena y otros lugares del frente aragonés el juez del juzgado número 13, señor Galben, donde ha realizado gestiones para descubrir los autores del asesinato de un individuo conocido como “Charles”.

La policía tiene instrucciones concretas para detener a los homicidas.

La Humanitat: Any 6, núm. 1689 (27 jul. 1937).

Creación de zonas de recogida en tierras de Aragón.

 Cumpliendo el acuerdo tomado por el Frente Popular Antifascista, se han constituido comisiones encargadas de recoger ropas de abrigo para los soldados del Ejército Popular.

Con objeto que la recogida de estas ropas se pueda verificar con mayor rapidez se han creado las siguientes zonas:

Provincia de Huesca: Barbastro, Benabarre y Sariñena.
Provincia de Teruel: Mora de Rubielos, Montalban y Alcañiz.

La labor correspondiente a la zona de Zaragoza ha estado encargada al Comité Regional del F.P.A. a Caspe, y se responsabiliza particularmente la agrupación femenina.

La Humanitat: Any 6, núm. 1775 (4 nov. 1937).

140 Brigada Mixta, 32 División

Por el interés de los familiares que componen esta Brigada, se recuerda que desde hoy deberán de enviar toda correspondencia al apartado de correos de Sariñena (Huesca).

La Humanitat: Any 6, núm. 1795 (27 nov. 1937).

La Humanitat 1795

Lluvia

Sariñena. — A pesar de la lluvia, que desde hace dos días cae copiosamente, ha habido bastante; actividad en loa sectores de esta Agrupación. La aviación y las patrullas de Infantería se dedican a servicios de reconocimiento y observación, y han menudeado los tiroteos, pero no se han registrado bajas en las filas léales.

Actividad aviación lluvias

Adelante, 28 octubre de 1937.

La aviación facciosa ha bombardeado la sierra de Alcubierre y el pueblo de La Naja

-Esta mañana, a las doce han volado sobre Sariñena 19 aviones facciosos, que han arrojado algunas bombas en la sierra de Alcubierre y La Naja.

Como los piratas del aire tomaran la dirección de Lérida, se previno a aquella población, y sonaron las sirenas de alarma. Como, afortunadamente, no llegaron los citados aviones a Lérida, a los pocos momentos se restableció la normalidad. — Febus.

Bombardeo Lanaja Sariñena

Ahora, 12 de diciembre de 1937.

Wystan Hugh Auden

El poeta y ensayista británico, que posteriormente se nacionalizó estadounidense, participó en la guerra Española apoyando al bando republicano. «Su intención era la de ayudar en cuestiones médicas y sanitarias, y a su regreso a Inglaterra compuso Spain, destinando el dinero recaudado con el poema a la Ayuda Médica Española» (Wikipedia).

“En un diario de 1939, Auden escribía de algo que le había pasado en Sariñena, cuando pensaba alistarse» Orwell y Auden en Los Monegros. Daniel Gascón, El periódico de Aragón. “Allí había perdido un sentimiento que durante los últimos cuatro años llevaba dentro de mi, una parte de mi tenía la voluntad de moral. En aquel pueblecito Aragonés una voz interior me dijo NO. Aquella tarde en Sariñena (sic) me di cuenta de que otra parte de mí quería desesperadamente seguir viviendo” (Cuando la historia te quema las manos: Auden y Orwell entre dos guerras/ Miquel Berga. Barcelona: Tusquets, 2020).

La censura al frente de Aragón

En Sariñena se estableció la Oficina de Censura y Propaganda, adscrita a la caserna General del frente de Aragón o del cuartel general del frente de Aragón. Arturo Morera cuenta que fue creada mediante dos Órdenes dictadas en Sariñena, el 17 de diciembre de 1936, por el jefe supremo del frente, Alfonso de los Reyes «En dichas Órdenes se prohibía cualquier comunicación escrita, telegráfica o telefónica de prensa, que no tuviera previamente la autorización de aquella Oficina de Censura y Propaganda.»

Dicha orden queda recogida en el Diario de Barcelona del 22 de septiembre de 1936:

Primero. Que no sea censurada ninguna conferencia o comunicación gráfica de prensa que no esté debidamente autorizada por la oficina de Censura y Propaganda de esta Caserna General establecida en Sariñena.

Segundo. Todas las dependencias de Correos del territorio de mi comandancia, en recibir una crónica para la prensa o una carta privada en las cuales se den noticias de guerra, las remitirán inmediatamente a la oficina de Censura y Propaganda de Sariñena, lo cual, si procede, le dará su debido cuidado. Sariñena, 17 de septiembre de 1936.

Firmado por el teniente coronel jefe del frente de Aragón Alfonso de los Reyes.

Al frente de la Oficina de Censura y Propaganda, de la caserna general del frente de Aragón, en Sariñena, estuvo Pere Foix junto con Manuel Valldeperes y Joan Pila, quienes tomaron sus cargos en diciembre de 1936.

Censura Sariñena

Cuartel General del Frente de Aragón

Nuevo jefe de la Oficina de Censura y Propaganda. Ha tomado posesión del cargo de Jefe de la Oficina de Censura y Propaganda del Cuartel General del Frente de Aragón, en Sariñena, el compañero Pedro Poix, quien, junto con los compañeros Manuel Valldeperes y Juan Pila, llevará a término la misión que le ha sido confiada por el Alto Mando. 

La Batalla: Número 119 _ 18/12/1936.

Milicias. El jefe de censura del frente de Aragón.

Ha tomado posesión del cargo de jefe de la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel general del frente de Aragón, en Sariñena, el compañero Pere Foix quien juntamente con los compañeros Manuel Valldeperes y Joan Pila, llevaran a término la tarea que les ha estado encomendada por el alto mando.

La Humanitat: Any 5, núm. 1503 (19 des. 1936).

La Pasionaria y Federica Montseny

La Oficina de Censura y Propaganda, el 31 de enero de 1937, organizó una conferencia en Sariñena, en el teatro Romea, en la que intervino la ministra de sanidad Federica Montseny. Pero como ya se había comentado anteriormente, no fue la única, días antes la misma Pasionaria fue quien pronunció un mitin en Sariñena, esta vez organizado por el Frente Popular, el 16 de enero de 1937.

Un mitin en Sariñena

El domingo, en el teatro Romea, se celebrará un mitin organizado por el Frente Popular, y en el que entre otros oradores  intervendrá Dolores Ibarruri “La Pasionaria”.

La Libertad: La Libertad – Año XIX Número 5246 – 1937 enero 15 (15/01/1937).

“Si perdiéramos la guerra, el fascismo nos aplastaría a todos”, dice la Pasionaria.

Sariñena, 17. Ayer domingo se celebró en Sariñena un gran mitin del Frente Popular, organizado por la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel general del frente de Aragón. Al acto asistió un enorme gentío, trasladándose a Sariñena representaciones de diversos pueblos del distrito y de las columnas destacadas en el frente de guerra próximo, respondiendo a la expectación que había despertado el acto por la participación de la diputado a Cortes Dolores Ibarruri “La Pasionaria”.

El mitin se celebró en el teatro Romea y se instalaron altavoces en otras dependencias del local y en las plazas del pueblo.

Presidió Pedro Foix, de la oficina de Censura y Propaganda.

Hicieron uso de la palabra José Brunet, de Izquierda Republicana; José Duque, consejero del Consejo de Defensa de Aragón; Miguel Alcubierre, delegado de la división Carlos Marx; Miguel Cunillera, diputado del parlamento catalán, por Esquerra Republicana de Cataluña, quienes coincidieron en la necesidad de llegar a la unidad de mando y a la disciplina que imponen las actuales circunstancias de la lucha contra el fascismo.

Finalmente hizo uso de la palabra “La Pasionaria”, la que resaltó el entusiasmo del pueblo aragonés contra el fascismo. Habló de la gesta heroica de los aragoneses durante la guerra de la independencia contra el ejército invasor de Napoleón. Atacó a los que se ha dado en llamar incontrolados, tan nefastos a la revolución como favorables al fascismo, puesto que con su actuación insensata preparan, si el ejército del pueblo no estuviera ojo avizor, el triunfo del fascismo.      

Se extendió en consideraciones atinadísimas con respeto a algunas colectivizaciones que se llevan a cabo, sin tener en cuenta la guerra, indicando que si perdiéramos la guerra, el fascismo nos aplastaría a todos.

Abogó por el mando único en toda España y puso de relieve su firme esperanza de que pronto las milicias que actúan en Aragón corresponderán al entusiasmo del pueblo de Madrid.

Todos los oradores fueron muy aplaudidos, en especial la Pasionaria. El acto terminó cantándose La Internacional y vitoreándose a la Unión Soviética.

   Hoja oficial de la provincia de Barcelona: Época Segunda Número 579 – 1937 Enero 18.

La Vanguardia, jueves, 8 de enero de 1937 «Federica Montseny, conferenciante Organizado por la Oficina de Censura y Propaganda del cuartel general del frente de Aragón, se celebrará una conferencia, a cargo de Federica Montseny, ministro de Sanidad. ¡Versará sobre el tema: «Vencer»,: El imperativo categórico de la hora».  Este, importante acto, tendrá lugar en el Teatro Romea, de Sariñena, a las once de la mañana del domingo, día 31 de enero de 1937. ¡Campesinos, trabajadores, combatientes antifascistas, ¡No faltéis!.»

En medio del entusiasmo popular, Federica Montseny habla en Sariñena en favor de la unidad sindical

Sariñena, 31. En el teatro romea, ante una multitud enorme que llenaba las dependencias el mismo y las plazas de Sariñena, donde se escuchaba por medio de altavoces, ha pronunciado una conferencia la ministro de sanidad Federica Montseny, que desarrolló el tema “Vencer, el imperativo de la hora”.

Comenzó haciendo historia de las luchas que para la libertad se han venido sucediendo en España desde la edad media hasta nuestros días. Analiza detalladamente el espíritu de nuestra lucha contra el fascismo. En estos momentos de tragedia hemos de dejar a lado nuestros puntos de mira, nuestras condiciones ideológicas, para realizar la unidad de todos los antifascistas desde los republicanos hasta los anarquistas. Se ha de llegar a la desaparición de la CNT y de la UGT, fundando una única central sindical, que recoja a todos los trabajadores españoles. Que los comunistas, por ejemplo, hayan de luchar contra bellas concepciones de su ideología es lo natural, pues nosotros los anarquistas por nuestra parte también hemos de hacer lo propio y hemos de hacer que desaparezca nuestra indisciplina y disciplinarnos para ganar la guerra, pues no olvidemos que si no se produce una intervención extranjera que imponga un armisticio que pueda deshonrarnos, la guerra será larga, y hemos de hacernos dignos de esta épica lucha por la libertad. El mundo nos mira. El proletariado de todos los países tiene puesta la esperanza en nosotros y en nosotros confían nuestros hermanos de todo el mundo.

Terminó con palabras llenas de emoción, y fue despedida con una imponente ovación.

Pedro Foix cerró el acto resaltando el gran discurso de la ministro de sanidad.

Hoja oficial de la provincia de Barcelona: Época Segunda Número 581 – 1937 Febrero 01.

La pasionaria nuevo aragon 200137Nuevo Aragón 20/01/37

Montseny Euzkadi en cataluñaEuzkadi en Catalunya 06/02/37

Federica Montseny habla en Sariñena. En el teatro Romea y delante de una multitud enorme, el pasado domingo, pronunció una conferencia la ministra de sanidad, Federica Montseny, la cual desarrolló el tema “Vencer, el imperativo de la hora”.

Diario de Barcelona, martes 2 de febrero de 1937.

El servicio de estadística e información de la generalidad de Cataluña en el frente de Aragón, oficina delegada de Sariñena

En Sariñena se ubicó una Central de Estadística, oficina delegada del Servicio de estadística e información de la generalidad de Cataluña en el frente de Aragón. En dichas oficinas, de acuerdo a un artículo de Fernández Arana, “Se conocía al día los soldados con que podía contar el alto mando, la situación de las columnas, las necesidades económicas de los milicianos, las cantidades que habían de percibir los familiares de los combatientes y hasta el estado sanitario de los hombres que luchaban en los lugares más avanzados de la lucha”. Además «Se remite correspondencia y encargos a todos los frentes, se tramitan licénciamientos y concesiones de permiso, ya que sin el aval de estas oficinas no se extiende pase alguno. Asimismo, se facilita el billete gratuito (lista de embarque) a los milicianos, haciendo constar que sin el certificado favorable de esta Delegación se niegan a concederlo. Mediante nuestros certificados se facilita alimentación, tabaco, alojamiento, etc., etc., a los milicianos con permiso o de paso en ésta. La policía secreta contra el espionaje se sirve también de nuestros servicios para efectuar toda clase de pesquisas y averiguaciones. Se llevan en estas oficinas unos estadillos numéricos para los informes de los organismos superiores, por medio de los cuales se sabe el número de jefes, oficiales, suboficiales, clases y soldados que integran nuestras filas. Se resuelven en esta Delegación infinidad de consultas que dirigen los jefes de columna, centurias y grupos respectivamente, sobre cuestiones de organización militar, tramitándose también por este Servicio toda la documentación para el ingreso en algún organismo armado del Estado. Y, finalmente, excluyendo otros muchos servicios largos de enumerar, se han organizado, de común acuerdo con el jefe de las fuerzas de Aragón, los Cuerpos de Vigilancia e Inspección, Comedores para las Milicias, Vestuario, etc., etc.». 

Central de Estadlstica en Sariñena

Fernández Aldana recorrió, en marzo de 1937, el frente de Aragón conociendo los servicios de estadística e información de la generalidad de Cataluña (En el frente de Aragón. Servicio de estadística e información de la generalidad de Cataluña. Mi revista (Barcelona. 1936). 1/3/1937). Aldana visitó la Delegación de Estadística de Barbastro y la Central de Estadística en Sariñena “En Sariñena visitamos la Delegación General del Frente y conversamos con el jefe del sector, Jaime Vidal Riba. Sencillamente, Vidal Riba nos hace un rápido relato de su estancia en estos frentes. Va recordando los primeros días de la lucha en Aragón, cuando había de suspender los trabajos estadísticos para animar con sus improvisados discursos a los milicianos; los penosos días vividos en el sector de Fuenferrada, que había de recorrer en compañía del inspector del frente, José Descárrega, pasando entre una continua lluvia de balas… Y, después de saludar a todos los empleados de la Delegación General, volvemos otra vez a la carretera para visitar las subdelegaciones del frente.”

Otros sucesos y muertes

En el expediente de Antonio Loste Bardají, (ES/AHPHU – J/005614/001650) aparece el testimonio del capitán de regulares Ignacio Gabasa Anoro. Ignacio declaró que, el 21 de febrero de 1937, se detuvo a la joven Emilia Loste Bardaji, por ser la jefa de Falange femenina del partido en Sariñena.

El 25 de marzo del 38 también fueron fusilados Teodoro Cabellud Blanco, de profesión caminero a los 54 años de edad, Pilar Conte Dueso, a los 20 años de edad, Antonio Loscertales Peralta, labrador de 60 años, Carmen Tierz Marias, sus labores 58 años y el 26 de marzo del 38 fue fusilado José Almerge Montel, caminero de 60 años de edad (Sariñena, la retirada).

En el campo de aviación “Alas Rojas” aparecieron los cadáveres “Incendiados” de los aviadores de derechas Abelardo Carazo y Muntaner. Las personas sospechosas fueron los responsables del campo de aviación, el comandante Reyes, el comisario político Franco y el Capitán Adonis Rodríguez.

CNT Sariñena.jpgPasquín del Comité Comarcal de Sindicatos de Sariñena. Pieza séptima de Huesca. Actuación de las autoridades gubernativas locales FC-CAUSA_GENERAL,1414,Exp.6. PARES.

Fueron atormentados y torturados la mayoría de personas de orden, religiosas y cuyos ideales eran derechistas, además de saqueados y desvalijados sus edificios y propiedades, cosechas, negocios y existencias. Así mismo fueron destrozadas las dos iglesias de la localidad y capillas de los particulares, destrozados sus altares y robados cuantos objetos y alhajas existían, así como profanado los lugares sagrados. 

Causa General Sariñena.

Visita de Luis Companys y de Ilya Ehrenburg

En 1937 el presidente de la Generalitat de Cataluña Luis Companys visitó Sariñena y el campo de aviación de Sariñena, noticia recogida por Arturo Morera: «Luis Companys pasó revista a las fuerzas militares republicanas estacionadas en la villa. Además, también relevante la visita a Sariñena y gran interés por la marcha de la guerra en la zona del afamado escritor soviético Ilya Ehrenburg.»

Companys Sariñena 2

Lluís Companys, presidente de la Generalitat de Catalunya, preside un desfile de combatientes republicanos acompañado por Jaume Miravitlles, jefe del Comisariado de Propaganda de la Generalitat de Catalunya, entre otras autoridades, durante su visita a Sariñena. Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-1-N-4059.

Companys Sariñena

Lluís Companys, presidente de la Generalitat de Catalunya, preside un desfile de combatientes republicanos acompañados por Jaume Miravitlles, jefe del Comisariado de Propaganda de la Generalitat de Catalunya, entre otras autoridades, durante su visita a Sariñena. Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-1-N-4060.

«Todo son muestras de cordialidad y de afecto y en todos los ojos se refleja vivamente la emoción. Y así todo el viaje por Aragón. Cordialísimo en Barbastro, en Siétamo, en Bujaraloz y en Híjar,-triunfal en Caspe y en Alcañiz. Cordialísimo y triunfal menos en Sariñena, donde «alguien» procuró ocultarlo al jefe del undécimo Cuerpo de Ejército para que éste no ordenara se rindieran los debidos honores o quien, además de la alta
jerarquía de su cargo, personifica a la Cataluña antifascista.»

La guerra en Aragón. El presidente Companys a cien metros del enemigo. Juan M. Soler. Mi Revista, 1 de agosto de 1936.

Companys Alas Rojas Sariññena

Companys en el aeródromo de Alas Rojas. Visions de guerra i de reraguarda. Serie B, Actualitats (Barcelona), 7 de agosto de 1937.

Conferencia del Partido Comunista en Aragón

Los días 9 y 10 de enero de 1937 se celebró en Sariñena la Conferencia Regional Extraordinaria del Partido Comunista en Aragón. La conferencia se llevó a cabo en el teatro Romea, entonces sede social del sindicato UGT. Cargos y mandos militares de unidades que operaban en el frente, delegados del partido, responsables de radios y células de los pueblos y gran número de trabajadores se dieron cita en Sariñena. Participó entre muchos Franco Quinzá de las milicias de aviación trasladando el saludo del teniente coronel Reyes del campo de aviación. Entre otros Vicente Sist de la Vera, José Duque, Manuel Trueba y Miguel Valdés. La gran afluencia de asistentes obligó a realizar un mitin en la cercana plaza del ayuntamiento, llena de campesinos y banderas de los distintos radios comunistas. La resolución más significativa adoptada en la conferencia fue la participación del partido comunista en el Consejo de Aragón

Sariñena plaza iglesia

Anoche llegaron a Sariñena veinte personas evadidas del campo faccioso, once de los cuales soldados, que confirman que la moral de la zona aragonesa dominada por los facciosos es desastrosa. Dicen que faltan artículos de primera necesidad y sobre todo ropas.  

Diario de Barcelona, 10 de febrero de 1937.

Explosión del Polvorín

El 19 de abril de 1937, a las nueve de la mañana, estalló el polvorín de Sariñena. En el polvorín trabajaban con trilita para hacer bombas hasta que se desató un pequeño incendio, incluso fueron a buscar extintores, al taller mecánico instalado en la iglesia, para sofocar las llamas pero no pudieron evitar el desastre y una tremenda explosión sacudió Sariñena. El polvorín se encontraba en el sótano de casa Tronchón, en la plaza de la Iglesia, entonces plaza Francisco Ascaso, con calle del Mercado. La terrible explosión causó varias víctimas mortales y lesiones, además de daños en varios edificios.

María Isabel Corral cuenta, a través de la memoria de su padre, que el polvorín «Era casa la Nena. Allí, en la bodega hacían en calderos la trilita para hacer bombas. Hacía mucho calor, iban todos en paños menores… la trilita empezó a subir, efervescente…no pudieron controlarla y corriendo subieron hasta arriba a la plaza y estalló todo. Desde donde comienza la calle del Mercado hasta casa Blasco voló todo por los aires…no quedó nada». Además, María Isabel Corral relata que la explosión afectó a casa de sus tías «A una de ellas, a Candela le cortaron una pierna por las heridas mientras que a Chon, la otra tía, llevaba un huevo en el bolsillo que resultó intacto y no le pasó nada. A mí padre lo bajaban todos los días allí, a casa de su abuela, ese día hacía mucho aire y no lo llevaron.»

Explosión Sariñena

Ahora, 21 de abril de 1937.

Arturo Morera lo recogió de la siguiente manera: «Resultaron completamente destruidos varios edificios, y pese al rápido socorro por los soldados del campo de aviación, los de una compañía de zapadores y por muchísima gente del pueblo, no pudieron rescatarse con vida una media docena de personas que habían quedado sepultadas entre los escombros. Varias niñas y otras personas adultas de Sariñena, se vieron afectadas por la explosión y resultaron heridas de distinta gravedad. El diario «La Vanguardia» dio cumplida reseña del suceso y resaltó la entereza del personal sanitario del Hospital, que consiguió tranquilizar a muchos heridos y enfermos, que saltaron de sus lechos al oír la explosión, tan cercana como impresionante».

Para las tareas de desescombro se ocupó el Batallón Los Topos pertenecientes al Regimiento de Zapadores Minadores, a los que el Consejo Municipal de Sariñena tuvo que buscar alojamiento, «Son los encargados de hacer la limpieza de los escombros, siendo igualmente de incumbencia a esta Comisión el dar las órdenes oportunas referentes al enterramiento de los diferentes cadáveres que puedan salir entre los escombros del referido siniestro.” También, el Consejo Municipal pronto acordó la creación de una comisión de investigación de los hechos, asimismo declaró el luto hasta que las victimas fuesen enterradas y obligaron a desalojar los edificios cercanos.

«Las víctimas mortales de la explosión fueron algunas más de las cuatro reseñadas en el periódico (La Vanguardia)» apuntaba Arturo Morera en su artículo «Explosiones en Sariñena», revista Quio de Sariñena y Los Monegros. «Entre los muchos heridos de consideración, se encontraba la niña Ascensión Vicente Coto (con tan solo trece años), la cual  años después, matrimonió con el autor de este artículo» (Arturo Morera. Explosiones en Sariñena).

Arturo Morera recogió en su artículo la noticia de la explosión en La Vanguardia, edición del 21 de abril de 1937, señalando como la crónica del corresponsal de Lérida «Pudo eludir la severa censura que pocos días antes había establecido en Sariñena el Cuartel General de las tropas republicanas».

Explosiones en Sariñena

Pánico en la población.  Casas derrumbadas. — Cuatro muertos y varios heridos,

Lérida, 20.

A las nueve en punto de la mañana de ayer, se oyeron en Sariñena dos explosiones; la primera, más fuerte que la segunda. La detonación de la primera se oyó hacia el exterior, y la otra de tipo interno. El suceso se desarrolló en la Plaza de Francisco Ascaso, y fueron tan fuertes las explosiones que saltaron cuatro casas y se desmoronaron otras doce.

En medio de la plaza, aparecieron enseres de todas clases, ropas, grandes vigas, etc, y todo ello envuelto en densa nube de polvo.

Algunos maderos cruzaron por encima de la plaza y cayeron en el techo de la iglesia.

En el Hospital, que está próximo al lugar de la explosión, la conmoción arrojó al suelo a los enfermos y heridos encamados.

A los pocos minutos, el pueblo en masa se congregó en la plaza, y se dedicó al descombro para extraer de las ruinas a las personas que pudieran haber quedado sepultadas entre ellas. Pronto aparecieron dos cadáveres, uno de un hombre y el otro de una mujer; y al poco rato, fue extraído otro cadáver de hombre.

El Cuartel general ordenó que regresaran del campo de aviación todos, los soldados disponibles y también 200 hombres del batallón «Los Topos», pertenecientes al regimiento de zapadores minadores.

Los trabajos de descombro fueron dificultados por las nubes de polvo que levantaba el viento que soplaba con fuerza y que cegaba a los que se dedicaban a esta tarea. Después de grandes esfuerzos por parte de los médicos, se consiguió tranquilizar a muchos enfermos y heridos del hospital.

Hasta ahora se tiene noticia de que han resultado cuatro heridos gravísimos, siendo muchos los que sufren lesiones de consideración y en más crecido número los que sufren lesiones leves.

Ha sido designado instructor del sumario, e! comandante Rojo, de Barbastro. Esta mañana se ha verificado el entierro de cuatro víctimas de este desgraciado suceso, tres hombres y una mujer. Al acto ha concurrido todo el pueblo y representaciones de las poblaciones cercanas.—Agusto.

La Vanguardia, edición del 21 de abril de 1937.

Efectivamente, el Consejo creó una comisión para tratar entrevistarse con el Ministro de Justicia García Oliver en Valencia. El asunto era tomar medidas oportunas para que no volviese a ocurrir. Aunque la comisión se desplazó hasta Valencia, al final no pudieron reunirse con el ministro que estaba de viaje y acabaron reuniéndose con su secretario.

Los responsables del polvorín fueron detenidos y hechos prisioneros, aunque contaron con el apoyo del Consejo que llegó a pedir su liberación: “Que en la actualidad siguen detenidos los camaradas Adon y Almenech (Dificultad de leer) manifiestamente inculpables en dicha  detención ya que saben positivamente que además de ser verdaderos antifascistas están afiliados a las juventudes socialistas unificadas de Valencia y los culpables del hecho no son estos camaradas  sino sus jefes, un teniente y su cuñado” (Actas Consejo Municipal de Sariñena).

Fallecidos por la explosión

De acuerdo con las Actas de defunción de Sariñena (Hospital de Sariñena, fallecidos de guerra), podemos establecer que las cuatro víctimas bien pueden responder a Leandro Maicas Martín, Miguela Lacruz Espada, Ángel Ayuda Blanco y Aurelio Auserón Escanero; tanto en relación a la fecha de la inscripción de su defunción como por la tipología de heridas y lesiones presentadas, causas de sus respectivas muertes.

Leandro Maicas Martín

Acta de defunción 8.240, 20 de abril de 1937

Natural de Calamocha (Teruel). De profesión sastre, casado habiendo dejado tres hijos y no habiendo hecho testamento según consta en este _____ facultativa manifestada por el director de este hospital M. Blay. Estaba casado con____________. Fallecido en este Hospital el día 19 de abril de 1937 a causa amputación traumática brazo y aplastamiento base cráneo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación escrita presentada por el director de este Hospital M. Blay.

Miguela Lacruz Espada

Acta de defunción 8.241, 20 de abril de 1937

De estado soltera no habiendo hecho testamento. Falleció en este Hospital el diecinueve de abril de 1937. A consecuencia de fractura base cráneo _________ Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Ángel Ayuda Blanco

Acta de defunción 8.242, 20 de abril de 1937 

Fallecía a consecuencia de varias heridas que recibió el mismo día en _________________. Fallecido en este Hospital el día 19 de abril a consecuencia aplastamiento base cráneo. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

Aurelio Auserón Escanero

Acta de defunción 8.243, 21 de abril de 1937

Soltero y falleció en este Hospital a consecuencia de ______________________________________  y extensas heridas en la cara. Sepultura en el cementerio de esta población. Manifestación hecha por el director de este Hospital M. Blay.

El relato de Francisco Martínez Vega

Francisco Martínez Vega nació en 1910 en Villapendi (Asturias) y estuvo destinado a la compañía mecánica que se instaló en la iglesia de Sariñena. Antes de la guerra, Francisco se desplazó a Barcelona donde trabajó en la planta de Ford, luego Motor Ibérica y Ebro. Allí consiguió reunir su familia, a sus padres y hermanos. Con la guerra fue movilizado a la compañía o Grupo Mecánico Ford.

Foto Yayo[1]..

Francisco Martínez Vega recostado sobre la estribera. Archivo familiar Javier López Martínez.

Su testimonio lo recoge su nieto Javier López Martínez relatando cómo, estando en la iglesia, llegó un hombre preguntando si tenían “matafuegos”, antiguos extintores: «En tanto que si tenemos, que si no tenemos, explotó el polvorín. Me contó muchas veces como había pedazos de carne pegados hasta en las paredes de las casas donde está ahora el portillo. Detrás del altar, contaba que se bajaba por una escalera a la cripta de la iglesia, que no llegaron a verla, ya que las linternas eran muy pobres de luz. Allí se oían ruidos, golpes y trajinar que siempre relaciono con la actividad del polvorín. La casualidad hizo que una hija suya se casase con un aragonés que trabajaba en Barcelona y volviera a tener relación con Sariñena.»

Javier relata como el soldado, que pidió el extintor, salvó su vida gracias al ir a buscarlo “El polvorín explotó mientras hablaban”. Su abuelo Francisco vio como volaban el puente y estuvo hasta la entrada de los nacionales “Fueron encerrados en una bodega donde bebieron mucho vino y las pasaron canutas, pues no tenían agua”. Luego fueron liberados, no habían sido soldados, y marcharon hacia el pirineo para pasar a Francia.

Sariñena a través del SIPM y el SIFNE

En la zona sublevada, durante la Guerra civil española, se crearon servicios de información y espionaje, tales como el Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) y el Servicio de Información del Nordeste de España (SIFNE). Entre sus archivos aparece información relacionada con Sariñena, documentación depositada en el Archivo general Militar de Ávila.

Trincheras

En Sariñena se construyen trincheras.

1.000 = 2 = 13-1-37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Futuro avance

Para el avance de Sariñena sobre Barbastro, aparte de las carreteras que aparecen en los mapas, que hacen de Berbegal un enlace muy importante, existe une comunicación que puede resultar interesante por lo inesperada y es la siguiente: partiendo de Sariñena a Sena se dobla a la izquierda por la carretera de Castelflorite y El Tomillo, que está terminada.

1.000 -1 18-1-37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Cuartel General de Sariñena (Huesca)

El Cuartel General que tenían en dicha población ha sido trasladado a la finca “Monte Serafina” propiedad del Sr. Galve, gerente de la casa Cros cerca de Binefar y Esplús.

30-4-1937.
Servicio de Información del Nordeste de España (SIFNE) Archivo General Militar de Ávila.

Emplazamientos

Sariñena. En el plano nº 1 se puede distinguir el emplazamiento del edificio en que se aloja el E.M. de la aviación y del “Batallón Rojo” o “Legión Roja” y la iglesia que está convertida en un importantísimo taller de la casa Ford.

Sariñena 1

En el mismo pueblo de Sariñena saliendo por la carretera de Pallaruelo se encuentra a mano izquierda el cuartel general de la CNT en el que suele haber unos 500 hombres (nº 2).

Sariñena 2

El plano nº 3 señala el emplazamiento del cuartel de la legión roja o “Batallón Rojo” que son fuerzas internacionales de la UGT.

8.000 = 2 = 20 – 5 – 37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Sariñena 3

Cuerpo de dinamiteros

S.I.F.N.E. 9-9.1937 Sete. Información de un agente destacado en la zona roja.

Funciona actualmente en la zona roja, un cuerpo de dinamiteros que obra con absoluta independencia del ejército y están a las órdenes directas del Consulado de Rusia. Funcionan dos academias para instruir a los individuos del mismo, que son escogidos entre los que forman el Ejercito Popular.

Estas academias están instaladas, una en Valencia -ignorándose su emplazamiento-, y otra en Barcelona, señalándose su emplazamiento por nota de hoy, para ser trasladado al plano general de Barcelona. Los grupos que actúan ya, por haber recibido la oportuna instrucción, se hallan destacados en Alcañiz, Barbastro y Sariñena, y constan de unos 50 individuos cada uno.

Como ejemplo del trabajo que dichos grupos tienen encomendado, se indica en anexo número uno, un método para la destrucción del ferrocarril compuesto de varias unidades; las dos interrupciones del circuito tienden a que una maquina exploradora pase sin que explote la bomba, pues la separación de 25 metros de las dos interrupciones del circuito, hacen necesarias varias unidades para la explosión. La parte marcada en rojo, es para el caso de ser descubierta la instalación, que explotaría al ser removida la bomba del lugar en que se encuentra

En xxx anexo n° 2, combinación a base de tres o más bombas con el fin de que explotando una de ellas al pasar un convoy, explotan las siguientes o anteriores, al ir socorrer al vehículo siniestrado.

Biarritz 7/9/937. II 4.7.

Explosivos

Almacén

A medio kilómetro de la estación de la población de Sariñena hay unos barracones donde se almacenan camiones y material de guerra.

3.000 =15= 28-10-37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

Refugios de Guerra

Manuel Antonio Corvinos en «Los refugios de la guerra y otros recuerdos» recoge el valioso testimonio de D.R.G.: El polvorín estaba en casa Tronchón que quedó totalmente destruida, también se derrumbaron casa Blasco, casa la Nena, casa Candela y casa la Rosa. En el edificio también estaba instalada una caja de ahorros cuyo director era un señor apellidado Maicas. Lo vimos salir al balcón  y cómo la explosión lo lanzaba contra las rejas de la iglesia. En el suceso también murieron su esposa, treinta o cuarenta soldados y un niño de 12 años. A varios de los que jugábamos en  la plaza nos hirieron y nos llevaron al hospital que estaba en casa Paraled (hoy casa Abadías-Ullod). Como ese día hacía mucho cierzo recuerdo que el humo y el polvo desaparecieron de la plaza muy deprisa y entonces pudimos ver cómo los escombros la llenaban casi toda.

El artículo de Manuel Antonio Corvinos aporta información sobre los distintos refugios que existieron durante la guerra, a los que acudían cada vez que la sirena comenzaba a sonar: Uno en la era Bolera, otro en las bodegas de Torres, un tercero en la bodega del Romea (en éste si hubiera caído alguna bomba hubieran muerto todos porque el edificio se habría hundido), otro en la calle del Mercado, más concretamente debajo de la tienda de Ramón el Cabalero, había otro refugio en el salón de Arcos del Casino, otro en la torre de la Iglesia  (en éste los que llegaban los últimos empujaban a los demás hacia arriba hasta que cabían todos), otro en las escaleretas del Castillo (en casa Mora) y por último en el huerto de Nogués, hicieron una zanja y allí íbamos todos los que vivíamos en esa zona del Muro cuando no había niebla o humedad.

El relato aportado por Manuel Antonio Corvinos da cuenta de las ametralladoras antiaéreas que había en Sariñena. Había dos y estaban en la torre de la Iglesia y en la zona de la Jinjolera (cerca de la actual cooperativa) «Después de la guerra se utilizó la plataforma de la ametralladora antiaérea de la iglesia para construir la torre nueva de la iglesia«. Los soldados de las ametralladoras antiaéreas vivían en las antiguas escuelas cercanas a la iglesia y actual abadía.

El 27 de febrero de 1938 la caída del frente se debía de sentir muy próxima y el miedo a bombardeos fue en aumento. Para evitar ataques aéreos nocturnos, las luces del pueblo se debían de apagar, lo que a la vez dificultaba algunas actividades nocturnas. Las actas del Consejo Municipal, de aquel día, reflejan el interés por atenuar algunas de las luces, colocar bombillas azules, al menos durante unas horas para poder ver algo y a la vez mantenerse protegidos o amortiguar algunas lámparas:

Bombillas azueles: “Así mismo propone que al objeto de que sea más fácil la circulación en la localidad por la noche se coloquen algunas bombillas pintadas de azul que podrían lucir una o dos horas diarias durante las nueve o las diez y siempre que la población no pueda correr peligro y así se acuerda.”

Luz: “También el camarada Viñuales propone que la lámpara instalada en el refugio de la Plaza Luis de Sirval sea amortiguada por la mucha luz que da al exterior como igualmente en la Colectividad luce una lámpara toda la noche y que sale al exterior mucho foco de luz y a proposición de Aznar se pone un comunicado a dicho organismo para que sea corregido.”

* Luis de Sirval, seudónimo de Luis Higón y Rosell, fue un periodista español, asesinado por legionarios en la represión de la Revolución de Asturias de 1934.

Sariñena bajo las bombas

Los bombardeos en Sariñena, barrio de la Estación y del aeródromo, aparecen recogidos por José María Maldonado en su obra Aragón bajo las bombas.

El 18 de febrero de 1937 se produce el primer bombardeo sobre el aeródromo de Alas Rojas, que tendrá diferentes bombardeos el 9, 14, 16, 20 y 28 de septiembre del mismo año. El entorno de Sariñena, duramente el mes de septiembre, fue constantemente bombardeado.

La aviación facciosa ha bombardeado los alrededores de Lérida y Sariñena.

Ayer, a las 14:40 tres Junkers enemigos bombardearon las proximidades de Sariñena y lanzaron cincuenta bombas sin causar desperfectos ni desgracias personales. Los aparatos escoltados por aparatos de caza volaban a gran altura.

La Humanitat: Any 6, núm. 1745 (30 set. 1937).

La aviación facciosa ha bombardeado las cercanías de Lérida y Sariñena, y posiciones de Camillo y Las Salinas.

Bombardeo Sariñena

La Hora, 30 de septiembre de 1937.

El 15 de octubre se vuelve a bombardear el aeródromo y el 31 se experimenta por primera vez con bombas de 250 Kgr.

Incursiones aéreas

Unos aparatos enemigos se internaron en nuestras líneas y llegaron hasta las proximidades de Sariñena pero no pudieron bombardear.

La Humanitat: Any 6, núm. 1776 (5 nov. 1937).

No se atreven a llegar a Lérida

Por la vertical de Sariñena pasaron, a las doce y cuarto, once aviones facciosos en dirección a Lérida. Inmediatamente fue transmitido el aviso oportuno y sonaron las sirenas. Toda la población acudió a los refugios.

Inmediatamente se elevaron unos cazas leales que salieron al encuentro de los aparatos rebeldes pero como los aviones facciosos se dieron cuenta giraron nuevamente en dirección a Zaragoza.

La alarma duró escasamente quince minutos.

La Humanitat: Any 6, núm. 1785 (16 nov. 1937).

La Estación Ferroviaria de Sariñena sufrió un bombardeo el 19 de Noviembre de 1937: «Un despiadado bombardeo aéreo perpetrado por la Regia Aeronáutica Italiana a las ordenes directas del dictador Benito Mussolini, como prueban los documentos encontrados en el país transalpino de donde proviene, también, la foto tomada desde uno de los Savoia Marchetti que intervinieron y que Antoni Nebot gentilmente nos proporciona» .

El 20 de noviembre de 1937, fue bombardeado el pueblo de Sariñena sobre la que se soltaron unas 48 bombas de 50 Kgr.

La aviación facciosa sobre Sariñena. Sariñena, 19. – La aviación facciosa, perseguida por nuestros cazas, ha arrojado en su huida bombas al pasar por esta población, causando tres heridos leves y no produciendo daños materiales (La Vanguardia, 20 noviembre de 1937).

Unos aviones que huían dejan caer algunas bombas cerca de Sariñena

Sariñena (Del enviado especial de Febus). La aviación facciosa, perseguida por nuestros cazas, han lanzado en su huida unas bombas al pasar por esta población: han causado tres leves y no han producido daños materiales.

La Publicitat:, 20 Novembre 1937.

Una bomba en Sariñena

Sariñena. 20 (9m) La aviación facciosa, cuando huía perseguida por nuestros cazas, arrojó una bomba al pasar por esta población y causó tres heridos leves. No produjo daños materiales.

Bomba Sariñena

La Voz, 20 de noviembre 1937.

Hay que añadir el bombardeo que el 21 de enero de 1938 sufrió Sariñena y que viene reflejado en el Acta del 13 de febrero de 1938 del Consejo Municipal de Sariñena: “Igualmente se da lectura a una comunicación del Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción de esta Villa interesando datos sobre los daños, perjuicios y victimas ocasionados por el bombardeo habido en esta el día 21 del pasado enero a lo que los compañeros de Consejo acuerdan el que sean tasados por un albañil que sea designado por el camarada Presidente dándose cuenta de ello a la mencionada autoridad» (Actas del Consejo Municipal).

El 21 de enero cayó una bomba en Casa Barrieras, en lo que antes llamábamos la placeta de la Iglesia (hoy Fray Zacarías Martínez) y “escachó” media casa (ésta fue la primera casa que derrumbaron las bombas en Sariñena). Una mañana de febrero cayó una bomba enfrente de la fuente que hay en la avenida de Goya (la que restauraron hace poco) y los que estaban en el refugio de Torres lo pasaron muy mal, pensaron que iban a quedar sepultados, incluso llegaron a  percibir el olor a la pólvora. Ese mismo día cayó otra bomba en el corral de Ariste y mató a un crío de 7 u 8 años.

El 30 de enero de 1938 se bombardea de nuevo el barrio de la Estación, el 4 de marzo el aeródromo y el 16 ambos objetivos, el pueblo y el aeródromo, dejando el saldo de un soldado y dos niños muertos y un total de 100 bombas arrojadas.

Finalmente el 25 de marzo, Sariñena y el barrio de la estación sufrieron dos bombardeos con el avance definitivo del bando nacional. Un primer bombardeo durante 10 horas protagonizados por los Heinkel 111. El segundo bombardeo duró unas 17 horas.

Grupo Tren del Socorro Rojo Internacional

El 1 de enero de 1938, en Sariñena se constituyó el grupo local del Socorro Rojo Internacional (SRI), en la Unidad del Cuerpo Tren del XI Cuerpo de Ejército, con el nombre “Grupo Tren”. Según un documento, de la secretaria de organización del Socorro Rojo de Cataluña, el cuerpo Tren XI C.E. de Sariñena estaba dedicado a los servicios tren automóvil base 8ª – C.C. N.º II. En dicho documento figura como secretario de la organización Eufemio Castellanos Ortiz, secretario de propaganda Bartolomé Prats Lorca y secretario de administración Antonio Conejo Tejero. El cuerpo contaba con 122 fundadores.

Igualmente, en un documento del comisario de la jefatura del XI Cuerpo de Ejército del servicio del tren automóvil del Ejército del Este, del 20 de enero de 1938, se vuelve a detallar los camaradas constituyentes del grupo:

  • Antonio Ausejo Tejero, comisario de los servicios Tren Automóvil del XIº. CE.
  • Bartolomé Prats, perteneciente al Estado Mayor del XIº. CE.
  • Eufemio Castellanos Ortiz, activista del SRI.

Un tercer documento, del 6 de marzo de 1938, al secretario de organización del CC del SRI F. Fernández, se comunica el envió del impreso de alta del grupo y a la vez se solicita unos “5.000 sellos ordinarios de cotización, propuestas y demás sellos y propaganda que anunciáis. También precisamos carnets y a ser posible algunas colecciones de la URSS y ayuda a la infancia”. La misiva es firmada por el secretario de la organización Eufemio Castellanos.

También existen dos cartas de la secretaria de organización del Socorro Rojo de Cataluña, ambas desde Barcelona a 1 y 11 de marzo de 1938, relativas a la formalización del grupo sariñenense. Documentos del Arxui Nacional de Catalunya (ANC1-886-T-392).

La guerra se acerca a su fin

Sariñena gozó de cierta tranquilidad al estar alejado del frente, aunque el flujo y la actividad debió de ser incesante. Hasta que llegaron los bombardeos y, en marzo de 1938, comenzó la retirada y produciéndose los más duros bombardeo que asolaron la villa monegrina, causando hasta un 65% de destrucción de su casco urbano. Sariñena fue bombardeada el 25 de marzo de 1938 por la aviación alemana Condor y  ocupada el 26 de marzo de 1938. «Sariñena, la retirada».

Diario de un miliciano

El miliciano Manuel Gutiérrez escribió en un diario sus vivencias durante sus últimos meses de vida en el frente de Huesca. Diario de un miliciano fue encontrado en septiembre de 1937 en el frente de Zuera junto al cadáver de Manuel Gutiérrez. El diario aparece publicado por Aula Militar “Bermúdez de castro”

El 3 de agosto de 1937, Manuel partió del frente desde Senés de Alcubierre narrando en su travesía su paso por Sariñena: “Por fin llegan camiones y de la mejor manera posible nos instalamos. A las siete emprendemos la marcha y al poco rato ya estábamos llenos de polvo. El camión en el que yo viajaba fue el primero en salir pero como iba excesivamente cargado pronto le han pasado los demás delante. Pasamos por Robres, Alcubierre, Lanaja y por el lado de La Cartuja; más pueblos pasamos hasta llegar a Sariñena donde descansamos. Allí se observaba un ambiente diferente de los pueblos cercanos a la línea de fuego. Había mucha gente mucha juventud que reía y hacia el efecto de que no se acordaba de la guerra”.

Estas son parte de las muchas historias de una de las páginas más tristes de nuestra historia. Un ejercicio de memoria para aprender que continúa en «Sariñena, la retirada».

Artículos relacionados:

Alas Rojas


 En agosto de 1936, a comienzos de la guerra civil española, se establecía en Sariñena el campo de aviación  “Alas Rojas”, alojando, en el frente de Aragón, la vanguardia de la aviación republicana con su escuadrilla “Alas Rojas”. Sus características bandas rojas, pintadas a modo de identificación en los aviones, dio origen a su inconfundible nombre de «Alas Rojas».

Aerodromo Sariñena

Aeródromo de Sariñena. Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) AGMAV,M.2212,6 / 6.

Artículo enmarcado en la serie sobre la guerra civil en Sariñena

Alas Rojas, el aeródromo

El investigador sariñenense Arturo Morera Corull recogió la historia del aeródromo de Sariñena en una completa serie de artículos sobre la Guerra Civil en Sariñena. Los diferentes artículos «La guerra del 36 en Sariñena» fueron publicados en la revista Quio de Sariñena y Los Monegros, entre los números del 22 al 32, recogiendo diferentes hechos del campo de aviación. Arturo realizó un amplio estudio de las referencias escritas y noticias en medios de comunicación, escribiendo el relato del aeródromo de una forma cronológica y detallada. Un trabajó que rescató del olvido el abandonado aeródromo junto a diversos episodios bélicos importantes para la historia de la aviación, como es el caso del tercer derribo nocturno de la historia de la aviación mundial.

Ejercito aire

Sello del Ejército del aire. Expediente sobre el Aeródromo de Sariñena. 1945. Fuente: Biblioteca Sariñena.

«Muchos de los datos que voy a aportar los he entresacado del estupendo libro La Aviación de Cataluña en los primeros meses de la guerra civil, escrito por el ingeniero D. Juan J. Maluquer, uno de los primeros oficiales que formaron parte de la escuadrilla “Alas Rojas” en Sariñena. Otras publicaciones especializadas que dan información sobre la aviación en nuestra villa son La guerra de España desde el aire, de Jesús Salas Larrazábal; Mitos y Verdades, de Andrés García Lacalle; La guerra en el aire, del coronel José Gomá, y la Historia del Ejército Popular de la República, de Ramón Salas Larrazábal. También los periódicos barceloneses de la época aportan detalles interesantes sobre las actividades de la aviación republicana desde el aeródromo de Sariñena.»

La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.

El libro “Alas Rojas Sariñena” (Sariñena editorial, 2006), del sariñenense Salvador Trallero, es obra de referencia sobre el aeródromo republicano de Sariñena, aportando un gran valor fotográfico y documental sobre el campo. Una obra extraordinaria indispensable y recomendable para conocer y descubrir su historia. También resulta imprescindible el capitulo que el investigador oscense, Vítor Pardo Lancina, dedica al aeródromo en la obra “Agnes Hodgson A una milla de Huesca” (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

En la misma línea, Miguel Sanchís publicó su trabajo «Alas Rojas sobre España», una obra en la que se describen y explican las características de la aviación republicana.

Alas Rojas sobre España Miguel Sanchís

Los inicios del aeródromo

Con los inicios de la guerra urgió la necesidad de establecer un aeródromo en el frente de Aragón, cerca de las líneas enemigas. Arturo Morera relata como el teniente coronel Felipe Díaz Sandino, comandante de las fuerzas aéreas en Cataluña y jefe del aeródromo del Prat en Barcelona, junto al capitán retirado del arma, Alfonso de los Reyes, al frente de unos milicianos ocuparon el 17 de julio de 1936 las instalaciones del aeródromo del Prat «En previsión de un posible alzamiento militar, y desarboló, en unión de Díaz Sandino, cualquier posibilidad de sublevación de los aviadores en contra de la República. Vencida la resistencia del general Goded y sus seguidores en Barcelona, el jefe del aeródromo del Prat se aprestó a reclutar y organizar unas milicias combatientes al servicio de la aviación republicana. (La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.). José María Maldonado Moya apunta que Diaz Sandino, jefe de la 3ª Región aérea y de la 3ª Escuadra de Aviación Militar, «Preparó la defensa del campo del Prat, con un grupo de aviadores y mecánicos.» (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

El 22 de julio de 1936, el entonces capitán Alfonso de los Reyes, recibió la orden de salir para Lérida al mando de una escuadrilla de Breguet. Según Maldonado, en el campo del Prat había cuatro aviones Breguet-19 y otros tres o cuatro reparándose en los talleres «Todavía disminuiría en una unidad al huir dos oficiales con un Breguet hacia la Pamplona sublevada» (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

«Orden de salir para Lérida al frente de una escuadrilla. «Alas Rojas». Nombre evocador, mil veces glorioso. En Lérida impera el caos revolucionario. La escuadrilla «Alas Rojas» empieza a actuar en el «frente» aún no establecido» (Mi revista. Barcelona. 1936. 15 de julio de 1938).

Pronto, desde el aeródromo de Lérida se buscó un lugar para instalar un aeropuerto más avanzado a las líneas del frente. «El 1 de agosto de 1936 el comandante de Aviación Alfonso de los Reyes, ordena al piloto de la avioneta De Havilland Hornet», Pérez Mur, que aterrice en una gran llanura en el lado oeste de la carretera de Sariñena a Albalatillo, entre las cuencas de los ríos Flumen y Alcanadre. Habían despegado del aeródromo de Lérida en busca de un aeropuerto avanzado para la Aviación de Cataluña, con base principal en el campo militar del Prat de Llobregat, y el terreno encontrado era perfecto tanto desde un punto de vista estratégico como por las características orográficas. A los pocos meses, el propio aeródromo de Lérida será sustituido por el de Sariñena», (Víctor Pardo Lancina citando al propio piloto, Francisco Pérez Mur, quien explica los detalles del vuelo en su De la Voltige Aerien- ne a la guerre d’Espagne, París, Editions France Empire, 1978, pp. 90-92. “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”, Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros ).

«Una extensa planicie entre las acequias de Valderas y del Hospital, el río Isuela (ahora mal llamado Flumen) y el límite con Albalatillo, fue el terreno elegido para instalar el campo de aviación. Es decir, en las partidas conocidas como “Los Sasos”, “Las Ramblas’ y el “Usaso de Albalatillo”, siempre en el término municipal de Sariñena. La carretera local que va desde la comarcal A-230 a Albalatillo cruzaba por el medio del nuevo aeródromo. Al oeste de dicha carretera local se situó el campo de vuelo, y al este, en un área sensiblemente igual a la del campo, se ubicó el campamento con instalaciones muy rudimentarias, básicamente tiendas de campaña militares.» (La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros).

Alfonso de los Reyes manifestó que el traslado a Sariñena respondía para «Poder actuar más eficazmente en el apoyo de las columnas Durruti, Del Barrio, Ascaso, Trueba, Ortiz…, figuras cumbres de los milicianos y de la Revolución. Profesionales cuya fe en el triunfo, a pesar del caos inevitable de los primeros momentos, les convertía en verdaderos héroes de leyenda.» (Mi revista. Barcelona. 1936. 15 de julio de 1938).

Campo aviación Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Grupo de aviones Breguet XIX.

No obstante, Manuel Conde López, médico del aeródromo, en sus «Memorias de un médico militar», apunta como fue el capitán piloto Amador Silverio el designado para elegir el emplazamiento del aeródromo: «El campo de aviación se situó a unos 4 km. de Sariñena y, a unos 3 km. de la carretera que une dicha población con Bujaraloz y Caspe casi tocando al pueblecito de Albalatillo, pueblo con cuyos habitantes estábamos constante mente en contacto. Hacia el oeste de la carretera, queda el campo de vuelo, prácticamente un cuadrado bastante grande, pues se trataba de terreno llano de cultivo. Al este, en una extensión un poco menor a la del campo de vuelo, se montó el campamento, con sus instalaciones, todavía rudimentarias. Había algunas tiendas de campaña de forma cónica con cabida para una docena de personas con sus catres de campaña. Los catres eran de lona montada sobre un bastidor de madera plegable, cómodos, especialmente si se había podido requisar un colchón de lana. En una de dichas tiendas se instaló el botiquín. En otra se instaló la cocina. Para comedor del personal volante había un toldo fijado a unas estacas. En nuestra tienda botiquín dormíamos el teniente médico Barceló Cabré y el practicante.» (Manuel Conde López, Memorias de un médico militar).

Pronto comenzaron a llegar los primeros aviones y milicianos al futuro aeródromo, también un contingente de voluntarios adscritos al PSUC que componían las llamadas Milicias Antifascistas de Aviación. «Al propio tiempo envió una patrulla de aviones Breguet y Nieuort-52 al campo de aviación de Lérida, al mando del ya comandante Alfonso de los Reyes. Este ordenó el traslado de su patrulla a un campo improvisado en Sariñena, y el día 2 de agosto se instalaron allí los dos primeros aparatos de caza Nieuport-52, pilotados por los suboficiales del arma de aviación Jesús García Herguido y Jaime Buyé Berni. Sin solución de continuidad fueron llegando a Sariñena otros aparatos, y también los milicianos reclutados en Barcelona al servicio de la Aviación. El nuevo aeródromo se instaló a unos tres kilómetros del núcleo de población de nuestra villa, muy cerca de Albalatillo, especialmente el área en donde se levantaron las tiendas y los barracones de alojamientos del personal y de los servicios.» (La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros). Víctor Pardo Lancina apunta que muy pronto «Se establecen los primeros pertrechos, tiendas de campaña, emisora, puntos de vigilancia y se empiezan a excavar las líneas de trinchera en el perímetro del complejo aeronáutico. El comandante Alfonso de los Reyes González supervisa y dirige todas las maniobras, y él será el responsable de este campo que tiene en las dos pistas de Bujaraloz un importante complemento.»

En Sariñena ha sido establecida la base aérea La escuadrilla de aviación que había
en Lérida, a las órdenes del comandante Reyes, ayer se trasladó a Sariñena, donde se ha establecido la nueva base, desde la cual se colaborará con más facilidad al avance de nuestras columnas.

La Batalla: Número 3 _ 05/08/1936.

En palabras de Víctor Pardo Lancina, el aeródromo creció a una velocidad vertiginosa, convirtiéndose en el más importante del Ejército del Este, alcanzando prácticamente el mismo rango que el del Prat de Llobregat. El campo de aviación lo inauguró el coronel Felipe Díaz Sandino, según las memorias del sindicalista cenetista José Peirats “De mi paso por la vida. Editorial Flor del Viento”. José Peirats estuvo como corresponsal en su inauguración: “Era de tierra y por todo ornamento de un palo colgaba la manga de una camisa que señalaba la dirección del viento».

Alas Rojas sello 3ª Región Aérea

Sello 3ª Región Aérea Alas Rojas. Aviación Militar. Jefatura. Grupo de Escuadrilla.

Alas Rojas se enmarcó en la 3ª Región Aérea de la República, con cabecera Barcelona y que comprendía Cataluña y la zona republicana de Aragón. Felipe Díaz Sandino fue jefe de la tercera región hasta al ser designado consejero de Defensa de Cataluña, siendo sustituido por Alfonso de los Reyes.

III Región: Barcelona y su provincia, Tarragona, Lérida, y la parte republicana de la provincia de Zaragoza:

  • 1º Sector: Celrá, Figueras Norte, Figueras Sur, Vidreras, Vilajuiga, Esponella, Puigcerdá, La Llagostera, Vergés, Torroella, Olot.
  • 2º Sector: Sabadell, Vich, Castellar, Cardedeu, La Garriga, Manresa, Villatorta, Tona, Montmeló, Manlleu, Sampedor, Bergus.
  • 3º Sector: Los Monjos, San Pedro, Igualada, Bellpuig, Tarrega, Cervera, Lérida, Vilafranca, Lladvos, Sanahuja, Agramunt, Barbastro, Castejón del Puente, Sariñena, Bujaraloz, Candasnos, Balaguer, Caspe, Híjar, Alcañiz.
  • 4º Sector: Reus, Valls, Vendrell, Salou, Pla de Cabra, Villalonga.
  • 5º Sector: Base Aeronaval de Barcelona, Prat de Llobregat, Canudas, Prat de Llobregat Air France.

Avioneta Alas Rojas Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Mecánico llenando los depósitos de un Nieuport 52.

Entre las grandes figuras ligadas al aeródromo destaca el comandante Alfonso de los Reyes González Cárdenas, jefe del aeródromo, perteneciente al PSUC, quien en diciembre de 1936 fue ascendido a teniente coronel. Segundo jefe capitán José Domingo Rosich, capitán médico Manuel Conde López, comisario político Ramón Franco Quinza, jefe de la escuadrilla Isidoro Jiménez García y entre los numerosos pilotos, citamos a Rodolfo Robles, Jaime Buyé, Jesús García Herguido, conocido como “El diablo rojo”. «El aviador que posó el primer Nieuport en Sariñena» (Víctor Pardo Lancina citando Maluquer Wahl, Juan J. La aviación de Cataluña en los primeros meses de la guerra. Editorial San Martín, 1979, pp. 139 “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”, Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros), José Cabré Planas», Adonis Rodríguez González, Antonio Salueña Lucientes, Fernando Roig Vilalta, y los civiles, Jaime Camarasa Lluelles, Luis Aguilera Cullell, Pedro Andrada, Francisco Cabré Rofes, Mariano Foyé Rafols, o Maurain.

Mapa eródromo alas rojas sariñena

«La instalación del aeródromo de Sariñena, llamado de “Alas Rojas”, llegó a desempeñar un evidente protagonismo en el desarrollo de las operaciones militares y también en la vida cotidiana de las gentes de Sariñena.»

Arturo Morera Corull.

La instalación del aeródromo

El 2 de agosto comenzó la instalación del futuro campo de aviación republicano, aunque como señala Arturo Morera, pronto comenzó a dar algún que otro problema:

Algunos problemas de infraestructura no tardaron en aparecer en el nuevo aeródromo de Sariñena. Parece ser que el montaje del primer barracón para alojamiento de los pilotos y de los milicianos constituyó todo un gran problema. Los materiales para construirlo llegaron al campo sólo en parte y otros elementos del pabellón prefabricado se quedaron arrinconados en la estación del ferrocarril de nuestra villa.

El alférez Maluquer, por ser ingeniero, fue encargado de dirigir el montaje pero tuvo que renunciar a su cometido ante la imposibilidad de hacer trabajar a los milicianos de Aviación. Éstos argumentaban que lo suyo era pelear y así lo demostraron más de una vez cuando se desplazaban para efectuar distintos golpes de mano en el frente, e incluso fueron ellos quienes tomaron al enemigo el lugar de La Granja, a ocho kilómetros de Huesca.

Construcción campo aviación Alas Rojas Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Trabajos de construcción del campo de aviación. Agencia EFE.

Semanas más tarde, llegó al campo de alférez Isidoro Jiménez, quien se hizo cargo del montaje del barracón, después de su llegada el 11 de septiembre de 1936. Pero tuvo que prescindir de los milicianos que seguían negándose a trabajar. Pidió la colaboración a un grupo de hombres de Sariñena y de Albalatillo, con cuyo esfuerzo y profesionalidad pudo concluirse el montaje de aquel barracón. Simultáneamente, el capitán Domingo, que actuaba como segundo jefe del aeródromo, organizó el traslado de las tiendas de campaña, convirtiéndolas en semipermanentes al protegerlas con muretes de 70 cm de altura; también dirigió la construcción de un refugio antiaéreo, asimismo con la ayuda de gentes de Albalatillo.

Agosto 1936. Alas Rojas. Sariñena. EFE

Campo de aviación Alas Rojas de Sariñena. Agosto de 1936. Agencia EFE.

«Las tiendas de campaña y habitaciones provisionales no dan la impresión de estar en un campamento, Camas plegables, luz eléctrica y algún que otro armario de luna. La parte alta está ocupada por una granja bien provista de aves, cocina y almacén de comestibles.»

Ahora, 15 de septiembre de1936.

Soldados y mecánicos, Alas Rojas

Soldados y mecánicos en el aeródromo Alas Rojas. Agencia EFE.

Se levantaron barracones, un gran refugio antiaéreo, captación de agua, trasformador eléctrico, polvorín, bunkeres… «Hasta piscina se construyó en este gran complejo defendido por soldados que salían al frente tras recibir instrucción en las explanadas en torno a la carretera de Albalatillo. La eficaz dirección del comandante Reyes se vio auxiliada por el alférez Isidro Giménez García, jefe de la Escuadrilla, y por el capitán Enrique Domingo Rosich, oficial de Artillería y responsable. Domingo Rosich, ingeniero industrial, republicano de firmes convicciones, gozaba de un gran prestigio profesional y una aureola personal indiscutibles, ya que había sido el defensor del capitán Salvador Sediles, juzga- do por la sublevación de Jaca con los capitanes Galán García Hernández y ocurrida el 12 de diciembre de 1930″ Enrique Domingo fue testigo en Madrid de la muerte accidental de Durruti, al que se le concedió el grado de teniente coronel a título póstumo» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

En los barracones, pilotos y soldados duermen, sin que nada les quite el sueño. La tarea ininterrumpida de la mañana por la noche hace que la cama se coja con gusto. Cuando el amanecer empiece a desterrar los velos sombríos de la noche, aquellos heroicos defensores de la Libertad, contentos, dinámicos, volverán a tomarme la tarea que les está encomendada. En ellos anida un solo pensamiento: salvar a la patria. Y esta emoción se hace tanto más intensa cuanto más vivo es el recuerdo de los seres queridos dejados en casa.

María Vives, La Humanitat 19 de julio de 1938.

En los primeros días de la guerra, recaló en el aeródromo José Gabriel, periodista, ensayista y novelista argentino de raíces aragonesas. A su llegada al campo, «Le llama la tención una actividad constructiva y un formulismo en el trato». Los uniformes blancos de los mandos contrastan con las milicias. «Al lado, es agradable ver a los albañiles, a los carpinteros,, a los herreros erigiendo zócalos de ladrillo para las carpas, cepillando un listón, torciendo una pértiga.» (La vida y la muerte en Aragón. Salvador Trallero Editor).

En las inmediaciones de Albalatillo se construyó la fuente del Saso, conocida también como “El Tanque”. Fue construida el 10 de enero de 1937, recogiendo el agua de un manantial en un pequeño estanque con dos lavaderos en sus laterales. La fuente servía para abastecer de agua a los soldados y para aseo e higiene de los mismos.

¡SARIÑENA!

«La noche, implacable, va cubriendo con su manto de sombras la extensa explanada que forma el campo de aviación de Sariñena. Ya noche oscura, tan sólo de vez en cuando una silueta desdibujada rompe el paisaje amorfo. De repente, de entre la noche, el sonido metálico de la corneta rasga los velos oscuros y en medio de una quietud impresionante llegan hasta nosotros las notas desgarradoras del toque de «silencio».»

María Vives, La Humanitat 19 de julio de 1938.

Llegan los primeros aviones 

Los primeros en llegar fueron los Breguet, procedentes de el Prat de Llobregat, que comenzaron a operar desde el primer día. Maldonado apunta que el aeródromo de Sariñena se utilizó por vez primera el mismo día 2 de agosto «Ese día sirvió como apoyo a las columnas que avanzaban por las orillas del Ebro, en el bombardeo de las cercanías de Tardienta y de la Zaida» (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

Pronto llegaron al aeródromo dos aviones de caza Nieuport-52, pilotados por los sargentos Jesús García Herguido y Jaime Buyé; y tres aviones Breguet XIX, a cuyo mando de uno de ellos estaba el comandante Alfonso de los Reyes. La aviación republicana mantuvo una cierta superioridad hasta que el 17 de octubre de 1936 llegan a Zaragoza tres aviones alemanes Heinkel 51, siete aviones de caza y un Fokker. Para Maldonado la superioridad correspondió a los aviones alemanes “Hasta la llegada a finales de año de los Chatos rusos al aeródromo de Sariñena”.

«Hacia finales de año llegaron los pilotos rusos con sus aviones conocidos como «Chatos, entre los más celebrados de estos personajes cabe señalar al especialista en vuelo nocturno y asesor de aviación, Yakushin, conocido como Mateo Rodrigo, quien protagonizó en Sariñena en los primeros días de febrero de 1937, el primer derribo en combate nocturno reseñado en la historia española de la aviación.» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

José Gabriel describe que todos los aviones eran chicos » Aquí hay quien nos señala en el campo tres aviones civiles que ayer llegaron de Francia y que ya están transformando en maquinas de guerra. Cazas o civiles con aparejo auxiliar para bombardeo. El que zumba acaba de llegar de excursión. Está a mi lado su piloto, que me saluda risueño y va a hacerse su aseo matinal, de vuelta de servirles el desayuno a los enemigos, en Tardienta» (La vida y la muerte en Aragón. Salvador Trallero Editor).

«Perdidos entre los pliegues de las sombras nocturnas, los aviones, monstruos de acero, duermen como si estuvieran ignorantes de su misión en la guerra.»

María Vives, La Humanitat 19 de julio de 1938.

«El 3 de agosto, un Foker F-VII, un avión comercial transformado en bombardero y preparado para ser visto durante los vuelos nocturnos, despegó del aeródromo del Prat de Llobregat, sobre la una y media de la madrugada del día 3 de agosto. El piloto era Manuel Gayoso Suárez. El vuelo se realizó a muy poca altura, unos 150 metros y fueron lanzadas 4 bombas de 50 kilos. Esta poca altura tuvo una importancia notable en el desenlace de la operación ya que las bombas de aviación no se activan exactamente igual que las de artillería.» (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María). La escasa altura no permitió que la espoleta se abriese por lo que no llegaron a explotar.

Noticiero del archivo de UCLA Film & Television Archive.

Documento excepcional del aeródromo perteneciente al archivo de UCLA Film & Television Archive (The Packard Humanities Institute). En el video se puede contemplar la salida de aviones desde Sariñena, campamento anti-fuego cocina, centro de aviación, vista general del campamento de aviación, reabastecimiento de aviones, despegue, rollos de municiones, carnicero del campamento y comandante del aeródromo. Los aviones que aparecen son: 0:10 Nieuport NiD 52; 0:20 za skupinou v pozadí předek CASA Bréguet XIX; 0:26 Lockheed 9 Orion; 0:34 nástup de CASA Bréguet XIX y 0:45 start CASA Bréguet XI. También se puede apreciar al comandante Reyes manteniendo una conversación con un piloto. Las imágenes responden a mediados de agosto, el  Lockheed 9 Orion acabó estrellándose el 12 de agosto de 1936 en Muniesa.

Silvia Ribelles cuenta que Lockheed 9 Orion era francés, de fabricación norteamericana, para transporte de pasajeros: «El piloto era René Georges Cornez, y yo creo que es el hombre que aparece con un mono blanco, y llevaba unos periodistas franceses de Barcelona a Madrid. La fecha es 12 de agosto. El avión realizó un aterrizaje de emergencia en Muniesa, y los heridos fueron transportados a un pueblo vecino, tal vez a la propia Muniesa.» Las imagenes responden a unas grabaciones del archivo de UCLA Film & Television Archive (The Packard Humanities Institute).

 

En el curso de un reportaje

El director y el redactor jefe de la famosa revista francesa «Vu» sufren lesiones en un accidente de aviación Asistidos de urgencia en Cataluña, regresaron en avión a París.

El semanario ilustrado de París «Vu» tenía la Intención de dedicar un número especial a los acontecimientos de España. A este efecto, salieron de la capital de Francia, en avión, el director, el redactor jefe y un fotógrafo. En Barcelona se les unió uno de los redactores de dicho semanario. Con intención de visitar el frente se trasladaron a Sariñena, donde pasaron el viernes, y desde allí fueron a Alcañiz, con dirección a Madrid. El aparato, por una avería en el motor, tuvo que aterrizar pasada la Sierra de Arcos, entre Oliete y Muniesa.

Quedó roto el tren de aterrizaje del aparato, y el director y el redactor jefe de dicho seminario resultaron con la fractura del antebrazo y contusiones en diversas partes del cuerpo, y gracias a la pericia del piloto el accidente no tuvo las proporciones que cabía esperar, dadas las malas condiciones del terreno en que aterrizó el avión.

Los heridos fueron curados de primera intención en una ambulancia de campaña, y trasladados más tarde al hospital de sangre de Reus. El director se mostraba admirado de la magnífica organización sanitaria y pericia de los médicos y personal. Dichos señores han llegado a Barcelona y hoy salen para Paris por vía aérea. (Febus.).

La Voz, 18 de agosto de 1936.

Una tempestad que hace época.

El día 10 de agosto el cielo empezó a oscurecerse y en menos de cinco minutos la tempestad descargó sobre el campo de Aviación. Empezó a llover a cántaros, sorprendiendo a los mecánicos en su labor de anclar los aviones con cuerdas atadas a estacas. Los pilotos y mecánicos se refugiaron en las tiendas, pero de pronto se oyeron gritos de: ¡A los aparatos, a los aparatos! que amenazaban con desprenderse de sus ataduras.

Nos lanzamos todos fuera de las tiendas, hacia el campo agarrándonos a los aviones arrastrados por el vendaval. Caían granizos del tamaño de una nuez. La tempestad pasó tan rápidamente como había venido. Las tiendas se vinieron abajo. La cocina sufrió desperfectos y toda la extensión del campamento había quedado encharcada. Los aviones que eran lo más importante quedaron todos averiados. Como nota curiosa ninguno de los milicianos que se encontraban en el campamento ayudó en algo, ya que mientras duró la tormenta no se movieron de sus tiendas.

Los aparatos que habían salido antes de la tormenta, regresaron uno tras otro, tomando tierra sin dificultad.

Como hacia un calor insoportable en aquel mes de agosto y teníamos el rio Alcanadre a menos de un kilómetro y medio de distancia, decidimos bañarnos en sus aguas. Para ir al río utilizábamos algún coche disponible, el personal con autorización, del comandante Reyes. A los vecinos de Albalatillo les parecía extraño, eso del baño de los aviadores. Hasta que se reconstruyó el campamento con sus tiendas de campaña, el personal no imprescindible fue autorizado a dormir en Albalatillo.

Manuel Conde López,  «Memorias de un médico militar».

Aviador comunicando Sariñena Ahora 130836

Un aviado comunicando telefónicamente con el mando para recibir instrucciones, en las cercanías de Sariñena, en el frente aragonés. Ahora (Madrid) 13 de agosto de 1936.

El día a día del aeródromo

«A las ocho hemos desayunado en la carretera de Bujaraloz y después continuamos hacia el campo de aviación de Sariñena. Cuando llegamos al aeródromo, la mayoría de los aparatos se encuentran bombardeando los objetivos señalados por el alto mando y un avión de bombardeo se dispone a despegar con varias bombas de cincuenta kilos y una docena de las de diez. El comandante Reyes consulta una carta geográfica con el piloto y el bombardero, y a los pocos minutos el aparato desaparece en dirección a Almudévar a soltar su terrible carga. Antes de despedirme del comandante Reyes le pido que me permita volar en uno de los aviones de reconocimiento. Después de pensarlo bastante, me dice que vuelva otro día, que con seguridad volaré.»

Carrasco de la Rubia. La Vanguardia, 6 de septiembre de 1936.

Arturo Morera describe el día a día del aeródromo, de la vida de los aviadores a la banda de música de Alas Rojas o la emisora del aeródromo. Morera recogió como, el campo de aviación de Sariñena, fue un foco de actividades diversas, al margen de la función específica para la cual fue creado. La Banda de música ofreció conciertos en cuantas ocasiones se la requirió, en la propia Sariñena o en otros lugares del frente.

Como ya he dicho, los milicianos de Aviación eran combativos, pero reacios a cualquier tipo de trabajo manual no relacionado con el mantenimiento de los aeroplanos. En cambio, un grupo de ellos sintió una vocación especial por la música y organizaron una banda que después de muchas horas de ensayos, acabó por ofrecer un concierto cada día, al anochecer, en el campamento. Como la banda llegó a afinar lo suficiente, se llegó a organizar bailes las tardes de los domingos, a los que asistían vecinas y vecinos de Albalatillo y también de Sariñena. Al conjunto musical se le conocía como la Banda de Alas Rojas y llegó a merecer el espacio de toda una página de huecograbado en el diario La Vanguardia del día 11 de septiembre de 1996.

Ahora Alas Rojas

¡Ah! Y una sonora orquesta que ejecuta desde el «Himno Nacional» hasta la «Sinfonía heroica», pasando por «Mari Crú». Ensaya a primeras horas de la mañana y en «uniforme» poco menos que naturista.

Ahora, 15 de septiembre de1936.

ANC_1174827_1043705 Orquesta Alas Rojas Sariñena

Ensayo de la orquesta de la escuadrilla Alas Rojas. (Arxiu Nacional Catalunya. (ANC1-371-N-781).

La emisora

El día 5 de agosto ya se habla instalado en el aeródromo una emisora de radio que montó el que entonces era director de Radio Barcelona. Joaquín Sánchez Cortés, teniente de complemento de Transmisiones, y en la que actuaba de operador un hijo del conocido dirigente sindicalista Ángel Pestaña. La emisora se instaló en una tienda junto a la del comandante Reyes, jefe del campo, y entre las dos se colocó el palo de la bandera que servía a la vez de antena. Fue esta emisora la que dio a conocer a toda España el nombre de Escuadrilla de Alas Rojas, nombre con que se reconocía a la 3º Escuadrilla de Aviación destacada en Sariñena. (Morera Corull, Arturo. La guerra del 36 en Sariñena).

Víctor Pardo Lancina señala que la emisora emitió en onda corta de 42 metros y fueron sus operadores Pestaña, hijo del dirigente anarcosindicalista Ángel Pestaña, y Junyet.

La emisora de «Alas Rojas»

 

Desde el comienzo, se instaló una emisora de radio de onda corta de 42 metros, operada por Pestaña (hijo de Ángel Pestaña) y Junyent. El único servicio útil que prestó en los primeros tiempos fue el de proporcionar un excelente servicio meteorológico, captando las emisiones de nuestras emisoras y las del enemigo.

Las emisiones empezaban con la frase siguiente. «Atención, atención, habla la emisora de «Alas Rojas», instalada en el frente de Aragón, al servicio de la Generalidad y de la República.»

Pestaña era incansable, se pasaba horas dando noticias y buscando estaciones. Se efectuó un llamamiento a Radio Zaragoza, para iniciar canje de prisioneros que se realizó con buen resultado en el canje de la familia de Saldueña por dos aviadores militares prisioneros.

Manuel Conde López. Memorias de un médico militar.

«Encima de una torreta, sin embargo, el vigía vela el sueño de sus compañeros. En un barracón, la estación de radio del campo de Sariñena remite a las estaciones de todo el frente nuevas de la guerra. Se establecen circuitos y comentan los hechos más destacados. De vez en cuando, el zumbido de una radio facciosa interrumpe la emisión. Otras veces somos nosotros quienes nos dedicamos a captar las ondas facciosas y nos enteramos de las mentiras que hacen circular.»

María Vives, La Humanitat 19 de julio de 1938.

El periódico Alas Rojas

«En el mes de septiembre de 1936, apareció la publicación semanal titulada Alas Rojas P.S.U.-U.G.T. Era de un folleto de ocho a doce páginas impreso a dos tintas, en el cual se daban noticias y comentarios referidos al momento de la guerra. Para sufragar los gastos, se abrió una suscripción que fue muy bien acogida por muchas personas de nuestro pueblo. Al parecer, el periódico Alas Rojas dejó de publicarse a primeros del mes de marzo de 1937. Se imprimió en el propio campo, y en su cabecera figuraba el nombre de Sariñena como lugar de su edición» (Morera Corull, Arturo. La guerra del 36 en Sariñena).

Peródico Alas Rojas Sariñena

Periódico Alas Rojas nº 22, 27 de febrero de 1937.

Víctor Pardo lancina apunta que la publicación apareció en Sariñena el 27 de agosto de 1936 «Como publicación semanal (Rio Bizén d’o, Historia de la Prensa Altoaragonesa, Alas Rojas, Diario del Altoaragón, 14 y 21 de marzo de 2004), único portavoz de la aviación española y una de las primeras publicaciones estrictamente circunscritas al frente. En febrero de 1937 inicia una segunda época y renueva formato, y al mes siguiente se convierte en exclusivo «Portavoz de la Aviación en el Frente Aragonés»». Manuel Senabre figura como administrador de «Alas Rojas» . Sección Imprenta (Periódico Alas Rojas, nº 20, 13 de febrero de 1937).

«A partir de julio de 1937 se edita en Lérida. Alas Rojas constituye un documento excepcional para rastrear el acontecer del aeródromo de Sariñena y la vida de sus gentes. Se pueden consultar algunos ejemplares de Alas Rojas en la biblioteca del Instituto de Estudios Altoaragoneses, también en el Archivo CNT de la Solidaridad Internacional Antifascista así como en la Biblio teca della Fondazione Feltrinelli di Milano, sección Guerra civile spagnola.» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

Izado de la bandera

Es curiosa la noticia que da Maluquer sobre el regular uso del asta de la bandera que se instaló en los primeros momentos en el campo. Ni un sólo día dejó de Izarse la bandea tricolor de la Republica al amanecer y de arriarse a la puesta de sol, al toque de clarín y haciendo los honores correspondientes a una bandera de España. Era la única bandera de la nación que en los primeros meses de la guerra ondeaba al viento en todo el territorio aragonés sometido a la autoridad de las milicias catalanas. Era cosa sabida que las banderas que militaban las columnas eran rojas, rojinegras o como mucho las llamadas señeras catalanas.

La bandera de la 3ª Escuadra Aérea.

 

En Sariñena al igual que en el aeródromo del Prat de Llobregat y en el de Lérida se siguió la costumbre de izar la bandera todas las mañanas al amanecer y arriarla todas las tardes a la puesta del sol, con los honores correspondientes según las ordenanzas militares. La única bandera de la República que ondeaba al viento en el frente de Aragón, era la de la escuadrilla de «Alas Rojas» de la 3ª Escuadra de Aviación. Al amanecer cada mañana se formaba la guardia, que conducida por un sargento, marchaba hasta el mástil de la bandera al lado de la tienda del comandante Reyes. Mientras duraba la ceremonia todos los que estaban en el aeródromo, hacían frente a la bandera y permanecían en el primer tiempo del saludo militar. A la puesta del sol, con igual ceremonia se procedía a arriar la bandera.

Manuel Conde López. Memorias de un médico militar.

Consejos de Guerra y bodas

En el aeródromo se llegaron a realizar Consejos de Guerra, juicios populares y la aplicación sumaria de sentencias. En esta línea, Víctor Pardo Lancina, manifiesta como el 24 de febrero de 1937 «La Auditoría de Guerra del Cuartel General del Frente de Aragón, establecida en Sariñena, envía al ministro de la Guerra un escrito, urgiendo el nombramiento de funcionarios del Cuerpo Jurídico Militar, o en su defecto letrados conocidos antifascistass, para celebrar los numerosos consejos de guerra pendientes. Se propone a tal fin al catedrático y militante de Izquierda Republicana de Jaca Florentín Ara Pétriz, a Mariano Con- te Fernando y a José Vila Cuenca. Archivo de la Guerra Civil de Salamanca. P.S. Barcelona 397» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

«Consejo de Guerra a Sariñena. En el campo de aviación de Sariñena va tener lugar un Consejo de Guerra sumarísimo contra los soldados Jaume Domingo y Jospe Llori, acusados de desertores, de haber robado un automóvil y de haber falsificado documentos. Los acusados fueron detenidos en Benasque. Declaran acusando al cabo que desertó con ellos y que resultó muerto en la batalla que se produjo con motivo de la detención. La prueba testifical fue muy breve y favorable a los acusados. Fueron condenados a reclusión perpetua.» La Publicitat, 11 de marzo de 1937.

Ejecución espías. Hace tres días fueron fusilados en la Base de Aviación de Sariñena dos espías.

La Batalla: Número 42 _ 19/09/1936.

Igualmente se celebraron bodas y bautizos civiles. Víctor Pardo Lancina apunta que el comandante Reyes solía encargarse de oficiar las ceremonias, mientras el cura de Albalatillo, José Til Aso hacía de secretario y notario.

«Reyes «Tenía una cara huesuda y dura, y su risa era tristes. Hoy ha habido dos bodas -relata en su diario Adoración Abad, señalando el domingo 25 de octubre de 1936-, una la de la Correcta’ y la otra una forastera, pero ha sido con grandes ceremonias. Los ha casado el comandante Reyes. La boda se ha celebrado en los cuarteles, con un escuadrón de caballería todos formados (Pardo Lancina, Víctor citando a EHRENBURG, Ilya. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros» “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

Causa General Sariñena

En el campo de aviación rojo titulado «Alas Rojas» de este término municipal, y durante la dominación marxista, se dice se practicaron varios fusilamientos desconociendo nombres de las víctimas, fechas y quienes fueron los que intervinieron en aquellos desmanes. Durante mucho tiempo fue jefe de aquel Campo el Comandante Reyes y Comisario político un tal Franco. Desempeñaba también cargo de categoría en el mencionado aeródromo el Capitán Adonis Rodríguez.    

Actividad intensa

Mientras Radio Tolouse sunsurronea bailes y más bailes, en el Aeródromo de «Alas Rojas», se halla todo el personal volante discutiendo las incidencias del día y los actos por cada uno de ellos realizado, cuando de improvisto se oye el rugido de un aparato, del cual desciende el llamado Diablo Rojo, exponiendo a todos los compañeros allí presentes las proezas por él realizadas, entre las cuales narra que el día de hoy ha descendido a 300 metros en las mismas filas enemigas. Lleva el parte de su labor al Teniente Reyes, el cual se halla frente a un plano de Huesca, ensemismado en la orientación que deben seguir para que el resultado de los bombardeos sea excelente como el hecho en el día de hoy, en que se ha llevado a cabo una insuperable labor.

Periódico Alas Rojas, nº 20, 13 de febrero de 1937.

En los primeros tiempos de la contienda, la actividad aérea de «Alas Rojas, fue intensa y los aviones actuaban en los frentes y también sobre las ciudades de Zaragoza y Huesca, que sufrieron distintos bombardeos. La superioridad en número de aparatos de la aviación de Alas Rojas sobre la aviación franquista era evidente y de ella se aprovecharon algunos pilotos que hicieron un alarde de acometividad y eficacia tiente al enemigo. El que resultó ser el más popular de todos ellos fue Jesús García Herguido, a quien se le conocía con el sobrenombre de Diablo Rojo. El escritor soviético Illya Ehrengug visitó el campo de Sariñena y habló del ‘Diablo Rojo con elogio y admiración. García Herguido había derribado el día 4 de agosto el aparato pilotado por el jefe de la escuadrilla Breguet de la base de Logroño, recién instalada en Zaragoza. Al parecer, el Diablo Jesús era un personaje muy popular y querido por los chiquillos de Albalatillo y Sariñena ya que acudían al campo para saludarle y conversar con su héroe, y este, les atendía con su ancha sonrisa y una infantil complicidad.

Alas Rojas

Otras repercusiones de la presencia de los aviadores. en Sariñena, fueron mucho más amables, como los bailes que se organizaban los domingos por la tarde en el campamento. También fue muy sonado el festival que el comandante Reyes organizó a beneficio del Hospital de Sariñena y que tuvo lugar el domingo 13 de septiembre de 1936. El diario La Vanguardia se hizo eco del festejo y dio muchos detalles del mismo. El señor Maluquer explicita ampliamente el programa de los festejos y asegura que se cumplió con exactitud:

La banda Alas Rojas y el festival

A las 11 de la mañana, pasacalles por la Banda de Alas Rojas y colecta a cargo de unas guapas compañeras. A las 3 de la tarde, partido de fútbol entre los equipos de Sariñena F. C. y Alas Rojas», haciendo el saque de honor la esposa del jefe del campo. De 5 a 6 de la tarde, gran fiesta aeronáutica, con demostraciones de acrobacias y descensos en paracaídas. De 6 a 7 de la tarde, gran baile en el campo de fútbol, amenizado por la Banda de «Alas Rojas. A las 10 de la noche, gran festival artístico en el Teatro Romea, de acuerdo al siguiente programa: 1º.- Una gran producción cinematográfica. 2º.- Selectas piezas de música interpretadas por la Banda de Alas Rojas». 3º.- Los célebres payasos Pipo y Pipa. 4º.- Gran concurso de jotas. 5°- Actuación del compañero Vila, célebre estilista de canciones regionales. Y 6º.- Fin de fiesta por la banda de «Alas Rojas».

El festival fue todo un éxito, asistió mucha gente de Sariñena y de los pueblos cercanos y estuvieron también presentes en los actos el Teniente coronel Díaz Sandino. Consejero de Defensa de la Generalidad catalana, y el coronel Villalba.

La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.

mecánicos Alas Rojas Sariñena 2

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Dos mecánicos ajustan el motor de un Breguet XIX.

Alfonso de los Reyes González

Alfonso de los Reyes fue jefe del aeródromo como coronel retirado del Arma del aire. Además fue nombrado Delegado de la Consejería de Defensa de Cataluña de todas las fuerzas del frente de Aragón con sede en Sariñena..

Arturo Morera recogió uno de los primeros documentos documentados donde aparece Alfonso de los reyes como jefe superior de las fuerzas de Aragón, lleva fecha del 17 de octubre de 1936: -Don Alfonso de los Reyes y González de Cárdenas, comandante de Aviación y Jefe superior de todas las fuerzas y milicias que operan en el frente de Aragón. HAGO SABER: Que por decreto del ministerio de la Guerra de 28 de julio próximo pasado fue declarada zona de guerra el territorio de la región aragonesa ocupada por las fuerzas de la República. En su virtud….- Para Arturo «Era un bando excesivamente enérgico en el que amenazaba a las personas que propalaran bulos o noticias falsas. Les prevenía de su inmediata detención, y de su fusilamiento si se les considerara facciosos por los Comités locales del lugar en donde se encontraran.»

En el mes de diciembre de 1936 el comandante Reyes fue ascendido al grado de Teniente Coronel. (Periódico Alas Rojas, nº 20, 13 de febrero de 1937). Reyes dirigió el campo de aviación con mando y orden y así lo remarcó Illa Eremburg en su artículo sobre el aeródromo «La puntualidad y celo con que son cumplidas todas las órdenes emanadas del Jefe del Aeródromo Alfonso de los Reyes» (Periódico Alas Rojas, nº 20, 13 de febrero de 1937).

campo aviación sariñena oficiales

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Varios oficiales recorriendo el campo de aviación. Entre ellos, Manuel Conde López, Alfonso Reyes González, José del Barrio y el teniente coronel Grao.

Hablamos más tarde con el Teniente Coronel el cual nos expone claramente el porqué está desde el primer momento luchando por la causa de los trabajadores hispanos. Yo,—ha dicho el Teniente Coronel Reyes—, soy un antiguó y ferviente admirador de la causa trabajadora y ello es lo que me ha inducido a estar en estos momentos al lado de los oprimidos y de lo cual me siento orgulloso. (Periódico Alas Rojas, nº 20, 13 de febrero de 1937).

La aviación Alas Rojas

Los diferentes aviones que operaron en el aeródromo fueron los Nieuport-52, Breguet XIX, o Vickers Vildebeest; los aviones civiles el Fokker F-VII de la LAPE (Líneas Aéreas Postales de España); o el Latecoere 28 (ex-Air France).También avionetas como la De Havilland 87.»GRIEGC (Los aviones de la escuadrilla Alas Rojas de Sariñena). En noviembre de 1936, el embajador ruso Antonov-Ovseenko, reconocía que en el frente de Aragón «No hay ni un solo avión moderno, Las unidades llevan atascadas en trincheras húmedas más de dos meses. Sólo será posible enardecerlas y entusiasmarlas a través de algún medio de inspiración potente. Lo mejor sería proporcionales aviones modernos» (Documento enviado a Moscú desde Barcelona. Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

Aviones de la Escuadrilla Alas Rojas de Sariñena (Huesca) en agosto de 1936.
 
1.Breguet XIX
2. Nieuport 52
3. Vickers Vildebeest.
4. Dragón Rapide
5. Fokker VII
6. De Havilland Moth
7. M3.
 

En el mes de diciembre de 1936 llegaron al aeródromo de Sariñena los primeros aparatos rusos llamados Chatos, cita Arturo Morera y en enero de 1937, con la llegada de los pilotos rusos y la disolución de la Escuadrilla Alas Rojas, operaron diferentes escuadrillas de aviones rusos compuestas por Polikarpov I-15 “Chato” y Polikarpov I-16 “Mosca” GRIEGC (Los aviones de la escuadrilla Alas Rojas de Sariñena).

Los aviones de caza soviéticos llegaron pilotados en su mayor parte por oficiales de la U.R.S.S. Pero también había pilotos españoles como el héroe de la aviación republicana, capitán Andrés García Lacalle, quien tenía el mando de una de las dos patrullas de Chatos que se trasladaron a nuestra villa desde el frente de Madrid a mediados del mes de enero de 1937. La otra patrulla de aviones soviéticos 1-15 que llegó a Sariñena. estaba mandada por el ruso Iván Kopets (José).

García Lacalle en su obra Mitos y Verdades habla de su compañero José a raíz de la visita que le hizo a su paso por Leningrado en febrero de 1938. José, -dice García Lacalle-era entonces un gran personaje. Era el piloto más condecorado y ascendido de cuantos habían luchado en España. Le habían concedido la Orden de Lenin y nombrado diputado del Soviet Supremo. Tenían en aquel momento el mando de toda la aviación de caza del sector de Leningrado y mandaba al parecer más de mil aviones.

Al campo de aviación siguieron llegando nuevos pilotos y nuevos aparatos, también aviones los cuales se les adaptaba para transformarlos en militares y especialmente destinados a bombarderos. Algunas avionetas civiles se utilizaban únicamente para servicios de enlace entre Sariñena y Barcelona, o entre Sariñena y las distintas columnas del frente.

La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. La tripulación de un Breguet XIX recibe instrucciones antes de despegar.

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. La tripulación de un Breguet XIX recibe instrucciones antes de despegar. Agencia EFE.

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«El modelo conocido popularmente como Chato es el avión de origen soviético, aunque también se llegó a fabricar en España, Polikarpov 1-15 o en su versión I-152 -Super-Chato. Una interesante relación de armamento de distinto tipo en ARMERO, José Mario y González, Manuel, Armas y portrechos de la Guerra Civil Española, Madrid, Ediciones Poniente, 1981, 186 págs.» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

 
Alas Rojas Alcañiz

El destacamento de Alas Rojas también estuvo destinado en Alcañiz.

Maldonado recoge como en el campo de aviación de Sariñena, se adaptaron algunos de los aviones civiles más potentes  para ser utilizados como bombarderos «De una forma muy rudimentaria se les añadían tubos de hierro, se hacían agujeros para soltar las bombas y otros remiendos bastante burdos». Según Maluquer “Estos tubos llevaban soldado en su extremo el dispositivo de suspensión y lanzamiento (suelta) de las bombas que iban colgadas en posición horizontal. Para lanzarlas, el bombardero tenía que sacar el brazo por la ventanilla y tirar de la palanca que actuaba de pasador que sujetaba la bomba. Para lanzar las bombas incendiarias se abrió un agujero en el piso del fuselaje. Como que las bombas de aquel tipo eran de tamaño muy reducido, iban metidas en cajas de zapatos (cartón) y se lanzaban por cajas enteras». (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

También, Maldonado recoge la forma de comunicarse entre los diferentes aviones, descrito por J.J. Maluquer «Mediante señales con banderas se transmitían las órdenes a los restantes aparatos de la escuadrilla en la forma siguiente: Para ello se procedía el ametrallador del bombardero era el trasmisor de señales y estaba situado en la torreta de la cola con medio cuerpo fuera y las banderas de señales en la mano. Llevaba una pierna atada a una cuerda que [otro compañero] tenía cogida por el otro extremo. Cuando éste veía que se acercaba el objetivo, daba un tirón suave a la cuerda y el observador sacaba y agitaba la bandera verde. Todos los aviones que seguían al Fokker cerraban la formación para lograr una buena concentración sobre el objetivo. Cuando [el compañero] a través del visor tenía centrado el objetivo, daba un fuerte tirón a la cuerda y [el ametrallador] sacaba la bandera roja. Entonces todos los aviones lanzaban simultáneamente sus bombas». (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

Los últimos románticos

En los primeros tiempos de guerra, la aviación republicana escribió páginas de un heroísmo épico. Había que sentirse poseído de un entusiasmo inflamado, de un alto sentido del deber, para volar en los escasos aparatos que en aquellos tiempos disponía el pueblo para hacer frente a los Heinkel, que empezaron entonces a hacer su aparición, tímida al principio, pero que ha llegado a grados de salvajismo como difícilmente puede imaginar ninguno que no haya sido testigo de los crímenes cometidos por la aviación italo-alemana al servicio de la facción.

Nuestros pilotos de aquellos tiempos, como nuestros milicianos, eran románticos. Iban a hacer la guerra a los facciosos animados por un espíritu de rebeldía contra quienes pretendían esclavizarlos; hacían la guerra de una manera muy similar a como la hacían los guerrilleros de siglos pasados, cuando, sin tener en cuenta el número ni la diferencia de armamento, se lanzaban al asalto, el pecho descubierto, ofreciéndolo el enemigo como si nada tuviera que pasar, con un grito de alegría en los labios, un grito de triunfo.

Así también nuestros pilotos de aquellos primeros tiempos plantaban cara, con sus aparatos destartalados, en los modernísimos aviones italiano alemanes, y cuando no podían abatirlos con las ametralladoras lanzaban su aparato contra el enemigo y conseguían abatirlo.

El precio de esa victoria era siempre la muerte.

Pero eran unos héroes…

Eran los últimos románticos.

Cumplirán su deber muriendo por la patria.

María Vives, La Humanitat 19 de julio de 1938.

Escuela de aviación

Según Carlos Lázaro Ávila (La escuela de aviación libertaria de Barcelona. Asociación de Aviadores de la República. ADAR), en el campo de aviación de Sariñena debió de realizarse  formación de aviadores «En El Prat de Llobregat, la Generalitat inició los cursos de formación aprovechando los Servicios Aeronáuticos de Cataluña cuyas prestaciones le habían sido devueltos al gobierno catalán después de las elecciones de febrero de 1936. La formación apresurada de pilotos civiles se hizo también, en menor número, en el campo de aviación de Sariñena, Los Monegros.»

J.J. Maluquer, en su obra La aviación de Cataluña en los primeros meses de la guerra», se refiere sobre el aprendizaje en el campo: «Uno de los trabajos más efectivos del capitán Domingo, fue la serie de conferencias que dio a los ‘novatos’ incorporados a la Aviación militar, sobre temas de Aviación. En forma sencilla y muy clara, nos explicó el funcionamiento del avión, de las ametralladoras, de los lanzabombas eléctricos o mecánicos que llevaban los Breguet-19, el visor de bombardeo y la bomba explosiva» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”). Según Víctor Pardo, Domingo Rosich fue un «Ingeniero industrial, republicano de firmes convicciones, gozaba de un gran prestigio profesional y una aureola personal indiscutibles, ya que había sido el defensor del capitán Salvador Sediles, juzga- do por la sublevación de Jaca con los capitanes Galán García Hernández y ocurrida el 12 de diciembre de 1930 Enrique Domingo fue testigo en Madrid de la muerte accidental de Durruti, al que se le concedió el grado de teniente coronel a título póstumo».

La Legión Roja

Al aeródromo llegó la Columna Alas Rojas, del PSUC, unidad que salió de Barcelona el 28 de julio de 1936 para desplegarse en el aeródromo de Sariñena “Donde comenzó a funcionar un aeródromo por la 3ª Escuadra Republicana”. Comandada por el Comandante Reyes, la columna respondió a una agrupación de cuatro centurias. A partir del 3 de agosto recibió una importante de contingentes, durante todo el mes” (Les Milícies Antifeixistes de Catalunya. Voluntaris per la libertat. Berger, Gonzalo). Se encargaron de proteger el aeródromo.

En el aeródromo se instalo una unidad de choque llamada Legión Roja comandada por Piquer. Contaba con los capitanes Abejos, Laforque, Arnal y Soler; los tenientes Aranguren, Aymó, Dominguez, Pedro Mir, J.M. Gimenez, Antonio Roger, J.M. Pérez, Loallen, Antein, Baiquer, López, Villacampa, Martínez, Biule y Garrido, los sargentos Avenosa. Moreno, Amigó, Gueal, Fernández, Sanablo y López Cuenca, el cabo Sacanoll y Javier Morell, Juan Blazquez, Enrique Escudero, Fifi Piquer, Josefina Buesa, Feliciano Soto, Manuel Ferrer, Manuel Nadal y Francisco Soler. (Periódico Alas Rojas nº 22, 27 de febrero de 1937).

La Gloriosa

A pesar de ser muy conocido el aeródromo con el sobrenombre de «Alas Rojas», en mayo de 1937 pasa a denominarse como campo de Aviación de Sariñena. Para Arturo Morera, los aviadores de Sariñena ya no mencionaban con el calificativo de «Alas Rojas» a la fuerza aérea establecida en nuestro pueblo -Entre otros motivos, porque en ese tiempo ya había arraigado la costumbre de designar a la aviación en todo el territorio republicano con el apelativo de «La Gloriosa».-

La Gloriosa

Bajo un cielo luminoso, maravillosa sinfonía en azul que sólo hemos visto en el Mediterráneo, tamizando los rayos violentos del sol, aquel avión era el presagio de lo que más tarde debía convertirse en el azote del fascismo internacional y de los militares traidores a la patria; lo que más tarde trasladaríamos a las páginas de la Historia con el nombre inolvidable de «La Gloriosa».

Aquellos hombres que luchaban a pecho descubierto dieron paso y formaron la base del magnífico Ejército que hoy tiene la República.

Y aquellos pilotos de los que recordamos sólo Cabré, Freire, Galarza, Erguido dieron paso a «La Gloriosa de hoy, sirviendo de ejemplo a los bravos pilotos de la República que siembran el terror en las filas facciosos y que cuando vuelan sobre nuestros campos, sobre nuestras ciudades, parecen infundir un valor, una firmeza, base de la gloriosa gesta que está escribiendo el pueblo español.

Sin aquellos milicianos abigarrados no habría sido posible construir el actual Ejército de la República.

Sin aquellos pilotos temerarios y heroicos, tal vez hoy «La Gloriosa» no existiría.

Pero hoy, cuando la República cuenta con un material magnífico, que nada debe envidiar al de sus enemigos; cuando cuenta con unos pilotos decididos y valientes, héroes también en cien ocasiones, el recuerdo de aquellos que fueron el punto de partida de las formidables fuerzas aéreas de hoy, sirve de ejemplo a los jóvenes defensores de las libertades patrias que sienten trepidar cerca de su corazón el alma de esos gigantes y saben hacerse dignos de los últimos románticos.

María Vives, La Humanitat 19 de julio de 1938.

Actividad militar

«Servicio de descubrimiento. Sariñena. A las cuatro de la tarde han pasado escuadras de aparatos de caza republicanos. El viento era fuertísimo, pero no ha impedido que los Chatos efectuasen un minucioso vuelo de reconocimiento sobre el Sector de Huesca, descendiendo después hacia el vedado de Zuera, avanzando sobre Zaragoza. El vuelo ha estado de gran amplitud y durante ellos, los aparatos republicanos no han encontrado aviones rebeldes. Ayer por la tarde, dos escuadras de cazas leales se van internar por la zona facciosa y llegaron hasta Pamplona, Volvieron sin novedad.» 

La Publicitat.

Cabré, el primer piloto caído

El 14 de agosto de 1936, el piloto José Cabré Planas atacó un bombardero Niuport, en el sector de Tardienta, desconociendo que había un caza protegiéndolo. Maldonado la cita como la primera muerte entre los aviadores (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

Queda fuera del alcance de estos relatos, el pormenorizar las acciones llevadas a cabo por los vetustos aviones de Alas Rojas, pues fueron tan numerosas como eficaces. Pero no voy a prescindir de hacerme eco de la actuación anecdótica que relata el ingeniero Maluquer en su obra, y que protagonizó el piloto Francisco Cabré. El maquinista de un tren que debía transportar municiones y aprovisionamientos a Tardienta en los primeros días de agosto, se negó a seguir visto no se prestaba al tren protección aérea. El jefe de la estación de Sariñena se puso en contacto telefónico con el comandante Reyes y este ordenó el servicio correspondiente. El único armamento que llevaba el avión de Cabré era un mosquetón con el cual poco hubiera podido hacer ante la probable presencia de la aviación enemiga. Pero el tren partió de Sariñena, ya que tamo el maquinista como los milicianos que custodiaban el tren se dieron por satisfechos con la presencia del avión de Cabré que iba dando vueltas a lo largo del trayecto. El convoy llegó sin novedad a su destino y todos se sintieron contentos con la misión cumplida.

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Personal de tierra junto a un Dragón Rapide a punto de despegar.

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Personal de tierra junto a un Dragón Rapide a punto de despegar.

Tampoco debo pasar por alto el trágico balance de un combate aéreo sobre el cielo de Tardienta el 19 de octubre de 1936. Todos los periódicos de Barcelona reseñaron el suceso y Sariñena se conmovió por la muerte en combate de los pilotos de Alas Rojas. Los cadáveres del capitán Luis Aguilera y del alférez Ferret fueron trasladados a Barcelona y a su entierro asistieron las primeras autoridades de aquella ciudad. Los restos del sargento José Fernández y del bombardero Navarro recibieron sepultura en el cementerio de Sariñena.

Al acto del sepelio efectuado el día 20 asistieron la banda de música de Aviación, varias secciones de soldados y milicianos del aeródromo, milicianos de distintas columnas, las delegaciones de los Comités de Tardienta y Sariñena y numerosas gentes de nuestra villa. Presidieron los actos el jefe de las fuerzas de Aragón, comandante Reyes, el coronel Villalba y el comisario de aviación Franco. Además de los cuatro muertos, resultaron heridos en el combate aéreo el capitán Boyer y los alféreces Jaime Buyé y Mariano Foyé.

La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.

El enemigo se está atrincherando en Almudevar -había dicho el jefe de las fuerzas Hay que impedir estos trabajos de fortificación.

Con la sonrisa jovial de siempre aquellos románticos subieron a los aparatos. Allí no había cazas ni bombarderos Tan sólo El Dragón, El Abuelo, un avión de turismo, podía pasar por un aparato pesado. Las ametralladoras, bien engrasadas, en su lugar; los motores, en marcha; los hombres, a punto.

Los aviones, lentamente, empezaron a correr por el terreno. Dieron una vuelta por el campo cogiendo altura y pusieron proa a Almudévar. Al pasar por delante nuestros pilotos nos hicieron un gesto de «adiós». Los aviadores siempre que salen su gesto es más de «adiós, que de «hasta pronto».

En Almudévar les esperaban cuatro «Heinkel» flamantes, entregados a los facciosos con su equipo a cambio y de un pedazo de tierra española. Los tiene nuestros, a pesar de su inferioridad y de un pedazo de tierra española. Los nuestros, pese a su inferioridad manifiesta, no rechazarán el combate. Y éste se libra, terrible, emocionante, a muerte.

-Fue lo más emocionante que hemos presenciado- nos decían, días después unos combatientes de aquel sector, testigos presenciales de la hazaña heroica de nuestros pilotos.

Resultado: Otros cuatro héroes a añadir a la lista de los caídos en defensa de la patria: Aguilera, Ferret, Fernández y Navarro. Foyé, que iba con ellos, moría unos meses después a consecuencia de las graves heridas recibidas en esa acción épica.

Tres aparatos nuestros, entre ellos El Abuelo, abatidos.

Pero la aviación alemana sufría la primera derrota. Dos Heinkel habían sido abatidos.

Los últimos románticos habían cumplido su deber.

María Vives, La Humanitat 19 de julio de 1938.

Avión enemigo caído

«Un avión faccioso caído en nuestro poder. Lérida, 21. — Con dirección a Barcelona pasó un camión que transportaba un avión, que fue capturado en el frente de Caspe, por nuestros milicianos, diez kilómetros dentro de las líneas enemigas. El piloto y él observador, fueron llevados a la base de Sariñena y él aparato retirado a nuestras posiciones de Caspe.»

La Batalla: Número 44, 22 de septiembre de 1936.

Bombardeo de posiciones enemigas

Durante el mes de octubre de 1936, la aviación ayudó a las operaciones sobre Tardienta, Ermita de Santa Quiteria y zona de Alcubierre. En diciembre “La aviación mantuvo la presión sobre las tropas que cercaban Huesca, ayudando también las operaciones  que se realizaban en torno a la sierra de Alcubierre» (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

«A las dos y media de esta tarde han salido del campo de aviación de Sariñena, seis aviones que han ido a bombardear las posiciones enemigas, principalmente las de Zuera.»

La vanguardia 6 de octubre de 1936.

Entierro de las heroicas víctimas de un combate aéreo

Barbastro 21 (0.30 m.). — Ayer tarde se efectuó en Sariñena el entierro de los cadáveres de los aviadores capitán Luis Aguijar, alférez Ferret, sargento Juan Fernández y bombardero Navarro, que perecieron en el combate aéreo habido ayer a última hora de la tarde entre Granen y Tardienta, y en el que, como ya dijo el consejero de Defensa de la Generalidad, nuestros aviadores lucharon en condiciones manifiestas de inferioridad.

Entierro aviadores

Además, resultaron heridos el capitán Bayer, el redactor de «La Publicitat», alférez Mariano Folie y el alférez Mullet. –  Este, a pesar de tener un brazo ametrallado, llegó a abatir a un trimotor faccioso. El alférez Rou, por su parte, con su aparato de caza, abatió a otro Fóker enemigo pilotado por aviadores alemanes.

El entierro de los héroes de esta batalla aérea lo presidieron el comandante Reyes, el jefe de las fuerzas de Aragón, coronel Villalba, y el comisario de Aviación, señor Franco. En la comitiva figuraban representaciones diversas, secciones de soldados y milicias y los representantes de los Comités locales de Sariñena y Tardienta. Sobre los féretros fueron colocados varias coronas y ramos de flores. (Febus.)

La Voz, 21 de octubre de 1936.

alas rojas camión bombas sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Camión utilizado como taller de fabricación de bombas aéreas.

taller mecánico Alas Rojas Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Taller mecánico del aeródromo.

aterrizaje Alas Rojas Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Aterrizaje de un Breguet XIX.

La aviación nacional

El 22 de abril de 1937 llegan a Zaragoza, «Como apoyo a la aviación que actuaba en el Frente de Aragón», dos escuadrillas Fiat del grupo italiano “As de Bastos». «Los aviones alemanes de la legión Condor tardarían en llegar a Aragón unos meses», cuando, a finales de octubre de 1937, con la caída de Asturias, las fuerzas pasan a operar en el frente de Aragón. A mediados de marzo de 1938 la aviación Condor se encarga del frente norte de Aragón mientras la aviación italiana del sur (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

Bombardeo del aeródromo

Víctor Pardo relata que a principios de febrero de 1937 el aeródromo fue bombardeado. Lo recoge a través de las memorias del auxiliar armero Antonio Ráfales Gil, destinado en Sariñena hasta abril de 1937, quien recuerda cómo a principios de febrero de 1937 «Un avión franquista modelo «Junkers-52», bombardeó a las diez de la noche el aeródromo de Sariñena con bombas de 12 kg y un poderoso material incendiario fabricado con una aleación de aluminio. En el campo de aviación apenas hubo desperfectos, pero en la localidad de Albalatillo si se produjeron varios incendios de consideración.»(Ráfales Gil, Antonio, Aviación Republicana, Escuadrilla ‘Alas Rojas Sariñena, en la revista Veteranos Aviación, Barcelona, Asociación de Aviadores de la República, 2000, pp).

A raíz de ello, «El comandante Reyes se puso en contacto con el teniente coronel Felipe Diaz Sandino consejero de Defensa de la Generalitat y dos días más tarde envió un 1-15, -Chato» pilotado por el ruso blanco apodado Mateo Rodrigo. Ese mismo día, de nuevo a las 22 horas, se recibe un aviso desde el puesto de observación de Alcubierre poniendo en alerta al aeródromo. «Se oye el zumbido del Junker 52 y el ‘Chato’ despega y toma altura en curva de vuelo sobre el campo, con tan buena suerte, según nos explica el comandante al día siguiente, que sobre los 3.000 metros y encima de él se encuentra al Junker, al que ataca por debajo con sus cuatro ametralladoras y lo incendia, a continuación explota y sus restos caen a una riera seca que tenemos en la parte norte, cerca de nuestro polvorín del aeródromo. Una llamada telefónica desde Lanaja da cuenta de la existencia del cadáver de un aviador. El comandante Reyes ordena el traslado al cementerio de Albalatillo y un informe de los hechos. Al parecer, dos aviadores saltaron en paracaídas y fueron sorprendidos por los miembros de un control de carreteras que les die- ron el alto, desoyendo la orden y provocando un tiroteo que acabó con la vida de uno de ellos, mientras el otro lograba huir en dirección a la Sierra de Alcubierre. El teniente mecánico del aeródromo, Alfonso Castro, reconoce el cadáver del piloto de la Lufthansa, por haber coincidido con él en El Prat, se trata de Vsévolod Marchenko, de nombre español Vicente Marchenko (Revista Acroplano, 1997, n° 15, p. 31.). A la mañana siguiente, se hallaron los restos del avión derribado así como tres cadáveres calcinados e indocumentados.» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

En verdad, Vsévolod Marchenko falleció el 14 de septiembre de 1937, fusilado en las inmediaciones del aeródromo de Sariñena. Suceso que se narra más adelante.

Víctor Pardo Lancina continúa con el relato de Ráfales Gil «Según comentarios del comandante y por las explicaciones del piloto del ‘Chato’, éste escribe en su parte que ha sido el primer derribo en combate nocturno de toda la historia de la aviación, y eso ocurrió en Sariñena, en febrero de 1937″. La represalia nacionalista no se hizo esperar y el 18 de febrero «Tres Heinkel de la Legión Cóndor A/88 al mando del oficial alemán Hanz Runze, bombardean en Tierz, Tardienta y Sariñena, aunque produciendo sólo algunos desperfectos de escasa consideración.» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

Combate aéreo sobre Zaragoza

Sariñena 17 (9 m.)

Ha ocurrido un episodio interesante en el frente aragonés: Uno de nuestros trimotores salió en pleno día a bombardear Zaragoza. Apenas este había comenzado a descargar sus bombas, el observador vio a tres aviones alemanes que subían rapidísimamente para intentar derribar nuestro aparato. El piloto del aparato republicano, sin perder la serenidad, esperó a que el bombardero descargara los explosivos, que cayeron en los lugares a los cuales habían sido destinados, y entonces efectuó una maniobra que desconcertó a los cazas facciosos y tomó el rumbo de mi aeródromo. Los aparatos enemigos Iniciaron la caza, y en aquel momento dejaron tres aparatos nuestros, cuyos pilotos habían visto lo que ocurría, con los aparatos leales, casi encima de Zaragoza, presentaron batalla a los enemigos, y hubo unía lucha emocionante que duró pocos minutos, batalla que terminó con el descenso rápido, propio de una fuga, de los aviones enemigos. El trimotor regresó normalmente a su base.


Ferbus. La Voz (Madrid). 17 de mayo de 1937, página 3.
 
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Sariñena. – Uno de los aviadores de nuestra escuadra escuchando órdenes telefónicas por medio de un aparato instalado por las Milicias populares. (Foto Puig Forran). La Vanguardia 13 de agosto de 1936.

 

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Vista aérea del aeródromo. Alas Rojas, Salvador Trallero.

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Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Un brigada mecánico de aviación, asimilado al empleo de Teniente. (Sin identificar).
 

Parte de Aviación

En la edición del viernes 11 de junio de 1937, La voz del combatiente, diario de los comisarios de guerra del ejército del pueblo, recogía un bombardeo sobre la estación ferroviaria de Sariñena y a la vez daba cuenta de la existencia del cercano aeródromo de alas Rojas.

Zona del Este.— Esta mañana fue bombardeada la estación de Sariñena, en las inmediaciones de cuyo pueblo fue descubierto un aeródromo en construcción, en el cual habla varias apisonadoras.

Bombardeo estación sariñena

Ataque infructuoso de la aviación facciosa al aeródromo de Sariñena

Ataque aeródromo sariñena

El Liberal, 22 de junio de 1937.

Veinticinco aparatos enemigos intentan bombardear Sariñena

Sariñena, 21. —Continúa la tranquilidad en estos frentes. Las fuerzas republicanas siguen dedicadas a la tarea de fortificar las posiciones que en estos días pasados cayeron en su poder.

La aviación enemiga, con veinticinco aparatos, hizo una incursión sobre el aeródromo de esta ciudad, en donde había algunos aviones, no pudiendo llevar a cabo su objeto, porque pronto se encontraron frente a un enemigo numeroso que le salió al paso. En la huida arrojaron algunos artefactos, que no causaron daños, y solamente produjeron dos heridos.

Aunque no hay actividad guerrera, sigue el movimiento en las diversas posiciones. Nadie se está quieto y todos cumplen un buen papel en estos días de descanso, continuación de otros de gran tarea y precursores quizá, de otros de no menor trabajo. —Febus.

Bombardeos Sariñena

Ahora, 26 de junio de 1937

Barcelona, 21. —Comunicado de la mañana del Ejército del Este: «Esta mañana, la aviación facciosa atacó el aeródromo de Sariñena. Inmediatamente se elevaron nuestros aparatos y los facciosos huyeron, dejando caer algunas bombas, sin que causaran daños. En Jos demás frentes, sin novedad.»

La Libertad, 27 de junio de 1937.

Ataque faccioso

Ejército del aire

—La Aviación leal bombardeó las posiciones enemigas en los sectores de Puebla de Albortón. Cuando aparatos facciosos pretendían atacar el aeródromo de Sariñena, en las primeras horas de la noche de ayer, fueron derribados dos de ellos. Ambos cayeron en nuestro territorio. Se trata de dos trimotores muy modernos. Sus tripulantes sucumbieron.

Ahora, 16 de septiembre de 1937.

Ayer los aviones facciosos volvieron a hacer acto de presencia y nuevamente se les ha castigado siendo perseguidos por nuestras ametralladoras y cañones antiaéreos, y nuestros artilleros dieron al traste con la incursión, que cayeron pesadamente cerca de Sariñena sucumbiendo sus tripulantes. —Febus.

Solidaridad Obrera, 17 de septiembre de 1937.

Dos Junkers, Derribados

Sariñena, 16, 10 noche. Nuestros cazas derribaron el martes a dos «Junkers», que cayeron, uno en las mismas alambradas del campo de aviación y el otro a trescientos metros de nuestras posiciones. Poco antes se habían oído las explosiones de cinco bombas que habían dejado caer en el pueblo de Albalatillo. Algunas patrullas salieron en busca de los pilotos de los aparatos.

Junto a los «Junker» derribados había fusiles ametralladoras y pistolas modernísimas.

Uno de los pilotos resultó con la cabeza destrozada a consecuencia de no haberle funcionado el paracaídas, cuando se lanzó del aparato.

Otro se salvó y al darle el alto nuestros soldados, no obedeció e hicieron fuego sobre él matándole.

Se trata de pilotos alemanes pertenecientes al Cuerpo de Aviación de Alemania.

Diario de Almería: periódico independiente: Año XXVI Número 7195 – 17 Septiembre 1937.

Derribo nocturno

jSalud a los héroes del aire! magnifica jornada de la «Gloriosa» en combate nocturno derriba tres aviones facciosos en Sariñena entre los cadáveres facciosos se encuentra el del célebre piloto alemán Manowski.

SARIÑENA, 16. —A las nueve de la noche del martes fueron oídos aviones que volaban sobre esta villa y sus proximidades. Rápidamente funcionaron las señales de alarma, y las gentes acudieron, en su mayoría, a los refugios, aunque hubo quien prefirió quedarse en la calle o salir al campo. Dé improviso se vio iluminado el espacio por la luz de u n a bengala, lanzada desde gran altura, y al momento pudo versea también como se encendían todas las luces del campo de Aviación. Con un intervalo de varios segundos se oyeron dos ráfagas de ametralladora y se vio cómo descendía una especie de bólido que dejaba, tras sí una estela de humo densísimo. Momentos más tarde se supo que nuestros «cazas» habían derribado dos trimotores alemanes marca «Junlsers», y los restos de uno de ellos estaban parte cerca de las alambradas del campo y otra parte a trescientos metros del borde de una montaña. El hecho quedó confirmado y produjo extraordinario júbilo entre las gentes que no mucho rato antes habían oído la explosión de cinco bombas en las proximidades del. pueblo de Albalatillo.

Ahora 17 9 37

Por nuevas noticias llegadas se supo que otro «Junkers» había caído, sin duda, a muchos kilómetros del campo de Aviación. Se le vio huir incendiado. Los jefes del campo formaron unas patrullas que salieron en busca de los restos del avión y de los tripulantes. Los servicios se organizaron inmediatamente. También se ordenó que otra patrulla custodiara los restos del trimotor que cayó en las proximidades del campo y recogiera los cadáveres de los tripulantes. Se encontraron, en efecto, dos cadáveres carbonizados, y junto al trimotor, un paracaídas. Indudablemente algún tripulante se había arrojado al notar que el aparato se hundía en el espacio y descendió normalmente, consiguiendo huir fuera del alcance de nuestros fusiles. Salieron motoristas en todas direcciones con la orden de detener a cualquier sospechoso que encontraran y de recorrer para ello los campos, los olivares y los repliegues del terreno donde se suponía podía haber encontrado amparo el fugitivo. Junto a los restos del «Junkers», cerca del pueblo, se encontraron fusiles ametralladores y pistolas ametralladoras, armas realmente magníficas. Extrañó que los tripulantes llevasen fusiles en el aparato. El fuego había destruido cuanto no era de acero en las armas mencionadas. Ampliado el radio dé investigación se halló el cadáver de otro alemán con la cabeza destrozada. Sin duda el paracaídas no funcionó y el descenso fue mortal. A juicio de los técnicos faltaba otro tripulante, y las patrullas realizaron un trabajo penosísimo, por lo abrupto del terreno y por el frío.

Una patrulla descubrió a un hombre, vestido de aviador, que emprendió la fuga al ser sorprendido. Se le dio el alto varias veces, y como persistiera en desatenderlo hicieron fuego sobre él. Según la documentación que se le encontró, era Un oficial alemán.

Ha sido inútil cuanto se ha hecho para hallar el segundo aparato. Desde un observatorio de Caspe se vio cómo un gran avión describía una inmensa parábola de fuego para ir a caer entre Sástago y Escatrón. A última hora se ha recibido la noticia de que uno de los aviadores alemanes muertos es el famoso piloto Manowski, de la Laufthansa, que ha sido maestro de grandes pilotos europeos.

Ahora, 17 de septiembre de 1937.

El suceso debió ser la noche del martes 14 de septiembre de 1937. En la oscuridad de la noche, un Junkers 52 pilotado por el ruso blanco Vselod Marchenko fue derribado por V. Eryomenko sobre el aeródromo oscense de Sariñena y se culminaron con los triunfos de E. Stepanov (ADAR)

Ivan Profimovich Eremenko, volando un I-I6 derribó un Ju-52 de 2.G/22. El Ju-52, con código 22+61, contaba con tripulación española: Carlos Muntadas Salvado-Prim, Carazo Calleja, el ingeniero sargento Romero, el operador de radiocomunicaciones cabo Aparicio Velasco, y el artillero José Ramón Blasco Lavfn. «El segundo piloto era ruso, el teniente Vsevolod Marchenko. Sólo Blasco sobrevivió y pudo llegar a sus líneas después de saltar; Marchenko también se lanzó en paracaídas, pero fue ejecutado por los republicanos. Fue una ocasión única, a miles de kilómetros de su madre patria, ¡un ruso había derribado a otro ruso!. Después de esas acciones sobre Sariñena, los insurgentes no hicieron incursiones nocturnas por más de dos meses.» (120.- Mejores aviadores en la Guerra Civil Española- F.A.R.E).

Jesús Salas Larrazabal, en su obra La guerra de España desde el aire, p. 267, sitúa el accidente en la misma fecha del 14 de septiembre de 1937. (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

Bombardeo del aeródromo

Septiembre de 1937 “En este mes se iban a repetir varios bombardeos sobre los aeródromos de Sariñena y Bujaraloz”. Igualmente, el 15 y 31 de octubre de 1937 fue bombardeado el aeródromo de Sariñena. Durante ese mes se bombardearon las poblaciones de Bujaraloz, Grañén y Sariñena (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

Causa General Sariñena

En el expediente de la causa Genreal de Sariñena, figuran los nombres de Abelardo Carazo y Sr. Muntaner, aviadores de derechas, que aparecieron cadáveres, incendiados en el Saso de Albalatillo. La causa general de Sariñena señala como responsables a los directivos del campo de aviación (ES.28079.AHN//FC-CAUSA_GENERAL,1412,Exp.1) .

Causa general de Albalatillo

La Causa General de Albalatillo da cuenta de la muerte del «teniente de aviación llamado Marchenco»,  se decía «El ruso blanco». Fue encontrado el 13 de septiembre de 1937, en el término municipal de Sariñena, partida Los Sasos. Presentaba «Magullamiento general por accidente de aviación» pues «Cayó el aparato que pilotaba incendiado, en combate con los cazas de Alas Rojas».

Vselod Marchenko, Anecdotario del soldado

Luchó en nuestras filas un aviador ruso que terminó sus estudios de la carrera naval y fue enviado después a ocupar el puesto en la aviación naval, llegó a jefe de escuadrilla, alcanzando notable distinción.

Al desencadenarse en Rusia la guerra civil pudo escapar.

Cuando la guerra del Japón contra los chinos consiguió un puesto en la aviación japonesa llegando a verse en el mando supreme, siendo jefe de toda la aviación anti-bolchevique, hasta que derrotado tuvo que huir a Yugoeslavia.

Ingresó en la legión española en 1922 en Marruecos y solicitó el puesto de mecánico aeronauta que le fue concedido.

Tanto cariño llegó a tomar a España que adquirió nacionalidad española.

Viene la república y fue nombrado director del aeródromo de Barajas en 1934. En 1935 se abría una escuela en Alemania a la que asistía nuestro héroe.

El Movimiento Nacional, le cogió de piloto en Madrid con los rojos, pero cómo que con ellos no le unía nada logra huir y reintegrarse a la verdadera España. Es incorporado inmediatamente a la escuadrilla del inmortal Capitán Aya y es entonces un héroe del Santuario de la Cabeza, volando de noche sobre terreno montañoso, teniendo que descender muchas veces hasta cien metros.

Tomó parte en numerosas acciones gloriosas: en el bombardeo del “Jaime I», en la campaña del Norte, en Aragón; un caza rojo le descubrió y le hizo 30 impactos en la cola pero siempre valeroso y seguro se arrió a toda velocidad y el enemigo lo perdió de vista y llegó a nuestras líneas.

El 14 de septiembre del pasado año nuestro piloto bombardeaba el aeródromo de Sariñena; a las 8 de la noche, ya sobre el enemigo echa una bengala que lo descubrió a los cazas , rojos, intenta continuar con su misión y echa una segunda bengala, un caza rojo lo incendia; nuestro aviador con su aparato viene hacia nuestras líneas incendiado, arroja la gasolina pero no había salvación posible; se arroja entonces en paracaídas, lleva quemaduras en todo el cuerpo y heridas en la cabeza; cuando llega al suelo se encamina hacia donde señala la dirección las tropas de Franco, pero entonces ya Ios enemigos que le han visto caer le están buscando.

Al descubrirle, quieren rendirlo, pero nuestro héroe dispara contra ellos y aun fue hecho prisionero. En Sariñena habla con varios oficiales rusos en su lengua vernácula, los oficiales rusos interceden por él pero los marxistas españoles le fusilan.

En el cementerio de Sariñena des ­cansa el caballero de los aires al que la aviación nacional rendiría todo su homenaje, pero los rojos más tarde dicen que los restos de un fascista son indignos de reposar en un cementerio civil, lo sacan de su sepultura y la entierran en el extramuro.

Allí lo buscan nuestros soldados ayudados por varios vecinos del lugar y envuelto en la Bandera rojo y gualda, la Bandera española mil veces santa, enseña de la verdadera cruzada anticomunista, va a descansar donde descansan los héroes, en tumba bendecida, en esa tierra sevillana que tantas amores le dedicó y la que vio sus primeros pasos en esta guerra de España.

La Almudaina: diario de la mañana: avisos, noticias.
Año LII Número 19489 – 1938 julio 3.

A causa de llover torrencialmente, nuestros aparatos no han podido elevarse

Sariñena, 5. —Llueve torrencialmente desde hace tres días. Nuestros aparatos no han podido elevarse y la infantería permanece inmovilizada en las trincheras y campamentos. En el vedado de Zuera hubo en dos ocasiones alarma, por parecer que las tropas facciosas iniciaban algún movimiento; pero lodo quedó reducido a ponerse nuestros soldados en actitud defensiva durante algunos minutos. Incluso la artillería ha calleado desde hace cuarenta y ocho horas.

La Libertad, 6 de octubre de 1937.

Actividad aviación

Sariñena. — A pesar de la lluvia, que desde hace dos días cae copiosamente, ha habido bastante actividad en los sectores de esta Agrupación. La aviación y las patrullas de Infantería se dedican a servicios de reconocimiento y observación y han menudeado los tiroteos, pero no se han registrado bajas en las filas léales.

Actividad aviación

Adelante, 28 de octubre de 1937.

Oficiales y mecánicos Alas Rojas Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Grupo de oficiales y suboficiales mecánicos de aviación.

Bombardeo sobre Zaragoza

El diario «La Humanitat», en su edición del 21 de noviembre de 1937 cita: Treinta y cinco aviones de la república han bombardeado intensamente los objetivos militares de Zaragoza: «El Ministerio de la Defensa Nacional nos han trasladado la siguiente nota. Esta mañana a las nueve y media, en replica de las recientes agresiones aéreas del enemigo contra Bujaraloz y Sariñena, 35 aparatos nuestros, de gran bombardeo, han realizado una incursión sobre Zaragoza donde tenían señalados objetivos de carácter militar que los facciosos utilizaban como base de de programas ofensivos. El bombardeo se ha realizado con pleno éxito y no han podido evitar ni las escuadras de caza ni la artillería enemiga. Todos nuestros aparatos han regresado indemnes a los aeródromos de origen.»

El aeródromo según el bando sublevado

En la zona sublevada, durante la Guerra civil española, se crearon servicios de información y espionaje, tales como el Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) y el Servicio de Información del Nordeste de España (SIFNE). Entre los muchos informes elaborados, encontramos algunos sobre el aeródromo, documentación depositada en el Archivo General Militar de Ávila.

Mapa Alas Rojas Sariñena

Croquis del aeródromo de Sariñena SIFNE.

El 13 de octubre de 1937, los aeródromos aragoneses de Sariñena, Bujaraloz, Puebla de Hijar y Selgua, se asignan como objetivos de la Aviación nacional y la Legionaria: “Neutralización del material, pista e instalaciones” (Aragón bajo las bombas, Maldonado Moya, José María).

Polvorín campo de aviación

En Sariñena hay un polvorín cerca del campo de aviación. No se precisa el sitio.

10.507 = 825 = 3-9-37. (Servicio de Información y Policía Militar (SIPM). AGMA- C2896, 8).

Campo de aviación

Sariñena. Localidad a unos 40 kilómetros al sureste de Huesca: Situación del campo a unos 5 km. al sur de Sariñena y al suroeste del pueblo de Albalatillo. El más importante de Aragón. Pista de cemento. Depósitos subterráneos de bencina y polvorín a prueba de bombardeo. Antiaéreas. Depósito de bombas en un granero situado en el norte del campo. Este granero se diferencia de los demás por el color claro de las tejas ya que fue reparado posteriormente. El personal está alojado en las casas de Albalatillo más cercanas al campo. Según reciente información hay allí unos 40 aparatos.

7000 = 1 = Sin fecha. (Servicio de Información y Policía Militar (SIPM). AGMA- C2896, 8).

El aeródromo de “Alas Rojas” se encuentra entre Sariñena y Albalatillo, a la izquierda del camino que sale de la carretera entre los kilómetros 55 y 56 y se dirige a Albalatillo. El detalle de las instalaciones figura en el croquis.

7000 = 8 = Sin fecha. (Servicio de Información y Policía Militar (SIPM). AGMA- C2896, 8).

Camuflaje nocturno

El aeródromo de Sariñena está camuflado durante la noche con iluminación eléctrica que simula la población y que ha sido instalada cerca de la carretera en dirección al frente de combate.

7000 = 33 = 9-10-37 (Servicio de Información y Policía Militar (SIPM). AGMA- C2896, 8).

Informe de agente llegado de la zona roja

Se acompaña croquis en el que viene indicada la situación del campo de aviación de Sariñena.

Dicho campo está provisto de importante defensa antiaérea automática. En el mismo existen unos 30 depósitos de gasolina de dos y medio a tres metros de diámetro, camuflados verde y tierra.

SIFNE. Irún 25 de octubre de 1937

Otros informes hablaban de unos 50 depósitos, como un informe del 26 de octubre de 1937 del General Jefe del Ejército del Centro.

Campo aviación Sariñena 2

Defensa antiaérea automática

Ampliación a1). El campo de aviación de Sariñena esta provisto de importante defensa antiaérea automática. En el mismo existen unos 50 depósitos de gasolina de dos y medio a tres metros de diámetros, camuflados y tierra, y por otra nota se sabe que está camuflado durante la noche con iluminación que simula la población y que ha sido instalada cerca de la carretera dirección al frente de combate.

28 del C. nº 1949 28 de octubre de 37.

Talleres Generals Motors en Albalatilllo

En la iglesia del pueblo de Albalatillo están instalando talleres de la General Motors de Barcelona donde se reparan cañones antiaéreos, tanques, coches etc.

10.000 = 30 = 6-12-37.

 

mecánicos Alas Rojas Sariñena
 
Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Mecánicos ajustando el motor de un Breguet XIX.
 

Logística

El armamento y bombas llegaban en tren a la Estación de Sariñena, donde había un pequeño almacén. Algunas de estas bombas fueron fabricadas «en serie» en la fábrica de automóviles y camiones de la General Motors Peninsular, información recogida por el Diario de Barcelona, 25 de agosto de 1936, con motivo de la visita del coronel Villalba y Ángel Estivill.

El coronel Villaba y Ángel Estivill visitaron la fábrica de la  General Motor, una de las cosas que les interesaron muy profundamente fue los equipos de lanza bombas que se estaban construyendo en serie para la base de Sariñena.

Diario de Barcelona, 25 de agosto de 1936.

Almacén de Alas Rojas

A medio kilómetro de la estación de la población de Sariñena hay unos barracones donde se almacenan camiones y material de guerra.

3.000 =15= 28-10-37.
Servicio de Información y Policía Militar (SIPM) C2896, 8.

José Porta Martín, vecino del barrio de la estación, contó que uno de los almacenes de su casa fue utilizado para guardar bombas destinadas al aeródromo. José las veía desde una ventaneta: “Estaban sin la espoleta, para que no explotasen”. Es de suponer que llegarían a bordo de trenes y se almacenarían en algunos almacenes hasta su posterior traslado al aeródromo.

Relación de personas relacionadas con el aeródromo

Yo siempre le tendré que recordar con la más intensa emoción, a aquel hombre alto y fuerte de complexión robusta que en el campo de «Alas Rojas» de Sariñena, muchas veces había paseado conmigo, hablándome de su hija y de sus deseos de volar, volar mucho, para combatir a nuestros enemigos. 

Diario de Barcelona, 19 de julio de 1938.

Relación del personal miliciano con expresión de fechas de alta o de su último cobro. Arma de aviación. 3ª Región Aérea. Destacamento de Sariñena. “Alas Rojas”. Sariñena 29 de enero de 1937. El teniente coronel jefe Alfonso de los Reyes.

Listado del personal del aeródromo en enero de 1937 en las diferentes secciones de imprenta, personal administrativo, cocina, servicio eléctrico, almacén mecánico, parque móvil, pastores, granja, varios, taller mecánico Albalatillo, barbería, grupo de abastecimientos y escoltas. (Arxiu Nacional de Catalunya).

Imprenta

Domingo Mañosa Torres, Antonio Teixel Cardó, Angelita Fernández Luis, María Fernández Luis, Manuel García Costa, Pascual García Corredor, Luis Camprubi Bou, Jaime Arnau Boix, Tomás Murral Ribé, Rafael Fernández Luis, Manuel Senabre Sempere y Santos Sáez López.

Personal Administrativo

Dionisio Ubiñana Umbert, Pedro Delfante y Andrés Esteban Argueta.

Cocina

Juan Pérez Alcaide, Juan Carles Trabal, José Mateu, Conrado Casimiro Yuste, Juan Torrents Sanahuja, Martín Dalmau Domenech, Domingo Heredia Martínez, Jaime Sañé Más, Juan Fernández Herrera, Pascual Rodríguez Toledo, José Catalá Torrente y Luis Vila Aurich.

Servicio eléctrico

Fernando Aramburu Luque, Miguel Valles Monter, Ramón Subirana Altirriba, Antonio Gallego Márquez,  José Serra Rius, Juan Sánchez Pérez, Francisco Morreres Miró, Miguel Leonar Mateo, Nicolas Francisco Andorran, Miguel Fernández Hernández, Alfonso Martín y José Hoyos Morales.

Almacén Mecánicos

Carlos Ferret Aguilera, Osbaldo Sffogia Puyol  y Andrés Carrera Puértolas.

Parque Móvil

Cándido Campo Pérez (Périz), José Sorinas Otto, Juan Pellicer Mariné, Amador Cerdá Navarro, Cristóbal Esteban Clemente, Jaime Fabró Costafreda, Benigno Rodríguez Santiago, Guillermo Garriga Ginestá, Luis Calvo Sanz, Juan Montori Gállego, Antonio Naudi Boixet, Antonio Naudi Triado, Pedro Llongueras Casanovas, José Bru Rovira, Vicente Gil Siurana, Feliciano Rodríguez Gorachana, Francisco Aznar Navarro y José Aubeso Bertomeu.

Pastores

Nicolas Corren Lanaspa, Saturnino Salvador Pardo, Gregorio Rapún Campo, Santiago Lalaguna Bandrés, Francisco Franco Bandrés, José Morlans Acin, Luciano Piedrafita Bandrés, Antonio Giménez Azón, Francisco Bandrés Bandrés, José López Buisan, Hilario Lafuente Morlans, Elías Rasal Pardo, Santiago Caballé Lanuza, Domingo Azón Orus, Guillermo Cazcarro Sarasa, Valentín Lafuente Acín, Antonio Acín Escartín, Manuel Bandrés Cajal y Joaquín Puértolas Cazcarro.

Granja

Ángel Lafita Marcial, Gerónimo Campos Pérez, Pedro Casañola Sanz, José Casañola Común,  Joaquín Villacampa Ballarín, Fermín Solana Marcen, María Ruego Murillo, María Pardo Murillo, Juana Casañola Sanz, Alfredo Sffogia Mora, José Mateu Ferrando, José Betes Maestro, José Ferrer Alcolea, Antonio Lafita Talueña y José Tierz Mas.

Varios

Franco Quinza Blasco, Luis F. Arévalo Massa, Luis del Valle Dorado, Jaime Villena Llovell, Juan Vila Sorribas, Fernando Rigal Marzal, José María Ferrer Suarez y Manuel Soldevila Ferrer.

Talleres mecánicos Albalatillo

Gabriel Guitard Campoussy, Daniel Pueyo Olona, Rafael Piera Marsá, Juan Fierrez Ibáñez, José Perís Alemany, Mario Villard Campodrón, Miguel Sala Bosch, Baudilio Canals Galcerán, Enrique Casanovas Estruch, Antonio Bonjoch Tries, José Rull Juncosa, Leandro Maicas Martín, Antonio Mas Camón, Antonio Larroy Masueras, Román Peralta Blanco, Mariano Abadías Asín y Joaquín Corbinos Sataeularia.

Barbería

Teófilo Iglesias Gascón.

Grupo de Abastecimientos

Manuel Cuadrat Macia, Salvador Pares Dexens, Pascual Campo Muro, Joaquín Gorrera Gallard, Andrés Llovera Valentines, Ramón Ros Colominas, Pedro Torrem Grau, Pedro Rodríguez y Jesé Farrus García

Escoltas

Miguel guerra Martí.

Añadir

Alfredo Cañamero Pérez, Gerardo Monje Ruesga, Gerardo Monje Muley y Joaquín Martínez Diaz.

Sariñena 29 de enero de 1937. El teniente coronel jefe Alfonso de los Reyes.

Personal de oficinas y jefatura, periódico Alas Rojas, nº 20 del 13 de febrero de 1937.

Dionisio Ubiñana
Pedro Del Fante
Andrés Esteban
José Marés
Enrique Puente
Julio Roche
José Mensa
José Mestres
Francisco Rius
Luís Artigas
Nicolás Alonso
Juan A. López
José M. Tamayo
Juan Moles
José Laporta
Luís del Valle
Juan Clotet
Eladio Pericas
Juan Riera
Ramón Parés
Franco Quinza
Teniente Coronel Reyes.
 
Sección Suboficiales, periódico Alas Rojas, nº 20 del 13 de febrero de 1937.
 
José Muñoz
Salvador Badia
A. Genovart
Martín Torcal
Antonio García
Antonio Moreno
Juan Jareño
Galo Pérez
Pedro Ruíz
Salvador Bertomeu
Daniel Juan
Dionisio Aguirre
José Mateu
Antonio González
 
Personal de la Compañía, periódico Alas Rojas, nº 20 del 13 de febrero de 1937.
 
Un simpatizante
Otro simpatizante
José Recasens
José Prades
Crispín Peralta
Antonio Marcial
Pablo Franco
Francisco Alegre
Isidoro Andrés
 
Hijo campo aviación 16 agosto 36
 

A su madre Flora, que vive en Rogent, 80, 1.º, le comunica su hijo Simón Julia que se halla en el campo de aviación de Sariñena, sin novedad.

—También se hallan en dicho campo de aviación, admirablemente, los siguientes camaradas: Jaime Llargués, que vive en Bassols, 38, 3.º, 2.ª (Clot) y Julián Vila, que vive en la calle Pontevedra, número 15, 2º, 1ª (Barceloneta).

Solidaridad Obrera, 16 de agosto de 1936.

José Til Aso, párroco de Albalatillo

Arturo morera señala como algunas de las personas de Albalatillo y Sariñena  ayudaron en los trabajos de habilitación del aeródromo y se incorporaron al personal fijo de Aviación. Es el caso del cura de Albalatillo José Til Aso, el cual fue destinado a un trabajo administrativo, tal y como cuenta el ingeniero Juan J. Maluquer, como caso anecdótico, la incorporación a la Aviación: Parece ser que el cura Don José temió ser fusilado en los primeros días de la guerra civil, por lo que se refugió en el campamento y allí encontró el acomodo y protección que le prestaron los mando; comunistas de Alas Rojas. También protegieron a alguna que otra persona de Sariñena que temía ser perseguida o denunciada por sus ideas políticas afines a las de la sublevación franquista.

Víctor Pardo Lancina (Vademécum de la contienda) recoge como Til Aso «Huía del comité de su pueblo que había quemado la iglesia y le obligaba a casarse con su casera, fue empleado por el comandante Reyes en el servicio administrativo del campo de aviación, otorgándole de este modo su protección y ayuda. ¡Lástima que no escribiera las vicisitudes de su estancia en el aeródromo! Allí, se daba la paradoja de que Alfonso de los Reyes oficiaba bodas civiles de las que era secretario y notario el cura José Til Aso.»

También es citado por Manuel Conde López, Memorias de un médico militar, En el servicio administrativo del campo, trabajaba el cura de Albalatillo «Don José», que había sido recogido por «Alas Rojas» para protegerlo de los Comités de los pueblos vecinos. En un principio, lo querían fusilar, pero le perdonaron pues «Don José» era uno de los pocos que sabían escribir en el pueblo. Le nombraron secretario del Ayuntamiento. Pero le exigieron que se casara con su ama de llaves, pero como no estaba de acuerdo se fugó del pueblo y se refugió en el campo de Aviación. Esto le salvó la vida y vivió los azares de la guerra y en 1940 volvió a ser nuevamente el cura de Albalatillo. 

Apolo M. Ferry lo describe como «tiene bien cumplido el medio siglo y parece una reproducción animada del admirable retrato de Goya realizado por Vicente López.» Parece ser que hasta hace pocos meses del comienzo de la guerra fue párroco de la estación de Sariñena «Humilde cura rural, su vida fue una lucha cruenta contra la injusticia de los jerarcas de la Iglesia.»

Apolo recogió la figura de José Til Aso en un artículo «Huesca, al alcance de la mano. La gesta del pueblo catalán» publicado en Mi Revista el 15 de marzo de 1937. A modo de entrevista cuenta como los grandes señores de estas tierras le perseguían sin piedad porque se negaba a ejercer su ministerio en sus palacios: «El pueblo es quien me paga y yo doy misa para él. El que quiera oírla que madrugue y acuda a mi iglesia. Yo no tengo otro señor que mi Señor, ni otros hermanos que mí pueblo.»

«El cura Til de Aso se enfada conmigo porque le llamo don José. —Ahora que hemos logrado la igualdad que yo he predicado toda mi vida, no quiero ningún tratamiento.»

Naturalmente en su casa reinaba la miseria. A pesar de todo repartía limosnas y venía sosteniendo una escuela. Sus discípulos le adoraban porque había hecho de su enseñanza un placer, y «porque apenas les enseñaba el catecismo. Con estos antecedentes, no hay que decir que el pueblo entero garantizó la vida del pobre curita rural al sobrevenir los trágicos sucesos de la sublevación fascista.»

—Mira, compañero, hasta qué punto puede advertirse la traición de estas gentes— Dos días antes de producirse la sublevación se trasladaron a Zaragoza buena parte del curato provincial. A mí nadie me advirtió de nada. En mí no tenían confianza, porque no iba a la capital a rendir pleitesía al arzobispo. Y me hicieron el gran favor de dejarme con los míos. Si por azar hubiera de caer en sus manos, preferiría suicidarme.

El artículo señala que una hermana y a una cuñada suyas las fusilaron los fascistas en un pueblo cercano, «porque se vieron precisadas, para poder vivir, a vender algunas aves de corral. El mando fascista había requisado toda la volatería, y esta falta inocente fue castigada con la muerte.»

Su hermana, María Til Aso, natural y/o domiciliada en Gurrea de Gallego (Huesca) falleció en Losanglis (Huesca) 6 de diciembre de 1936, a los 57 años de edad, la causa de su muerte fue por heridas de guerra. (Con nombres y apellidos).

De la última, María Til Aso disponemos de pocos datos. Natural de Gurrea de Gállego (Huesca), viuda, de 57 años y profesión sus labores. Fue asesinada en 1937 en la localidad oscense de Losanglis. Según consta en su partida de defunción, “murió por heridas de guerra”. Su expediente de Responsabilidades Política tiene como fecha de inicio el año 1937, y de final 1940.

María Til Aso, Antonia Rubio Rupérez y Emilia Serrano Forniés fueron asesinadas sin juicio previo. Serán los propios expedientes los que nos muestren mejor cual fue el procedimiento seguido por los tribunales y como se llegó a las sentencias.

AHPZ Sección Jurisdicciones Especiales – Expedientes de Responsabilidades Políticas signatura J/005572/000088 de María Til Aso. Solicitado el expediente al AHPZ para su estudio, y a pesar de conocerse su signatura, fue imposible su localización.

“La cárcel de mujeres” Predicadores: Legislación y represión (1939-1955)
Rosa María Aragües Estragués. Licenciada en Geografía e Historia.

El aeródromo y su repercusión

El aeródromo de Sariñena recibió numerosas visitas de jefes militares y de columnas, de escritores, de políticos y de periodistas. El general José Aranguren Roldán, que había sido el jefe de la Guardia Civil en Cataluña, fue designado Capitán General de la IV Región militar tras la derrota de los sublevados en Barcelona. El general Aranguren visitó e inspeccionó el campo de Alas Rojas el día 30 de agosto de 1936 y felicitó al comandante Reyes por el éxito de la aviación en la toma de Montearagón. También el presidente de la Generalidad de Cataluña, Luis Companys, visitó el campo, y de ello hablaré en un próximo artículo.

Lluis Companys

El 7 de agosto de 1937, el presidente de la generalidad de Cataluña Lluis Companys visitó el campo de aviación. En la imagen se observa la torre de vigilancia del aeródromo. (Visions de guerra i de reraguarda. Serie B, Actualitats. Barcelona, 7 de agosto de 1937).

Companys Alas Rojas Sariññena

Illa Ehrenburg

El escritor soviético Illya Ehrenburg estuvo dos veces en Sariñena. La primera de ellas fue a finales del mes de agosto de 1936 y en su libro Corresponsal en España, describe sus impresiones de aquella visita que coincidió con la ocupación de Montearagón por las milicias republicanas. Yo transcribo algunos de los párrafos de su obra:

… A las seis de la mañana, empezó a hacer calor. La compañía tomó posición y en el campamento se izó la bandera de la República. El comandante Alfonso Reyes me dijo: -Soy comunista. Hace once años que estoy en el partido y sé lo que es disciplina-. Tenía una cara huesuda y dura, y su risa era triste… Por detrás de Huesca, y en lo alto, Montearagón estaba ocupado por los blancos. Cuando el comandante Reyes ordenó el bombardeo de Montearagón, veinticuatro aviones decrépitos volaron sobre él. Luego volvieron a abastecerse de bombas y cuando otra vez aparecieron sobre el lugar, los enemigos izaron la bandera blanca y dejaron de resistir…-

De nuevo Ehrenburg visitó Sariñena en el mes de mayo de 1937. Allí se enteró por un alto oficial ruso, de la purga que Stalin acababa de realizar en los mandos más relevantes de las fuerzas armadas soviéticas, entre ellos el mariscal Tujatchevski.

Víctor Pardo Lancina apunta que Ehrenburg, corresponsal del diario Izvestia de Moscú, «Visitó el aeródromo y otros lugares del frente aragonés con los cámaras Roman Karmen y Boris Makaseiev, de la productora oficial de noticias soviética Soiuzkinokronika. Producto de este trabajo es el documental Ksobitjan U. Ispanii 1936/1937 (Los acontecimientos de España 1936/1937)». (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

«A las cuatro de la mañana sonó el clarín y los aviadores corrieron hacia el arroyo para lavarse. Después empezó el estruendo. Cuatro aviones despegaron, perforando una nube de polvo, hacia el cielo ligeramente anaranjado. Al salir el sol, el espacioso campo parecía un cementerio de aviones. Ahí se podía ver con qué elementos habían aprendido los hombres a volar y cómo la voluntad humana vence a la muerte. Porque los aviadores republicanos usaban aparatos cuyo lugar apropiado era el museo, en tanto que los enemigos disponían de destructores Heinkel y bombarderos Junker».

Illya. Ehrenburg

Durruti

«Uno de los asiduos visitantes del campo de Sariñena fue Buenaventura Durruti. Le encantaba volar en avión y frecuentemente pedía al comandante Reyes que le enviase un aparato a Bujaraloz para trasladarse a Sariñena. El señor Maluquer relata una anécdota sobre la afición de Durruti a los aviones. En cierta ocasión, el líder anarquista le ofreció al comandante Reyes un magnífico automóvil descapotable de gran turismo, a cambio de una de las avionetas del campo, piloto incluido Durruti alegaba que de esa manera llegaría antes a las reuniones de Sariñena y regresaría más pronto junto a sus milicianos. El jefe del campo dio la callada por respuesta y su dura mirada fue suficiente para que Durruti no insistiera.» (La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros).

Bombas aviación Sariñena Alas Rojas

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE.  Bombas de aviación dentro de un Dragón Rapide.

Entrevista a Alfonso de los Reyes

Uno de los periodistas que intentaron entrevistar a Alfonso de los Reyes tuvo éxito, y así pudo escribir en El Diluvio de 12 de enero de 1937 el resultado de su trabajo sobre el aeródromo de Sariñena. Copio uno de los párrafos de la entrevista que refleja la personalidad del jefe de la base: … El teniente coronel, jefe superior de Aragón, Alfonso de los Reyes, persona de una actividad y energía extraordinarias, evita cuanto puede las entrevistas con los periodistas. No dispone de tiempo ni es hombre de palabreta. Trabaja, da órdenes para todos los sectores del frente y prefiere que los hechos, siempre más elocuentes que las palabras hablen por él.

La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.

RECORTABLES-G.C.-19360037

Alas Rojas sobre Aragón

El campo de aviación fue protagonista de una cinta de guerra, Alas Rojas sobre Aragón, 1937, «Documental producido por Cinamond Film para la Aviación Republicana, bajo la dirección del propio Alfonso de los Reyes y el asesoramiento de F. Arévalo. Filmoteca Nacional, Madrid.» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

Alas Rojas sobre Aragón

Federica Montseny

La ministra de sanidad Federica Montseny visitó Sariñena, realizando un mitin el 31 de enero de 1937 en el teatro Romea (La guerra civil en Sariñena). Luego visitó el campo de aviación republicano. Lo recogió Arturo Morera «Finalizado el acto, la acompañó (Pere Foix, como jefe de la Oficina de Propaganda del Cuartel General) hasta el campo de aviación, por deseo expreso de la ministra, quien dijo tener mucho interés en visitar las instalaciones del aeródromo, Federica Montseny, anarquista de toda la vida, fue recibida con honores militares, y la Banda de música interpretó el «Himno de Riego», es decir, el himno oficial del estado republicano. El Teniente coronel Reyes, le presentó, a continuación, a su equipo de aviadores.

mecánicos Alas Rojas Sariñena 3

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Mecánicos llenando los depósitos de un Nieuport-Delage 52 de la escuadrilla Alas Rojas.

El “whiski” rojo de Aragón

Curiosa anécdota del periodista Máximo Silvio que publicó en su artículo “Bajo el cielo de Aragón” en Mi Revista, Barcelona 1 de mayo de 1938. Ocurrió durante su visita al aeródromo con los grandes pilotos Mariano Foyé y Jesús Herguido.

Un whiski rojo

Una tarde -aun no mediaba septiembre- paseaba yo par el campo de Sariñena con Mariano Foyé y Jesús Erguido. Acababa «EI Diablo Rajo» de descender de su avión después de haber bombardeado con gran intensidad las fábricas de municiones y de explosivos de Sabiñánigo. Mariona Foyé propuso celebrar la última hazaña de Jesús Erguido, y muy seriamente dijo:

-¿Vamos o tomar un whiski?-

-¿Un whiski?- inquirí yo-No os priváis de nada.

Y lentamente nos encaminamos a la contina del campo asaeteados por un sol ardoroso que enrarecía el aire.

Mientras conversaba yo con “EI Diablo Rojo”, Mariano Foyé hizo preparar la bebida que me ofreció.

– ¡Ahí va el whiski!-  dijo con tono socarrón, y me alargó un vaso con un líquido rojizo.

– ¿Un whiski rojo?-  pregunté extrañado. –

-Sí, un whiski de circunstancias, un whiski de Aragón.

Y Mariano Foyé soltó la catarata de su risa franca-

Lo que me ofrecieron los dos bravos aviadores era un vaso de vino aragonés con gaseosa y un trozo de hielo.

Ignoraba yo que las bebidas alcohólicas estaban prohibidas en el campo de «Alas Rojas».

Autorización a tres guardias para trasladarse al campo para ejercer de conductores

5323317_594018,0001

Arxiu Nacional de Catalunya. ANC1-638-T-18.

Govern de la Generalitrat de Catalunya, Departament de Governació.

Por requerirlo las necesidades del servicio, autorizo a los guardias Josep Parellada Baixas y Francesc Vidal Gener, para que en compañía del señor Joan Clotet Vives, puedan trasladarse a Sariñena, por tal de ponerse a las ordenes del comandante de aviación Reyes, en conceto de conductores.

Lo que me procede poner en su conocimiento a los efectos pertinentes. Barcelona, 4 de agosto de 1936. El Conseller de Governacio.

Pago de haberes

Manuel Conde López relata como el habilitado para el pago de los haberes a los militares era Luis Collar, padre del aviador Joaquín Collar, desaparecido en vuelo Cuba- México en 1933.

Algunos problemas con la población

La presencia de los pilotos y milicianos de Aviación en Sariñena tuvo repercusiones en la vida de las personas de nuestro pueblo. Ya dije antes que algunos vecinos de Sariñena y Albalatillo encontraron amparo o acomodo en las filas de la Aviación. También los aviadores fueron un freno a las actuaciones de algunos extremistas de la CNT-FAI, fueran del propio Sariñena o forasteros.

A comienzos del mes de septiembre de 1936, según relata Maluquer en su obra, parece ser que en el campo de aviación se dio la alarma porque se supo de la existencia de algunas partidas de extremistas incontrolados que habían cometido excesos e incluso asesinatos en algunos pueblos cercanos. El comandante Reyes recibió confidencias de que aquellos grupos pretendían asaltar los almacenes del aeródromo, por lo cual se instalaron ametralladoras en las esquinas del campamento y del campo de vuelo y se redobló la vigilancia. El comandante Reyes estaba dispuesto a dar un sonado escarmiento, y como se corrió la voz de los preparativos que se hablan hecho para repeler cualquier agresión nocturna, los grupos de incontrolados temieron tal reacción cesaron en sus correrías vandálicas.

Son bastante esclarecedores los datos que aportan las actas del pleno extraordinario de sindicatos de la CNT de Aragón, que se celebró en BuJaraloz el 6 de octubre de 1936, y que demuestran la influencia de los aviadores en la vida civil en Sariñena. En primer lugar hay que decir que NO asistió representación alguna de nuestra villa a tal asamblea, pero sí lo hicieron muchos pueblos de la provincia como Lanaja, Grañén, Tardienta, Monzón, Almudévar, Alcolea, Salillas, Barbastro y otros.

En las actas del pleno se dio cuenta de una de las intervenciones, cuyo texto es el siguiente:

“-El compañero Hermes de Soli también da referencia del comportamiento de determinado sector de opinión que en una asamblea que había convocado el sindicato de Sariñena. Irrumpieron en el local y la suspendieron. Explica la conducta que observaron los aviadores que de acuerdo con los socialistas, realizan toda clase de tropelías a nuestros compañeros, habiendo llegado incluso a desarmamos. Se acuerda hacer gestiones para evitar todos estos excesos y caso de no rectificar, proceder entonces con energía…-“

La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.

Defensa Alas Rojas Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Personal de tierra del aeródromo militar hacen prácticas con una ametralladora Hotchkiss.

 

Testimonio de Macia Polo Verdú

Macia Polo Verdú fue como voluntario a trabajar al campo de aviación de Sariñena, llegó a los pocos meses de comenzar la guerra, llegó desde Lérida en tren hasta Sariñena. Al principio, cuenta que había mucha desorganización. Trabajaban haciendo el pavimento de la pistas, hacían las pistas manualmente aunque comían muy bien, abundante y bueno. Cuando llegó ya estaban construidos los barracones, era todo muy improvisado con pocos aviones.

En las parideras había escondidos muchos proyectiles, también cuenta como una avioneta de construcción francesa aterrizó de noche y se estrelló. Entrevista realizada por JordiVva, en idioma catalán.

 

Biografías

Aguilera Cullell, Alberto. Natural de Barcelona, soltero. Teniente de aviación (Gaceta 4/4/37 pag. 58 nombramiento teniente). Aguilera, junto a los aviadores alférez Ferret, sargento Juan Fernández y bombardero Navarro, falleció en combate aéreo  entre Granen y Tardienta. Falleció el 19 de octubre de 1936, a última hora de la tarde, a consecuencia de heridas de arma de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico del campo de aviación. El avión bimotor que pilotaba fue derribado por Heinkel He.51 y se estrelló en Almudévar. (Hospital de Sariñena, fallecidos de guerra).

Luis Agilera Cullell

Luis Agilera Cullell.

Arnal Sena, Valero. Valero llegó al campo de aviación en agosto de 1936 con el uniforme de teniente de la guardia civil, procedente de la línea del Prat de Llobregat. Fue nombrado al mando de una compañía de aviación destacada el “Abet Alto”, organizó la legión roja de aviación y ocupó el cargo de ayudante en los primeros meses de 1937, luego marchó a Albàtarrec (Lérida). Con la llegada del franquismo, fue condenado a seis años de prisión menor.

Baballé Puignous, Juan. Piloto de la Escuadrilla de Alas Rojas y de Chatos. Al iniciarse la Guerra Civil combatió en el frente de Aragón desde el Aeródromo de Sariñena con la Escuadrilla Alas Rojas. Perteneció a la Escuadrilla Vasca a la que se incorpora en julio 37. Derribado y muerto sobre el Puerto del Escudo el 17-08-37. Ascendió a Alférez el 25-02-37 (G.R. 76 del 17-03-37) y a teniente el 24-03-37 (G.R 83). (http://www.errepublika.org/aviadores_republicanos.htm).

Busquets Gelabert, Romà. Natural de Barcelona, fue un piloto civil que se incorporó a la aviación republicana del aeródromo del Prat. Romà formo parte de las unidades que se destinaron al aeródromo de Alas Rojas «Entre el día 19 de julio y el día 31 de julio, unos cincuenta civiles vinculados a la escuela de vuelo del Prat (entre pilotos, observadores, mecánicos y otro personal de tierra) se incorporaron a la aviación y fueron destinados, en su mayoría, a Sariñena (en la provincia de Huesca), donde se estableció el principal aeródromo del frente de Aragón» (Deportados). Romà participó en misiones de de observación, de enlace y de transporte aéreo, pero «A las pocas semanas, recibió del teniente coronel Felipe Díaz Sandino la orden de desplazarse a Bujaraloz (Zaragoza), junto al piloto civil Josep María Ferrater Bofill, para dirigir la construcción de un aeródromo auxiliar, al servicio de la columna Durruti, y de asumir el mando del mismo. Las actividades de Busquets como comandante del aeródromo de Bujaraloz no están documentadas y se pierde su pista hasta el mes de abril de 1938, en pleno colapso del frente de Aragón, momento en el que ocupa un cargo de Jefe de Estado Mayor (dentro de la Sección de Información) de la 26ª División, heredera de la antigua Columna Durruti»(Deportados). Romà acabó en Francia donde fue capturado por los Alemanes, deportado a Mauthausen y luego a Gusen, murió gaseado en el Castillo de Hartheim en 1941.

Romá Busquets, el aviador republicano asesinado por los nazis.

En Sariñena, Busquets participó en diversas misiones de observación, enlace y transporte aéreo, pero su participación en acciones de combate no está documentada. En cualquier caso, al cabo de pocas semanas, recibió la orden del teniente coronel Felipe Díaz Sandino de desplazarse en Bujaraloz (Zaragoza), con el también piloto civil Josep María Ferrater Bofill, para dirigir la construcción de un aeródromo auxiliar al servicio de la columna Durruti.

Los Busquets, la trágica historia de una familia de veraneantesde Cubelles.
Curell i Sanmartí, Jordi.

Buyé Berni, Jaime. Natural en San Andrés de Palomar (Barcelona) el 1 de agosto de 1905. Ingresó en la Aeronáutica Militar como Alumno mecánico de la 12ª promoción en agosto de 1925. Obteniendo el título de piloto el 24bde febrero de 1930, siendo ascendido a cabo el 24 de septiembre de 1932 cuando pertenecía a la 2ª Escuadrilla del Grupo 13, Escuadra nº 3.

El 23 de agosto de 1935 fue ascendido a sargento piloto (D.O. 193). El estallido de la Guerra Civil Española le sorprendió en Barcelona desde donde pasa a realizar vuelos desde Lérida y Sariñena, municipio de la provincia de Huesca, siendo herido en el brazo durante el combate del 19 de octubre. Tras su recuperación fue enviado a Rusia para la conmemoración de la revolución Rusa. En mayo de 1937 pasó destinado a Reus a la unidad de protección de costas.

Piloto de Polikarpov I-15 “Chatos”, actuó en el Norte con la Escuadrilla Vasca, actuando en los frentes de Santander y Gijón. Sufrió heridas importantes cuando el día 17 de agosto de 1937, al regreso de un combate, en el que fue varias veces alcanzado, resultó sorprendido por una tormenta y su avión sufrió una parada de motor, saltando en paracaídas.

En septiembre de 1937 fue destinado como oficial de Estado Mayor de la 3ª Escuadrilla de “Chatos”, puesto que ocupó hasta que en febrero de 1939 esta unidad se retiró a Francia.

117.- Mejores aviadores en la Guerra Civil Española- FARE. Cosas de la aviación.

«Sufre heridas importantes cuando el día 17 de agosto de 1.937, al regreso de un combate, en el que fue varias veces alcanzado, es sorprendido por una tormenta y su avión sufre una parada de motor, saltando en paracaídas.»

 (http://www.errepublika.org/).

Cabré i Rofes, Francesc. Sin formación reglada militar de vuelo, es movilizado por la Generalitat y actúa en los frentes de Aragón, desde la escuadrilla “Alas Rojas” de Sariñena, pasando después al grupo nocturno “Marcel Bloch” y luego más tarde a los Natachas durante todo el segundo semestre de 1937, para acabar en los bimotores de gran bombardeo rápido, los “katiuskas”, donde fue Jefe de Escuadrilla y más tarde adjunto a la Plana Mayor del Grupo 24. (Memorias de un piloto civil catalán en la guerra de España).

Suboficiales campo aviación Sariñena

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Oficiales y suboficiales de aviación, entre ellos el médico Manuel Conde López (dcha), observan una bomba de aviación.

Cabré Planas, José. Piloto que falleció al estrellarse con su avión el 14 de agosto de 1936 en Tardienta. «El 1 de agosto, los Nieuport escoltaron un Bréguet sin encontrar oposición, pero el día 4, al repetir la operación, el Nieuport de escolta pilotado por García Herguido se topó con cuatro Bréguet que venían de Zaragoza, pero no pudo derribar ninguno. El día 14, los Bréguet nacionalistas bombardearon Tarienta a una altitud de 1000 metros, mientras tanto el Nieuport 52 del comandante Ramón Senra (3-43) volaba 300 metros por encima, Senra había llegado el día 13 a Zaragoza para proteger la zona de las incursiones. Apareció entonces el Nieuport del sargento José Cabré Planas volando por debajo de los Bréguet y al verlos atacó por debajo, pero sin ver el Nieuport nacionalista.  Cuando Senra lo vió picó su avión contra el de Cabré, pero sus armas no funcionaron, en un segundo ataque sus ametralladoras esta vez si funcionaron y tocó al avión de Cabré, que se estrelló en las cercanías de Tardienta, matando al piloto.» (HISPANO-NIEUPORT NI-52C.1 GRUPO 13).

«Cabré Planas fue derribado por el avión nacional pilotado por Ramón Senra Álvarez el 14 de agosto de 1936, mientras sobrevolaba el frente entre Tardienta y Huesca. La caída de este avión constituyó toda una fiesta en Huesca, que atravesaba horas difíciles viendo que el cerco se estrechaba en su entorno. Senra Álvarez recibió como premio por su acción, un giro postal de la Diputación de Huesca con la cantidad de 1.000 pesetas, y en Zaragoza, la Junta Nacional de Recaudación le otorgó la suma de 10.000 pesetas.» (Pardo Lancina, Víctor. Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros, “Agnes Hodgson A una milla de Huesca”).

Carazo Calleja, Abelardo. Alférez del bando nacional. Fue abatido el 14 de septiembre de 1937 junto al  capitán de aviación Carlos Muntadas S. Prim. Una lápida, en el entorno del aeródromo, recuerdan ambas víctimas.

Cervera Mayans, Salvador. Junto a José Puimeciño Calasan  fueron guardias civiles que formaron parte de la escolta del jefe marxista Reyes en el aeródromo y participaron en el fusilamiento de Arizaleta, administrador de la viuda de Bastaras de Lanaja (Informes solicitados por la Capitanía General de la 5ª Región Militar, Huesca en mayo de 1941). Salvador también realizó las labores de escolta del comisario político Francisco Puicerón y José del comisario político Francisco Buisán. También fueron investigados, por su posible participación en el fusilamiento de Arizaleta, los guardias Segundo Doñageda Cardial, Víctor Esperrín del Río y Martín Pérez Pindado.

Chacel Martínez, Cesar José. Natural de Valladolid, fue sargento armero destinado en el aeródromo.

Colomer Luque, Marí Pepa. recibió licencia de su piloto en 1931, cuando tenía 19 años de edad. Admitido como miembro honorario del Aeroclub de Barcelona, en 1935, adquirió su brevet de instructor y en octubre de 1936, ella enseñó en la escuela de vuelo militar de Sariñena. Aviadoras femeninas republicanas. Texto del libro «Wings Over Spain” por Emiliani Ghergo. https://sites.google.com/…/04-m-pepa-colomer-aviadora

Escrig Gonzalvo, Francisco. fue comandante de aviación en Artesa de Segre y, al parecer, en Sariñena ejerció de jefe de sectores destacados en compañía de un tal Piquer.

Fernández González, José. Sargento Bombardero. Sargento de aviación, soltero, pertenecía a Getafe (Estaba en los ministerios) y fue trasladado a Barcelona para su enterramiento.

Fernández, junto a los aviadores capitán Luis Aguilar, alférez Ferret, sargento Juan Fernández y bombardero Navarro, falleció en combate aéreo entre Granen y Tardienta. Falleció el 19 de octubre de 1936, a última hora de la tarde, a consecuencia de heridas de arma de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico del campo de aviación.

Hospital de Sariñena, fallecidos de guerra.

Ferret Aguilera, Faustino. Alférez aviador. Natural de Barcelona, casado y de profesión Alférez, fue trasladado a Barcelona para su enterramiento. Casado en primeras nupcias con Eulalia Pilar García, habiendo dejado tres hijos llamados Pilar, Wilfredo y Faustino.

Ferret, junto a los aviadores capitán Luis Aguilar, sargento Juan Fernández y bombardero Navarro, falleció en combate aéreo entre Granen y Tardienta. Falleció el 19 de octubre de 1936, a última hora de la tarde, a consecuencia de heridas de armas de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico del campo de aviación.

Hospital de Sariñena, fallecidos de guerra.

Foyé Rafols, Mariano. Piloto catalán e impulsor del vuelo sin motor, se incorporó a principios de la guerra en el aeródromo sariñenense, siendo piloto civil. Alcanzó el grado de alférez hasta que el 19 de octubre de 1936, su Dragón Rapide fue derribado en un combate aéreo entre Tardienta y Grañen contra una escuadrilla alemana de Junkers. Los otros cuatro tripulantes fallecieron, mientras que Foyé murió tiempo después a causa de las heridas, el 23 de febrero de 1937.

Mariano Foyé, piloto doctorado en la Escuela Canudas, era además un excelente periodista. leal a la República, buen catalán él, no se mostró ni un momento reacio a acudir donde el deber le llamaba, y, destinado a la base aérea del Alto Aragón, fue comisionado para dirigir la construcción de un nuevo campo de aviación en las proximidades de Barbastro.

– Me aburro – me decía un día en el Cuartel General del Alto Aragón- ; esto no es para mí. Prefiero volar, contribuir de una manera más personalísima a la lucha de que hemos de salir victoriosos.

Pocos días después, Mariano Foyé marchaba al campo de «Alas Rojas» y allí pude abrazar innúmeras veces a aquel muchacho alto, fuerte. de complexión robusta, de hablar agradable y corazón lleno de afectos.

Bajo el cielo de Aragón. Máximo Silvio. Mi Revista, Barcelona 1 de mayo de 1938.

Pilotos Alas Rojas Sariñena

Grupo de pilotos y observadores en el campo de aviación de Sariñena, agosto 1936. De izquierda a derecha: de pie: 1 (?); 2, Cabré Planas; 3 (?); 4(?); 5, Robles; 6, Bercial; 7, Foyé; 8 Bengochea. Sentados: 9, Salueña; 10, Ferrer; 11, Aguirre; 12(?). Familia Foyé. 

Dos aviadores de la base aérea de Sariñena depositan una corona en la tumba de Marià Foyé «Ayer se trasladaron a nuestra ciudad, desde el campo de aviación de Sariñena, dos pilotos aviadores con el objeto de depositar una corona en la tumba del desdichado aviador y compañero nuestro de redacción Marià Foyé. Los pilotos que actúan en aquella base aérea, de la cual, como se sabe, forma parte de nuestro malogrado compañero, han querido expresar así su duelo por la perdida del que había compartido con ellos la heroica y ardua tarea de luchar contra la aviación enemiga». (La Publicitat, 27 de febrero de 1937). 

Gálvez Alberico, Aurelio. El Diario Oficial del Ministerio de la Guerra, del 22 de enero de 1937, publicó el destino de personal médico a diferentes destinos, entre ellos al alférez medico «D. Aurelio Gálvez Alberico», el 25 agosto 1936, al aeródromo de Sariñena.

Giménez García, Isidoro. Natural de Valladolid en el mes de agosto, al organizarse la Escuadrilla Alas Rojas, unidad mixta formada por cazas Nieuport-Delage NiD 52 y bombarderos ligeros Breguet XIX, es nombrado jefe de la misma y da comienzo a sus intervenciones en el frente de Aragón desde el campo de Sariñena en Huesca. En noviembre de 1936 es ascendido a capitán y como profesor y acompañante de ciento noventa alumnos marcha a Rusia en diciembre, a la Escuela de Kirovabad en Azerbaiyán. Cosas de la aviación. 163 – Mejores aviadores en la Guerra Civil Española – FARE.

Isidoro Jimenez Sariñena Alas Rojas

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. El teniente asimilado Isidoro Giménez, jefe de la escuadrilla Alas Rojas.

Herguido García, José Conocido como el “Demonio Rojo” fue piloto de la Aviación Militar española. El 18 de julio de 1936 se presenta en el aeródromo de El Prat, operando contra las tropas nacionales de la Ciudad Condal y después en todo el Frente de Aragón con la escuadrilla “Alas Rojas”, alcanzando una notable fama, dada su habilidad y valentía incomparable.

El 4 de agosto derribó el bombardero ligero Breguet XIX del capitán Eduardo Prado y ametralló en Zaragoza una columna de tropas.Posteriormente se encuadró en una de las primeras escuadrillas de los “Chatos” soviéticos, concretamente la de Boris Turshanski, combatiendo en la Batalla de Madrid para resistir los vigorosos ataques que de vez en cuando lanzaba el enemigo. Fue allí donde fue herido en septiembre; durante un combate aéreo había recibido un balazo en la rodilla. Fue enviado al hospital del Prat, donde no permaneció más que 20 días. A penas el doctor le anunció que estaba curado, se presentó en su unidad.

A principios del mes de noviembre, el 7 o el 8, García Herguido había sido integrado en una de las dos escuadrillas de caza rusa que estaba entonces en Madrid, y volaba en un Polikarpov I-15, el famoso “Chato”. El 12, durante un combate sobre el aeródromo de Barajas, quiso entrar en combate con un Heinkel He51 alemán y se le acercó. El piloto enemigo también era un hábil aviador. Al cabo de un momento el alemán se lanzó en picado. Herguido le siguió, decidido a no dejarlo escapar. Los dos aparatos se estrellaron en el mismo lugar del aeródromo, unidos en el mismo rugido de motor.

“Cosas de la Aviación” 116.- Mejores aviadores en la Guerra Civil Española- FARE.

Alas Rojas Sariñena Herguido

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. El sargento Herguido a bordo de su Nieuport-52.

No muy alto, aunque de buena estatura; rostro moreno, sombreado por una simpática y atrayente sonrisa; la leve contracción de sus labios carnosos dejaba ver las dos blancas hileras de sus dientes; los ojos chispeantes y con mirada de águila, acostumbrados a cortar el horizonte; desnudo de cintura para arriba, el cuerpo tostado por el sol. Así le había visto innúmeras veces en el campo de aviación de «Alas Rojas» cuando el sol encendía brasas en aquella tierra ahora hollada por la inmunda planta del invasor extranjero.

Bajo el cielo de Aragón. Máximo Silvio. Mi Revista, Barcelona 1 de mayo de 1938.

Jesús Herguido Diablo Rojo

Herrandiz Bellot, José. Natural de Chella (Valencia) fue soldado de aviación que llegó a capitán de infantería del ejército rojo. Destinado en el campo de aviación de Lérida estuvo en el aeródromo de Alas Rojas. Acusado por rebelión, a los 27 años de edad, José Herrandiz fue condenado a 12 años de reclusión menor.

Herrera Aguilera, Emilio. Teniente republicano y piloto del caza Polikarpov I-15 (conocido como Chato), era hijo del investigador y general Emilio Herrera Linares, director técnico de las Fuerzas Aéreas Republicanas y Presidente de la II República en el exilio entre 1960 y 1962. En julio de 1937. Se incorporó a «La Gloriosa» como jefe de patrulla de la 2ª Escuadrilla de Chatos con base en Sariñena. (Emilio Herrera Aguilera, piloto de caza republicano. Por María Torres).

Hidalgo López, Juan. Ejerció de cabo radiotelegrafista de aviación, llegando alcanzar la graduación de sargento. Estuvo destinado en el aeródromo de Sariñena y de la Rivera, el fin de la guerra le pilló en Alicante.

Jiménez Brugué, Alonso. Nació en Mollo (Gerona) el 21-01-1906. El 01-07-1925 ingresó voluntario en la Aviación Militar en Cuatro Vientos siendo cualificado como mecánico de Aviación el 25-08-1926. Asciende a cabo el 01-09-1929 pasando el 25-03-1930 con destino a Los Alcázares y en diciembre de 1930 fue destinado a la 3ª Escuadra. Obtuvo el título de Piloto Militar nº 813 con efectividad del 25-03-1929 y el de ametrallador bombardero el 20-06-1932. Asciende a sargento el 01-06-1935 (D.O. 1290del 05-06-35). Al estallar el Alzamiento se encuentra destinado en el Prat (Escuadra nº 3) como sargento piloto. Donde actúa como observador de BR-XIX en diversas acciones sobre Barcelona. Trasladado a Lérida sufre por estas fechas un ataque de apendicitis e ingresa en el hospital de Lérida. Dado de alta y ascendido a alférez, el 11 de septiembre pasa a Sariñena en un BR-XIX pilotado por Antonio Salueña Lucientes. En Sariñena pilota un Ni-52. Piloto de Chato de la Escuadrilla Lacalle, al que a mediados de abril de 1.937 cede el mando Andrés García Lacalle. El 8 de mayo intentó el pase de la unidad a la zona Norte junto a con seis aviones de cooperación R-Z y un DC-2, vía Toulouse/Francazal, pero un error de navegación hizo que los aviones tomaran tierra en el aeródromo francés de Montandran, donde un oficial holandés del Comité de No Intervención, les hizo regresar al punto de partida. Del Prat pasó a Lérida y después fue destinado en Sariñena, Getafe, Alcalá, Aragón, Guadalajara, Teruel, Málaga. Realizó dos viajes al Norte que terminaron uno en Toulouse y otro en Pau. Fue destinado como Enlace de Estado Mayor del Grupo 26. Profesor de caza en la provincia de Gerona, La Rivera y Alcantarilla. Fue ascendido a teniente y posteriormente a Capitán. A finales de marzo de 1939 pasó a Valencia.

(http://www.errepublika.org/aviadores_republicanos.htm).

Laguna Lomás, de José. Piloto. Oficial de aviación. Juzgado en 1940 por Auxilio a la rebelión, causa sobreseída provisionalmente. Signatura 1592. Procedimientos de la justicia militar contra el personal militar que luchó en la aviación republicana durante la guerra civil (1936-1945) Archivo Histórico del Ejército del Aire.

Causa contra un aviador

Ante el mismo Tribunal empezó la vista de la causa seguida contra José Laguna Loma, aviador. Al empezar el juicio, el defensor se refiere a los documentos que se le ocuparon al hoy procesado al ser detenido. Uno de los documentos es del partido comunista español, haciéndose constar que el José Laguna Loma nada tiene que ver con otro individuo del mismo nombre y de los mismos apellidos que es fascista.

Los otros dos documentos son de la aviación militar y del ministro de la Guerra, referentes al destino del Laguna para Sariñena. El procesado explicó que regresó a Barcelona desdé aquella población por falta de salud. A petición del fiscal se acuerda suspender el juicio a fin de practicar una información supletoria para averiguan? la verdad del caso.

La vanguardia, 31 de octubre de 1936.

En Barcelona

Barcelona 30 (12 n.).— Continúa la actuación de los tribunales populares. Ante el primero se ha visto la causa contra Juan Laguna, oficial aviador. La defensa se ha referido a los documentos ocupados al procesado en el momento de su detención. Uno de ellos es del partido comunista, haciendo constar que el detenido nada tiene que ver con otro sujeto del mismo nombre y apellido de filiación fascista. Otros documentos se refieren a la vida militar de Laguna y a su destinó en Sariñena. El procesado explicó las causas de su viaje a Barcelona, relacionadas con su estado de salud. A petición del fiscal se suspendió el juicio para practicar una información supletoria.

La Voz, 31 de octubre de 1936.

Militar juzgado

Lana Castro, Antolín. Con 40 años fue un agricultor sariñenense “Voluntario en aviación, sin intervenir en hechos delictivos”. Exiliado a Francia, regresó en octubre de 1941. El informe, solicitado por la Comisaría de investigación y vigilancia de la provincia de Huesca, reflejaba que mantuvo “siempre buena conducta”.

Mañez Rubio, Manuel. Con tan solo 15 años, fue reclamado al frente junto a Joan Paesa Cortesa por sus respectivas familias. Ambos fueron reclamados en marzo del 37, Manuel se encontraba en el campo de aviación y Joan en el batallón Alas Rojas. Son ejemplo de los muchos menores que partieron al frente sin el consentimiento de sus familias, siendo reclamados posteriormente para su regreso a casa.

Marchenko, Vsévolod. Nacionalidad ucraniana, se graduó en la Escuela Naval de Rusia en 1911, pasando a aviación durante la Primera Guerra Mundial. Durante la Guerra Civil Rusa sirvió en el ejército ruso blanco del almirante Kolchak y fue galardonado con la cruz de San Jorge. Salió de Rusia después de la Revolución de Octubre de 1917, yendo primero a Yugoslavia y luego se unió a la Legión Española sirviendo en Los Alcázares como capitán. Se convirtió en piloto de la línea aérea Madrid-París, y luego durante la Guerra Civil Española fue piloto de bombarderos Ju-52 para las fuerzas nacionales. (120.- Mejores aviadores en la Guerra Civil Española- F.A.R.E).

Muntadas Prim, Carlos Duque de Castillejos, natural de Barcelona, fue voluntario de aviación en el bando nacional durante la guerra civil española. Carlos pertenecía a la familia Muntadas Prim, una familia burguesa romántica de la sociedad catalana que acabó al costado de Franco y protagonizando un escándalo financiero a finales de la década de 1970. Vinculado a la familia Prim, entre sus antepasados se encuentra Juan Prim y Prats, Marques de Castillejos, político liberal y uno de los responsables de la revolución de 1868 «La Gloriosa», el primer intento en establecer un gobierno democrático en España tras el destronamiento de Isabel II. Murió, poco después, víctima de un atentado. Carlos Muntadas Prim falleció en Sariñena, su avión cayó junto con otros dos compañeros el 12 de septiembre de 1937. Contaría con unos 36 años de edad. Una lápida lo recuerda cerca de las trincheras. Junto a la lápida de Muntadas Prim, aparece una lápida en recuerdo de Abelardo Carazo Calleja, fallecido el 14 de septiembre de 1937.

Navarro Colay, Emilio. Cabo bombardero de aviación, perteneció a la escuadrilla de los ¿alcray?

Navarro, junto a los aviadores capitán Luis Aguilera, alférez Ferret, sargento Juan Fernández y bombardero Navarro, falleció en combate aéreo entre Granen y Tardienta. Falleció el 19 de octubre de 1936, a última hora de la tarde, a consecuencia de heridas de arma de fuego recibidas en combate aéreo. Manifestación inscrita por Manuel Conde Capitán, médico del campo de aviación.

Tiene a su hermano que se  llama Federico. Se consigna que se halla enterrado en una fosa a las distancias siguientes por norte a 7 metros del camino central del cementerio, por sur a 25,50 metros de los nichos, por este a 22 metros de los nichos, por oeste a 77 metros de la tapia del cementerio.

Hospital de Sariñena, fallecidos de guerra. 

Paesa Cortesa, Joan. Barcelonense de 17 años, fue reclamado al frente junto a Manuel Mañez Rubio  por sus respectivas familias. Ambos fueron reclamados en marzo del 37, Manuel se encontraba en el campo de aviación y Joan en el batallón Alas Rojas. Son ejemplo de los muchos menores que partieron al frente sin el consentimiento de sus familias, siendo reclamados posteriormente para su regreso a casa.

Palop Mestre, Francisco. Teniente de aviación roja, natural y vecino de Montilla, Córdoba, su causa resultó sobreseída provisionalmente en 1939. Existieron indicios de su paso por el aeródromo de Sariñena y fueron solicitados los perceptivos informes para depurar sus responsabilidades.

Piquer. Al parecer mandaba el 9º Batallón de aviación roja, de afiliación comunista. (El dato puede estar confundido con el 4º Batallón)comandaba una sección de milicianos que marcharon al frente de Huesca, al frente de aquella sección iba Valero Arnal Sena.

También existía en el aeródromo, una fuerza de choque llamada Legión Roja, a las órdenes del comandante Piquer. A sus componentes se les quería preparar como futuros comandos paracaidistas.

La guerra del 36 en Sariñena. Morera Corull, Arturo. Revista Quio de Sariñena y Los Monegros.

Prieto García, José. Fue alumno de aeronáutica en prácticas, observador de la aeronáutica naval y estuvo destinado en el aeródromo de Sariñena. Natural de Cartagena, soltero y con 22 años, estuvo destinado en el campo en agosto de 1936. Marchó al hospital militar de Barcelona por encontrarse herido, regresando al aeródromo y permaneciendo en el hasta febrero de 1937.

Profimovich Eremenko, Ivan. Piloto ruso que combatió en España (Héroe de la Unión Soviética el 28 de octubre de 1937).

Puimeciño Calasan, José. Junto a Salvador Cervera Mayans fueron guardias civiles que formaron parte de la escolta del jefe marxista Reyes en el aeródromo y participaron en el fusilamiento de Arizaleta, administrador de la viuda de Bastaras de Lanaja (Informes solicitados por la Capitanía General de la 5ª Región Militar, Huesca en mayo de 1941). Salvador también realizó las labores de escolta del comisario político Francisco Puicerón y José del comisario político Francisco Buisán. También fueron investigados, por su posible participación en el fusilamiento de Arizaleta, los guardias Segundo Doñageda Cardial, Víctor Esperrín del Río y Martín Pérez Pindado.

Rodolfo Robles César, EFE agosto 1936

Redondo de Castro, Vicente. Capitán, piloto de Chato. Tomó el mando de la 2ª Escuadrilla de Chatos a finales de julio de 1.937 en Figueras, tras la conclusión de la batalla de Brunete, pasando después a Sariñena y tomando parte en los combates de Belchite siendo derribado el 1 de septiembre de 1.937. En el mando de la 2ª Escuadrilla le sustituyó Gerardo Gil Sánchez.

(http://www.errepublika.org/aviadores_republicanos.htm).

Robles Cézar, Rodolfo. Militar profesional. Piloto de caza de la escuadrilla Alas Rojas. Foto Agencia EFE, Sariñena, agosto de 1936.

Fue ascendido a teniente el 31 de octubre de 1936 y a capitán el 13 de diciembre de ese año. Prestó servicio en el aeródromos de Sariñena. Robles Cézar, Rodolfo.

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Retrato de Joan García Oliver, con el comandante Alfonso de los Reyes y el piloto Robles, jefe de la base aérea de la escuadrilla Alas Rojas, se disponía a volar desde el camp de aviación de Sariñena. (Arxiu Nacional Catalunya. ANC1-371-N-782).

Roche García, Julio Alejandro.  Ocupó el cargo de oficial de telégrafos en el campo de aviación rojo de Sariñena, desde febrero de 1937 hasta el 15 de octubre del mismo año.

Rodríguez Toledo, Pascual. Soldado del servicio de aviación, permaneció 7 meses en el aeródromo.

Roig Villalta, Fernando. Piloto de Chato. Nació el 05-04-1906 en Mauresana parroquia de San Ramón, provincia de Lérida. Ingresó como mecánico de Aviación en el Servicio de Aviación. Obtuvo el título de mecánico de aviación 14-10-1926, siendo nombrado cabo. Fue destinado a la Escuela de Combate y Bombardeo en Los Alcázares en diciembre de 1928. Hizo el curso de bombardeo y ametrallador en 1929. Inició el curso de piloto en 1929 obteniendo el título el 9-05-1930. Pasa a Tetuán en noviembre de 1930. Ascendido a sargento piloto el 01-01-1934 con el núm. 130. con destino en la Escuadra nº 3. El 25-06-34 en Loeches tuvo un accidente con el Ni-52 nº 15 de la Escuadra nº 3 de Barcelona. Debió de ser hospitalizado con heridas leves. Al estallar la Guerra estaba en Barcelona, participando en las acciones que allí se desarrollaron. Pasó después a Sariñena desde donde participó en las acciones que se desarrollaron en Aragón hasta finales de octubre. Por mediación de García Lacalle pasa destinado a los Polikarpov I-15, para lo que se incorpora en el Albacete para desde allí pasar a Madrid. Murió el 16-11-1936 al ser derribado en Alcalá de Henares. Ascendido a teniente el 04-06-37 y a capitán el 31-01-1938. (http://www.errepublika.org/aviadores_republicanos.htm).

Roldan Maldonado, Juan. Piloto civil español que fue seleccionado en su día para formar parte de la Expedición «Artabro» al Amazona. El 1 de agosto de 1936, pocos días después de declararse la guerra de España, se presentó voluntario en el aeródromo de El Prat de Llobregat siendo movilizado posteriormente por decreto de 29 de septiembre siguiente de la generalidad, con el empleo de alférez, pasando destinado a la recién creada Escuadrilla «Alas Rojas», en la que operó seguidamente sobre el frente de Aragón desde el aeródromo de Sariñena. El 16 de septiembre, Roldán pasó al frente Cántabro formando parte de una patrulla de bombarderos CASA/Breguet 19 y la protección de un caza Hispano/Nieuport Ni-52, empezando a operar al día siguiente sobre los objetivos de Villarreal y Vitoria. En noviembre, a la llegada a Bilbao de los Polikarpov I-15 «Chatos», fue destinado a la Escuadrilla «Vasca» que se formó en Lamiaco, con la que combatió durante la ofensiva gubernamental sobre la capital alavesa y en defensa de los puertos del Cantábrico, en uno de cuyos servicios resultó gravemente herido en combate contra los He-51 el 4 de enero de 1937. Parece que al intentar aterrizar sobre una ladera del monte Artiñano, en las proximidades de Cebeiro perseguido por los biplanos alemanes, su «Chato» tropezó con un cercado de espino estrellándose a continuación contra un árbol. Fue el primer aviador que cayó en combate en el norte a los mandos de un Polikarpov I-15 «Chato». (http://www.errepublika.org/aviadores_republicanos.htm).

Ruiz Ramos, Pedro.  Detenido el 4 de noviembre de 1936 en la ermita de Santa Quiteria de Tardienta y luego trasladado al aeródromo de Sariñena, donde permaneció unos 20 días en calidad de detenido, siendo trasladado a Barcelona donde le tomaron declaración.

Salueña Lucientes, Antonio. Natural de Fuendetodos (Zaragoza), nació en 1898 y fue conocido como «El Pintamantas». Piloto de la aviación militar, escapó a zona republicana disfrazado de campesino, mientras su mujer, suegro y otros familiares fueron detenidos. Fue acusado en Zaragoza de haber sido el piloto que bombardeó El Pilar. Voló en los primeros meses en Breguet y posteriormente mandó una escuadrilla de Natachas. En 1938, siendo ya mayor de aviación se integró en la escala de mando del Grupo 28, de los «Delfín». Se exilió en la URSS, con su mujer Eloísa, a la que pudo liberar mediante canje.  Falleció en la URSS en 1959.

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Silue Navarro, Manuel. Miliciano de Hospitalet de Llobregat, destinado al aeródromo de Sariñena, falleció en torno a septiembre de 1936. La noticia aparece en el Diario de Barcelona del 5 de septiembre de 1936, destacando que fue enterrado en Sariñena y desde su ciudad natal se le trasladaron flores. Manuel perteneció a la U.G.T. y al Partit Republicá d´Esquerra. (Manuel Silué Navarro. Un camión de flores a Sariñena).

Silverio Jiménez, Amador.  Piloto, teniente de aviación, gran dibujante y caricaturista, ilustrador de los manuales de vuelo de 1932, ascendió a mayor durante la guerra civil española y fue destinado a Asturias, donde estuvo a los mandos del segundo caza Aieuport Ai-52. Tras la guerra estuvo exiliado en Londres durante la segunda guerra mundial. Amador Silverio fue conocido como “El dibujante” (La guerra en el aire, en Asturias durante los tres primeros meses de la Guerra Civil. Víctor Luis Álvarez Rodríguez).

Singla Nadal, Pedro. Soldado barcelonés de aviación. Llegó al aeródromo de Sariñena a primeros de agosto de 1936, del aeródromo del Prat. Como cabo del aeródromo de Sariñena formó una columna con fuerza de aviación que estuvo destacada en el sector de Albero Alto. Nombrado sargento, en noviembre del 37, fue destinado a la D.C.A. en Lérida, donde permaneció como sargento hasta que ingresó en la escuela de capacitación de Sabadell. Ascendió a teniente y en 1941 su caso fue sobreseído provisionalmente.

Stepanovich, Evgeny Nació el 22/05/1911 en Moscú – Falleció el 04/09/1996 en Moscú. Ingresó en aviación en 1932. Fue Comandante Voluntario Soviético, piloto de Polikarpov I-15 Chato. Llegó a España el 20/08/1937 hasta el 27/07/1938. Formó parte de la 1ª Escuadrilla de Chatos, de la que fue jefe de escuadrilla desde noviembre de 1937 hasta el 17/01/1938 en que fue derribado sobre ojos Negros (Teruel) y hecho prisionero en la prisión de Salamanca donde coincidió con Chercasov. Fue canjeado, regresando a la URSS el 27/07/1938. Fue condecorado con la orden de la Bandera Roja el 10/11/1937 y nombrado Héroe de la Unión Soviética el 29/08/1939. Fue conocido por aplicar la técnica del «Tarán» que posteriormente aplico también Andrés Fierro Menú. Tras su liberación y de vuelta a la U.R.S.S. continuó sirviendo en el Ejército Rojo. (Fuente Ícaro núm. 57 extracto testimonio de Juan Lario).

Vila Guillaumes, José. Sargento de la aviación que alcanzó el grado de teniente en el aeródromo de Sariñena. Natural de Castellfollit de la Roca, fue considerado “desconocido” por las autoridades franquistas de Sariñena a solicitud de información por parte del Ministerio del Aire en abril de 1941.

Vilella Vallés, Antoni. Mecánico de las Fuerzas Aéreas de la República Española, trabajó en la Cuarta Escuadrilla del Grupo 26 con aviones de caza, conocidos como Chatos, siendo destinados durante la guerra a los aeródromos de Sariñena y El Toro. Ha sido  presidente honorario de la Asociación de los Aviadores de la República (ADAR).

Yakushin, Mijail N. Piloto ruso de Chato. Nació en 1910. Llegó a España el 31.05.37 actuando con la 1ª Escuadrilla de Chatos. Operó en la Patrulla de caza nocturna formada bajo la 1ª Escuadrilla de Chatos, llegando a ser el jefe de la Patrulla nocturna.

Derriba la noche del 26 de julio el Ju-52 de la Legión Cóndor tripulado por el teniente Leo Falk y los suboficiales Walter Brötzmann, Fritz Berndt, August Heyer y Georg Ubelhach. Regresó a la URSS el 15.11.37. (http://www.errepublika.org/).

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Reus. Han estado destinados al campo de aviación de Sariñena diversos compañeros nuestros que habían vuelto  del frente de Aragón con permiso temporal.

Diario de Barcelona, 4 de febrero de 1937.

Piloto Sariñena Escuadrilla Alas Rojas

Sariñena (Huesca), Agosto de 1936. Agencia EFE. Un piloto, (no identificado), de un Nieuport 52.

El campo en manos de los sublevados

Tras la caída del frente de Aragón (Sariñena, la retirada), el 26 de marzo de 1938 el campo cayó en manos del bando sublevado, quienes continuaron utilizando el aeródromo en su avance sobre Cataluña. Víctor Pardo Lancina recoge que las tropas nacionales pasaron a ocupar y aprovechar la gran infraestructura aeronáutica de guerra, incautándose de 38 aviones Fiat CR-32 (Víctor Pardo Lancina citando a Salas Larrazabal, Jesús, La guerra de España desde el aire, Barcelona, Ariel, 1969, p. 432“Agnes Hodgson A una milla de Huesca”, Algunas notas sobre la guerra civil en Los Monegros).

Este fue el caso de la gran mayoría de aeródromos «Puede afirmarse, sin duda, que los de Sariñena y Bujalaroz son necesarios al presente operaciones a lo largo del Segre, pero la misma pretensión no puede seriamente mantenerse para los demás» (The War in Spain (Gran Bretaña). 11/6/1938, n.º 21).

La Aviazione Legionaria, comando XXIII grupo Caccia se instaló en el aeródromo militar de Sariñena con el avance nacional. Unos documentos la sitúan entre noviembre y diciembre de 1938. Uno de los documentos señalan como comandante del aeródromo a Magg. Remondino.

Los tres documentos se refieren del arreglo de la carretera de Albalatillo al cruce con la carretera de Sariñena a Bujaraloz, apenas 5 kilómetros que finalmente son arreglados, lo que agradecen con dos garrafas del mejor vino de Robres «Que espero les gustará. Es el que más fama tiene de los de esta provincia».

Documentos del Grupo de Recreación Histórica De Primera Línea.

Para analistas ingleses, estos aeródromos, en manos del fascismo español. alemán e italiano, constituyeron una seria amenaza para Francia e Inglaterra, antesala de la segunda guerra mundial.  En el mapa de la publicación «The war in Spain» quedan recogidas las bases en el noreste español, entre ellas, ocupando un lugar especial, las de Sariñena y Bujaraloz, apreciándose, además, la que situó en el entorno de la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes.

AIR BASES IN SPAIN FOR USE AGAINST FRANC

«Cada símbolo en el mapa indica una base aérea. Los individuales representan campos de aterrizaje. más o menos completamente equipado. Uno o más símbolos en un chele negro representan un número igual de campos completamente equipado con refugios, hangares y depósitos de suministros subterráneos» (The War in Spain (Gran Bretaña). 11/6/1938, n.º 21).

Un legado del pasado

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Salvador Trallero con la bandera republicana de «Alas Rojas», que recuperó y donó a Sariñena.

La historia del aeródromo esconde numerosas historias y vivencias por descubrir, aquí hemos aportado nuestro pequeño granito de arena en la recuperación de la memoria histórica. Salvador Trallero siempre ha pretendido aprender de la historia, entendiendo como una apuesta de futuro la recuperación del aeródromo. Su libro ha cosechado grandes éxitos y reconocimientos, premio del Gobierno de Aragón en el año 2006 «al mejor libro editado en Aragón», sin duda una gran labor de documentación, edición y de divulgación que debería encontrar mayor reconocimiento y apoyo en la sociedad sariñenense, monegrina y aragonesa. Su sueño de recuperar el aeródromo de “Alas Rojas” debería ser un sueño de todos/as que  echase a volar!!.